Partida Rol por web

Thanes de Carrera Blanca

1. Consejo de Thanes.

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23/03/2014, 23:57
Thadeus Allectus

Era oficial; tendrían que investigar a los thalmor, asunto delicado donde los hubiese. Pero claro, se suponía que ellos eran los indicados para dicho trabajo.

Thadeus no podía sino pensar que eran seis personas muy distintas; a alguno de los otros Thanes lo conocía más, a alguno menos, pero desde luego que todos parecían capaces. Capaces de completar la misión más arriesgada, aunque quien sabe con qué métodos. De hecho, aun no sabía qué esperar de Khaled, que poseía tan mala fama, y Karin seguía desconcertándole.

Aun así, por muy capaces que los viese, no estaba acostumbrado a los métodos de cada uno, excepto con Suro, con el que ya había trabajado en otra ocasión, y aun así tenía la impresión de que no conocía lo suficiente ni a Suro ni al resto.

-Por mi parte no tengo ninguna pregunta, mi Jarl – dijo en tono formal, agradeciendo que al fin Balgruuf se hubiese decidido a hablar claramente, y aun así no dio demasiados detalles.

Thadeus miró a sus compañeros, y a toda la sala, consciente de que Balgruuf parecía no querer oír un no por respuesta; solo una respuesta que le complaciese. Típico del Jarl. Por otra parte, habían sido convocados junto con algunos testigos de alto status en Carrera Blanca. Realmente desconcertante.

Demasiado tosco en sus formas, como siempre” opinaba Thadeus. “¿Qué tendrá que ver los Melenagris y los Batallador en este asunto? ¿Y el resto de presentes? No parece la manera más adecuada de proceder, aunque en el norte parece que la gente prefiere actuar un poco más bruscamente de lo normal… A todo esto, tenemos que partir inmediatamente y Karin se encuentra contentilla, en vez de Khaled. Extraño”.

El mago reflexionaba mirando los posos de su copa de vino, casi acabada. Terminó la cena, y vio como algunos de sus compañeros se acercaron a hablar con la bardo. Así que se acercó para preguntar directamente a Karin, y ya de paso entrometerse de manera educada en la conversación:

-¿Te encuentras bien, Karin? –preguntó cortésmente, interesándose en su estado, pero sin insistir-. ¿Podrás cabalgar? Si necesitas algún remedio, conozco una infusión que te ayudará en el viaje – dijo esto dedicándole una cálida sonrisa; sabía que partir inmediatamente no era una opción, y lo mejor era que todos mostrasen cierta unidad. Seguro que el Jarl valoraría la reacción inicial, y forma de actuar del grupo en dicha empresa.

Tras la breve conversación, Thadeus cogió su mochila, y se la colocó a la espalda. Una vez que hubo salido de la sala, utilizó un sencillo conjuro para cambiar su aspecto, en un lugar en el que pocos percibiesen el uso de su magia, y volvió con sus compañeros. Adquirió el aspecto de una persona de más edad, con cara castigada por el paso de los años, canas y una espesa barba nívea, unos ropajes sencillos y una mochila más abultada de lo que realmente estaba, con algún que otro cachivache sobresaliendo de ella. Ahora parecía un mercader viajero.

-Sería útil que evitásemos llamar la atención en la zona; intentad no dar cante demasiado. Nos vendría bien pasar desapercibidos en nuestro… trabajo. No tengo ni la más remota idea de por dónde vamos a empezar, pero me gustaría que Karin pudiese ayudarme con algún husmeo disimulado en helgen, y lo mismo Volshyene puede mirar sin acercarse siquiera al lugar. Y necesitamos información, porque ahora mismo tengo la sensación de no saber nada…

Todo esto Thadeus lo decía tranquilo, con grandilocuencia, en un tono bastante relajado. Y desde luego se sentía capaz de afrontar muchos retos, por lo que intentó transmitirlo con su forma de hablar, junto con el hecho de que no sabía por dónde empezar. Y sospechaba que el resto tampoco sabía cómo abordar el inicio de la misión.

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24/03/2014, 00:01
Medea

La gata estaba aburrida, pero se complacía con el calor de la estancia. Un lugar cálido y lleno de comida, y sobre todo de platos a medio terminar. Los humanos derrochaban demasiado, y más aquellos que vestían “bien”. Claro, vestir bien para un humano significaba vestir con prendas de muchos colores, y con pieles de animales. “Comida gratis, si no quieren comerla, o si no quieren vigilarla”. Medea lo tenía bien claro.

