Partida Rol por web

Turno 810
Info

Wamalsuntha es una vidente que reside en el pueblo. Es extravagante y bastante rara, no se lleva bien mas que con una o dos personas. Sin embargo muchos confian en lo que ve, si bien ha fallado en algunas ocasiones, sus predicciones suelen ser correctas.

Turno 810 III

Bolgo tragó saliva. La mirada de Gindorel le intimidaba y le hacía sentir como si se tratase de un niño pequeño. De hecho, estaba seguro de que así es como el hombre le miraba, pues difícilmente podría haber visto a muchos medianos por aquellas tierras.

- Señor, quería decirle dos cosas que pueden ser de su interés. La primera es que tanto si deseáis plantar cara a los orientales como si vuestra intención es huir en busca de aliados podéis contar con mi ayuda y estoy seguro de que también con la de mis compañeros. Os aconsejo no despreciarla, pues han mostrado una gran valía en combate.

» Y la segunda, si me lo permite, es una idea que me ha surgido mientras escuchaba discutir a mis compañeros. Allí se ha planteado la posibilidad de que su pueblo huya buscando cobijo en una aldea cercana. Seguro que vuestro enemigo ha contemplado esa posibilidad. He pensado que si decidís plantar cara, tal vez podamos usar eso para dividir al enemigo. Escondernos en el pueblo, y permitirles la entrada haciéndoles pensar que lo hemos abandonado y cuando haya entrado un número razonable de enemigos, bloquear las puertas y luchar contra los que ya hubieran entrado. Así podríamos mermar sus fuerzas y tendríamos alguna posibilidad.

Bolgo calló entonces. Se ruborizó y deseó no estar allí plantado ante Gindorel. No le importaba la lluvia. No le importaba el frío. Solo le incomodaba la intimidatoria mirada de Gindorel.

Turno 810 II

Escuche con atención la oferta de Dorhand, la cual dadas las circunstancias era mas que aceptable, pero mi destino esta ligado al de Temudyin, y solo si el decide partir, partiré.

De los demás poca opinión tengo, apenas los he conocido, aunque estrato desde luego era lo mejor que jamás había visto fuera del hogar, parecían todos buena gente….demasiado buena, y este mundo un esta hecho para gente así, y no quedan ya muchos, cada día menos….. por algo era, por algo….pero sera una gran perdida los que queden para luchar.

Dorhand, es una propuesta muy interesante, hablare con mi hermano y si el decide partir, así será entonces, de lo contrario me quedare para hacerle cambiar de parecer, como creo que comprenderás.

Turno 810

Gindorel se fue acercando a Bolgo, que bajo la lluvia solto todo lo que tenia dentro. Cuando estuvo junto al mediano se arrodillo, pero lo dejo terminar.

- Gran corazon tienen los hobbits, no hay duda de ello. - dijo amablemente el capitan, aun eran cantadas las canciones de Frodo y de como salvo al mundo. - No depende de mi el destino de esta ciudad, si no de Machared, nuestro señor. - comenzo a contestar a Bolgo. - El dictaminara con la informacion que he de darle el siguiente paso a dar. Pero en mi opinion acabaremos abandonando esta aldea, nuestra vidente ha previsto malos augurios para nosotros si nos quedamos aqui, y Huithyn suele hacer caso a esa majadera. - informaba. Despues continuo hablando

- No dudo de vuestra valia joven amigo, ni de la de tus compañeros, pero es una empresa harto dificil, que nos proporcionaria mucho dolor. - Quedo pensativo unos instantes.

- Respecto a tu idea... Bueno, no creo que surtiese efecto. ¿Que crees que harian el resto cuando vean cerrarse las puertas? - pregunto sin dejar responder - Eso dando por supuesto que entraran a cerciorarse de que no haya vidas dentro antes de quemar todo. - dijo con una voz serena - ¿Acaso estais versado en las artes de la guerra?, maese... - penso por un momento el nombre del mediano - No recuerdo tu nombre, pido disculpas.

Gindorel era en realidad amable, al menos todo lo amable que podia ser siendo un capitan. Hablaba tranquilo, sin exaltarse ni gritar. En la cabaña habia dado un aire prepotente que no se correspondia con su personalidad. El hecho de que Draupner cerrara por dentro, y el encaramiento de Oin e Yves, le hizo enfadarse en parte, habia cosas mas importantes.

