Ioseph se despertó con un grito y se atragantó con el último trago de la poción. Entre toses y resoplidos arrancó la flecha que le asomaba del pecho y se incorporó manoteando. Mientras recuperaba el aliento, agarrado al marco de la puerta como si el suelo se fuera a abrir en dos para tragárselo, se dominó lo suficiente para recordar dónde estaba y por qué.
-¿Q-qué ha pasado? -murmuró mientras Anevia acababa con la mestiza.
Mientras Ioseph se recuperaba me acerqué a la mujer, ya muerta, y cogí el arco y las flechas sin preocuparme demasiado por la mestiza. Quería analizar el arco y ver si era mejor que el mío y si me podría manejar bien con él.
Una vez analizado aquello me giré hacia Coriander. Puedes curarme? Esa mestiza metía bien...
Kevveon se acercó al paladín y vio que seguía con vida.
-Me alegro de que estéis bien, habéis estado a punto de no contarlo, maese Merrion. Estos mestizos sin duda saben luchar.
No pudo dejar pasar el comentario de Cage. Después de casi perder a un compañero, el pícaro se preocupaba de sus rasguños y del tesoro de los muertos.
-Cuando maese Merrion esté completamente curado se os auxiliará a vos... O bien podéis buscar entre los restos alguna poción, ya que tanto os gusta. -Sir Alas Negras concluyó el comentario de su amo-. Grraaack ¡Ladrón!
Las palabras de Kevveon llenas de veneno hicieron que enarcara una ceja. Curioso... me llamáis ladrón pero luego usáis "los restos" que encuentro... Muy honorable, señor. Dije, haciendo una reverencia exagerada y reprimiendo una mueca de dolor debido a las heridas.
Me incorporé y seguí metiendo las flechas de la mestiza en mi carcaj.
-¡Será posible! -chilló el humano, levantando las manos ensangrentadas con rabia-. ¿De dónde has salido tú, mocoso felino? ¿Que usamos lo que encuentras? ¿Cuándo, antes o después de que te quedes con lo que te interesa a ti sin consultar al resto? ¿O es que Anevia no querría usar esas flechas y ese arco tanto como tú, y acaso no le pertenece el botín por haberse encargado de ella? ¡Merrion ha estado a punto de morir y ni siquiera te has dignado a preguntarle cómo se encuentra! Lo primero que has hecho ha sido echar mano del botín y pedir que te curen. ¡Por todos los dioses! ¡Menudo forúnculo nos ha salido en el trasero!
Coriander dijo lo mismo que el Tiflin. Nada de curar a Cage sus rasguños cuando Iospeh tenía una flecha clavada en el cuello, el gato tenía que esperarse. Mientras el resto discutían, ella se acercó al paladín y apoyó las manos derca de su herida con su permiso.
Motivo: laklafk
Tirada: 1d8
Resultado: 6
La mestiza llevaba encima un camisote de mallas de gran calidad, un arco largo de gran calidad (ahora en manos del félido), dieciséis flechas, dos pociones de curar heridas leves, una varita, un símbolo de obsidiana de Baphomet y 34 monedas de oro.
De repente, todos excepto el paladín, aún aturdido por la pérdida de sangre, pudieron escuchar la llegada de dos enemigos más por la puerta que habían dejado abierta a su espalda.
Tirada oculta
Motivo: sigilo
Tirada: 2d20
Resultado: 11
Tirada oculta
Motivo: percepcion anevia
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 8(+5)=13 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: percepcion cage
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 10(+7)=17 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: percepcion coriander
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 17(+1)=18 (Exito)
Tirada oculta
Motivo: percepcion ioseph
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 7(+1)=8 (Fracaso)
Tirada oculta
Motivo: percepcion kevveon
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 18(+2)=20 (Exito)
Motivo: iniciativa cultistas
Tirada: 2d20
Resultado: 13(+3)=16, 13(+3)=16
Motivo: iniciativa anevia
Tirada: 1d20
Resultado: 4(+7)=11
Motivo: iniciativa cage
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+4)=24
Motivo: iniciativa coriander
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+4)=11
Motivo: iniciativa ioseph
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+2)=21
Motivo: iniciativa kevveon
Tirada: 1d20
Resultado: 11(+3)=14
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Orden: Cage (24), Ioseph (21), Cultista 1, Cultista 2 (16), Kevveon (14), Anevia (11), Coriander (11),
El arco largo da un +1 al ataque por ser de gran calidad. Pero como no tienes competencia con un arco largo, tienes un -4 a tus ataques con él.
Retrocedí hasta colocarme detrás de Anevia y cargué una flecha en el arco de la mestiza para atacar a la enemiga más avanzada. No había tiempo para charlar. No es momento para discutir... tenemos visita. Susurré mientras soltaba la flecha.