La reunión se acabó, y su amo iba a viajar inmediatamente. Menudo fastidio. “Espero que me lleve en ese bolsillo tan cálido y cómodo que tiene mágico, porque de lo contrario…

Medea salió afuera y vio a su amo transformarse, y hablar con sus amigos. Menudo frio que hacía, suerte de su pelaje. Miró a todos aquellos y maulló con un tono agudo pero bajo, y una vez que prepararon las monturas, y había poca gente “extraña”, le preguntó a Thadeus:

-¿Qué, no me vas a presentar a tus amigos? Espero que sean divertidos, no quisiera tener un viaje largo y soso, ¿miau? – intentó decir con encanto gatuno, para llamar la atención de los presentes, y para asegurarse de que iba a tener un viaje entretenido.

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24/03/2014, 00:40
Khaled

“Partiréis inmediatamente”.

—¿No puede esperar? Apenas he probado bocado desde que he despertado —refunfuñó Khaled, con la boca llena de patata. Había despertado apenas a tiempo para la reunión. Le habían despertado apenas a tiempo, más bien. Podías haber venido en mi lugar, Sigrun, joder.

Agarró una jarra de aguamiel y dio un largo trago para que las patatas se deslizaran garganta abajo con más facilidad.

—Ni siquiera he podido echar un mísero trago —prosiguió, después de dejar escapar un perezoso eructo.

Necesitaba dormir. Pero dormir de verdad. Que no le despertara Sigrun, que era una mujer encantadora, pero ya había dejado atrás la edad en la que encontrarse con su rostro al amanecer solo podía provocar sonrisas. Que le despertara el sol, un diminuto haz de luz que se colara por los huecos entre las tablas de la contraventana y le golpeara los párpados hasta que pudiera más la irritación que las ganas de quedarse tumbado. ¡Buenos días, Khaled, te has perdido un día! ¡Enhorabuena!

Al menos, no necesitaba cabalgar, o ir en carro, o lo que fuera que le esperaba. La resaca le empequeñecía el cerebro —al menos esa era la sensación que tenía—, y los botes provocaban que se golpeara contra el cráneo una y otra vez.

Ojalá nos ataquen unos bandidos en las mismas puertas. Eso ayudará.

Se bajó de la mesa en la que estaba sentado y se acercó al grupo de “campeones”, que se había apiñado alrededor de Karin, como si fuera un animal exótico. Como si fuera la primera vez que se pasa con la bebida. Como si fuera la primera vez que un nórdico se pasa con la bebida.

Yo no me paso, no. Bebo lo justo para quedarme inconsciente. Ni un trago más.

No hizo demasiado caso a las preguntas de Suro. Él no tenía ninguna, así que las respuestas que le dio Elynea carecían de sentido para él. Ignoró las significativas miradas entre Volshyene y Farengar. Incluso se armó de paciencia para no interrumpir a Thadeus, que por alguna razón había decidido disfrazarse. ¿De qué sirve si los demás no cambiamos de pinta?

—Eso está bien, Thadeus, ¿pero no podemos hablarlo por el camino?—preguntó a los compañeros que le había deparado la fortuna—. Quiero contarle a Sigrun que me voy a Helgen antes de que la pobre mujer se quede dormida zurciendo calcetines.

Llegar a Helgen no iba a costarles diez minutos. Habría tiempo de sobras para planificar lo que fuera.

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24/03/2014, 01:24
Elynea

Elynea no dijo nada más, simplemente se levantó sin hacer ruido con la silla, volvió a colocarla en su sitio y se encaminó a la puerta detrás de las otras dos thanes que eran las primeras que se habían puesto en marcha.

Una vez fuera, de nuevo el soplo de aire helado del norte fue el doble de notorio tras haber estado en el calor del interior pero en aquel caso aprovechó para respirar hondo con la refrescante sensación de notarlo perfectamente entrar, llenar y salir de los pulmones. Por desgracia, hacerlo más de una vez congelaba la tráquea de modo que se abstuvo de repetir.

Ambas formas están aceptadas—comentó girando automáticamente la cabeza hacia Karin. De hecho, hasta levantó un índice como quien hace una nota a pie de página. Luego simplemente se cruzó de brazos (por comodidad más que nada, le gustaba la postura)

No obstante, en ese momento se dio cuenta de un detalle: Volshyene había salido justo al lado de la bardo y seguía justo al lado de la bardo. Si a algo estaba acostumbrada Elynea era a observar el doble de lo que hablaba y en aquel caso, al volver mentalmente hacia atrás para repasar lo que había ocurrido desde que se había levantado de la silla hasta ese momento, la presteza con la que la maga había interceptado a Karin le llamó la atención. Volshyene no se apresuraba a hacer una cosa si no era importante.

