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El Liceo: Escuela de Superhéroes

Capítulo 6: De Cero a Héroe

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07/11/2017, 21:26
Salara

La semana de entrenamiento había sido increíblemente intensa para la mayoría de los estudiantes de la escuela.

Los estudiantes de los primeros cursos, sedientos de victoria y reconocimiento, habían estado entrenando duramente con sus equipos. Una de las cosas que descubrieron los miembros del Grupo 4 era que los grupos formados durante el primer curso podían deshacerse y reorganizarse durante el segundo. Sin embargo, la mayoría de grupos permanecían unidos gracias a los vínculos formados durante el primer curso.

Las reservas de la Sala del Peligro, del gimnasio y de las pistas exteriores habían estado completas durante los siete días previos al evento deportivo del Liceo. Aquellos que no habían tenido la previsión de hacer sus reservas se habían visto obligados a entrenar allá donde podían, ya fuese en los terrenos de la escuela o incluso en medio del bosque.

Salara se aseguró de hacer todas las reservas necesarias para que el Grupo 4 tuviese al menos tres entrenamientos en la Sala del Peligro antes de la competición. Como siempre, se comportaba como una excelente mentora.

Aquel año, a pesar de que todavía podría hacerlo, la pequeña telépata había decidido no participar. Argumentó que quería centrarse en apoyarlos a ellos antes que entrenar ella misma.

El día a día, combinando las clases con las prácticas, dejó agotados a la mayoría. Incluso los más incansables sintieron, al final de la semana, las repercusiones del trabajo duro.

Cuando llegó el domingo, el día antes de los juegos, Salara sorprendió al Grupo 4 con una cena sorpresa en Barcelona.

Como ya habían hecho en alguna otra ocasión, se desplazaron a la ciudad mediante teletransporte, se divirtieron como si fuesen un grupo de adolescentes corriente, y volvieron antes de que fuese demasiado tarde. Aquello ayudó a calmar los ánimos, porque la verdad era que los nervios estaban a flor de piel.

Salara les dedicó unas últimas palabras aquella noche, antes de dejar que fuesen a dormir.

- Cuando me dijeron, antes de comenzar el curso, que me tocaría ser la mentora de un grupo de primer curso me puse muy nerviosa - dijo con su voz real, increíblemente suave y apenas audible -. No me veía capaz de hacerlo, incluso pensaba que se me daría fatal - Salara rió. Luego, hizo una pausa -. Pero… Ahora que hemos llegado hasta aquí… Me siento orgullosa. Orgullosa del Grupo 4. De lo que sois. De lo que habéis conseguido. Sé que no ha sido fácil para vosotros, han pasado muchas cosas desde el principio de curso… - admitió, algo más solemne -. Pero pase lo que pase mañana, quiero que deis lo mejor que tengáis. Pero no lo hagáis por mí, hacedlo por vosotros mismos. ¿De acuerdo?

A pesar del bajo tono de su voz, Salara ya no titubeaba ni hablaba con dificultad tal como lo hacía a principio de curso. Gata Lunar había crecido también junto al Grupo 4. Finalizó su discurso ladeando la cabeza y mostrando una de sus sonrisas más encantadoras.

- Descansad bien. ¡Mañana es un gran día!

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07/11/2017, 21:29
Narrador

Los Juegos Heroicos, Día 1

Aquella mañana de lunes, los estudiantes del Liceo despertaron al amparo de una extraña sombra. Cuando sacaron la cabeza por la ventana, curiosos, vieron un gran objeto en el cielo, sobre la escuela.

¡Era un estadio flotante!

Nadie sabía de dónde había salido, pero ahí estaba. Aquel día no había clases, así que después del desayuno los estudiantes se pusieron los uniformes y comenzaron el ascenso. Los que pudieron volaron por sí mismos, o incluso se teletransportaron. Los demás usaron unas pequeñas naves de transporte comandadas por E.S.T.H.E.R., la profesora de tecnología.

Una vez arriba, pudieron ver la disposición del misterioso estadio. Una sencilla pista plana de un blanco marmóreo, rodeada de gradas. Toda la escuela y más cabía allí.

Entre las gradas había un espacio reservado para el profesorado y para otros adultos. Pero, ¿qué “otros adultos” podían asistir a aquel evento?

Rudy no tardó mucho en identificarlos.

¡Héroes!

Los que podían habían acudido desde todas partes de España para presenciar el evento. Algunos eran padres de estudiantes, otros simplemente querían ver qué se cocía en la cantera de héroes española. Entre los adultos destacaron dos figuras femeninas que ya habían tomado asiento: Wrecking Mom y la Agente 13.

De hecho, la atronadora voz de la madre de Rudy no tardó en hacerse oír entre el gentío.

- ¡RODOLFOOOOOOOOO! ¡AQUÍ ESTÁ SU MAMI PARA ANIMARLEEE!

Pero no había sólo héroes entre los adultos. Había también humanos corrientes, padres sin poderes de alumnos con poderes. Aitor alcanzó a ver a sus padres entre el público, así como Marina. Aunque los padres de César y Daniel y los abuelos de Sara no habían venido.

Entre los profesores del público destacaba la presencia del subdirector, el señor Bosch, que miraba a todos lados, como si estuviese esperando que ocurriese algo.

