Partida Rol por web

El bocinazo de la presentadora trajo de vuelta al scout. Levantó la cabeza con una expresión vacía en su rostro.

Me quedé observando tranquilamente el panorama que se mostraba ante mi, sabía que pregunta hacer, mientras las preguntas de mis compañeros volaban veía los traumas reflejados en sus rostros, ninguno hemos tenido una vida fácil por lo que parece.

Primero Scout a Zoo y luego sucesivamente hasta que me tocó a mi. Scout vió morir a un chaval que estaba a su cargo. Demasiado duro para cualquier ser humano, quizás por eso es tan reservado... Aún que me supo mal darle la espalda cuando me necesitaba y no podía ayudarlo, ahora un sabor amargo recorría mi cuerpo pensando en que quizás debería ser mas lanzado cuando tengamos problemas y encararlos con todo lo que tenga. 

Al final Coach es quien pregunta, por descarte y por mala pata sería el quien me preguntaría, aún que la verdad es que no fué tan cruel como podría haber sido. Me aclaré la garganta.- Verás... bueno, os lo voy a contar. Yo maté a un paciente, y no lo hice de manera accidentalmente.- Suspiré mirando a los ojos a los demás.- Fue intencionado, en aquel momento yo estaba trabajando en la UCI, el paciente tenía un edema pulmonar grave, llevaba un emofiltro y respiración asistida. Era un cromo, además con todo lo que tenía comenzaba a padecer señales de ictericia, conjuntada con un cáncer de pancreas con metástasis por todo el cuerpo.- Hice una pausa dramática.- Para el que no haya entendido nada, ese paciente estaba muerto en vida, cada instante de su vida era una agonía y le dimos la opción a la familia de ayudarlo a morir.- Quizás estaba hablando demasiado claro, pero nunca he sido escrupuloso con temas médicos. 

La familia que cobraba una pensión por minusvalía del paciente ya que era invidente y una ayuda por larga enfermedad no querían dejar al paciente morir. Pensaréis que es un acto de ir a por todas, pero cuando llevas tanto tiempo trabajando de esto ves que actos son de puro egoísmo, cuando quieres a alguien no le puedes hacer sufrir tantísimo. -me comenzaron a brotar algunas lágrimas de los ojos recordando aquella situación que rápidamente sequé con mi manga.- Así que cuando me tocaba ponerle un calmante, le di una sobredosis de midazolan y el paciente murió sin sufrir. 

Así que contestando a tu pregunta lo hice, pero no lo volvería a hacer.-Miré a mis compañeros de nuevo, esperando alguna mirada de asco o de aprensión por mi parte.

Tras una pequeña pausa miré a Militar.- Me toca, y te tengo que preguntar algo. Alguna vez has torturado a una persona inocente en la guerra y te has tomado una foto de ello?- Clavé mi mirada en sus ojos esperando una respuesta sincera.

Al oír el bocinazo me tapo rápidamente los oidos, y aún cuando para sigo oyendo un incesante pitido. Maldita zorra, maldito programa y malditas estúpidas preguntas. Empezaba a cabrearme la forma en la que nos estaban tratando.

Me quedé mirando como las llamas bailaban ante mis ojos. El calor me pegaba por oleadas en la cara, dependiendo de donde soplase el viento. Tenía frío. Temblaba. Sentía lástima... por mí y por ellos. Eso no debería ser así, se me está yendo de las manos. Un breve gemido escapó de mi garganta, al recordarla.

-¡BASTA! -Grité dando un salto de mi silla, quedándome de pie.- ¡YA BASTA, maldita sea!

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Janet alzó la cabeza sorprendida, esperaba que Militar confesara a cámara sus asesinatos, esperaba que lo condenasen por un tribunal del Ejército. Así como, harían con Doc con tribunal de Enfemería. Y ahora, ella se erguía como si fuera la que mandase aquí. Y eso hizo que Janet se crispase un poquito pero su sonrisa de suficiencia, no la delató.

