Partida Rol por web

Ataque a los Titanes

Capítulo 10 - Los Moradores de la Niebla

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07/11/2020, 17:53
Zev

Y justo entonces apareció Zevran Alhen val Thaali cual soldado de fortuna, su rifle sobre los hombros y un caminar bastante apaciguado para la naturaleza de la misión que había abordado en solitario.

-Cap, la planta superior conecta con las almenas de esta fortaleza. Hay varios guardianes, pero están holgazaneando. A la vista está que no esperan visitas. Cielo nublado, por cierto. Ni rastro de la Serendipia.

El cuatribrazos reparó entonces en que algo estaba distrayendo la atención de todos sus compañeros. 

¡UNA GIGANTE!

-DAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAMN!-, exclamó Zev echando mano al rifle de repetición.

Entonces vio la entrega número 24 de Ice Bunnies ON FIRE!

Tremendísima portada la de esa edición.

-DAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAMN!-.

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07/11/2020, 18:51
Lady Mikeala Edevane

-No me dijiste que tus amigos fuesen paparazzis...

Mikeala se tornó bordó al ver en la situación que se encontraba frente a la princesa.-No, No, No, son investigadores, están tratando de descubrir quien es el traidor. 

-¿¡Qué os dije!? ¡TRAPOS SUCIOS!

-Chafee detente- Quizás eso fuera útil, pero exponerlo frente a la princesa no iba a ayudar demasiado, Estaba claro que el roedor no tenía idea, que la hija del rey estaba escuchando sus declaraciones. "Ojalá no sepa hablar común" era lo único que pensaba la hechicera.

-¡PORNO!-, clamó el detective, rompiendo el suspense generado por el Narrador. -¡ESTO ES UN TEMPLO DE LA LASCIVIA! Lo cual es, me permito señalar, irónico, dado que a la temperatura a la que estamos en esta nevera ni una súcubo del Avernus podría entrar en calor. ¡Pero así es! ¡EL REY TIENE LA COLECCIÓN COMPLETA DE ICE BUNNIES ON FIRE! EN UN CAJÓN SECRETO! ¡JUSTO DELANTE DE LOS OJOS DE SU SEÑORA ESPOSA! 

-Chafeeeee, detente te digo, que la hija del rey esta con nosotros. Princesa, lo siento, mis compañeros están confundidos, vamos a la habitación, pueden vernos aqui. Metan eso de nuevo en el cajón y entren por el amor de la decencia. Que el rey no está detrás de esto sinó Kohrdran, su consejero. Y tengo un plan. 
 

Notas de juego

-Chicos ella es la princesa Skadhi Witemane-Cada uno de los interlocutores escuchaba a Mikeala hablar en su idioma natal, por lo que todos al mismo tiempo podían entenderla, de modo, que la hechicera no necesitaba traducir sus palabras- nos ayudará a encontrar a la princesa Megania y luego nos acompañará a Pallisade. Esta misión se ha convertido en un rescate de princesa doble- La hechicera ya lo había decidido, no iba a consultarlo ni a aceptar un no por respuesta- Resulta que hay calabozos en el sótano, y Skadhi me acaba de decir dónde están. Seguro Megania está ahí.

Todo esto, de mi post anterior, iría después de que entremos todos a la habitación 

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08/11/2020, 21:58
Sir Efrain Autumshield

El Caballero, Paladín y Jefe de equipo a partes iguales hacía lo imposible por permanecer frío e impasible ante las adversidades que estaban atravesando.

La primera parte era realmente sencilla: a pesar de su armadura, el frío natural de aquel castillo hecho de hielo era difícil de ignorar.

La segunda parte, en cambio…

- Sucu… esto… … Cortana, ¿Puedes cortar durante unos segundos la voz que emito al exterior de la armadura?- preguntó esperanzado. Apenas aguantó unos segundos más, lo justo para escuchar la sensual voz de la súcubo activando el protocolo solicitado antes de romper a reir a carcajadas, contagiado en buena parte por la profunda, gutural y única en su especie risa de Bam Bam.

- Activa la voz de nuevo. Gracias- pidió al calmarse, ayudando a bajar a Laureena y bajando él a continuación.

