Partida Rol por web

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Vicky habría querido ver el momento de gloria cuando Halberd confirmó que había arreglado el elevador, pero parecía ser que un Xavier inconsciente concentraba ahora la atención.

Escuchó lo que había pasado y la sugerencia de Shidi... que repetía el problema que Vucky ya había comentado hacía unas horas. Aún así actuaban como si fuera algo nuevo y asombroso. Increíble. Al menos no se iban a lanzar en línea y de cabeza, lo que era positivo, pero la dinámica del grupo empezaba a molestarle. 

Sin abrir la boca, asintió a las nuevas órdenes y avanzó daga en mano. Con suerte podrían acabar con aquello rápidamente y subir con el ascensor. Aquella misión parecía estar gafada y no le apetecía estar horas en aquella nave.  

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

— Gracias Emil, pero ha sido nuestro, nuestro trabajo. Sin ellos en la forja no lo hubiera hecho ni tan rápido ni tan bien. — que, para ser humanos, Vicky y Shidi habían hecho un trabajo excepcional. Hasta Briaeros, que estuvo dándole al fuelle mecánicamente durante horas sin quejarse ni una pizca. Un trabajo muy apropiado para el alemán, desde luego.

Pero ya tocaba moverse de nuevo, y así se dispuso a hacer. Había escuchado que su grupo era el del elfo, pero la reparación del elevador y la inconsciencia de Xavier le habían distraído. Precisamente estaba pensando en que no había caído en el momento, pero tal vez si le hubiera acercado un pie al grueso cable pelado del panel, El Predicador se hubiera despertado de un salto recitando pasajes de la biblia en varios idiomas y ya estaría operativo de nuevo.

Y en esos pensamientos estaba cuando se vio solo en el pasillo y se dio cuenta de que se había equivocado: en su distracción, en lugar de seguir las canas de Emil, por automatismo simplemente se había puesto a caminar detrás de otra cabeza considerablemente más llamativa por color y tamaño: la de James Theodore Shidi.

Halberd se rascó la perilla tratando de ubicarse en esos pasillos. ¿Por dónde sería el mejor camino?

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

El descenso a las profundidades metálicas de la naveta auxiliar estrellada había transcurrido lento, pero seguro. Primero el grupo de Rifts Warriors había recibido la magia que les permitía respirar bajo el agua de las manos y la varita potenciadora del clérigo Joram Kyte, quien les había avisado de que le quedaban pocas cargas, un total de seis, y gastaba dos por cada grupo de seis Rifts Warriors a los que extendía el conjuro durante cuatro horas. Eso suponía que, contando este, el grupo contaba con un total de tres intentonas de resolver lo que estaba pasando en las entrañas de la Colina Negra. Si bien más allá de eso, podría conceder cada día la capacidad de respirar bajo el agua a seis aventureros durante tres horas, un poco menos de la mitad de su poder actual gracias a la varita potenciadora.

Tras eso, el descenso y chapoteo por las húmedas cuevas cavernosas, aunque pronto Halberd había podido secar las ropas y armaduras de todos, si bien no había eliminado del todo la suciedad de las aguas contaminadas del Estanque de las Lágrimas. Los seres sombríos de las cuevas no tenían noticias, nada se había movido en el lugar durante la ausencia de los aventureros.

Finalmente, el acceso a las ruinas metálicas de la nave propiamente dicha, enterrada probablemente muchos siglos atrás bajo una colina artificial por los bárbaros numerios, al considerarla tabú.

El lugar parecía tranquilo, aunque Emil, gracias a Glo-Glu confirmó que quedaba una presencia potencialmente hostil en este nivel o cubierta.

