Partida Rol por web

Lo mira a Bruno unos momentos, le despide con un gesto y vuelve su atencion hacia ti.

-Habla en castilla, no en jeringozo...+dice, y te golpea con suavidad en la cabeza+ Disculpe don Alfredo, a veces le da por hacerse la viva y mandarse todo en ese ingle que le dicen... 

Sonrie levisimamente, alzando los dedos.

-No se preocupe. Le entiendo. Pero en estos casos, debe comprender que es una desventaja tactica no desear comunicarse con los demas, señorita Dalmasi. Don Orlando me ha dicho que estos atacantes tienen personas que desea recuperar. Usted puede elegir, trabajar en conjunto por la meta comun, o permanecer sentada esperando. Un individualista no sirve a ninguno de estos intereses. 

Los acompañaría, eso era mucho, pero a veces hacemos cosas y las cubrimos por otros fundamentos, otros resortes, pero son lo mismo, así que no protestó a sus palabras, el resultado seguía siendo el que los iba a acompañar y con algo de suerte, se quedaba más tiempo que sólo observar alos brujah de Paraná.

- entonces nos seguiremos viendo - siseó ahora viendo como Alfredo se acercaba a la gringa y al otro sujeto, ella se quedaría donde mismo, la compañía no era mala, y podía observar que sucedía, luego Alfredo le contraria que hacer.

- Vaya, habla un idioma que si entiendo - apartando la cabeza de la torta, con la velada alusión a que a Orlando no se le entiende una mierda - Lo que vengo a decir es que estoy en el grupo de trabajo equivocado. Soy forense y agente de campo. Estoy acostumbrada a muertes, cadáveres y buscar cosas raras en las muertes. Pero bueno, es lo que ha dispuesto... eh... ¿Dario? ¿Diego? Y no es que me haga la viva es que, es mi lengua madre. Hablar este idioma me es dificil, agradezco poder hablar mí idioma con Bruno

-Me temo que la ciencia forense no es de gran ayuda en estos casos. Los indicios a buscar son de un orden para el cual la medicina no fue pensada. De ahi que una experta en magia como la señora Zalzberg sea la encargada, como asi tambien se precisen los contactos locales de Victor para abrir puertas... No obstante, sus conocimientos de campo si puede que nos sirvan a nosotros, señorita Dalmasi. +explica el hombre en tono pausado. Pone una mano sobre el hombro de don Orlando, animandole.

-Si Javier me traiciono, lo ma' seguro es que haya quilombo, asi que tenemo que ir lo' que sabemos pelear. +asiente+ Ademah despue vamo a revisa los viejos lugares donde andaba el conde y su gente. Eran muy apegaos a esa tierra. Si son de su calaña como me imagino, andaran por ahi. Pero si tenemo que ir con refuerzo, nosotros 6 nomah somo poco. Más si 2 son mujere sin esperiencia en esta zona.

Resoplo poco convencida y desganada

- I suppose. As you wish

Meto las manos en el bolsillo pensando en Bruno y en lo bien que estaría coger un avión de vuelta mañana mismo.

- Have you advised to the USA autorities? My husband is a Federal Agent.

Te mira enfadado. Con un tono de ira contenida, responde.

-Deje de hacerme quedar mal. Si no habla bien, la dejo encadenada en el rancho. No va a ningun lado. ¿Le quedo claro?

Es bastante probable que si no estuvieran aqui, te golpeara. Se lo ve otra vez molesto y al borde de la furia, como en la entrada. Y el no es un hombre de andarse con rodeos o mentiras...

Cierra la boca, pero niega con la cabeza, juntando las manos tras la espalda. Al parecer no se va a involucrar en esto. Su expresion es pesarosa, aunque mucho menos que la de Bruno y no necesariamente hacia ti, pues les mira a ambos...

Le miro mal, como si él no comprendiera que no es mi idioma

- I hate what you´ve done to me, I hate you

Finalmente suspiro y miro al otro hombre

- He dicho que como quieran y que si han avisado a las autoridades americanas. James era un ciudadano americano y policia federal, su desaparición debe ser estudiada y reportada

Asiente... El habia entendido ya la primer vez. Pero saca la diestra de atras, para señalar a Orlando.

-Lamento decir que no tengo idea de esa situacion. Cada quien limpia esos rastros como puede... En este caso, es tu sire a quien debes preguntarle. Hasta el dia de hoy no conocia a Don Orlando, asi que no puedo hablar por el en lo que refiere a las medidas que haya tomado al respecto. 

