Partida Rol por web

Nothgoth - Memento Mori

Capítulo 3: Promesas y Cenizas

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14/04/2016, 22:53
Silvano

-Parece que el pez gordo no es tan popular como parecía. Al final vas a tener razón y todo respecto a la pila de espadas que se desmorona sola. -comenta por lo bajo mientras sigue caminando al lado de Gustav en busca de la taberna.

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14/04/2016, 22:57
Gustav Andersen

Sonrio mientras camino. - Traer un ejercito genera tensión y puede ser una oportunidad perfecta para encender las llamas del cambio. -

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14/04/2016, 23:17
Silvano

-Les tienes mucha tirria a esos tíos, ehhh. Parecían un blanco fácil cuando se han subido a la carroza... lástima. -dice mientras chasquea los dientes. -Pero recuerda lo que nos ha dicho Hannah, ya tendrás tiempo de consumar tu venganza. No quiero salir corriendo de la ciudad sin tener un rumbo fijo. -añade mientras gesticula abiertamente con los brazos.

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15/04/2016, 06:07
Gustav Andersen

Miro a Silvano con gravedad. - Si solo fuera mi venganza personal la que me impulsa, hubiera matado al general con mis propias manos delante de la multitud. Pero quiero cambiar algo, no podré hacerlo si perdemos el factor sorpresa. -

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15/04/2016, 21:01
Director

Gustav, Smith y Silvano continúan su camino, sin compartir muchas más palabras salvo por las breves indicaciones de Gustav. Finalmente llegan hasta una posada bastante apartada de todo el bullicio que había en la ciudad. Cuando entran, está completamente vacía, pero aún así se encargan de reservar una habitación para esa noche, asegurándose de pagar de más por tal de que al posadero no se le ocurriera dejarlos sin la misma en un acto de avaricia. 

Con la habitación confirmada, sólo les restaba llegar hasta la plaza dónde habían quedado en reunirse de nuevo con Hannah, que no estaba muy lejos de la posada. Tras varios minutos, y antes de lo que había dicho, Hannah termina por aparecer, caminando entre la gente con naturalidad. En cuanto detecta al grupo, les hace un gesto para que la sigan. 

Una vez apartados de miradas y oídos indiscretos, Hannah los hace juntarse en circulo para informarles de lo que había descubierto. En primer lugar les dice que efectivamente había encontrado al Jarad en la ciudad, o de forma más precisa, la habían encontrado a ella debido a que uno de los destinados a la ciudad conocía a Hannah. Al mismo le había informado de todo los altercados que habían sucedido durante el viaje, incluyendo en dicha descripción la muerte de Pals, y le había entregado la carta de Silvano para que la enviara en cuanto fuera posible. 

En cuanto acabo con todos los detalles sin relevancia, llego la revelación importante.

Parece que esto es más grande de lo que nos temíamos. Si los rumores son ciertos, el objetivo de Lord Escorpión es atacar la capital, y lo más seguro es que esté intentando pactar alianzas con los Hollster y con los Khanforn... Todo el mundo espera que Lord Hollster haya aceptado ya que Lord Escorpión sigue en sus tierras... Aunque después de las acusaciones que recaen sobre él no tenía otra opción. Pero nadie sabe nada de Lord Khanforn aún... Cómo ya sabíamos, la última pista de él es que abandonó Gloryhill junto con Lord Escorpión. - Frunce el ceño. - Y a pesar de todo esto, no hay rumores verídicos que apunten a la motivación de Lord Escorpión para intentar algo así justo ahora. Todos están convencidos de que ni las fuerzas combinados de tres grandes Casas pueden contra el ejército de la Iglesia... Por lo que sólo hay dos opciones, o Lord Escorpión se ha vuelto completamente loco o tiene un as bajo la manga que aún desconocemos. - Sonríe. - Y casualmente, está ocurriendo algo al oeste, algo que retrasará el ataque de la Iglesia... cómo mínimo durante el tiempo suficiente para Lord Escorpión. Por lo visto, los Golems han llegado hasta ahí y están causando bastante problemas... Las malas lenguas dicen que sin duda estos dos actos tienen alguna relación. - Se encoge de hombros. - No se cómo acabará esto... Pero... - Mira a Gustav. - Ten claro que esto no cambiará nuestra misión. Que Helltia se destruyera a si misma ya era algo que el Jarad esperaba que ocurriera tarde o temprano... Ahora más que nunca debemos asegurar la alianza con el Escudo de la Justicia. Aunque no será fácil... Seguramente ellos ya hayan puesto en marcha sus propios planes. - Suelta un gran suspiro, agotada y abrumada ante toda esta información. 

