Partida Rol por web

La sabiduría de Nicola es grande, aunque su dialéctica no lo sea tanto. Las palabras del primarca no tienen ningún indicio de sarcasmo o mofa. La realidad es que mal imperio unificado vamos a tener si termina desierto. Todos los humanos tienen la posibilidad de terminar siendo útiles a la causa de nuestro padre, independientemente de si al principio son leales o no. Matar a un xenos es una oportunidad aprovechada, matar a un humano es una oportunidad perdida.

Pero en fin, es vuestro sector y vuestra responsabilidad al fin y al cabo. Yo estoy demasiado lejos como para preocuparme de cómo vais a controlar vuestras respectivas zonas.

Daban por totalmente agotada la vía diplomática, y quizás tenían razón, pero lo cierto es que no hacía mucha gracia al Rey de la Tormenta. Para tener un título como aquel, lo cierto es que su carácter parecía distar mucho de la cólera de la Tempestad, o al menos esa impresión daba en momentos como aquel. Suspiró con resignación, sabiendo que aquella batalla estaba perdida, no podía conseguir más. Humanos matarían a humanos solo porque unos eran demasiado tercos para reconocer la supremacía del Emperador... Y quizás los otros no se habían esforzado suficiente en iluminarles.

-Nuestro hermano Ark'sul habló de bombardeos, Radius-explicó Duncan, aunque frunció un poco el ceño ante sus últimas palabras, que casi sonaban como un insulto velado-hermano, creo que todos conocemos nuestro deber, y estamos dispuesto a ejecutarlo hasta las últimas consecuencias. Pero toda vida humana perdida es una tragedia, pues la Galaxia está llena de xenos que no están dispuestos a que cumplamos nuestro destino como señores de la misma. Y cualquier persona, hasta la más insignificante, puede ayudar a que el sueño de nuestro padre se cumpla-expuso. Quizás era demasiado inocente, pero realmente creía lo que decía. Las palabras de Ark'sul, aunque acertadas en su lógica, contenían también la semilla de su propia destrucción. Y, con una leve sonrisa, así lo expuso, aunque antes agradeció las palabras de Aegror con un suave asentimiento.

-Tienes razón, hermano. Esos humanos, aquellos que han rechazado la Luz del Emperador, los que están equivocados, no tendrán esa consideración con nosotros. Pero se supone que nosotros somos mejores, y no tenemos por qué guiarnos por los patrones de los que están errados-explicó, con tanta sencillez como contundencia-pero no insistiré más. Sólo te pido que no arrases más de lo que debas, por el bien de unos habitantes que pronto serán ciudadanos de nuestro Imperio.

-Yo exploraré Obscurus con mis hijos, reforzando tus futuros esfuerzos, Ark'sul-dijo, recuperando el buen humor-sin duda ahí fuera hay muchos mundos deseosos de oír la Verdad Imperial y unirse a nuestras filas.

Aquella cháchara me había abrumado, estoy acostumbrado a pocas palabras y a encerrarme en mi estudio a investigar. Además todo estaba mutando, al principio Radius había afirmado que Nimrod hablaba por el Emperador, cosa que yo dudo. Primero pide pacificar Segmentum Solar y eliminar los orkos de Tempestus y después expandir fronteras.

—Yo voy a explorar también Obscura —respondí dirigiéndome en particular a Ark'sul, y añadí —las herramientas en nuestras manos son todas apropiadas, unas tienen unas consecuencias y algunas tienen otras. Se pueden concentrar los bombardeos donde se identifiquen células de resistencia. Estoy con Ark'sul —.

No iba a discutir más sobre ello. Si al final se decidían a bombardear los planetas desde la "seguridad" orbital, quizás sería demasiado tarde cuando se dieran cuenta de que el costo que ello suponía era demasiado elevado para sostenerlo en una larga cruzada, lo que solo me dejaba una opción.

Debo prepararme para ello.

