Partida Rol por web

PEC 12: Space Force

Capítulo 1. Atemporal

Cargando editor
16/06/2021, 21:18
Einar Andersen

Vuelo nocturno. Hangares.

Día 12. Noche.

Einar y Yum

 No tanto, solo es que me tienes aprecio y por eso me miras por encima de lo que soy...

A ese comentario, Einar respondió con un suspiro resignado.

-No deberías menospreciarte de esa manera. ¿Sabes la cantidad de aspirantes que se presenta a las pruebas para la Space Force? El simple hecho de haber logrado estar aquí ya te convierte en alguien increíble... 

¿Y qué puedo hacer si no trabajar? 

Oírla decir eso, sin tener muy claro hasta qué punto iba en serio le dibujó una media sonrisa.

-Creo que tú y yo tendríamos que aprender a relajarnos un poco...

Para sorpresa del piloto, alguien respondió al otro lado. Parecía que no era el único que se tomaba en serio sus obligaciones pese a la ausencia de mandos, lo que le alegró.

-Recibido alto y claro, Protect. Gracias y buena guardia- respondió en tono alegre debido al comentario recibido.

La compañía de la mecánica cada vez se le hacía más agradable y, hasta cierto punto deseada. La mujer era buena y humilde sin parangón, pese a su timidez era cálida y cercana con él y Einar se sorprendió disfrutando incluso de la melódica risa que se escapó de Yum al elevarse el vehículo.

-Si te soy sincero, me da la sensación de que Daya es mucho mejor piloto que yo. Al menos en vuelo subatmosférico...-comentó restándelo importancia-Si bien en vuelo espacial parece que sí tengo más experiencia que ella. Y sí, no puedo estar más de acuerdo contigo. Somos muy afortunados-añadió plénamente convencido de ello.

Ante la propuesta de su compañera, Einar echó un vistazo a la colina, asintiendo.

-Chica valiente, así me gusta-comentó humedeciéndose los labios mientras iniciaba las maniobras de aterrizaje con los parámetros ofrecidos por la oriental.

Léntamente, la aeronave fue descendiendo a la par que iba equilibrándose según la inclinación del suelo y, tras unos segundos de descenso, se acabó posando en la rocosa superficie con un vaivén que les hizo desplazarse en su propio asiento.

-Y... hemos tomado tierra. Desconectando propulsores principales, desactivando funciones de vuelo, Reator auxiliar en Stand by...  Listo, todos los sistemas en modo de espera- mientras hablaba iba accionando interruptores hasta que las luces anaranjadas de la pantalla que bañaban todo el interior de la cabina dieron paso a la luz blanca de las lámparas interiores.

Aún con el sonido del motor al ralentí, el piloto se desabrochó el cinturón y agarró dos máscaras ambientales, alcanzándole una a Yum.

-¿Echamos un vistazo al estado exterior?- dijo ofreciéndole la mano para ayudarla a levantarse.

Una vez en el exterior, con uno de los maletines de herramientas, se dispuso a ayudar en la revisión.

-Me he dado cuenta de que a penas se nada de ti más allá de que somos coterráneos, que eres una mecánica increible y que se te marcan esos hoyuelos tan monos cuando sonríes. ¿Qué más me cuentas?- preguntó de forma casual, si bien aquel último comentario tenía la malicia justa para tratar de sonrojarla

 

 

Cargando editor
18/06/2021, 15:25
Duncan "Duke" McCarthy

Duke alzó las cejas y suspiró. Aquel era su sino, curar primero y preguntar después, y en ocasiones había tenido que operar a gente chunga, como un atracador, y salvarla mientras que el policía al que había herido el criminal moría sin que pudiera hacer nada. Era una mierda, pero eran gajes del oficio. Sonrió, abrió los ojos mucho cuando habló del tratamiento de Kurik, se quedó mirando a Jim y finalmente chasqueó las cuerdas vocales. Debía ser una de sus bromas, nadie en su sano juicio haría sufrir a otro solo por diversión. Se sonrió y excribió

- Hay momentos que vale la pena aprovechar, como este, y otras pequeñas mezquindades que no valen la pena. No puedo decir que Kurik sea mi persona favorita pero si le pasa algo lo trataré lo mejor que pueda, y eso incluye anestesia, y excluye sal, limón y cualquier cosa que se pueda meter en un tequila para hacer que le duelan las heridas.

Siguieron hablando y en esa ocasión le tocó a René. Duke negó con la cabeza, no era autista, miraba a los ojos, y puede que no fuera muy social pero no parecía autista, ni niño probeta. Volvió a negar y escribió

- No creo que sea autista, aunque si que es un poco arisco, supongo que tiene que ver con la cultura de su planeta, la educación...esas cosas. Y nada de expedientes, a mi me interesa solo la información médica, y no tengo más detalle de los que haya podido meter yo, y creo que debe ser así. Si Kurik es un criminal internacional o antes se llamaba Mikhaela no creo que sea de mi incumbencia.... y tú no deberías buscarle las vueltas, no es muy razonable y parece que tiene sus contactos, eso o se ha ligado al cabo no sé como...Aunque seguro que a ti se te ocurren múltiples posibilidades...

Sonrió cuando habló de jugar a médicos y enfermeras. La verdad es que Jim, bueno, Jim parecía que era tan excesiva en el sexo como en lo demás, así que las posibilidades de jugar con ella eran casi infinitas....aunque....visto lo visto, le preocupaba no estar a la altura, porque ella era un ciclón y él, bueno, una buena racha de viento, pero iba a tener que soplar más fuerte para ponerse al nivel. Sonrió y escribió

- Te apuntaré a la última clase, y tendré que echar a todos de la enfermería para tener intimidad, y lo haré, me dará igual si están tullidos o los acabo de operar, voy a ser inflexible y despiadado - Por la forma de sonreír que tenía se le veía a la legua que no iba a cumplir con nada de aquello. Le acarició el rostro con ternura y le escribió - Pero jugar contigo siempre es un placer.... aunque como me des mucho más juego igual no llego a mañana. - No pudo evitar chasquear la garganta cuando le nombró el pulpo. El pulpo? Conociéndola podía ser cualquier cosa: Te pego y luego te insulto, Te violo y encima te culpo... cualquier cosa, podía ser cualquier puta cosa. La abrazó con una sonrisa y la apretó contra él sin hacer mucha fuerza, la miró e hizo un gesto. Así voy bien? O eso es más bien el Kraken?. Retiró la presión poco a poco y le acarició su preciosa melena antes de escribirle

- No crees que sospecharán? El coche lleva parado un buen rato....

Cargando editor
18/06/2021, 16:34
Jim Foster

De lo que comentaba sobre el ruso hubo una cosa que me llamó la atención - ¿De verdad crees que alguien como Mikhail Kurik sólo puede cambiar por medio de la violencia o por conveniencia? ¿No contemplas que la amabilidad pudiera ablandar una piedra? - igual era para comprobarlo en el laboratorio pero tampoco se había intentado aquello, ni siquiera como posibilidad - yo me fijo en que Narel, la cocinera, que no es precisamente ni fuerte ni bruta sin embargo se lleva bien con él? ¿Cómo se explica eso, Eylo?

- Yo creo que más allá de la violencia y la conveniencia hay cambios que ocurren, no te sabría decir porqué causa, pero ocurren... es la magia del universo.

Escuchándole sobre su infancia o los retazos de su pasado que me comenta, trato de hacerme una idea de cómo en verdad es Eylo Yilmaz - así que, toda tu vida la has pasado rodeado de tecnología y desguaces... ¿Y de afectos, cómo andamos? - estaba claro que las relaciones sociales no eran precisamente lo que más remarcaba aquel hombre, aunque tampoco es que fuera un sociópata - no, si escuchar y reflexionar está claro que se te da bien... cualquiera que guarde silencio, te escucha pensar, eres igual que mi hermano.

- Vaya un violín... ¿Cómo es la postura? A ver, venga... - simulo el sonido de una melodía de ese instrumento 

 - podríamos hacer un grupo, ¿Sabes de alguien más que le guste la música?

