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El Regente de Jade I: El Legado de Muro de Salmuera.

Regente de Jade: 3- Aldea de Muro de Salmuera.

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13/12/2017, 12:55
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


- No parece que sean de los que se quedan a esperar en al muralla, Vankor. Si no tienen vigías ahora... y desde luego no hablo de emboscarlos aquí, sino en un lugar donde podamos eliminarlos y tomar la llave. O incluso interrogarlos sobre qué demonios nos vamos a encontrar ahí dentro- el tono del bárbaro es un poco cortante, aunque luego se relaja- Aunque bueno, a mi, lo mismo me da. Pero algunos lo de trepar lo van a tener difícil, y es mucho presumir que sea fácil encontrar la llave o los mecanismos para abrir la puerta para que pase el resto. Y claro, lo de separarnos buena idea, lo que se dice, no es. Sea como fuere... quizás tenga razón Hattori y debamos echar un vistazo a los restos esos del dragón de los cojones.

Y tras las palabras espera que hable la adivina y jefa de la expedición.

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13/12/2017, 13:10
Kelsier Deznad.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Kelsier abandonó a Vankor y Kromdal y fue a recibir al resto de compañeros, indicándoles por donde pasar con mayor facilidad entre los diferentes accidentes geográficos y vegetaciones hasta el pie de la muralla. Les comentó rápidamente sobre lo descubierto y una vez todos juntos de nuevo surgió el tema sobre si emboscar o trepar.

El explorador ya había echado un vistazo a las murallas del ala derecha del castillo y ante el comentario de Hattori se encogió de hombros.

- No he visto el perímetro en su totalidad, Hattori. Pero toda la zona derecha, la que mira al poblado, parece estar en buenas condiciones. Por otro lado, el resto de tramos de la muralla están aposentados en los riscos, junto a grandes caídas. No creo que sea nada seguro aventurarse por allá - opinó el joven.

- De todos modos la primera línea de muralla no es muy alta. A ojo le echo... unos cuatro metros y medio, palmo arriba, palmo abajo - estimó con ojo élfico -. Se puede trepar a mano - dijo alzando la mirada y valorando seriamente el intentarlo, mientras su aguda vista veía agujeros donde meter pies y manos, y arbustos donde agarrarse -. Una cuerda con arpeo posiblemente facilitaría notablemente la escalada, aunque puede haber riesgos de que el metal haga ruido al agarrarse a la almena - indicó, dando por hecho que aunque no había una vigilancia activa eso no confería sordera a las criaturas que vivían dentro.

- Los primeros que lograran subir podrían usar cuerdas para alzar a los de abajo - añadió.

Se comentó algo de una llave para abrir la puerta, algo que el muchacho negó.

- Esas puertas son muy sólidas y pesadas, principalmente de hierro. Creo que debe de haber un mecanismo que las abra - estimó según había observado hará un rato -. Probablemente habrá alguien apostado en alguna... ¿casamata?, creo que se dice así, donde activará un mecanismo cuando los cazadores lleguen y a voces anuncien su presencia - auguró -. Por eso creo que pueden no estar vigilantes, pero sí cercanos - afirmó con un gesto ascendente de barbilla.

- ¿Qué hacemos, Koya? ¿Esperar hasta mañana al mediodía y emboscarlos en el bosque, reduciendo así su número antes de volver, o trepar ahora mismo?

Entonces Hattori habló sobre la carcasa del dragón marino y un mal presentimiento. Aquello incomodó al muchacho.

- Tal vez... tal vez si hubo uno... pueda haber más - susurró inquieto.

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13/12/2017, 20:12
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya agradeció que Serveris llevara puesta su pesada armadura ya que así podía seguirle el paso. Mientras se acercaban trataba de calmar al temeroso Hattori acerca de lo que había sentido cerca de los restos del draco.

- Todo este sitio tiene un aura muy rara. No te preocupes por eso. Me inclino más a que sea un reflejo de lo que emana este castillo. Quizá a la vuelta podamos examinarlos como es debido.- Poco a poco, para impaciencia de los impetuosos jóvenes que los esperaban, los tres rezagados llegaron a la posición más avanzada. La Adivina escuchó las propuestas de unos y otros, algo molesta por las contantes preguntas que la dirigían a ella. Ya echaba de menos a su hijo Sandru, quien solía cargar con aquella responsabilidad sin queja alguna y sin agobiarse.

Quien con niños se acuesta, meado se levanta.- Pensó con resignación. Ella se había ofrecido a ir al castillo y ahora no podía escaquearse de sus responsabilidades. Todos aquellos jóvenes la tenían en un pedestal y, por ello, solicitaban con ansias sus directrices.