¿Interrumpo... algo?—dio un involuntario medio paso hacia atrás como si la conversación en si fuese una entidad viviente que le hubiese dado un empujoncito de rechazo para que retrocediera.

En cuanto había más de dos personas involucradas en una conversación, para la clériga parecían ser demasiadas y solía costarle no retraerse rápidamente hacia el segundo plano.

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24/03/2014, 16:03
Karin

De pronto mucha más atención de la deseada se centraba en ella. ¿Tanto estaba destacando su caos de aquella noche entre todo el caos que solía provocar? Por Kyne que una no podía volverse thane y mantenerse juerguista, ¿Cómo lo haría Khaled?

Miró a Guardia Rojo agradecida por darle aquel momento de respiro. Gracias a él ganó tiempo para cerrar esclusas y recordar quien era en el momento justo. ¿Lo habría hecho a propósito? Era imposible saber cómo pensaba Khaled, pero a menudo había demostrado ser mucho más sabio de lo que parecía a simple vista.

- Tranquilo, Thadeus - sonrió -. Estoy bien. Incluso ahora podría cabalgar más rápido que tú

Una pullita amistosa era lo que se esperaba de ella. Miró a Elynea y a Vol significativamente. Daba por terminada la conversación, tenía que conseguir hablar con Vignar o con el Heraldo.

 

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24/03/2014, 16:09
Karin

Antes de apartarse de la compañía del rincón, Karin lanzó una mirada intensa a Vol, arqueando ligeramente las cejas. Esperaba que la poderosa vidente oracular sobre la que se habían compuesto canciones (mejor dicho; sobre la que Karin había compuesto una canción bastante buena) supiese interpretar el gesto y supiese transmitírselo a la Elfa Oscura: "en otro momento".

Habría estado dispuesta a compartirlo con Vol, dadas las circunstancias. Quizá con Elynea, debido a que ella predicaba una filosofía parecida a la de K´dan y echaba de menos aquellas extrañas enseñanzas. Mucho más de lo que estaba dispuesta a admitir. Pero no quería que su secreto mejor guardado, uno que temía más que a los Thalmor, fuera de dominio público. Ni siquiera entre sus amigos.

Luego reparó en la gata de Thadeus. Esperó que no se hubiera dado cuenta de nada...

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25/03/2014, 13:06
Volshyene

Volshyene no se consideraba un prodigio a la hora de interpretar estados de ánimo ajenos, pero cuando alguien te daba largas era patentemente claro. Reprimió un suspiro resignado; si Karin no quería hablar, era asunto suyo. No era propio de ella presionar a la gente en este sentido. Si Karin necesitara desahogarse, ya sabía dónde encontrar a sus amigas.

—No estorbas, todo lo contrario —dijo a Elynea—. Siempre eres bienvenida. Aunque no hay mucho de lo que hablar, ni tiempo para hacerlo, por desgracia. No me gustan este tipo de misiones precipitadas. Todo sale mejor cuando tienes tiempo de planear y pensar…

A pesar de su queja, nada inesperada para quien la conociera, su rostro se iluminó con una semisonrisa. —Claro que lo inesperado mantiene la vida interesante… veremos qué nos deparan  los próximos días. En fin, será mejor que vuelva al palacio… quiero despedirme de Farengar... y luego tendré que pasarme por casa... oh bueno, no dejéis que Khaled se queje mucho si tardo un poco...

Se dispuso a alejarse, pero se paró un momento y dijo: —Hablaré también un momento con Iri. Diría que aun queda que nos transmitan las pequeñas consideraciones prácticas de este tipo de misiones... Ah... Karin, en serio, ¿cuánto tiempo crees que pasará antes de que los thalmor sepan de nosotros? Convocar una asamblea plenaria de ilustres... demasiada gente... —Y añadió, con un suspiro exasperado—: Ah, nórdicos. Vosotros y vuestras tradiciones.

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26/03/2014, 17:13
Elynea

Algo así pensé yo cuando una montaña entera me estalló encima, sí—suspiró Elynea haciendo rotar los ojos en redondo—. Es decir, lo de que todo sale mejor cuando tienes tiempo de planear y pensar…

En realidad distaba de tratar de ser un chiste pero simplemente, la forma sarcástica de comentar algunos acontecimientos que tenía la clériga unida al hecho de que lo decía sin tono jocoso la hacían resultar irónicamente cómica.

