Partida Rol por web

TITAN

Marko

Cargando editor
12/11/2017, 00:19
Marko Deus

La mirada ante la opcion, la minima posibilidad de que fuera cierto, que se me habia ocurrido grabar un video de los dos o de ella, en cualquier situacion emabrazosa provoco una mirada de las que si no te convierten en piedra, sin duda te enseñan la puerta a las profundidades del Hades. - No hay ningun video... ni uno solo. - La colleja llego junto con la confesion, mientras ella dejaba claro que ni se me ocurriera. Luego como no podia ser de otra manera incluyo algo que de primeras no pille, hasta que  entendi a lo que se referia y no pude mas que reirme con ganas... al menos durante unos segundos, donde luego se convirtio en una risa mas tranquila, relajada y calmada. - Si tuviera que grabar algo mi amor, seria a ti en plena invasion de mi parte de la cama, o mientras haces esos ruiditos tan monos mientras duermes... para incursiones nocturnas prefiero la realidad, a una escena de video. - Mis manos, las mismas que la habian sujetado cuando se habia colocado encima mio, acariciaron con un roce mas provocador... no mucho, pero si con cierto grado de sensualidad... aunque uno muy alejado del fuego o la posesion que ella conocia.

Acepto lo de las tres semanas, nos miramos durante un instante y luego volvi a su cuello, a su oreja, a sus labios. Mi respuesta ante las buenas noticias, tuvo un efecto extraño, como de Ola, primero una posible subida y despues una bajada, aunque no entendi el motivo. Mas una gran sonrisa se mostro, un rapido beso que apenas me dio tiempo a contestar, de lo efimero que fue... y una frase que sin duda perduraria en mi memoria por mucho tiempo. - Y yo, mi amor... y yo... - Nos miramos hasta que ya no pude mas, apenas cinco segundos esta vez, contados y luego termine por acariciarle la mejilla mientras ella desviaba el rostro para que nuestros ojos no se crezaran. Ella siguio hablandlo, lo hizo poco a poco mientras me explicaba que me habia echado mucho de menos como yo a ella, y que bueno, iba a necesitar un tiempo para acostumbrarse a que estuviera de nuevo en casa, a cambiar algunas costumbres que habia cogido mientras estaba fuera. Sonrei levemente, entendiendo que sin duda, habia vuelto a sus antiguas costumbres, y no podia culparla. Acaricie su pelo, su rostro y sus labios, mientras en un tono muy bajito, me confesaba sus crimenes.

Deje que el silencio se recuperara, que pasaran unos segundos antes de volver a romperlo. - No es ningun problema, porque estoy aqui, porque puedo volver a verte, olerte, sentirte, tocarte y besarte, pero sobretodo amarte... y bueno, lo del sofa ya lo iremos puliendo, como siempre hemos hecho. Los dos juntos, porque nada puede con nosotros si estamos juntos mi emperatriz. Nada. - La bese con muchas mas intensidad que ella a mi y me quede ahi, degustando sus labios, aunque sabia que no debia. - Solo espero que no me eches mucho de la cama... - Una suave sonrisa, una mirada perdida de amor infinito. que acababa desviandose a esos labios que me moria por besar mil millones de veces.

Cargando editor
12/11/2017, 17:23
Mona Stuard

Había sido una mala idea sacar ese tema, lo notaba por la forma de deslizar las yemas por el vestido- si bueno, eso es lo que me dices, ya veremos en unos años- le saqué la lengua y luego repensé en lo que me había dicho- espera...¿que yo invado tu espacio? ¿YO?- se señaló con un dedo acusador- creo que te equivocas, eres tu el que lo hace, siempre, voy a tener que poner un colchón en el suelo, al lado de mi cama para que no me tires y me hagas daño en la noche. 

Al final sería por la tarde, hasta la noche, algo que sin duda nos costaría un riñon en comida, aun así no me importaba en exceso, a decir verdad¿Para que valía el dinero si nunca lo íbamos a usar fuera? Le conté algunos secretos, de esos por los que esperas una regañina, pero solo recibí caricias hiladas con paciencia, a su manera. Utilizó ese tono dulce que usaba pocas veces, más desde que había vuelto para susurrarme palabras de amor, de esas que solo salen en los libros antiguos o en los recargados de azucar de esta época, y luego robó un beso que procedí a entregar mientras sopesaba si realmente me iba a quitar esa costumbre. No, no lo haría. 