- No se preocupe, Laureena. Confío en su fuerte voluntad y su discreción- animó a la joven militar, poniendo ambas manos en sus hombros y girándola hacia él para obligarla a apartar la vista de las imágenes que captaban su atención. Por favor, vaya a avisar a Billy y a Comadreja para que se unan con nosotros.

Mientras la leona roja se alejaba, Efrain se giró hacia el dracónido y miró las imágenes que le señalaba.

- Bam Bam, creo que es técnicamente posible, sobre todo si han desarrollado un musculo aquí y le han extirpado este hueso…- Tenía que reconocer que la armadura que portaba era ciertamente mágica: en primer lugair ocultaba sus emociones y los temblores de su voz, haciendo que sonara como si estuviera totalmente calmado. Además, saber que tenía cerca, acechante, una demonia extremadamente sexy, caliente y desnuda tenía el efecto de reducir el efecto que las imágenes de la revista pudieran haber causado en el paladín.- En cualquier caso creo que el especialista en estos temas es el señor Zevran. Y, por cierto, hablando del rey de roma…

- Mister McCheese, no se moleste en volver al pasillo. Vaya a la habitación de la princesa Whitemane y nos reuniremos allí.

>> Por favor, entremos todos y reorganicémonos.

*** *** *** *** ***

- Encantado de conocerla, alteza- saludó a la princesa con una reverencia formal.- Estaremos encantados de sacarla de aquí y darle asilo en Pallisade si es su deseo. Y le agradezco enormemente su ayuda para rescatar a nuestra princesa.

>> Entonces, ¿qué opciones tenemos?

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09/11/2020, 08:57
La Fortaleza de Hielo

Pasado el aturdimiento general tras contemplar la muy gráfica representación de las artes amatorias de los gigantes contenida en la revista de divulgación anatómica ICE BUNNIES ON FIRE! el pequeño destacamento de aventureros se reunió en los aposentos de la princesa Skadhi. La bella gigante estaba aún traumatizada, pues su casta mente no habría podido jamás imaginar que había tantas variantes a la hora de practicar el arte del amour.

Chafee, el escurridizo y siempre profesional Chafee, se desplazó por el alféizar hasta alcanzar la ventana de la habitación de la princesa, jugándose el pellejo dado el viento cortante que azotaba el exterior del bastión. Afuera, el frío era capaz de entumecer el cuerpo en escasos minutos, independientemente de la ropa de abrigo que uno portase consigo. El cielo comenzaba a oscurecerse lenta e inexorablemente, y el sol de la mañana, que en las primeras horas había reinado de forma indisputada, ahora veía su imperio amenazado por densas nubles que devoraban todo a su paso.

Ni rastro de la Serendipia en el firmamento.

Mikeala explicó su plan, que básicamente era un DOBLE O NADA de manual. 

Dos princesas. Dos rescates

Por algún motivo que solo entendían sus más íntimos amigos, la hechicera sentía una genuina simpatía por Skadhi Whitemane. Para ella, lograr sacarla de aquel palacio de hielo era ahora algo muy personal.

El plan consistía a grandes rasgos en ser transportados por la princesa hasta el sótano tras lanzar sobre ella un hechizo de invisibilidad. Una vez allí, buscar a la princesa Megania y tratar de liberarla con el mayor sigilo posible. Skadhi había referido a Mikeala la presencia de una especie de guardián, un amo del calabozo que cuidaba del subterráneo que los gigantes de hielo tenían bajo su fortaleza para albergar a los prisioneros que el clan hacía durante sus incursiones. En cierto sentido, aquel subterráneo era una suerte de despensa para los Moradores de la Niebla.

Reprimiendo algún que otro escalofrío, -a salvo del prodigio de la termodinámica que era Bam Bam-, el grupo se dispuso a introducirse en el morral de la princesa Skadhi, algunos de mejor humor que otros. Luego, Mikeala lanzó un conjuro de invisibilidad sobre su nueva y colosal amiga y pidió calma para poder mantener la concentración durante el paseo. Con Zevran y Chafee en la misma sala, eso siempre era difícil de conseguir.

Skadhi sabía que el futuro de la pequeña Mikeala y sus amigos paparazzis dependía ahora de su destreza. Inspiró profundamente y salió de su dormitorio, dispuesta a cruzar el salón sin levantar sospechas y alcanzar el sótano sin ser vista.

