Los sacerdotes te miraron fijo como si esperaran con ello que cambies de opinion. "No es la respuesta que esperamos. Pero lo dejaremos pasar." comento al final.
"Creo que ya nos iremos. Aunque antes como hermanos sacerdotes, te diremos otro rumor que nos llego. Al parecer el emperador anunciara algo importante en los proximos juegos." te informo mientras se iba marchando se esa habitacion junto a los demas.
Solo tuviste que ver un momento a la rubia para ver su rostro cambiar de uno neutro a uno con rabia contra esos hombres. Aunque de nuevo se puso un rostro sumiso.
Asiento cuando me dicen lo del emperador, me intriga eso que querria decir caligula, quizas unos juegos nuevos?Quien sabria.
Cuando se han ido me acerco a la esclava y pongo mi mano en su hombro calmandola.-No te preocupes no dejare que te hagan nada. Mientras estes bajo mi mando yo cuidare de ti, y si lo haces muy bien y te lo ganas en un futuro podras ser libre. Se recompensar la lealtad.
Ya cuando se fueron la mujer parece mas calmada y mas cuando le tomas el hombro.
"Por supuesto. Confio en ti y te hare caso señor." dijo ella sin inclinar la cabeza como otras esclavas sino mirandote. "Vi algo en tus ojos señor. Estos hombres son unos rastreros, mientras ustedes esmas que ellos mucho mas. No deberia dejarse amenazar por ellos." te comenta o tal vez aconseja. Como otras veces sentias su mirada pero era una distinta, como distante pero cercana.
Vos diras si la seguimos, si queres hablarte con ella o drogarte un poco mas XD
Me siento en un sillon cercano.
Cuentame mas de tus tierras de donde viniste, que eras alli tienes familia aqui?-pregunto hablando con ella
La mujer te miro con una sonrisa simple.
"Son tierras frias, sin piedad para los debiles. De cualquier forma tiene una belleza que roma no tiene alli todo es mas natural. A veces mientras viajo gracias a los hongos recuerdo mi hogar." comenta ella rememorando. "Alli era una esposa, aunque buscaba mas para mi. Ser sacerdotisa era algo que buscaba por lo que me dejaba llevar por los posibles mensajes de los dioses practicaba para escucharlo y sentirlos mejor que nadie."
Suspiro. "No se si fueron capturados junto a mi, mis hijos. Se que mi esposo probablemente este aqui o muerto." comento ella bastante preocupada ante ese tema.
Si Roma es una tierra bastante mas caliente, debe ser por el calido mediterraneo. Asi que alli eras sacerdotisa, de que dios?-pregunto interesado.
Tu marido como se llamaba y como era fisicamente?, quizas podria averiguar si esta bien.-digo pensativo
Nego con la cabeza. "Queria ser sacerdotiza, no lo era. Aunque parece que aca me esta resultando mas facil." le respondio casi enseguida.
Fue ante su otra cuestion que parecio tardar un momento antes de responder. "Kol, asi se llamaba. Por el oscuro cabello que tenia. Era un hombre fiero, luchador. Entrenado. Yo creo que podria identificarlo a pesar del tiempo pasado." te respondio acercandose un poco a ti tomando una de sus manos y acariciandola. "Porque harias algo asi por mi?" pregunta ante la propuesta de averiguar mas de este.
Asiento a su descripción.
Por esa descripción y el nombre podría buscarle quizás dar con el. Y hacerte saber si está bien. Si es un esclavo traerlo sería más complicado pero quizás depende todo de lo que Marte provea. Digo pensativo.
Todos añoramos a los que queremos, a nuestra familia, supongo el es importante para ti, así que porque no?
"Ya con saber algo de èl me sentiria conforme. Luego lo de traerlo lo veriamos." comento la mujer no demasiado esperanzada.
Asintio. "Mi familia es importante. Pero no tienen que serlo para usted. Por eso le pregunte antes porque lo hacia..." comento ella acercandose al hombre llevando la mano que tomo de este a su cuerpo. Permitiendole tocar sus suaves piernas que ya eran de èl. "Es algo que te pidieron los dioses?"
Acaricio despacio sus piernas. No, ha sido algo que pense por mi mismo. Quizas simplemente pensara en ti. Los dioses me dijeron otras cosas, quizas sea momento de consultarlos de nuevo.-digo mientras aparto su ropa y acariciando sus pezones. -Tienes preparados los hongos?
Sigrid sonrio contenta, dejando que acaricies sus piernas. "Gracias por pensar en mi."
Rebusco entre sus ropas de esclava y saco un preparado. "Claro. Uno chico pero puedo hacer mas." le ofrecio a su rostro como si estuviera dispuesta a alimentarte ella. "Estas seguro que quieres otro viaje tan pronto?" pregunto ella mirandote y la verdad es que tu respuesta mas rapida era un si, tu adiccion asi lo ordenaba.
Suspiro cuando la fuiste desnudando. "Lo haremos juntos como la otra vez mi señor?"
Muerdo uno de sus pezones.