- ¡Bienvenidos a los doceavos Juegos Heróicos del Liceo! - resonó una voz familiar por los diversos altavoces instalados en el estadio.

En una de las zonas altas de las gradas, instalada en el lado contrario al del palco de profesores, se encontraban dos estudiantes acomodados en una mesa con micrófonos. La estudiante que gritaba a viva voz era Rita, el Oráculo del Liceo. Esa chica estaba en todo. Formaba parte de varios clubes, escribía la Gaceta del Liceo y, cómo no, también era la comentarista de aquel evento.

- ¡Por favor, id sentándoos! ¡Hasta que no estemos todos no podremos comenzar! - pidió con cierta impaciencia.

Salara se encontró con el Grupo 4 y los guio hasta sus asientos. Al parecer cada grupo tenía asignado un sitio en las gradas.

[color=#9A2EFE]~ ¿Qué, estáis nerviosos? ~[/color] les preguntó Salara con una sonrisa, usando su telepatía para hacerse oír entre el fuerte ruido de fondo [color=#9A2EFE]~ Veo que han venido algunos de vuestros padres a veros. ¡Id a hablar con ellos si queréis! Pero en unos quince minutos comenzarán los Juegos, ¡para entonces mejor que estéis aquí![/color]

Ya estaba cerca… ¡El momento de demostrar de lo que eran capaces!

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07/11/2017, 21:31
César

Ante la propuesta de Salara, César se limitó a sentarse en su sitio sin mucho aspaviento. Se le veía tranquilo, pero también algo disgustado. 

Suspiró y dejó que su mirada se perdiese en el gentío.

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07/11/2017, 22:02
Daniel D´aeth

Al igual que sus compañeros, Aitor y Daniel también entrenaron duramente a lo largo de la semana, poniendo especial interés en que sus prácticas y estrategias no fueron observadas por nadie. Quizás guardaban un as en la manga para los Juegos, o simplemente eran muy celosos de su intimidad.  El caso es que terminando la semana, hasta el propio Daniel se le veía con menos fuerzas de lo acostumbrado, el azul de sus ojos más apagado de lo habitual.

Sin embargo, para la cena en Barcelona con que les sorprendió Salara decidió mostrar su mejor cara. Acudió a la cita con un traje negro que resaltaba su atlética figura y que contrastaba demasiado con las ropas de algunos de sus compañeros, por lo que decidió prescindir de la corbata para no vestir excesivamente formal. Fue una velada encantadora en la que comió, bebió e incluso se permitió bromear con sus compañeros, sobre todo Rudy con quien parecía había hecho muy buenas migas en poco tiempo.


La mañana del primer día de las pruebas se quedó boquiabierto ante el despliegue de medios, y eso que no era alguien que se sorprendiera con facilidad. ¡Un estadio que flotaba sobre el Liceo! Si tenía alguna duda sobre la importancia de aquel evento, se esfumó a medida que la gargantuesca sombra cubría todas las instalaciones.  Y cuando empezaron las presentaciones y algunos de los padres se dejaron entrever – y escuchar – no pudo reprimir buscar a alguien conocido entre los asistentes. Sin embargo, tal y como esperaba, allí no había nadie observando su demostración.

- ¿Tampoco han venido a verte? – dijo a César, sentándose a su lado. El agotamiento de la semana del entrenamiento se había esfumado y ahí estaba de nuevo un Daniel a pleno rendimiento  y preparado para darlo todo. Señaló al níveo escenario – No le des mayor importancia. Lo que debe preocuparte está ahí. 

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08/11/2017, 00:49
Moussa Dakar

La cena sorpresa de Salara, fue un regalo bien recibido por Moussa. Llevaba tanto tiempo sin tomarse un respiro, que el pasar una noche de diversión le sentó genial. Aunque no pudo evitar sentir cierta culpa al estar allí divirtiéndose, mientras que uno de sus compañeros faltaba. Pero en el fondo sabía que necesitaba descansar y despejarse. Una vez los juegos quedasen atrás, volvería a centrarse por completo en los estudios. Pero por el momento, se mostró bastante más abierto con sus compañeros de lo que era habitual en él.

Se había vuelto más comedido con sus palabras, en parte gracias a Bosch y la doctora Pujol y trataba de formar parte de forma más activa en el grupo. Incluso se animó a la sesión de karaoke y todo. Aquello era la calma antes de la tormenta, así que más le valdría aprovechar cada segundo.

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Para que negarlo, Moussa se emocionó al contemplar el estadio flotante. ¡Aquello era una pasada! ¿De donde sacaban aquellas maravillas el Liceo? Un día de estos tendría que echar un ojo a las cuentas de la escuela para vez de donde sacaba los fondos para mantener todo aquello.

-¡Vamos lentorros!

El portal de Moussa se mantenía abierto mientras aguardaba a que sus compañeros llegasen. Creyó conveniente, que pese a que muchos de ellos pudiesen llegar mediante sus propios medios, lo más indicado era llegar todos juntos, como el equipo que eran.

Sentía curiosidad por saber qué era lo que les habían preparado allí arriba. Seguro que las pruebas serían complicadas, solo esperaba que todo el entrenamiento diese sus frutos y quedasen en buen lugar.