Un leve parón, una ligera mirada, cargada con su flagrante energía y una broma, que se ganó un entrecerrar de ojos- ya veremos...-mordí al aire, como una provocación a un juego infantil sin duda, y Ierin se quejó desde lo alto, logrando sacarme una risa explosiva que me hizo deslizarme hasta dar con mis nalgas el sofá, alejándome de mi amado- Ierin cree que te he amenazado- sonreí ampliamente- Ieriiiin-ese tonito agudo- no le hago nada, es solo un juego. 

 

Cargando editor
12/11/2017, 18:13
Marko Deus

Por algun motivo no parecian haberle gustado mis palabras, o eso creia mientras mis dedos se deslizaban por el vestido. Aun asi no tenia claro si era por lo de las escenas de cama que ella habia dicho, o por sus invasiones catastroficas, donde acaparaba toda la cama, menos mi cuerpo, e incluso a veces, este tambien. - Si fuera a ser en unos años... no deberia grabarlos ahora, ¿y guardarlos para la posteridad? - Sabia que estaba en terreno pantanoso, pero ella no se rendia y seguia pinchando y yo no iba a dejarla sola, no estaria bien, si queria dar y recibir... pues dariamos y recibiriamos. Mas aun asi parece que por fin pillo lo de los ruiditos nocturnos y sus ataques con alevosia, y respondio haciendose la total indignada, mientras se señalaba y subia el tono de voz. Tome la mano con la que se autoacusaba, de forma ironica y la bese, besos suaves, casi etereos donde habia mas sentimiento que deseo, pues con el apsar de los minutos, la balsa aprecia haber vuelto a su habitual tranquilidad. - Si, tu mi amor... y no hace falta que te pongas nada, porque todo es tuyo, ya lo sabes... aunque ultimamente mi espalda si se queja de tus rodillas... - Roce mi nariz contra la suya, con los ojos cerrados, antes de apartarme. Habia una clara sonrisa en mis labios, pero por encima del humor, el juego, ese eterno juego que teniamos entre manos y que al menos, yo poco a poco, volvia a disfrutar de él.

Confeso su secreto, uno que si no habia advinado, sin duda suponia, puesto que sin mi en casa, era normal que volviera a sus anteriores costumbres. Sabia que habian cosas que no cambiaran, no al menos en mi madurita esposa. Rei levemente para mi, a sabiendas de que si pudiera leerme la mente, me estaria dando de golpes hasta la eternidad, pero aunque lo dijera asi, y a mi me hiciera gracia, sabia que para ella era diferente... y a mi, me importaba un comino su edad, o las normas de esta sociedad. Solo ella ya merecia mi vida entera. Recibi un beso, o mas bien lo pedi y me fue entregado, mientras ambos disfrutabamos de la cercania del otro, e Ierin se quedaba sobre mi cabeza, alejando esos ojos al menos de mi vista, que no de mis pensamientos.

Un entrecerrar de ojos conocido, un susurro, acompañado de un mordisco al aire que me hizo retroceder levemente mientras no dejaba de sonreir. Ierin por contra aprecio que se lo tomo de otra forma, mi emepratriz no dudo en explicarme el motivo y sonrei levemente, mientras levantaba una mano y acaricaba a la pequeña, puesto que ahora mi cuerpo estaba algo mas libre desde que Mona se habia alejado de mi, un poco. - Ierin parece que vamos a tener que domar de nuevo a la emperatriz de la casa... que se nos ha vuelto un poco salvaje. - Ese brillo, esa sonrisa, ese toque que volvia  rebosar deseo incandescente, hambre voraz de ti... una capaz de devorar no solo este mundo, sino todos los conocidos. - Lo llamas juego cuando tu lo juegas, si fuera yo... lo llamarias ataque, perfida nayade. - Le busque las cosquillas, asi como ella solo habia mordido el aire, yo no fui tan compasivo.

Cargando editor
12/11/2017, 22:20
Mona Stuard

ultimamente mi espalda si se queja de tus rodillas... No se daba cuenta del tiempo pasado, era claro, ese comentario fue sin pensar a todas luces, pues ya ni recordaba como se sentía dormir con el en la cama practicamente. No le rompí la ilusión de sus palabras, evité que viese el brillo reducido. Menos mal que llegó el frotis de nariz, los mimos y caricias y el amargo se deslizó a un lado, llevado por su candidez. 

Se atrevió a decirle a nuestra pequeña preñada que iban a tener que domarme, encima! Enarqué una ceja y enseñé mis dientes en un juego que atrajo un regaño de la misma que el había usado en su defensa y ataque- si claro...ataque dices, pues que sepas- recorrí su frente con mis dedos hasta llegar a tocar a Ierin- que no es un ataque, porque para que sea un ataque se necesita daño real...y eso- un dedo en la nariz, solo por un segundo- no es lo que ha ocurrido. 