Reconocí volviendo a la consola en la que ya había realizado algunas consultas, pero a diferencia de las anteriores ocasiones en las que rápidamente volví a prestar atención a la conversación, continúo escribiendo en ella haciendo caso omiso a la referencia de Aegror, principalmente porque lo tenía cruzado desde la eliminación de la Guardia Implacable al considerar que los había usado de sujetos de pruebas para sus armas.

Apenas la imagen holográfica de Nicola paró de escribir, no tardó en llegarte el siguiente mensaje.

Cita:

Era una declaración de intenciones y la confirmación de que estaba buscando recursos para continuar las exploraciones en el Segmento Pacíficus, pero del mismo modo advertía que no confiaba lo suficiente en los demás primarcas como para anunciarlo frente a todos o quizás estuviera sometiéndolo a alguna prueba.

Una serie de runas iluminaron las pantallas de Nicola. Un mensaje transmitido desde la Horizonte, la barcaza de Eon.

Cretacia. Dicen que hay bestias hermosas allí, ¿me traerás una? No parece que haya árboles en Jrun, pero si quieres echar abajo unos cuantos pielesverdes serás bienvenido.

Nephleim habia permanecido durane todo aquel tiempo escuchando a sus hermanos mas fogosos debatir y repartirse aquel "pastel" que era la galaxia. Miro momentaneamente a su diestra observando un retrato que colgaba del Emperador en la sala de reuniones. El siempre habia sido paciente, su modo de vida lo requeria, por mucho que quisieran las bacterias y los virus no se sometian a la voluntad de nadie, ni tan siquiera del Emperador y habia que dejarles su espacio y su tiempo.

Reordenó sus pensamientos antes de hablar. Es cierto que los Segadores habian sido la legion que siempre habia brillado menos en el campo de batalla y sin embargo ha sido en muchas ocasiones la mas presente.

Bajó su mirada hasta la servoarmadura que le devolvio su reflejo imperfecto.

¡Oh Padre...! ¿Que habia hecho con el cuerpo que nos has dado? ¿Hacia bien rompiendo y destrozando aquella maravilla de la genetica?

Pensó pasando los dedos por su cara y tocando la zona donde antaño hubo un ojo. Si, sin duda puede que no fueran los mas brillantes ni los que tuvieran los blasters mas mortiferos, pero siempre eran los que volvian y siempre eran los primeros en arrojarse a una cienaga infecta mientras que el resto de sus hermanos aun analizaban muestras dictaminando si la cienaga les podia dañar o no. Ya era hora de que eso cambiara, su mision era clara y vital, pero sabia que muchos de sus hermanos de legion sentian la llamada a la batalla como cualquier otro y era hora de demostrar a sus hermanos de batalla, a si mismos y a su Padre que eran capaces de mucho mas que de recombinarse una y otra vez.

Suspiró con calma mientras se arrellanaba en el sillon de la sala del Consejo.

- Bueno hermanos, entonces en vista de los acontecimientos actuales creo que los hrmanos de mi legion estaran encantados de poder participar en las conquistas y pacificaciones, como dije al principio, por ello mi intencion -dice mientras señala dos planetas alejados dentro del mapa que son Cadia y Attila- es que comencemos a expandirnos como si fueramos bacterias por dos segmentum distintos para ganar maniobrabilidad operativa.
 

Hola

Creo que mi primarca podría haber entablado relación con Aegror. Uliq antes de ser reclutado fue un estudioso, y ahora con la tecnología del año 30k lo es si cabe más. Estudia la bioingeniería y lo aplica a armamentos.

Además, en su planeta hay una plaga denominada Grakt que convierte a los seres humanos en, por resumir, una especie de zombies. Busca la cura a esa plaga desde hace tiempo. Quizá en ese aspecto puedan haber intercambiado opiniones.

Los Caminantes Silenciosos padecen una degeneracion genetica que les convierte tambien en algo parecido a zombies. A lo mejor esto podria generar cierta simpatia mutua. O daros asco ("Mis chicos no tienen esas cosas raras que dices").