Una vez arriba, observó las gradas ¿Quién diablos era toda esa gente? ¿Qué eran ahora? ¿Un espectáculo para desconocidos? Eso no le gustó mucho, pero no le quedaba otra que aguantarse. Para relajarse, optó por un rápido paseo por la zona, se deslizó a través de sus portales para contemplar el lugar desde todos los ángulos y finalmente, regresó al asiento asignado.

Él no tenía familia, así que ni se molestó en buscar a nadie conocido entre el gentío. Aunque sí se percató de que Bosch estaba atento ante cualquier posible peligro. Un evento así era el momento apropiado para atacar por los enemigos del Liceo, aunque por otro lado, el lugar estaba repleto de héroes. Así que quizás las cosas fuesen tranquilas aquel día.

No le pasó tampoco desapercibido que la familia de César tampoco parecía estar presente. Se prometió que cuando todo terminase, buscaría información sobre ellos. Quizás pudiese ayudar al muchacho a reunirse con los suyos y solucionar los problemas que pudiesen tener.

-No dejes que lo que pasó en el pasado te marque. Eres un héroe, salvaste decenas de vidas aquí en el Liceo y también fuera de él. Ahora estás con nosotros, tu familia. Así que haz caso a Daniel y centrate en lo que hemos estado practicando. -Tras lo cual añadió con todo divertido. -Las alumnas de segundo y tercero estarán mirando y esas están bastante más creciditas que las de nuestro curso, quizás llames la atención de alguna.

Por supuesto Moussa no se incluía en eso de llamar la atención de las chicas. Tenía tan poco tiempo con todo lo que tenía aún pendiente, que no pensaba perder ni un segundo siendo un calzonazos como algunos de sus compañeros.

-¿Qué el periodo de adaptación, novato? ¿Preparado para patear en cu...las posaderas a las otras clases?

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08/11/2017, 11:53
Aitor Zumalacárregui

Todos habían estado trabajando duro durante aquella semana previa a la competición, pero Aitor era, tal vez, el que en mayor cantidad de cosas estaba embarcado. Un proyecto secreto en un taller del club de inventores, un prototipo de artefacto para Marina y los entrenamientos con Daniel, además de todo el resto de cosas más mundanas que, aunque reducidas al mínimo durante este tiempo, seguían siendo legión y le consumían horas enteras cada día.

Pese a todo, el genio vasco sólo presentaba unas ligeras ojeras, nada más. Además, se le veía bastante animado, una actitud que rara vez se le había visto antes de empezar a salir con Marina.

La excursión a Barcelona acabó de animarle y se prestó a la alegría general del grupo, cambiando su habitual ropa negra por una camisa hawaiana (que no le favorecía nada) y “pinchando” música toda la noche. Su gesto serio apenas había cambiado, salvo por alguna fugaz sonrisa, pero las canciones iban todas con intención, y sabiéndose el repertorio como sólo él podía, las “cuadraba” a la perfección para ejecutar bromas y añadir madera al pitorreo. Quién le había visto y quién le veía.

-Salara, creo hablar por todos cuando digo que has sido una mentora estupenda y que nos emplearemos a fondo en estas pruebas, si no es por nosotros mismos, por ti y por nuestros compañeros ─comentó Aitor a las palabras de Gata Lunar con rotundidad.

Aquella noche procuró descansar… después de terminar el último proyecto. Durmió unas cuantas horas antes de acudir a “los juegos”.

La mañana siguiente amanecieron a la sombra de un estadio volante. El genio vasco recogió los diversos enseres con los que se había hecho aquellos días para utilizarlos durante la competición, repasó que todo estuviera en el sitio que había designado para ellos y se cargó la mochila del portátil, se vistió el traje de músculos sintéticos, se colgó su super-tablet, se puso su diadema telepática y esperó pacientemente a que Moussa se dignase a acabar de arreglarse. Aunque dormía en la habitación de un teleportador, éste tenía por costumbre apurar hasta el último segundo, probablemente consecuencia de disponer de sus poderes.

-Daniel, he acabado esto ─dijo cuando se reunieron, enseñando al más nuevo componente del grupo 4 lo que parecía alguna suerte de pistola con diversos bultos metálicos, evidentemente no estándar, y que volvió a guardar en una funda rápidamente─, para completar mis capacidades de ataque a distancia.

Al parecer Aitor estaba cansado de depender de sus máquinas para todo y trataba de superar sus limitaciones, siendo esa la última de sus invenciones al respecto. La anterior había sido el traje de músculos sintéticos que llevaba bajo el uniforme gris de la escuela y que le daba apariencia de ser un muchacho musculoso, aparte de concederle una maniobrabilidad casi sobrehumana.

El estadio era magnífico y su centro, pese a ser de apariencia austera, seguro que escondía más de una sorpresa. La voz de Oráculo, Rita Gris, compañera del Club de Inventores, no le sorprendió en absoluto, sabía que nadie como ella retransmitiría lo que sucediera para todos. Aitor sonrió para sí.

-Oráculo está en su salsa hoy. Bueno, voy a saludar a mis padres y vuelvo ─dijo soltándose de la mano de Marina a la vez que le daba un beso en la misma.

