Partida Rol por web

Historias de Horror I.

CC: 6- Prisión de Piedra Alzada.

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12/01/2018, 19:41
(CC) Velkan Matacambiantes.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIA MAÑANA.

No tardó en percibir las acciones de Janos centradas en su persona, no se resistió. Ya le había tratado el escudero con anterioridad y gracias a eso había recuperado energía y sanado sus heridas. En aquella ocasión no fue diferente, la mayoría de sus heridas sanaron y se sintió más poderoso tras acabar las palabras de Janos. Apretó sus músculos para comprobar el recobrado brío y asintió agradecido al escudero por su gesto. No era la primera vez que lo hacía, pero confiaba que fuera la última. 

Tras eso volvió su mirada al Doctor Querio y tras escuchar sus palabras negó con rotundidad.

No, es un cambiante porque cambia de forma y es un peligro para todos que esté aquí encerrado con nosotros, pero ahora es tarde para discutir eso.

Sus siguientes palabras se vieron interrumpidas al escuchar que Gruñido podría estar en peligro. Sus dientes se apretaron y sus manos atenazaron su hacha y escudo. No dijo más, debía salir fuera. Con toda la rapidez que fue capaz se abalanzó hacia la puerta por la que había entrado y a la carrera se dirigió hacia la salida.

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19/01/2018, 00:29
EL TIEMPO TODO LO CONDENA.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

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19/01/2018, 21:26
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

De vuelta en el vestíbulo de la prisión la idea de volver a donde las calaveras le habían atacado no es que le llamara demasiado la atención. Sin embargo, allí el incendio había dejado un hueco a los pisos inferiores que, a no ser que encontraran otra manera de bajar, podría servirles para ese fin.

- ¡Pobre Profesor Lorrimor...- Dijo tras dejar escapar un afligido suspiro.- Esta prisión es un verdadero infierno. En cada estancia nos encontramos algo peor. No quiero saber qué habrá ahí abajo.- Se refería al piso inferior que había visto a través del agujero que el incendio había dejado en la estancia donde las calaveras le habían atacado provocando su transformación.

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21/01/2018, 12:30
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Konrad vio con preocupación que Sascha se encaminase sola por el largo pasillo mientras los demás se metían en la habitación que se abría a la izquierda. Siguió a Sascha aprovechando su evidente preocupación por ella, aunque la verdad es que no deseaba encontrarse en la misma habitación con Velkan después de las amenazas que le había proferido.

Menudo bruto...- Al menos había ayudado a salvar a Gruñido de esa guadaña mortal.- ¡Espera Sascha!- Espetó a la mujer mientras avanzaba por el pasillo alumbrado con su linterna. A medida que avanzaba iba comprobando las puertas. Las inspeccionaba sin tocarlas, por si acaso, incluso se agachaba a ver si había corriente por las aberturas que dejaba la combada madera. La primera estaba bloqueada.

-  Esa no puedo abrirla. Esta lleva a unas escaleras que suben.- Dijo también para que Querio echara un vistazo cuando inspeccionó la segunda. Si las otras eran las escaleras que bajaban a las catacumbas al final iban a tener que bajar pro el pozo o romper en pedazos las puertas.

Mira eso bien puede hacerlo Velkan. Descargar la ira con la puerta en vez de conmigo.- La tercera puerta daba a un aseo.

- Aquí no hay nada interesante.- Quedaban dos puertas más. Una al norte y otra hacia la izquierda, que presumiblemente daría a una estancia contigua a donde estaba su hermanastro.

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22/01/2018, 03:07
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Nadie contestó mi pregunta acerca de llevar a Gruñido con nosotros pero yo no soy nadie para decirle a Konrad qué ordenar a su cochero. Sea como sea, debemos avanzar y terminar de registrar este lugar pues hay un mal oculto en su interior que debe ser detenido. No hacerlo, significará que todo el pueblo se vea sobrepasado por las energías negativas y sus efectos, que muy probablemente lo condenarán para siempre.

