Partida Rol por web

Los Dhaeva de Transilvania.

TERRITORIO 23: Bucarest/ Ciudad de la Alegría.

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17/03/2010, 21:01
Vlava Szantovich.

Vlava vió cómo todo estaba a punto

- ¡Durius!

Se dirige hacia su prometido, y le habla suavemente.

- ¿Te vas sin decir nada? ¿Hay...hueco para mí en tu empresa? Este castillo me hastía, me mata... Dice lo último con autentico pesar

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19/03/2010, 21:54
Durius de Slobozia.

- Vlava - digo un tanto sorprendido por su presencia -. ¿Un hueco? Lo cierto es que me dirijo al campamento de mis súbditos aquí en Bucarest. Les llevo algunos alimentos y hablaré con ellos para regresar casi de inmediato. Siento que el castillo te hastíe. Te pido disculpas. Debería haberte dedicado algo de tiempo, pero he estado muy ocupado de la mano del Regente. Dudo que esto te vaya a resultar mucho más interesante - digo mirándola -... pero ven si quieres. Me complacerá cabalgar contigo y presentarte a mi pueblo.

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19/03/2010, 22:14
Vlava Szantovich.

Vlava sonrió

- Si es contigo, seguro que estoy bien, y sí, a mi también me gustaría conocer a tu pueblo

Miró a su alrededor

- ¿Hay tiempo para preparar otro caballo o quieres que monte contigo? Aunque...no creo que lo viesen muy decoroso...

Ya fuese en el mismo o en distinto caballo, podrían hablar un rato, y le preguntaría por las nuevas, de las que, se temía, no tenía mucha información.

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19/03/2010, 22:36
Durius de Slobozia.

- Mejor en otro, mi dama - respondo con una sonrisa -. El decoro de una señora de vuestra posición, no solo debe existir, debe demostrarse - afirmo exageradamente -. ¡Que preparen un caballo para la dama Szantovich!

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19/03/2010, 22:53
Vlava Szantovich.

Malditas leyes morales...¿qué más daba? ¿qué iban a hacer en el caballo ahora que no fuesen a hacer en poco tiempo, cuando estuviesen casados?

- Gracias por pedirlo por mi...

Se tomó el brazo derecho con la mano izquierda, en un gesto algo coqueto.

- Espero que tengas ganas de hablar, porque pretendo enterarme de todo lo que has estado haciendo estas semanas...si no te importuna, claro...

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20/03/2010, 02:09
Lacayo Feudal.

Un lacayo prepara un corcel para la doncella Vlava Szantovich. Se espera que monte al modo de una dama, con las dos piernas hacia un mismo lado del caballo.

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20/03/2010, 02:25
T23: BUCAREST.

- La comitiva del Caballero Durius de Slobozia y su prometida Vlava Szantovich llega al barrio de chavolas junto a la muralla sur de la ciudad, donde se han instalado muchos refugiados de otros territorios, incluidos los de Slobozia.

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20/03/2010, 11:27
Durius de Slobozia.

- Puedes preguntar cuanto quieras, Vlava y te responderé - digo a la petición de mi futura esposa, mientras atravesamos las calles de la ciudad -. Han sido días trabajosos y difíciles. El Regente no se encuentra en buen estado de salud, cosa que me preocupa. Asimismo, el Abad ha muerto y el hermano Ciferinos ha ocupado su lugar como heredero natural al cargo. A ello habría que sumar la llegada de un joven, Maserrak de Flambeau, que ha encabezado a los refugiados de mi pueblo hasta Bucarest. A estos niveles, debo comentarte algo. Debes ser discreta, muy discreta. El sacerdote, así como los otros sacrificados a tu criatura, fueron enviados por el tal Maserrak a mí, para solicitar mi ayuda. He mostrado ignorancia acerca del destino de los mismos. Dudo que nadie te pregunte, pero el silencio y la discreción son nuestras mejores bazas. Por lo demás, todo continúa igual. Debo llevar a cabo una misión diplomática para con el líder magyar ofreciéndole la paz y una esposa, Sveta Basarab, así como un oficio religioso de tal sacramento de la mano del actual Abad Ciferinos. Con el cual deberé hablar a mi regreso tras nuestra visita al campamento. Como podrás comprobar, apenas si disfruto de tiempo para mí. Pero espero no sea por demasiado tiempo y pueda dedicarte la atención que te mereces. Bien, parece que hemos llegado.

Me subo sobre los estribos y observo alrededor.

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20/03/2010, 12:02
Durius de Slobozia.

Nuestra comitiva llega a la zona de los refugiados. Apenas si he sido consciente de ello mientras hablaba con mi prometida, pero sí, hemos llegado.

Me pongo en pie sobre los estribos y observo alrededor, vislumbrando el ruido y el bullicio, la suciedad y las fogatas. Rostros sin esperanza en algunos casos, asustados en otros, marcados por el dolor a veces. Solo los niños, inmunes a un pesar prolongado, juguetean aquí y allá.

