Partida Rol por web

Sabu levantó el arma y la acercó al pecho de Tom. Su pulso no temblaba, parecía más que decidido a hacerlo. Le miró lleno de odio y apretó el gatillo. Todos los presentes escucharon el fuerte estampido y vieron, como a cámara lenta, cómo se chamuscaba la camiseta de Tom, que retrocedió medio metro. El aire se llenó de olor a tela quemada.

Tom levantó la cabeza, sonriendo como si nada hubiese pasado. Como si de un super hombre se tratara, su piel había absorbido el disparo. El desconcierto creció en los otros cuatro. Tom había sobrevivido, sin apenas pestañear, a un disparo en el pecho. Su camiseta estaba chamuscada, pero el joven seguía vivo, y lleno de energía.

En vez de sorprenderme suelto una tremenda carcajada JAJAJAJAJAJA... el hombre anti-balas, ¿Verdad Tom?

No vale hacer trampas, si te ha tocado te ha tocado... no mataré a uno de mis compañeros porque TÚ me obligues...

Este tío debe de ser como Billy y esos, que han sacrificado mucho para conseguir esta bonificación de regenerar...

¿Crees que te tengo miedo Tom? solo eres un guaperas que no sabe lo que es el verdadero miedo...

Nunca has estado en la guerra, nunca has sentido la sensación de que la muerte te acecha por todos los rincones.

NO permitiré que juegues con nuestras "vidas". Si crear entre nosotros la desconfianza es tu fin, no lo vas a conseguir...

y se dio la vuelta a los demás.

No os dispararé a ninguno de vosotros, porque este tio lo diga... vosotros deberíais tomar esta misma decisión y demostrarle quién manda...

Espero una respuesta del grupo, mi pistola la sigo empuñando, por si a algun loco le da por dispararme ser yo el primero

Amplié mi sonrisa cuando Sabu me dispara a bocajarro. Cuando se separo un poco me sacudí ligeramente la camisa quemada.

- Nada es trampa cuando yo pongo las normas -alcé los hombros y deje que el soldado acabara su discurso para hablar yo. - Bueno... ¿y los demás? ¿que decidís? - hice una breve pausa donde me di cuenta de un detalle que sería gracioso comentar - Sabu ya ha decidido... y se ha quedado sin balas... - 

No se que coño eres pero te puedes ir a tomar por culo si pretendes que disparé a alguien-Dije firmemente señalando a Tom con el dedo.

Exacto Ryan, no dispararemos a nadie de esta sala

Dijo Sabu satisfecho

Bien hecho compañero!

Y le sonrio como gesto de aprobación

Examiné al tal Tom. Su nombre me causaba algo de... malestar. De primeras no me caía bien, aunque lo mismo me pasó con Tom Selleck y luego resultó un tipo genial.

- A ver... ¿dónde está Billy? Se supone que vosotros nos habéis elegido. ¿no? - miré alrededor algo inquieto - Además, ya he matado para estar aquí

No quise decir eso tan a la ligera y evité cruzar miradas con mis "compañeros"

Tio Roberts, no te sientas mal, algunos en la guerra hemos tenido que matar por obligación...

y miró a Tom de nuevo con malicia

Pero un tio como Tom, con pintas de pardillo no se atreverá a mandar a un soldado como yo. Él no es mi general. Mi superior murió al lado mia por sus estupideces

Señaló a Tom con su dedo, mientras sujetaba el arma con la otra mano

Si alguien de veras merece morir, será él

Dije mirándo a todos mientras señalaba a Tom

Observe cada gesto y cada palabra de la reacción de cada uno. Sabu era muy bocazas, hablaba mas de lo que debería y sin saber. Robert y Ryan parecían mas precavidos y Carrie.... Carrie no parecía muy lucida en ese momento - ¿que estará pensando?-

Cansado de esperar por la mujer decidí seguir con la función. 

- Buenas respuestas, actuasteis desde el principio como un equipo y ahora que una fuerte externa os amenaza os juntáis mas, esta muy bien - detuve la mirada en Sabu - La verdad, me preguntaba quien seria el que dispararía contra mi- sonreí - Muy bien Sabu, aunque tío.... te podías haber ahorrado los insultos... - me hice comicamente el ofendido.

Avance hasta llegar a la tumba.

- No ibais mal con vuestras teorías. El escenario y los disfraces, simplemente me hicieron gracia por eso de "revivir". Pero no, no estamos en un barco, se acerco mas Robert... estamos en un avión a 40.000 pies de altura. Espero que no os de miedo...- reí ligeramente y volví mis pasos de nuevo hacia la puerta por la que entre. - Venid -  

Tras la puerta pudisteis ver un poco alejada una mesa, donde descansan un par de pantallas, y una silla. A los lados dos puertas, a la distancia del ancho de la anterior sala. Y al fondo de la sala dos puertas mas. 

Camine hasta la mesa y saque de debajo unas mochilas que tire delante de los nuevos inmortales, había una para cada uno.

- Saltemos- dije con una sonrisa mientras sacaba una quinta y me la ponía. 

Pase por su lado y tire de una palanca, entonces la puerta se soltó, desapareciendo de nuestra vista. Dentro pudimos notar la fuerza que tiraba de cada uno de nosotros hacia fuera. Los objetos de la estancia, sin embargo, parecían bien sujetos al fuselaje del avión. Yo hice un gesto cediéndoles el paso.

Sigo la escena sin apenas reaccionar... El tío este me ofrece una oportunidad única... que dejaré pasar. Aquí debe haber alguna pega... No puede ser tan fácil... Los demás hablan, gesticulan, se enardecen... ¡que mierda! si apenas nos conocemos...

Por fin, la farsa termina. Sabía yo que aquí había gato encerrado. Una prueba más... ¿de qué?

-Permiso chulo.

Paso por al lado de Tom y tomo un paracaídas. Ahora sólo depende de mí. Una mueca macabra, que intenta ser una sonrisa se asoma a mi cara.

-¿Ya puedo saltar?

Sabu mira a Tom y se siente engañado por el... Me pongo la mochila y me acerco un poco a tom y digo a voces:

Hey Tom... me siento como si jugaras conmigo, y créeme, es una sensación muy mala... Ya jugaron bastante con nuestras vidas en la guerra dandola por estupideces económicas de las que nunca nos beneficiariamos.

Miró a Tom de nuevo y le dijo

Pero estás perdonado, por cierto... ¿Me puedo quedar la otra pistola? me gusta mucho...

Señalando la otra pistola que estaba aún en la primera sala.

Sonrío de satisfacción. ¡Un avión! ¡Lo sabía!

- Perfecto

Me pongo el paracaídas de forma rápida y profesional, ajustando las correas con firmeza. Flexiono un poco las piernas y me acerco hacía el vacío de la salida.

- ¡Nos vemos abajo!

Me acerco al borde y salto dando una voltereta hacia adelante con los brazos extendidos.