Partida Rol por web

Cuando los dos los guían hasta la parte deteriorada del muro, pueden ver con claridad su estado. De este lado la altura no pasa de los tres metros. El muro parece haber soportado muchos daños, pues en algunas áreas parece que se va a desplomar. Muchos ladrillos o bloques se han salido de su posición dando apariencia de escalones primitivos, que podrían facilitar parte de la escalada. Pero hay un tramo más difícil desde el último de estos hasta el borde de la pared. El explorador dispone de cuerdas para este tipo de ocasiones así que esto podría ayudar bastante. Pero el primero es el que tendrá más problemas. También se podría intentar tumbar el muro, pero sería algo mucho más complicado y agresivo.

Bien, la decisión última no es mia, pero se nos plantean dos alternativas, mandar a abrir la puerta a nuestros hombres mas agiles y sigilosos, o subir con ellos. comentó mirando a Aramanth, últimamente estaba muy callada, desde su visita al castillo... esperaba que fueran imaginaciones suyas. Ese no era el momento para distraerse, asi que se volvio a concentrar en lo que les ocupaba.
Pero esos daños parecen interiores, algo ha ocurrido dentro, decida lo que decida, pido permiso para acompañar a los primeros que entren; si hay problemas no quiero que pese sobre mi conciencia dos fantasmas.
Si me ponen un par de cuerdas, pese a la armadura podría subir con cierta facilidad, mi señora, espero vuestra decisión. dijo Sir Igor a media voz hacia su general, la verdad es que agrradecia no estar al mando, si hubiera dicho eso a sus hombres siendo el lider, hubiera escuchado infinidad de quejas, aunque no le acababa de coger gusto a ser humilde, tenía ciertas ventajas, como el poder dar rienda suelta a una temeridad que le hacía rejuvenecer por dentro.

Bien. Tumbar estos muros nos traería problemas si el castillo estuviera ocupado. Además si algo adentro no creo que debamos abrir las puertas y permitir que salga lo que sea. Sir, creo que deberíamos subir todos. La dama está callada. Pero su rostro muestra un estado de profunda reflexión y cálculo. Ustedes dos id alante. Ordena refiriendose al explorador y el arquero quienes se muestran como los más ágiles. Cuando estén arriba, lanzad las cuerdas para que puedan subir el resto de los hobres.

explorador pifió.
arquero subió.

Observas el lugar con preocupación. Sientes que quizás podrías tener alguna idea de que podría causar tal daño. Regsitras imágenes de tu pasado, en las historias de tus maestros. En tus cuentos de cuna. Incluso en aquellas historias que te hacía la mujer que destrozaría tu vida.

Al fin se te ocurre una idea. La destrucción se parece mucho a las historia de gigantes y de hombres enormes, de fuerza descomunal.

Sir Igor hizo una inclinación indicando que se sometia a la voluntad de la noble y su general. Y se paró a observar como los dos hombres trepaban por delante suyo. Tenía la boca seca, si se concentraba podía oir y sentir su pulso en las sienes, hacía mucho desde la última vez que ocurría eso Luego me decían que me estaba haciendo viejo se rio ara si mismo con satisfacción, tanto le había insistido su tia que casi se lo había empezadop a creer, era un alivio que este viaje le probara que a´çun no había llegado ese momento.
El castillo a oscuras, no era mas que una sombra enorme y amenazadora en frente suyo, de repente se le antojo que los dos hombres subían por el costado de un gigante dormido y que se arriesgaban a despertar algo horrible. La figura de angelica se perfilo en su memoria, sus palabras, las historias. Sintió la urgencia de notificarlo pero su boca se habrió y se cerro muda, como podía explicarlo, no habían venido a escuchar historias, no se irían sin comprobar que había dentro y hablar en voz alta solo mermaría la moral de sus hombres, la moral o su fe en el, tanto si se equivocaba, entonces ese seria el mejor de los casos en que lo tomaran por loco, o si tenía razón, entonces podrían preguntarse muchas cosas al respecto de Sir Igor.
De pronto su tranquilidad se había evaporado, el miedo le hacía estar más despierto que nunca, y su inseguridad hizo que de manera estupida, pues¿ que podía hacer contra un gigante? Se llevara la mano a la espada.

El explorador y el arquero comienzan a escalar por diferentes ángulos. Cada uno de ellos con una soga amarrada alrededor del hombro.
El explorador comienza a encaramarse, se agarra de uno de los bloques, pero este se safa y cae. A pesar de que la altura no es mucha, cayó de una forma incómoda y rueda por el suelo. Reprime el grito por el dolor, al final parece que se ha roto una pierna.