La visión de su hijo hiper-musculado (por el traje, pero ellos no lo sabían) y a punto de competir seguro que les daba qué pensar a sus padres, ninguno de los cuales tenía poderes, pero aunque fuera por pura cortesía tenía que ir a verlos. Y lo fue a hacer solo, Marina se moría de vergüenza sólo de pensar en acompañarle (de hecho estaba bien roja) y el genio vasco prefirió ahorrarle el mal trago. Al fin y al cabo acababan de comenzar a salir, no era nada definitivo... No tardaría en volver, con el rostro algo más serio que como había ido. Era duro constatar que tus padres estaban en una liga completamente diferente y, aunque se esforzaban en entender a sus hijos, no podían ni comenzar a imaginar lo que podía augurarles el futuro gracias al Liceo.

-Mi madre me ha preguntado por mi hermana la ex-super-villana y mi padre se ha interesado por la comida del instituto... ─el joven suspiró un tanto apesadumbrado─ Bueno pues, listo, centrémonos.

Notas de juego

Un pequeño detalle: Aitor NO lleva la bolsa de chismes tecnológicos encima.

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08/11/2017, 11:55
Aitor Zumalacárregui

Notas de juego

Voy invisible, el que ven es Aitor 2.0, y es Aitor, el original, el que lleva la bolsa de chismes. Lógico si se tiene en cuenta que los poderes de transformación de metal y convocación de robots los tiene él. Eso sí, el genio vasco original no lleva el traje, lo lleva Aitor 2.0.

Si alguien se da cuenta Aitor simplemente se lleva el dedo a los labios para pedir silencio y complicidad. Si es necesario transmite telepáticamente a quien se haya dado cuenta que es un truco para conseguir algo de ventaja en la competición, matizando que es completamente legal el hacerlo (Aitor ha revisado a fondo las reglas de la competición).

Ah, y el lanzamisiles personal también lo lleva Aitor 2.0

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08/11/2017, 19:34
Daniel D´aeth

Daniel saludó con la mano a Moussa, que apareció ante él casi de improviso por uno de sus portales. Aún no terminaba de acostumbrarse a la facilidad con la que el muchacho cruzaba el espacio entre dos puntos.

- Debo reconocer que El Liceo es mucho más interesante que mi antiguo colegio - respondió sin dejar de mirar el campo de juego. Entrelazó los dedos y entrecerró los ojos, pensativo - Creo que Aitor y yo lo haremos bien. No quisiera perder la oportunidad de optar a una oportunidad como la que tiene Rudy con esa beca. ¿Al resto no os llama la atención?

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09/11/2017, 17:05
Diana Castelló

Tras una semana de entrenamiento intensivo la joven metamorfa se encontraba quizá más segura de sí misma de lo que se había sentido nunca. Puede que en parte fuera por los ánimos y las palabras de aliento tanto de Rudy como de sus otros dos compañeros de entrenamiento, pero la noche de la cena se la notaba revigorizada, como si fuera una nueva Diana.

Aquella noche vistió un vestido de coctail de color negro bastante sencillo y su pelo normalmente liso había crecido hasta casi la mitad de la espalda y se lo había recogido en una coleta alta con caída ondulada. Estaba realmente preciosa. Aquella noche disfrutó, rió, bailó y se quitó de encima todo el estrés que podía tener acumulado.

Aquella noche durmió como no había dormido casi en toda la semana y cuando se despertó tenía una enorme sonrisa en el rostro. Miró su teléfono y tenía un mensaje de su madre, pero no era un mensaje cualquiera, la agente 13 le mandaba una foto de la entrada del Liceo y otra de un asiento en unas gradas, sin aclarar nada más en absoluto. La chica saltó de la cama, se dirigió corriendo a las zona de los baños y disfrutó de una corta pero revitalizadora ducha. Volvió corriendo a la habitación que compartía con Sara y se vistió con el uniforme del Liceo y volvió a recogerse su ahora más largo y ondulado pelo en una cómoda coleta. Al salir se fijó en el enorme estadio volador y desplegó sus angelicales alas, no usó el Portal de Moussa, porque la chica realmente disfrutaba de la sensación que otorgaba el vuelo. Ascendió al estadio maravillándose por la construcción y realmente emocionada por la expectativa de volver a ver a su madre después de tanto tiempo.

Al aterrizar miró en todas direcciones como un niño pequeño dentro de una tienda de juguetes, hasta que dio con la localización de su madre. Reprimió sus ganas de ir a abrazarla hasta que se les hubo indicado cuales eran sus asiento y Salara dio luz verde para ir a dar con sus familiares. En el mismo segundo en que Gata Lunar pronunció aquellas palabras Diana salió volando como si aquello fuera una carrera.

- Gracias Gata, vuelvo en seguida .- Gritó ya en el aire mientras se despedí con la mano.

Al aterrizar buscó a su madre en el lugar exacto en que la había encontrado momentos antes... pero allí no estaba. La chica comenzó a buscarla de nuevo, casi con desesperación hasta que por fin la encontró. Estaba hablando con Wrecking Mom, la madre de Rudy, ¿Casualidad?, quizá. Diana aquella vez comenzó a estirar sus piernas pasando por encima de cualquiera que estuviera en su camino y llegó hasta donde las dos se encontraban.