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09/11/2020, 09:43
Director

Notas de juego

AAAAALRIGHT! Esto es lo que vamos a hacer:

Para agilizar, voy a ir diseminando en estos días más mensajes para dar vidilla al tema, pero no tenéis que postear nada vosotros hasta que os dé LUZ VERDE, que será el jueves, muy seguramente. Así Iroh y con algo de suerte nuestro Billy Bob tienen margen para leer y actualizar el finde ;)

Llevo laaaaargo tiempo soñando con las escenas que están a punto de llegar. Creo que van a ser muy divertidas y bastante interesantes para vosotros.

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10/11/2020, 17:11
La Fortaleza de Hielo

Ya en el interior del morral de Skadhi, nuestros héroes tenían la posibilidad de advertir por un resquicio el camino que tomaba la princesa del clan gigante tras descender las largas y sinuosas escaleras que atravesaban la fortaleza. Era una nueva forma de apreciar el mundo desde una altura considerable y al ritmo acompasado y sorprendentemente grácil de caminar de la colosal mujer de melena nívea. Quizás Skadhi tenía la precaución de medir sus pasos para evitar una travesía demasiado brusca a su nueva amiga y sus amigos fisgones. O a lo peor aún estaba conmocionada por el lascivo descubrimiento que había revelado el pequeño roedor... Ese pequeñajo era un paparazzi condenadamente eficiente en su trabajo rebuscando secretos inconfesables, tenía que reconocerlo.

Durante el trayecto, Chafee se sintió por primera vez en su vida ardilla voladora. Y eso no era nada bueno. Controlaba la respiración con sumo cuidado para no regar a sus compañeros con compota de queso. A su lado, Zevran permanecía recostado con las manos en la nuca mientras acunaba su rifle con su otro par. Ventajas de ser cuatribrazos. Para no variar, cantaba una tonadilla que tenía algo que ver con una mujer albina de piel azul que sufría gigantismo y que era luchadora de barro. La canción no rimaba demasiado bien, pero tenía ritmo -como todo lo que hacía Zev- y si uno la escuchaba con detenimiento provocaba la risa. Ocurrente cabeza de pistacho...

Bam Bam, por extraño que pareciese, dormitaba rodeado de un halo imperturbable. Como buen guerrero, aprovechaba cualquier momento para mantener sus energías y estar a pleno rendimiento cuando se desatase la refriega. Una refriega que el dracónido dorado sentía cada vez más cercana porque, como bien sabéis, a él le susurraba Bahamut en sueños. Y como bien es sabido, Bahamut y el Narrador de esta aventura vienen a ser primos hermanos, oiga.

Ahem.

Laureena, siempre tan disciplinada, tan entregada al equipo, felicitó a Lady Edevane por su labor negociadora y evitó todo contacto visual con Ser Autumnshield, todavía avergonzada por lo que ella empezó a denominar "El incidente McCheese". Maldito roedor ruidoso... ¡Si no hubiera soltado sus patrañas en voz alta...!

Por supuesto, en todo rebaño debe haber una oveja negra, y esa era la rastreadora conocida como Comadreja. En el interior del morral sentía que sus flechas valían de bien poco y en su fuero interno cuestionaba que la estrategia de la hechicera de confiar en la princesa Skadhi fuese a llegar a buen puerto. Lo cierto es que ella no se fiaba nada de los gigantes por su trágico pasado y la joven cazadora tenía un mal presentimiento con todo aquello.

No tenía idea de lo acertada que estaba...

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10/11/2020, 17:38
Zev

-Uuuh. Aaah. My baby is made of icy juiiiiiice, with a lappp dance she heals all my bruiiiiises. Her hair is like a veil of snoooow, Watch out, honey! You're gonna steal the shooooooow! Yayyyy!

>> ¡Eh, Chaf, creo que tengo el inicio de una mastahpissss!

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10/11/2020, 17:43
Chafee

El rátido miró de reojo a su hermano alien y arqueó la ceja.

-¿Quieres un poco de jugo de cheese? ¿Hmm? ¿NooooOOOoooo? Pues deja de rapearme en la cepa de la oreja, tío. Tengo el estómago chungo desde que el salvaje escamoso me ha lanzado por los aires... Ugh...