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15/04/2016, 21:39
Gustav Andersen

Me quedo unos momentos en silencio analizando toda la información. - La alianza con el escudo estaba pactada con mi vuelta. El problema es con el Jarad. Vamos a la posada para hablar con mas calma pero necesitaré todos los detalles de lo que habeis intentado con Zack.

Parece que me vaya a mover pero añado. - Si se acerca una guerra con la iglesia necesitamos entender como funciona esta espada. - Toco la espada de Erina que aun no habia tenido la oportunidad de estudiar. - Estoy seguro que nos revelara parte del funcionamiento de la magia del general Goldspark.

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15/04/2016, 21:58
Hannah

Hannah se había levanta y puesto en marcha tan pronto cómo Gustav lo había dicho, pero también se para al escuchar lo de la espada. La mira algo confusa. 

Quizás tengas razón... Pero no creo que sea algo que podamos probar con tranquilidad aquí, en está ciudad. Por el momento, déjala en su funda, intentaremos darle más vueltas en cuando tengamos oportunidad. - Se vuelve a poner en marcha. - En marcha. 

Nadie parece tener problemas con regresar a la posada, al fin y al cabo se habían alejado de la multitud pero seguía habiendo demasiada gente en la calle... así que emprenden el camino hacía allí y al cabo de un cuarto de hora vuelven a estar frente a la puerta. Hannah parece sorprendida con que hayan encontrado algún lugar que no estuviera repleto a esas alturas, aunque realmente sólo habían podido alquilar una de las habitaciones. Tras pedir algo para beber, su conversación continua en una esquina de la posada, en tono discreto. Hannah es la primera en hablar. 

Está bien... No se que es lo que quieres saber exactamente, así que será mejor que preguntes. Cómo ya te dije en su momento, Zack sabe menos de lo que tu sabías cuando aceptaste unirte. Le hemos advertido de que algo más grande de lo que puede dominar va a atacar el continente repetidas... Pero creo que ya lo conoces. - Hannah parecía un poco asqueada. - Es bastante engreído, por no decir idiota... Quiere escuchar más, pero no está dispuesto a aceptar nuestras condiciones. 

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15/04/2016, 23:41
Gustav Andersen

- Que condiciones le habeis expuesto y que le habeos ofrecido? El culto del fin del mundo que ofrecia Weiss no es precisamentw la forma de vender una alianza a alguien que cree que el mundo gira a su alrededor. -

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15/04/2016, 23:45
Silvano

Silvano sigue a sus compañeros mientras ignora los comentarios de Gustav y Hannah. Definitivamente aquello no iba con él. Evalúa su situación mientras piensa qué puede decirle a Hannah para perdirle consejo.

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15/04/2016, 23:54
Hannah

- No puedo decirte cómo fueron exactamente las negociaciones iniciales debido a que no estuve allí para presenciarlas, pero... Ya conoces suficientemente bien la situación del Jarad. Revelar demasiada información pone en peligro las bases sobre las que se sustenta esta organización. - Suspira asqueada. - Podemos prometerle inmunidad frente a lo que está por venir, podemos prometerle la verdad... Pero no podemos darsela abiertamente antes de estar seguros de que estará de nuestro lado. - Frunce el ceño. - Desconfía de nosotros, igual que cualquiera lo haría... Pero tú ya pactaste una alianza con él, y queremos creer que a ti si te escuchará. Sólo espero que cuando lleguemos no sea demasiado tarde... 

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16/04/2016, 02:29
Gustav Andersen

- Zack es un imbécil pero no creo que sea el mayor de nuestros problemas.

La conversación termina y todos decidimos al mismo tiempo que nos vamos a  la habitación a descansar más tranquilos, antes de que la posada se llenara de gente. Por sorpresa para todos, Smith cae rendido en una cama tan pronto cómo llegan arriba, aunque al pobre niño ya se le veía agotado desde hace hacía rato. La falta de sueño era visible para todos, pero Smith era el que sin duda estaba menos acostumbrado a enfrentarla. 

