Partida Rol por web

Historias de Horror I.

SA: 3 - Refugio de Soñadores.

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30/08/2017, 19:44
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

<< Winter Klazcka >>

Alexei Mykephoros intentó hacer memoria para ver si aquel nombre le sonaba de algo, pero si aquella heterocromía no le había iluminado ningún recuerdo, perdió la esperanza de recordar algo por el nombre.

- Gratitud – dijo inclinando la cabeza en un gesto de respeto ante el ofrecimiento de cobijo y suministros de necesidades básicas como el agua y la comida. Los ojos de Réquiem observaron impresionados el rostro de Winter Klazcka, sus oídos pudieron disfrutar del canto de aquella desconocida y misteriosa mujer. Más impactante fue al ver como las heridas de Enterrador fueron sanando.

- Realmente estamos a salvo… - su voz sonó débil pero con un claro acento esperanzador, hasta una lágrima se asomaba recayendo por su mejilla, la secó con el dorso de la mano. Réquiem se acercó a Tormento y Anciano Sabio, se fijó en el delicado estado del abuelo – Hemos tenido suerte de llegar aquí, ahora deberíamos de aprovechar y recaudar toda la información posible – el poeta acabó sentándose al lado del Anciano Sabio prestando atención a las palabras de la prodigiosa mujer que les había acogido en aquel refugio – Me vendría bien descansar, intentar dormir unas horas. El cansancio empieza a pasar factura – Réquiem acomodó sus ropajes, apoyando la espalda en la pared.

Alexei dejó el libro que tenía en su regazo, luego acaricio la empuñadura de su arma y observó la esbelta mujer de pelo azabache. << ¿Serán supervivientes como nosotros? ¿Tendrán alguna relación con la supuesta misión que teníamos que hacer? >> Se mantuvo a la espera, luchando contra el sueño que iba ganando cada vez más terreno. 

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31/08/2017, 16:38
(SA) Gheorghe Mykas.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Gheorghe observó con gesto serio a la mujer, escuchando lo que tenía que decirles, y después las réplicas de sus compañeros. A juzgar por estas últimas, habían obviado o directamente no habían caído en que la mujer aún no se fiaba de ellos, y en que había problemas mayores. Esa última frase hizo saltar todas las alertas en el paladín, consciente de que esos problemas probablemente les salpicaran... Si es que no se les iba a encargar resolverlos. 

-Me temo que no tan a salvo, Alexei. Señorita Klazcka, ¿a qué clase de problemas se refiere? Y, como el resto de mis compañeros, agradecería alguna pista sobre nuestra actual ubicación.

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31/08/2017, 18:00
SA: Winter Klazcka.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

La mujer se lleva una mano al mentón, pensativa, tras los interrogantes planteados por varios de los componentes del extraño grupo. Finalmente mira a Gheorghe, que ha sido el último en dirigirse a ella.

- "Ayudadme durante algunas horas. Hay tareas que deben hacerse y nos faltan manos." - Pide al grupo entero, pero mirando a George. - "Si lo hacéis, os contaré dónde estamos y hablaremos más detenidamente." - Ofrece.

- "Pero de momento, prefiero no deciros nada más." - Parece claro que todavía desconfía. Quizá no crea que sois dopplegangers... pero no está convencida de que no seáis enemigos o espías del enemigo.

Repartidos por todo el lugar contáis algo más de veinte personas. Parecen haberse apañado para conseguir suficiente comida, lino, leña y otros suministros, que amontonan con cuidado en diversos grupos.

La mujer se da la vuelta y extiende con una mano abarcando todo el refugio.

- "Somos muchos." - Explica. - "Y nuestros recursos se agotan." -

Mira un montón de muebles apilados junto a una de la paredes. - "Si alguno de vosotros es tan amable podía ir partiendo esos muebles para conseguir leña." -

Luego desvía su mirada y os señala con un dedo varios pequeños fuegos divididos por toda la sala. Junto a los fuegos hay platos, ollas y herramientas para cocinar, así como cuencos con agua recogida. Algunos de los refugiados se apiñan junto a esos fuegos y están tratando de preparar algo de comida, aunque sus medios son propios de aficionados, y no aprovechan ni de lejos todo el alimento.