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-¡Soy la directora de este programa! ¡Y ordeno! ¡QUÉ SE ACABE TODO ESTO! -Recarlqué.

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Los concursantes se sobresaltaron al ver una figura masculina que parecía haber salido de la nada, iluminada por las llamas. El Productor la miró desafiante con un papel en la mano.

-Firmaste un contrato, De Lucca.-Le recordó como si se tratase del mismísimo Diablo con el contrato de su alma en la  mano y quizás, así era. -Al firmarlo, se acabaron tus derechos y privilegios. Y pasaste al mismo rango que estos parias. -Los señaló con un ademán coqueto.

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No me lo podía creer. ¿Qué estaba pasando? Negué con la cabeza enérgicamente. A punto estuvo de darme un berrinche, uno de esos en los que acabas pisoteando el suelo y chillas sin sentido un montón de sandeces.

-¡YO LOS ELEGÍ! ¡SON MI RESPONSABILIDAD! -Le espeté.- Y lo único que estás haciendo, es que nos ataquemos los unos a los otros y ahogarnos en nuestra propia mierda. ¡SE ACABÓ! -Hice un aspaviento tajante.

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El Productor soltó una carcajada que heló la sangre de los presentes.

-¡Bien! -Asintió. Hizo una bola con el contrato y lo echó al fuego.

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Un grito ahogado salió de mi garganta a la vez que mi mano avanzaba hacia las llamas para salvar el documento. Al sentir el dolor, me aparté y caí al suelo de rodillas, me derrumbé. Quería gritar, llorar, golpear,.... Pero sólo me quedé allí quieta observando como el contrato se chamuscaba y se volvía cenizas.

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Otra carcajada más potente y gutural profirió El Productor.

-¿Te creías que era el de verdad? -Preguntó con sorna.-Ahora sé buena chica, y ¡siéntate! -Le ordenó como si fuera su perra particular, y no estaba muy lejos de la verdad.

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No lo oí. Sentía tanto dolor que ni las lágrimas querían desbordarse de mis ojos. Tuvo que repetírmelo una segunda vez para poder oír. Anodada, obedecí. Tanteé el asiento detrás de mí. Me levanté del suelo y trastibelleando me volví a sentar sin dejar de mirar fijamente, el lugar donde había ardido el documento falso.

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-Pasa a la siguiente prueba.-Le indicó a regañadientes a Janet.

DÍA 4. HORA: 12 am

Janet se recompuso enseguida de lo sucedido. Nadie la había preparado para lo ocurrido. Era cierto lo que decía su jefa pero también lo que decía su jefe, El Productor. Lina no tenía ningún poder, no si quería que el contrato siguiera siendo válido.

Cerró los ojos por un momento e inspiró profundamente. Necesitaba despejar su mente.

Sonrió a cámara y se alzó frente a los presentes, sin perder la sonrisa. Los instó a que los siguiera y se quedó en el borde de un desfiladero, al otro lado del sendero.

-Buenos tardes, concursantes. -Dijo la jovial Janet.- Ha pasado un oso por aquí, aquí mismo, hace una hora. -Sonríe mirando a los concursantes.-Vuestro trabajo es encontrarlo.-Sonrió ampliamente.- Este es un Desafío en Solitario, pero se concederán ventajas en función del orden en que terminasteis el último Desafío en Equipo. -Levanta un macuto, entregado por el becario de turno-. Para el equipo que terminó en primer, tenemos un perfil de vuestro objetivo. -Entrega bolsas con autocierre a Doc y Scout. Cada una contiene una muestra de pelaje y una tarjeta laminada que describe al oso negro e incluye representaciones a escala de sus huellas y excrementos-. Para nuestros segundos clasificados, un perfil menos completo. -Entrega un juego de tarjetas con viñetas sobre el comportamiento del oso negro a Empresaria y Zoo-. Y para los terceros, aquí tenéis. -Lanza un silbato naranja a Coach y otro a Militar-. A lo mejor podéis espantarlo.