Entro nuevamente en la prisión junto al grupo, manteniendo en alto mi cimitarra que continúa iluminando como si de una potente antorcha se tratase.

Llegamos a distribuidor y abrimos la puerta frente a nosotros, que nos muestra un pasillo. Gheorghe decide abrir la puerta que está a nuestra izquierda y llegamos a una zona que parece ser más amplia. Miro a mi maestro y le hablo:

 - "Maestro, creo que deberíamos volver y registrar la puerta de la derecha del distribuidor, la del sur del auditorio. Esta puerta y el pasillo del que venimos nos muestra demasiadas opciones y la otra no debe ser así. Quedaba por el muro de la prisión y, por lo que vi en la habitación del montacargas, terminaba en un agua al norte por el que no podría continuar un pasillo que rodease la prisión. Creo que deberíamos registrar ese camino antes de continuar por acá. ¿Qué te parece, Velkan?

Le pregunto también ya que está a nuestro lado. Creo que sería lo más inteligente para registrar a fondo este sitio antes de separarnos y perdernos por la vasta extensión de este lugar maldito.

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22/01/2018, 11:10
(CC) Doctor Querio Vandel.

Cierta angustia le embargó cuando desde la retaguardia vió al grupo dividirse.

Esperad... No... Mejor sigamos juntos. No es seguro que...-protestó con un hilo débil de voz.

La cimitarra del escudero proyectaba la sombra de Janos en la pared del corredor por el que Sascha y Konrad se alejaron, y a su vez, la linterna sorda de Querio dejaba esa sombra en nada. Al Doctor Vandel le ocurría lo mismo: se había difuminado metafóricamente ante la situación. Sin duda, no quería ir con Konrad. Y menos sabiendo sus ataques episódicos. Por otro lado, nada se le había perdido con Gheorghe. Él no era una amenaza que vigilar.

Glups...

A medida que Konrad se alejaba por el corredor, la perspectiva de que se fundiese con la oscuridad y emergiese de allí como un monstruo verde y descontrolado hizo que Querio tragase saliva. Avanzó para seguir vigilando al noble, con un sentido casi infantil de comprender el mundo. Al igual que dormir con una vela encendida ahuyenta a los monstruos de tu armario, a Konrad le sería imposible transformarse mientras Querio estuviese mirando en su dirección. Y no podría verle si se alejaba lo suficiente como para torcer una esquina o meterse tras una puerta.

Esperadme...-susurró a Sascha y a Konrad mientras avanzaba tras ellos.

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22/01/2018, 19:06
(SA) Gheorghe Mykas.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Gheorghe escuchó a Janos, y aunque quería seguir avanzando con aquel lugar, pues no se fiaba de dejar nada a sus espaldas que pudiera causarles problemas en el futuro próximo, terminó asintiendo levemente.

-De acuerdo, retrocedamos, primero para apoyar a Velkan y después de vuelta. Aunque recuerda que nada debe ser dejado sin examinar, pues potenciales peligros para Ravengro acechan en todo el edificio-contestó el paladín, desandando el camino recorrido. Iba ojo avizor, procurando no perder detalle del pasillo y las sombras que lo habitaban. Sin duda, en cualquier momento podrían sufrir una emboscada o cualquier otra sorpresa desagradable. Y hombre precavido siempre valía por dos. 

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24/01/2018, 02:59
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Las palabras que le dije a mi maestro le parecieron razonables y decide que volvamos donde está Velkan para reunirnos y retroceder a la puerta que no ha sido abierta aún. Le respondo con convicción apenas termina de hablar:

 - "Así se hará, Maestro."

Retrocedo junto con él por el pasillo y nos dirigimos a la puerta por la que el bárbaro entró. Me acerco siguiendo al paladín, cuando escuchamos un ruido de batalla. Al llegar, vemos que Velkan acaba de asesinar a una araña gigante y son dos más la que quedan a su alrededor. Miro la situación, mientras evalúo qué es lo mejor que puedo hacer en esta situación.