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10/11/2020, 17:46
Zev

Zevran soltó una risilla y dio varios toques en la orejota a su camarada.

-Psssst... Se dice por ahí que la Leona y tú... You know, bro. ROOOOOOOOAAAAAAAARRRRR!-. Zev emuló a la perfección el rugido de un león cantando por soleás en época de celo.

-Cuenta, cuenta. ¿Cómo fue? Quiero detalles, man. DETAILS! Devil is in the details!

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10/11/2020, 17:48
Chafee

Chafee puso gesto de fastidio y se dio un tirón de los bigotes. Los rumores viajan demasiado rápido en Faerûn.

-Chssssst... Más bajo, carapistacho. Es una sodomita. No lo aparenta, pero vaya que si lo es... Por eso la llaman la Leona. Porque siempre pregunta lo mismo a los cazadores...-.

El ladronzuelo hizo un silencio que sumió a su amigo en un insoportable suspense.

-"Tú no has venido a cazar, ¿verdad?"-.

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10/11/2020, 17:52
Zev

Zev, claro, reaccionó de modo impredecible.

-DAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAMN!-.

Era la primera vez que hacía este gesto en su vida.

De verdad.

Os lo prometo.

Palabrita.

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10/11/2020, 17:54
Skadhi

La gigante de hielo pidió calma a sus inesperados huéspedes de morral.

-Calma ahora. Vamos a atravesar el salón. Habrá jaleo, pero no quiero arriesgarme con vosotros ahí dentro, ¿vale? ¿Recuerdas que me preguntaste por Kohradan, Mikeala? Sé que pasa gran tiempo con mi padre, pero se aposenta en algún lugar del subterráneo de la Fortaleza de Hielo. Ignoro dónde. Siento no ser de más ayuda.

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10/11/2020, 17:57
La Fortaleza de Hielo

Cuando Skadhi cruzó el largo pasillo de la planta baja rumbo a la gran puerta que Chafee había divisado en la lejanía, según se aproximaba al enorme salón, vítores, gritos, canciones -o algo parecido, pues la entonación era lamentable- y, en general, una algarabía atronadora llegó a oídos de nuestros héroes, todos ellos ocultos en el morral de la ahora invisible princesa de hielo.

El festejo era colosal.

Al menos treinta y pocos especímenes de gigantes de hielo se congregaban en la sala repartidos por varias mesas que parecían a punto de derrumbarse ante las ingentes cantidades de comida que soportaban. Los gigantes devoraban con avidez lo que a todas luces era un banquete digno de un enlace nupcial, de un torneo organizado por su gargantuesca Majestad, o, quizás, de ambos a la vez. Todos ellos tenían la piel de una tonalidad más o menos intensa de un azul glaciar, lucían largas melenas albinas y barbas rizadas, indómitas, algunos trenzadas con adornos de bronce. Sus risas eran ensordecedoras, pues los moradores de la fortaleza se deleitaban viendo a dos gigantes semidesnudos de piel clara y bastante más pequeños luchar a garrotazo limpio hasta la muerte en el centro del salón. El suelo estaba teñido de sangre y charcos de lo que podría considerarse algún alcohol muy potente que a buen seguro habrían derramado los comensales o sus estúpidos camareros, una legión de ogros que iban y venían de una habitación de la que fluía un olor deliciosamente tentador para estómagos vacíos o para el voraz apetito de aquellos gigantes.

Skadhi avanzó en silencio, rodeando la estancia y evitando el contacto con cualquiera de sus congéneres. No fue tarea difícil gracias al conjuro de invisibilidad, y lo cierto es que la mayoría de los gigantes estaban disfrutando de la fiesta y del sangriento espectáculo que daban sus hermanos oriundos de las colinas, gigantes inferiores en la jerarquía, según explicó Comadreja a los curiosos.

Entre las figuras sentadas a la mesa, tres resultaban destacables por su apostura y notable presencia.

La primera de ellas era, obviamente, el Rey. Era uno de los dos únicos gigantes que lucía el yelmo astado del clan, un símbolo de su estatus y de su poder. El yelmo le oscurecía la mirada, dándole una aureola siniestra y peligrosa. Era asombrosamente grande, superando los veinte pies de altura. Su frondosa barba nívea estaba primorosamente trenzada, decorada con joyas y piedras preciosas. Parecía pensativo, atusándose el bigote mientras su esposa, una enorme hembra que recordaba los agraciados rasgos faciales de Skadhi, se carcajeaba ante las patosas habilidades marciales de los dos luchadores de foso.