- "También nos hace falta gente que sepa preparar algo decente para comer." - Comenta.

Echa a andar otros pocos pasos y os indica una esquina de la habitación, donde un hombre vestido con andrajos similares a los vuestros cuando despertásteis, se encuentra divagando y mirando al techo. Una mujer vestida de enfermera está con él y le habla en voz baja, casi en susurros.

- "Loic es uno de los nuestros, pero no logramos que se tome la medicación." - Explica antes de mirar a Gheorghe y señalarle otros dos camastros cerca de la esquina de Loic.

- "Y ellos... " - Dice señalando dos cuerpos tumbados en los camastros. - "Están heridos y aún no he podido sanarles del todo." - Cierra los ojos un momento, y se nota el cansancio en su cara.

- "Si podéis ayudarme con algo de todo eso os lo agradeceré... Y podré responder a vuestras preguntas. A las que sepa, al menos." - Dice finalmente.

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31/08/2017, 20:04
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

El viejo procura mantenerse lo más atento y despierto posible, pero sus oídos se desconectan del mundo a la par que sus párpados se cierran. Por muchos cabezazos que meta y se recupere durante unos instantes, sabe que es una batalla perdida la que está lidiando. Pero ello no evita que reciba y asimile alguna información del lugar y se de cuenta de que la mujer que está frente a ellos, es al menos clérigo, como él.

Que le diese prioridad a Enterrador antes que a él mismo le pareció algo lógico y evidente, pero no pudo sentirse mal por ello. Tosió un poco, tratando así de esconder el gesto de desacuerdo con la decisión de la mujer, pero nada podía hacer ni decir, tan solo mantener los ojos cerrados un poco más y así evitar malas miradas.

Tormento le dejó sobre la manta, en el lugar indicado por Winter. - Lo estaba hace unos instantes... - Le respondió el viejo a su amigo cuando este le dijo que "estaría en buenas manos", dibujando una sonrisa en su rostro. Luego miró a Réquiem, quien se acercaba a acomodarse a su lado.

- No sé donde estamos... pero por las palabras de la mujer y la barricada, esto parece un callejón sin salida. - Murmuró el viejo, tratando de que su fatigada voz solo fuese escuchada por Réquiem y Tormento, quienes eran los más cercanos al anciano. - Sí tuviesen opción a estar fuera, en el exterior y poder moverse libremente... ¿no lo harían? Cualquier lugar es mejor que este, salvo que lo que nos aguarde fuera sea el mismo Infierno. - Carraspeó un poco, la garganta se veía afectada por su insistencia a hablar. - Y tendrían agua y comida... pensad en ello...

El viejo volvió a toser y se quedó inclinado hacia un lado, mirando el suelo mientras se sostenía con sus delgaduchos brazos apoyados con firmeza sobre la fría roca. - Estúpidos mocos... - murmuró justo antes de escupirlos y recostarse de nuevo, quedando a la espera de la ayuda que iba a recibir por parte de aquella mujer.

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01/09/2017, 22:57
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Toda ilusión desapareció del rostro del poeta, la realidad contada por Gheorghe Mykas azotó en Réquiem como si de un vendaval se tratase. Réquiem escuchó las palabras de la mujer llamada Winter Klazcka, el poeta desviaba su mirada a cada una de las localizaciones que decía la mujer. Se fijó en la gente que descansaba en los fuegos, los heridos en unos camastros y el hombre que parecía estar horrorizado junto a una mujer vestida de enfermera.

- Tienes razón Anciano Sabio, esto parece un callejón sin salida… - hablaba en voz baja, para que solo pudiera escucharle el abuelo y Tormento, luego añadió – Mirando el lado positivo podemos tomar un descanso y recuperarnos, antes de hacer lo que tengamos que hacer… - no se le veía muy convencido a Réquiem, no estaba muy animado.