Mientras todos han estado atentos a la caída del soldado, el arquero ha subido con facilidad. Nadie se ha fijado en el esfuerzo que ha hecho para saltar el último tramo. Una vez arriba arroja la soga, y declara con discreción. ¡Listo!

Ocupate del herido dijo Si Igor al tuerto que gustaba de esgrimir dos armas. Llevalo al punto de recogida, nos veremos allí. Nadie puede veros, no estamos a este lado de la frontera, queremos asegurarnos q en esa fortaleza no hay nada peligroso, no causar un inidente diplomático¿ Entendido?
Después de eso se dirije a Aramanth le susurró:
No quisiera alarmaros, y sé que una sospecha comoe sta no basta para que nos echemos atrás sus palabras eran cautas y su tono trataba de ser tranquilizador Pero esto me recuerda una historia que leí hace mucho tiempo, los daños en el castillo, las circunstancias... hubo un momento en que receloso de continuar, notó que estaba sonando como un demente. Espero que sea producto de los nervios, pero cabría la posibilidad de encontrarnos gigantes ahi dentro, gignates encerrados en el fuerte. Los invocaron e incapaces de controlarlos los han abandonado... sé a lo que suena y lo que debo parecer sugiriendo esto se excusó Pero en este viaje ya hemos visto demonios, y esta situación nos es muy típica. Quizá no debieramos entrar ahi sin un mago concluyó al fin sir Igor. Uno de los consejeros está en la región. Puede ser un valioso aliado ahi dentro. Como siempre la ultima palabra es vuestra señora.

El tuerto cumple raudo las órdenes de Sir Igor y ayudando al explorador cojo se alejan lentamente en dirección al puente. Arriba el arquero los mira con detenimiento y amarra bien la cuerda que ha traído a una de las almenas. Cuando termina chifla para que todos sepan que ha terminado.

Aramantha está un poco ida. Observa el muro con extraña mirada. Es como si le molestara la deformidad y pasa la mano por este. Quizás preferiría que estuviera sano, parejo, perfecto.

Al escuchar las palabras del caballero, despierta del trance. ¿Gigantes decís? Tus ideas me parecen poco ortodoxas. La leyenda cuenta que los gigantes se retiraron a las montañas y hace siglos que no se les ve. Pero luego, las colinas donde nace el río no están tan lejos. Suspira profundo tratando de digerir la idea. Sin embargo te equivocas al pensar que los magos del consejo están cerca. Su camino era hacia el norte. Sólo Jaserys y Anakin ambos líderes de gremios de espías partieron al sur como nosotros. Y no creo que nos puedan ayudar mucho.

Si las cosas están así deberemos valernos por nosotros mismos. dijo con resignción Espero equivocarme, francamente, tener siempre razón es algo muy agotador bromeo nuevamente con el tono de prepotencia que usaba a modo de fachada tan a menudo, trataba de quitarle hierro al asunto.
Se volvió al muro, agarro la cuerda y comenzó la ascensión.

Hacía mucho que sir Igor no hacia esto, quiza sí estuviera demasiado mayor, de repente perdio apoyo en un pie y se balanceo hacia un lado, trato de enderezar su situación.

Sir Igor no deja lugar a dudas de cual es su opción, salta al muro y escala con facilidad, sin embargo si no es por la ayuda de la soga y el arquero que extendió su mano hubiera caído desde la altura de 3 metros.

El sargento lleva el escudo a la espalda y sube por entre las piedras con facilidad, y luego salta el último tramo protegido con la soga. Le sigue el caballero, un hobre k¡joven de unos 26 años, quien a pesar de las armaduras, se mueve con facilidad siguiendo los pasos del anterior. El salto final que es la parte más dificil también la pasa sin problemas.

Después sube Aramantha, la escalada le resulta un poco dificil, pero lo logra gracias a la soga. Al final muestra un agilidad increíble al subir la última parte sin necscidad de ayuda.

Por último sube el escudero del caballero, un jovencito que debe estar en la pubertad. Subir no le resulta dificil. Así que luego de unos 10 minutos están todos sobre el muro entre las almenas. El arquero recoge la soga, por si la necesitan luego.