Cruza los brazos, molesto y dolido.

-No se priocupe, desagradecia... Mi nieto, el dotor, ya se encargo. Hizo lo papele de que lo 3 se ahogaron en un asidente de lancha. Fue facil meterle verso a la Rosario,con unoj cuerpo de vagos... hinchaos y medio comido por lo pescao, parecian cualquiera. Dispue los quemaron, un "descuido" que le dicen... Le mandaron laj urnas a los gringos y no hubo preguntas ni quejas. Nos creen inorantes, eso ayuda a que se piensen que uno es torpe, solo por no ser estudiao... pero uno tiene esperiencia.

La ultima frase la dice mirandote fijamente.

Ves que el metalero se retira y hay una charla tensa. Alfredo parece ser el mediador entre sire y chiquilla... La gringa, con sus gestos, no se muestra mas simpatica con el que le diera esta marca, que contigo.

-Si, por un rato si...+apunta Ulises, mirando tambien a la gente. Parece que se da cuenta de algo.+... ahora que noto, nadie dijo nada de Belen... ¿Porque no la llevan? Pobrecita...

Te señala la chica palida, que continua sentada inmovil entre sus petalos de flor, ajena a todo, con los ojos cerrados. 

- ¿Y quién les mandó decir que estoy muerta? ¡No podré regresar! - muy cabreada - Ahora no podré volver a mi vida anterior y estaré anclada en esta pocilga de lugar.

Abatida miro a ambos. No es que sea torpe, es que no le entiendo una mierda.

Se encoje de hombros

-Uno hace lo que tiene que hacé. Si no le gusta, quedese dispierta una mañana y sanseacabo...

Mira al hombre de traje a vuestro lado.

-Don Alfredo, la suya es tambien asi de atontaa o tiene modales?

-...+asiente, conteniendo una sonrisa+ Tiene modales, se lo aseguro. Pero no dudo que la señorita Dalmasi tambien los posea. Simplemente debe encontrar dificil adaptarse a sus nuevas circunstancias... Me temo que ninguno de nosotros puede volver a sus antiguas vidas, jovencita. Le sugiero que intente aceptarlo, pronto. En esta clase de situaciones como la que posiblemente atravesamos, las dudas y rencillas suelen ser fatales, .. y esta vez, de una manera definitiva. 

Hace hincapie en la ultima palabra, pero luego se vuelve de medio lado, para realizar una seña, llamando a la del vestido azul, que sigue con el muchacho de traje negro...

-Ahora, quisiera presentarle a mi chiquilla, don Orlando.

En eso ves que Alfredo te hace una seña, invitandote a que te les unas en el grupo que forman junto a la gringa y el paisano.

- Directamente es que no me gusta lo que me ha tocado ser. No cuajo con el ideal de unos granjeros. Estoy acostumbrada a vivir en la ciudad. ¡Ya me costó venir a este sitio de dios, apartado de todo y pueblerino! Odio en esto que me ha convertido - contesté a Adolfo - Ese chico - refiriendome a Bruno - si tiene más suerte. Él podrá vivir en Rosario, en un lugar civilizado mientras yo me pudro aquí, persiguiendo animales en el bosque.

Asintió a su frase, "por un tiempo", que podía ser el suficiente, - si, lo comprendo - le dijo y siguió mirando al grupo, pero Ulises le hace incapie en algo, en la chica Belen - quizás la necesitan acá, ¿no?, tampoco mencionaron a otros - como la "novia" del príncipe. Alfredo le hace una indicación para que se acerque y se pone de pie.

-¿vienes? - le pregunta, ya encaminándose al llamado de su padre.

-Por desgracia, eso es algo inevitable. Hasta que gane el suficiente reconocimiento para tener su propio dominio o libertad para vagar... +encoje levemente los hombros, para luego alzar la mano pidiendo tiempo.+ Le explicare. Nuestra sociedad tiene la regla de un vampiro cada cien mil habitantes. Las ciudades de este principado que cumplen ese requisito ya estan ocupadas por antiguos vampiros. Los jovenes como usted, a largo o corto plazo deben trasladarse a las localidades de menor tamaño, donde pueden intentar crear las condiciones que sean de su gusto... pero no antes de que hayan demostrado poder valerse a si mismos.