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24/01/2018, 19:37
(CC) Velkan Matacambiantes.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Se adelantó por su cuenta en el interior de la prisión y se separó de su grupo para abrir una puerta. Guardó su escudo y probó suerte con el picaporte que no tardó en ceder, la puerta no parecía estar afectada por ningún tipo de magia. Lo que encontró al otro lado no le sorprendió en exceso, se imaginaba algo así.

Arañas.

Pronunció aquella palabra en alto para que sus compañeros supieran a lo que se enfrentaban y sacó su escudo de nuevo para prepararse. Con un paso al frente se internó en la capilla dispuesto a combatir con las arañas. Su hacha se deshizo con facilidad de la primera con un notable golpe que la diseccionó esparciendo sus restos por el suelo. Sus dos compañeras se lanzaron a atacarle pero su escudo detuvo los golpes con facilidad. A su espalda escuchó los pasos de sus compañeros pero antes de que ellos tuvieran opción a ayudarle destripó a las otras dos arañas de un solo hachazo que fue realmente potente, tanto que hasta él se sorprendió.

Limpio.

Alzó de nuevo la voz para que el resto de sus compañeros supieran que ya no había peligro en aquella sala.

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25/01/2018, 15:23
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Y ahora, arañas.

Empezaba a cansarme de dar vueltas por aquel edificio encontrando un monstruo tras otro y no sacando nada en claro.

- Konrad... - Le digo al noble cuando le tengo cerca. - Creo que la única forma que hay de bajar es el agujero que vimos donde las calaveras volantes. Deberíamos volver e investigar aquello. Podríamos bajar con una cuerda.

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25/01/2018, 16:38
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

- La prisión es grande...- Respondió a Sascha. Desde luego no habían valorado que a cada paso que dieran tuvieran que enfrentarse a un nuevo peligro.- No me gustaría bajar sin haber explorado toda esta planta primero. Desde luego como no haya otras escaleras no nos quedará otra que usar una cuerda.- No se preocupaba por él, ni por Sascha, pero, ¿y el pobre Doctor Querio, o los acorazados Gheorghe y Janos?

Al llegar al cruce de caminos se topó con lo que esperaba. Habían entrado en una estancia donde se encontrarían con los demás. Al verlos salir de una de las estancias les hizo un gesto para que se detuvieran.

- En el pasillo de ahí fuera hay dos escaleras. Unas expeditas que llevan al piso superior y otras bloqueadas tras una puerta. Un derrumbe, creo. Si no encontramos otras escaleras de bajada la única posibilidad que veo es bajar haciendo uso de cuerdas por el hueco que dejó el montacagas. Ahora bien, ¿bajamos ya o preferís haber explorado toda esta planta primero? Quizá encontremos esa llave que abre la caja fuerte.- Se dio una vuelta observando la estancia en la que estaba.- Todas las habitaciones de este ala parecen dar a esta. Podríamos dejarla registrada rápido si nos separamos en parejas. Ante cualquier problema podríamos acudir raudos a una señal de auxilio.- Mientras hablaba acudía a inspeccionar una de las puertas, en concreto justo la de en frente de las arañas.

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25/01/2018, 19:25
(SA) Gheorghe Mykas.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Gheorghe había llegado tarde para ayudar con las arañas, aunque desde luego el bárbaro no había necesitado ninguna ayuda. Él solo se había bastado para dar buena cuenta de aquellos enemigos. Y ante ellos, quedaba la vieja capilla, lista para ser examinada. Nada garantizaba que hubiera algo útil en esta sala, pero no perdían nada por echar un vistazo. Escuchó a su hermano desde el otro lado, y alzó la voz.

-¡Deberíamos terminar con esta planta, por si acaso! ¡Vamos a echar un vistazo a la capilla, en seguida nos reunimos con vosotros!

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29/01/2018, 03:25
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Velkan lucha contra las arañas pero estoy lejos de ellas y el suelo está estorbado con el cadáver de una de ellas. Llegar a apoyarlo está descartado, por lo que solo me queda echar mano al poder con el que mi diosa me bendice para así ayudar a Velkan de forma indirecta.