Gindorel escucho lo que tenia que decirle el hobbit, antes de despedirse.

- Ahora, si me disculpas, he de entrar a informar a mi señor. Ve y seca tus ropas, calientate, aprovecha los ultimos momentos de Burh Ailgra. - dijo para despues darse la vuelta y encaminarse de nuevo a la puerta. - Ah, y diles a tus amigos que se calmen, estan entre aliados, no tienen que temer - añadio sin darse la vuelta. Era una clara referencia al hecho de colocar cuñas y tener las armas preparadas siendo invitados en la aldea.

Turno 810

- Por supuesto Yves, tenemos tiempo aun - dijo el comerciante

Despues se acerco al fuego, ensimismado con su baile, pensativo.

Turno 810

- No os apresureis - dijo a los esgarothianos - Este hombre aun esta debil, necesita descansar, al menos todo el dia de hoy - dijo señalando a Temudyin.

- Y el sureño... su brazo tambien necesita reposo. - Miro a Ilidan - Os aconsejo que pospongais vuestra partida hasta el dia de mañana - era un consejo de la persona que habia curado a ambos.

Turno 810 IV

- Bolgo es mi nombre -aclaró el mediano con la cabeza gacha en señal de respeto -No estoy versado en las artes de la guerra, pero he oído muchas historias y conozco grandes hazañas en campos de batalla.

Dejó hablar al capitán a continuación y le agradó su carácter amable.

- Disculpad a mis compañeros. Muchos peligros hemos enfrentado en nuestro largo camino. Algunos de nuestros amigos han caído. Les resulta complicado sentirse seguros en ningún lugar. 

»Señor, os habéis ganado mi lealtad. Sois un buen capitán. Si en algo puedo ayudaros a vos o a vuestro pueblo, solo tenéis que mencionarlo.

Con una amplia reverencia, Bolgo se despidió y se alejó entre la lluvia una vez más hacia la cabaña. Se sentía lleno de orgullo y algo más relajado de modo que empezó a sentir frío y la incomodidad de encontrarse empapado.

Turno 810

Draupner se apartó para dejar salir al mediano. Mientras alguna de las miradas de sus compañeros se fijaban en él.

Había aguardado para hablar, pero tras la intervención de Agranil ya no lo haría, no es que le importara demasiado, pues  ya había hablado del tema con quien tenía que hacerlo. 

La cuestión había quedado zanjada de momento, y el enano solo veía sentido demorar su marcha hasta al día siguiente si la guarnición partía con ellos, pues cada minuto que pasaba era un minuto de ventaja que perdían sobre los Sagath. 

Era consciente de los peligros a los que se tendrían que enfrentar si partían solos, así que habría que ir planificando su marcha por si aquello sucedía, pues en cuanto se abrieran las puertas de la fortificación el enemigo sabría exactamente el número de personas que la abandonaban, su dirección y el mejor sitio donde emboscarles, así que tendrían que crear una buena distracción o salir al anochecer, si no querían que la muerte se convirtiera en su próximo destino.

Así pues solo dijo, en clara referencia a sus compañeros, pues sonó a orden aunque no lo era, tan solo su forma de decir las cosas últimamente. - Preparad vuestro equipo como si fuéramos a salir en 5 minutos y en cuanto esté listo descansad todo lo que podáis. Porque lo vamos a necesitar. -

Luego se acercó a Dorhand - ¿Puede dejarme los mapas que nos dieron en el otro asentamiento? Me gustaría aprovechar que está aquí Fréagulf para que nos describa de una manera más detallada los caminos que conducen de aquí a nuestro destino, para hacer una elección más acertada de nuestra ruta. -

Turno 810 III

Después de oir las palabras de Ularico y Dorhand, Groal se ve visiblemente más tranquilo. Al parecer, él no era el único que pensaba que evacuar era la mejor opción.

-Supongo que entonces este tema está más o menos zanjado- Dijo Groal, mirando al grupo y esperando a ver si alguien tenía aún alguna objeción - Me siento muy aliviado de que la sensatéz sea lo que prima en los líderes de la aldea, y que la evacuación ya haya comenzado. Coincido totalmente en que sería mejor replegarnos a otro lugar más apropiado, donde poder planificar una estrategia con esperanzas reales de victoria.