De mí, quiere que le cuente yo también mi historia - ¿Qué conoces del planeta Tierra? Soy de una isla muy grande... Australia, es un mundo ese lugar: desierto, playas, animales salvajes, ciudades... Una maravilla - tampoco es que la echase de menos, pero siempre era bonito regresar a casa - tengo familia por todo el mundo, aquí y allá, de todo - no es que fuéramos un clan familiar muy unido o vinculado a una rama en concreta sino que cada cuál se había hecho camino y triunfado en diferentes temáticas - mi padre es empresario... siempre me dijo que mi sitio era en una oficina ¿Te imaginas, yo aburrida en una oficina rodeada de libros y documentos? jajajaja, aquel lugar no era para mí. He preferido viajar y trabajar en algo que se me da bien... me gusta conducir.

- ¿Chalada por qué?

Notas de juego

*otra posible

Cargando editor
18/06/2021, 17:33
Eylo Yilmaz

Entrada de la sala de telecomunicaciones.

Día 13. Tarde.

Jim y Eylo

Cuando hablo de fuerza externa, no me refiero únicamente a violencia —matizó con calma —. Lo único que no contemplo es tener que, todos, tenernos que doblegar a la visión inalterable de la realidad de una persona, porque esa persona es incapaz de hacerlo para con los demás —se encogió de hombros —. ¿Amabilidad? Recuerdo que la primera vez que se le trató con amabilidad agarró del cuello de Lizza, y esa ha sido la constante, porque incluso llegó a darle una paliza por ser amable con él. Y puede que no se tengan pruebas de lo más grave, pero sé bien lo que he visto y lo que he interpretado, y tengo una idea muy acotada de la clase de persona que es Rurik —cuando mencionó a Narel, la miró con cierta suspicacia —. Narel no se lleva bien con él, es eridiana, intenta que todo el mundo se lleve bien. Porque tiene un corazón mucho más claro que yo. Que Rurik no haya intentado nada con ella es, simplemente, porque está en el ojo del huracán y sabe que un paso en falso más y lo largan. Está claro que tiene su propia visión del mundo y las cosas, lo cual me parece legítimo, normal, otra cosa es que yo la comparta.

Mientras Jim indagaba más sobre sus relaciones, recibió una mirada de advertencia, como si le viniera a decir con los ojos que estaba entrando en un terreno cenagoso. Eylo alzó una ceja, se la quedó mirando unos instantes antes de responder, pero con el tono de la extrañeza en él.

¿Qué pasa, Jim? ¿Que ser callado y observador te convierte en una persona incapaz de relacionarse o qué? —preguntó con cierta sorna, se encogió de hombros a continuación —. Mis padres murieron cuando tenía doce años, y hasta la mayoría de edad me los pasé en un orfanato-escuela de la Comandancia, pero no me voy lamentando por las esquinas por ello —dijo esto con neutralidad, sin acuñar ningún sentimiento de pena, contenido, de alguien que parecía haber superado ya esa etapa —. Y no.. en Eridani no solo hay desguaces. Hay minas, fundiciones y polvo, una nube de polvo rojiza que cubre casi todo el sistema. Pero si te refieres a mi vida, me la he pasado rodeado de gente, siempre. Así que no —sonrió levemente, imprimía un tono distendido a la charla —. No soy un inadaptado social, aunque no tenga, ¿cómo lo llaman?, el salero que tienes tú.

Al hablar del violín, Eylo no puso ninguna pose, se sentía raro al hacerlo sin el instrumento. Frunció un poco el ceño, pero suspiró tras unos instantes. Tuvo el impulso de cruzarse de brazos, pero no lo hizo.

Si alguna vez tengo un violín, ya te enseñaré a cómo cogerlo —prometió —. ¿Un grupo? Sin instrumentos será difícil —puso cara de circunstancias, pero tampoco negándose a ello —. En la Rust solo era yo, así que.. no sé quién sabría tocar un instrumento. La verdad. Pero no es mala idea —asintió pensativo, pensó en Kalina, pero que te guste la música no implica que sepas tocar.

Poco, nada. Solo estuve en la Tierra para la prueba de acceso —admitió un tanto apurado. Escuchó lo que Jim le contó sobre su familia y origen, trató de imaginar lo que le describía, pero las úniacs referencias que tenía eran de películas y documentales, lo cual no era mucho —. Se me hace raro pensar en todo eso. Playas, animales salvajes.. Celenis es solo una gran urbe industrial, y el resto de la luna es un páramo de polvo blanco —comentó pensativo, aunque la miró unos segundos, recordando algo —. Pero bueno, cuando volvamos a la Tierra, recuerdo que me debías a mi y algunos ir a tomar algo, ¿no?

¿Y cómo te llevas con tu hermano? —preguntó intrigado —. Quizá si no os lleváis a matar, podré pedirle un par de consejos —sonrió sibilino, divertido —. Y no, no te imagino en una oficina, para nada. Aunque.. ¿aburrida? Lo dudo más. ¿Así que te alistaste para escapar de un cubículo de oficina? —la miró con curiosidad, y ante la pregunta de porque dijo lo de chalada, Eylo se encogió de hombros con una leve sonrisa ambigua.

Lo estás, eres histriónica. A tu modo. No me malinterpretes. Eres hiperactiva, está claro —comentó con naturalidad —. Creo que eres esa clase de personas que siempre irá más allá de lo convencional, porque lo convencional es aburrido. Insulso. No lo digo como algo malo, pero si hay gente callada y muerma como yo, también ha de haberla opuesta, ¿no?

Cargando editor
22/06/2021, 18:45
Kalina Radoslawa

Ganadería gourmet: Mis gregatíllidos y yo. Exteriores del domo

Día. Hora aproximada

René, William y Kalina

 

Aprender a manejar los vehículos será algo que nos vendrá bien a todos. Aunque dudo que, aparte para cargar el material cuando construya el terrario, me dejen usar todos los días uno para mis visitas a la cueva... Si es que al final la considero apta para mis bichillos —dijo Kalina, guiñándoles un ojo a ambos jóvenes al decir las últimas palabras, aunque sus ojos se pusieron en blanco cuando Foster salió a relucir. No necesitaba añadir nada más al respecto.

Siguieron caminando a buen ritmo y Kalina escuchaba la conversación entre sus dos compañeros. Al oír a William, la croata recordó su primera salida al exterior y una idea empezó a rondar por su cabeza. Era algo en lo que llevaba tiempo pensando, pero que por distintos motivos había dejado aparcado; pero la curiosidad seguia latente en algún lugar de su memoria.

Oye William. Parece que te conoces bien todo esto por aquí —dijo, meditando cuál sería la mejor manera de enfocar el tema. Y la conclusión a la que llegó fue que lo mejor que podía hacer era abordarlo directamente—. Y que tienes una gran facilidad para entrar en los lugares en los que no debes. —Una sonrisa divertida y cómplice iluminó el rostro de Kalina aunque, debido a la máscara que llevaban, seguramente ninguno de llos pudiera verla—. El otro día que salimos, el mismo en el que encontré los gregatillidos, dimos con una especie de búnker al cual no pudimos aceder. Había huellas de movimiento por allí, de aterrizaje de naves y vehículos, además de alguna que otra zona verde. ¿Sabes de qué podría tratarse? ¿Has oído algo al respecto?

Echó un rápido vistazo a René, esperando que él no se sintiera molesto por haber puesto en conocimiento de Billy algo que ellos, junto a Jean y Eylo, habían encontrado y del cual no habían hecho comentario alguno a los demás.