-En realidad,-añade Janet- hay dos osos. La mitad perseguiréis a uno y la otra mitad al otro. Necesito que el miembro más mayor de cada equipo se sitúe al este de mí y el más joven al oeste.- A su izquierda se encontraba Scout y a su derecha Empresaria.-Los demás, eligís a que equipo queréis pertenecer, no habrá capitanes.

Esperó a que Zoo, Doc, Militar y Coach tomasen su decisión. Dos de cada lado. Cada equipo iría en direcciones opuestas, en busca de su presa.

-Y ahora... ¡Suerte con la caza! -Les dijo para animarlos a empezar el desafío.

Me fui hacia la derecha sin pensarlo. Igual a ella no le gustaba la idea, pero elegí estar en el equipo de Lina, creo que también la han engañado viendo la escena anterior y la debo un explicación. El concurso es cierto que se nos estaba yendo de las manos, pero habia que seguir.

El scout se levantó con una lentitud abrumadora, como si fuera el mismísimo atlas levantando el orbe terráqueo como castigo por todo sus pasados. Parecía haber envejecido 10 años y una mirada febril se destilaba en sus ojos. Sin mediar palabra cogió una bola de nieve y se fue hacia donde estaba ubicada la empresaria.

"La mano" Le pidió con urgencia y tras un examen rápido le puso la nieve en la palma de la misma

"No es grave, pero te saldrán ampollas... aquí tienes algo de corteza de sauce, la última que me queda. Mastícala pero no te la tragues, te aliviará.... pero vas a tener un par de días con dolor. Intenta que no te revienten las ampollas...puede ser peligroso en estas circunstancias...... Creeme, entiendo de quemaduras...."

Y sin decir más se dió la vuelta para ocupar el puesto que le había indicado Janet. Estar cerca de la empresaria siempre era una lucha entre lo que le pedía el corazón y lo que le suplicaba el cerebro.

El scout miró con expresión vacía al resto de compañeros mientras decidían en que grupo ponerse. A él francamente le daba igual, en cuanto iniciará la prueba iba a ir por su lado...necesitaba estar solo y volver a recomponer el puzzle de sus sentimientos después de las últimas confesiones. 

Estaba todavía ida cuando Peter se posicionó ante mí. Lo miré sorprendida, devolviéndome a la pseudo-realidad.

Le entregué mi mano que también me era ajena hasta aquel momento, y sentí alivio de un dolor del que no había sido consciente.

Pude notar como se apartaba de mí.

Y mi cara se llenó de lágrimas silenciosas y traicioneras.

¿Lina era la directora de todo esto? ¿Ella había sugerido las pruebas, incluso a nosotros? ¿Qué tipo de broma era esta? Y aún mejor, ¿qué cojones hacía ella participando?

Mi cara tenía que estar reflejando mi perplejidad ante todo el asunto, Lina tenía que estar metida en serios problemas para ser la directora y estar concursando, además parecía que el productor la tenía bien cogida, ya que no podía salir de aquí, ni acabar con toda esta locura. Al menos si nosotros pronunciábamos las palabras mágicas saldríamos de aquí, eso lo había visto.

Y encima ahora, por si no fuese poco, ¿teníamos que enfrentarnos a un puto oso? Venga ya, eso ya no era una broma. Además tenía que elegir un equipo, y las dos únicas personas que quería en el mío estaban separadas. Genial, ¿qué hago yo ahora? No tenía ni idea de a quien elegir, por un lado quería hablar con mi hermano, pero no parecía que él quisiese mucha compañía, no tenía buena cara, por otro lado, después de la situación que acababa de vivir Lina, iba a tenerlo duro si nadie la ayudaba. Entonces vi que Militar se decantaba por su equipo. Esperaría solo un poco más para poder elegir, tenía que pensarlo bien.