Por supuesto,a  ella no le había parecido nada cómico en su día que un volcán comenzase a escupir fuego y cenizas por todo Morrowind pero se contentaba con haber podido contarlo. Levantó ambas palmas a ambos lados de la cara como quien se resigna a que tienen que lidiar con la situación tal y como les viene y punto.

Voy a casa a por mi armadura y... bueno, la mochila. Os espero en los establos.

Definitivamente tendría que recolectar las hojas de aquellas Raíces de Nirn a la vuelta. Lo cual era una lástima pero no pensaba hacerlo ahora aprisa y corriendo, sería un crimen contra unas plantas tan delicadas. Por suerte, lo único que necesitaban para no secarse era estar en terreno muy húmedo, y ella las había plantado en torno a una pequeña charca artificial en su invernadero.

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28/03/2014, 09:34
Karin

... Ah... Karin, en serio, ¿cuánto tiempo crees que pasará antes de que los thalmor sepan de nosotros? Convocar una asamblea plenaria de ilustres... demasiada gente... —Y añadió, con un suspiro exasperado—: Ah, nórdicos. Vosotros y vuestras tradiciones.

Mientras se alejaba hacia Vignar, Karin sonrió con falsa inocencia, como diciendo "¿Yo? ¡Pero si soy muy discreta!"

- Si me dejáis componer una canción por el camino puede que no haga falta esperar a los motines 

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28/03/2014, 10:06
Guardia

Un guardia escuchó la frase de Vol sobre las tradiciones nórdicas completamente fuera de contexto. Resopló con desdén.

—Esos pro-imperiales nos toman a todos por bestias anárquicas. Yo soy buena prueba de su ignorancia —dijo, a nadie en particular.

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28/03/2014, 10:08
Irileth

Irileth se cruzó de brazos cuando te acercaste a hablar con ella.

—¿Sí, thane? —preguntó, con impaciencia.

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28/03/2014, 10:09
Narrador

Vignar te echó una mirada de soslayo cuando te acercaste a él, pero no se dignó a mirarte. Uno de sus hijos te interceptó.

—¿Dónde crees que vas? Ve a darte un baño de agua fría, mujer.

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28/03/2014, 10:23
Karin

Karin hubiera sonreído. Hubiera dicho algo sarcástico. Hubiera humillado al cachorro del Melena Gris. Hubiera hecho eso y seguramente hubiera podido pasar. Pero sólo lo hubiera hecho de haber estado de humor. Y no lo estaba, su paciencia se agotaba a pasos agigantados. Después de hablar con Vignar tenía que hablar con el Heraldo. Y no podía perder tiempo porque se marchaban en lo que el Jarl tardara en recordar a todos que "marchar de inmediato" no había sido formulado como pregunta.

- Quiero hablar con Vignar. Soy Thane de Carrera Blanca y él es un importante miembro de nuestra comunidad. Quiero intercambiar unas palabras con él antes de marchar, porque tu padre es importante. Tú no lo eres. Aparta de mi camino

- Tiradas (1)
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28/03/2014, 11:35
Vignar Melena Gris

El hijo de Vignar se apartó, apretando los dientes. Pero su mirada inflamada decía que no olvidaría el menosprecio que le acababas de hacer. Vignar, en cambio te lanzó una mirada más desdeñosa que otra cosa.

—¿Qué quieres, chica? —dijo, con voz cascada.

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28/03/2014, 11:48
Karin
Sólo para el director

"Thane chica", iba a corregir, pero al final decidió no caer en las hostilidades. Había ido a...¿Qué? ¿A disculparse? ¿A echar por tierra su orgullo? ¿Su honor? ¿A darle la razón a Vignar? No lo tenía muy claro. Dejó que, como siempre que bebía, las palabras salieran sin pensarlas, sólo sintiéndolas.

- Decirte que lamento nuestro encontronazo, Vignar Melena Gris - dijo, quizá con la voz demasiado pastosa -. Como Thane debo ofrecer consejos a mi Jarl que sean en beneficio de la Comarca y de su política, por mucho que yo simpatice con...otras ideas

"Ideas como las tuyas". ¿Para qué engañarse? Karin odiaba a los Thalmor y a sus esbirros imperiales tanto como cualquier buen nórdico. Entonces se dio cuenta de que algún paranoico podría considerar sus palabras como una especie de invitación, una declaración encubierta de lealtad. Puto vino...se apresuró a arreglarlo atropelladamente.

- Sé que muchos cobardes se escudan en su lealtad, pero yo soy nórdica. ¡Soy de Lucero del Alba, por Kyne! Simplemente quería...expresar mi desazón por haber tenido que enfrentarme a tí. Espero que, como líder de los Melena Gris, comprendas mi situación

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28/03/2014, 12:17
Volshyene
Sólo para el director

Volshyene no se dejó amilanar por la habitual sequedad de Irileth.