Durante todo el tiempo que pasamos en la habitación le doy vueltas a algo hasta que finalmente añado.

- Voy a dar un paseo por la ciudad, necesito pensar.

Hannah no parece del todo convencida con dicha propuesta, pero parecía estar lo suficientemente cansada ya cómo para no pensar en quejarse. De todas formas, no se olvida de volver a insistir en que Gustav se retractara de hacer nada peligroso que pudiera llamar la atención de los curiosos, o peor aún, los soldados de la ciudad. Menciona que era evidente que en aquella ciudad, él se movería mejor que ella y no podía darle ningún consejo especialmente valioso, pero que igualmente tuviera cuidado y no tardara demasiado en volver. 

Antes de irme me preparo, me cambio la ropa de viaje y las vendas. Mientras los demás están a sus quehaceres me acerco a Hannah y comento. - Sólo quiero recordar viejos tiempos. - Y me marcho. 

Notas de juego

He editado este mensaje para adaptarlo al FF, no es de pronto Marco sea el nuevo máster (?). 

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16/04/2016, 16:32
Silvano

Cuando Gustav se marcha, Silvano aprovecha para abordar a Hannah con preguntas.

-Oye Hannah, ¿tienes idea de a dónde ha ido Gustav? Esta tarde parecía algo alterado cuando hemos visto a un comandante del ejército Escorpión. Si las miradas matasen, lo hubiera apuñalado infinidad de veces. Respecto a la organización, ¿no te han dicho nada acerca de mí? ¿Alguna instrucción repentina que seguir? ¿Una consideración a tener en cuenta, quizás? ¿No? ¿Nada? Creo que me las tendré que apañar por mi cuenta entonces, pero esperaba que alguien dentro de la organización pudiese aclararme el camino hasta mi destino ahora que estamos en territorio helltiano, una especie de guía o algo así, como hiciste tú a través de los pasos de montaña. -dice después de la retahíla de preguntas. -Lo que me recuerda que todavía no te he agradecido el servicio que me prestaste como es debido. Si hay algo que esté en mi mano, no dudes en pedírmelo. -dice Silvano jovialmente.

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17/04/2016, 14:21
Hannah

Cuando Gustav se va por la puerta, Hannah suelta un gran suspiro de cansancio y se acomoda en la cama. Después de Smith era evidente que ella era la que estaba más agotada, pero por algún motivo no parecía querer dejarlo entrever delante de Gustav. Escucha la avalancha de preguntas de Silvano, primero sin mucho interés y después abrumada porque no paraba de hablar. Al final, tanta insistencia parece terminar por despertarla un poco y se incorpora. 

- No hace falta que me lo agradezcas. - Dice Hannah, cómo respuesta al último comentario de Silvano. - Llevarte con nosotros nos venía de camino... - Medita durante unos segundos. - Sobre lo de conseguirte a un guía, no se que tan sencillo será... Depende de si algún otro miembro tiene planeado viajar hacía la misma dirección que tú pronto. Te pondré en contacto con mi compañero mañana por la mañana y quizás hay suerte o quizás no. - Y entonces niega con la cabeza. - Pero no, mi compañero no me ha dicho nada sobre tú grupo... De hecho no conoce la existencia del mismo, lo que es normal si cómo me dijo Pals estabais en una misión de máxima importancia. - Se encoge de hombros. - Seguramente no hayan pasado por aquí, cómo te dije, no es el camino más corto, y justo ahora tampoco es el más seguro. - Frunce el ceño. - Y sobre lo de Gustav... - Chasquea la lengua, asqueada. - Cada vez me cuesta más controlarlo... Pero a pesar de que no puedo afirmar que esté bien de la cabeza, no es un idiota... No comenzará una batalla en una situación tan desventajosa cómo estar en una ciudad plagada de enemigos. - Mira al techo. - Y a pesar de ello... - Suspira. - A él siempre se le ocurre algo con lo que sorprenderme... - Mira a Silvano. - Quizás lo mejor sea que lo sigas, sólo para estar seguros. Yo me puedo quedar aquí cuidando de Smith. 

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17/04/2016, 14:31
Director

El atardecer caía sobre la ciudad cuando Gustav sale por la puerta de la posada, que ya se estaba llenando de gente. La actividad era muy inferior a la de hacía unas horas, pero aún así ya se comenzaba reunir la gente en otros lugares, para crear otro tipo de escándalo. 