- Habiendo cuerdas suficientes...- Dijo después de escuchar a todos aquellos que habían declarado llevarlas, y sobre todo lo dicho por Kelsier acerca de la altura de la muralla.-...creo que sería viable abordarla. Además, parece que la vigilancia deja mucho que desear.- Se inclinaba por la idea del siempre valeroso y carismático Vankor.- Si luego no podéis abrir las puertas desde dentro tendríais que ingeniárosla para pasarme al otro lado.- Estaba claro que no le agradaba la idea. No pesaba mucho, sólo era un saco de huesos con fina piel, pero no quería sufrir una caída y romperse la cadera o la crisma. Pero confiaba en que Vankor la tratara con la gentileza con la tenía acostumbrada. Aún recordaba cómo la había llevado en brazos a Galduria, o cómo la había levantado de la silla en su último cumpleaños para sacarla a bailar.

¡Aaaaaaah...- Suspiró y se recompuso.- Céntrate Koya.

- Pero antes...dejadme unos instantes.-Por lo que Kromdal y Kelsier habían deducido magistralmente de los rastros de los alrededores, los pollos debían estar en el interior del castillo. Sería prudente echar un vistazo primero desde una posición segura y que no delatara su posición. Ni corta ni perezosa Koya se aproximó a las pesadas puertas y puso la palma de su mano sobre la superficie. Comenzó a murmurar algo ininteligible para después acercar el ojo hasta casi entrar en contacto con la zona donde antes había estado su mano. Aunque los demás no pudieran apreciarlo ante el ojo de la fiel sierva de Desna se habría una mirilla mágica con la que ver a través de la puerta. Ahora Kromdal podría entender cómo había hecho la adivina para saber quién estaba al otro lado de la puerta cuando éste había ido a hacerla una visita.

Lo que vio al otro lado de la puerta no le gustó nada y agradeció a Desna que le otorgase sus dones con los que así conseguía proteger a los suyos. La visión de las dos extrañas criaturas aviares aceleró su debilitado corazón confirmando las peores sospechas de los hábiles exploradores que la acompañaban. La mirilla se cerró repentinamente lo que sorprendió tanto a Koya que trastabilló hacia atrás, tropezando, y dando con sus posaderas en el suelo, la espalda contra las espinillas de Vankor.

- ¡Auch!- Se quejó lo más bajo posible y elevó el brazo para que Vankor la ayudara a incorporarse.-Dentro he visto a dos de esas criaturas.- ¿Dónde estaba la tercera?- Parecen muy peligrosas pero están haciendo el vago, no creo que nos hayan detectado. Ahora veo inviable la escalada. Habrá que emboscarlos cuando salgan...o mejor tratar de penetrar en el castillo sin que nos vean cuando no estén dentro- Quizá descubrieran la manera en la que abrían las puertas observando su salida y pudieran aprovechar los largos ratos en que estaban de caza para investigar en el castillo. No se veía capaz de arriesgar la vida de aquellos jóvenes contra esas espeluznantes criaturas.- En teoría debía haber podido observar un poco más pero ...mi poder se ha visto cortado repentinamente. Es como si alguna oscura fuerza sobrenatural que pende sobre todo el Castillo obstaculizara mis esfuerzos adivinatorios.- Mientras decía esto último miraba con solemnidad a Hattori pues era justo lo que se había temido con el draco.

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14/12/2017, 02:52
Serveris.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Al parecer, intentar escalar este muro no es la mejor idea. Aquellas criaturas parecen ser peligrosas y, por lo que consigue ver Koya con sus poderes, no debemos tomarlos a la ligera. Probablemente el no haber sido detectados es nuestra mejor y quizás única ventaja. 

Pero las palabras de Hattori me siguen dando vueltas en la cabeza. Me acerco al agua donde está en cadáver del draco marino, con desconfianza pues no sé si pueda haber algo en el agua que sea agresivo.

Pero la sensación que aquel anciano tuvo no es algo que se siente a la ligera. Mantengo mi mano sobre la tsuba de mi katana mientras miro hacia el agua y al espacio que hay más allá mientras el resto sigue pensando en como asaltar el castillo, tema al que poco o nada puedo aportar.

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14/12/2017, 08:22
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


Las palabras de la adivina, que confirmaban sus sensaciones y, para Propiedad Transitiva, certificaban que su idea de emboscar era la más apropiada, hicieron que el bárbaro soltara un seco "Ja", antes de asentir.