-Claro tu tambien deseas ver a los dioses no? Porque arrebatarte eso. Hagmoslo juntos y compartamos sus regalos y visiones.comento y muerdo su cuello. Mientras espero impaciente a que tomemos ese hongo y le doy un azote en la nalga
Ella larga un chillido al sentir tu mordisco, tomando tu pelo con su mano libre acercandolo.
Ante tu respuesta sonrie complacida, mordiendose el labio inferir al sentir tu mordisco en el cuello y el azote a sus nalgas que se agitaron por ello. "Toma mi señor." dice acercandole el preparado a la boca dandole una gran porcion de este y luego se lo toma ella. "Yo quiero verlos y sentirlos junto a vos."
Entonces dejo el envase caer al suelo y se aferro a ti con un abrazo. Mientras bajo su rostro a èl besandolo enla mejilla, cuello y hombro, con su mano le fue sacando la ropa por donde iba hasta que solo la piel sintiera el contacto de sus labios. Entonces le mordio en el hombro con fuerza. Los hongos aun no hacian su efecto completo pero empezaban a sentir la intensidad de lo que pasaba.
"No quiero separarme de ti. Quiero salir contigo mi señor, cuidarte como lo haces conmigo." le ofrecio ella.
Tomo los hongos mientras me entrego a abrazar y acariciar su cuerpo.
Iremos juntos al reino de los dioses ahora mismo-arañando su espalda y entrando en ella despacio notando como mi miembro abre sus paredes despacio
Beso su cuello y sus labios apretandome contra ella.
Volemos juntos.-susurro
Un gemido se dejo escuchar mientras te introducias en ella, aunque no era solo portus movimientos ya que ella tambien bajaba esta vez con tranquilidad. Mientras sus manos fueron abajo a la base de su traje para pasarselo por arriba del cuerpo y tirarlo a un costado. Con eso quedo bellamente desnuda frente al hombre.
"Hagamoslo mars..." te dijo tuteandote sin miedo.
Entonces empezaron moviendo ella sus caderas, dejando sentir en el miembro del sacerdote el sexo ansioso de ese encuentro. Lo sentias que ella lo deseaba sin importar que hace poco te habia comentado de su esposo por el cual estaba preocupado, pero ahi estaba moviendose por propia voluntad encima tuyo.
En medio del placer empezaste a ver las cosas cambiar. En un cierre y abrir de ojos notaste el cambio. Primero volviste a ver a ese ser con barba frondoza que te miraba desde arriba como juzgandote, tras prestarle atension lo suficiente te diste cuenta que era Marte. Ahi completamente desnudo y con su lanza en mano.
Araño las caderas y espaldas de la esclava mientras me muevo duro debajo de ella. Cuando noto que el mundo cambia de nuevo como cada vez que entro en contacto con los dioses.
Muerdo uno de los pezones de esta y aprieto sus senos, cuando mi vista vuelve arriba mirando al dios.
Gran dios Marte, que nos espera en el futuro, que pasara.?-le pregunto con respeto
Ella acepta con mucho disfrute lo que le haces sintiendo como se une mas a ti y sus caderas se aceleran aun mas. Dejando escapar gemidos aunque tambien gritos de placer mientras siente como le mordes los jugosos pechos de ella.
Aunque eso no te distrae de esa presencia divina frente a ti. "Pasara lo que decidas...haz hecho bien mi sirviente."
Me muevo incluso mas duro dentro de la esclava, moviendo mi cadera con un ritmo a golpes. la tomo de la cadera haciendo que entre mas a fondo en cada embestida. Pero sin retirar mi atencion del dios.
Mis enemigos caeran? Y mis hermanos sacerdotes que buscan mi desgracia?. Sabeis que desea el emperador, pondra obstaculos a nuestra mision oh Marte?
La esclava empieza a gemir con mas fuerza acercando su rostro a tu oido para que pudieras escucharla mejor, aunque sus palabras se pierden entre sus gemidos y las palabras del dios. Mientras su cuerpo te sigue moviendo sus caderas al ritmo que deseas disfrutando de ello. Con la cadera firme en tus manos une sus piernas ati aferrandose aun mas a èl.
"Los sacerdotes no escuchan mis palabras, no como tu o tu amante." le responde con un tono de molestia, casi rozando el odio. "Tu enemigos caeran ante sus acciones, pero pasividad solo los hara crecer." agrego observandote con cuidado tu respuesta y pareciendo ignorar tus palabras del emperador.
Mientras pasa eso la esclava continua moviendose tomandote de tu toga para bajarla dejando tu pecho descubierto, empezando a pasar sus manos por el cuerpo de èl. Dejando sentir sus suaves dedos, acompañados por sus uñas que tambien se hacen presentes de vez en cuando.
Asiento mientras pienso que el dios me dice que sea activo, que sea valiente y tome deciiones en evz de quedarme esperando. Golpear primero puede ser una victoria, si.
Tomo a la esclava y la dejo en el suelo comenzando a moverme encima suyo moviendome duro y entrando profundo en ella abriendo sus piernas y levantandolas hasta ponerlas en mis hombros.