 

Cargando editor
22/06/2021, 22:08
René Carracci

Ganadería gourmet: Mis gregatíllidos y yo. Exteriores del domo

Algún día del mes 1. Alguna hora de ese día :P

René, William y Kalina

 

René se dio cuenta rápidamente de que Thompson no quería hablar de sí mismo. Tan locuaz que era el chaval en otras ocasiones y ahora resultaba que no quería soltar prenda. En ese domo la gente se pasaba todo el tiempo de cháchara, por lo que había visto el hydriano, pero ¿de qué hablaban, tan supuestamente sociables que eran? Aquello confirmaba una eterna sospecha de René: la gente usaba el exceso de palabras más como una barrera comunicativa que como un canal de comunicación. Hablaban para así no tener que decir nada.

Thompson no sólo respondió con evasivas, sino que su rostro se tiñó con una sombra y trató de acelerar el paso para dejar atrás a René. «Aquí he tocado hueso», se dijo satisfecho y resuelto a seguir tirándole de la lengua con aire inocente. No pensaba soltar la presa ahora que la tenía agarrada. Así pues, apretó el paso para ponerse a su altura y siguió hablando:

Te entiendo, yo tampoco soporto estar encerrado —le dijo, una vez más haciéndose el tonto—, pero ¿quién era tu «carcelero», por así decir? ¿Estás aquí para escapar de algo o de alguien?

Aquella última pregunta, sin embargo, se le vino encima a René con efecto búmeran, pues al decir eso no pudo dejar de pensar en sí mismo y se le agriaron las ganas de seguir bromeando con Thompson. Guardó silencio. De pronto, perdió interés en la respuesta que pudiera darle William y se quedó pensativo, con rostro serio y duro, mirando al infinito y a las piedrecillas rojas que encontraba en su camino.

Finalmente, cuando Kalina le contó a William lo del búnker del norte, la miró. Ella lo estaba mirando también, con una mirada interrogante, como si preguntara si había dicho demasiado. Como respuesta, René le devolvió una sonrisa confiada y un asentimiento de cabeza; él también había rumiado la misma idea. No le caía bien Thompson, pero era evidente que si alguien podía abrir aquella puerta, era él. Y René quería saber qué había allí.

Cargando editor
24/06/2021, 19:45
William P. Thompson

- Bueno, seguro que hay más conductores a parte de Jim, sólo es cuestión de dar con ellos - sonrió a Kalina, debía admitir que Jim de primeras le parecía alguien con quien no tendría problemas en llevarse bien, aunque luego le dio la impresión de que no tenía mucho filtro y parecía que sólo buscaba el caos por el caos, lo cual es peligroso en demasiadas ocasiones, aunque había tenido buenas ideas a la hora de tratar de colaborar... quizás habría que esperar un poco más. 

Te entiendo, yo tampoco soporto estar encerrado —le dijo, una vez más haciéndose el tonto—, pero ¿quién era tu «carcelero», por así decir? ¿Estás aquí para escapar de algo o de alguien? - 

Con un tono bastante raro en él, respondió secamente a René sin tener muy en cuenta como se pudiera sentir el explorador - Aunque seas una tumba que no quiere relacionarse más que con la chica que le gusta y con su sombra, no crees que si ese fuera el caso preferiría no decirlo, al menos te tenía por alguien más espabilado - La mirada de Billy se había vuelto dura, había salido la parte de William que menos le gustaba, cuando alguien le daba donde dolía, surgía la parte hiriente del chaval, era perfectamente consciente de cuanto daño podían hacer las palabras y sabía usarlo, aunque rápidamente se arrepintiese. - Mira... No quería decir eso... lo siento. Es qué... prefiero no hablar de eso, no es que importe ya ¿No? - Por suerte Kalina intervino con una pregunta que desvió la atención. 

La pregunta de Kalina hizo que Billy se detuviera durante unos segundos repasando los datos que había leído en aquel archivo cifrado - Por lo que dices... podría ser una de las zonas de entrenamiento cruzado con el Domo 15, pero me encaja más en unas "anotaciones" que hablaban de una zona en la que había contrabando - Se mostraba pensativo, aquellas anotaciones no especificaban mucho la naturaleza ni la relación de aquel contrabando, pero le encajaba mucho con aquello, además un bunker en una zona como esta podría ser un buen lugar de almacenaje difícil de vislumbrar. Su curiosidad natural le impelía a investigar la zona, aunque ir solo sería una locura... - Si queréis creo que estaría bien tomar un par de días e ir a investigar, aunque en un número razonable por lo que pudiera ocurrir... No me cuesta demasiado pasar desapercibido, pero yendo en grupo es más complicado - Le parecía demasiado arriesgado el ir él solo, aunque no era por falta de ganas de saber que es lo que había allí. Sonreía ante el comentario de Kalina sobre entrar donde no debía y esperaba que les pareciera bien la idea de ir a investigar de que se trataba, ya no por los puntos que ganarían con sus superiores por encontrar aquello, si no por la enorme curiosidad que siempre invadía al joven Thompson. 

 

Cargando editor
25/06/2021, 12:48
René Carracci

Ganadería gourmet: Mis gregatíllidos y yo. Exteriores del domo

Algún día del mes 1. Alguna hora de ese día :P

René, William y Kalina

 

René escuchó la cortante respuesta de Thompson con cierta indiferencia, pues se había quedado absorto en sus propias preocupaciones tras haber hecho su pregunta. El muchacho trató de atacarlo resaltando su tendencia a la soledad. Aparentemente, había gente en el mundo que consideraba eso un feo defecto: ser «asocial», lo convertían fácilmente en un insulto, uno que poco podía importarle a él, a decir verdad. Era selectivo en sus relaciones, sí, no entendía por qué a la gente podía molestarle aquello. Pero, al menos en ese momento, le dio lo mismo. Eso sí: a pesar de no haber prestado especial atención a la respuesta de William, se dio cuenta de que había encontrado un punto débil a aquel risueño muchacho y no dejó de anotarlo mentalmente.

Si bien René no reaccionó de ningún modo al comentario, William trató de disculparse por haber dicho aquello, pero el hydriano reaccionó a eso con la misma indiferencia que a lo anterior; simplemente miró al joven de reojo, sin decir nada.

Después, escuchó atentamente la opinión que el muchacho tenía sobre las colinas del norte y, cuando terminó de hablar, René terció, sin dejar de mirar al frente al caminar:

En realidad, según el mapa, las colinas del norte están en una zona de aguas subterráneas en la cual hay rastros de vegetación y semillas, así que lo más probable es que sea una estación científica o algo parecido. —René había memorizado el mapa con bastante precisión tras haberle echado una ojeada al salir y también había memorizado bien las anotaciones mencionadas por William acerca del contrabando—. La zona de contrabando, en cambio, parece estar al este, en algún lugar entre el domo 12 y el domo 15, el del comandante Thompson. —Esto último lo dijo en un tono completamente neutro, en el cual era imposible adivinar maldad, y sin mirar a William—. Estación científica o no, sería interesante abrir esa puerta y echar un ojo por nosotros mismos. Pero esa puerta sólo la puede abrir alguien acostumbrado a abrir puertas prohibidas. En realidad, por eso te lo comentamos, Thompson, porque tú nos puedes ayudar a saciar nuestra curiosidad. Podemos ir nosotros tres en otro momento o incluso invitar también a Jean, si quiere.

Notas de juego

Me he saltado a Kalina, lo sé, pero quería dejar ya la respuesta a William.

Cargando editor
27/06/2021, 21:32
Sargento Dunne Grey

A darse de madres. Exterior

Mes 1. Día 9. ¿Cinco de la tarde?

Grey y Mikhail

- Es curioso Mikhail - Le dijo llamándole por su nombre, tomando confianza con el varón - Siempre repites lo mismo, que no eres idiota, pero nadie piensa que lo seas... - Le comentó con un tono de voz suave mientras la nave descendía hacia la zona de caza - ¿Tu padre te insultaba cuando te entrenaba? A veces pienso que estás muy enfadado con el mundo y no tienes motivos para ello. Eres un hombre atractivo, fuerte y capaz. No necesitas sembrar miedo porque tu porte ya de por sí impone. Nadie en su sano juicio te insultaría, a pesar de que pienses que los demás lo hacen cuando te dan consejos... Cuando te dicen las cosas es porque quieren conocerte, no porque deseen ridiculizarte... - Le explicó, pensando que su problema era una ausencia casi total de empatía.

