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La Compañía Negra 2: La Puerta de Galdan.

La Compañía Negra: Campamento Principal.

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16/05/2016, 21:24
[RIP] Belleza, Pelotón de Exploradores.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Derviche, mi antigua compañera en el pelotón de campamenteros, me había parado en medio del campamento principal a preguntarme sobre mi marcha del pelotón de campamenteros.

- Mis motivos los conoce Lengua Negra que era mi superior, y el cabo Ridvan que es mi actual superior, y ambos son a los que realmente les importaba y necesitaban saberlo - le digo a la fanática, mientras me cruzo también de brazos - así que creo que no hay nada más que decir.

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17/05/2016, 16:35
Grito, Infantería, Escuadra Barril.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Había tomado ya su segunda o tercera jarra de grog, pillaba por donde podía y se lo echaba al buche sin darle más vueltas. Había comido ya lo que había ido pillando por diferentes sitios. Ahora se había sentado en una fogata, con una jarra llena y pocas ganas de estar callado. Había visto el cruce de miradas y palabras entre Derviche y Belleza, supuso que no llegaría a más.

Fue en una de esas guerras tribales, ya sabéis, antes de los caimanes negros. Estábamos acampados en algún condenado lugar de la sabana y había una condenada colina con un poblado en lo alto controlado por... Cojones, no recuerdo quienes eran. Hizo una pausa para beber un trago y mordisquear un trozo de costillar de buey o lo que fuera aquello. El caso es que "El viejo" mandó a la infantería a subir aquella colina dejada de la mano de los espíritus, los arqueros también venían con nosotros y, mientras subiamos aquella cuesta de pedregal y arena seca, no paraban de lanzar andanadas de flechas mientras los cabrones que defendían aquel poblado no paraban de tirarnos lo que tenían a mano; piedras, anforas, troncos de madera, jabalinas... creo que a Lagrimita le tiraron algo parecido a una col.

Un nuevo trago, para refrescar la boca seca.

Bueno ¿Por dónde iba? ¡Ah, si joder! Ibamos subiendo la cuesta mientras nos escurriamos sin parar por culpa de los malditos chinarros, mientras el Cabo Barril no paraba de decirnos "¿Sois soldados o putas bailarinas? Dejad de hacer el gilipollas y empezad a cargar"... Y vaya si lo hicimos, empezamos a correr como unos putos condenados. Miró buscando a algún compañero que le corroborase su siguiente frase. Creo que allí cazaron a Que, un tagliano ultra-religioso que siempre parecía estar en otro mundo... Un tío cojonudo cuando se emborrachaba, palabra... y creo que también cayó Cobre , le llamabamos así porque tenía una puta barba que crecía de color cobrizo, era un cabrón de cuidado y en los saqueos había que tener un ojo encima de él para que no acabase quemando algo. La cosa es que al final llegamos arriba, chorreando sangre hasta los codos, nuestra y de ellos.

Bebió, tosió y miró al cielo con una sonrisa nostálgica.

Yo acababa de jurar ese año y se pasaban el día puteandome, los reclutas de este año tienen la suerte de entrar en pelotones con novatos, en nuestro caso los veteranos se encargaban de jodernos de lo lindo. Lo primero que hacían nada más llegar un novato al pelotón era atarlo a un espino, totalmente desnudo y emborracharlo hasta hacerle perder el sentido, a la mañana siguiente no tenías ganas de seguir vivo... al final, cuando llegaba un nuevo novato eras el primero en ir a por el, despues de eso cuando había que matar o desparramar las tripas por los suelos, eran unos tipos de puta madre. Se paró, se dió cuenta de que ahora divagaba, efecto del alcohol y la nostalgia. La cosa es así, llegamos arriba y solo encontramos las gallinas, el ganado y todo aquello que no tenían clavado al suelo. Cuando asomamos al otro lado ya habían corrido una puta milla... Como lo oís, una jodida milla entera huyendo. Eran tiempos cojonudos, te curtías en dos días y te pasabas el día jugandote la vida contra unos cabrones malencarados pero honestos... Y a veces pasaban cosas así, te zurraban duro y cuando llegabas a ellos estaban tan jodidamente acojonados que les faltaba tierra para correr lejos.