El segundo gigante que destacaba entre la multitud era Kohradan, el lugarteniente del Rey y su fiel consejero. Era el único que lucía un rostro inmaculadamente afeitado, también el que parecía cuidar más su atuendo y el único que, en lugar de devorar la comida, parecía disfrutar más del tabaco que ardía en su pipa. Su mirada iba y venía por la mesa, poco interesado en el sangriento duelo, mucho más en el rostro de los presentes. Disimulaba muy bien su hastío y, al igual que el Rey, parecía estar sumido en sus pensamientos.

Finalmente, el último gigante que captó la atención del grupo de héroes fue un ejemplar que podría superar con facilidad los veintitrés pies de altura y cuyos brazos parecían esculpidos por las deidades de la guerra. Al igual que el Rey, lucía un yelmo de guerra, lo que le identificaba como un líder de clan. A diferencia del casco astado que portaba el padre de Skadhi, el de este singular gigante era un casco chato del que colgaban dos tiras reforzadas a las que había ajustados dos colmillos de mamut. La visión de aquel coloso era imponente y aterradora, y su barba consistía en una larga trenza blanca como la nieve que descendía desde su mentón. Si tuvieran que apostar, a buen seguro se trataba de Vharanor Skyhammer.

Skadhi pareció tambalearse durante un instante, pero la princesa se recompuso con rapidez y logró sortear toda atención no deseada y acceder a la habitación que los Moradores de la Niebla destinaban a hacer de arsenal del clan. La colección de hachas, escudos, yelmos y trofeos que acuñaban aquellos guerreros era considerable, evidenciando que sus fechorías e incursiones en las aldeas del valle habían sido muy fructíferas. Las paredes estaban decoradas con tapices con diversos motivos, otorgando a la estancia un elemento ornamental algo impropio de la sobriedad y frialdad que destilaba todo el baluarte. Skadhi se detuvo ante uno de los tapices y el largo suspiro que sucedió estaba cargado con el presagio de que ya no había vuelta atrás.

Descorrió el tapiz y reveló un pasadizo, tan oscuro y traicionero que la gigante tuvo que avanzar palpando las paredes para no precipitarse contra la oscuridad. Llevar una antorcha habría sido apropiado para no desnucarse, pero también habría podido delatar su posición. Y la princesa sabía bien que allí abajo el guardián alimentaba a sus cachorros. Unos que se deleitaban dando caza a los presos que trataban de fugarse de aquella mazmorra.

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12/11/2020, 14:09
Cortana

Cortana apareció en el visor del yelmo de la MZ WARSTM cuando Skadhi sorteaba a los gigantes del salón.

-Jefe Autumnshield... Quisiera saber... ¿Qué has sentido al ver esa revista erótica que inoportunamente te ha mostrado el...?-.

En el marco superior izquierdo de su visión, el paladín comprobó que una especie de columna de energía de color ámbar ascendía mientras una caligrafía rojo sangre dibujaba la palabra "IRA".

-¿...El roedor llamado Chafee?

Los ojos de Cortana, por naturaleza de un color amarillo intenso, ahora se habían oscurecido hasta parecer de un negro cósmico.

Notas de juego

Lo que me voy a reír... xDDDDD

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12/11/2020, 14:14
La Fortaleza de Hielo

Ya en el subterráneo, las tinieblas parecían ceder ante la tenue luz que emanaban las lenguas de fuego de las antorchas apostadas por los pasillos. El pasillo, un espacio bastante angosto para un gigante, serpenteaba unos metros hasta girar a la izquierda y, avanzados unos pasos más, giraba hacia la derecha. La primera gruta estaba despejada, mas la segunda estaba bloqueada por una roca redonda, muy pulida y de superficie lisa. Imposible de mover para las razas más pequeñas.

Skadhi dejó escapar una vaharada de aire frío de sus labios, una brisa invernal. Avanzó despacio, pues aunque sabía de la existencia de la mazmorra, no tenía ningún conocimiento sobre lo que allí habitaba.