Grey miró el ceño fruncido del varón y sabía que pensaba en algo que le enfadaba. Quizás en ese viaje ambos pudieran coger confianza y tratar algunos de esos temas que le preocupaban con naturalidad y desenfado. Ella intentaba ser próxima y comprensiva. Kurik necesitaba confiar en alguien, y ella se prestaba a eso.

- Sí me salió mal la jugada, no lo dudo... Pero ¿sabes? No me arrepiento... Tomé una decisión y no fue la adecuada, así que solo me queda aprovechar la ocasión para aprender y relacionarme. Hacer amigos... Tengo comprobado que con gente que te aprecia, todo se restaura. ¿Quién sabe? Quizás en el futuro vuelva a ser sargento - No lo creía firmemente. Townhall no era de los que reculaban cuando tomaban una decisión, pero ella lo intentaría a su manera, como siempre había hecho.

- Martín no es un idiota - Negó la fémina con una ligera sonrisa - Es distinto a ti y a mí, por eso es valioso - Explicó riendo con suavidad ante la negativa a tomar algo con ella, pues solo lo haría si se lo merecía - No es muy común que me den calabazas, Kurik. Desde luego te gusta hacerte de rogar... - No parecía haberlo tomado a mal.

Menos palabras y más acción era lo que solicitaba el ruso y ella asintió, antes de hacer unos disparos para provocar la salida de una criatura del suelo, la cual tenía demasiadas patas y unas mandíbulas que chasqueaba de manera amenazante. Kurik no esperó ni un segundo antes de apuntar y disparar al ser en la cabeza, haciendo un tiro tan perfecto que provocó que Grey abriera la boca asombrada y tardase unos segundos en reaccionar, mientras la escolopendra gigante se revolvía de dolor, elevándose sobre sus metámeros corporales.

- Impresionante Kurik, ¿sueles ser tan bueno en todo? - Pero menos palabras y más acción, la mujer apuntó con rapidez a la criatura y realizó un tiro en la cabeza del animal que quizás fuera menos vistoso que el del ruso, pero no solo había acertado en aquel ser, si no que se intuía que le había hecho bastante daño, pues se movió con violencia hacia la dirección de los reclutas.

Estaba claro que la escolopendra consideraba a Kurik un rival mucho más poderoso que Grey, pues sus dos ataques a modo de dentelladas se dirigieron hacia el muchacho, el cual debería buscar la manera de apartarse para no ser atrapado.

- ¡Cuidado Kurik! ¡Es muy venenosa! - Grey se preocupó en esos instantes por su compañero, si no se movía con agilidad podría estar perdido.

- Tiradas (8)

Motivo: Apuntar cabeza

Dificultad: 20

Habilidad: 15

Tirada: 2 7 10

Total: 7 +15 = 22 Éxito

Objetivo: Bicho

Tirada: 2d6

Modificador: 4

Tirada: 2 5

Total: 7 +4 = 11

Motivo: Ataque bicho Par Grey ImparKurik

Tirada: 1d20

Resultado: 1 [1]

Motivo: Ataque bicho Par Grey ImparKurik

Tirada: 1d20

Resultado: 15 [15]

Motivo: Ataque bicho

Dificultad: 0

Habilidad: 15

Tirada: 2 4 6

Total: 4 +15 = 19 Éxito

Motivo: Ataque bicho

Dificultad: 0

Habilidad: 15

Tirada: 5 6 10

Total: 6 +15 = 21 Éxito

Objetivo: Ataque 1 bicho

Tirada: 2d6

Tirada: 3 4

Total: 7 = 7

Objetivo: Ataque 2 bicho

Tirada: 2d6

Tirada: 2 3

Total: 5 = 5

Notas de juego

PV bicho: 22/40

Te ha lanzado dos ataques. Tienes la posibilidad de hacer dos acciones: Esquivar y esquivar, esquivar y atacar, o atacar y atacar. Si no esquivas te comes el daño y te inoculan veneno. Si esquivas debes superar un 19 y un 21. A tu gusto lo dejo...XD

Cargando editor
27/06/2021, 22:08
Yum Ziam

Vuelo nocturno. Hangares.

Día 12. Noche.

Einar y Yum

Einar intentaba educar a Ziam para que no se infravalorase, una labor algo complicada puesto que se denotaba por sus gestos de que, de alguna manera, actuaba como si fuera alguien servil ante los demás, como si su función en la vida fuese trabajar para otros.

- No es menospreciarme, Einar, pero comprendo que hay algo de mí que le interesa a la Space Force, y que he tenido suerte para ser seleccionada. Yo no soy nadie fascinante, solo una mecánica... Seguro que otros muchos candidatos serían mejor opción que yo misma - Sonrió a pesar de lo dicho, con aquel tono humilde que tanto le caracterizaba, estaba claro que jamás había sido valorada de ninguna otra manera que no fuera por su calidad de trabajo.

- ¿Aprender a relajarnos? - Aquel comentario de Andersen no sabía si era bueno o malo. Para Ziam todo lo que implicaba trabajar era algo grandioso, satisfactorio. No entendía su vida sin tener nada que hacer - ¿Y cómo se hace eso? - No entendía el ocio, para ella no laborar era perder el tiempo.

La oriental sonreía mientras se elevaba la nave y Einar agradecía a la estación de control que estuviera pendiente en el otro lado, por si ocurría cualquier eventualidad. La mujer escuchaba los comentarios de su compañero con sumo interés, pues era conocido ya por todos que era uno de sus mejores amigos del Domo.

- No es una competición Einar, Daya y tú, tú y ella... Ambos sois grandes pilotos y vuestra presencia es tan útil que nos ha traído aquí, a Protect. Debes estar muy orgulloso de eso... ambos debéis estarlo...- Tenía las manos posicionadas en el regazo, con su tranquilidad habitual, sintiéndose dichosa al escuchar que su compañero se sentía afortunado de estar allí - Yo también soy feliz. Jamás pensé que podría serlo tanto, quien me lo habría dicho hace tres años... - Comentó mientras buscaban una zona de aterrizaje.

El piloto demostró su maestría haciendo un descenso en una angulación de ochenta grados, dejando la nave en una posición un tanto incómoda y preocupante para quien no dominase esas maniobras. Era un ejercicio real en terreno escarpado, una prueba de la preparación y capacidades del atractivo Andersen.

- Qué incómodo es esto - Dijo la joven soltando su cinturón de seguridad y moviéndose con cuidado mientras miraba por la ventanilla - Si saltásemos un poco aquí dentro podríamos despeñarnos. ¿Pusiste el bloqueo anti derrape? - Seguramente lo habría hecho, pero su miedo a la caída le hacía cuestionarlo.

Ziam asintió a Einar cuando éste le propuso salir fuera, tomando su mano tras haber puesto la máscara ambiental que según el protocolo, debían utilizar. Llegaron fuera de la nave y la joven abrió la caja del motor para echar un vistazo en el sistema, aunque tanteó con cuidado, estaba muy caliente tras haber estado en funcionamiento.

- Esto parece que fluye... - Dijo con suavidad mientras el piloto hizo un comentario sobre sus hoyuelos que provocaron que se le cayese la herramienta que tenía en la mano, y por el ángulo de inclinación del terreno, se desplazó a varios metros de distancia como consecuencia de la gravedad - Oh..., qué... qué torpe soy... - Se había puesto nerviosa - Iré a buscar la llave... - Debía tener cuidado pues un paso en falso podría hacerle rodar por la pendiente de la colina

Quizás fuera circunstancial o no, pero Yum había evitado responder a la pregunta sobre su pasado, pero había una muy buena excusa para eso, no podía permitir que su material de reparaciones se perdiese.