Se quedó pensativo, mirando su jarra medio vacía y sin decir más la vació de un golpe. Se levantó, palmeando unos hombros de forma aleatoria.

Voy por un trago.

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17/05/2016, 17:29
Sabandija.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Había una gran diferencia entre las dos grandes fiestas a las que Sabandija había acudido en los últimos meses. La Ceremonia de Jura de Plumilla la recordaría como uno de sus mejores días en la Compañía, junto con el de su propia ceremonia de jura, en la que recibiera su broche y su capa de manos de Ojopocho. En la de Fin del Año, Sabandija tenía poco que celebrar. Se había creído curado, sano a pesar de llevar para siempre consigo el lastre de la mordida de aquella lanza guiada por el espíritu de su difunto hermano. No había remedio y había asumido que ese era su sino. Los cuidados de Matagatos y Plumilla, así como los sabios conocimientos de Ratrojo, habían logrado que volviera a mover el brazo. La extremidad dañada se veía más fina y algo demacrada, daba la impresión de ser la de un anciano. Era como cuando una leona pare dos cachorros y uno de los dos es robusto y fuerte por naturaleza mientras que la del otro, pusilánime, le condena a estar siempre a la sombra del otro, alimentándose de los restos que el primero deja. Vamos, la historia de su vida, sólo que en el caso de Sabandija, que no de sus brazos, era el hijo pusilánime el que había sobrevivido. Sin embargo había heridas más profundas que las producidas por el cuerpo y eran las del ánimo.

La noticia le había golpeado, sólo en forma de rumores que llegaban del Campamento, cuando aún vivía feliz su estancia en el Palacio de la Discordia.  Los más graves decían que Ojopocho había muerto en un ataque sorpresa del Triplete. Otros decían tan sólo que había sido herido. Desde entonces unas nubes negras ocultaban la cálida luz que comenzaba a brillar en el explorador K´Hlata. Su llegada al campamento confirmaba sus peores miedos: Ojopocho había caído. Chamán Rojo le había indicado el lugar bajo el que había sido enterrado y allí había acudido varias veces a mostrarle sus respetos.

Se lamentaba el K´Hlata de su mala suerte. Cuando todo comenzaba a enderezarse volvía a ponérsele cuesta arriba. Se había relajado y le quedaba ya claro que las protecciones contra la malignidad de sus muertos tendrían que ser constantemente renovadas. Se había quedado sin mentor, lo cual suponía un aumento del riesgo de caer en combate, como si pocas veces hubiera caído ya. Seguro que, donde quiera que estuviese, su hermano se frotaba las manos y se relamía con solo pensar en beber de su sangre derramada en el campo de batalla. ¿Quién iba ahora a enseñarle a usar su arco? Ojopocho era el mejor, y ya no estaba.

Por si fuera poco, Sabandija le daba mil vueltas a la idea de que podía ser presa de alguna maldición o mal de ojo. Su mala suerte no era normal. Desde que se había enterado de la muerte de su Hermano De Capa rehuía el ponerse la capa negra que, con sus propias manos, le había puesto sobre los hombros. Trató de ahogar sus penas en una jarra de grog. Dio un trago y tuvo que cerrar los ojos para soportar el ardor que le producía en la garganta.

- Cof, cof...- Ni siquiera podía enfrentarse a una bebida. Se apartó el cuidado pelo de la frente y buscó con la mirada triste a Plumilla. Sólo esperaba que ella no corriese la misma suerte.

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17/05/2016, 19:01
[RIP] Niña de Oro.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Paseando por el campamento, escucho a un soldado de infantería que empieza a contar una historia de las antiguas. No recuerdo su nombre, pero decido pararme y escuchar. Siempre puedes aprender algo del saber antiguo.

Le escucho atentamente, sin perderme una palabra, mientras pienso que seguramente yo no habría conseguido superar la instrucción en la época de la que habla. Sonrío cuando termina. Me gustan las buenas historias, los recuerdos de las batallas libradas por la Compañía.

