Partida Rol por web

- Admito que al primero lo cogí por sorpresa para liberar a Eileen, pero el jefe fue completamente sobre aviso y preparado para el combate... Si todos aquí son así de débiles voy a tener que buscarme una licencia de cazarrecompensas o algo por el estilo.- Sonrío levemente ante los comentarios de Mélima y Pi Meng.- Porque algo me dice que no voy a tener la suerte de escapar de estos problemas así por las buenas...

Escucho tranquilamente a Mélima cuando me dice que tiene que hacer ella también una defensa.- Te contaré todo lo sucedido con pelos y señales para que tu decidas si es mejor omitir algún detalle o lo que sea, aunque prefiero ser honorable y contar lo sucedido con 100% de fidelidad.- Después Pi Meng quiere cambiar un poco la conversación y me recuerda que este sábado tengo un desafío por la academia. Con todo el follón de lo sucedido a día de hoy no me acordaba para nada y poca preparación pude hacer al respecto, así que realmente si no hago lo que tenía planeado para hoy y busco información al respecto voy a ir completamente a ciegas y realmente me gustaría saber a quién me enfrento y, como mínimo, su estilo para adaptarme un poco y prepararme antes de llegar, aunque mi estilo será el de siempre, por variar, puede que si preparo algunas cosas se me faciliten, después de todo, nada dice que no se puedan hacer preparativos al respecto... 

- Pues la verdad es que no.- Contesto a Pi Meng.- Con todo el follón de hoy no he tenido tiempo a investigar nada. Y algo me dice que estos días voy a estar bastante ocupado como para poder hacer mucho, aunque tendré que intentarlo. Y señora Mélima, le agradezco profundamente su ayuda, le prometo devolverle el dinero de la fianza en la mayor brevedad posible- Hago una gran reverencia cuando veo que en ese momento entra Hanako y comienza a saludar a la gente antes de preguntar si se habían complicado las cosas... ¿Complicarse? Decir eso sería una vil mentira con el follón en el que me había metido sin querer. Pero tampoco puedo mentirle, después de todo se enterará de lo sucedido, ya sea por las noticias, rumores en la escuela o cualquier otra cosa, así que lo mejor es decírselo directamente.

- Bueno... estoy acusado formalmente de asesinato de dos individuos- Espeto sin ningún tipo de filtro a mi prima, para que al menos si tiene un shock que sea por la noticia principal y después hacerlo un poco más tranquilo cuando le explico la situación.- He ido al rescate de una chica a la que tenían secuestrada y cuando el jefe se me ha encarado al sacarla de allí y decirle claramente que no íbamos a pagarle, pues... no ha aguantado un simple espadazo, por lo que yo mismo he llamado a la policía y me he entregado. Así que ahora voy a estar algo más vigilado de lo normal...- Al menos es un resumen simple de lo que ha ocurrido.- Si quieres después en casa te puedo explicar con más detalles lo que ocurrió, pero ahora casi mejor hablar de cosas más simples y alegres. ¿Qué tal ha ido tu día? La verdad es que me ha preocupado que no me llegase un mensaje tuyo hasta hace tan poco. ¿Ha ido todo bien?

Mientras, saco mi teléfono móvil para mandarle un mensaje a Octavio para que sepa que me encuentro bien y que me gustaría que reuniese conmigo cuanto antes den la tienda de la señora Mélima, ya que va a ser la mujer que me defienda y tenemos que hablar de la defensa. Pero que principalmente no mienta en absoluto en lo sucedido... El honor de los Ishikawa está en juego y no quiero que se mancille con ningún tipo de mentira por ningún lado.

- Ya me estoy cansando de todas estas tonterías.

Me agaché para subirme la pernera izquierda del pantalón y saqué la pistola de la bota, para a continuación apuntar al tío de fuego con rostro sombrío.

- ¡Se acabó! ¡Todo el mundo quietecito o me cargo a chispitas!

Un disparo de advertencia habría resultado en una amenaza más contundente, pero no me había parado a comprobar si estaba cargada o si siquiera era una de verdad, y un disparo de advertencia fallido solo eliminaría el efecto.

Fire sigue de rodillas en el suelo y no puede levantarse. Pone los ojos como platos cuando ve el arma salir de tu bota, y hace gestos con las manos para que no sigas. —Alto! No! Me rindo!

