Partida Rol por web

Elia se encontraba acomodandose paseando por el Ludus, se habia acercado al cuarto del Medico donde habia estado ella se cuando cayo desmaya. Tenia deseos de hablar con la egipcia por si le habia dado algo raro, aunque ella se habia recuperado bien.

Ademas se encontro a una mujer diferente a Sekmeht. Livia se encontraba ahi sentada en la cama del cuarto examinandose una herida que tenia. Solo despues que la sacerdotiza ingreso a la habitacion se dio cuanta de su presencia.

Ahi no habia nadie mas. Al parecer le tenian cierta confianza a Livia por el momento. Aunque eso era mejor para una charla privada.

La romana se encontraba de espaldas a la puerta, sacándose el vendaje para una nueva cura, escuchó unos pasos tras ella y asumió que sería Verina, por lo que se gira sin preocuparse...para encontrarse frente a frente con la sacerdotisa, a quien no veía desde la noche de la revuelta.

-Señora Cornelia.- se apresura a saludar de manera formal, inclinándose con una mano puesta en su estómago, como si con ello lograse sujetar los puntos.

-Livia Octavia Prima.. Es satisfactorio ver que sigues viva. Tenía pocas dudas, prometí un toro a Marte si te mantenía a salvo- Me siento haciendo un gesto con la mano quitándole importancia.  -Aunque nunca se sabe con los dioses. Sigues siendo mi paciente.. Además voy a quedarme aqui, con Manius, y parece que que te han ascendido a nuestra custodia. No olvido tu lealtad, si hay algo que quieras pedirme.. Y esta en manos de Eliana concederlo-

Una vez pasada la sorpresa inicial por el encuentro, Livia se relaja un cuánto y toma asiento también, con una silla frente a Cornelia.

-Entonces debemos ocuparnos de ese toro, los dioses deben ser satisfechos. Y uno bien cebado ya que de verdad creo que de no ser por los dioses no estaría aquí. - hace una breve pausa, pensativa- También yo recé a Mercurio por vos, Eliana, cuando supe que el desleal Mario os había agredido. - aprieta un poco los puños, frustrada al recordarlo.- No necesito recompensa a mi lealtad, me basta saber que de ahora en adelante podré cumplir mejor con mi deber y la promesa que hice a los dioses.

Me tomo un momento antes de responder. -Livia Octavia, Liguria esta muy lejos, y Marco Flavio también. ¿Te sorprende?.. No estoy aquí por casualidad.. Ya te dije que mis palabras llegan muy alto. Voy a proteger a Manius, y a descubrir que ocurre aquí. Aunque ahora será más dificil, ya que me he revelado ante todos. Lo primero debo conocer quien hay aquí y su función. Creo que Mercurio te escucho.. Y me transmitió tu mensaje-

La romana abre mucho los ojos sorprendida y con un brillo de comprensión en sus ojos, aunque su desconcierto era mayúsculo.

-Le he jurado a los dioses que protegería Manius para compensar no poder proteger a mi hijo. Mercurio ha conducido a Marco a los Campos Elíseos y se que cuidará de él...mientras yo haga su voluntad. Él y Marte me han señalado, seré su parca en la Tierra...llevaré la muerte a aquellos de alma corrupta para sus actos sean juzgados. No puedo fallarles.- le cuenta, hablando de esto por primera vez con claridad desde que el orden de había reestablecido. Más o menos.

-Pero no comprendo...os habéis revelado...¿Como?

-Soy los ojos y los oídos de Palacio, estoy aquí porque me pidieron estar aqui-

-Del...¿del Emperador?- pregunta súbitamente temblorosa, no por miedo claro, pero shock.- Entonces...¿el emperador está enterado...de lo que la gens Flavia de Liguria planea? Yo sólo se lo conté a Camilia...no sé porque lo hice, supongo que esperaba saber que clase de persona era ella...podía salirme bien o podía cortarme la lengua. Me arriesgué porque ya no tenía nada que perder.- niega con la cabeza se levanta y pasea, nerviosa de un lado a otro.- Entonces el Emperador quiere que saques las ratas traidoras de Roma...y los dioses quieren que yo les dé muerte a aquellos ciegos de poder, aquellos cuya ambición suponga un insulto a ellos. -se gira para mirarla de frente, tal vez con unos nuevos ojos- No estás aquí por casualidad. Ni lo estuviste la primera vez que me buscaste. ¿Qué es lo que quieres saber? Es claro que los dioses quieren que cooperemos.