 – Ánimos Anciano, te pondrás mejor – le sonrió para darle apoyo moral. Alexei se levantó y se encaminó hacia los muebles que había señalado la líder del grupo – Me encargaré de cortar algo de leña, así podremos mantener los fuegos vivos – a continuación pensó << Así podrás confiar en nosotros y responder a todas las preguntas que tenemos… no entiendo porqué no se fían de nosotros ¿Qué motivos tendrán después de todo lo que hemos pasado? >>

Réquiem estaba delante de los muebles, decidió empezar por unas estanterías por lo que se puso a dar golpes por debajo, buscando desencajar la tabla y así ir desmontando el mueble para conseguir trozos de madera que sirvieran de leña para el fuego. Mientras realizaba dicho trabajo tatareaba una suave y tranquila melodía en voz baja, que las personas más cercanas a él podían llegar a escucharla. 

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04/09/2017, 02:02
(SA) Nigromante (Dyonisius).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.


Os comprendo- dijo el mago tras escuchar a la mujer heterocrómica sin que en sus palabras trasluciera pesar o reproche- La desconfianza puede apenarme, pero... a pesar de ello nos habéis dado asilo. Creo que podré esperar, y también mis amigos, para gozar de algo más de confianza. Ya soy vuestro deudor por permitirnos entrar, y por curar a mis amigos, Winter Klazcka. Gracias- guarda un momento silencio, como si pretendiera aclarar sus ideas- Creo que tengo algunos conocimientos académicos que tal vez pudieran tener mejor acomodo, pero por ahora, entre las posibilidades que nos has dado... creo que acompañaré a nuestro buen Requiem con el noble arte de hacer leña del mueble apilado. 

Tras estas palabras, Nigromante se acercó al lugar en donde Requiem había empezado a partir leña y con una sonrisa cordial (aunque extraña, había algo peculiar en la forma de sonreír del mago, como si hubiera olvidado como hacerlo), le puso la mano en el hombro.

No soy buen curador, ni soy bueno convenciendo a la gente. Y creo que como cocinero aún soy peor. Pero a pesar de mi pasado académico creo que puedo ayudarte con partir muebles y acarrear la leña. Dos irán más rápidos, y espero que lo hagan mejor. Por cierto, ¿averiguaste también tu nombre? Preferiría llamarte de otro modo, en vez de Requiem. Es... agradable que algunos vayamos recuperando retazos de lo que somos. ¿No te parece? 

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04/09/2017, 09:39
(SA) Gheorghe Mykas.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Gheorghe escuchó con atención las tareas con las que su anfitriona necesitaba ayuda, buscando una donde poder echar una mano verdaderamente, ajeno a los cuchicheos de sus compañeros. La cocina no era su fuerte, y tampoco tenía más que unos rudimentos sobre sanación como para ayudar con eso. Y aunque en un principio habría optado por los muebles, dado que era probable que fuera de los más fuertes presentes, al ver que dos de sus compañeros tomaban esa decisión cambió de idea.

-Bien... Intentaré que Loic se tome su medicación. ¿Hay algo que deba saber?-preguntó, antes de partir para cumplir la tarea. Al fin y al cabo, aquel tipo parecía un interno. Quizás tenía pánico a algo en especial, o no le gustaba alguna cosa concreta, de tal modo que debiera evitar algunos temas, palabras o tratos. 

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04/09/2017, 10:19
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Enterrador observó la situación en el Refugio y las necesidades del lugar, con sus heridos y sus carencias. Cuando la mujer les pidió ayuda, el vigilante asintió. No podía negarse y menos cuando había recibido cobijo y sanación por parte de la sacerdotisa.

Anselmo era fuerte y bien podría haber hecho un buen trabajo haciendo leña, no obstante al ser una función muy primaria al alcance de todos prefirió no sumarse a Requiem y Nigromante, ya dirigiéndose al ajo.

- Puedo intentar algo en la cocina - afirmó el hombre sin excesiva convicción. Él conocía los entresijos de la fabricación de alquimia. Eso le daba conocimiento de las características de las sustancias, sus posibilidades y sus mezclas. Evidentemente aquello no le hacía buen cocinero, pero al menos sabría que alimentos eran aptos y cuales no para la ingesta. Qué propiedades tenían unos y otros para producir o evitar osmosis. Finalmente, qué productos quedaban bien ante el paladar o no al mezclarlos. El resto, cocina de supervivencia.