- Pues yo creo que eso nos deja en emboscada o emboscada. Como Hattori dice de mirar lo del cadáver del draco, y estar aquí plantados me parece un poco tonto dada la situación, voy a echar un vistazo. Propongo luego ir a emboscarnos en el lugar más oportuno, fuera de la vista del castillo en lo posible, cuando el rastro entra en el bosque. Pero ahora, miraré el cadáver no vaya a ser que tengamos otros problemas, y que los problemas se junten en el peor momento.

Y tras las palabras acompaña hasta el lugar a Hattori y a Serveris.

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14/12/2017, 08:55
Viejo Hattori.
Sólo para el director

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Hattori, que en su pensamiento no tenía que ocultarse de nadie, trepó con la imaginación la muralla con total sigilo y se acercó a aquellas criaturas aviares mientras dormían para eliminarlas. Se preguntó si podría hacerlo ahora, con los años pesándole sobre los hombros. Era una pregunta retórica ya que si lo hacía, se delataría ante el resto y eso era lo último que querría. Sin embargo, visualizar la situación y evaluar los posibles contratiempos, ejecutando en su mente la acción un centenar de veces hasta determinar el modo óptimo de proceder, tal y como le había enseñado su maestro, le ayudó a despertar sus antiguos conocimientos, su entrenamiento y su instinto.

Con más energía, al ver que Serveris se disponía a examinar los restos del draco marino, se dispuso a acompañarle.

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14/12/2017, 09:10
Viejo Hattori.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Hattori temió que sus palabras fueran desoídas pues realmente los restos del draco marino y los alrededores le habían dado muy malas sensaciones. No eran supersticiones, era algo real, podía sentirlo. Y las palabras de Koya no hacían sino acrecentar su temor y su interés.

Afortunadamente, ante la imposibilidad de acceder al castillo por ahora, Serveris tomó la iniciativa de examinar la carcasa del Draco. Kromdal le siguió de cerca y tras este avanzó Hattori.

-Es por aquí, junto a la orilla. Al este de la arboleda que se extiende a lo largo del flanco del castillo. Es una arboleda extraña, al igual que en el resto de la aldea, no se oye ningún ruido en ella. Ni siquiera el trinar de un pájaro.

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14/12/2017, 12:47
Kelsier Deznad.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya realizó algo en la puerta y volvió al poco, explicando lo que había visto tras ella. Parecía temerosa después de afirmar haber visto a aquellos hombres-ave, confirmando el hecho de que parecían ser una raza fuerte y temible. Por otro lado el que afirmara que subir no era posible pues iban a ser detectados de inmediato frustró la idea del joven de trepar y lanzar cuerdas al resto para que poco a poco subieran, colándose.

- Una emboscada no sería posible hasta mañana al mediodía - afirmó -. Según los rastros deben salir cada... dos días, creo yo, en busca de comida y retornan al anochecer - estimó después de haber estudiado las huellas meticulosamente -. Hoy no han salido, por tanto lo harán mañana. Parecen seres de costumbres fijas - informó para aquellos que tenían intención de emboscadas.

Kelsier se mordió el labio inferior, como cada vez que le asaltaban las dudas, cuando escuchó la intención de investigar el dragón marino y vio a varios dirigirse hacia sus restos.

- ¿Seguro que queréis mirar la carcasa? ¿Y si otro monstruo merodeara por ahí? Con eso tal vez hagamos ruido y los pájaros de dentro se alertarían - advirtió, no viendo prioridad alguno en arriesgar hasta que la misión de entrar y conseguir el cofre se hubiera realizado. Unos pajarracos en guardia harían imposible la entrada en la fortaleza.

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14/12/2017, 14:21
Vankor Dalmuvian.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

-Si Desna no viene a ti, tú vas donde Desna -dijo Vankor tras oír la sorprendente declaración de Koya acerca de la presencia de dos de aquellas criaturas y la obligatoriedad de una emboscada por parte de casi todos-. Quiero decir que... ¿por qué esperar hasta mañana? Podríamos provocar su salida ahora mismo. Estamos descansados y hay luz. Si hacemos noche, además de las guardias que no nos permitirán descansar completamente, nos arriesgamos a tener que enfrentarnos a saber con qué -su mirada voló en la dirección del draco que a tantos daba mala espina- y resultar heridos. Ellos por contra, no se esperan ninguna irrupción. Tal vez Kromdal y yo podríamos trepar y cuando salgan, sorprenderles por la retaguardia.

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14/12/2017, 16:50
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Aún reponiéndose del susto Koya apenas dio importancia a que los demás abandonaran sus posiciones para ir a ver los restos del draco. Las palabras de su querido Vankor la sacaron de su ensimismamiento.