Miré hacia donde estaba la pared que detrás tenía la cama- ¿Cuando vas a quedar con Rick?- Me levanté y estiré, como lo haría una princesa orca, con gruñido incluido- Creo que deberíamos de dormir ya...

Cargando editor
13/11/2017, 07:27
Marko Deus

Sabia lo que mis palabras provocarian, sabia que Mona tendria que "atacar" y de nuevo, mi defensora, esa bola de pelo con unos enormes ojos que me veia incapaz de mirar me defendio, mientras mi amada mostraba sus dientes en un claro juego. Mas entonces mi emperatriz coloco su mano en mi frente, ascendio hasta tocar a Ierin y despues un leve toque de nariz, apenas un instante, mientras me explicaba que para ser un ataque deberia provocar daño real y eso, no habia ocurrido. Por algun motivo, crei entender un "aun" al final de esa frase que nunca llego a pronunciarse. - Vaya y que yo pensaba que disfrutabas de mis ataques de besos, o de cosquillas... o de otra indole... ¿como debere llamarlos ahora mi amor? - Sonrei, jugando y disfrutando de sus caricias y sus juegos.

Ella miro hacia el dormitorio, mientras me preguntaba por Rick. - No lo se, le llamare mañana para quedar, puedes estar presente si quieres. - Mi mano cogio la suya, quizas no hubiera notado que habiamos estado separados, pero sabia que ella si y ademas, sentia una necesidad primaria de no tenerla lejos, no mucho tiempo al menos. En eso ella se levanto para desperezarse como harian los osos tras una larga hibernacion, con gruñido incluido, de lo mas sexy, sin ninguna duda. - Me parece un buen plan... - Me levante con cuidado, para que Ierin no perdiese el equilibrio y me pegue a ella, para besar su cuello levemente. - Vamos a dormir mi Dioskouroi.

Cargando editor
14/11/2017, 09:21
Mona Stuard

Es que esos no son ataques como tal, son solo..juegos- enarque las cejas a la vez dejando claro que eran otra clase de juegos más divertidos- vale, mañana, te tomo la palabra que sepas que te pondré una nota en la frente para que no se te olvide, y Ierin te perseguirá hasta que te la quites por que es algo extraño que has puesto sobre tu piel y no debería de estar ahí- me reí por lo bajo. 

Tras levantarme y estirarme me fui al dormitorio mientras me iba bajando la cremallera del vestido, sin ninguna intención realmente, solo que, era un poco pesado llevarlo- pero antes...me tendré que quitar todo esto del pelo y la cara así que, puedes hacer otra cosa, o simplemenmte tirarte en la cama si me quieres esperar, no debería de- desaparecí por la puerta del dormitorio- tardar mas de quince minutos- tuve que alzar la voz. 

Salir con pijama, ir al baño, lavarme la cara, el pelo en la ducha metiendo la cabeza y a la cama. Tanto arreglo para tener que quitarlo tras unas horas, que valentía de ir así todos los días tenían algunas. 

Cargando editor
14/11/2017, 09:54
Marko Deus

Ante su respuesta y esa manera de alzar las cejas, no pude mas que sonreir, aceptando que si, eran juegos, unos mas diveridos y de indole diferente. Tras ese momento, pasamos al hecho de que al dia siguiente llamaria a Rick y ella salio con el tema de que me pondria una nota en la frente y que ahasta que no me la quitase Ierin iria detras mio, porque eso debia quitarmelo porque no formaba parte de mi cuerpo... o algo asi. La verdad es que no lo entendi del todo. - Mi amor... pero si aqui la marmota eres tu. - Me rei por lo bajo, mientras en cierta forma admitia que yo ya habia dormido bastante... como mas de medio año. - Aun asi me asegurare de que no me dejas nada pegado, a ninguna parte del cuerpo. - El tono sonaba ligeramente con segundas, pero era dificil verlo con la forma en que te miraba y esa sonrisa de amor indeleble.