Una vez termina, me acerco a coger una jarra de grog y un poco de asado. Que quizá no merezca celebrar no significa que no vaya, al menos, a festejar un poco... aunque sólo sea por recordar a aquellos que cayeron en este tiempo que llevo con la compañía.

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17/05/2016, 20:08
[RIP] León Anciano.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

León Anciano observa como el resto de los integrantes de la compañía se divierten y cometen excesos de toda clase durante la fiesta. Acercándose a uno de los espetones donde la carne de buey chisporrotea sobre las brasas, se hace con un trozo de carne mechada con grasa medio fundida por el calor y se sienta en un rincón algo retirado para comer con tranquilidad.

Mientras mastica un trozo de carne, ve como Niña de Oro pasa frente a él llevando un plato de asado y una jarra de grog en las manos.

- Cuidado con esa jarra, pequeña - le dice con tono paternal - aún recuerdo mis primeras borracheras con grog y las duras mañanas del día siguiente...

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17/05/2016, 20:41
[RIP] Niña de Oro.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Camino distraida cuando de repente alguien me habla. No es normal que nadie me hable, excepto quizá Belleza o Loor. Así que me paro en seco. Veo que es León Anciano y sonrío.

Gracias por el consejo. Como quiera, tampoco pensaba beber mucho. Quizá esta jarra... hoy no quiero emborracharme.

Por cierto, León Anciano, antes escuché una buena historia de... bueno, de un miembro de la Infantería. Temo que no he tenido suficiente relación con él para saber su nombre. Pero imagino que tú sabrás alguna buena historia. Si pudieras, me gustaría escuchar alguna... quizá algo que me ayude en un futuro.

Añado una sonrisa. Lo cierto es que no tengo mucho que hacer, ¿por qué no escuchar alguna buena historia?

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17/05/2016, 20:48
Derviche.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Tras escuchar la respuesta de Belleza, negó con la cabeza, en claro gesto de desidia.

-Bueno, veo que te he formulado mal la pregunta, ya que tus motivos no me interesan nada, y tu tampoco los quieres contar, así que me son indiferentes- Continuó en su pose neutra

-Me interesaba más el como, los pasos que seguiste, pero como veo que con el cambio se te ha encogido la lengua, me voy, no quiero tampoco perder mi tiempo contigo- No había enfado en sus palabras, ni desprecio, simplemente había perdido el interés por hablar con Belleza. Se dio media vuelta y se marchó, como siempre, a un sitio apartado, no sin antes coger un trozo de carne asada y la única copa de grog que bebería aquella noche.

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17/05/2016, 21:02
[RIP] Belleza, Pelotón de Exploradores.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO

No pude disimular una sonrisa según hablaba, para terminar riéndome por su curiosidad. La alcancé antes de que se fuese.

- Ven, Derviche, hablemos, te contaré cómo lo he conseguido...

Cogí otro plato de comida y me dispuse a ir a un lugar más tranquilo.

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17/05/2016, 21:17
Sabandija.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO

Sumido en la más honda de las tristezas Sabandija levantó la mirada para ver cómo la desagradecida Derviche hablaba con La Tránsfuga.

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18/05/2016, 02:22
Plumilla.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: DUODÉCIMO (MES DEL JAGUAR, TERCERO DEL OTOÑO).

DIA: CATORCE DEL MES.

HORA: POR LA TARDE.

Plumilla escuchó en silencio el discurso de Matagatos. No estaba muy animada, habían fallado la misión, pero por alguna razón no sentía que hubieran fallado del todo. Demasiadas cosas extrañas habían ocurrido durante el viaje y la curandera aún se preguntaba qué había sido real y qué debería creer. 

De cualquier modo, lo cierto era que ninguno de ellos había muerto y había cumplido con su cometido, por lo que tenía su parte del botín bien merecido, aunque llevara amargura como guarnición. Se levantó en silencio y se acercó al cabo para recibir las monedas que le correspondían.