Después de decir esto, Groal se dirige a Dorhand -Muy agradecido por vuestra invitación. Sin duda que os acompañaré mientras nuestro camino sea el mismo. No solo he cogido afecto a la compañía, sino que sería muy imprudente de mi parte que un hombre como yo, que aunque tenga gran envergadura no soy un hombre de armas, se aventure a continuar semejante camino solo. Mucho menos en una situación como esta...

Cuando Groal parecía querer decir algo más, Draupner alzó la voz y habló al grupo. Ahora que Groal había aceptado ser uno más de ellos, debería seguir sus indicaciones como todos lo hacían. Sabía que Draupner no se consideraba a sí mismo el "jefe" o "lider", pero el grupo confiaba en él y lo respetaba como tal.

Cuando Groal escuchó la petición de de Draupner a Dorhand, no pudo contener su lengua y preguntó: -Pero, en definitiva, ¿Qué haremos? Pues entiendo que no nos quedaremos aquí. Que los aldeanos se preparan para evacuar y replegarse, y que lo mismo haremos nosotros. Pero, ¿Los seguiremos? ¿Evacuaremos junto con ellos e iremos en la misma dirección? ¿O seguiremos otro camino?

Groal vió en los ojos de Draupner una respuesta, pero lo atajó diciendo -Entiendo que sería demasiado riesgoso seguir un camino independiente en estos momentos. Siguiendo al resto del contingente aminoramos los riesgos, pues somos más. Pero, en ese caso ¿No serán ellos los que decidan el camino a seguir? No creo que Ginrodel oiga nuestras reconendaciones acerca de los mejores caminos, o la ruta más segura.

Turno 810 II

- Solo si estudiamos todas las opciones podremos decidir cuál es la que más nos conviene. Estudiemos de momento la de ir solos, pues la otra como dices, no depende de nosotros. - le respondió Draupner - Además Groal - añadió - los aldeanos ya han evacuado. Es por eso que ocupamos una de sus casas. Los únicos que quedan aquí son esta pequeña guarnición. Imagino que partieron dirigidos por el segundo al mando, junto con al menos la otra mitad de sus hombres, dándoles escolta. Ularico podrá decirnos. Si no ha sido así, ahora mismo estarán muertos en algún camino no muy lejano. Si hemos de salir de aquí con alguien es con la guarnición abandonando la villa a su suerte.-

Turno 810 II

Gelion permanecía con las piernas cruzadas intentando centrarse en sus estudios pero la discusión que se desencadenó no le dejó hacerlo. Cuando se levantó y habló anteriormente de algún modo supo que no podría seguir centrándose en ellos.

Groal y otros del grupo optaban por huir. Tenían razones de peso, razones importantes que les empujaban a actuar como hacían. Ninguno de ellos podía ser acusado de cobardía. Pero en el fondo él se sentía así. Se decía una y otra vez que un repliegue táctico muchas veces hacía ganar una guerra, quería creerlo. Pero le daba rabia. Sentía que no debían hacerlo.

Suspiró y levantó la vista de sus papeles.

Me comprometí a ayudar en esta expedición y no traicionaré mi palabra. Iré donde se me diga.

Y preparó todo lo que antes había dejado desparramado embutiéndolo a toda prisa en la mochila. Sólo dejó fuera los papeles que leía en aquel momento y que podía guardar en unos segundos.

Permaneció así un par de minutos y una idea le sobrevino.

Perdonadme buen Ularico. Me preguntaba si tenéis conocimiento de dónde puedo adquirir papel de pergamino de buena calidad para escribir y tinta y pluma que le hagan honor. Pues mis reservas menguan. Además estoy especialmente interesado en el papel que usan algunos eruditos para anotar delicadas fórmulas, especialmente preparado para durar y resistir las inclemencias del tiempo. ¿Podríais indicarme dónde debo ir o dónde puedo preguntar?

Turno 810 II

Oin asiente con la cabeza a las palabras de Draupner y se encamina a su jergón a preparar sus cosas... sólo para darse cuenta de que Draupner lo ha hecho por él. 

"Vaya..."

