Partida Rol por web

Descendéis por el turboascensor, Rabies se cuelga de tu hombro, el silencio solo es roto por un mensaje que llega por el comunicador "Stella al habla, hemos destruido o puesto en fuga a las fuerzas atacantes, volvemos a la base..." tu maestro pega bocanadas de aire a través de la máscara, que no se ha quitado todavía, los músculos que viste fuertes hace unos minutos en su habitación notas ahora a través de la tela que están fláccidos y fríos, escuchas que su corazón late irregularmente.

-Nada más salir del turboascensor tu maestro te dice -no te preocupes... unas horas de descanso y estaré como nuevo...- de repente pierde pie y tu le sostienes -más bien unos días- murmura.

Pero justo al doblar el recodo que lleva a la habitación del maestro, a la entrada ves a Allen llamando a la puerta de tu maestro... y se gira y os mira... primero a Darth Rabies y luego a tí sosteniéndole.

-Vaya-dice mientras una sonrisa se le va formando en los labios-mi querido maestro... muy en forma... sin su sombra la estrecha de Stella... y un premio extra-dice mirándote a tí.

Lentamente desenvaina el sable de luz...

-Vamos a ver quién es el nuevo maestro-

Tu maestro levanta las manos patéticamente...

A pesar de su actual debilidad el maestro Rabies sigue siendo un hombre corpulento y ayudarle a caminar supone para mi una actividad cansada.

En el corto trayecto del turboascensor suspiro un par de veces para ventilar un poco mejor y recuperar el aliento; Entonces, al abrirse las puertas, veo a Allen y escucho su diatriba contra el maestro y contra mi.

No soy rival para Allen, no llevo un arma que pueda enfrentarse a su sable y si la tuviera no sabría empuñarla. No es justo terminar así...

Siento como un rubor asciende desde mi estómago y se concentra alrededor de mis orejas cuando la furia y la frustracción se apoderan de mi.

-"¡No te lo voy a poner tán fácil, maldito!, ¡no te será tan fácil terminar conmigo!"

Dejó caer a mi maestro sin mucho cuidado y sacando el vibrofilo del cinturón me lanzo soltando espuma por la boca contra Allen, mi único objetivo... arrancarle el corazón.

Te lanzas a por tu oponente como un loco, lanzando espuma por la boca e invocando el lado oscuro... que acude a ti prestamente... como nunca lo había hecho.

Allen parece totalmente sorprendido por tu ferocidad e intenta pararte con su sable de luz, pero tu ataque es mucho más hábil de lo que él esperaba... y traspasa su defensa mediante una finta, atravesando su chaleco reforzado y cortando profundamente desde el esternón hasta el hombro, la sangre de tu enemigo mancha el suelo.

Tu otros dos ataques si son desviados por la defensa frenética de tu rival, notas que se concentra e ignora el dolor y empieza a llamar al lado oscuro.

-CREES QUE PUEDES ATACARME.... MISERABLE-

-CREES QUE PUEDES ATACARME.... MISERABLE-

Darth Rabies vuelve a invocar el lado oscuro y Allen empieza a gritar como un demente, hasta que ves que su caja torácica explota y sus pulmones salen volando y acaban en el suelo

Después de su macabra proeza tu maestro cae al suelo como desmayado, con los ojos inyectados en sangre y sin apenas respirar.

-llevame a mi habitación...- musita

El pasillo está lleno de sangre, la que esparciste tú con tu salvaje corte y la que tu maestro ha esparcido aún más, ambos tenéis decenas de goterones por todo el cuerpo.

Dejo caer mi ensangrentado vibrofilo y contemplo mis manos llenas de sangre, paso la mirada por mis brazos y por mi torso en el que puedo ver algunos pedazos de Allen resbalando suavemente hasta el suelo.

Puedo disimular el temblor que me recorre el cuerpo como si me sacudiera la escoria de encima, entonces me giro con velocidad hacia mi maestro y le vuelvo a tomar por las axilas cargando ahora un peso aún mayor, debido al nuevo esfuerzo que ha hecho.

El lado oscuro es increible. Susurro sin darme cuenta de que mi maestro puede escucharme.

Despacio pero sin detenerme llevo al maestro Rabies hasta sus aposentos.

Entras en los aposentos de Darh Rabies y le depositas sobre su lecho, las dos "muchachas" al principio os miran pero al ver vuestro aspecto se refugian en un rincón de la gran habitación.

Darth Rabies respira entrecortadamente... pero poco a poco se va tranquilizando...

De repente la puerta se abre y Stella aparece en ella.

-¿¡Que ha pasado aqui!?-pregunta gritando, mientras os mira con el sable encendido y preparado... -¡PADRE!-grita aún más alto mientras se acerca a vosotros apagando el sable... parece que ha notado que le estabas atendiendo.

Rapidamente pone las manos sobre Darth Rabies y sientes como tu maestro empieza a respirar profundamente, su horrible palidez cadavérica desaparece y se transforma en un blanco poco sano, mientras que Stella suda y se cansa a ojos vista.