- ¿Donde quedan las reservas de comida, las herramientas de cocina y el lugar de elaboración? - preguntó a Winter el enterrador para ponerse manos a la obra de inmediato. No sabía si haría algo decente, pero confiaba en algo comestible y nutritivo.

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04/09/2017, 10:38
(SA) Tormento de Tinieblas.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Tormento escuchó cuanto la mujer pedía para de algún modo granjearse su confianza y conseguir respuestas. Su mirada seguía pendiente de su colgante, perteneciente sin duda a Pharasma, un talismán sencillo con una sola espiral. Su mirada se volvió hacia Anciano Sabio. Tres espirales, lo cual denotaba que en poseía una jerarquía superior pese a la indudable autoridad de la mujer. 

-Ayudaré a que se tome su medicina. Te acompaño -dijo dando unos pasos en dirección al paladín-. ¿Se trata de convencerlo o de que se tome la medicina? El camino a tomar puede ser muy distinto -afirmó. Cuando pasó a la altura de la mujer, se detuvo un instante a su altura-. Interesante colgante. Alguien con tres símbolos como el tuyo reposa entre toses. Quizá desees hablar con él -susurró y un dedo se alzó para apuntar en dirección a Anciano Sabio, como una parca señalando su próximo objetivo. 

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04/09/2017, 19:56
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Réquiem pudo observar de refilón como el resto de sus compañeros se ponían manos a la obra e intentar ayudar en algo de lo que había dicho la líder del refugio. Los ojos del poeta se posaron en los del Nigromante, pudo verse reflejado en aquellos ojos azules.

- Toda ayuda es bien recibida en estos tiempos, Nigromante -  dijo amablemente, invitándole a ayudarle a partir los maderos. Réquiem aún seguía sacando las tablas que formaban las estanterías del mueble, golpeaba por la parte inferior para hacerla ceder y así sacar la madera.

- Sí, conseguí averiguarlo. Mi supuesto nombre es Alexey Mykephoros, soy el menor de una familia noble Ustlavo. Gheorghe es uno de mis hermanos – dijo señalando con un movimiento de cabeza hacia el hombre que portaba armadura.  

- Es algo extraño, no recuerdo nada nítido pero estoy seguro que dicen la verdad. Aunque mi pasado… no sé yo si quiero conocerlo ¿Sabes que me dijeron? Que tengo vicios hacia el alcohol y las mujeres, solo espero no encontrarme con alguien con los que haya tenido algún problema, porque no los veré venir – una sonrisa divertida se dibujó en sus labios - ¿Crees que las personas pueden cambiar? ¿Tener un nuevo comienzo? Es decir… reparar posibles errores que uno haya cometido en un pasado – se le podía ver algo preocupado – Pero tengo ganas de saber quién soy, de esa manera podré reprender mi vida e intentar mejorarla. Recuerdo que soy un gran dramaturgo y poeta bueno… eso creo – desencaja otra tabla y las va acumulando a uno de los laterales, apilándolas. Luego habló un poco más bajo, para que solo le escuchara Nigromante – Yo creo que hay una relación con el grupo del otro lado, por ejemplo todos me conocía y algunos más que otros. Era como si nuestras vidas estuvieran ligadas y el nexo de unión fue una misión con El Profesor. Y la última pista estaba en Versex o algo así, un poblado... ahora mismo no lo sé, deberíamos de tratar este tema entre todos. ¿Tumbamos el mueble antes de que se desprenda y se nos caiga encima? – allí se disponía a ayudarle para seguir desmotándolo y haciendo trozos de madera. 

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04/09/2017, 20:46
(SA) Nigromante (Dyonisius).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.


A pesar que Nigromante había escuchado con atención cada una de las palabras de Réq... No, de Alexey Mykephoros, lo cierto era que no había dado respuesta alguna a las mismas. Al contrario, pareciera que se iba a concentrar en ayudar con el mueble, primero desencajando y partiendo las tablas y, luego, ayudándole a tumbar el mueble antes que, como acertadamente había indicado, se le cayera encima. 