—Me preguntaba si tendrías algunas instrucciones o advertencias de última hora —Volshyene recalca especialmente aquella frase, pues a su entender aquello era lo más importante, antes de añadir—: También deberíamos saber si contaremos con algún contacto o aliado. Ah, ¿y contamos con algo de financiación?

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28/03/2014, 12:49
Irileth

—El Jarl os encomendado una gran responsabilidad —empezó Irileth—, y con ella, la autoridad para actuar en su nombre como creáis oportuno.

Echó una mirada de soslayo a Khaled.

—Nuestro Jarl tendrá sus buenos motivos, personalmente dudo de que alguno de nuestros campeones estén a la altura de lo que se espera de un thane de Carrera Blanca. Yo que tú vigilaría lo que hacen, y trataría de imponer un poco de buen juicio.

Cambió de peso la pierna.

—Y por supuesto que correremos con los gastos, dentro del límite de lo razonable. Podéis coger el equipo que necesitéis de la despensa y la armería del jarl.

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28/03/2014, 13:09
Volshyene
Sólo para el director

—Yo también tengo mis dudas sobre…. esos ciertos campeones… aunque creo que sus talentos pueden ser valiosos.

"Al menos mientras no la pifien en otros sentidos", pensó Volshyene. Khaled era un peligro con patas y espada.

—Agradezco la generosidad del jarl —dijo diplomáticamente Vol en respuesta a lo de la financiación—. Aunque me interesaba particularmente contestar la respuesta a la primera pregunta. Es bueno conocer que el jarl confía en nosotros hasta ese punto, sin embargo.

Hizo una pausa de un par de segundos.

—Hubiera referido que nuestro reclutamiento no fuera tan público, para ser sincera. Sería más fácil tantear el terreno si los thalmor no nos están esperando. Pero supongo que el jarl tendría sus razones —dijo Volshyene, También era verdad que si los reconocían cualquier thalmor con un mínimo de sentido común  se olería algo de gato encerrado allí —. Esperemos que la suerte nos acompañe.

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28/03/2014, 13:18
Irileth

Irileth se encogió de hombros.

—Si Tulio es astuto y precavido, Elenwen roza la paranoia —señaló Irileth—. Yo asumiría que este mensaje no se le ha pasado desapercibido a la Embajadora de los Thalmor, y que no es tan estúpida como para no haber leído su contenido entre líneas como hemos hecho nosotros. Los thalmor os van a estar esperando.

Hizo un gesto elocuente con la mano.

—Y si los thalmor ya se huelen algo, puedes suponer que el hecho de que el Jarl haya hecho pública su decisión tiene un motivo... que a ninguna de las dos nos compete discutir.

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28/03/2014, 13:53
Volshyene
Sólo para el director

—Sí, yo me lo suponía. Aunque no así otros de mis compañeros, me temo —repuso Volshyene—. Y siendo como somos leales a los intereses de Carrera Blanca y el jarl pienso que hubiera sido mejor una advertencia en privado. No solo por ahorrarnos sorpresas desagradables, sino porque… el potencial de desastre de alguno de mis compañeros es muy alto.

"Sobre todo, el de uno".

—Sabes que precisamente mi lealtad me llevará a cuestionar lo que crea improcedente, Irileth —señaló serenamente Volshyene—. No soy uno de esos lametraseros que pululan por la corte, solo buscando el favor del jarl y mi propio interés. Lo crea que deba cuestionar, lo haré, por el bien de Carrera Blanca. Acepto las razones del  jarl para obrar como está haciendo, pero… no me gusta que nuestros propios aliados nos intenten utilizar dejándonos a ciegas. Ya bastantes sorpresas recibiremos por otros lados. De ahí que recalcase, y recalco, que si hay un momento para recibir alguna advertencia, consejo o indicación, es precisamente éste.

A Volshyene le gustaba la lealtad de Irileth, pese a que jamás aprobaría el método de la fe ciega en el líder. Pero como no quería que sus palabras sonasen excesivamente severas, intentó relajar el ambiente con una pequeña broma.

 —Ya sabes que los adivinos somos siempre un poco cotillas. Tenemos que conocerlo todo, o no nos quedamos tranquilos. Y sólo imagínate lo que puede organizar Khaled actuando a ciegas…

"Cuando ya las monta cuando no va dando de ciego", dejó sobreentendido Volshyene. En algunas conversaciones, las palabras sobraban.