- Por fin te encuentro .- Dijo con la sonrisa en los labios mientras se lanzaba a sus brazos interrumpiendo la conversación que mantenían las dos adultas . 

- Wow .- Exclamó la Agente 13 cuando la chica cayó sobre ella -. Cuidado cariño que me despeinas .- En aquel momento comenzó a sonreír, burlona, mientras le devolvía el abrazo y le daba a su hija un maternal beso en la frente.

- Me alegro tanto de que hayas podido venir .- Suspiró aliviada a la vez que soltaba el abrazo-. Siento la interrupción Señorita Vergara.

- No se preocupe mijita .- Contestó Wrecking Mom con su habitual acento, sonriendo -. Espero que mi pequeño tenga tantas ganas de verme como usted a su madre.

Diana ya sabía que Wrecking Mom y su madre se conocían, pero no tenía constancia de que supiera que ella era su hija... aunque con la escenita que acababa de montar no le extrañaba en absoluto.

- RUDYYYYYYY .- Gritó mientras hacía aspavientos en el aire esperando que el Colombiano la encontrara entre el gentío -. ¡¡TU MADRE ESTÁ AQUÍ!!.- Acto seguido bajó la voz y volvió a dirigirse a Gloria -. Me alegro de verla a usted también, y me da mucho gusto ver que está totalmente recuperada.

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09/11/2017, 19:41
Sara Carrión

Ya llegaba el gran día. Sara llegó con su uniforme y con ganas de comenzar con el torneo. Esperaba estar a la altura y curiosamente allí en el liceo todo le solía salir bien así que esperaba que la suerte le siguiera sonriendo.

Buscó con la mirada a Alberto esperando verlo por la zona y poder saludarlo. Ella ya sabía que sus abuelos no iban a venir pues era un viaje largo para ellos y no les hacía especial ilusión. De hecho es que no les había avisado para ahorrarles el desplazamiento. Siendo como eran un par de cascarrabias prefería que no se dedicaran a entrometerse. La alicantina cuando hablaba con ellos les pintaba el Liceo como un lugar mucho más formal de lo que luego era.

Su hermana la animaba mentalmente, esperando que su grupo ganara la competición, y ella seguía sin saber cómo actuaría si le tocaba frente a su novio. Lo más seguro es que acabara encerrándolo en una cúpula y después no sabría cómo se lo tomaría él porque se tendría que enfrentar luego a sus compañeros de grupo. Por otra parte, estaba segura de que la pareja de Faro sería alguien poderoso para poder bloquear a sus oponentes mientras Alberto asistía.

Sara le daba unas cuantas vueltas a la cabeza cuando pudo ver a Wrecking Mom y no tardó en saludarla con la mano. Se acercaría enseguida a ver cómo espachurraba a su mijito. La joven sonrió a Marina que estaba callada, como siempre.

- Chicos, lo tenemos que dar todo y si no lo logramos, mala suerte. Ya habrá una nueva oportunidad.

La vida era una sucesión de altibajos como ella ya sabía gracias a su tortuosa historia.

- Sea como sea dejaremos el pabellón bien alto.

Estaba segura de que estaban al nivel de los de segundo o los de tercero así que darían una gran batalla. Entonces la joven le señaló a Marina que venía la madre de Rudy y pudieron acercarse.

- ¡Buenos días! Hoy va a ser un día increíble.

Les dijo a aquellas mujeres con una sonrisa entusiasta.

 

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09/11/2017, 20:35
Moussa Dakar

-¿El qué? ¿Ir con los vengadores? -Moussa soltó un bufido de desagrado. -Paso de ellos, pero si lo piden por favor, quizás deje que alguno de ellos se una a nosotros. Pero ya sabes, en plan becario o algo así.

Tras su respuesta, le dedicó una gran sonrisa a Daniel. Moussa no apreciaba mucho a los vengadores, pues los veía como estrellas de cine, que solo se movilizaban para cosas muy importantes y que les otorgase gran fama.

-No fueron los vengadores los que salvaron el Liceo, ni los que detuvieron a Plasma o quienes descubrieron a un topo en la escuela. No me gustaría que el equipo se disolviese, aunque supongo que todo esto es solo temporal y que al final, cada uno acabará por su cuenta.

No hacía falta ser un genio para descubrir que Moussa no estaba nada contento con ese final. Tal vez para el resto de sus compañeros el Liceo no fuese más que una parada en sus carreras como héroes, pero para Moussa lo era todo. Sus compañeros se habían convertido en su familia y odiaba la idea de perderlos y ver cómo se marchaban a otros equipos. Aunque era más que eso, en el fondo tenía miedo de volver a quedarse completamente solo. ¿Por qué diablos querían irse todos con los malditos Yankis?

-Creo que nosotros somos un gran equipo con un potencial muchísimo mayor que el de los vengadores. ¿Ellos que hacían a nuestra edad? No sé, soy de esos que creen que es mejor caminar por tu propio sendero y no seguir los pasos de otros. Así que en definitiva, que les den a los vengadores, creo que nuestro equipo será capaz de hazañas mucho mayores que los vengadores.