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18/05/2016, 02:37
Plumilla.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

La gran fiesta por el Fin de año era la excusa perfecta para que Plumilla se tomara un descanso de los quéhaceres de todos los días. Desde la ceremonia de juramento tiempo atrás no habían tenido una fiesta para relajarse por lo que la curandera esperaba con ansias dicho día. Además, también era día de celebración para los campamenteros.

La mañana del mismo día se levantó temprano para no perder más tiempo del necesario durmiendo. Con los primeros rayos de sol, la k'hlata se encontraba levantada y lista para disfrutar del evento. El rico aroma de la carne cocinándose inunda el ambiente y abría el apetito y el grog corría como el río.

Con un trozo de carne en una mano y una jarra de grog en la otra, la curandera caminó de un lado a otro observando todo lo que pasaba. No estaba acostumbrada al grog, pero un día era un día. Escuchó una tos y se dio la vuelta para ver a Sabandija allí. Sonrió a su hermano de capa y se acercó a él.

- Buenos días, hermano, ¿qué te ocurre? Pareces algo decaído - preocupada, la curandera se colocó a su lado para mirarle bien.

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18/05/2016, 11:27
[RIP] Loor.
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AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.


Loor se encuentra en el Campamento y se dirigía para hablar con Belleza. La antigua princesa de las Lágrimas de la Diosa no puede dejar de escuchar las palabras entre Belleza y Derviche, y se acerca a ambas.

- Hermanas, quería hablar con ambas. ¿Puedo acompañaros?

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18/05/2016, 11:54
Preocupado, Pelotón de Infantería, Escuadra Barril.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

El paso del tiempo era una de las cosas que más le preocupaba, pues era algo contra lo que nunca se podía hacer nada y aunque algunas veces era favorable, la mayoría resultaba demasiado rápido para todo lo que uno quería abarcar en la vida. Y Preocupado tenía la sensación de que se quedaba sin tiempo, que poco a poco se le hacía demasiado tarde y que no podría hacer todo lo que tenía en mente. Y así, casi sin darse cuenta, llegó el último día del año, un día, o más bien una noche, de celebración y fiesta. Preocupado no estaba para una cosa ni otra.
Escuchó la historia que animado por el exceso de grog Grito se había dispuesto a contar. Recordaba perfectamente aquella batalla y como había advertido que era una locura lanzarse a la carrera en aquel terreno desfavorable y resbaladizo. La supuesta victoria se saldó con un par de muertos en su bando y con algunos enemigos muertos, aunque la mayoría huyeron impunes, eso y con Lagrimita siendo golpeado por una col. El recuerdo le robó una pequeña sonrisa, aunque pronto volvieron las preocupaciones.

Contado así da la sensación de que fue una gran victoria, una victoria fácil. No lo fue, perdimos dos hermanos y apenas infligimos daño al enemigo, aunque les expulsamos de su posición.

Ahora parecía que todo aquello quedaba lejos, servían a otro Señor y se encontraban en tierras extrañas. Un lugar donde los espíritus parecían mantenerse alejado y lo que era peor, donde la mayoría de sus hermanos se alejaba paulatinamente de ellos y eso le preocupaba. Pronto aquel pequeño tiempo que se habían tomado para reorganizarse tras la victoria en el fuerte Chuda se terminaría y los enemigos que les esperaban no saldrían corriendo como en aquella aldea y no estarían protegidos por simples empalizadas de madera como en el fuerte. ¿Cuantos de sus compañeros morirían bajo sus murallas? ¿Moriría él mismo allí? Solo los espíritus lo sabían y Preocupado esperaba que le fueran favorables, hacía todo lo posible por conseguirlo.
Sintió la garganta seca y se acercó junto a Grito a por una jarra de grog.

-Bonita historia hermano. Hacía mucho que no recordaba esa batalla. ¿Un brindis por Que y Cobre?

Al menos les quedaba el recuerdo de honrar a sus hermanos caídos en combate, esa era la única huella que parecía quedar en aquel mundo tras el paso de cada uno, solo unos pocos lograban hacer algo importante de verdad.