Intentando evitar las miradas de los curiosos, Gustav empieza su marcha con calma y sin llamar demasiado la atención. Tenía que esperar a que llegara la noche, y hasta entonces, no tenía nada que hacer, sólo disfrutar de la soledad y intentar substituir la maraña de pensamientos y malos recuerdos en su cabeza por los recuerdos de un tiempo mejor y mucho más sencillo. Eventualmente, en su paseo, termina llegando al punto de encuentro con el que solía reunirse con Wilheim. Se trataba de una de la torres de vigía cercanas al mercado, aunque la misma sólo se usaba de vez en cuando y por el día, ya que la parte de arriba había ardido hacía cientos de años en un incendio y los soldados no podían pasar la noche allí. 

Para sorpresa de Gustav, y sin ser aún noche cerrada, alguien esperaba ya sentado en un sencillo banco al lado de la torre. El mismo era Wilheim, tal y cómo Gustav lo recordaba aunque algo más demacrado. Junto a él en el banco había una botella de licor, y aunque Wilheim no parecía estar muy borracho, Gustav si que puede notar un leve balanceo en su movimiento mientras que mira a su alrededor. No parecía haber captado la presencia de Gustav, o si lo había hecho, no lo había reconocido.  

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17/04/2016, 14:45
Gustav Andersen

Me acerco lentamente hacía el banco y me siento al lado de Whilheim intentando no llamar la atención y con la capucha puesta. 

Respiro hondo y digo mirando hacía el horizonte. - ¿Cuando fue la última que nos encontramos? Entonces la ciudad estaba tranquila, tenia que moverme sin ser visto por las calles pero la muerte no plagaba mi mente. - Me fijo en la gente que pasaba por las calles y siguiendo hablando ,como si fuera para mi, añado. - Whilheim, te veo cansado. Aunque estoy seguro que estabas aquí pensando si mi carta era alguna cruel broma del destino. No en vano los muertos suelen mantenerse en silencio. 

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17/04/2016, 16:05
Wilheim Moretti

Aunque Gustav miraba hacía adelante, podía notar los movimientos de Wilheim a su lado. Cómo se daba la vuelta para mirarlo, cómo tartamudeaba en busca de palabras debido a su asombra e incluso llegó a tocar el hombre Gustav, cómo si aquello fuera un engaño de sus sentidos. 

- N-no es posible, ¿Gustav? ¿Gustav Anderson? - El aliento le olía a licor, pero habla con bastante serenidad, a pesar de su evidente nerviosismo. - Pensaba que estabas muerto... De hecho, todo el mundo lo creía. Pero cuando he visto el mensaje... Sólo tú utilizabas está forma de contactarme. No estaba seguro de si era buena idea venir, pero por lo visto tomé la decisión adecuada. - Suspira, algo más relajado, incluso alegre. - Oh dios mío, parece que haya pasado una eternidad... Cuentamelo, que es lo que ocurrió. Sólo se que las llamas consumieron el bosque dónde te escondías a causa de una orden de Lord Escorpión... Y para cuando me enteré de ello, ya no tuve tiempo para avisarte... - Parecía especialmente dolido y arrepentido por esto último. 

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17/04/2016, 16:18
Gustav Andersen

- Las llamas consumieron el bosque, la mayoría de mis hombres murieron. De la vieja guardia ya no queda nadie. - Digo esto último con todo solemne. Después de unos momentos añado mientras me saco un guante y muestro mi mano quemada. - No escapé del todo del fuego, como te conté el bosque pertenece a los gnanerit, acabé así mientras salvaba a uno. - 

Me pongo el guante de nuevo y añado. - Mientras estaba recuperandome de mis heridas me di cuenta que había llegado al punto que esconderme había acabado. He vuelto entre los muertos para iniciar un cambio en Helltia. - En quedo en silencio un momento y concluyo. - Por eso te necesito. ¿Tienes un lugar más privado en el que hablar? - 

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17/04/2016, 16:41
Silvano

Silvano deja escapar el aire entre los dientes cuando oye decir a Hannah que siga a Gustav.

