Partida Rol por web

El guardia del pilum se acercó a Kronn, pensando si atravesarle el pecho, pero la voz de su compañero se alzó, aguda a causa del dolor.

- ¡Me cago en los dioses, traedme agua, imbéciles! ¡Y avisad al físico!

Su compañero, supuestamente de menor rango (aunque no entendéis mucho de eso), se acercó dubitativo, arrodillado ante él.

- Pe-pero, estará durmiendo y...

Pero sus palabras fueron interrumpidas por Marco, que le agarró de la pechera, trayéndole hacia él, y clavando la mirada en él.

- Me importan tres cojones sus mierdas, ¡me muero de dolor, por Jupiter! Y a esos dejadlos en paz, no podrán atravesar la verja, ¡y cuando acaben con los otros, los veteranos vendrán a por ellos!

Pero antes de marcharse, Marco señaló con su dedo a Kronn, y su rostro abrasado fue una visión estremecedora.

- Más te vale aguantar en la arena, escoria. Porque pienso ir a por tí...

Quirón se reía no a carcajadas pero sí de forma visible, aún olía a carne quemada y las tonterías que iban haciendo esos guardias le divertía. - Pensaba que el entretenimiento éramos nosotros.. jeje. - bromea mientras le da un golpecito con el codo a Kronn.

Aunque tras las palabras de aquel "jefecillo", le hizo pensar en la posibilidad de peligro de sus iguales.

Quizás deveríamos volver con los demás.. - les comenta a los compañeros sin que se notase el poco nerviosismo que sentía.

Sonrio de medio lado ante las palabras de Marco. -No pienso morir ni aqui ni en la arena, Marco, asi que cuando quieras tú y yo solos, "cara quemada"...-

Le increpo yendo a la pared y arrancando la antorcha que queda.

-Vamos Quirón, recibamos a los "veteranos"....- Le comento a éste, y con un movimiento de cabeza, le hago una seña a Ptolomeo para que venga también....

Sigue a Kronn para recibir a los susodichos.. a ver qué es lo que pretenden que hagamos. Como se pasen un pelo.. Quirón no estaba de muy buen humor, lo iban a trasladar, tenía hambre y encima le están robando horas de sueño..

Estaba un poco acojonado por el hecho de que los veteranos quisieran venir a por ellos, pero no habría problemas. Cuando estuvieran allí, los partirían en dos.

- ¡Vamos alla!