Un alarido de terror rasgó el aire, proveniente de la izquierda. El chillido petrificó a la gigante. Tuvo que recordarse que era invisible para ponerse de nuevo en movimiento y ocultarse entre las sombras.

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12/11/2020, 14:21
El guardián del sótano

El chillido provenía de un horrorizado kóbold que apareció en el pasillo corriendo a todo lo que daban sus pequeñas piernecitas pero que nada podía hacer contra la peluda y blanca sombra que se abalanzó sobre él y le arrancó de cuajo un brazo mientras la sangre y la muerte lo impregnaba todo.

El kóbold tuvo una muerte horrible, pues el animal que le había dado caza, un lobo del tamaño de un caballo de guerra y cuyo hocico estaba ahora impregnado de un rojo víscera, se deleitaba engullendo los intestinos de su víctima.

Tras el lobo, emergió una oronda y sonriente figura de un gigante encapuchado que parecía muy satisfecho con el resultado de la cacería.

-Hu, hu, hu, huuuu...-. Su risa bobalicona y perturbada helaba la sangre. Acarició al lobo, aún enfrascado con destripar a su presa y olisqueó el aire de modo repentino, como si hubiese captado algún olor. Luego se mordió la uña encarnada de su pulgar y volvió a desaparecer tras el umbral, seguido del lobo que agarró los restos del kóbold en sus fauces.

Los gritos, lejos de cesar, volvieron a empezar un instante después.

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13/11/2020, 12:33
Lady Mikeala Edevane

-Ya callense uds dos-Mikeala reprendió a Zevran y Chafee-Tan difícil les es guardar el silencio?, parecen niños.- Y quizás lo fueran, no había otra explicación lógica para el comportamiento de ambos.
En el subterraneo, cualquier persona hubiera entrado en pánico por las cosas que sucedían, pero las personas que estaban en la mochila de la gigante no eran cualquier persona. Efraín, Mikeala, Tina y Hamleen, habían visto en Barovia cosas mucho peores, no iban a sufrir por esto. Sin embargo en el corazón de Mikeala, la oscuridad volvió a cerrarse. Una oscuridad que venía controlando, y la charla distendida con su nueva amiga la había ayudado. Pero con los alaridos de sufrimiento de fondo, solo pudo dejarse llevar. Cerró los ojos sin darse cuenta que una sonrisa maliciosa se apoderaba de su rostro.

-Voy a disfrutar mucho si llego a encontrarme con ese guardián-Dijo en voz alta. Una afirmación que no vaticinaba nada bueno, salvo para el dracónido.-Efraín, no tiene caso que todos vayamos a la celda de Megania. No vamos a armar una fiesta. Déjame buscar el despacho de Kohradan para obtener las pruebas conspirativas que necesitamos- A decir verdad, la petición era una mera formalidad. Mikeala siempre hacía lo que se le daba la gana, pero no quería socavar el mando de Efraín y que todo el mundo se revele.-Detective Mc Cheese, ¿me acompañaría?, y quizás Bam Bam también, por si necesitamos algo de músculo.

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16/11/2020, 09:00
Sir Efrain Autumshield

El plan estaba en marcha. Ocultos en el zurrón de la princesa gigante atravesaban rápidamente el castillo en busca de las mazmorras donde retenían a Megania.

- ¿En serio somos invisibles?- preguntó de repente mientras bajaban las escaleras.- Es decir, yo sigo viendoos a vosotros y al zurrón, ¿no?- Efrain podía ver por un pequeño resquicio en la tela los lugares que iban atravesando.

Ciertamente, la magia arcana no era su fuerte.

Conforme llegaban al salón de celebraciones se fue haciendo a la idea de que, realmente, eran invisibles. A todas luces nadie les prestaba atención… y estaba seguro que ver a la princesa o a un grupo de asaltantes flotando a cierta altura mientras atravesaban una sala tan concurrida debería haberles llamado la atención.

El espectáculo que tenía lugar en la sala de fiestas era uno de los más horribles y con menos gusto que había contemplado.

Son como animales, pensó mirando por el hueco del zurrón, aunque la verdadera sorpresa llegó al ver al que parecía ser el prometido de Skadhi: no le habría gustado ser su oponente en un combate a muerte. De hecho, todos esos gigantes juntos serían un reto para cualquier ejército…

Por suerte para él, Cortana llegó en su ayuda. 