En cualquier caso, son de pocas palabras.

Mis chicos no tienen eso que dices. Son solo los habitantes que además son expulsados de la fortaleza!!!! O eso se dice xDDD

Saludos

Me parece buena idea. De hecho si no lo sugieres tu ya lo habría sugerido yo dado que el Grakt tiene pinta de ser algo que interese mucho a Aegror. Tanto curarlo como usarlo como arma, ambas cosas van a llamar su atención.

Como has iniciado tu la cuestión, te cedo la palabra :) ¿Cómo empieza la relación? ¿ De que tipo es, amistosa, rivalidad científica, simple colaboración...?

El Alto Rey asintió lentamente:

-Parece que tenemos un plan, después de todo-procedió a señalar varios puntos del espacio con su manaza enguantada-Dividiré a mis Caballeros en varios destacamentos de apoyo para reforzar las ofensivas. Aquí, aquí y aquí... los Caminantes Silenciosos recibirán los suministros que pidieron para continuar con su campaña. Mi flota principal continuará explorando el Segmentum Solar: como cuna de la humanidad, estoy seguro de que todavía hay muchos mundos aquí que no han sido agraciados con nuestra presencia.

-Hermano -dijo Eon-. ¿Puedo contar contigo entonces? Mis hijos están deseosos de volver a combatir junto a los tuyos. Enviaré cinco capítulos, tal vez seis. Terrenos y solares que os recuerdan con cariño. ¿Los leviatanes se alzan con la marea?

Leucas se mantuvo en silencio tras escuchar la propuesta de Eon. Aquella táctica no era una a la que estaba acostumbrado, pero no por eso le era del todo desconocida. Siendo algo in ortodoxo para su legión, aquello brindaba una oportunidad para el crecimiento de sus hijos y obtención del tan preciado Mana por el que se regían. 

- Mis guerreros no favorecen ése tipo de tácticas...- Admitió. No había razón para ocultarlo. - Pero no veo razón por la cual no puedan aprender a... ejecutarlas correctamente.- El honor seguía siendo honor, aún si la táctica fuera deplorable. Es el resultado, las intenciones tras las acciones, y el sacrificio consciente del mana propio en pos de un bien mayor lo que contaba.

Tras aquellas palabras, puso su atención sobre el mapa; y luego volvió a enfocarse en el Corsario. 

- Creo que tres capítulos serían... más que suficiente para la labor, no lo crees?- Preguntó. 

-Sin duda, la alianza de forajidos formada por mis dos hermanos sera mas que suficiente para poner fin al dominio orko sobre ese hermoso planeta.

Hantei coge una delicada taza de te. Sus manos son enormes en comparacion pero la sujeta con delicadeza.

-No obstante, si el enemigo resulta demasiado poderoso para vosotros no dudeis en solicitar la ayuda de los Dragones Esmeralda.

Las palabras de Hantei volvían a sonar demasiado orgullosas, pero a diferencia de las pronunciadas por Ark'sul, no suponían devastar un mundo lleno de humanos desde la órbita.

- Hantei...

Pronuncio su nombre a modo de toque de atención. No podía meterse tan abiertamiento con dos legiones, por mucho que se considerara muy superior a ellos, la realidad era que si tuviera que enfrentarlos tendría muchos problemas. Era una fortuna que no nos viéramos en esa tesitura.

Leucas contuvo el impulso de discutir y retar a duelo a Hantei; y Su motivación podía parecer absurda y prejuiciosa. El primarca consideraba al Corsario como un forajido (al menos, en el sentido de la traducción literal que había conseguido) y no se consideraba a sí mismo como tal, pero sus palabras anteriores le compelían a tomar una postura que se aliara con la de Eon; y una afrenta al honor, un insulto, poco pesaba ante la gloria que suponía la conquista de un nuevo mundo en nombre de su padre.
La llamada de atención de la Montaña no pasó por alto ante el Tiburón, pero debía mantener la compostura. Y el mínimo reconocimiento ante la acción de su hermano podría destrozar la fachada que intentaba crear.