Halberd completó la reparación del elevador central mientras Xavier echaba un desafortunado vistazo. Finalmente, Emil decidió que era necesario explorar las últimas zonas inexploradas de esta cubierta antes de seguir avanzando, no fuera a ser que en algún lugar se encontrase el remedio para los nanoides que bloqueaban el cerebro de Khonnir Baine. Eso supondría muy probablemente un combate a muerte contra otra bestia inhumana, otra más. Y probablemente no fuera la última en aquellas ruinas.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Cuando dicen que te van a cuidar como un bebé, no mencionan que lo primero que le dan a un recién nacido son dos azotes.

En ese momento me sentía así. Dolor y dolor.

- ¡¡Pero qué coño!! - Me dije despertándome con un salto. O más bien un espasmo. 

- ¿¡Por qué tengo la cara tan caliente!? ¿¡Qué me habéis hecho!? Seréis...- Dije que Alexa se incorporaba a mi lado.

Bueno. Siendo ella, no podía ser nada tan grave. 

¿O no?

Cuando te resucitan seguro que algo se queda detrás. ¿Y quién dice que no la habían cambiado por algo? ¿Quién dice que no era una psicópata? Mira al concejal. Ahora tenía la misma personalidad que una hoja de lechuga. Habría que echarle un ojo. Como a todos. Tendría que asegurarme de que todo estaba en su sitio. Y de que no habían profanado mi cuerpo inconsciente.

- ¿Dónde está todo el mundo? - Le pregunté a Alexa al ver que todo Dios había ahuecado el ala.  

Empecé a recordar. El invernadero. Las raíces. Los pigmeos hechos de guisantes.

- ¿Quién tiene mechero y combustible? ¿Alguien? ¿No? - Dije con ganas de acciones sádicas.

- Putos veganos. - Maldije.

Me incorporé. Saqué el polvo de la armadura. Era bastante resistente para el trote que le exigía.

- ¿Cómo estamos? ¿Llevo mucho tiempo KO? - Terminé por preguntar.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Cuando llegó al elevador, traían a Xavier a rastras, despatarrado. El arcano se preguntó si le pasaba algo grave o había muerto, solo para saber que se había tropezado el solo, con alguna raíz o alguna tortuga fenecida imaginaria, dándose un buen porrazo en la cabeza. Repentinamente el hacedor de humor era como si cobrara protagonismo de uno de sus malos chistes. Borró su sonrisa divertida de la boca cuando el explorador se recuperó airado y escuchó al albino dando instrucciones. Junto a Muxu debía seguir al grupo del líder.

- ¿Quizás estés sofocado después de recobrar el sentido y por ello esos calores? - propuso al mercenario que preguntaba sobre cómo se sentía al recuperar la consciencia. La verdad es que tenía la cara enrojecida, eso era cierto. Como si le hubieran estampado unos cuantos cachetes. O bofetones -. Quizás al caer estampaste tu cara contra el suelo - opinó encogiéndose de hombros, no queriendo especular sobre si le habían atizado cuando estaba inconsciente, ni quien, aunque entendería el por qué.

Intentó avanzar junto a su compañera según las indicaciones que daba Emil, pero como si de otra mala broma se tratara, pero esta vez no de Xavier, compañeros se interponían constantemente, parándose en mitad de los accesos estrechos y bloqueándolos y solo moviéndose para que otros ocuparan ese espacio, y volvieran a bloquearlo, que en teoría debería estar desocupado para que el movimiento del grupo fluyera. Parte del grupo del elfo se marchó por los pasillos y los piquetes de compañeros seguían bloqueando el avance de otra parte. Daeron suspiró con resignación.

- Por favor, no os quedéis en mitad de las puertas - pidió a quienes correspondían -. Bloqueáis el paso al resto - comentó por si no se habían dado cuenta. Y teniendo que echar mano de la paciencia al no poder progresar, el joven se dedicó a mirar a la sala del elevador. Eso le hizo caer en la cuenta de algo. Miró a los lados y no vio a Halberd. Tenía algo que preguntarle al respecto.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

La única respuesta de Alexa fue una leve sonrisa, en parte de alivio al ver que realmente se encontraba bien, en parte divertida por lo cómico de la situación - Debes retroceder por ese pasillo - susurró aprovechando la proximidad con Callahan - primera puerta a la izquierda, Emil cree que aún queda algo en esta planta, haremos dos grupos, usaremos dos entradas a la vez.