—Una niña con su pistolita no me van a amedrentar! Mi piel es dura como la roca! Yeehah! —Earth grita mientras ataca a Reddo, pero éste entrelaza su brazo con el de él para torcerlo y subyugarlo en el suelo, Reddo apoya una mano en la nuca de Earth y con la otra sostiene hacia atrás el brazo del mismo, impidiendo así que se pueda levantar.

—No te muevas o te rompo el brazo.

—Yeehah! Maldito, n-no me puedo levantar! Mi brazo!!

Han quedado por ahora fuera de combate, y Fire es el primero en hablar.

—Solo somos esbirros de Eric, seguimos sus órdenes, por favor, no dispares eso.

- Lo que queda de tus huevos no está de acuerdo con esa afirmación - respondí al pervertido respecto a la dureza de su piel.

Sonreí al ver como Reddo lo sometía, satisfecha por el resultado aunque un poco asqueada porque sospechaba que lo estaba disfrutando, y volví entonces a mirar al tipo de fuego. Se le había aflojado la lengua, lo cual era bueno, pero era importante hacerlo callar antes de que revelara información que comprometiera mi protección.

- ¿Acaso te he preguntado? ¿Te crees que no se para quien trabajáis? Cierra el pico y espera a que te pregunte, chispitas - me giré entonces, aún apuntándolo, para dirigirme a la que había intentado fugarse -. ¡Y más vale que la cobardica se rinda y venga aquí pacíficamente a menos que quiera que te conviertas en un puto colador!

Fire y Earth tragan saliva a la vez.

—Tranquila, señorita Keira, está en buenas manos.

—No, seguramente haya escapado. Su matriz le permite teletransportarse, nuestro plan en caso de fracasar era que ella se alejara lo máximo posible y regresara con los demás Animales a alertar de tu nueva posible ubicación.
—Ya todo está terminado para nosotros...

El suspiro de Fire es interrumpido por un grito desgarrador que viene desde el bosque. —AYUDAA!!! —el grito de una mujer desesperada —por favor, no me dejen sola con este monstruo!
Arrastrándose de entre los árboles aparece la figura completamente magullada y molida a golpes de Wind, la que hacía pocos segundos estaba pulcra y prolija de blanco ahora está cubierta de barro y césped.

—Qué demonios...

—Ah... finalmente... ...! —Pero al percatarse de la situación, Wind retrocede y se paraliza en su lugar. Sabes que se va a teletransportar, y tienes fracciones de segundo para reaccionar.

- Joder, chispitas, empiezo a escuchar una especie de zumbido que repite una y otra vez "dispárame, dispárame, dispárame" cada vez que abres la puta boca sin que te haya preguntado.

Una pista como la de los Animales podría haber sido mi ruina, pero Calysta seguía estando lejos. No tenían por qué conocer la Casa del Sol Naciente. Aunque también había conseguido información relevante, si esa tipa había huido, todo iría de mal en peor.

Afortunadamente Momohime la había capturado. Y medio segundo después me di cuenta de la situación y corrí a darle una patada en la cabeza para tratar de dejarla inconsciente.

- ¡Momo, que no escape! ¡Déjala inconsciente! ¡Rápido!

Sin embargo, no llega ninguna respuesta por parte de Momohime. Wind ha aparecido sola y nadie la está persiguiendo en este momento.

Con un gemido la mujer da una vuelta en el suelo al recibir tu puntapié, que de no ser una cabeza unida a un cuerpo lo que pateaste, habría sido un buen saque de portería.

—Vale, ya me callo —tartamudea Fire con miedo. Realmente tener en tus manos esa pieza tan importante de tecnología impone presencia.

Por otra parte, Wind ya se está recuperando del golpazo y empieza a intentar ponerse de pie, pero sigue con los codos apoyados en el piso.

—Ya! Desaparece! —Le grita Fire —O nuestra búsqueda habrá sido en vano! _{ops, lo siento.} —agrega rápidamente al final, recordando que le habías pedido que se callara.

Momohime sigue sin aparecer por ninguna parte, y Reddo, que continúa presionando el brazo y el cuello de Earth, nota eso.

—No se preocupe por ella, señorita Keira. Ni por mí, yo no soy de la clase de persona que hace demasiadas preguntas. Mi objetivo es protegerla y listo.