Aprovechando el defecto genéticos de sus ojos, desvió su mirada hacia la imagen holográfica de Eon, sin mover un músculo extra, intentando crear la ilusión de que su mirada seguía fija sobre cada uno, específicamente, de los presentes (en carne o imagen). El corsario sería quien daría el primer paso. No solo por el filo de su lengua, sino porque Leucas consideraba que la mayor ofensa iba dirigida hacia él y su camino predilecto. 

Duncan frunció levemente el ceño ante las palabras de Hantei. Ese no era modo de tratar a un hermano, y parecía que sólo iba a recibir un leve reproche de Nicola. Y, sinceramente, no le parecía correcto. Durante unos segundos, valoró si intervenir o no, sabiendo que aquello podía crear una discusión y que, por el bien de la concordia, quizás lo mejor sería quedarse callado. Pero, en aras de esa paz, supo poco después que no podía callarse. 

-Hermano...-empezó Duncan, y por un momento pareció que iba a quedarse ahí, pero tras unos segundos tomó aire y continuó-no creo que sea correcto que te refieras así a nuestros hermanos. Todos somos hijos del Emperador, todos fuimos creados por él, para servir a sus nobles propósitos. Y sin duda todos tenemos un papel en sus grandes planes. En su sueño de una galaxia unida y en paz. ¿Crees que nuestro padre crearía a unos, como los has llamado, forajidos, para realizar dicho sueño?-preguntó, recuperando la sonrisa, aunque era más débil. Pero invitaba a la reflexión y a la enmienda de su hermano-yo creo que no. Y quizás deberías disculparte con ellos por tus palabras. 

​Hantei dedica una altiva mirada al resto de primarcas:

​-¿No lo crees, Rey de la Tormenta?-​toma un sorbo de te-​Quizas olvidas que nuestra parte en el plan del Emperador, Querido por Todos, es la Guerra. Las legiones astartes fueron creadas para luchar, no importa contra quien, para expandir su dominio por la Galaxia. Cada uno de los guerreros bajo nuestro mando es una obra de arte creada por nuestro padre, una maravilla de la ciencia cuyo proposito no sirve a otras artes que las marciales. Cosas tales como el miedo y la piedad que tanto os gusta predicar estan simplemente por debajo de nosotros y cualquiera que se oponga a la Verdad Imperial es un enemigo que debe ser aplastado.

​Hizo una pausa antes de levantarse:

​-Si mis hermanos no tienen fe en los ejercitos que han sido puestos bajo su mando son muy libres de luchar tan poco honorablemente como quieran pero yo no insultare al Emperador empleando sucias tacticas shinobi. En el lugar del que vengo, el honor solo tiene un significado: tu palabra de un samurai es indistinguible de tus acciones. Si dices que vas a matar a alguien, ese alguien esta muerto.

- Y a ti se te olvida que estamos al inicio de una gran campaña - recrimino al primarca de los Dragones Esmeralda - Unir las fuerzas de dos legiones para conquistar un planeta de ricos recursos es una forma de reducir posibles bajas y... practicar - la palabra sonó bastante grave - Aún hay muchos mundos sin descubrir, reducir las posibles pérdidas antes de descubrirlos es imperativo, y practicar combinar las fuerzas de varias legiones es igualmente necesario, dado que nada nos asegura no descubrir otro imperio. Un imperio xenos, diferente de orkos y eldars, que se encuentre en nuestra misma misión, al cual debamos enfrentar y derrotar, es entonces cuando estos pequeños ensayos nos darán la clave del éxito.

Dicho lo cual respiro profundamente, como retando a Hantei a realizar alguna replica a mi razonamiento, si es que era capaz de ello.