Sargento: 4+7=11; 7+7=14
Caballero: 5+6=11; 6+6=12
Aramantha: 2+5=7; 16+5=21
Escudero: 3+7=10; 4+7=11

Mientras los demás subían, salvo quizá cuando Sir Aramanth subía, no presto atención al lado exterior de la muralla, sino que inspecciono el interior, aunque no pudo evitar supervisar la escalda de la general con el corazón encogido por la posibilidad de verla caer al vacio, atenazado por ese sentimiento se dio cuenta de que había algo más que deber en esa sensación.
Bien¿ y ahora que? dijo Sir Igo bajando la voz inconscientemente, una vez que hubieran subido todos ¿ Las estancias de los señores en la torre del homenaje? ¿ Los barracones?¿ Cual es nuestra prioridad? preguntó Sir Igor. Si las fortalezas son iguales desde fuera podemos esperar que tb sean iguales por dentro, así que si nos separamos pensad en ello para encontrar el camino de regreso aquí, será mejor que dejemos las cuerdas, por si volvemos con prisa. añadió al grupo en general mientras dejaba que Sir Aramanth decidiera

Están "protegidos" del exterior por las almenas del muro. El pasillo conduce en ambos sentidos a torres semejantes, por donde suponen que hay escaleras para descender a una especie de patio interior donde están los barracones. En este nivel también hay acceso a la torre de homenaje. El castillo es casi una copia del otro. Sólo hay algunos detalles pequeños que marcan diferencia.

Hay un olor en el ambiente que cada vez se hace más fuerte. Como a pudrición y sangre seca. Es algo que todo guerrero ha sentido antes.

El caballero que sigue a Sir Igor pregunta. ¿Señor qué es exactamente lo que buscamos? No deja de hacerle gracia a Igor, porque él tampoco sabe, y por el rostro de la General, esta tampoco tiene idea exacta.

Cualquier Indicio de por que han abandonado la fortaleza, lo primero que me gustaría descartar es peste, así que si veís restosd e piras de cadaveres avisadnos enseguida, trataremos de buscar en las alcobas del señor a ver si ha quedado algo atrás que nos sirva de indicación de que esta pasando. O de que le ha ocurrido a este muro por ejemplo. responde Sir Igor sin dudarlo, no quiere que piensen que hayan venido a la ligera aqui Aunque parece que asi ha sido.
No podemos ignorar las extrañas circunstancias en que se encuentra este fuerte, atentos a cualquier cosa rara, y no toqueis nada, ante la duda, retroceded y comunicadselo al grupo, no nos separaremos, ni alejaremos demasiado, prohibido salir del campo visual de los demás, juntos somos fuertes, separados, estamos sólos en la oscuridad¿ entendido? dijo Sir Igor con confianza. Debía sr el espantapajaros de la duda, la muerte del coraje.

Comienzan a deslizarse en fila india a lo largo del muro hasta llegar a una de las torres. El orden que llevan es casi el mismo con el que subieron: el arquero, Sir Igor, el sargento, Aramantha, el caballero y su escudero. En la torre hay una escalera que conduce tanto hacia arriba donde suele haber postas de arqueros, y hacia abajo el patio. El grupo desciende con cautela.

Justo al llegar al patio comienza a trasnformarse la imagen. Hasta ahora era algo tenebrosa por el misterio y el silencio. Pero se vuelve tétrico a cada paso. Hay muchas manchas escarlatas y negras esparcidas en los lugares más insospechados. En la esquina contra el suelo, alto en el lado interno del muro, en la puerta del establo. El olor es más desagradable, y la nube de moscas se levanta ante el paso del grupo. Justo bajo la parte interna del muro yacen los restos de un carruaje hecho añicos. Como si hubiera sido lanzado contra este.

Pero lo que llama más la atención es que no hay rastros de cuerpos. No les sorprende entonces notar que en el suelo hay rastros rojizos entrando o saliendo de las barracas; y bajando o subiendo de la torre del señor. Algo o alguien se ha tomado el trabajo de "recoger" el lugar. Ante toda esta escena desagradable, el arquero no puede evitar vomitar la comida. El caballero también está pálido pero se contiene. La pose de todo es de alerta extrema. Las armas en la mano, pues no saben qué podría aparecerse en cualquier momento.

Sir Igor puso una mano en el hombro al arquero indicandole que retrocediera en la fila, a una señal suya él y su caballero se encargaron del frente de la expedición, no dijo nada, no era momento de chachara ni de delatar su posición al inquilino que sin duda había.
Si arrastra a los cadaveres es que no es muy grande, ni lo bastante fuerte como para levantarlos en vilo penso con cierto consuelo Sir Igor. Pero...¿ y el carruaje? notó la boca seca, aunque otras veces había tenido esa sensación no sabía que esperar ahora mismo.
Buscó con los ojos a Aramanth en busca de alguna indicación. Sus dudas parecían verse confirmadas¿ que otra cosa tendría fuerza para lanzar un carruaje de semejante modo? Espero su señal para avanzar o retroceder.