Partida Rol por web

Los caballeros parten hacia Jamir, a buscar a Máscara de Muerte.

Llegas a la zona de Jamir, terreno casi inexplorado. Sabes a ciencia cierta que el caballero del Dragón se aventuró en una ocasión por estos lares... Sólo que este caballero ha muerto y no puedes pedirle consejo sobre cuáles son los peligros que entraña el camino...

Por lo pronto, ante ti se encuentra una pared montañosa escarpada. Toca ascender por ella. No es que los caballeros estéis muy acostumbrados a trepar, y aunque vuestros poderes son sobrehumanos, el alpinismo no se encuentra entre vuestras virtudes. Sin cuerdas, sin ninguna ayuda, hay que ascender la pared rocosa hasta la cima, única manera de proseguir el camino.

Llegas a la zona de Jamir, terreno casi inexplorado salvo por Mu y unos pocos. Gracias a los poderes de Mu, llegáis en un instante, dado qe os teleporta al lugar. Mu conoce cuáles son los peligros que entraña el camino, y aún así sabe que éste es francamente peligroso, incluso para él.

Por lo pronto, ante vosotros se encuentra una pared montañosa escarpada. Toca ascender por ella. No es que los caballeros estéis muy acostumbrados a trepar, y aunque vuestros poderes son sobrehumanos, el alpinismo no se encuentra entre vuestras virtudes. Sin cuerdas, sin ninguna ayuda, hay que ascender la pared rocosa hasta la cima, única manera de proseguir el camino.

La vista no era muy alentadora... un desolador valle que daba pie a una escabrosa montaña que cercaba el paso. Al parecer no quedaba otra opcion que escalarla, mi entrenamiento me habia preparado para millones de cosas... pero el alpinismo no era uno de mis deportes favoritos.

Adelante.. no hay tiempo que perder!!!

Con un pensamiento me di fuerzas para seguir adelante, este no era el momento para quejarse del camino elegido.

Llegas a la superficie sin mayores problemas. Una espesa nieblina te impide ver nada de nada. Está todo borroso a causa de la niebla, así que es difícil distinguir por dónde ha de avanzarse.

Después de despedirme de mis compañeros me giro hacia Mu y le hago un gesto con la cabeza.

Cuando quieras.

Llegamos a JAmir rápidamente gracias a los poderes de Mu, me quedo mirando fascinado el paisaje.

Muy pocos han tenido la suerte de contemplar este paisaje, disfrutemoslo.

Al observar la situación entiendo rápido que tenemos que escalar esa montaña.

Mu, para otra vez intenta dejarnos en la cima.

Me acerco a la montaña y comienzo lentamente a escalarla.

Los poderes de teleportación de Mu son verdaderamente útiles.

Tanto Dohko como Mu intentan trepar la escarpada montaña, pero ya sea por lo poco habituados que están de realizar esta tarea, ya sea por el peso y la incomodidad de la armadura para realizar tales menesteres, los dos se sienten incapaces de alcanzar la cima.

Logre subir con facilidad esa pendiente... si bien no podia volar literalmente mi cuerpo era liviano como una pluma. Al llegar a la cumbre del risco una densa bruma cubria todo a mi alrededor... tenia que tener cuidado si no queria caer en alguna trampa o en algun otro precipicio.

De pronto, de la nada aparece un puño que te golpea, haciéndote mucho daño en el rostro. Das un par de pasos hacia atrás, con sangre manando de tu mejilla.

Ahora sí que has visto la imagen que te había pasado desapercibida a causa de la nieblina. La mano, que aún continúa estirada en dirección a ti, no es más que huesos. De hecho, todo el caballero no es más que un esqueleto con una armadura rota. ¿Te encontrarás acaso en el cementerio de armaduras que hay justo antes de llegar a la casa de Mu?

Junto al esqueleto aparecen dos más, idénticos. Sí. No cabe duda alguna de dónde te encuentras.

-Nadie penetra en estos territorios. O vuelves por donde has venido, o haremos que te conviertas en uno de nosotros.

Sentís cómo en la superficie se está entablando un combate.