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18/05/2016, 16:59
Grito, Infantería, Escuadra Barril.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Sonrió al ver a Preocupado por allí, brindó con su jarra mientras pasaba el brazo por el hombro de su hermano.

Por Que y Cobre, seguramente ahora están en un buen sitio. Dijo mientras vacíaba su copa de un trago. Pense que a estas alegres flores les vendría bien saber que esta no es la primera, ni la última guerra de la compañía pero que siempre puedes contar con el tipo que tienes a tu lado ¿Por qué no les cuentas tú algo? Pero procura que sea algo que acabe bien, si no cuando digan de subir a La Puerta de Galdan estarán totalmente desanimados al saber que en la guerra también se muere, mayormente sin gloria y sangrando como un cerdo mientras piensas que nunca debista dejar tu casa.

Se sentó en el suelo, mientras se rascaba la nariz con el dorso de la mano.

No, eso mejor que no lo sepan aún... Sus ojos estaban ligeramente vidriosos. Sabes, se echa de menos a muchos de aquellos tipos. Si, lo sé, eran unos cabrones la mayoría pero eran nuestros cabrones ¿Recuerdas cuando el Gordo Wem nos echó a correazos porque decía que le sisabamos el grog con una cañita de paja? Los matones de Usurero querían abrirnos un nuevo agujero junto al ojete, pero Elefante no les dejó... Ya no recuerdo ni donde lo mataron ¿Fue cuando los de los Tres Castores o fue antes? Que más dará, salvo Analista nadie se preocupa ya por esas cosas... Malos tiempos en la compañía cuando la gente olvida que existe un pasado, que estuvo antes que ellos y que quizás fue más jodido que todo el presente.

Hablaba con locuacidad, producto del grog. No estaba lo suficientemente borracho como para quedarse callado y taciturno, pero demasiado borracho para quedarse callado.

Anda, cuentales algo, sobre los viejos tiempos... Seguro que si lo entienden, lo agradeceran.

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18/05/2016, 17:59
Sabandija.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

Sabandija desvió la mirada de Derviche y Belleza para ver algo mucho más agradable, el rostro de Plumilla.Suspiró tratando de forzarse a sonreír a su Hermana de Capa que estaba espectacular, como en todas las fiestas. La curandera también había tenido mucha relación con Ojopocho, pues él era un hábil sanador. Quizá ella, al tener mucho más contacto diario con la muerte, fuera más resistente a su pérdida.

-Nada.- Mintió para no mostrar su debilidad pero, ¿a quién iba a engañar? Después de todo había confianza con Plumilla.- Sigo dándole vueltas ...la ausencia de Ojopocho.- No podía confesarle a su compañera campamentera que también temía por su propia vida y por la de ella. Todo lo que tocaba Sabandija corría peligro.- Seguro que me hubiera enseñado a disparar con el arco.

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18/05/2016, 20:33
[RIP] Pipo.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO

Llevaba bastante tiempo sin pertenecer a Pipo, ese cuerpo de ébano. Los últimos meses se había mantenido mucho tiempo ahí, aun sin haber violencia. Pipo hacía acto de presencia, normalmente, a la hora de las comidas, al anochecer o al amanecer y en algunos otros momentos del día en los que solía tocar la flauta o corretear alborozado, o ir a ver a Ponzoña por si se había acabado de hacer aquella otra flauta que le pidió ya hacía meses.

Las monedas ganadas en aquella misteriosa misión con Portaestandarte habían acabado todas en la olla de Astado. ¿Quién las habría conseguido, revolviendo con el cazo aquel guiso siempre cambiante, nunca acabado, cuyo fuego jamás se apagaba del todo?

Durante la fiesta permaneció tranquilo junto a los demás -jamás decía palabra, el Otro-. Olfateaba si alguien pasaba cerca. Se había acercado al grog y arrugado al instante la nariz, como si aquello fuera veneno.

Cuando aparecía Pipo en aquel cuerpo de ébano, iba corriendo a buscar su peluca y sus abalorios. Luego le sobrevenía el cambio y la peluca aparecía tirada y sucia por cualquier rincón, porque el Otro afectaba indiferencia por esas cosas. Hoy no tenía peluca ni abalorios. Estaba completamente desnudo. Sus armas estaban cerca, a mano.