-Camila esta muerta y yo casi muero. Y no gracias a la pronta intervención de Flavius Donicus.. hasta que no supo quien era yo y que castigo podía recibir que no ordenó a sus guardias detener a Mario..Tenlo presente. Deja de ir arriba y abajo, me agotas- Le indico que se siente, con un gesto de disgusto 

-Hay una conspiración, y pasa por el Coliseo, por este Ludus. Necesito a Manius, porque a través de él tengo acceso a todo. Antes de separarnos, me insinuaste que pasaban cosas extrañas aquí.. Ponme al corriente - 

-Entonces no puedo asumir tampoco que Flavius sea un hombre digno de Roma y sus dioses. Habrá que vigilarlo y será juzgado en caso de hallarse culpa en su alma.-apunta con severidad, le hace caso y se sienta de nuevo a su lado no más lejos ni más cerca que antes.

-Me gustaría poder daros más información sobre lo que ocurre en este ludus pero no es mucho lo que puedo ofrecer. Tan solo sospechas; yo ya supuse que Mario debía estar compinchado para quedarse con el ludus, nunca pensé que llegaría tan lejos, pero cuando me di cuenta de que la gladiadora Ikateria también estaba metida en el ajo y recordé que se nos dijo que se había reunido con los primos... até cabos y lo vi claro. Además Mario regaló a un gladiador romano a este ludus, Horatius, un ex soldado que se metió a gladiador por gusto. No es algo inusual pero si sumas todo...pensé que era un buen aliado pero ahora me temo que era los oídos del senador en todo cuanto acontecía en las celdas. Puede que me equivoque pero es lo que mi instinto me dice. Cuando os hable la otra noche yo no había caído en todos esto, yo pensaba que la germana estaba instigado la rebelión para liberarse y matar a Herius, el romano que la capturó y violó...era una ingenua y murió por una absurda venganza que ni siquiera pudo culminar. Pero aún después de muerta nos dará problemas, Alina, la gladiadora pelirroja parece el germen de su rebeldía...no puedo quitarle la vista de encima y ante el mínimo atisbo de...la mataré sin dudarlo.- expone con fría claridad.- No cometeremos los errores de Camilia, no toleraré la desidia ni la protesta. Han nombrado un nuevo jefe de la guardia...es de confianza del Pater pero me temo que hay algo más, algo que los hombres saben y debo descubrirlo. Por otro lado... Creo que Manius se ha...encaprichado o algo más de la esclava Marcia...Verina dice que no hay de qué preocuparse pero yo creo que es más grave de lo que parece.- suspira entrelazando las manos con los codos apoyados en las rodillas y las piernas abiertas, una postura bastante vasta y masculina.

-Esto es todo lo que sé por ahora...¿Puedo preguntaros yo ahora?-​​​​​​-pide con una mirada suplicante pero no desesperada, tan solo curiosa en sumo grado.

Escucho en silencio a Livia, relacionando hechos que ya conozco con sus palabras. -El Ludus estará dirigido por el primo de Camila, al que digan lo que digan, hay que considerarlo un enemigo, pero he conseguido control absoluto sobre Manius.. Iré a las celdas pronto, y purgaré ese lugar de dioses extranjeros. Verán quien tiene el verdadero poder. No creo que Festus se atreva a oponerse tan pronto, no cuando sabe que lo vigilan desde palacio. El senador anda preocupado, teme que mi familia le declare la guerra en el senado-

-Puedes preguntar - 

La romana se lleva la mano a la cara, pasándola de arriba abajo como si con ello pudiera descartar las malas noticias.

-Faustus...he oído que el nuevo capitán de la guardia es de su confianza también o él mismo lo sugirió para el puesto. No pinta bien, de seguro está aquí para limitar mis movimientos.- dice como conclusión más obvia, una forma de Flavius de balancear el poder. Pues que así fuera.

-¿Sabes algo de lo ocurrido en Liguria tras mi esclavitud? La familia Flavia sigue con...los asuntos de Marco?- pregunta con la mirada fija en el suelo y mantiene un aire pensativo- ¿Te enviaron aquí para vigilar a la hija de un traidor o a la víctima de una conspiración?