Cargando editor
28/06/2021, 15:45
Einar Andersen

-Bueno, pues a mí sí me pareces fascinante-comentó sin otorgarle demasiada importancia al hecho y de forma totalmente sincera

Los reiterados comentarios de su compañera relacionados con la devoción al trabajo y la absoluta falta de ocio en su vida sembraron la semilla de la preocupación en Einar. Él era el primero que anteponía obligaciones a recreo, pero agradecía los momentos libres como el que más. ¿Cómo debía haber sido su vida anterior a Protect para que se plantease el presente de aquella manera?

Pese a todo esto, no pudo evitar sonreír al comentario de la felicidad que experimentaba por encontrarse en el programa de adiestramiento. En aquello coincidían.

Una vez realizado el aterrizaje, uno bastante preciso, a decir verdad, volvió a sonreír ante la inseguridad de Yum, que le impulsó a cuestionar las medidas de seguridad adoptadas.

-Freno auxiliar activado, bloqueo anti-derrape comprobado y en marcha, estabilizador hidráulico funcionando y sistema de auto-equilibrado por servomotor en línea y preparado por si hace falta, señora- respondió en tono marcial exagerado, tratando de relajar a su pasajera.

Al caérsele la herramienta y esta desplazarse algunos metros por la pendiente, Einar extendió su mano hacia Yum, ofreciéndosela- Agárrate, no vayas a caerte-añadió en tono afable.-¿Como iba a explicar después que he dejado despeñarse a nuestra mejor mecánico?

Una vez recuperada herramienta y mecánica, Einar trató por segunda vez de entablar una conversación algo más personal. No le había pasado por alto como Yum había intentado esquivar el tema y le preocupaba lo esquiva que se mostraba con él, si bien no iba a insistir más si aquello provocaba incomodidad patente en la oriental.

-Antes has mencionado algo de hace tres años. ¿A que te referías?-Einar trató de teñir su voz con un tono serio y cercano, mirándola directamente a los ojos para darle a aquella pregunta la importancia que merecía para él.

 

Cargando editor
29/06/2021, 06:38
+Mikhail Kurik+
Sólo para el director

A darse de madres. Exterior

Mes 1. Día 9. ¿Cinco de la tarde?

Grey y Mikhail

 

El ruso frunció el ceño al oír las palabras de Grey, luego de que él le atinara aquel excelente disparo al insecto sobrealimentado. - ¿Estás intentando psicoanalizarme? – Le preguntó con frialdad, a medida que se preparaba para continuar disparándole a la criatura de aspecto peligroso. No le gustaba esa mierda, nunca le había gustado que intentaran analizarle de esa manera, como si fuera un maldito loco. – No lo hagas. Y no hables de mi padre, ¿entendido? – Advirtió, su tono serio y frío, dejando en claro que era algo que prefería que nadie tocara. Su padre había sido siempre un excelente padre. Tal vez un poco estricto, pero no había duda de que le quería tanto como su madre, y Mikhail le respetaba, incluso si aspiraba a algo más que el rango del mismo. Quería estar por encima de él, alcanzar algo mejor por encima de todos. Era cuestión de tiempo. – No quiero que me conozcan. Al menos no los débiles de mierda como varios de ellos. – Aclaró con total seriedad, no pudiendo creer que tuviera que dar explicaciones al respecto. Eran débiles, tanto de actitud como de espíritu, exceptuando un par de los reclutas. No eran nada, y no estaban preparados. Ni siquiera se habían molestado en buscarle para ser entrenados. Tenían miedo, como malditas presas bajo la mirada de un depredador.

Sea lo que fuera, esbozó una sonrisa leve, como si estuviera riéndose del comentario de la exsargento respecto a Martín. – Es patético. Pero allá tú con tus gustos. Me da igual. – Se encogió de hombros, antes de que Grey disparara su arma, mostrándose ciertamente impresionado al ver cómo la joven mujer acertaba el disparo, y parecía provocarle un buen daño al insecto. – Ja… ¿no habías dicho que no eras tan buena? – Preguntó, aún sorprendido. No era mejor que él, pero no se quedaba muy atrás. Parecía que no era tan inútil en combate como aparentaba. – Y sí, hay que ganárselo. No salgo con cualquiera. Aunque… - Desvió la mirad por un breve instante, concentrando su atención en el rifle de Grey. – Con esa puntería, puede que te lo merezcas. – Afirmó de aparente buen humor, complacido por el hecho de que no fuera una completa inútil, incluso si no podía pelear con él en el ring. Hacía tiempo que no veía a alguien lograr un disparo como aquel, por lo que era algo ciertamente respetable por parte del ruso. Ahora sabía que podía depender de ella para cuidarle la espalda cuando estuvieran en una batalla.

No obstante, no tardó mucho en chasquear la lengua, cabreado, en el instante en el que el insecto optó por contraatacar. Estaba cabreado, Mikhail le comprendía, él también lo habría estado sin un par de idiotas le hubieran disparado en la maldita cabeza. – No está contento conmigo. – Cabrón, podría haber elegido a Grey, ella parecía más blanda en cuanto a carne. - ¡Te dije que no soy un idiota! – Exclamó de mal humor, a la vez que intentaba evadir el ataque de la peligrosa criatura. Sin pensarlo demasiado, no dudó en moverse hacia un costado para esquivar la primera dentellada de la criatura, algo que logró justo a tiempo. Sin embargo, lo que el ruso no esperaba, era que el enorme insecto se hubiera cabreado tanto con él, lo suficiente como para desear dedicarle una nueva dentellada, la cual acertó en el brazo izquierdo del joven recluta, provocando un grito de dolor. – ¡Hijo de puta! – Exclamó, realmente cabreado, a medida que sentía el veneno en su cuerpo. - ¡Joder! ¡Será mejor que tengas el puto antídoto para esta mierda! – Se expresó, guiado por el dolor y la ira que sentía en ese momento. – ¡Dispárale al hijo de puta! – Esperaba que la exsargento demostrara la misma habilidad que había demostrado anteriormente. De lo contrario, tendría que ser él quien se encargara de la criatura.

- Tiradas (2)

Motivo: Esquivar

Dificultad: 19

Habilidad: 15

Tirada: 3 7 8

Total: 7 +15 = 22 Éxito

Motivo: Esquivar

Dificultad: 21

Habilidad: 15

Tirada: 1 5 5

Total: 5 +15 = 20 Fracaso

Cargando editor
29/06/2021, 12:45
Jim Foster

Estaba claro que Eylo no era tan animado como yo pero al menos se defendía o trataba de aparentarlo - tampoco te he llamado marginado, eh - me daba la impresión de que se había picado por algo que había dicho - a ver, sí,  vale... eres de pocas palabras pero que no pasa nada, eres así - tampoco es que fuera el único ser del universo en reunir tales cualidades.

- ¿Mi hermano? No tenemos mucha relación, él está muy centrado en su trabajo, lo es todo - Martin era hermano de sangre pero hacía tiempo que no lo veía, ni siquiera recordaba la última vez que había hablado con él - siempre está ocupado,  tiene cosas que hacer, ya sabes... salvar al universo - me apoyé en la pared con una expresión de hastío - en eso se parece más a Einar pero cuando dije que él y tú os parecéis lo digo porque es otro que se pasa mucho tiempo rumiando las respuestas, reflexionando.

No me acordaba pero al parecer había contraído una especie de promesa en La Tierra con la gente - ah, lo de tomar algo es una expresión, estábamos en aquella oficina tan hermética que se me ocurrió lo de tomar algo ahí fuera, pero sí, ningún problema... está pendiente - a eso habría que añadir el viaje turístico que le había insinuado - ¿Sabes bailar? - trataba de encasillarlo, por el momento Eylo no estaba en el grupo de los aburridos pero tampoco en el de los divertidos, aún habría que hacerle más preguntas para poder situarlo bien.

- Jaja, histríonica - me había hecho gracia hasta la palabra - vale, te la compro. Sí, me muevo mucho, no paro - quizás era demasiado impulsiva, eso me decían en casa, aunque tampoco les había hecho mucho caso - lo convencional es aburrido, estoy de acuerdo. La monotonía, las rutinas... no las puedo ver ¿Cómo puede la gente vivir en una jaula? Con lo grande que es el universo.