Por supuesto, el Otro no sabía tocar la flauta.

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20/05/2016, 17:32
Sabandija.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: DUODÉCIMO (MES DEL JAGUAR, TERCERO DEL OTOÑO).

DIA: CATORCE DEL MES.

Sabandija caminaba lento y cabizbajo por el campamento de la Compañía, casi arrastrando los pies y con la mirada fija en el suelo como cuando exploraba el terreno en busca de caza. El pelo de elaborado trenzado caía a plomo ocultando su rostro, sólo visible cuando con un gesto delicado de su mano lo retenía tras la oreja. Entonces se dejaba ver una mirada vidriosa de profunda tristeza.

El explorador K´Hlata venía del campo de entrenamiento de la Compañía del que había huido al ver entrenando allí al gigantón de Campaña. No estaba seguro de si le había visto o no, enfrascado como estaba en un entrenamiento brutal e inhumano, pero casi le había aplastado con una de esas gigantes piedras en un momento en que la había dejado caer al suelo. Eso había sido demasiado para el asustadizo corazón de Sabandija quien, pegando un brinco, salió escopetado dejando para oro día su primer entrenamiento de tiro con arco.

Se quejaba ahora por dentro de su cobardía. ¿Se fijaban acaso los hombres en las diminutas hormigas que pasaban alrededor? Eso era lo que era en comparación con el gigante, una hormiga. Sin embargo, no se arrepentía de haber vuelto al Campamento. Aunque no hubiera sido intencionado y Campaña no le hubiese visto, Sabandija no quería encontrárselo durante una larga temporada. El era una sabandija que se encontraba más cómoda arrastrada por el suelo y no una jirafa, capaz de alimentarse, gracias a su habilidosa lengua, con el fruto de las espinosas acacias. Eso era Campaña para él: una gigante y espinosa acacia cuyo fruto, la mercenaria Sierra, estaba prohibido para alguien como él.

¡Y vaya que lo había probado! Estaba agradecido por ello, incluso había llegado a fantasear en su cabeza con algo más, ebrio como había estado de su aroma. Pero poco a poco se había ido enfriando, recapacitando, hasta volver a ser el mismo Sabandija de siempre. Su razón le decía que debía mantenerse alejado de aquella mujer cuyo único y verdadero amor era la guerra.

Eso le diré si me pregunta. A ella sólo le interesa la Guerra.

A pesar de todo el profundo dolor que sentía por la muerte de Ojopocho, recordar aquel tórrido momento hizo que su entrepierna, de voluntad independiente, se alegrase un poco.

¡Basta!

Apresuró el paso hacia la zona reservada a los de su pelotón. Allí buscó un lugar tranquilo y protegido del radiante sol para sentarse en el suelo con las piernas cruzadas. De su zurrón vertió en el suelo el material que había recogido: unas piedras de corte afilado y algunas maderas de gran dureza. Con uno de sus cuchillos que solía usar para el despiece de pequeñas presas de caza comenzó a tallar la madera, sacándole punta. Había buscado ramas pequeñas y duras que se dividían en tres o cuatro direcciones y que confluían en un punto. La idea era que lograran reposar en el suelo con una de las puntas hacia arriba. De esa manera alguien que fuera descalzo podría clavárselas en los pies. 

No tardó mucho Sabandija en sudar. La madera era dura, no podía ser de otra manera, y su brazo herido estaba atrofiado. Apretó los dientes para soportar el dolor que los tendones al moverse le producían. De vez en cuando paraba y se frotaba la zona dolorida con la otra mano. Lo que había notado desde que le hirieran y comenzase su recuperación era que, cuando llevaba un rato moviendo el brazo, aunque le doliera en un principio, parecía funcionar mejor. Cuando se quedaba largo rato parado el brazo parecía sumirse en un soporífero sueño del que resultaba doloroso sacarlo. Por eso pensaba que aquel trabajo de artesanía le vendría bien para su recuperación, aunque se hubiese hecho ya a la idea de que no sería nunca total.