De nuevo apareció aquella sonrisa, esta vez acompañada de un brillo en mis ojos felinos. El ataque había dado en el objetivo y no parecía ser precisamente suave.
Motivo: ataque cultista
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 20(+2)=22 (Exito)
Motivo: critico cultista
Tirada: 1d20
Dificultad: 13+
Resultado: 4(+3)=7 (Fracaso)
Motivo: daño cultista
Tirada: 1d6
Resultado: 6(+1)=7
Motivo: furtivo cultista
Tirada: 1d6
Resultado: 5
12 daño a la primera XD
Mientras que la cultista herida daba un paso adelante tras lanzarse un hechizo que curó parte de las consecuencias del flechazo, la otra atacó con rabia al paladín, que tenía delante. Su guja se clavó bajo su axila varios centímetros.
Motivo: curar
Tirada: 1d8
Resultado: 2(+1)=3
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+5)=20
Motivo: daño
Tirada: 1d10
Resultado: 7(+3)=10
Turno del resto.
No quería discutir con nadie de sus compañeros así que, aunque desagradable, la interrupción de los cultistas le vino bien. Mediante su telequinesia lanzó la maza directo al cultista al que Cage había herido, con la intención de dejarlo fuera de combate.
-פּאַיייבאַאַאַאַאַאַ קאָרדעראַאַ- Gritó mientras señalaba a su objetivo.
Motivo: Maza voladora
Tirada: 1d20
Dificultad: 11+
Resultado: 12(+6)=18 (Exito)
Motivo: Daño
Tirada: 1d8
Resultado: 3
Ataque: +1 AT +1 Maza +4 INT
Daño: 1d8 +1 de la maza -1 FUE
Anevia no había hecho demasiado caso a la discusión, se había quedado mirando el amuleto de Bahomet que poseía la mestiza...
Pero ahora habían llegado nuevos enemigos, y se cebaban en Ioseph. La mujer avanzó hacia ellos. Y se colocó delante del primero, saliendo por detrás de Cage y Keveon y tensando el arco a placer en la cara del ser.
—¿Quiénes sois vosotros? ¿Por qué ayudáis a los mestizos que adoran a Ba...?
Y entonces vio a los recién llegados. Su casco les delataba.
—¡Traidores! ¡Escoria vendida a los demonios!— gritó tensando aún más el arco y disparando a quemarropa.
Motivo: flechazo EN SU CARA
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+6)=13
Motivo: daño?
Tirada: 1d6
Resultado: 6(+1)=7
Muevo tres casillas, Cage, Keveon e izquierda, paso por Cage y Keveon porque me dan "soft cover" contra el ataque a distancia de la guja. Tres casillas que muevo (muevo seis entre dos porque soy coja), me pongo al lado y le tiro una flecha. No puede hacerme AdO salvo que tenga arma de corto como improved unarmed combat o dote parecida (la guja no le vale).
When making a melee attack against a target that isn't adjacent to you (such as with a reach weapon), use the rules for determining cover from ranged attacks.
Soft Cover: Creatures, even your enemies, can provide you with cover against ranged attacks, giving you a +4 bonus to AC. However, such soft cover provides no bonus on Reflex saves, nor does soft cover allow you to make a Stealth check.
Si doy a 13, 7 de daño.
Coriander se levantó y apremiada por el instinto se protegió con uno de sus conjuros maldiciendo el día en el que había decidido volver a la ciudad en la que empezó su calvario.
Armadura del mago.
Seguí con el mismo arco, con la esperanza de volver a dar a mi objetivo. Cargué la flecha y la lancé, pero ni siquiera estuve cerca. Mierda... Tal vez deba usar mi arco, este es demasiado grande.
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Dificultad: 13+
Resultado: 8(+2)=10 (Fracaso)
Ioseph esta siguiendo la discusión a medias, y si no hubiera sido por los gritos y el dolor ni se hubiera enterado de la llegada de más enemigos. Sentía una vaga indignación hacia Cage, que se había mostrado tan insensible, y hacia la cultista que le había herido con el arma de su diosa, pero no se detuvo a pensar en ello. Se llevó la mano a la axila, donde acababa de herirle la guja, y el dolor remitió.
Guiado más por el deseo de no sufrir más heridas que por el de ver caer a sus enemigos, Ioseph dio un paso al frente y trató de hundir la guja en el cuello de su enemiga.