Pongo una mano en su hombro mientras recito una pequeña plegaria:

 - "¡Diosa mía, guía la mano de Velkan para que no falle en su intento castigar al mal!"

Sé que Sarenrae ha bendecido el próximo movimiento del bárbaro y eso es lo que veo cuando, sin dudarlo, Velkan destroza a ambas arañas en un solo hachazo horizontal. La potencia y precisión del ataque es una clara oda a mi diosa y a la ayuda que nos presta, por lo que sonrío, sintiéndome satisfecho por mi soporte.

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29/01/2018, 09:57
(SA) Gheorghe Mykas.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Aquella prisión no paraba de arrojarles sorpresas, normalmente con un gusto especialmente marcado por los objetos siniestramente animados y con intenciones homicidas. Dicho hecho se reafirmó cuando Gheorghe vio a los grilletes, que intentaban hacer presa en su hermano. Sin embargo, él no estaba dispuesto a permitirlo, y descargó un golpe potente y certero contra ellos... Que rebotó inofensivamente sobre el metal. 

A partir de ese momento, supo que iba a tener problemas. Necesitaban más potencia destructiva de la que podía desplegar el paladín con su espada larga para destrozar aquellas cosas. Y aunque al principio había podido esquivar sus intentos de apresarle, no había tenido tanta fortuna en los últimos segundos, y se encontró atrapado por el objeto.

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29/01/2018, 14:50
(CC) Sascha Danzante de las Nieves.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Y ahora una cadena. Lo dije, deberíamos ir al grano. Estamos perdiendo el tiempo.

- ¡Aparta un poco de la puerta!

El paladín bloqueaba cualquier intento de poder atacar a los grilletes malditos desde varios ángulos, y era complicado atacarles sin peligro de dar a Gheorghe. Más aún cuando los grilletes hacen su trabajo y le atrapan.

Intento sacar partido de ello e intento agarrar los grilletes.

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29/01/2018, 17:03
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Konrad dejó escapar una sonrisilla maliciosa cuando su hermano dijo que querían explorar la capilla. En otro momento de su vida hubiera aprovechado la ocasión para burlarse de su hermano por ser un meapilas pero, después de lo vivido, más le valía tenerlo a su lado. Se aguantó las ganas.

Por su parte Konrad se acercó a la puerta de en frente a la de la capilla para examinarla. No dejaba de ser una alegoría a sus respectivas vidas. Gheorghe entraba en la capilla, mientras que él se topaba con una cámara en ruinas. Viejos bancos de madera destrozados por el paso del tiempo a lo largo de los muros, mientras que herrumbrosas cadenas y trozos de cuerda podrida yacían esparcidos por el suelo.

- Seguramente los guardias usaban esta gran habitación como sala de retención cuando llegaban nuevos prisioneros a Piedra Alzada. Podrían aquí registrar a los prisioneros en busca de objetos ocultos y darles de vestir sus nuevas ropas, mientras que un sargento de guardia les explicaría cuidadosamente las reglas de la prisión a los recién llegados.- Explicó para quien quisiera escucharle.

Cuando se quiso dar cuenta le venían de frente unas cadenas. Se agachó pro mero instinto, esquivando el golpe por los pelos.

- ¡Cuidado!- Advirtió a los demás.- Otra posesión monstruosa.- Dijo mientras retrocedía cauto. Si se alteraba demasiado podía venir un monstruo de verdad y ya se había abotonado la camisa, como para rasgarla de nuevo. Tratando de mantener la distancia con aquella cosa buscó su lanza larga. Desafortunadamente la había dejado en el carro. De nuevo rebuscó una de esas flechas mágicas que el Profesor Lorrimor les había dejado en herencia en la cripta. ¿Serían útiles contra esas posesiones? No lo sabría si no lo probaba.