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09/11/2017, 20:48
Daniel D´aeth

Cuando Aitor se acercó a ellos y señaló a su nueva incorporación, Daniel le echó un buen vistazo y sonrió cómplice.

- Un nuevo as en la manga - dijo, tocándose el oído - Eres una caja de sorpresas. Nos irá bien, no te preocupes.

Sus demás compañeros se iban repartiendo por el estadio a medida que llegaban saludando a unos y a otros y escuchándose con suma facilidad las voces de algunos. Incluso la madre de Rudy se hizo escuchar como si llevara un megáfono incorporado. Esa mujer tenía que ser terrible en una pelea doméstica.

- No sé cómo son los Vengadores, pero seguro que pueden enseñar muchas cosas. Se han enfrentado a problemas que no podemos ni imaginar. Es como que tu madre sea una heroína famosa, sabe cosas que los profesores no - dijo, sonriendo al escuchar a Diana hablando de la madre de Rudy.

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09/11/2017, 21:08
Rudy Vergara

Lo podría haber pasado peor la verdad. Quiero decir, estaba triste y acongojado por la pelea con Natalia. La echaba de menos, pero estaba tan ocupado con las clases, los entrenamiento con Diana, Daniel y los grupales, que no tenía tiempo ni para pensar.

Y gracias a Dios, el día que tocó descansar, salimos por la noche. Varias veces pensé en Natalia, en qué estaría haciendo. ¿Averno habría sacado a su grupo como había hecho Salara con nosotros? ¡Nada, tonterias! Era momento de pasárselo bien.

Incluso me había arreglado para la ocasión. Llevaba una camiseta de botones azul, acompañada de una corbata. Esta vez no llevaba el uniforme debajo.

Canté, bailé y comí un montón. Disfruté lo máximo que pude de la víspera de la competición.

 

Al día siguiente me desperté con un poco de nervios. Desayuné bien y salí al exterior junto a mis compañeros. Asombrado vi el estadio que flotaba sobre el Liceo. ¿Como lo habrían llevado allí? ¿Lo habrían construido? 

Crucé el portal de Moussa.

-Gracias, locotrón. -dije imitando su voz.

Una vez arriba me quedé asombrado. Era austero, pero molaba, no abrumaba tanto como si fuese un campo de futbol.

Me puse de puntillas, a ver si veía a Natalia por alguna parte. No había hablado con ella desde el incidente. ¿Seguiría enfadada? Estaba bastante preocupado por ella. Si me tocaba contra ella en la competición... Diablo.

De pronto oí a Diana gritar mi nombre. ¡Mamá había venido! Flexioné un poco las piernas para coger impulso y salí volando hacia donde estaban ellas. Mamá no me había visto volar en condiciones todavía.

-¡AAAAAAAYYYYYY! ¡MIJITO VUELA COMO SU MAMI! -gritó a pleno pulmón cuando me vio.

Aterricé con la mayor suavidad que pude, trastabillando un poco. Abracé a Wrecking Mom con fuerza, me devolvió un abrazo aun más fuerte. Vaya, sí que estaba recuperada, sí.

-¿Qué hace aquí? ¡Está estupenda, mami! -dije soltándome del abrazo, cogiéndole de una mano y haciéndola girar. Le encantaba que hiciese eso, le daba la oportunidad de lucirse un poco más.

Vestía una camisa de flores ceñida y con escote, unos tejanos de ultima moda, unas botas con unos tacones de infarto y lo acompañaba su cabello rizado suelto. También llevaba sus gafas de "incógnito", que no llevaban cristales. Ella solía decir que con ese cuerpo no se fijaban en su cara. Ir sexy era la protección de su identidad secreta, y las gafas, claro. 

Luego saludé con la mano a la Agente 13, la mamá de Diana. La primera vez que la había visto era a través del móvil de Diana, cuando necesitamos su ayuda  para deshacernos de unos explosvios en Barcelona.

-Me alegro de verla de nuevo, Agente 13. -dije con una sonrisa. Luego miré a su hija.- Se nota de quien ha sacado su belleza su hija, jeje. -¡Rudy!- Oh, quiero decir. Bueno si fuese, ya sabe. Son muy guapas las dos, jeje.

Intenté cambiar de tema rápido.

-¿No tenía trabajo con Los Protectores, mami? -le pregunté a mi madre. Era uno de los miembros más importantes del supergrupo de Londres y ya había estado de baja unos días después de lo de Plasma.

Llegó Sara y saludo a Gloria. Entonces se me ocurrió que quizás Daniel la querría conocer, total si era un chico de Londres le haría ilusión conocer a la gran Wrecking Mom. De hecho, había muchos jóvenes ingleses que la querían conocer de muchas y diferentes formas. Una vez busqué a mamá en foros de Internet y nunca más. ¡Menudos pervertidos hay por la red! 

Saludé a mis compañeros de grupo y luego señalé a mi madre con un pulgar. 

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09/11/2017, 22:57
César

César respondió a las palabras de Daniel primero con un encogimiento de hombros.

“No, no ha venido nadie a verme” respondió con aquel gesto.

Luego el joven londinense trató de quitarle importancia. Lo importante era la competición, ¿verdad?

- Tienes razón - respondió César algo bruscamente, aunque cuando miró a Daniel su expresión se suavizó.