- Inercia- dijo entonces, casi cuando Alexey podía pensar que no iba a obtener respuesta alguna- se trata de un problema de inercia. Respondiendo a tu pregunta, creo que todos inventamos nuestra vida, nuestra forma de ser, con nuestros actos. Pero cada acto que hacemos es como... como dar velocidad a un bólido, como hacer que un barco se mueva. Podemos dar velocidad hacia un lado, o hacia otro, pero la inercia de todas las decisiones anteriores, de todo lo que ha ocurrido, nos empuja en direcciones, a veces, no deseadas- el mago parece pensar algo y una sonrisa tranquilizadora aparece en sus labios- En todo caso, el alcohol y las mujeres no me parecen los peores vicios, más bien al contrario. ¿Y quién sabe? Tal vez esto terrible que nos ha ocurrido pueda tener una lectura positiva. Nos permite reinventarnos, despojándonos probablemente no de toda la inercia, pero sí de una parte importante de la misma. Pero respondiendo a tu pregunta, nuevamente, y van dos intentos: sí, creo que podemos cambiar. Incluso a pesar de la inercia. Aunque no creo que haya nuevos comienzos, sí creo que cada capítulo de nuestra vida empieza tan pronto somos conscientes de cualquier cambio en la misma.   

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05/09/2017, 17:28
(SA) Réquiem (Alexei Mykephoros).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Réquiem apoyaba el mueble en el suelo con la ayuda de Nigromante, el poeta se lo quedaba mirando con gesto dubitativo a la espera de su respuesta que no tardó en llegar. Mientras el dramaturgo caído en desgracia rompía las maderas en trozos más pequeños, iba escuchando las sabias palabras que pronunciaba el hombre que le ayudaba.

<< Inercia… >> En la mente de Réquiem se dibujaba una especie de corriente de aire que arrastraba una serie de objetos, se iban revoloteando llevados por la inercia del movimiento que bien podría reflejar el transcurso del tiempo. El poeta afirmaba a las palabras del hombre, desviando un poco la atención de las maderas hacia su interlocutor.

- Bueno al fin y al cabo los vicios son malos, pero sí, dentro de lo peor sería lo menos malo – una diminuta carcajada surgió del fondo de su garganta. Volvió su atención a la tarea que estaba ejecutando, seguía partiendo el mueble dando golpes con la punta del calzado para ir rompiéndolo.

- Mirándolo con ese punto de vista, podría llegar a ser una situación beneficiosa para cambiar, sería como una gran oportunidad de remediar errores de un pasado. Gracias Nigromante, tus palabras me han servido para mirar las cosas desde otro punto de vista y no caer en la desesperación de ver todo a cuesta arriba

Después de apilar las maderas en un rincón volvió a hablar en un tono más bajo – ¿Llegaste a reconocer a las personas que se intercambiaron por nosotros? Tal vez si te cuento como eran, sus nombres o intento describirlos puede ser que te venga algún tipo de recuerdo… - su voz sonaba dubitativa, buscaba soluciones y luego añadió – Deberíamos de cooperar con ellos, hay una mujer llamada Sascha, sabe elaborar infusiones. Una de ellas me ayudó a calmar mi tos y luego me preparó otra para que mis sueños fueran más plácidos, sin pesadillas… pero no llegué a bebérmela. Ojala me hubiera llevado un brebaje en una cantimplora… -  

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05/09/2017, 17:41
(SA) Anciano Sabio (Sebastián Moro).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

El viejo permaneció recostado durante todo el tiempo que pudo. Sus ojos se abrían y cerraban según cambiaban las voces del entorno. Escuchó la petición de la mujer, un intercambio de ayuda por ayuda. Anciano hubiese preferido dormir un poco con el fin de estar algo más despejado, al menos mentalmente, pero el ruido que habían comenzado a hacer sus compañeros rompiendo los muebles de madera para poder hacer un fuego, le imposibilitaban ese descanso.