Tras ver todo aquello una parte de mi deseo gritar, estabamos jodidos hasta un punto insospechado, si la mismisima directora estaba con nosotros y la mangoneaban de esta manera. Que no podrían hacernos a nosotros en un momento de debilidad? Confesé que había matado a un hombre, pero ese conflicto se resolvió hace ya tiempo para mi, no tenía miedo de contarlo.

Vi como Lina se quemaba y no pude hacer nada por no tener quema anti-quemaduras en ningun sitio, Scout le dio algo por el dolor y me mordí la mejilla por dentro, estoy resultando un inútil como enfermero en este concurso, para que mentirnos. 

Genial... ahora había que atrapar un oso, al menos tenía pistas de como era, pero...- Perdona, atraparlo o encontrarlo? Son cosas muy distintas, que tenemos que hacer?.

Me quedé callado esperando la explicación de la mujer, me sentía un poco traicionado por el concurso por que yo esperaba algo tipo supervivientes. No algo que nos desgastara tanto mentalmente como confesar nuestros mayores errores en la vida. Suspiré y me coloqué al lado de Scout, quizás no ibamos por grupos pero competir contra el sería mas interesante, si me ganaba quizás se le pasaba un poco el enfado. Miré al frente y suspiré. La competición será mas dura de lo que esperé.

-Encontrar, recuperar su collar y volver corriendo para ser el primero de los seis.

El doctor se puso en el equipo de scout de forma silenciosa y del mismo modo fue recibido, a excepción de una sonrisa cínica que el muchacho no lograba o quería ocultar.

Vi como Alucard se acercaba a mí y le sonreí afable. Me había olvidado porque me había enfadado con él, todo quedaba muy atrás. Metí un cacho de corteza de sauce en la boca, lo corté con los dientes y me puse a masticarlo. Sentía el palpitar de la mano herida en las sienes.

Observé la indecisión de Violet y le indiqué con un gesto sútil de la cabeza que fuera con él, creía fervientemente que la necesitaba. Yo estaría bien. Era una superviviente. Sí, estaba atada de pies y manos ante el propio demonio pero merecía la pena.

Doc avanzó hacia Scout y asentí aprobando su decisión.

Seguía sin decidirme, capté el gesto de mi hermano, no me quería a su lado, pero entonces vi el gesto de Lina, ella parecía pensar que él me necesitaba más. ¿Qué diantres hago? Debería ir con él, aunque no quiera, podría ser un buen momento para hablar... 

Finalmente tomé una decisión, probablemente me arrepentiría después pero, debía hacerlo, di unos pasos y me uni al equipo de mi hermano. Sonreí a mi antigua compañera y esperé a que el último eligiese.

La sonrisa cínica de su hermano se ensanchó aun más al ver la elección de su hermana

Es que no me podrá hacer caso ni una puta vez? Es que no ve que no puedo tirar de mi cuerpo? Si no gano yo ella debe ganar, no podemos permitir que pase otra cosa....cabezota....

El scout se acercó a ella y le tendió su dossier a su hermana

"Sería capaz de encontrar a un oso con los ojos cerrados...esto te ayudará más a ti que a mi"

Al dárselo se acercó a ella para susurrarle algo al oído

El scout empezó a carcajearse ruidosamente ante el comentario de su hermana y se puso a enumerar con los dedos en respuesta al comentario de su hermana.

El scout dijo en voz alta "No puede ser" y retrocedió un par de pasos torpes hacia atrás mientras miraba a su hermana con los ojos desorbitados para finalmente caer de culo, como golpeado por un puño invisible.

Me esperaba algo así, después de todo, no puede ser fácil. Me acerco a él para intentar tranquilizarle, no quiero que le afecte en el concurso.

Esto le está superando, maldita sea yo y toda nuestra estúpida familia, y este concurso y todo. Le abrazo, es probable que me rechace pero necesito hacerlo.