Las palabras de Moussa también lo animaron visiblemente. ¿Qué demonios? Salamandra también era un héroe del Grupo 4 del Liceo. ¿Qué importaba que sus estúpidos padres no hubiesen venido a verlo?

- Vamos a enseñarles a los otros grupos quién manda. ¿Eh, Moussa? - dijo finalmente llamando la atención de su compañero de grupo.

A pesar del disgusto, el piroquinético apretó los puños e hizo que la temperatura a su alrededor se incrementase un par de grados.

- Tenemos un ataque combinado alucinante, pronto lo verás - confesó a Daniel con una sonrisa.

Luego la conversación derivó hacia el asunto de la beca y los vengadores.

- No sé, a mí no me hace mucha ilusión ir con los Vengadores. Pero oye, si tuviese la oportunidad de trabajar con los Cuatro Fantásticos… Creo que podría aprender mucho de la Antorcha Humana.

Era evidente que los poderes de César formaban una parte muy importante de su vida. Había trabajado muy duro para aprender a controlarlos mejor, tal como había demostrado hacía una semana a sus compañeros.

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09/11/2017, 22:58
Marina

Marina, que llegó de la mano de Aitor, no hizo demasiados comentarios. Se la veía bastante nerviosa. A pesar de la seguridad en sí misma que había reunido últimamente, los sitios llenos de gente seguían poniendo nerviosa a la atlante. Aunque tenía un poder increíblemente llamativo, seguía avergonzándola ser el centro de atención.

Además del uniforme del Liceo, Marina llevaba una especie de collar metálico. En lugar de hablar por sí misma, el collar transmitía sus palabras sin que tuviese que despegar los labios. Era extraño oírla así, pero quizá menos que oírla directamente en sus cabezas gracias a Aitor.

- Le pedí a Aitor que me lo hiciera - dijo con una sonrisa mientras acariciaba el artilugio -. Pero es solo para la competición - aclaró firmemente -. Tengo que poder comunicarme con Sara cuando estemos solas en la pista - explicó aún algo nerviosa.

Cuando Aitor se fue a hablar con su familia, Marina hizo lo propio y fue a hablar con sus padres. Aquella era la primera vez que el grupo veía a los padres de Sirena, aunque fuese de lejos.

Él destacaba increíblemente entre el público. Era un hombre con la piel azul y una densa cabellera negra. Un atlante, de quién Marina había heredado su increíble fuerza y resistencia.

Ella era una mujer increíblemente bella, de la que Marina había heredado los poderes mutantes y su atractivo natural.

Los dos vestían ropa corriente, puede que no fuesen superhéroes o que no estuviesen de servicio.

Marina los abrazó a los dos y estuvo un rato conversando con ellos. Luego, volvió con el grupo. Se la veía más calmada.

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09/11/2017, 22:58
Narrador

Mientras el grupo conversaba, la voz de Oráculo seguía oyéndose a través de la megafonía.

- Parece que hoy tenemos visitantes de toda España. Héroes profesionales que han venido a ver cómo se las apañan los próximas generaciones. Qué nervios, ¿eh, Fragua?

- T-tienes razón, e-esto Rita - respondió un chico con voz insegura, que contrastaba enormemente con el tono confiado y jovial de la muchacha.

Era Enzi, también del Club de Inventores.

- E-es importante que los mayores puedan ver de lo que son capaces los jóvenes.

- ¡Y qué lo digas! - respondió Rita mientras le daba un ligero golpe en el hombro a Enzi -. Veo que los padres también han venido a ver a sus hijos competir. ¡Bienvenidos, mamás y papás! Hoy vais a ver una muestra de lo mucho que han estado trabajando vuestros hijos durante estos meses. ¡Aseguraos de animarles como es debido!

Notas de juego

Si queréis recordar algo más acerca de Rita y Enzi, podéis ir al Anuario.

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10/11/2017, 17:36
Sara Carrión

Estaba todo a punto e incluso Marina venía preparada para poder hablar con normalidad. Le sorprendió un poco al ver a ese tipo azul grandote que parecía ser su padre. Si ella pensaba que sería parecido a Namor el guaperas. En fin, Sara había terminado acercándose a Gloria y la otra mujer, quien parecía ser la madre adoptiva de Diana. Sara ladeó un poco la cabeza para llamar la atención.

- Soy la compañera de cuarto de Diana, encantada. Está todo el mundo muy contento con ella, una alumna modelo.

Y sí que lo era, también ella misma - o eso creía - así que en la misma habitación estaban dos de las más formales del curso. La chica movió de derecha a izquierda su dedo índice.

- Ellos dos van a luchar juntos, son un equipo muy completo.

Tenía curiosidad por conocer a las dos madres así que estaba encantada estando allí. Cayó entonces en la cuenta de que Daniel tampoco parecía tener a nadie por allí y eso le sorprendió.

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13/11/2017, 11:31
Aitor Zumalacárregui

Oráculo tenía razón, aquel lugar estaba atestado de héroes. Algunos de ellos ni siquiera eran padres de los miembros del Liceo, así que la lógica dictaba que debían estar "manteniéndose al día" o incluso estudiando el tomar entre las filas de sus super-grupos algo de sangre nueva. Aitor no tenía mucho interés en algo así de base, pero sería irracional que no permaneciera abierto a posibles ofertas.