-No se si le va a gustar, a fin de cuentas, se ha ido solo... Pero bueno, si me lo pides con esos ojitos, no me quedará otro remedio que echarle un vistazo. Hacía tiempo que no visitaba una gran ciudad, y quiero ver qué tan bien han sanados mis heridas. -dice mientras se desequipa el espadón de la espalda. -Tampoco me hará falta esto. -se quita parte de su capa, dejándose únicamente el equivalente de la capucha, la cogulla.- Ni esto. -añade mientras deja la gran mayoría de flechas que había comprado esa tarde con Gustav. -Bueno, de estas me llevo un par, nunca se sabe qué se puede encontrar uno ahí fuera. -dice mientras redistribuye el contenido de su carcaj.

-En fin, nos vemos en un rato. Intentaré no matarme. -se despide de Hannah y de Smith mientras sale por la puerta de su habitación. Cuando llega al exterior de la posada, gira en un callejón contiguo y mirando que no haya nadie que le esté observando, empieza a escalar por los salientes de la pared, agarrándose en vigas, alfeizares, y otros instrumentos que sobresalgan rugosamente de la estructura. Cuando llega a lo alto del edificio, intenta tomar como referencia la posada para no perderse en la ciudad y empieza a avanzar por los tejados.

- Tiradas (3)
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17/04/2016, 17:11
Wilheim Moretti

Wilheim mira con preocupación a Gustav. 

No tengo lugar más seguro que este que ofrecerte, pues no creo que tenga mucho tiempo. Creo que sospechan de mí, y si descubren que me he reunido contigo, será mi fin. - Mira nervioso, hacía los lados, y continúa en tono más discreto. -  Así que pretendo ser breve... En cuando supe de tú muerte comencé a investigar al respecto. El cómo Lord Erik acabó con los bandidos se hizo público rápidamente, pero descubrí que ocurrió algo más ese mismo día. Algo que quedó oculto tras el ataque al bosque, cómo si dicho ataque se tratase sólo de una distracción. - Wilheim mira con gravedad a Gustav. - Ese mismo día otra gran patrulla enviada por Lord Escorpión estaba en las montañas de Grensya. No habría nada que sospechar de no ser porque el mismísimo general Francis Maxwell lideraba dicha patrulla. - Frunce el ceño. - Pero nadie, salvo los que fueron allí, saben cuál era su misión... Y después de ganarme un par de advertencias me ha quedado claro que preguntar no es la solución. En todo caso, que alguien como Maxwell estuviera allí... Deja claro que era importante. Lord Escorpión no mandaría a su mejor hombre a un lugar porque sí... 

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17/04/2016, 17:29
Director

Oculto entre las sombras del atardecer, a Silvano le cuesta horrores escalar por culpa a la falta de costumbre, pero finalmente lo consigue y por lo que parece no ha sido detectado. Desorientado sin saber que dirección debe de haber tomado Gustav, Silvano se dedica a dar vueltas alrededor de la posada, aprovechado los pocos tejados contiguos que puede encontrar. Por suerte, era una ciudad grande y muy poblada, así que la densidad de casas era lo bastante ancha cómo para cubrir una buena área. 

Y cuando llevaba un rato buscando, y algo cansado ya por la velocidad que había tomado en su exploración, Silvano puede divisar a Gustav, al que no era raro localizar dentro de la calle debido a sus llamativos vendajes (A pesar de que iba encapuchado). El mismo parecía caminar con tranquilidad por la calle, lo que podía hacer pensar que no tenía un rumbo fijo, pero de pronto acelera el paso y Silvano tiene que hacerlo también. 

Gustav acaba llegando a una zona cercana al gran mercado de la ciudad. Se acerca a una torre de vigilancia, con la parte superior quemada, y se sienta en un banco que ya estaba ocupado por otro hombre. Entonces, ambos comienzan a hablar con discreción, por lo que para Silvano era completamente imposible escuchar nada. El hombre parecía algo más nervioso que Gustav, y sorprendido por algo que Gustav le estaba contando. 

Y de pronto, cómo un mal presagio, Silvano siente como un escalofrío recorre su espalda. Rápidamente se pone en guardia, acostumbrado a que aquello solía ser un mal presagio, pero por mucho que mire a su alrededor no consigue captar absolutamente nada fuera de lugar... Estaba claro que no había nadie sospechoso a su alrededor o cerca de la zona dónde estaba sentado Gustav. 

- Tiradas (1)