Partida Rol por web

El Laberinto. Nivel 1.

Ésta será vuestra primera prueba antes de comenzar con los retos que os harán héroes. Para ello deberéis encontrar la salida. No será una tarea fácil, pues algunos monstruos han sido colocados en el laberinto e intentarán obstaculizar vuestra labor.
El primero que llegue a la salida será recompensado con 100 monedas de oro

9.00 am

Ninguno de vosotros parece encontrar a los compañeros con los que habéis llegado hasta aquí ni si quiera sabeis como habeis llegado pero os encontrais totalmente solos.
Todos vais completamente vestidos con una túnica roja, uniforme de Mentor y una cuerda atada a la cintura.

9.00

Te encuentras en plena esquina entre dos pasillos, el pasillo que lleva hacia el norte parece mucho más ancho que el que te lleva hacia el este. Ambos están iluminados tenuemente con antorchas a ambos lados de los pasillos y a simple vista parece que el ancho se bifurca en dos y el estrecho gira en dirección norte. No ves rastro de ninguno de los compañeros de los que Méntor te habló. Por lo menos llevas contigo un bástón que podrá ayudarte a defenderte.

9.00

Te encuentras en la esquina formada por dos pasillos, uno de ellos se dirige hacia el este y el otro hacia el sur.

Ambos pasillos se encuentran iluminados por antorchas que dejan el pasillo en penumbra. El pasillo del este continúa pero no alcanzas a ver el final pues se pierde entre las sombras. Antes de ello alcanzas a ver una puerta que te lleva a algún lugar a la derecha del pasillo.

El pasillo del sur termina en un montón de escombros que impiden continuar por él. Ahí también alcanzas a ver otra puerta que lleva hacia la izquierda.

9.00

Te encuentras en la esquina de dos pasillos que están iluminados tenuemente por antorchas a ambos lados.

Uno de ellos, el que va hacia el sur se pierde en la oscuridad, no si antes dejándote ver una puerta que lleva hacia algún lugar de la derecha de éste.

El otro pasillo, el del oeste continúa perdiéndose en la oscuridad y no dejándote ver el final.

9.00

Te encuentras en la esquina formada por dos pasillos tenuemente iluminados por antorchas.

Ambos pasillos están bloqueados por montones de pedruscos que te impiden avanzar por ellos. Pero en ambos casos hay un par de puertas que te llevan a algún lugar de la zona.

Desconoces como has llegado hasta aquí, pero está claro que tendrás que tomar alguna decisión, tomar el pasillo y la puerta del norte o decidirte a ir por el pasillo y la puerta del este.

9.00

Te encuentras ante dos pasillos que se pierden en la penumbra que crean las antorchas, si no fuera por su visión élfica no verías que más a lo lejos hay una puerta en cada pasillo, aunque para llegar a una de ellas (la del norte) tendrás que detenerte en una encrucijada y decidir si seguir por el nuevo camino que crea esta o alcanzar la puerta por la que continuaba. Aunque quizá prefieras tomar la puerta del camino del oeste. Tendrás que tomar la decisión, pero para ello es mejor que saques el arma que te ha entregado Méntor y te protejas con ella, por si acaso.

Zeldara avanzará por el pasillo y la puerta del norte.

 El elfo simplemente empieza a caminar por la puerta del norte, con el arco en la mano y al llegar a la encrucijada se queda mirando tranquilamente los caminos disponibles

-Aaaah, que dolor de cabeza!-

dice mientras se encoge de hombros y toma el nuevo camino de la encrucijada, sonriendo tranquilamente mientras saca un flecha, girándola entre los dedos mientras camina

-Nada más a alguien llamado "Mentor" se le ocurriría algo tan descabellado... Pero si esto me permite fortalecerme para cumplir mi deseo será bienvenido...-

Dice en un susurro, atento a su alrededor aunque pareciera estar distraído.

Aún no he hallado a mis compañeros de viaje, o lo que sea que serán para mí cuando sea el momento.

Miro los pasillos, hay dos cerca mío.

Empuño un palo largo que puede servirme de defensa.

Comienzo a caminar por el más ancho de los dos, mirando a cada paso, a diestra y siniestra.

"Todo debe ser estudiado antes de adentrarnos en los sitios en los cuales el peligro puede esconderse...", pienso.

Perdona, con tanto lio de fichas se me olvidó otorgarte el arma, Méntor te ha entregado un hacha de batalla

Paco viaja a traves del pasillo del sur dirigiendose hacia la puerta, por el camino examina que no haya trampas.

Despues de pensarlo varias veces, Mireia se dirije hacia el monton de piedras, e intenta mover algunas para pasar por arriba o por algun lado. Quien sabria si alli se hallaba un atajo que le llevara lo mas pronto posible a la salida. Deseaba enseñarle a sus maestros que con tanto esfuerzo la habian enseñado que podria ser mejor que el resto de aprendices y por tanto, mejor heroe. Ademas que unas monedas no estarian nada mal para comprarse nuevas armas o mejorarlas.

9.01

Avanzas hasta el final del pasillo del norte llegando a un montón de escombros demasiado pesados para moverlos. Es imposible seguir por aquel lugar sino fuera por la puerta que se encuentra justo a tu derecha. No escuchas nada de detrás de ella.

9.01

Llegas a la encrucijada y ves que el nuevo pasillo está cegado por un montón de piedras y pedruscos imposibles de mover.

Afortunadamente el camino no está cortado pues puedes continuar por cualquiera de las dos puertas que hay al final y a ambos lados del pasillo. Pero también al ir acercándote por el camino al que ibas ves a unos pocos metros a un muchacho que está revisando cada centímetro del pasillo que va recorriendo en busca de algo pero no sabes de qué.

El hombre va vestido con los mismos colores que tú y parece que aún no se ha percatado de tu presencia. Te das cuenta también cuando te has acercado más de que había una nueva puerta si continuabas por el pasillo, inmediatamente después de la encrucijada.

9.01

Llegas hasta el montón de pierdas y consigues mover algunos, pero solo los pedruscos más insignificantes. Parece que el pasillo está totalmente cegado y resulta imposible continuar por él. Así que por este pasillo solo puedes continuar por la puerta.

9.01

Llegas hasta el final del pasillo ancho y ahora solo puedes continuar hacia la izquierda donde parece haber una puerta y el pasillo se pierde entre las sombras o bien por el pasillo de la derecha que también parece perderse entre las sombras.

Con el hacha en la mano, abre la puerta y pasa a través de ella.

Renfunfuñando por lo bajo, Mireia se acerca a la puerta mas cercana y la abre.

Mirando a mi alrededor, decido que debería probar la puerta de la izquierda. Me acerco a ella, intentando no hacer ruido, y giro su pomo para abrirla.

"Ojalá no esté cerrada... pero mejor aún, ojalá no haya demasiados peligros dentro..."

Pienso mientras hago el movimiento para abrirla.