Sabes perfectamente que según se sube, al poco, y cubierto por una espesa nieblina, el camino prosigue a través del cementerio de armaduras, generalmente custodiado por una serie de caballeros-esqueleto (almas en pena realmente) que se encargan de impedirle el paso a todo el mundo, incluido al amo del lugar.

Después de varios intentos de escalar la montaña me encuentro situado en la falda, mirando contrariado a la escarpada pared.

Parece más fácil de lo que realmente es, debería entrenar más.

Fatigado miro a Mu.

¿Hay algún problema para no poder transportarnos hasta la cumbre?

De pronto noto como en la superficie se está entamblando un combate.

Deberíamos subir rápido para descubrir quien está enfrascado en el combate.

Paso mi antebrazo por mi mejilla donde el esqueletico puño me habia impactado. No era uno solo, sino 3 en total... todos caballeros muertos que ahora hacian de guardianes en este lugar. No tenia tiempo para pedir permisos asi que solo habia una manera de seguir.

-No tengo tiempo que perder en ustedes, mi mision es demasiado importante para terminarla aqui... lo siento espiritus pero voy a tener que pasar a traves de ustedes!!!

Extiendo mis manos formando la constelacion del Fenix, a la vez que mi cosmos se expande todo a mi alrededor y la figura de un ave de fuego se dibuja en mi espalda.

-ALAS DEL FENIX VOLADOR!!!!

El poder del fenix envuelve a mis enemigos mandando a dos de los esqueletos por los aires, desintegrandolos hasta hacerlos polvo... Uno solo queda en pie malherido, pero todavia bloqueando mi paso.

El esqueleto que queda ha visto cómo has arrollado literalmente a sus compañeros, pero no parece importarle. Le has arrancado de cuajo uno de sus brazos, y la cabeza, y sin embargo sigue avanzando hacia ti. Lógico: no siente dolor alguno. Ya está muerto.

Es el que te había golpeado antes, y parece dispuesto a intentarlo otra vez.

La escena parecia sacada de una pelicula de terror... de los 3 esqueltos originales solo queda en pie uno, pero sin su brazo derecho y su cabeza... de todas maneras el resto del cuerpo aun intentaba golpearme.

Recibi el impacto de su brazo sin inmutarme, estaba tan concentrado en lo que tenia que hacer que no senti dolor y ni siquiera sabia si en realidad me habia hecho daño. Guarde mi puño a la altura de mi cintura y girando con todo mi cuerpo descargue el peso de mi ser sobre el plexo solar del esqueleto

El esqueleto se desintegra, literalmente, no quedando de él ni polvillo que pueda recordar su existencia. Parece que ahora la nieblina se disipa ligeramente, y que por fin se puede avanzar.

Ves un estrechísimo puente, y lo cruzas sin problema alguno, hacia el otro lado.

Vale, se ve mejor, pero... El calor es infernal. Se ha pasado de hacer casi frío, a que la nieblina que te rodea parece vapor de agua hirviendo. Sin duda, otra de las pruebas para llegar hasta el final del trayecto. Mu no escogió mal el lugar donde colocar su humilde morada, no. Allí, por bonito que fuese el final del camino... ¿Quién iba a osar perturbarle, si para llegar debía pasar por todo aquello?

Mu toma la determinación de teletransportaros a la cima. Teóricamente, escalar aquel muro no debería haber sido especialmente difícil para dos caballeros de oro, pero se ve que el alpinismo no estaba entr vuestras virtudes, así que mejor recurrir a habilidades mágicas para llegar de una vez a la cima y poder continuar el camino.

Llegáis por fin a la superficie sin mayores problemas. Una espesa nieblina os impide ver nada de nada. Está todo borroso a causa de la niebla, así que es difícil distinguir por dónde ha de avanzarse.

Mu conoce el camino, y así te lo indica. Hay un sendero hacia la derecha, atravesando un estrechísimo puente. Te indica a su vez que aquí tendrá lugar la segunda de las pruebas que han de superarse para poder llegar a su humilde hogar: esqueletos fantasmas. Los hay por todas partes, caballeros fantasmas protegiendo aquel lugar, que no es otra cosa que un antiguo cementerio de armaduras. Mu avisa al patriarca que debe estar alerta, mirando a todas partes, pues suelen aprovecharse de la nieblina para atacar por sorpresa.