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21/05/2016, 13:22
Grito, Infantería, Escuadra Barril.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO

Avanzaba la noche y la borrachera de Grito mientras acompañado por quien quisiera unirse, superada la fase etílico-depresiva, cantaba sobre un barril vacío. Palmeaba las manos y los pies mientras movía rítmicamente la cabeza, espoleando las palmas de la gente con ávido interés. Lamentaba mentalmente que Pipo no pareciese interesado en tocar la flauta, a decir verdad estaba sospechaba que era algo así como un otro yo lo que tenía el explorador dentro de sí, era una lástima pues una flauta daría a la canción la chispa adecuada.

Realmente la canción le parecía más divertida que cualquier otra que hubiese aprendido en las tabernas del mundo, aquellos tipos de Cho'n Delor sabían divertirse y más en una ciudad tan deprimente y oscura. Cantaba a gritos, divertido y jovial. Era el último día del año y la última oportunidad de ser feliz antes de que subiesen allá arriba. Su voz sonaba un poco trabada pero la canción decía tal que así:

Si te follas a una vaca, no te importe que muja,
Que seguro que disfruta más que tú la granuja,
Prueba con un tigre, si te llegas a atrever,
Pero al puercoespín no se le puede joder.

Refresca mucho hacérselo a un pescado
Y seguro que a nuestras mascotas les va el sado.
E incluso a la jirafa con lo alta que es,
Pero al puercoespín jamás se le puede joder.

Follar con serpientes aunque arriesgado es muy bello,
E igual de emocionante que tirarte a un camello.
Jode a un caracol si su ritmo puedes adoptar
Pero al puercoespín jamás te lo podrás follar.

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21/05/2016, 19:03
[RIP] Pipo.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO

Miró y escuchó con todo el cuerpo a Grito cuando se arrancó a cantar por folledares; con grave intensidad parecía absorber cada sonido, pero se mantuvo igual de relajado, como si estuviera dándose un baño con el ambiente que se respiraba.

Cuando le picaba, se rascaba las pelotas sin reparo: no es que anduviera por ahí con elegancia felina.

El ambiente se podía recoger con una cucharilla, con solo agitarla. Sudor rancio, heridas supurantes, hierbas, polvo, el relente de la noche que acuchillaba las vaharadas de la hoguera humosa, carne, licor, cuero mal curtido. Trasegaba todo aquello en suspiros completos pero casi invisibles. Ocurría que, si uno se fijaba, se veían las costillas separarse, estrecharse, separarse, y así.

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25/05/2016, 22:19
Plumilla.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: JAGUAR (FINAL DEL OTOÑO).

DÍA: FINAL DEL MES Y DEL AÑO.

La tristeza embargó la mirada de Plumilla al acordarse de Ojopocho. Su muerte había supuesto un golpe para ella, había sido como un hermano para ella, siempre preocupándose por la curandera de una forma amable y gentil y aún le costaba creer que no volvería a verlo. Pero lo había intentado superar por el bien de su hermano, a quien le afectaba aún más que a ella. 

Forzó una sonrisa y miró a Sabandija con una dulce expresión en su rostro cargado de comprensión.

- Comprendo tu tristeza, hermano, yo misma siento un peso en el corazón cuando recuerdo a nuestro hermano. Era para mi más que un hermano y más que un amigo, pero no podemos dejar que eso nos hunda - pasó un brazo por sus hombro y se acercó a él casi dándole un abrazo - eh - le dijo suavemente con un tono animado - no te preocupes, ya verás como vengamos a Ojopocho. Tarde o temprano volverán y entonces tu y yo podremos vengarlo. Hasta entonces, estaré a tu lado apoyándote. Ahora más que nunca, estoy más contenta de tenerte como hermano de capa, pues me parece estar haciendo honor a su memoria uniéndome a ti. Yo no puedo enseñarte a usar el arco, pero nunca te faltará un buena cura cuando te hagas una herida entrenando - le guiñó un ojo con complicidad.