Partida Rol por web

Cuando me despiertan me levanto rápido y levanto el pulgar hacia mi amigo Tarben para tomar mi puesto junto al fuego. Reviso que el dinero del grupo está en su sitio. Me dejo la manta echada por encima de los hombros y remuevo un poco el fuego con un palo para que se avive. Mi compañero de guardia es el tal Kartag o Kardag, el draconiano que lucha sin armas.

Una vez el fuego está alimentado, me mojo los labios para empezar a hablar pero no se muy bien por donde empezar, me han enseñado a desconfiar de esta raza, he leído los combates y enormes batallas que hubo en el pasado contra ellos. Hoy en día no se deja ingresar a ningún hijo del dragón en la orden, ni creo que sea dentro de poco.

Pero hay algo que si tenemos que hablar, ya que se dejó en el aire antes.

-Kartadg- llamo su atención en voz grave y baja- antes dijiste que tenías una tiara que era para nosotros. Cuéntame más sobre el asunto por favor.

 Miré a Asthor, mientras hacíamos la guardia:

 - ¿Y que te parece todo esto?.

Lo miro -eres realmente cabezota, así que dudo que tus compañeros y yo podamos convencerte de otra cosa, a menos que tu quieras y estés dispuesto, cosa que no veo muy probable, entiendo que tengas tus convicciones y seas fiel a ellas, pero a veces hay que ver mas haya de lo que uno tiene delante, a veces la gente se equivoca con lo que ve, y si, seguramente el anillo no tiene nada bueno dentro, es obvio que lo usó para llegar hasta mi, o eso dijo, pues para mi no pude ser bueno tampoco- suspiro -si tu estupenda solución es matarlos, adelante, mátalos, seras igual que ellos. no seré yo la que te lo impida-

- Te equivocas, matar no es una solución ni fácil ni "estupenda",...ni mucho menos la primera opción pero... es que hay otra? si me equivoco...

La miró a los ojos

- ...ayúdame a encontrar otra solución?

Dijo casi como una súplica. Sabía que "educarlo" sería practicamente imposible y que de serlo necesitarían mucho tiempo y esfuerzos, y ahora mismo necesitaban enfocar esos bienes en otras cosas.
 

Kartag observaba por el rabillo del ojo como el humano llamado Leviathan le miraba con curiosidad. Cosa que no era de extrañar por proceder de una raza belicosa y nacida para el mal- penso- despues de todo la raza draconiana a las ordenes de la Reina de la Oscuridad, habian causado mucho daño por la faz de Ansalon, tiempo atras.

Libres de su influjo comenzaron a crecer y adoptar un libre albedrio o algo que se le asimilaba.

Sentandose al lado del caballero, mirando fijamente a las llamas de la hoguera, el monje exclamo, sonriendo levemente:

Como ves, soy un monje, perteneciente a la orden de Majere, haciendo con su  brazo derecho, un leve signo en el aire, representando una mantis.

Mi vision me trajo aquí, en busca de alguien que necesitaba ayuda y el beneficio de la duda, al igual que yo, busco ser aceptado en este  nuevo mundo.

Mi maestro me encomendo traer conmigo esta Tiara y entregarsela a ese ser, el cual responde al nombre de Desdemona! Señalandola con el dedo indice, allí donde se encontraba durmiendo.

Como ves, es  curioso este objeto, mostrandoselo al caballero, palpita como si tuviera vida y desprendio calor cuando aparecio por primera vez en la entrada de la cueva, ahí supe a quien iba destinada.

Tras tener esta charla, considero que lo mas correcto sería entregarsela a su propietaria!

Ahora si he satisfecho tu curiosidad, creo que deberiamos centrarnos en el próximo movimiento!

Sacando a continuación una redoma de liquido de color verde, que desprendia un olor a alcohol, el draconiano se echo un trago, ofreciendoselo a continuación al humano.

Esto te calentara y nos hará pasar la noche más rápida!

Lo primero que hago es coger la ornamentada filigrana y mirarla más de cerca, observando sus distintos matices pero con respeto, no se si es porque estoy influenciado, pero que noto una pequeña vibración, o igual es producto de mi imaginación.

Le devuelvo la tiara y asiento ante la idea de entregársela a la que es su propietaria. No entiendo muy bien que tiene que ver todo esto y que tiene que ver la mujer demonio en nuestro camino, soy bastante controlador y estoy seguro que si me dejaran estaría dándole vueltas al asunto días. ¿El siguiente paso del camino? buena pregunta. De momento creo que vamos bien encaminados.

- Te tengo que ser sincero, no me gusta todo esto, me cuesta confiar en vosotros- señalando a los draconianos y a la chica levantando las cejas incluso, es lo más opuesto a mí que se me puede ocurrir- no quiero ser grosero, pero donde os encontramos... y tú hablas goblin...- le señalo acusadoramente, ¿quien querría aprender ese idioma?- todo tan conveniente... pero llegaremos al fondo de esto, el tema del draconiano de bronce, y después ya veremos.

Rechazo educadamente la bebida ofrecida por el hombre reptil, agradezco su gesto y aunque mi pose se relaja considerablemente ante su actitud, me mantengo vigilando la puerta. Y a él.

Jajaja, sonrie Kartag, al decirle que habla goblin.

Es normal, debido a que en mi juventud aprendi tales lenguas, digamos que debido a una alta capacidad intelectual, puedo hablar varios idiomas!

Nada has de temer, noble caballero!