¿Padre?... eso explica muchas cosas... ¿o no tantas?

Desde que entró en contacto con el Sith Darth Rabies Pher nunca había tenido una exposición tan increible a los poderes de la fuerza y al poder del lado oscuro, todavía afectado por los prodigios que ha presenciado dice unas palabras mientras retrocede lentamente sin volver la espalda a su maestro y a su ¿hija?

-"Maestro, sino necesita nada más de mí me retiraré y dejaré de importunarle."

En cuanto salga de aquí voy a vomitar con un bantha.

-No te vayas todavía-dice Rabies con un hilo de voz, -hoy has pasado una gran prueba y has demostrado ser leal y útil, si no hubieses atacado a Allen cuando lo hicistes, no habría tenido tiempo para invocar al lado oscuro y estaría muerto, a partir de ahora ocuparás el lugar de Allen, su sable de luz es tuyo-

-Pero con el lugar de Allen van las responsabilidades de Allen, cumple bien la misión que le encargué y que ahora es tuya y cuando vuelvas estaré más recuperado y podremos desarrollar los poderes que surgen de tu interior, en el que mora el Lado Oscuro...- tose y se atraganta con sangre.

Stella levanta telekineticamente el cuerpo de Darth Rabies y lo lleva hasta un tanque de bacta que hay cubierto con una sábana en un recodo de la habitación, por la profesionalidad con la que introduce el cuerpo y programa el tanque piensas que lo ha hecho otras veces.

Las otras dos chicas salen fuera mientras ocurre esto

-Esperame fuera, te acompañaré a la lanzadera y te explicaré la misión-

Salgo fuera sin conseguir cerrar la boca de asombro, en cuanto se cierra la puerta tras de mi contemplo el sable de luz que tengo entre mis manos sujetándolo como si se tratara de un pajarillo muerto, entonces miro a la derecha y a la izquierda y con una velocidad asombrosa corro hacia una columna cercana y vomito de forma sonora y asquerosa.

Me incorporo sujetándome a la pared con la mano que sujeta el sable y pienso.

Ocupar el lugar de Allen me pone en el punto de mira de todos los discípulos aspirantes a la gloria, ¡mierda!.

Miro el sable de nuevo y empuñándolo muevo la muñeca hacia la derecha y la izquierda con suavidad.

-"¿Cómo coño se enciende este trasto?"

Al cabo de unos minutos, cuando ya te has recuperado (aunque sigues poniendote enfermo cada vez que miras el estropicio del pasillo) Stella sale de la habitación.

-No te he dado las gracias por salvar a mi padre... al parecer eres distinto del resto de la escoria que pulúa por esta mina- se acerca a tí y te enseña como encender el sable de Allen, luego te agarra las manos desde detrás y te guía en un par de movimientos. -es mejor que uses el cuchillo o el blaster de momento, pero toma esta tarjeta de datos, en ella hay algunos ejercicios que puedes hacer para ir familiarizándote con el sable-

Luego te hace una seña para que la sigas y te dice -la misión de Allen era encontrarse en el planeta Bandomeer con otros 5 aprendices, discípulos de los señores sith aliados con Darth Rab... con mi padre... ¿sabes... sabes que todavía me cuesta llamarle por su nuevo nombre y no papá?- Stella parece vulnerable en su torpe intento de entablar conversación con la única persona que no percibe como un enemigo en esta base, tú...

Vais avanzando hacia el hangar principal, donde están los cazas y las lanzaderas.

-"¿Qué se espera que haga con los demás aprendices?"

Digo mientras comienzo a subir de espaldas por la pasarela de la nave.

-"Me gustaría saber que se espera de mi para no decepcionar al maestro."

Y continuar con mi caja torácica intacta.

-Cumple la misión que os dará el contacto, no os descubráis ante los Jedis, no mates a los demás aprendices porque la alianza correría peligro, informa periódicamente a través de la holorred- te suelta esos parámetros rápidamente mientras la rampa se empieza a elevar -mi padre puede ser muy generoso con sus fieles...- murmura como idea de última hora

La nave parte hacia el espacio mientras te preguntas que vas a hacer ahora.

En un rato te meto en la primera escena. Mira a ver si quieres gastar algo de los puntos de habilidad...

Si, excepto las habilidades avanzadas (Ténica y medicina) puedes tirar todas las demás con el atributo, por tanto tienes 3D+2 en sable de luz y 3D+2 en defensa con armas (y 4D+2 en atacar con armas, no sólo en cuchillo)

Subir Controlar a 1D solo te cuesta 3 puntos de habilidad (0x2x3 es igual a 3 en toda la galaxia conocida xd), vamos que si de 1D a 2D cuesta 6 puntos de 0 a 1D te va a costar 3. (no viene en el manual así que lo pongo yo.

Si vas a entrar en combate no sería mala idea que subieses parar con armas o ataque del sable (otra cosa es que vayas a dejar la pelea a tus compañeros, cosa perfectamente lógica dado que todo aprendiz que has visto intenta mejorar sus capacidades continuamente).