Miró a Tormento de reojo, viéndole irse a otro lado del refugio para ayudar a alguien a tomarse su medicina. Esta bien Pharasma, si esta es tu voluntad, así será. - Pensó el viejo mientras se levantaba lentamente y se cubría con una de las mantas. Caminó despacio hasta donde se encontraban los enfermos que aquella sanadora no había podido ayudar.

No se acercó demasiado a ellos y les miró acariciándose la barba. El joven tenía cara de estar molesto y dolorido, pero la chica mostraba un auténtico gesto de dolor agudo e intenso. Además sus ojos estaban hinchados, seguramente por llorar por lo que la ocurriese. Lo que no cabía lugar a dudas, es que el problema estaba en uno de sus brazos.

Anciano Sabio se acercó a la joven y la sonrió. - Hola hija mía. - Dijo lentamente, pues no estaba dispuesto a toser de nuevo y a alertar a Tormento, haciéndole ver que se había puesto en pie. - Dicen que necesitas cuidados, ¿me permites? - preguntó amablemente tendiendo sus manos hacia el brazo que parecía dolorido. - Procuraré que no te duela más aún, pero necesito verlo y tocarlo para saber que te pasa.

El viejo examinó el brazo con cuidado. Todo aquello no le era desconocido, aunque realmente no recordaba cuando lo había aprendido, si sabía que era lo que debía hacer, pero necesitaría ayuda de alguien que también entendiese algo. - ¡Enterrador! - exclamó el viejo. - ¡Ven, por favor!¡Te necesito! - La cocina debería esperar un poco más.

Luego miró a la chica y la sonrió. - Enseguida estaremos contigo. - Mientras esperaba a su compañero, caminó hacia el joven, a quien saludó con una sonrisa y le pidio que le permitiese ver el mal que le afectaba. - Bonitos mordiscos. - Le dijo con ironía. - Deberías buscarte una novia más dócil. - Le sonrió y le dió unas palmaditas en el hombro, mientras se giraba para ver de que material disponían para poder realizar las curas pertienentes a ambos jóvenes.

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05/09/2017, 18:15
(SA) Tormento de Tinieblas.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Tormento se encaminó sigilosamente hacia el hombre que no deseaba tomarse su medicina. Su nombre, Loic, era todo cuanto sabía de él. Realmente no necesitaba saber más. En ocasiones, un exceso de conocimiento podía suponer más un obstáculo que una ventaja. Apenas prestó atención a los otros dos camastros, cerca de uno de los cuales pululaba Anciano Sabio quien, pese a su estado físico, había decidido ayudar. Optó por el silencio como respuesta, dejándolo obrar libremente. Que deseara ayudar lo honraba, pese a que en opinión de Tormento era él quien debía recibir asistencia antes de ofrecerla.

Se detuvo tras la enfermera, sin hacer evidente su presencia en aquel momento. La mujer trataba de hablar entre murmullos con el hombre. Su uniforme provocó en Tormento una descarga de adrenalina. Reconocía o creía reconocer aquellas ropas. Eran las mismas que portaba su primer enemigo, aquella enfermera cuyo sadismo había cortado de cuajo con una certera patada. Loic, por su parte, miraba el techo, farfullando palabras inaudibles, incapaz de seguir la conversación de la mujer, vestido con unos andrajos que nadie había tenido la decencia de quitarle. Le recordó demasiado su despertar y el de los otros y se preguntaba qué le habría ocurrido a aquel desgraciado y si su mente se habría perdido ya para siempre de la mano del terror y de la locura.

-¿Sabes qué le ha ocurrido? ¿Y cuál es la medicina que debe tomar? -preguntó a la espalda de la enfermera, tras un par de minutos.

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05/09/2017, 18:42
(SA) Enterrador (Anselmo Paddock).

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Enterrador terminaba de hablar con Winter Klazcka, preguntándole sobre dónde encontrar, en el almacén, lo deseado para comenzar a cocinar algo y queriendo saber el lugar que empleaban para encender los fuegos, cuando oyó la exclamación inconfundible de la vetusta voz de Anciano Sabio. Parecía apremiante.