- ¡Maserrak! ¡Maserrak de Flambeau! ¡Busco a Maserrak de Flambeau! - grito.

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20/03/2010, 20:01
Maserrak de Flambeau.

Me encuentro sentado junto a una de las fogatas, calentando mis helados huesos mientras como algo de comida. Aquí, al abrigo de la muralla, la pasarela superior me guarece de la posible lluvia, mientras al calor le place esta esquina. Cuando noto que he recuperado algo mis energías, un par de niños desaliñados se acercan corriendo. ¡Cómo envidio su inocencia! Ajenos a nuestra situación, son un soplo nuevo y revigorizante. Su risa parece el bálsamo para nuestras desgracias. Pero ... parece que se dirigen hacia mí.

Algo incómodo por su cercanía, me incorporo a la espera de sus palabras. Me sorprende que recuerden mi nombre y mi cara.

- ¿Decís que un hombre rico a lomos de un caballo, acompañado por soldados, me busca gritando mi nombre? Por favor, mostradme dónde se haya.

Preocupado e intentando no mostrar mi nerviosismo, sigo a los dos niños.

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21/03/2010, 12:04
Vlava Szantovich.

Vlava se subió al caballo feliz. Hacía aprendido desde hacía tiempo a montar en la extraña silla amazona, de hecho, es la silla que deben usar las damas.

Durante el viaje escuchaba y asentía a Darius, que la podía al día de todo lo ocurrido en esos últimos días. Algunas cosas se había enterado, por la magnitud de los hechos, otras las desconocía, por ser de un ámbito más personal dentro de lo hecho por Durius

- No os preocupeis, Durius, cariño...Rosch es discreto y yo no es que vaya a ir diciendo por ahí lo que he hecho...No es algo que tenga por qué conocer nadie que no sea allegado mío, alguien de mi ámbito privado.

"Sería como tu condición vampírica, que no la vas promulgando tampoco por ahi" Pensó terminando la frase.

- Yo solo he estado leyendo, paseándome por el castillo, que a mi pesar, no tiene si biblioteca, y matando el tiempo como buenamente he podido...Ya os dije, un hastío

Una vez hubieron llegado, se quedó en silencio, esperando, esperando y escuchando.

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22/03/2010, 18:37
Mozo Campesino.

Un muchacho lleva a Maserrak a donde se encuentra el noble Durius con su comitiva.

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24/03/2010, 14:44
Maserrak de Flambeau.

A través de la miseria y la desesperación, el niño me conduce hasta una calle cercana. Se puede escuchar cierto griterío y a medida que nos acercamos, percibo el nerviosismo en la gente. Algunos de ellos corren en la misma dirección que nosotros, lo que confirma la presencia del noble caballero y su comitiva.

Ya con cierta dificultad, me abro paso entre la multitud que se agolpa en este tramo. Con cierto esfuerzo, alzo mi brazo y busco la atención del caballero Durius.

- ¡Mi señor, mi señor!  ¡Aquí, soy yo, Maserrak! - por desgracia, pierdo de vista al niño que me ha guiado hasta aquí. Por unos instantes, me preocupa su seguridad. Tanta agitación puede ser peligrosa. Aún recuerdo lo ocurrido a la llegada del Abad Lucius Sempronius y a la fébril marea humana congregada allí.

- Espero que los hados nos sean propicios - es un pensamiento que sale de mi boca inconscientemente.

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25/03/2010, 18:52
Durius de Slobozia.

- Buenas noches, Maserrak de Flambeau - saludo con una sonrisa -. Debéis disculpar mi retraso. Ha transcurrido más tiempo del que me hubiera gustado, pero por fin me hallo aquí. Y traigo algo que espero ayude a mi pueblo - digo señalando con la cabeza los dos carros que traemos -. Hacedme un favor y conducidnos a la zona en la que mi pueblo se concentra. Deseo hablar con ellos y con vos.

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29/03/2010, 12:36
T23: BUCAREST.

- Maserrak conduce a Durius a donde están acampados la mayoría de refugiados de Slobozia.

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29/03/2010, 15:11
Maserrak de Flambeau.

Cuando llegamos hasta el grupo de refugiados, dirijo unas palabras a mis compatriotas.

- Amigos, escuchadme todos. He aquí al Caballero Durius de Slobozia, vuestro señor. Como os dije, ha venido a ayudar a su pueblo en estos difíciles tiempos. Y ahora desea deciros unas palabras.

- Mi señor, cuando os plazca - me hago a un lado para ceder el protagonismo al caballero.

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29/03/2010, 22:11
Durius de Slobozia.

Los veo, los miro y soy consciente de las miradas clavadas en mi persona. Durius puede que no represente gran cosa para ellos. Solo es el heredero de Sidor, su anterior señor, y llegó al pueblo como simple ayudante de su tío. Ahora soy su señor. Ahora soy Durius de Slobozia y no Durius de Tremere.