- Tampoco es que seamos como el Ying y el Yang, no te veo en las antípodas - aunque tampoco estaría muy lejos, pensándolo fríamente - supongo que es algo positivo que seamos diferentes, todo el mundo aporta algo distinto - aunque es verdad que había en el domo gente más parecida a Eylo que a mí, o a Billy - aunque también está el tema de que si somos muy diferentes va a ser más difícil hacernos coincidir, no crees?

Cargando editor
29/06/2021, 18:49
Jim Foster

- Jajaja Mikhaela, no se me había ocurrido - puestos a elucubrar posibilidades, que Kurikh hubiera nacido mujer era una más - o uno de esos robots alienígenas que se hacen pasar por humanos ¿Te imaginas que debajo de su piel fuera todo de metal y toda su inteligencia fuera un programa informático? - un terminator, dicho así podría sonar a coña pero igual había que hacerlo sangrar para comprobar si era humano. Aunque espera, le habían dejado un ojo cerrado pero no había herida, quizás fuera producto de una coloración química, camuflage - supongo que no pasaría un examen médico riguroso, verdad?

Igual se trataba de un experimento del gobierno, quizás nos habían introducido a posta a un robot para ver cómo se ajustaba al comportamiento grupal, igual estaba bajo control militar o quizás era un alienígena. En todo caso, sería tarea de gente como Duke, que al ser médico tendría capacidad para verificar cuán de humano era - ¿Lo has comprobado, verdad?

Lo de René era aún más extraño - pero él dijo que no tenía padre, no que hubiera tenido y lo hubiera perdido sino "no tengo padre" - claro que, podría ser un huérfano, aunque también podría encajar en la misma clase que el terminator de Kurikh, un experimento más.

Me gustó el abrazo que me propinó, era creativo, después de jugar al submarino parecía algo así como un síntoma de agradecimiento, aunque me daba la sensación de que le había gastado la batería - ah, tranquilo, no te preocupes. El primer día que estuve en el vehículo, me pasé 3 horas dentro probando todos los botones, más o menos a una distancia similar - no veía el riesgo de tener el vehículo detenido - aunque bueno, a saber lo que han podido interpretar, pero bueno, vale... pondré en funcionamiento esto y nos acercaremos a la base, igual alguien ha preguntado por ti.

Recogí un poco las cosas que habían quedado revolucionadas en la parte trasera, me vestí y pasé a la parte delantera - ¿Te apetece un paseo con el traje por ahí fuera? - esta vez nos habíamos traído el equipo para dos, era una posibilidad - ¿Lo has probado ya? Yo es que me gusta experimentar lo que tengo cerca - no disimulé en que todo lo que me había resultado curioso lo había probado, también había curioseado en las habitaciones de la base, en todos los armarios, cajones y demás. 

 

Cargando editor
30/06/2021, 01:20
Eylo Yilmaz

Entrada de la sala de telecomunicaciones.

Día 13. Tarde.

Jim y Eylo

Eylo dedicó a Jim una sonrisa divertida, un tanto burlona, al explicarse que no le pretendía llamar marginado. La sonrisa venía a decir que ni se sentía ofendido ni molesto, más bien que le hiciera gracia esto, dejando zanjado el asunto con un sutil encogimiento de hombros.

Entonces comparto su cruz al tener que seguirte el ritmo de la conversación —respondió con aquella sonrisa sutil que se había alojado, por el momento, en su rostro —. ¿Salvar el universo? ¿Pertenece a la Space Force? —preguntó con curiosidad.

Oh.. bueno, pero suena igual de bien —asintió levemente desubicado cuando dijo que era una forma de hablar, pero fiel a su estilo, Jim salió con otra pregunta —. Sé bailar, un poco mal, pero no es que haya ido a muchas pistas de baile o discotecas —dijo pensativo —. Más bien celebraciones, cosas puntuales. Pero sí, sé bailar, salvo que menear el esqueleto sin gracia no cuente como bailar.

Le hizo gracia la forma en cómo se expresaba Jim, especialmente en lo tocante a su visión de la vida, la rutina o vivir en una jaula. Trazó cierto paralelismo entre ello y su vida en Eridani.

Supongo que por eso chocamos un poco. Para mi la rutina es algo esencial, vital si cabe, cada uno tiene su función y su trabajo con sus horarios —describió, posiblemente, un escenario de horror para Jim —. Pero nunca tuve la sensación de estar en una jaula, ¿sabes? Tienes razón, el universo en enorme. Pero en cierto modo, también podíamos viajar a cualquier lugar en nuestra.. "jaula" —definiendo como tal la Rust, pero sin decirlo en sentido peyorativo —. Estábamos encerrados en una nave, pero, a la vez, libres en ese universo.

Estoy convencido que si todos fuéramos iguales también te traería de cabeza —dijo, valga la redundancia, convencido —. ¿Con quién te podrías meter si no? —añadió con humor, riendo un poco —. Así es, todos aportamos algo al grupo. No te quepa duda —la última pregunta de Jim tenía más fondo del que aparentaba, pero Eylo no se tomó su habitual calma para responder, pues, en cierto modo, tenía claro que responder —. No creo que seamos tan diferentes, y si lo somos para algunas cosas habrá que encontrar un equilibrio, un consenso. A veces ese consenso no será posible, pero es importante creer, y yo creo eso, que el objetivo final es buscar lo mejor para todos. Y si uno se equivoca, unos saber aceptar pedir disculpas y otros asumir que nadie es perfecto. Saber perder, saber ganar.

Cargando editor
30/06/2021, 19:52
Duncan "Duke" McCarthy

La imaginación chisporroteante de Jim no tenía fin, se le ocurría cada cosa.... pero bueno, era parte de su encanto, estaba un poco loca, pero era de todo menos aburrida. Fingió pensar profundamente en ello y finalmente sonrió mientras escribía

- La última vez que miré sangraba, pero, y si la inteligencia artificial que lo ha creado lo ha creado con sangre para confundirnos? - Sonrió, evidentemente aquello no era posible, no es que fuera uno de los Zyllon de aquella serie tan antigua de Galáctica. Se encogió de hombros y escribió - Palabra de matasanos, todas las pruebas han dicho que Kurik forma parte del homo sapiens sapiens, así que seguro que hay algo de incorrecto en las pruebas.... soy un médico malísimo...pero diría que sí, está chequeado tres veces

Sobre René no sabía que decir. Se encogió de hombros y escribió - Puede significar cualquier cosa, que su padre murió, que lo abandonaron, o simplemente que aunque tiene padre ya no lo considera como tal... De todos modos René es alguien muy introvertido así que lo mejor es no le preguntes, se lo tomaría a mal. Además, si fuera un robot de los que tú dices te habría dicho que el tiene creador, no padre....

La abrazó a modo de tregua, que Jim parecía no tener fin, y pareció gustarle. Quería conocerla, saber de ella, porque de momento, bueno, la naturaleza había mandado. Por alguna de esas bromas cósmicas una pedazo de mujer como Jim le hacía caso a él, y él, bueno, después de estar tanto tiempo colgado de Heather lo necesitaba, un buen polvo, sentir que le podía gustar a alguien y que podía valer más que como amigo. Aunque claro, Jim eso de estarse quieta...no era lo suyo... , un torbellino de energía y de locura, le gustaba.... era muy distinta a lo que le había gustado hasta entonces, pero le gustaba. Asintió cuando dijo que se iban a acercar pero puso cara de susto en cuanto dijo que igual alguien podría haber preguntado por él. Lo vio todo, claramente, accidentes con granadas, crímenes pasionales, Carl haciendo explotar el alambique, uno de los bichos de Kalina devorando el domo....y él estaba super lejos, podían estar muriendo como chinches....