No me bajo del burro. Y niego con la cabeza.

- Pero ¿para que aprender la lengua de los Goblins?- me permito sonreir a su vez- no dudo de tu alta capacidad intelectual, siempre que tu no dudes de mi alta capacidad de no temer.- guiñito de ojo marca "yo que tu no lo haría" antes de continuar- Sólo que no es una lengua que le vea utilidad, entre la gente que trato.

Humanos! fascinantes y peligrosos! jajaja.

Sorbiendo otro trago de la redoma verde.

Negó y le cogió las manos -Mírame, si no me conocieses ¿que habrías hecho conmigo? mira mi aspecto, no es precisamente de ángel y no se si sabes que las tiefling somos indomables ¿porque no les das una oportunidad? te aseguro que si me equivoco seré yo misma la que les quite la vida- se puso tras él de rodillas -tu problema es que piensas demasiado y estas muy tenso-le susurro y masajeo su cuello

-Tú no eres igual que ellos. No puedes compararte con esa chusama.

Dijo ya con un ligero tono de nerviosismo en la voz. Al tiempo que se retiraba un poco

- Es un acto noble intentar llevar la carga de otro sobre los hombros...Quiero prevenir una situación potencialmente dañina para otros, no esperar a que suceda y "repararla"....

Luego hizo un gesto brusco, cómo si se le acabase de ocurrir una idea

-¿Qué te parece si le proponemos un trato a ese chaman? Sabes que lo que he querido es enmendar su razocinio para que no sea un problema. Eso requiere tiempo. Y tiempo no tenemos...a no ser que nos acompañe.... no sé... medio año? con medio año quizás sí que tengamos tiempo para enderezar a esa vara torcida. Luego que sea libre y haga lo que estime oportuno.

Al notar que se sentía incomodo puso sus manos en sus propias rodillas y gateo hasta ponerse frente a él, de nuevo usando sus felinos movimientos.

-¿Estas seguro? que nos acompañe durante medio año ¿duraremos tanto juntos? te recuerdo que yo no soy de este plano y....-miro a los demás -supongo que cada uno tendrá sus planes a parte de salvar a una tiefling ¿que quien sabe? igual destruye el mundo sin querer- sonrió sin querer, pero esa idea le resulto muy graciosa -pero si tu eres partidario de esa idea, sabes que te respaldare- le guiño

Sonrió ante el comentario, no pudo evitarlo pues aunque sabía sabía que podía llegar a ser verdad, ahora mismo la idea le resultaba graciosa.

- Algo me dice que vamos a tener que pasar mucho tiempo juntos... Si los dioses nos han juntado, no va a ser para matar a un puñado de goblins y a un draconiano para luego olvidarse de nosotros.

Sonrió -Espero entonces que esos dioses de los que hablas.... no tenga ganas de jugar- nuevamente ronroneo y paseo a su alrededor -¿y para que nos han juntado, según tu?- sonrió traviesa

- Si lo que se dice es cierto, no creo que Majere se dedique a "jugar"....Por nó decir que Kiri-Jo...tiene que ser algo serio, algo importante....pero luego pienso que en vez de a grandes heroes nos han elegido a nosotros y no puedo evitar pensar que o bién han errado a la hora de "mandarnos" sus mensajes o bién están jugando...sea como sea y aunque estén jugando, no me queda más remedio que seguir el camino que me marcan.

Terminó diciendo con cierto orgullo.

Lo miro y levanto una ceja -¿en serio estas diciéndome eso? te recuerdo que salvaste a una "dama" de ser ensartada por un trasgo, así que igual tu no lo ves, pero para alguien igual eres SU héroe, y quizás eso lo tuvieron en cuenta tus dioses....- le guiño como siempre juguetona -Además yo te veo muy valiente y después de todo, aspiras a caballero ¿no? estoy segura de que no han errado en su elección- miro al cielo nocturno

- Me alagas.

Dijo con una sonrisa.

- Pero hay muchos otros que ya son caballeros que tienen más reconocomientos que éste escudero que te está hablando....bueno ganas, coraje y valor creo que puedo tener como el que más.

Se le había quedado una sonrisa tontorrona en la cara. Estaba acostumbrado a servir y obedecer, y pocas veces le reconocían algo...y si lo hacían era distante fria y genérica, no como ahora.

Lo miró -Si he de serme fiel, prefiero al escudero, aunque a veces serio, sigue siendo mi héroe, me salvo- le guiña -y los caballeros... me miran raro, no les culpo, soy rara aquí, pero... tu me miras... me gusta como me miras- le sonrió maliciosa -y fuiste amable conmigo- ronronea apoyando la cabeza en el hombro de el joven.

- Esto...he...bueno...yo...solo...eh! no te vayas a dormir!

Acertó a decir con algo de nerviosismo mientras se movía.

- Que tu eres la que ves bien en la oscuridad en la que estamos. No nos podemos permitir relajarnos.

Se puso de pié con la suerte de que la túnica de la noche que tapaba todo llegaría a tapar su sonrojo. Dió un salto hacia una piedra cercana y escrutó el paisaje.

- Parece que todo está tranquilo, no?

Lo miro riendo -Jajaja no me voy a dormir, solo descansaba la cabeza sobre ti, eres cómodo y blandito- miro a los lejos -deberías relajarte un poco, la noche esta muy tranquila, además si se acerca algo, tranquilo lo veré antes de que pueda hacernos nada- lo miro subirse a la piedra -de todas formas porto termina nuestra guardia-