Mona se encamino al cuarto y yo la segui, viendo como se bajaba la cremallera del costado y en cuanto se descuido, metiendo la mano por el mismo hueco olo para hacerla sufrir un poco mientras de las cosquillas, pasaba lentamente a unos roces mas, suaves, mas lentos y con una cadencia diferente. Pegue mi cuerpo al suyo y la bese en la nuca, en el cuello, acercandome lentamente a las orejas. - Alguien ha bajado la guardia y yo... no he podido resistirme. - No iria mas alla de esas caricias, de esos roces y de esa necesidad de sentirla bullir por mi, aunque a mi me costara mantenerme en cualquier estado por encima de esta tranquilidad, que me resultaba tediosa y extraña. Era como pelear contra un muffin que recuperaba su forma tras cada golpe. No jugue mucho tiempo, dejandola irse a hacer lo que quisiera mientras no tardaba en salir del dormitorio ya cambiada y lista para hacer lo que fuera en el baño. Me plantee acompañarla, pero eso implicaria espejos, sus ojos, los mios y los de Ierin. - Voy a cambiarme yo tambien... ¿puedes llevarte a Ierin? - Era dificil notarlo, pero sin duda habia cierto grado de necesidad tras mis palabras.

La idea seria cambiarme y esperarla en la cama, para quizas hablar un poco mas, o caer directamente dormidos, mientras sin ninguna duda exigia la postura de la cucharita. Sin importarme quien se la hiciera a quien.

Cargando editor
14/11/2017, 10:11
Mona Stuard

Y yo que pensaba que no le haría caso a esa bajada de cremallera...graso error. Cuando me quise dar cuenta ya lo tenía pegado a la espalda, dandome un beso y colando sus dedos por debajo del vestido. Estaba a punto de decirle que no fuese malo, que sabía que no podría y que yo ya estaba muy necesitada como para que me tentase,pero no llegó a más. No lo buscó. Me podría acostumbrar a eso a la perfección. Reposé mi cuerpo sobre el suyo antes de apartarme, dejando que pasaran un par de minutos antes, en silencio, uno que se nos quedaba grande. No, no era yo una persona de muchos silencios. 

Me la llevaré- me giré y la cogí de su cabeza no sin algun intento por parte de la pequeña bola de pelo en volver con Marko. Veías sus pequeñas manos y brazos alzándose hacia ti, como queriendo que la cogieras. Aun así Mona se la llevó antes de que tu sucumbieras. Al volver dejé ala bola de pelo directamente bajo las sábanas y me colé en el interior de la cama como quien no quiso la cosa- ei guapo ¿que haces por aquí? ¿Vienes mucho?- me reí por lo bajo antes de reclamarlo a mi lado, para un abrazo que fuese o pareciese eterno, obviamente haciéndole yo la cucharita.-Buenas noches...

Cargando editor
14/11/2017, 10:56
Marko Deus

Se noto que no esperaba eso, que no esperaba que la atacara con alevosia por su flanco descubierto, mientras mi mano se cubria de gloria avanzando por un territorio que hacia tiempo que no hollaba, al menos en el mundo real, para mi, no habian pasado mas de cuatro dias de aquel incireble momento de amor compartido. Pude sentir lo que le provoco mi ataque, y al mismo tiempo como ella se dejaba hacer, a sabiendas de que no era un ataque en si, solo la necesidad de compartir mas momentos juntos, sin necesidad de llegar a nada, porque el muffin seguia ahi, imposible enemigo al que abatir, asi como la balsa de aceite. Como los odiaba, como odiaba sentirme... fuera de mi mismo.... porque yo no era asi. Ni de cerca... aunque Mona no puso queja al hecho de que no avanzara, y se dejo arropar contra mi cuerpo por unos instantes, antes de que el silencio nos arrullara de una forma un tanto extraña... pues al menos ella, no era de silencios.

Mona cogio a Ierin y ambas sallieron, mientras yo me cambiaba y me tumbaba en la cama. Apenas un cuarto de hora despues, aparecio mi empertriz, metio a Ierin en la cama y se metio ella tambien. Sus palabras me sorprendieron y negue con la cabeza, con una suave sonrisa. - No tanto como me gustaria... - Dejando claro que entendia que aunque para mi habian sido unos dias, apra ella habia sido mucho mas. Le di un suave beso, mientras sin ninguna duda, sentia la necesidad de algo mas, aunque aletargada... y me planteba el hecho de al menos hacerla a ella disfrutar, de que me sintiera, como me habia sentido hacia mucho en su cama, tras un ataque de nubes. - Buenas noches amor.