—Keira? Quién es K... —está por preguntar Fire, pero calla de golpe al ver tu cara y, más importante, tu arma. Le cuesta cerrar el pico, ya ves.

Momohime no había aparecido para terminar el trabajo, y eso me hacía suponer que la cobardica había venido porque se esperaba que los otros dos ya nos tenían dominados. Y para colmo, aún estaba consciente.

- Ah, no, no te creas que te voy a dejar ir. Tú de mi no te escapas.

Volví a patearle la cabeza, deseando que cayera inconsciente de una vez, pero aun no segura de haberlo conseguido, quise asegurarme de que no quisiera huir.

- Como desaparezcas me cargo a al pervertido y a chispitas - susurré, con la intención de que solo ella me escuchara -. Y tendré una charla con la Inquisición sobre Nueva Orleans.

Otro gemido de dolor, esta vez escupiendo sangre luego tras la patada, pero Wind se resiste a perder la consciencia. Levanta la cabeza y te mira desafiante, aunque esa mirada se le va enseguida cuando oye lo que le dices.

—...
Se queda sin moverse, mirándote y apretando los dientes. Oprime sus puños, arrastrando la tierra con sus uñas, y finalmente agacha la cabeza.

—Qué quieres de nosotros? —Pregunta con la voz un tanto quebrada, está hecha un desastre y ya no siente ganas ni de escapar.

—Tú y tus compañeros han vencido, no intentaremos escapar.

—Yeehah, tienes nuestra palabra. —Earth, que venía estando sonriente todo este rato, ahora su sonrisa ha dado un giro de ciento ochenta grados y parece serio. —Además, si volvemos con las manos vacías, acabaremos mal de todas maneras.

Sonreí. Los puños habían fallado, pero nada como una buena amenaza con la Inquisición para controlar a un cobarde.

- Bien, bien, ya me gusta más esa actitud. Quizá podamos sacar algo bueno de todo esto - dije jugueteando con la pistola en la mano -. De momento voy a haceros preguntas y vosotros respondéis con sinceridad. Si no jugáis bien, bueno, ya sabéis a lo que os enfrentáis.

Estiré los músculos para relajarme un poco.

- Tened cuidadito con lo que decís, no queremos que se filtre información sensible... ¿Qué precio hay sobre mí ahora mismo?

-¿Qué te han que…?.- “¿Asesinato?” En ese momento mi mente colapso. Ese día habían pasado demasiadas cosas, pero aquello era hablar en palabras mayores. Note como un pequeño mareo llegaba a mi cabeza y mi mano se posó sobre una de las sillas más cercanas de la puerta.- Pero… ¿Cómo?.- Yuri empezó a explicar sobre el rescate y como el jefe no había soportado un espadazo, pero mi cabeza no parecía similar bien la información.-Si, un espadazo… Creo… creo que necesito dormir.- Dicho esto mis piernas dejaron de sostenerme y caí al suelo cerca de la silla que había usado para sostenerme.

Remiel estuvo rápida para empujar a Hanako hacia una dirección propicia para que no acabase golpeándose con nada y, cuando esta ya estaba en el suelo se colocó encima de su compañera.-Te parecerá bonito. Yo todo el día intentando no quemar a nadie y ahora vas tú y le dices que estas acusado de asesinato. ¡Esas cosas se hacen sin que nadie se entere!- Dice poniendo las manos en su cintura en una pose enfadada.- No llamas a la policía, me llamas a mí y hacemos desaparecer las pruebas.

Remiel agito la cabeza hacia los lados mientras chasqueaba la lengua.- Espero que no le dieras la dirección de casa a la poli. Como vengan con una orden para entrar te juro que la cárcel te parecerá un castigo demasiado flojo.- Dicho esto miro el cuerpo de Hanako durante un momento.- Menos mandar mensajes y más subirla a casa. Parece que toda su familia únicamente queréis darle quebraderos de cabeza.- La pequeña hada soltó un resoplido y miro de nuevo a Yuri.-  Venga, vamos.- Insto a Yuri una vez más para que cargara de Hanako mientras la pequeña volvía su mirada hacia su ama. Habías conocido poco al hada, pero nunca la habías visto así, parecía que cuando tenia que ver con la salud de su compañera se volvía mucho más seria y menos graciosa.