- No había pensado en eso. ¿Estará bien Ameiko un día más? ¿Y si su estado empeora?Mmmm.- Se quedó pensativa. Además la idea de dejarlos salir y meterse dentro a hurtadillas ya no le gustaba. Si en su ronda de caza daban con el campamento Ameiko estaba vendida. Por mucho que no le gustara tener que acabar con la vida de un ser vivo debía aceptar que aquellos hombres-pollo no eran más que monstruos.- Ahora empiezo a verlo más claro.- Dijo elevando teatralmente la mano al cielo, como si estuviera recuperando la visión después de haber estado ciega.-No me ha dado mucho tiempo a observar, pero me ha parecido que la casamata es como un cuarto fortificado con doble puerta. Eso significa que hay otra puerta por dentro, y me ha dado la sensación de que esa podía estar abierta. Alguien lo suficientemente sigiloso, tal vez dos personas, podrían atacar a esas criaturas por sorpresa.- La idea demandar a uno de esos críos a una tarea tan peligrosa le hacía dudar. No quería tener la visión de sus rostros ensangrentados con las cuencas de los ojos vacías y sanguinolentas.

- O mejor aún. El breve momento en que he podido ver el interior de la casamata me ha parecido ver una palanca. Alguien sigiloso, y muy valiente, podría incluso entrar por la otra puerta de la casamata y bajar esa palanca antes de que los córvidos pudieran reaccionar. Sí, parecen cuervos humanoides. Eso nos permitiría a los demás lanzarnos a la carga. Combinado con el ataque por sorpresa, esto podría resultar realmente mortífero para esas peligrosas criaturas, aunque sin duda sería un plan arriesgado.

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14/12/2017, 17:05
Giorgino Vhiski.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DéCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Giorgino escuchó en silencio como cada uno de sus compañeros exponía sus ideas y no pudo evitar realizar un pequeño gesto de asentimiento ante las palabras de Vankor.

- Estoy de acuerdo - dijo calmadamente. - Estamos descansados y la sorpresa está de nuestro lado. Mi tío me ha enseñado que no se deben desaprovechar nunca las ventajas a tu favor - añadió.

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14/12/2017, 17:27
Vankor Dalmuvian.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DéCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Asintió a las palabras de Koya y Giorgino.

-Quizá si el sigilo es lo que se busca, Kelsier y Giorgino podrían trepar conmigo. Ya dentro, activaríamos la palanca y Kromdal y Serveris podrían cargar contra el enemigo.

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14/12/2017, 17:43
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DéCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya asintió pero se mordió el labio inferior. Sólo esperaba que esa palanca estuviese allí donde a ella le había parecido verla y no fuese una de esas graciosas bromas que Desna gastaba a sus más queridos fieles para demostrarles que el Destino nunca estaba escrito y que todo era posible.

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14/12/2017, 17:56
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


Propiedad Transitiva, que ya se había ido con Hattori y Serveris a ver lo que pasaba con el esqueleto del dragón marino, y a los que seguía Kelsier, no pudo evidentemente escuchar la conversación que mantenían Koya, Vankor y Giorgino sobre tal particular. El bárbaro estaba muy ocupado mirando hacia la zona que señalaba Hattori, el hacha firmemente agarrada, dispuesto a golpear con ella al primer signo de problemas.

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14/12/2017, 21:19
Kelsier Deznad.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

A penas había dado unos cuantos pasos para seguir a Hattori, Kromdal y Serveris cuando sus orejas suavemente puntiagudas se elevaron levemente, captando la conversación de Koya y Vankor. El muchacho se giró hacia ellos.

- He observado esa puerta. Es sólida, pesada... y de hierro. Está por muchas partes herrumbrosa y oxidada. En el momento en que se abra crujirá y rechinará y un notorio radio del castillo lo sabrá - apuntó -. Y no sabemos cuantos pajarracos más hay en todo el complejo - dijo sugiriendo la posibilidad de que unos cuantos más, aparte de los apostados en la puerta, podían morar la fortaleza y el empleo de la puerta bien podía significar una buena señal de alarma.

- Sra. Mvasthi, permitidme opinar - dijo el muchacho -. Si pretendéis asaltar el lugar sin contemplaciones, arrollándolo todo según venga, entonces abrir la puerta probablemente será una buena opción, pues atraerá a la mayor parte de enemigos. Mas, si pretendéis ir cazándolos uno a uno, como cazador, os diría que una emboscada en la arboleda sería una buena opción para disminuir su número antes de penetrar aquí dentro. Y si no deseáis esperar, entonces yo diría que TODOS arriesgáramos ascendiendo la muralla, sin causar ruidos. Los que no pudieran subir podrían ser alzados por los que ya lo han hecho con cuerdas. Y una vez dentro abordar a los enemigos de pocos en pocos, si es que tal cosa es posible - aconsejó -. Invariablemente, de una manera u otra, a mi ver, yo solo emplearía la puerta para salir de aquí, una vez salgamos con lo que la srta. Kaijitsu necesita, salvo necesidades de fuerza mayor, según las circunstancias - terminó de opinar.