Así que simplemente se deja caer en el camastro tal como está tras dejar el martillo junto al escudo. Será un camino difícil y muchos caeran.

- Arcos... malditos arcos... - rezonga por lo bajo mientras piensa en la muerte de Gallindum alcanzado por una flecha.

Turno 810

- Bueno maese enano, Draupner he oido que te llaman. - comenzo diciendo al enano - Los civiles comenzaron a marcharse hace tres dias ya, al poco de saber que el ejercito sagath se apostaba no muy lejos. El ultimo en hacerlo lo hizo ayer mismo por la mañana, o eso tengo entendido, he estado ocupado la verdad. - dijo haciendo memoria, o intentandolo.

- No somos una poblacion guerrera, no tenemos mas que una pequeña guarnicion, y en verdad no contamos con demasiados guerreros. Entre exploradores, soldados, arqueros y milicianos hay unos setenta, como ya he dicho. - volvio a confirmar Ularico - De ellos casi la mitad ha partido para patrullar los caminos del sur y evitar encuentros escabrosos. La otra mitad aun esta aqui. - termino de contestar a Draupner.

Enseguida Gelion se dirigio a el, queria saber donde adquirir pergamino runico.

- Pergamino... mmm, no creo que encuentres aqui joven - le dijo al mago - ¿Es usted estudioso? - pregunto, pues dada la juventud del mago le sorprendia un poco. - Hay un sabio, Luidarico se llama, el siempre tenia infinidad de libros y pliegos. Algunos de cañamo, de papel e incluso escribia sobre el cuero. Pero ha marchado. - quedo pensativo, como si se le escapara algo.

Turno 810 V

Bolgo se adentró de nuevo en la cabaña totalmente empapado debido a la intensa lluvia que caía fuera. No se preocupó de si los demás lo miraban o no, simplemente se acercó a la chimenea y se sacó las prendas superficiales* para secarlas mejor.

No tardó en entrar de nuevo en calor, pero se mantuvo cerca del fuego, pues sus ropas seguían aún mojadas. Permaneció allí, con aire abstraído frotándose las manos y extendiéndolas hacia las llamas.

Turno 810

Desde la marcha de Gindorel, Fréagulf sintió como algo le subía por el estomago y le incomodaba tremendamente. Fue hacía una de las camas, y se sentó, pero no tardó ni cinco segundos en levantarse y caminar de modo errático hasta la puerta de la casa. Luego volvió a hacerlo hacía la chimenea y allí se quedó, atribulado por los pensamientos nefastos que acudían a su cabeza.

No estuvo atento a la conversación del grupo. Supo que hablaban de huir o luchar, y ni siquiera la dura indiferencia que mostraban algunos hacía el poblado que les había acogido y curado le hizo reaccionar. Solo cuando Ularico pronunció el nombre de la vidente pareció hacerlo. Fréagulf soltó una amarga y seca carcajada acompañada de una sonrisa torcida y escupió a la hoguera. No le caía bien Wamalsuntha, y le costaba reconocer lo que era evidente, que casi siempre acertaba en sus predicciones.

El sentir de Fréagulf era similar al de Gelion. Él era solo un explorador y no un gran guerrero, pero al igual que el mago sentía la necesidad de plantar cara y luchar por su hogar. No se trataba de luchar para no parecer cobardes, como insinuaba Groal. Se trataba de defender una tierra que es tuya, tu casa, tu modo de vida, todo lo que has construido allí. Si no, que sentido había tenido el resto de su vida hasta aquel momento. Si ahora iban a huir, ¿para que había luchado tantas veces, para que habían construido aquel lugar?.

Del mismo modo comprendía que aquel grupo no quisiera hacerlo. Simplemente, no era su hogar. Y no iba a pedirles que se quedaran aunque deseaba que lo hicieran, cualquier minúscula ayuda sería tremendamente agradecida.

Turno 810 III

Estudioso reflexionó. Sí es cierto que estudio mucho, aunque no lo veo como un trabajo. Yo diría que soy curioso y mi curiosidad me ha forzado a vivir del modo que lo hago.

Gelion sonrió al curandero. No cabía duda de que era buena persona y en el poco tiempo que había pasado desde que le conocían había intentado ayudarles. Se acercó a él.