Cargando editor
14/11/2017, 18:36
Marko Deus

Tres dias mas tarde de que sucediera la cena en casa de Klaus, y que se decidiera a celebrar el cumpleaños de ambos, me encontraba en casa, esperando la llega de Rick. Hacia dos dias que le habia llamado y aunque sin duda, no habia sido una llamada facil de hacer, dentro de lo que cabe estaba contento. tendria que explicar cosas suponia, aunque preferia la sinceridad y que las cosas volvieran a su cauce lo antes posible. Negar lo ocurrido o esconderlo, haria que mi amistad con Rick quizas no cambiara a sus ojos, pero lo haria a los mios. Ya habian demasiadas cosas que no podia contarle, que no debia, si queria que todo fuera dentro de unas lineas delimitadas por TITAN y sin problemas, como para negarle algo de lo cual no sentia vergüenza alguna... aunque faltaba ver como se lo tomaria él. Sin duda deberia quitar todo el rollo mistico, lo que habia visto y demas, simplemente... un ataque de panico, unido a un estres brutal o algo similar... porque si le decia que habia visto a ese dios, lo habia visto moverse y como su collar de ojos subia por mi cuerpo... no, sin duda no ayudaria.

Por supuesto habia comprado cervezas, todas ellas residian en la nevera, e incluso habia colocado cuatro jarras en el congelador ligeramente humedas para asi conseguir ese frescor unico, sobre una jarra ligeramente helada. Habia un surtido de frutos secos y de papas, asi como algo de comida lista en la nevera por si nos entraba mas hambre. Quesos, pate y unos trozos de pan tostado para picar. Terminaba de poner la mesa, mirandolo todo detenidamente, cuando sono el timbre de la puerta. Me acerque tranquilamente, para abrir la puerta con una suave sonrisa en mis labios.

Cargando editor
14/11/2017, 20:19
Ricky Tomas

Cuando abriste la puerta allí estaba él, con esa sonrisa ladeada que siempre llevaba encima o casi siempre una vez que salías con él. Los cambios de cuando entrenabas solo a cuando salíais eran patentes, primero solo era amable, cercano, agradable. Luego te diste cuenta de lo peligroso que era en algunos ambitos, nada realmente negativo, pero Mona no había pensado lo mismo, sabías bien. 

Me alegro de verte- un abrazo, un golpe en el hombro, y más de tres segundos que significaron una frase real, un hecho palpable- ¿Qué tal estás?- Pasó mirando la casa- Menuda casita de amor tenéis- alzó las cejas con diversión mientras miraba alrededor- ¿No está la señora en casa? 

Cargando editor
14/11/2017, 22:14
Marko Deus

Al abrir la puerta ahi estaba Rick, exactamente igual que lo recordaba, con esa sonrisa suya que me habia llamado la atencion por ser al mismo tiempo buena y mala, una vez conocias al muy bastardo. Ahora podia entender un poco mas a Mona, pero la verdad es que Rick no era peligroso, o bueno, no lo era como Mona pudiera pensar... a su manera él siempre miraba por mi y desde que se habia enterado que tenia pareja, mas aun. Era un buen amigo y al verlo en mi puerta, me di cuenta de que era justamente asi, aparte de ser mi unico amigo en TITAN.

Su primera frase nada mas verme, vino con un abrazo, un toque en el hombro y alargar el momento lo suficiente, como apra evidenciar que lo decia completamente en serio. Ese abrazo se sintio bien, malditamente bien, aunque para mi no hubiera pasado tanto tiempo ni por asomo, saber que habia estado pendiente d emi y que habia llamado y que tras seis meses fuera, viniera y me diera ese saludo, significaba mucho. - Y yo a ti... - Devolvi el gesto de igual forma, sintiendolo y haciendole ver que era justamente asi. Ante su primera pregunta, sonrei levemente. - Mejor, aun recuperandome, pero bien. - Aguante a los ojos todo lo que pude, antes de apartarme para dejarle pasar. Su primera impresion dejo claro que era bonita la casa, no sabia si lo seria, aunque a mi me encantaba. La forma en que alzo las cejas me hizo reir mientras negaba lentamente. - Muchas gracias... se hace lo que se puede para que mi mujer no lo convierta en una leonera, pero negare haber dicho eso.... en cualquier caso.

Negue con la cabeza ante su ultima pregunta. - No, creo que dijo algo de que nos vendria bien un tiempo de solo chicos, o algo asi. Supongo que simplemente queria darme algo de espacio. - Sonrei, se notaba que totalmente enamorado de la señora de la casa. Le señale la mesa. - Por favor, he preparado algunas cosas, apra que podamos ponernos comodos y hablar... ha pasado demasiado tiempo. ¿Que tal la familia? ¿Que tal todo? - Me sentia a gusto, mucho... se sentia bien, volver.

Cargando editor
15/11/2017, 09:22
Ricky Tomas

Espero que no tenga ningún chivato que tenga oídos en la casa o te veo durmiendo en el sofá un par de noches- bromeó ante el comentario de la leonera. Se relajó un poco cuando mencionaste que no estaba en casa la señora- bueno, eso nos da un margen para ciertas cosas y bromas- Nunca lo habías escuchado decir cosas que de verdad pudieran molestar a nadie, no era una de esas personas que bromeasen de cosas privadas o sobre otras personas, a no ser que estuviesen en la misma mesa. 