Motivo: idm
Tirada: 1d6
Resultado: 5
Motivo: donde vas con manton de manila
Tirada: 1d20
Resultado: 10(+4)=14
Motivo: donde vas con vestido chines
Tirada: 1d10
Resultado: 5(+7)=12
http://pyromancers.com/media/view/main.swf?round_id=69956
me curo 5, si el ataque da 12 de daño a Cultista (que no Cultista 1).
El flechazo de Anevia derribó a la enemiga de yelmo astado, mientras que la otra chilló de dolor al encontrase con la guja del paladín. Sabiéndose superada, concentró sus últimas fuerzas en un ataque dirigido a arrebatar la vida de su enemigo.
-¡¡MUERTE... A... SHELYN!! -gritó mientras le apuñalaba con la hoja de la guja.
Motivo: ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 17(+5)=22
Motivo: daño
Tirada: 1d10
Resultado: 1(+3)=4
La cultista se había retirado, pero ahora las paredes de la habitación, la configuración táctica favorecía a los servidores de los dioses del Bien.
Beth, estás pensando por mí otra vez, yo no he pensado acerca de una "configuración táctica" en mi vida, y dudo que me lo hayas explicado jamás... así que me lo has debido pegar... no voy a pensar cómo.
Anevia avanzó hasta un lado del paladín, que defendía la entrada, y al soltar la flecha, se dio cuenta que estaba tratando de animarse, de pensar en positivo otra vez, aunque sólo en su cabeza. Con otros compañeros habría dicho algo. Hubiera soltado una de las suyas. Pero estos eran demasiado serios, estaban demasiado desesperados. Aunque algo de esperanza se colaba entre las grietas de la bola de desesperación en la que estaban metidos.
Que la flecha se hubiera clavado en la cultista ayudaba a todo esto, claro.
Motivo: Disparo a la última cultista
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+6)=21
Motivo: Daño
Tirada: 1d6
Resultado: 4(+1)=5
Muevo una casilla en diagonal, (que me cuesta tres) a un lado del paladín y con cobertura (para no llevarme AdO) desde la esquina la flecheo.
http://pyromancers.com/media/view/main.swf?round_i...
Las dos cultistas que acababan de irrumpir murieron. Todo se volvió silencioso de nuevo.
Ioseph había soltado su arma antes de que Anevia acabase con la segunda cultista. Desaparecido el peligro inmediato, se dejó caer en un rincón y enterró la cara entre las manos. Estaba luchando muy duro por no derrumbarse, e iba perdiendo. La oscuridad, la violencia, el dolor y la preocupación por lo que pudiera estar pasando en la superficie habían sido ya difíciles de mantener a raya, pero aquello era demasiado. Los demonios eran corruptos y malvados por naturaleza, y el enano Millorn había perdido el juicio, pero aquellas mujeres habían dado la espalda a la bondad, al amor de sus iguales, y habían traicionado a toda la ciudad. Ioseph, que jamás había creído que nadie que no fuera el villano de una historia pudiera hacer algo así, era incapaz de comprenderlo.
Envolvió su símbolo sagrado con los dedos y se llevó el pájaro, tallado en el disco de madera y con el cuerpo pintado de blanco y la cola de siete colores, a los labios. No tenía claro si buscaba consuelo en Shelyn o si trataba de contener la blasfemia de la mujer, impidiendo que sus palabras llegaran a oídos de la diosa.
Entre las pertenencias de las cultistas muertas encontraron dos camisotes de mallas de gran calidad, dos gujas de gran calidad, dos dagas, una bolsa de componentes de conjuros, dos símbolos impíos, diez monedas de oro y una poción de curar heridas leves, otra de algo que no conocían, un pergamino y una frasca de agua sacrílega.
Suspiré y me guardé el arco largo. No era un arma que supiera usar, aunque con el tiempo aprendería, y aquel arco parecía de gran calidad, así que no lo iba a dejar ahí tirado. Contemplé los cadáveres de las mujeres, intentando entender su motivación por morir de aquella manera. Supongo que creerán en su causa o algo por el estilo...
Me encogí de hombros, apartando aquellos pensamientos inútiles de mi mente y miré a Ioseph con curiosidad. Algo parecía estarle pasando al hombre, lo había notado antes, pero no le había dado demasiada importancia. La última vez fue con los mestizos, y ahora...
Mis ojos brillaron, preguntándose si era eso lo que le ocurría, pero decidí no saciar mi curiosidad y dejarle espacio al hombre, por el momento al menos. Aunque claro, si seguía por ese camino... Al final iba a conseguir que lo matasen y eso no me interesaba lo más mínimo. No creía que pudiéramos salir de bajo tierra sin él.
Te encuentras bien? Le pregunté despreocupadamente mientras me sentaba a su lado y le ofrecía un poco de comida y yo tomaba otro poco.