Miro a Livia pensativa antes de contestar. -Tu historia me pareció extraña, así que decidí mover algunos hilos, si se había cometido una injusticia contigo, iba a usar mi influencia para repararla. Recuperar tu nombre y tu libertad. ¿Te sorprende?.. Incluso me plantee, si eso no era posible, presionar a Camila para que accediera a venderte a mi. Entonces tendría las manos libres. Y obtuve respuesta, se me encargo destapar a los conspiradores.. La primera vez fue casualidad, o quizá no, fue Camila quien me insistió en que te conociera-

Livia guarda silencio unos instantes, parece reacomodar toda la nueva información en su cabeza, uniendo hilos invisibles aunque con cierta dificultad.

-Te lo agradezco.-musita con sinceridad alzando la barbilla para mirarla y forzar una sonrisa- Supongo que es importante para Roma que las injusticias sean reparadas para el emperador es vital que la conspiración sea destapada. Colaboraré cuanto sea necesario para ello, señora Cornelia, entiendo que los dioses han cruzado nuestros caminos con este propósito. Pero mi nombre...no gastéis esfuerzos con ello, lo único que me consuela es que mi hijo descansa en paz y su padre se congela en el tártaro. No puedes devolverle la vida y los dioses tampoco pero algún día me reuniré con él...y en eso si podéis vos ayudarme.

-Dime como.. Pero ya te advierto que no voy a tolerar determinados impulsos. Te necesito a mi lado-

-Destapemos la conspiración, encontremos a la gens Flavia y a los que les ayudan. Usad vuestra influencia para que sean invitados a Roma para el estreno del Ludus Donicus en el Coliseo.- sugiere pensando rápido se rasca la frente- Y proteger a Manius, no me gusta que Faustus se haya hecho cargo del ludus, no se si sea trigo limpio, Verina dice que los primos querían protegerle a él y a vos pero pero no me creo nada. Creo que este era su plan desde el principio. Y que si pueden eliminarán al chico para establecer su dinastía. 

-¿Lidia Donicus?.. Tengo el convencimiento que Coliseo será el escenario principal. Lo que hay que hacer es evitar llegar a el. Veremos que traen los próximos días, de momento instalarme y ver que está pasando aquí. Mantenme informada de cualquier cosa que ocurra, por nimia que pueda parecer. Y mantener vigilados a los hermanos, eso es fundamental - 

Livia mira entonces a Cornelia con una expresión desconcertada.

-¿Evitar llegar al Coliseo? ¿Por qué? No creo que se pueda evitar, el domitor Flavius querrá dar un buen y recuperar el dinero perdido con los gladiadores muertos y la forma fácil y rápida es apostando fuerte en el Coliseo- en un arrebato, Livia toma atrevidamente una de las manos de Elia entre las suyas y se inclina para besarle los nudillos.

-Por favor, Eliana...no salgáis del ludus sin mí. Si pudiera os escoltaria incluso entre estas paredes. Pero no se me.permite tanto.

-¿Apuestas? Creo que eso puedo tenerlo bajo control- no muestro reacción por la aproximación de Livia. No me desagrada que muestre lealtad. -Llévare a Manius de visita al Coliseo, seguro que le gusta. Aprovecharé para hablar con mi agente allí. Nos acompañaras.. ¿Porque te preocupa tanto mi persona? No digo que no me resulte agradable y lógico - 

Livia parece visiblemente aliviada ante el anuncio de que acompañará a ambos en su visita al Coliseo, pero luego alza la cabeza extrañada por su pregunta y parece que por unos largos segundos no sabe que contestar. Aunque al final lo hace:

-Una vez me dijisteis que la confianza y la lealtad era un camino de dos direcciones.- recuerda la romana mirándola directamente a los ojos aún no ha soltado sus manos.- Ésta es mi forma de demostraros ambas cosas y vos ya habéis hecho mucho por mi. Sólo con vuestro deseo de limpiar mi nombre es suficiente y quiero pensar que vos cuidaréis tan bien de mi cuando llegue el momento...al fin y al cabo...sigo siendo vuestra paciente ¿no?- pregunta aunque en verdad es como una afirmación pues era lo que hacía escasos minutos había dicho la patricia.- Creo que no tenéis nada que ganar traicionándome porque no poseo nada que pudierais ambicionar y...tal vez sea eso lo que me hace confiar en vos.