Sin más, Alexa se marchó en pos de Shidi, que había desaparecido por la sala en la que Xavier había quedado inconsciente, esperaba no encontrarlo en el mismo estado al entrar. Supuso que una vez en la sala se colocarían en disposición de combate, pero eso ya era cosa de James. Se aseguró de portar su ballesta y tener la daga a mano.

Le hubiera gustado albergar la esperanza de que sea lo que sea que sintiera Emil, no acabara siendo algún tipo de enemigo pero, visto lo visto, ni siquiera fue capaz de intentarlo.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Bueno... esta vez parecía que todos (casi todos) estaban ya preparados. Emil había creído escuchar algún quejido, pero no le dio importancia. Miró a los presentes mientras invocaba sobre sí mismo el poder del escudo.

- Bien- dijo en un susurro- En diez segundos, abro la puerta y entramos. Detecto, en principio, solo una presencia.

La verdad es que el elfo albino sentía cierta preocupación. Aunque no lo pareciera no era partidario de exterminar sin más, aunque lo cierto es que todo lo que había aparecido en estos subterráneos (salvo la tribu de reticentes aliados que quedaba a su espalda, cercano al lago subterráneo) había intentado matarles.

No, se mirase como se mirase, no podía permitirse perder tiempo, ni arriesgarse a nuevos ataques. Tenía claro lo próximo que iba a hacer.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Raxus asiente ante el susurro de Emil. Si solo había una presencia en esa sala, no deberían tener problemas en acabar con ella, siempre y cuando fuera hostil y no fuera una maquina de matar. Esperaba el enano que no fuera el último caso. 

Agarra con firmeza el hacha y espera a que el jefe abra la puerta...

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Refunfuñó por lo bajo.

¿Por qué no han dejado que siga inconsciente?

-Predicador, sé que te gusta oírte a ti mismo y que te encanta tu voz pero, ¿puedes cerrar el pico? -dijo con voz de pocos amigos-. Equilibrium, Vicky, Alexa, Callahan, seguidme. No os retraséis y estad alertas. Cuando Emil dé la orden, entraremos. Y si hay alguien contra el que tengamos que batirnos el cobre, nada de atropellarse. Habrá carnaza para todos. 

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Se notaba que Shidi todavía no había sufrido ninguna tropelía. ¿Qué pretendía? Mis preguntas eran completamente congruentes.

En fin. Dios da pan a quién no tiene dientes.

- No es mi por mi voz, sino por la del Señor que os hablo. - Dije calmadamente. - Pero sea, tenemos un objetivo. Tú primero "compadre". -  Le indiqué para seguir con la procesión.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Parecía que había enemigos en la habitación a la que iban a adentrarse, y aunque Muxu se encontraba en retaguardia del grupo, junto a Daeron, no iba a jugársela.

Empezó a mover las manos y a pronunciar unas palabras y no tardó en conjurar un hechizo protector. Al menos si algo les atacaba no quería ser una presa fácil.

Luego centró su vista en la puerta que Emil estaba a punto de abrir.

- Este lugar no dejará de darnos sustos... - Comentó para sí y para Daeron, que era el que tenía más cerca. Ella tenía la sensación de que seguían avanzando de manera demasiado confiada.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Y finalmente, no pudiendo avanzar por el acceso Sur debido al embotellamiento de gente y el taponamiento de las puertas, Muxu y Daeron optaron por no seguir al pie de la letra las indicaciones de Emil. No lo siguieron y en vez de eso desandaron un trecho, saliendo por la puerta Oeste y accediendo por otra puerta al pasillo donde el albino y el resto se preparaban para entrar en una puerta cerrada en la que, por los gestos que hacía el elfo, se presuponía que podría haber peligro. Allí el arcano mantuvo las puertas abiertas de ese acceso. Si hacía falta retirarse o moverse solo faltaba que reprodujeran los bloqueos que tantos problemas daban en el avance.