Fuera como fuera, el requisito mínimo era hacer un buen papel y el genio vasco ya estaba determinado a hacerlo antes de llegar al estadio y tomar conciencia de los asistentes.

En otro orden de cosas, el pobre de Enzi, Fragua, que se desenvolvía tan bien en el combate cuerpo a cuerpo, no podía dejar de tartamudear al dirigirse a la multitud, todo un contraste con la verborrea de Rita. O había perdido alguna apuesta o era algo de auto-superación...

-Suerte a todos, chicas y chicos. Aunque no creo que la necesitéis ─animó Aitor.

Notas de juego

Observo y hago un listado de los héroes asistentes para Rudy, listado que recibirá en su móvil en unos instantes...

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13/11/2017, 12:31
Diana Castelló

Diana sonrió abiertamente ante el comentario de Rudy, y la Agente 13 asintió y sonrió a su vez.

- En realidad no vas muy desencaminado .- Replicó Sharon Carter -. El aspecto que Diana eligió como parte de sí misma fue en realidad una foto de mi madre de joven .- En aquel momento soltó una pequeña risita -. Al principio me resultaba realmente chocante, pero una vez que me acostumbré hasta me sentí halagada.

- Venga no te pongas sentimental .- Dijo Diana sonriendo.

Al momento llegaron Sara y los demás, quizá querían hablar con Wrecking Mom, pero acabaron encontrándose con toda una agente de S.H.I.E.L.D. vestida de calle. Claramente aquella mujer no era famosa, puesto que un espía que se diera a conocer como tal no sería de utilidad alguna.

- Hola chicos, esta es Sharon, mi madre .- No hizo falta aclarar que era su madre biológica, en realidad no la consideraba una madre adoptiva.

- Encantada pequeños, es un placer conocer a la nueva familia de Diana, y aunque ella es una mujercita de armas tomar, espero que cuidéis de ella.- Sonrió abiertamente mientras miraba a su hija.

- Vamos mamá... no me avergüences .- Respondió con una ceja levantada.

En el momento en que Sara se acercó a hablar con las madres de ambos adolescentes, Sharon asintió y ladeó la cabeza.

- Me alegro que la tengas en alta estima, Sara .- Respondió conociendo su nombre aunque la chica no lo hubiera dicho -. Trato de hablar con el Sr Richmond cada semana, aunque a veces por trabajo me es imposible, y él me da reportes de las actividades de Diana en el centro, no daré mi opinión al respecto de sus clases porque podría enfadarse conmigo.- Dijo cerrando la boca y haciendo una señal de boca sellada.

Cuando le habló sobre que Rudy y Diana habían sido emparejados para los juegos miró a Wrecking Mom y ambas sonrieron y asintieron.

- Precisamente de eso hablábamos antes de que llegarais. Los chicos nos habían informado y nosotras estábamos hablando sobre las posibilidades de ese dúo, aunque no las compartiremos porque queremos que nos demuestren que realmente conocen sus posibilidades.

En aquel momento miró a su hija y sonrió casi maliciosamente. Realmente confiaba en Diana y en sus posibilidades, probablemente más que la propia chica, pero ésta solía infravalorarse demasiado, así que quería que le demostrara que había cambiado, puesto que no siempre iba a poder contar con ella y con su aprobación.

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13/11/2017, 15:41
Rudy Vergara

Cuando la Agente 13 pidió que cuidasen de Diana, mi madre habló.

-¡AY, SÍ! ¡Con un grupito fantástico! -dijo mientras se recolocaba sus gafas falsas. Luego bajó su alto tono de voz un poco.-  Me salvaron la vida, estos jovensitos. Pelearon como grandiosos héroes contra el villano, hase unas semanas.

Luego Sara dijo lo de que Diana y yo íbamos a participar juntos en la competición.

-¡AY, SÍ! Con su mejorsita amiguita. -dijo emocionándose. Luego miró a Sharon y asintió, estando de acuerdo con la agente de SHIELD.- Creo que lo harán estupendo. Y los demás también, pues claro. ¡Buena suerte, chicos!

Sonreí al ver la situación. No me había imaginado la situación en que nuestras madres se conociesen. Pero al parecer ya lo hacían de antes, incluso habían estado hablando sobre nosotros. Tendría que darlo todo, no podía decepcionar a Wrecking Mom.

-Gracias, mami. -dije dándole un beso a mi madre.

Dicho eso, volví a donde estaba Salara y el resto del grupo.

-Igualmente, Zenitram. -dije con una sonrisa mientras estiraba el cuello para desentumecerlo.

Recibí un mensaje de Aitor. Miré al chico extrañado. ¿Por qué me enviaba un mensaje si podía estaba enfrente y podía decírmelo, hablando y telepáticamente? Entonces lo abrí. Un listado de héroes, la mayoría españoles.

-Guau. -dije mirándole ahora con un poco de temor. 

Si había tanto héroes ahí eso significaba que era más importante de lo que pensaba. Tal vez venían a ojear, a buscar posibles sidekicks. De pronto estaba mucho más nervioso que antes.