Creo que Luidarico era muy parecido a mí. Tal vez dejase algo atrás con las prisas. Escuche. Y se acercó a él y habló en voz queda.

Conozco algunos trucos menores que nos han sido de utilidad.

Era difícil hablar de la magia a un extraño. Era peligroso que le tomase por un ser corrupto, tal como habían sido tantos de aquellos que habían jugado con la magia en el pasado, haciendo a la gente desconfiar de los conjuradores. Este era el motivo de que Gelion intentase disfrazar sus habilidades de trucos o darles poca importancia.

Últimamente he aprendido a cifrar estos trucos en papeles especiales llamados rúnicos.

Gelion describió lo mejor posible las características de dichos papeles.

Esto me permitiría guardarlos y almacenarlos para usarlos después. Voy a serle sincero. Sería muy importante para mí poder conseguir alguno. Tal vez pudiese acercarse usted hasta la casa de Ludiarico y ver si hay algún papel de este tipo. Le estaría inmensamente agradecido.

El bosquimano se dio cuenta de que no tenía nada o poco con lo que pagar a aquel caballero por su favor.

No tengo gran cosa para darle a parte de la bendición de Oromé, el guía de mi pueblo. Pero tengo un par de hierbas que pueden servir para sanar los dolores y algunas heridas menores. Las guardaba por si en nuestras andanzas las necesitase pero me son más importantes aquellos papeles por lo que se las ofrezco de buena voluntad como recompensa por su generosidad si es que me encuentra algún papel apropiado.

Gelion se refería a la Draff y la Rewk que guardaba celosamente.

Turno 810 III

Me voy a un lado pues las conversaciones sobre los diversos tipos y colores del papel me son del todo indiferente en este momento, aunque si bien lo anterior era para quedarse pensando.....tendré que esperar a ver que quiere Temudyin mañana al alba... aunque por mi parte tenia clara mi situación aquí, y que a pesar de la "hospitalidad", realmente no tenia nada realmente aquí por lo que luchar. No creo que se hayan ganado mi respeto del todo, a pesar que seguramente sin ellos no habría encontrado en cierto modo a mi hermano, aunque eso era relativo... lo que no lo es tanto es su ayuda para que se haya recuperado con tanta prontitud.... no se que hacer... o si lo se, ya lo deje caer, solo si mi hermano cree que son gente los de esta aldea digna de morir por ellos, que asi sea, es una difícil decisión que no me gustaba dejar en manos de terceros, salve que este tercero era mi hermano y no podía presionarle ni obligarle a venir conmigo aunque era una cosa que si deseaba...

Turno 810 (Continuación)

Ilidan siguió atento y en silencio toda la conversación, ni siquiera pestañeó cuando Ularico le nombro, junto a Temüdyin,  como posible causa de retraso a la partida del grupo si este lo hacía en solitario. Y aquella opción, ya fuera en conjunto con la gente que quedaba de Buhr Ailgra o solos, y no la de quedarse a luchar, era la que comenzaba a tener mayores adeptos entre los presentes para bien. La racionalidad se había impuesto.

Cuando Draupner les "ordenó" el preparar sus pertenencias para un posible viaje inminente, el numenoreano ni siquiera empezó a ello, sino que incluso volvió a recostarse. Esto no lo hacía con malas intenciones, ni por no querer seguir las "ordenes" del enano, como él, pensaba que si partían solos debían de hacerlo cuanto antes. Simplemente era que salvo su capa, su chaqueta de lana y su armadura de cuero todo ya se encontraba todo lo recogido que precisaba para una salida rápida, y estas no se las ponía aun porque no quería tentar a la suerte y ralentizar la recuperación de su brazo por prisas innecesarias al ponerse tales prendas.

Tumbado en la cama, con casi total certeza de que haría al menos el grupo, el sureño siguió la conversación aunque de forma mucho menos atenta, y empezó a entremezclar los pensamientos con respecto a esta con los de su propia misión.

Turno 810 (Continuación)

En un momento se llevó la mano izquierda al colgante que le había dado su mentor. Tras pensar en la ruta que podía haber seguido Gondimel, el edain cayó en la cuenta que podría haber pasado perfectamente por Buhr Ailgra. Y por las condiciones en las que había partido de Barukkizdin, si allí alguien podía saberlo era Ularico.