Fue hasta la mesa donde le indicaste y sonrió ante el recibimiento de la comida- vaya, veo que como anfitrión no lo haces nada mal, negó con la cabeza ampliando la sonrisa- bien- se sentó enfrente de donde creía que te sentarías tu- Poco cambio la verdad, he estado un tiempo fuera, trabajando, y me he ganado unas buenas vacaciones que me tomaré en un par de semanas- apoyó la espalda contra el respaldo, observándote- ¿Y tu? No quise preguntar de más, pero seis meses tras un accidente no tiene buena pinta...y te veo bastante entero- una sonrisa ladina se dibujó, con un poco de tensión, como quien sabe que hay algo detrás. No algo bueno. 

Cargando editor
15/11/2017, 09:41
Marko Deus

No pude mas que sonreir ante su comentario del chivato, mientras una ceja se levantaba en actitud pensativa y iraba a mi alrededor. - Pues la verdad es que no lo se, pero bueno... si toca, pues tocara... aunque no lo creo. - Mi sonrisa se ensancho, para quedarse en esa posicion ligeramente helada un segundo cuan do dijo lo de ciertas bromas, porque hasta donde sabia él no era de ese tipo de personba, asi que supuse que era un comentario inofensivo, por lo que rapidamente negue con la cabeza, dando a entender que ya le valia.

No pude mas que enorgullecerme internamente, al ver la cara de Rick ante el recibimiento y sus palabras hicieron subir mi ego un poco, solo un poco. - Vaya me alegro de que te guste, he estado practicando para no liarla. - Sonrei dando a entender que era justo lo contrario, pero no por eso ba a dejar de jugar a esa bromas tontas que nos lanzabamos. Sonrio mientras contestaba a mis preguntas y se sentaba delante de donde creia que lo haria yo, acertando como casi siempre. Le escuche atentamente, mucho trabajo y en breve unas vacaciones. Se apoyo en el respaldo mientras me miraba y entonces pregunto, como era normal, dando a entender que se me veia bastante bien o "entero" para estar seis meses ko.

Mi sonrisa se volvio un poco mas tensa, pero para eso habiamos venido y ademas él sabia que no debia ser algo bueno. - No es nada fisico. - Me señale la cabeza... mientras lanzaba un largo suspiro. - Tuve la mala idea de explorar este sitio y acabe en el piso 47. - Mire la mesa mientras cogia un fruto seco y jugaba con él entre mis manos. - No se explicarte exactamente que paso, pero en uno de esos templos... se me fue un poco la cabeza. El doctor dijo que era por toda la presion a la que estaba sometido, a mis propios avances y necesidad de estar listo... y no se que mas, finiquito el asunto con que el estres mental se libero de la peor forma posible. - Levante la mirada del fruto seco, para mirarle. No queria esconder algo que tenia cierta logica en su mundo, pero tenia miedo de que saber que se me habia ido, pudiera afectar a nuestra amistad. - Se supone que ya estoy bien... aunque no he escapado sin algunas cicatrices.- Me meti el fruto seco en la boca y asenti, mientras sonreia levemente. - No se me dan bien las sutilezas como bien sabes... - Seguramente eso habia sido como un misil fueraborda... -

Cargando editor
15/11/2017, 11:43
Ricky Tomas

Desvió la mirada a un lateral cuando mencionó el piso- si...lo conozco- sonrió algo forzado cogiendo un puñado de frutos secos que se fue comiendo con tranquilidad mientras hablaba- hubo muchos sucesos raros cuando los trajeron, pero se supone que es algo que están estudiando. Sabes, hay energías en este mundo que aun se desconocen, por norma esos lugares tienen avisos pero claro, si no llevas el suficiente tiempo no conoces sus cuentos...- te miró con la barbilla baja- dicen que algunos de esos dioses no provienen de este mundo, y que sus formas son siluetas enredadas en las marañas de las pesadillas. Hay mucho conspiranoico de eso, bueno, no mucho, no aquí, pero hubo gente que se negó a trabajar en esa planta. 

Terminó su exposición sobre lo que le pasó- si, eso ya ha pasado antes, tenemos demasiado estrés, este es un trabajo demasiado duro mentalmente hablando. Me alegra que estés aquí y que te estés estabilizando- lo miré perdiendo esa seriedad- a mi hace tres años me quitaron del servicio durante mas de medio año. A veces, simplemente implosionamos...por eso tienes que buscar algo que te ayude a desestresarte, que sea una vía de escape. 