Ante las palabras de Muxu, Daeron se limitó a dibujar media sonrisa y asentir con la cabeza. La ex-alcaldesa tenía razón. A cada paso que dieran encontrarían un pequeño horror nuevo en aquella nave alienígena. Hasta que encontraran al grande.

- Y sin embargo no hay alternativa - murmuró a su compañera, atento para ver qué se vería una vez Emil abriera la peligrosa puerta.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Vicky tomó la posición de vanguardia asignada tras entrar en el extraño invernadero, daga en mano. Se colocó como pudo junto a las puertas, esperando la señal, mientras asentir a las palabras de Shidi. 

- Y en la medida de lo posible, no bloqueemos el paso al resto del grupo, ni para avanzar , ni para retroceder si se diese el caso. - se permitió añadir. No quería que se repitiese por enésima vez la misma situación, así que prefería recordarlo en voz alta mil veces. Más vale prevenir que curar, que se dice.

Tras eso, Vicky se mantuvo en silencio, esperando la señal al otro lado de la puerta.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Alexa ya se encontraba en ella, la antesala, la anticipación, el momento justo antes de que se desate el caos. Casi podía olerlo, le pidió a Emil, mentalmente, que no se demorase demasiado, prefería el caos y la urgencia del propio combate que aquella sensación de lo inminente que aún no llega.

Dio un paso atrás, fruto de esa sensación, el grupo al que pertenecía se había apelotonado ante la puerta, desde luego la idea de dividir el grupo le pareció bastante acertada en aquel momento.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

-Es la señal -dijo ante las voces de Emil-. Actuemos rápido y en orden. Avanzad tras de mí y no os entorpezcáis los unos a los otros. Si es posible, buscad posiciones de ventaja. ¡Adelante!

Abrió la puerta, enarboló el martillo y avanzó. Ante ellos se alzaba una extraña criatura, sin duda arbórea, y aparentemente peligrosa.

-Veneno -susurró a sus compañeros-. Tened cuidado. 

¿Desde cuándo una puta lechuga descerebrada es una máquina de matar? Mierda de mundo este. En fin, hora de prepararse una ensalada, Shidi.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS

Ni la más mínima convicción, oye. Abrió la puerta exigiendo rendiciones antes de mirar. Y casi mejor, porque al menos, así, no se le quedaba cara de tonto. ¿Una puñetera planta? ¿en serio, Jorge? ¿y qué sería lo próximo? ¿un cafetal asesino?

Contuvo las ganas de carcajearse y, acto seguido, al ver como de su grupo era el único en avanzar, contuvo las ganas de soltar improperios. Sus compañeros actuarían, y lo harían bien. Aunque como de costumbre un poco desorganizados y descordinados, por mucho que intentara lo contrario. De todas formas, al menos en apariencia, la cosa iba mejor esta vez. Tanto Xavier como Shidi como Briareos estaban en posición óptima para poder atacar en los próximos instantes con toda su capacidad. E, incluso, relativamente cerca se encontraban, en un extremo Xavier y en otro Raxus, ambos más que preparados para atacar. Incluso Equilibrium y Vicky podían llegar en el mejor de los casos a actuar. 

A ver si con un poco de suerte nos cargamos pronto al bicho, y no tenemos que lamentar heridas. Pensó el elfo albino para sí.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Los Rifts Warriors se organizaron para entrar a la vez por dos puertas a la cámara donde Emil, gracias a Glo-Glu, había detectado una forma de vida no pensante.