—Actualmente no hay precio por tu cabeza, pero el premio a cualquier Animal que te lleve con Eric será de mil oros.

—Pero es solo cuestión de tiempo, si se cansa de esperar, moverá algunos hilos para hacerte ver como criminal buscada, y ahi sí que no solo tendrás que preocuparte por nosotros.

—De todos modos, los Animales siguen siendo algo con lo que tendrás problemas. Zappa, Stevie, Doble Z, ellos son los otros que también saben que te escondías en Dresden, yeehah. Y todos ellos son usuarios de matrices.

Empecé a echarme a reír, una risa notablemente forzada para remarcar mi incredulidad.

- Joder, primera pregunta y ya empezáis con las trolas. Ya he tenido que lidiar con un par de cazarrecompensas hoy, así que no me la vais a colar. ¿Cómo os habéis enterado de dónde vivo? ¿Y como habéis descubierto hacia donde me dirigía para tender esta emboscada?

—Zappa leyó tu mente con su matriz y te localizó facilmente, es uno de los Animales más poderosos. Luego nosotros nos encargamos de seguirte a escondidas.

Reddo ya suelta a Earth, que no va a seguir forcejeando y no parece con ganas de luchar. Fire continúa hablando —Wind te estuvo espiando todo este tiempo y en cuanto abandonaste Dresden te empezamos a seguir, con la ayuda de Wind nos adelantamos para esperarte aquí.

Wind se agarra el brazo y respira con dificultad —Fue sumamente difícil, jamás había visto una persona tan paranoica ni tan atenta a sus alrededores. Pero claro, comprendo la situación en la que estás, yo actuaría igual.

No estaba especialmente contenta con tener al pervertido suelto, pero como de momento no estaban armando jaleo lo permití. De este modo, Reddo tampoco tenía sus movimientos restringidos. Esperaba que hubiera usado su matriz para localizar a Momohime y asegurarse de que estaba bien, pues era la mas bestia de los dos, y por tanto más confiable en una emboscada.

- Ajá... ¿Y quien más me ha estado espiando? ¿Zappa quizás? Si ha podido leerme la mente seguro que ya sabe hacia donde me dirijo, o sino cualquiera de los demás, aprovechando el tiempo que he perdido con esta emboscada. No creo que os hayáis ido sin avisar, ¿verdad?

Sabía que no habían avisado, de lo contrario mi amenaza para la cobardica no habría funcionado a menos que se preocupara por sus compañeros. Respiré profundamente y entonces esbocé una sonrisa macabra.

- En fin, decidme, ¿que motivos tengo para dejaros con vida?

—Es probable, —responde Wind a tu pregunta sobre Zappa —pero no lo sabemos con certeza, no tenemos noticias suyas desde que nos separamos para buscarte hace ya varios días, desde que salimos de Calysta.
Hace una pequeña pausa, y al ver tu cara continúa rápidamente —todo esto es cierto! no tenemos ya razones para mentirte!

—Es verdad, nos has derrotado, y no podremos volver con Eric porque nos aniquilará si no te llevamos, todo lo que podemos hacer por ahora es quedarnos contigo. Podemos defenderte de otros ataques, después de todo, eres parte de nuestro grupo.

—Sí, de este modo todos salimos ganando, tú tienes nuevos guardaespaldas, y nosotros un sitio donde quedarnos.

Se forma un breve silencio mientras aguardan tu decisión, que es la final, hasta que de pronto se oye un trueno, y Earth grita señalando hacia la carretera.

—Yeehah! Allá hay una persona! No lo conozco, será otro cazarrecompensas?

La persona, de pie en medio de la vía, luce un frac con una corbata muy llamativos, repleto de adornos rimbombantes, y un sombrero de copa fabuloso. En su ojo se posa un monóculo no menos espectacular. Su rostro está adornado por una barba y bigotes muy prolijos y un tupé castaño hacia adelante que parece una pista de aterrizaje.

—Vaya... —tiene una pipa sobre la cual echa orégano con un salerito, prende fuego y da una pitada.
Se quita el sombrero y cruza los brazos, pie derecho delante, izquierdo detrás, y lleva una mano a su pipa —confundirme con un cazarrecompensas, eso no es para nada dandy.

Da otra pitada.