- Disculpe - se disculpó ante la sacerdotisa para ausentarse un momento y acercarse hacia el viejo sacerdote de Pharasmaa a la que oía los susurros próximos de un demandante Tormento hacia la mujer.

El vigilante se aproximó hacia el lugar donde era reclamado y no pudo por menos que pensar qué hacía Anciano atendiendo a los enfermos, pues más bien debería acompañarlos en el encamamiento debido a su frágil estado de salud. Suspiró levemente y concluyó que el proselitismo del viejo sería algo inherente a su fe y su conducta, y por tanto inevitable.

- Dime Anciano, ¿En qué puedo ayudarte? - preguntó mientras echó un vistazo a los dos enfermos con la idea de que, sin duda, su reclamación se debería a algún tipo de afección en los mismos y preguntaba por una segunda opinión al respecto, habiendo demostrado Enterrador sus conocimientos sanitarios. Mientras realizaba una inspección somera y silenciosa se dejó guiar por el clérigo, a la espera de que sus mudas indicaciones hicieran el examen mucho más rápido y determinante.

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05/09/2017, 22:59
SA: Capilla: Airwynn Savoia.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

La mujer pelirroja a la que Anciano Sabio examina el brazo ahoga un gemido de dolor y procura parar de quejarse antes de levantar su mirada hacia su nuevo interlocutor.

Pero al comprobar que el Anciano se dirige luego a examinar al niño, asiente y se encoge tirada en su camastro sin hacer ademán de protestar.

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05/09/2017, 23:00
SA: Capilla: Bates Yopchick.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

El muchacho al que están examinando justo en ese momento Enterrador y Anciano Sabio convulsiona de nuevo. Los dientes le castañetean mientras Enterrador se apresura a agacharse y sujetar al crío para que no se haga daño en sus temblores.

Parece que, aunque breves, las convulsiones son más frecuentes. Los músculos de su cuerpo parecen en extremo agarrotados, y no es capaz de articular palabra.

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05/09/2017, 23:04
SA: Capilla: Naysa Walika.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

La mujer vestida de enfermera se gira al escuchar la voz de Tormento. Posee una belleza de contundente figura, aunque su rostro denota experiencia. Mira a Tormento de arriba a abajo antes de contestarle.

- "Debo conseguir que se tome este brebaje." - Dice alzando una mano y mostrando una pequeña redoma. - "Es lo único que consigue que desaparezcan sus alucinaciones." - Explica.

Luego vuelve a mirar a Tormento de los pies a la cabeza. - "Eres nuevo, ¿no?" - Su mirada se dirige brevemente al resto de los recién llegados. - "Soy Naysa." - Se presenta antes de sonreír y luego volver a centrar su atención en el hombre que no para de farfullar.

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05/09/2017, 23:08
SA: Winter Klazcka.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

Winter cierra los ojos un momento antes de responder a Georghe. Luego niega con la cabeza, con la lástima patente en su rostro.

- "Loic cree que habla con su hermana gemela... Pero ella está muerta." - Explica. - "Murió hace muchos años ya." -

Se encoge de hombros. - "Cuando le dan estos ataques somos incapaces de razonar con él, pero una vez se toma la medicación es una de las personas más cabales que conozco." - Añade.

Luego hace un gesto al paladín en dirección a Loic, mostrando que uno de sus compañeros, Tormento, ya ha dado unos pasos para hablar con la enfermera.

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05/09/2017, 23:11
SA: Capilla: Tolman Leolies.

EL REFUGIO DE SOÑADORES:

INVIERNO, AÑO DESCONOCIDO.

DÍA DESCONOCIDO (DÍA SIGUIENTE AL DESPERTAR), MES DESCONOCIDO.

MEDIA MAÑANA.

EN LA CAPILLA.

El Capitán York y un joven hombre que le acompaña observan a los compañeros dividirse por el refugio y atender cada uno a las diversas peticiones de los allí presentes.

No dejan de vigilar con la mirada, sobre todo a Réquiem y Nigromante, cuando éstos comienzan a partir y apilar leña en montones. 

En ningún momento se muestran agresivos o especialmente recelosos, pero sí parecen preocupados por la seguridad en el lugar.