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16/12/2017, 09:06
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

- No creo que las puertas hagan más ruido que esos córvidos gritando su agonía a los cuatro vientos.- Contestó a Kelsier. No le apetecía, para nada, que la subieran con una cuerda por encima de la muralla. Un paso en falso y...-La idea es abrir las puertas cuando comience el ataque para que los que nos quedemos fuera podamos ayudar a los que se hayan internado. Ya se me hace extraño que estos pajarracos estén viviendo aquí. No creo que haya más de los que has detectado. Este castillo debería estar abandonado. Pero entiendo lo que dices. Esperar aquí hasta que vayan a salir no me hace mucha gracia, sin embargo. Quizá podamos provocar su salida aunque perderíamos ese factor sorpresa.- La anciana se quedó sopesando las distintas posibilidades y tentada también de consultarle a Desna sobre cuál sería la mejor decisión a tomar. Cuando quiso darse cuenta se había quedado sola con sus más allegados, Giorgino y Vankor.

- Pero...bueno, la familia siempre unida, ¿eh? La curiosidad mató al gato.- Dijo mirando a los que se acercaban a los restos del draco, algo que habían descartado hasta la vuelta de conseguir su misión.- ¿Qué os parece si salimos de aquí en medio y nos ocultamos? Si por lo que fuera esos córvidos salieran a ver que hacen nuestros compañeros podríamos entrar en el castillo o seguirlos hasta pillarlos por la espalda.

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16/12/2017, 12:45
Vankor Dalmuvian.

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AVANZADA LA TARDE.

Se quedó junto a Koya, el ceño fruncido ante el comportamiento de los demás, obsesionados con aquellos restos y desatendiendo a su principal objetivo.

-La familia unida, sí. Y junto al líder de esta expedición, también -dijo ácido, para luego seguir murmurando por lo bajo.

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16/12/2017, 12:47
Vankor Dalmuvian.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

-Koya, ¿y si aprovechamos la ocasión que nos brindan con su comportamiento? -preguntó Vankor-. Puedo lanzar unas piedras contra la puerta, llamando su atención. Cuando salgan, irán tras ellos que además se habrán vuelto hacia el ruido. Tras eso, salimos Giorgino y yo tras los pajarracos y los pillamos por la espalda -dijo. Sabía que era un comportamiento trapacero, pero se sentía molesto con la actitud del resto, que dejaba de lado lo importante para centrarse en un potencial botín o en cosas sin importancia que Koya había relegado expresamente a su regreso tras cumplir con su objetivo.

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16/12/2017, 20:12
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya era una mujer de carácter y con gusto haría lo que Vankor proponía. Pero la edad que pesaba como una losa sobre sus hombros la hacía ser más reflexiva que en su juventud.

- No podemos hacer eso.-Muchas cosas podrían salir mal en ese plan, aunque no es que ella tuviera uno mucho mejor.-Esperaremos pacientemente.- Su mirada se desvió hacia su nieto quien, precisamente, paciente no era.- Veamos qué acontece. Si no vuelven rápido no te digo yo que no cambie de opinión y no les demos un escarmiento.- La mujer rebuscó en su zurrón su mazo de cartas.- Sed buenos y acompañadme a un lugar seguro en caso de que esos pajarracos salgan del nido.

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16/12/2017, 21:05
Giorgino Vhiski.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

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AVANZADA LA TARDE.

Giorgino escuchó la nueva propuesta de Vankor asombrado porque el carretero pudiera plantear esa idea. Afortunadamente, la vieja adivina expresó su desagrado antes que él.

- Yo tampoco creo que esa sea una buena idea, Vankor - comenzó a decir - aunque estoy de acuerdo en que es necesario hacerlos salir de su escondite, no me parece que utilizar a nuestros compañeros como cebo sin que ellos lo sepan sea lo correcto - añadió señalando hacia donde se encontraba el resto del grupo.

Giorgino ve como Koya busca un lugar más cubierto para no estar a simple vista. Tal vez no sea mala idea prepararse para emboscarlos... pero debemos trabajar todos juntos para lograr nuestro objetivo... pensó.

- Oye Vankor, salte del camino y ponte a cubierto; si esos pajarracos deciden salir, estaremos listos para desplumarlos...