O algo así…

- Esto… ¿te refieres ICE BUNNIES ON FIRE? Apenas me he fijado… quiero decir, en fin, no son más que dibujos de gigantas desnudas, ¿no? Ya sabes: piel azul, helada y resbaladiza por la escarcha, haciendo todas esas posturas que, en un cuerpo normal serían bastante complicadas (anatómicamente hablando) pero que con estas temperaturas deben de ser un auténtico dolor…

Miró al espíritu de la armadura. Por algún motivo sentía cierta empatía por ella, al fin y al cabo solo quería su bien estar.

¿No?

- Podría decirse que me han dejado "frío".- terminó, encogiéndose de hombros.

La forma adoptada por el espíritu era, de lejos, mucho más provocativa que las imágenes que había contemplado por un momento en la desafortunada revista, pero su carácter voluble era un grave punto en su contra.

Otro era que se trataba de una armadura, claro. Pero ¿Quién se lo decía? Con el carácter que tenía podría ser capaz de quedarse paralizada por despecho en mitad de un combate, o vete tu a saber…

- No te preocupes, sigues siendo mi… esto… sensual espíritu encantador de armaduras favorito. Prometido- zanjó la conversación (o eso esperaba en su fuero interno).

Estaban entrando ya en las mazmorras a través de un pasadizo oculto tras un tapiz. El negro del interior solo presagiaba lo que estaba por venir, la parte más peligrosa de su misión.

- ¡Arrrg, que desagradable!- ahogó una exclamación al ver cómo se las gastaban allí abajo con los prisioneros que trataban de escapar. Estaba claro que, llegado el caso, habría que tratar a esas criaturas como los animales que eran. El odio y la ira volvieron a encenderse dentro del paladín vengador.

- Síiiii, síiiii, hemos vueeeelto mi señoooor

- Síiiii, vueltooooo

Las voces volvían a sonar en su cabeza. La hora de rocanrolear estaba cerca.

Miró a Mikeala y pensó en su propuesta, no porque pensara en negarse (sería ridículo llevarle la contra a la noble cuando se le metía algo entre ceja y ceja) sino para considerar sus posibilidades de éxito.

- Está bien, Milady. Llevaos también al señor Zevran, podría sacaros de muchos apuros si llegaran a oleros esos "animales"- sugirió, tanto por el extra de seguridad que les aportaría como por no separar al dúo dinámico en una situación peligrosa como esta. Debían estar todos al cien por cien.

- Mister Zevran, he notado que sus armas desprenden un extraño olor. Llegado el caso, tal vez fuera de ayuda extender ese fuerte olor en alguna zona para entretener a esos lobos y aseguraros la fuga. Téngalo en cuenta.

>> (y mantenlos a salvo)- susurró sólo para él, apoyando la mano derecha en uno de sus hombros superiores para transmitirle confianza.

- El resto seguiremos con el plan de liberar a las princesas, ¿entendido?- miró a todos en general.

- Hermano…- se dirigió a Bam Bam y le ofreció un brazo a modo de saludo, esperando que lo cogiera.- La hora de darles a conocer el alcance de la gloria de Bahamut se aproxima. ¡Que la furia encienda tu fuego!- saludó al bravo luchador en un tono que esparaba que sonara a digna despedida.

Notas de juego

1- Me refiero al olor de la pólvora. Efrain no es un experto en armas de fuego pero considero que tiene la suficiente experiencia como para saber el funcionamiento básico de, por ejemplo, un cañón o trabuco. Tal vez pueda usar el fuerte olor de la pólvora quemada para encubrir su propio olor y escapar así de los cuchos.

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16/11/2020, 10:48
Director

Notas de juego

Uuuuuuuh... Milady Edevane, Chafee, Zev y B.B... Qué equipaso xDDDDDD

Os actualizo luego ^^

Esta semana tengo un viaje programado que me tendrá fuera hasta el finde. Os prevengo ;)

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21/11/2020, 18:36
Chafee

El ladronzuelo roedor asintió a la petición de la hechicera.

-Claro, señora. Si quiere fisgar, necesitará a un fisgón. Y no conozco a ninguno mejor que...

Chafee se colocó su vieja fedora con mucho estilo. Entonces acabó la frase.

-...A Chafee McCheese.