Se vistió rápidamente, tanto que se puso los calzoncillos al revés, y cuando le dijo si le apetecía probar el traje miró en dirección a la base. Como chinches, estaban todos muriendo.... resopló... miró a Jim y escribió

- Venga, cinco minutos. Así podemos decir que salimos para comprobar las suspensiones...la verdad es que solo me he puesto el traje un par de veces para disparar con Sue..... venga.

Empezó a ponerse el traje con cuidado, siendo cuidadoso y siguiendo el procedimiento a rajatabla mientras le escribía

- Jim, desde cuando te gustan tanto conducir? Y como es que has acabado aquí? La verdad, no me explico que le ha podido atraer del ejército a una persona tan....bueno...tan como tú, ya sabes, un torbellino....

Sonrió mientras se seguía vistiendo. A partir de ese momento no podría hablar. El comunicador debía estar dentro del traje para que no se estropeara... Así que...tendría que volver a recorrer a la mímica, aunque sería solo cinco minutos. La base estaba a la vista, no había nadie en las cercanías, era seguro, pero por si acaso, cogió una de las armas que había traído Jim, por si acaso, solo por si acaso.

Cargando editor
30/06/2021, 22:50
Jim Foster

De manera bastante desenfadada acabé hablando de mi hermano, no solía referirme a la familia porque tampoco es que tuviera mucho que contar y aparte no me gustaba ir alardeando de los méritos de otros. No fuera que acabaran diciendo que estaba ahí "gracias a" o que tenía un trato distinto de los demás por culpa de un familiar. Al respecto, trataba de evitar las recomendaciones y distinciones que pudieran venir por tener familiares en puestos relevantes - ¿Mi hermano? No le he seguido la pista pero juraría que ocupa un puesto importante en la Space Force - oh, vaya que sí, apuntaba a lo alto, un auténtico crack, un cerebrito de esos aburridillos en un enorme despacho tomando decisiones a través de una pantalla sin pisar un planeta, así me lo imaginaba - no hablamos mucho, la verdad. Él me consideraba un ser inferior, seguramente le de un patatús saber que estoy aquí - aunque podría ser todo lo contrario, igual se sentía orgulloso de que por fin su hermana pequeña había tomado decisiones correctas y valiosas. Lo dudo - creerá que estoy trabajando en la empresa familiar, descolgando el teléfono y llevando una vida cómoda en casa.

- Sabes? Yo no soy tan lista como él pero en lo mío soy la mejor - un brillo en la mirada apareció de la nada cuando empezó a hablar de su hermano. Antes nunca había estado ahí - igual llega un día en que mi propia familia me lo reconoce, pero hasta que llegue ese día... habrá que trabajar duro, no quiero regalos - le doy un pequeño puñetazo de broma en el hombro - De esto ni mu, eh. No quiero que en el domo me traten distinto - había visto lo que había ocurrido con Kurik, al que el cabo Malbone lo trataba con deferencia porque su padre era militar también, el caso de Billy era distinto pero también había esa influencia, incluso Grey tenía contactos en otros domos. Yo prefería pasar desapercibida, quizás también porque si su hermano metiera las narices dudaba que fuera para bien - no es envidia, simplemente yo también quiero demostrar que soy útil.

También me había apuntado a la Space Force porque tenía ideas revolucionarias, además se viajaba un montón y siempre escuchaba historias divertidas - ¿Y tú por qué te apuntaste a la Space Force, pretendes ser un héroe? ¿Que te hagan una estatua y seas recordado en tu planeta?

- La rutina es como la esclavitud, Eylo, algo aburrido. Este mundo necesita movimiento, música... ¿Has conducido el vehículo del domo sobre dos ruedas? Te lo recomiendo, es una experiencia única - y eso que el vehículo tenía seis ruedas, lo que ponerlo a sólo dos resultaba bastante complicado - es la adrenalina, llega un momento en que la máquina, la tecnología es una contigo... como la Fuerza de los Jedis ¿Sabes de lo que te hablo? Ya sabes, fluye a tu alrededor, todo conectado...

Cargando editor
01/07/2021, 12:34
Eylo Yilmaz

Eylo asintió escuchando a Jim, no terminaba de creerse que fuera posible que su hermano no estuviera al tanto del ingreso de Jim a la Space Force, pero tampoco le dio mayor relevancia. Mostró cierta pena, que no compasión, al escuchar lo que decía de cómo la trataba su hermano, pero no indagó más en ello.

No creo que se trate de ser más o menos lista que tu hermano —resolvió pensativo, pero terminó dándole su credibilidad asumiendo que, realmente, no conocía su realidad familiar —. No te preocupes. No diré nada —respondió con sinceridad, a lo que acabó con una sonrisa leve —. Creo que todos buscamos lo mismo, Jim. Sentirnos útiles, demostrar lo que valemos, especialmente a nosotros mismos, ¿no?

Soltó una leve carcajada al escuchar si pretendía ser un héroe y tener una estatua, Eylo negó suavemente con la cabeza sin perder el humor.

Como te dije.. estuve varios años en un orfanato-escuela de la Comandancia —explicó tomando aire —. Para hacerte el cuento corto, hasta los doce viví con mis padres en una estación de investigación orbital, pero fueron asesinados por una facción radical de los Iluminados, los Lucerianos —narró esto con cierta distancia, con el tono de alguien que ha superado ese traumático episodio —. Los que sobrevivimos nos marcaron para vendernos —mostró el tatuaje de su antebrazo—, pero fuimos rescatados por un comando de los Soldados Espaciales. Muchos amigos más murieron en el fuego cruzado, no importaba de quien.. fanáticos, soldados.. ellos habían venido a matar a los lucerianos y nosotros éramos, supongo, la misión secundaria —comentó con cierta acidez.

Me mandaron a un orfanato-escuela, ¿sabes para qué sirven esos sitios? —preguntó retórico, con una sonrisa un tanto cínica —. Para entrenar a futuros candidatos para Soldado Espacial. Me prepararon para esto, pero estaba resentido, y créeme.. lo que pasa en el Domo 12 no es muy distinto a lo que pasaba en el orfanato —comentó con sorna, pero sin malicia —. Cuando fui adulto no hice las pruebas. Me marché. No quería saber nada ni de los Soldados Espaciales ni de la Space Force, supongo que tenía que hacer las paces con mis demonios —soltó una risa desengrasante —. Pero.. con el tiempo he entendido que no todos los Soldados Espaciales son iguales, que vale la pena proteger algo y que, si alguna vez los roles cambiaran, y fuera yo el que debiera salvar a alguien como soldado, lo haría mejor —se encogió de hombros —. No quiero ser un héroe. Yo he tenido una vida buena, dentro de lo que cabe, he tenido oportunidades, he tenido gente que ha creído en mi.. así que, he vuelto al redil, supongo que para equilibrar el karma favorable que tengo encima.

Eylo no rebatió el punto de vista de Jim acerca de su símil de la rutina y la esclavitud, tenía claro que su trayectoria vital les hacia ver aquello de formas opuestas, aunque en lo tocante a la conducción negó con la cabeza.

No sé conducir —admitió un poco azorado. añadiendo con humor a continuación —. Ahí arriba hay pocos vehículos de ruedas. No sé que es esa Fuerza ni los Jedis —puso una leve mueca al no reconocer la referencia cultural —. Pero sé lo que describes. En Eridani lo llamamos Teluria. Lo que nos conecta a los demás y lo que nos rodea. Quizá mi experiencia es más con naves, pilotando, que conduciendo vehículos terrestres, pero.. sí, te entiendo.

Notas de juego

[Trabajando en ellou...]