- Pueblo de Slobozia. Por fin me hallo reunido con vosotros en estas horas aciagas. Maserrak de Flambeau ya me ha puesto en antecedentes acerca de todo cuanto os ha acaecido y habéis sufrido. Vengo a vosotros con un mensaje de esperanza. El fin de todo esto está próximo. La paz está cercana. No será fácil, no será algo inmediato. Pero llegará. Antes de lo que quizá os atreváis a soñar. Mientras tanto, deberéis soportar las inclemencias de la condición de refugiado. Aquí, entre los muros de nuestra amada capital estaréis a salvo. Pero obrad como las buenas y honradas gentes que sois y dad ejemplo de cómo las buenas gentes de Slobozia saben enfrentarse a la adversidad con entereza. Evitad los conflictos, los hurtos, las peleas y la mendicidad. Espero y así os lo digo que en una estación todo habrá concluido y podremos regresar a nuestras tierras, a nuestras casas, a nuestras vidas. Y en la búsqueda de esa ansiada paz, nuestro Regente, Uber Caprescu ha confiado en mi persona. Mientras tanto, durante mi ausencia, dejo la custodia de mi pueblo, de todos vosotros, a Maserrak de Flambeau que ha demostrado su liderazgo y buen hacer durante todo este tiempo y que supo traeros con bien a la capital. Por mi parte, he considerado que sería bien recibido el presente que veis a mis espaldas. Dos carros repletos de comida, grano, verduras, algo de carne, que deberían bastaros bien administrados para complementar vuestras reservas de víveres y aguantar hasta que podáis iniciar el camino de vuelta. Rezaré por todos vosotros.

Concluida mi arenga, me inclino levemente al oído de Maserrak.

- Quisiera hablar con Pavetta. ¿Sabéis dónde está y dónde podría hablar a solas con ella?

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30/03/2010, 15:08
Maserrak de Flambeau.

- Si, mi señor. Puedo llevaros hasta allí ahora mismo, si os place. Vuestro pueblo os estará muy agradecido y recordará este día durante mucho tiempo. Habéis hablado con nobleza y vuestro gesto os honra. Me siento orgulloso de poder serviros.

Mientras acompaño al caballero al lugar donde recuerdo haber visto a Pavetta y a su hijo, me gustaría hablarle sobre un tema que me inquieta:

- Quisiera hablar con vos, mi señor, en cuanto vuestros deberes os lo permitan - mientras digo estas palabras, miro fugazmente a la mujer que acompaña al caballero. Desconozco cúal es su papel en todo esto y prefiero que no esté al corriente de mis inquietudes. Tal vez cuando hayáis hablado con Pavetta tengáis tiempo para mi persona. Os lo agradecería.

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31/03/2010, 10:36
Durius de Slobozia.

- Si hay tanta urgencia como vuestras palabras y gestos parecen demostrar, podemos hablar ahora mismo - digo. No me ha pasado desapercibida la mirada dirigida a Vlava y puedo entender su discreción -. Pero perdonad mi descortesía y permitidme que os presente. Ella es la muy noble Vlava Szantovich, mi prometida y futura esposa. Mi señora, él es Maserrak de Flambeau, a quien debo mucho pues gracias a él, mi pueblo ha podido huir del ataque y ocupación magyar. Podéis hablar con entera libertad en su presencia, pues la discreción es uno de sus dones. Pero si preferís hacerlo en privado, no nos ofenderéis y acataré vuestros deseos, Maserrak.

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01/04/2010, 15:07
Maserrak de Flambeau.

- Agradezco vuestro interés, mi señor.

Con una leve inclinación de cabeza, me dirijo a la señora.

- Es un placer conoceros, mi señora, aunque las circunstancias sean las menos propicias. Estar al lado de vuestro prometido os honra y su pueblo, que pronto será el vuestro, sabrá agradeceroslo.

- El tema que me preocupa es la designación de mi persona como responsable de los refugiados de Slobozia en vuestra ausencia, mi señor. Aunque es cierto que me responsabilicé de ellos frente a Dagu y el Consejo y les he guiado como buenamente he podido hasta Bucarest, no soy, ni mucho menos, un lider carismático ni hombre que tenga el suficiente temple para hacerse respetar en circunstancias adversas. Ni siquiera soy un hombre de armas. - me muevo un poco hacia los lados,  gesticulando nerviosamente y agachando la cabeza, rehuyendo la mirada del caballero y la señora. - Temo que si las cosas empeoran, no pueda estar a la altura de vuestras expectativas. Además, desconozco el respeto que pueda recibir de vuestro pueblo más allá de ser un refugiado más, aunque con vuestro discurso, claramente me habéis posicionado en un nivel superior al suyo.

- Con esto no quiero decir que no agradezca lo que habéis hecho, sobretodo trayendo comida para la gente. - ahora mi nerviosismo es más evidente. - Os ofrecí mi ayuda para los acontecimientos que han de venir, sobretodo los relacionados con el fin de la guerra y de esta miseria y desesperación. Si consideráis a bien que con este cargo será como mejor pueda serviros, lo aceptaré gustosamente.