Cargando editor
15/11/2017, 11:56
Marko Deus

La manera en que desvio la mirada cuando dijo que lo concoia fue suficiente apra saber que lo conocia de forma personal, y no parecia haber sido algo grato tampoco. Cogio unos frutos secos y se los fue tomando mientras intercalabamos comentarios, indicandome que muchas cosas raras pasaron desde que los trajeron y que no era el primero al que le pasaban cosas raras en ese piso, pero que era algo que estaba bajo estudio por el momento. Me dijo que al llevar poco tiempo, no habia oido las historias, los cuentos que se contaban sobre algunos lugares, que era normal... que si habia ido sin aviso, pasara algo asi en pocas palabras. Incluyo algo que llamo mi atencion, indicando que algunos de esos dioses no venian de este mundo y que habia muchos que se habian negado a trabajar en esa planta. - Sin duda, no soy de los que volverian con gusto... menos aun al camino rojo. - Mire los frutos secos y tome unos pocos. - Casi se me olvida. - Fuia  la nevera y saque las dos jarras heladas y dos cervezas, poniendolas sobre la mesa, para que se sirviera al gusto.

No parecio afectarle, en ningun momento, no note ningun cambio extraño en él, simplemente me escucho y expuso su parte. Fue sobretodo la palabra final "estabilizarme" la que me dijo que entendia bien la situacion y no me consideraba un majara. Sus ojos se fijaron en mi, con demasiada fuerza y desvie la mirada al cuenco, mientras me indicaba que él tambien estallo y estuvo fuera de servicio por medio año. Su recomendacion me hizo subir la mirada y asentir antes de bajarla. Suspire levemente ante una ultima confesion. - Siento, si no... mantengo la mirada sobre los ojos... es una de las cicatrices, me han dicho que me recuperare pero que necesitare tiempo. - Torci levemente el gesto, no me gustaban las debilidades, eso era obvio. - ¿Algo para desestresarme? - Sonrei levemente, mientras me servia mi cerveza, inclinando levemente la jarra apra no provocar mas espuma de la necesaria. - No estaria mal, por el momento tengo prohibido entrenar en la zona militar y debo, tomarmelo con calma me han dicho... asi que supongo que tendre tiempo de buscar cosas que me relajen. Los dardos, o el billar quizas ayuden como inicio... - Una sutil broma, indicandole que me gustaria quedar mas a menudo ocn él, si tenia tiempo.

Cargando editor
15/11/2017, 12:15
Ricky Tomas

Hay gente que se ha asustado con algunos lugares de esa zona- mencionaste el rojo y el asintió, como si lo conociera. Trajiste las cervezas y el se sirvió la suya, con el grado de inclinación adecuada y casi a cámara lenta- Gracias- le dio un sorbo y emitió un gruñido de aceptación y gusto. 

Estuviste en el templo de las piedras antiguas- asentí con más vehemencia cuando dijo que no podría mirar a los ojos- bajaste las escaleras...- cortó hablando de nuevo tus pensamientos antes de que llegaran muy lejos- ¿recuerdas a la dama de hierro? Uno de sus entrenamientos dicen que es sobrevivir una semana en cada uno de los templos grande de esa planta, todos son mas o menos iguales, entras y te encuentras con otros pequeños en su interior. Es un entrenamiento más psicológico que otra cosa. 

Si, desestresarte, lo hablamos en su momento, necesitas algo que te relaje o que te haga sentir bien- se acercó un poco a ti, como si fuese un secreto- la cama ayuda- te guiñó un ojo de forma pícara y luego simplemente se empezó a reír durante un breve momento, acabando por un suspiro mientras bebía de su cerveza. 

 

Cargando editor
15/11/2017, 15:40
Marko Deus

Su comentario me dio a entender que él como veterano sabia unas cuantas historias, cuando mencione el camino rojo, hubo un nuevo gesto, dando a entender que sin duda lo conocia. Las cervezas acabaron en la mesa, las dos jarras heladas conteniendo un liquido que el mismo Bacco deberia bendecir. Cuando me lo agradecio le mire, negando con la cabeza por atreverse a tamaña herejia entre amigos... pero sin duda su gruñido fue mas que suficiente gesto para obligarme a sonreir con cierto orgullo por conseguir en un cuasi catador de cervezas, semejante expresion de gusto.