Cargando editor
01/07/2021, 16:38
Sargento Dunne Grey

A darse de madres. Exterior

Mes 1. Día 9. 17.30 p.m

Grey y Mikhail

- ¿Psicoanalizarte, Kurik?...  No podría aunque quisiera, no soy psicóloga, y creo que de haberlo sido, me habrías roto todos los esquemas... - Respondió la fémina mientras recargaba su fusil con presteza.  La mujer había sido bien entrenada en el manejo de armas ligeras. Era muy metódica a la hora de utilizar el rifle, y su puntería, como ya había demostrado, bastante buena - De acuerdo, no hablaré de tu padre, ¿quieres que te hable del mío?... Era violento, como tú. Ni mi madre, ni mi hermana, ni yo valíamos nada para él. Muchas veces le deseé la muerte...- Dijo con frialdad en la voz, mientras se reposicionaba para atacar al artrópodo gigante, mientras seguía el hilo de la conversación - Esos débiles de mierda han sido seleccionados por algo, Mikhail. Cubren las habilidades que tú no puedes realizar ni llevar a cabo por falta de competencia. No sabes de geografía, ni de biología, no sabes de medicina, ni de tecnología o mecánica... Sin nada de eso, Kurik, no hay Space Force... Nuestro cuerpo espacial tiene su rango porque escoge y prepara a los mejores. Con el tiempo verás que esos "inútiles" serán los que fabriquen naves para llegar hasta el origen mismo de los skulls... No deberías subestimarles... Y sobre Martín, ríete de él, pero quedó ganador en la carrera contra todo el Domo...

Ella no estaba por discutir y sabía que Kurik le afrentaría con palabras sus comentarios, pero alguien debía decirle la realidad que tenía por delante, y de alguna manera, Grey no le temía, a pesar de saber que podía pasarlo mal si el joven se revolvía contra ella.

- Y no soy tan buena con el arma - Dunne sonrió levemente, sabía que su compañero no esperaba la puntería que ella tenía, la mujer tendía a sorprender con sus capacidades - No tengo la habilidad natural que algunos poseen, pero he entrenado mucho y a diario, porque en el campo de batalla lo que importa no son los puños, es esto - Levantó el fusil con seguridad, antes de apuntar de nuevo a la criatura y volver a dispararle, haciendo que el ser emitiera un criqueo de protesta ante la siguiente herida abierta de su cabeza.

Hacía unos momentos la escolopendra se había lanzado hacia Kurik para hacerle  dos ataques, el muchacho pudo esquivar la primera embestida, pero la segunda le impactó de pleno en la pierna, de manera que el bicho le mordió, y como resultado Mikhail notó un hormigueo, como si se le durmiera la extremidad, mientras le preguntaba a voz en grito a Grey de si tenía el antídoto.

- ¡No lo tengo! ¡Para eso voy a tener que llamar a unos cuantos idiotas para que te salven la vida! - Chilló comprobando que el ser se dirigía ahora hacia ella con el fin de atacarle, esquivando sobradamente las mandíbulas del miriápodo gigante - Hoy no preciosidad, quizás otro día - Dijo con suficiencia mostrando además, que era rápida de movimientos, quizás en el ring nunca hubiera ganado, pero para atraparla hubiera sudado un rato.

- ¿No quieres matarla tú? Te cedo los honores... - Lo peor de todo era la tranquilidad de la fémina, la cual, parecía estar disfrutando el encuentro con aquel ser, así como la demostración ante Mikhail que a veces las apariencias engañaban

 

- Tiradas (8)

Motivo: Disparo cabeza

Dificultad: 20

Habilidad: 15

Tirada: 1 9 10

Total: 9 +15 = 24 Éxito

Objetivo: Daño bicho

Tirada: 2d6

Modificador: 4

Tirada: 1 3

Total: 4 +4 = 8

Motivo: Ataque bicho Par Grey Impar Kurik

Tirada: 1d20

Resultado: 7 [7]

Motivo: Ataque bicho Par Grey Impar Kurik

Tirada: 1d20

Resultado: 8 [8]

Motivo: Ataque bicho Kurik

Dificultad: 0

Habilidad: 15

Tirada: 1 2 3

Total: 2 +15 = 17 Éxito

Motivo: Ataque bicho Grey

Dificultad: 0

Habilidad: 15

Tirada: 1 3 9

Total: 3 +15 = 18 Éxito

Motivo: Esquiva Grey

Dificultad: 0

Habilidad: 15

Tirada: 7 8 10

Total: 8 +15 = 23 Éxito

Objetivo: Atque bicho Kurik

Tirada: 2d6

Tirada: 5 6

El dado ha explotado: 3

Total: 14 = 14

Notas de juego

PV bicho: 30/40

PV Kurik: 5/30 (Esquiva con éxito que el daño que te viene no es chico....XD)

Cargando editor
01/07/2021, 19:19
Eylo Yilmaz

Entrada de la sala de telecomunicaciones.

Día 13. Tarde.

Jim y Eylo

Eylo asintió escuchando a Jim, no terminaba de creerse que fuera posible que su hermano no estuviera al tanto del ingreso de Jim a la Space Force, pero tampoco le dio mayor relevancia. Mostró cierta pena, que no compasión, al escuchar lo que decía de cómo la trataba su hermano, pero no indagó más en ello.

No creo que se trate de ser más o menos lista que tu hermano —resolvió pensativo, pero terminó dándole su credibilidad asumiendo que, realmente, no conocía su realidad familiar —. No te preocupes. No diré nada —respondió con sinceridad, a lo que acabó con una sonrisa leve —. Creo que todos buscamos lo mismo, Jim. Sentirnos útiles, demostrar lo que valemos, especialmente a nosotros mismos, ¿no?

Soltó una leve carcajada al escuchar si pretendía ser un héroe y tener una estatua, Eylo negó suavemente con la cabeza sin perder el humor.

Como te dije.. estuve varios años en un orfanato-escuela de la Comandancia —explicó tomando aire —. Para hacerte el cuento corto, hasta los doce viví con mis padres en una estación de investigación orbital, pero fueron asesinados por una facción radical de los Iluminados, los Lucerianos —narró esto con cierta distancia, con el tono de alguien que ha superado ese traumático episodio —. Los que sobrevivimos nos marcaron para vendernos —mostró el tatuaje de su antebrazo—, pero fuimos rescatados por un comando de los Soldados Espaciales. Muchos amigos más murieron en el fuego cruzado, no importaba de quien.. fanáticos, soldados.. ellos habían venido a matar a los lucerianos y nosotros éramos, supongo, la misión secundaria —comentó con cierta acidez.

Me mandaron a un orfanato-escuela, ¿sabes para qué sirven esos sitios? —preguntó retórico, con una sonrisa un tanto cínica —. Para entrenar a futuros candidatos para Soldado Espacial. Me prepararon para esto, pero estaba resentido, y créeme.. lo que pasa en el Domo 12 no es muy distinto a lo que pasaba en el orfanato —comentó con sorna, pero sin malicia —. Cuando fui adulto no hice las pruebas. Me marché. No quería saber nada ni de los Soldados Espaciales ni de la Space Force, supongo que tenía que hacer las paces con mis demonios —soltó una risa desengrasante —. Pero.. con el tiempo he entendido que no todos los Soldados Espaciales son iguales, que vale la pena proteger algo y que, si alguna vez los roles cambiaran, y fuera yo el que debiera salvar a alguien como soldado, lo haría mejor —se encogió de hombros —. No quiero ser un héroe, ni tampoco busco estatuas. Yo he tenido una vida buena, dentro de lo que cabe, he tenido oportunidades, he tenido gente que ha creído en mi.. así que, he vuelto al redil, supongo que para equilibrar el karma favorable que tengo encima.

Eylo no rebatió el punto de vista de Jim acerca de su símil de la rutina y la esclavitud, tenía claro que su trayectoria vital les hacia ver aquello de formas opuestas, aunque en lo tocante a la conducción negó con la cabeza.

No sé conducir —admitió un poco azorado, añadiendo con humor a continuación —. Ahí arriba hay pocos vehículos de ruedas. No sé que es esa Fuerza ni los Jedis —puso una leve mueca al no reconocer la referencia cultural —. Pero sé lo que describes. En Eridani lo llamamos Teluria. Lo que nos conecta a los demás y lo que nos rodea. Quizá mi experiencia es más con naves, pilotando, que conduciendo vehículos terrestres, pero.. sí, te entiendo.