Lo que encontraron resultó ser una planta movediza de gran tamaño y hedor pestilente (semejante a pescado podrido). La planta consistía en un bulbo del tamaño aproximado de un torso humano sostenido sobre multitud de pequeñas raíces movedizas. La planta contaba además con tres largos zarcillos con gran alcance, pero con movimiento lento y lánguido, aunque peligroso, terminados en cabezas de mazas naturales con púas que goteaban veneno pestilente.

Nada más ver a la planta, Thomas le disparó un certero virote. Después, un fortísimo hachazo de Emil y otro casi igual de potente de Raxus terminaron el trabajo. Shidi destrozó el bulbo de un martillazo para asegurarse y otros la pincharon después, pero ya estaba muerta.

El lugar apestaba, no sólo por la planta en sí, aunque era la principal fuente de hedor, sino también por el cercano olor a cadáveres en descomposición procedente de pequeñas cámaras anexas. Posiblemente aquí habría encontrado su fin una de las compañías aventureras enviadas a investigar la desaparición de los fuegos de Antorcha.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS.

Halberd esperaba la señal de Emil. Cuando éste avanzó, esperó a que todos los brutos pasaran para liarse a mamporros con lo que hubiera detrás de la puerta, que a juzgar por los sonidos de golpes efectivamente era hostil. O si no lo era, bueno, ahora sí.

Entonces se dispuso a cruzar, pero ahí apareció Muxu y taponó la salida. No es que Muxu tuviera un cuerpo corpulento ni mucho menos. Al contrario, su amiga estaba bastante canija por lo poco que comía, pero resultaba que él necesitaba todo el ancho de las puertas para poder pasar, así que no tuvo más remedio que esperar.

Por suerte Muxu no tardó mucho, y aparentemente la lucha había terminado en un momento. La antigua alcaldesa se desplazó y Halberd se asomó un poco para ver qué había pasado. Como era de esperar, no vio nada más que una aglomeración de Rifts Warriors, y francamente no tenía ganas de meterse entre todos aquellos patilargos a intentar ver algo con sus culos pegados a la cara.

Así pues, se giró sobre sus talones y se encaminó a la puerta que había quedado atrás. Emil les había dicho que sólo quedaba un "algo", así que no pasaría nada por echar un vistazo antes de que viniera la marabunta.

FECHA: 8 DE ABADAR DE 4715 RA, DÍA DEL JURAMENTO.

HORA: MEDIA MAÑANA.

LUGAR: BAJO LA COLINA NEGRA: CUBIERTA CIENTÍFICA.

CLIMA:(EXTERIOR): INVERNAL. CIELO DESPEJADO. TEMPERATURAS FRÍAS

Lo lógico hubiese sido que entrásemos como poseídos por el diablo.

Armas en ristre. Aleteando con ellas en el aire como niños.

Por el contrario, salvando una pequeña descoordinación y una actitud de "tonto el último", la cosa había salido bien. Casi no había dado tiempo a ver como era el bicho en todo su esplendor. 

- ¡¡¡Zap, chop, classsss!!! - Fue todo el sonido que me dio tiempo a escuchar. Y me quedé con el cuchillo a medio lanzamiento.   

Mejor para mí. Siempre me sentía un poco impotente al ver las armas tan grandes del resto de los Rifts.  Algo a lo que prestar atención más pronto que tarde.

La "planta" rezumaba líquido y olor a lonja barata por todos lados.

Emil nos advirtió. Ni loco pensaba tocar nada.

Tal vez por eso siempre me quedaba con los peores juguetes. Pero le tenía aprecio a mi piel. Y a mis órganos internos. A cada célula de mi cuerpo ya puestos. Incluso a las que se desprendían para dejarme para siempre.

Nunca había suficiente Callahan para repartir. 

Y aquellos restos parecían demasiado frescos para mi estómago.

Mal yuyu. 

- Bueno, pues, todo listo entonces. Buen trabajo y todo eso. - Dije dándole una palmada a Shidi para alejarme del enésimo vertedero biológico que encontrábamos.