Conocia el templo, conocia las escaleras que llevaban al mismo inframundo. Al mencionarlo él, me senti viajando de nuevo alli, hasta la misma base, pero sin cruzar el pasillo en zigzag, hasta que menciono a la dama de hierro y su entrenamiento, para vovlerte psicologicamente mas fuerte. Dudaba ser capaz de bajar de nuevo por esas escaleras... lo dudaba de verdad. Estaba seguro que de ni mi cuerpo, ni mi mente, lo soportarian. Aun asi algo atrajo mi atencion y me hizo mirarle detenidamente. - Conoces el lugar, sabes de que templo hablo... de cual de los pequeños que hay dentro. ¿Te entreno la dama de hierro? - Sin duda tenia sentido, no habia duda, sino que motivo tendria nadie para entrar alli y ademas reconocer uno de esos pequeños templos internos, si no. Mi tono seguia siendo el de siempre, quizas algo curioso, pero no presionaba, ni por asomo... sabia que quizas al igual que en mi caso fuera algo... duro, de una u otra manera.

Me repitio lo de desestresarme, recordandome que ya lo habiamos hablado... para de pronto acercarse a mi y susurrarme casi algo que sin duda ayudaria. Ante sus palabras no pude mas que mirarle, viendo esa sonrisa picara y reirme con ganas, de verdad, mientras intentaba recuperar el aliento y escuchaba su risa, que acabo con un trago de cerveza. - No lo dudo... realmente no lo dudo... sin duda ese es un buen hobby por el que empezar. - Tras decir eso, fui yo el que bebido un buen trago.

Cargando editor
15/11/2017, 15:53
Ricky Tomas

No- negó con la cabeza- pero cuando pasé ese tiempo sin hacer nada, me di una vuelta por las zonas del complejo que no conocía. Nunca he sido creyente Marko pero conocí una vez a una chica que visitaba los templos olvidados de mis tierras, apenas cuatro piedras y un sótano- miró un cacahuete solitario sobre la mesa- me dijo que le fascinaban como en su momento la gente había adorado lo que había dentro, y que me imaginara lo que habrían visto las paredes. 

No la entendí en su momento claro, pero una vez eres consciente mas o menos de lo que te rodea te das cuenta de que es verdad- se encogió de hombros- así que me pateé todas las plantas buscando algo diferente, algo que pudiese llamar mi atención como a esa chica aquellas piedras...y lo encontré- miró la cerveza- un buen local, cerveza, unos dardos o un billar, no necesitaba de piedras antiguas, solo dientes antiguos contando historias vivientes. Eso es lo que tienes que buscar tu ahora, un lugar. Un lugar donde puedas sentirte bien y que no sea tu casa. 

Cargando editor
15/11/2017, 17:22
Marko Deus

Su negativa no me sorprendio, la verdad es que por como me habia hablado de ella me habria sorprendido mucho que efectivamente fuera su instructora en algun momento, pero aun asi, el saber que habia estado en esos sitios, me intrigaba, aunque no fue necesario esperar mucho antes de que me explicara el motivo. Durante esos seis meses estuvo visitando los templos por culpa de las palabras de una mujer que visitaba los antiguos lugares de culto alla en su tierra, fuera la que fuera. Por curiosidad que pudiera tener, eso implicaria una respuesta a una pregunta que no podia dar, no sin mentir descaradamente, asi que la obvie, prefiriendo la ignorancia por el bien de los dos. Aunque debia admitir que no me sorprendia que lo que hubiera movido a Rick, a buscar esas fuerzas que estaban por encima de las mortales fuera una mujer... sin ninguna duda, no me sorprendia nada.

Vi como miraba los frutos secos y mientras seguia hablando fui a por mas, sin dejar de mirarle en ningun momento, dejando claro que andaba atento a cada palabra que salia de su boca. No tarde apenas en volver con la bolsa de frutos secos que deje a un lado, tras rellenar el bote. Asi mismo traje el plato con los pates y el queeso, y el pan tostado, dejandolo a un lado, para volver a sentarme, fijandome en mi amigo, no en sus ojos, sino en sus labios.... hasta terminar sonriendo por aquello que habia encontrado. - Yo si soy creyente... a mi manera particular, pero sin duda como bien dices, un lugar de esa indole, donde uno puede oir las historias reales, de boca de aquellos que las vivieron, tiene mucho mas valor de lo que la gente cree. - Aun asi fueron sus ultimas palabras las que mas me tocaron, las que me dejaron pensativo. - ¿Un lugar que no sea mi casa y donde pueda sentirme bien? - Le di un trago a la cerveza. - No lo pones facil, pero me han dicho que estos primeros dias este de relax... asi que te invito a que me lleves a donde quieras, o donde creas que puedo encontrar un sitio asi... solo que sea alejado de los templos.