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30/01/2018, 03:28
(CC) Janos Dimitriev Mykerinos.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

La vieja capilla de Pharasma es registrada con mis ojos mientras intento buscar algo que nos fuese útil de alguna manera. No consigo encontrar nada pero me da la impresión que unos ojos más avezados podrían encontrar algo que a los míos se escapan. Es un instinto que obtengo al tomarme mi tiempo en registrar más el sitio y no solo quedarme con la primera mirada. De todas formas, no hay nada más que pueda hacer ahí de momento.

Entonces escucho unos ruidos que parece ser un combate. Salgo de la capilla para ver a Gheorghe esposado con unos grilletes mientras todos intentan sacárselos. Velkan consigue golpearlos con su hacha y destruirlos en el suelo, liberando así al paladín. Suspiro al entender que ese peligro ya ha pasado y que es momento de continuar.

 - "Alguien debería mirar esta capilla. Sospecho algo de ella pero no fui capaz de ver nada."

Salgo del lugar para dar paso a otros mientras decido qué es lo que haré a continuación. La opción más lógica es registrar la habitación del frente, por lo que creo que haré eso de todas maneras antes de seguir nuestro plan de devolvernos al primer distribuidor de la entrada.

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30/01/2018, 16:42
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Atendiendo a la petición de Jano, el noble se acercó a la capilla de donde había salido el escudero de su hermanastro. Nunca había sido hombre demasiado piadoso, pero tenía buen ojo. Al pasar junto a Gheorghe, que se frotaba as doloridas muñecas, golpeó un par de veces la pesada armadura haciendo resonar el metal.

- ¿Estás bien?- Preguntó con verdadero interés por saber si se encontraba bien. Por supuesto Velkan había hecho añicos los grilletes, solucionando el problema, pero Konrad quería examinar los restos. Se acuclilló para ver si podía coger alguno entre sus manos.

- Ya son varios objetos encantados, como poseídos. ¿No creéis que el agua bendita o quizá esas flechas que encontramos pudieran facilitarnos las cosas?- No todos tenían la tremenda fuerza de Velkan. Después prosiguió su camino hasta la capilla. Resultaba ser un templo dedicado a Pharasma. ¡Menuda casualidad!

- No me vendría mal orar un rato para quitarme este gafe de encima.- Le habían atacado los grilletes, pero antes también las calaveras llameantes y sus primos-hermanos los esqueletos. No era su día.

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30/01/2018, 17:17
(CC) Konrad Mykephoros.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Tras desechar los fragmentos de los grilletes como simple chatarra centró su atención en la capilla de Pharasma. En cuanto entró le pareció ver un armarito bajo el altar, tapado por telarañas y polvo.

- ¿Habéis visto esto?- No parecía que Velkan, cegado por sus ansias asesinas, ni Janos ni Gheorghe, cegados quizá por su fanatismo religioso, hubieran visto lo que Pharasma tenía que ofrecerles. Las telarañas seguían sobre las puertecillas del armario así que su interior debía estar intacto.- ¿Doctor Querio? Quizá encontremos aquí alguna reliquia o algo...- En lo que se acercaban los demás se aventuró a retirar las telarañas y limpiar el polvo del armario con uno de sus pañuelos.

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30/01/2018, 20:13
(SA) Gheorghe Mykas.

PRISIÓN DE PIEDRA ALZADA:

MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.

DÍA DEL FUEGO, 7 DE ABADIO.

MEDIODÍA.

Gheorghe asintió quedamente a Velkan como agradecimiento al bárbaro por el golpe que había acabado con aquel condenado objeto. Mientras se frotaba las doloridas muñecas, intentando aliviar su dolor con un masaje, asintió también a su hermano cuando se interesó por su estado.

-Sí Konrad, apenas ha sido nada. Por suerte no tuvieron mucho tiempo antes de que Velkan los destrozara. Quizás funcionen esos objetos, no lo sé, pero no vamos muy holgados en cuanto a recursos, así que no sé si sería buena idea probar. Salvo en caso de extrema necesidad, claro-replicó el paladín, adelantándose para entrar en la habitación de la que habían salido los grilletes a echar un vistazo. Justo cuando Konrad, desde el otro lado, les hizo saber de su hallazgo.

-¿Ver el qué?-preguntó.