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El Regente de Jade I: El Legado de Muro de Salmuera.

Regente de Jade: 3- Aldea de Muro de Salmuera.

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24/12/2017, 02:44
Vankor Dalmuvian.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

La criaturilla, tal y como había aparecido desapareció. Su conversación con Koya era un misterio aunque parte de ella o quizá su totalidad fue despejada por la anciana. Fuera como fuera, poco imporataba a Vankor que ante las siguientes palabras, asintió, no sin antes dirigir una mirada a Kelsier de impreciso significado aunque una mente ágil hubiera descifrado claramente la misma. Miró a la pitonisa por un breve instante. Le hubiera gustado que Koya le leyera la mente. Aquel grupo parecía afectado por un extraño mal, según el cual, a una posición seguía otra totalmente contraria. Quien afirmaba una cosa en un momento, al siguiente variaba de opinión sin argumento válido. Y quien llegaba a criticar un acto, obraba en el siguiente según lo criticado. Sacudió la cabeza, despejando tan funesta idea.

-Yo mismo subiré Koya. Ahora mismo -dijo encaminándose a la pared y comenzando su escalada.

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24/12/2017, 12:15
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


Tenía ganas de maldecir. Infructuoso había sido el combate, y para nada había servido cargarse a ese par de carroñeros que, para colmo, le habían dejado una bonita herida. Nada grave, es cierto, pero era posible (muy posible) tener nuevos enfrentamientos y las heridas sin tesoro eran como una comida sin sabor: ni estaba rica, ni agradaba, ni parecía servir para nada.

Murmurando entre dientes, cabreado con el mundo, con los dioses que jugaban con su percepción, y hasta con Hattori cuyo deseo de investigar no había servido para nada, Propiedad Transitiva empezó a regresar donde estaban la adivina y el resto del grupo, charlando a ratos con Serveris cuando vio a la criatura, y casi se quedó con la boca abierta. ¿Cómo alguien tan frágil podía estar en un sitio como este?

Los bichos esos carroñeros se la hubieran podido comer de un bocado.

Era, sin embargo, bonita, de alguna manera. Le resultaba agradable, y el que pudiera comunicarse con Koya, sin duda, era una buena noticia. Propiedad Transitiva dejó que ambas mujeres (¿porque el hada era femenina, no?, y la adivina evidentemente también lo era) charlaran en aquel idioma extraño que parecía más el sonido de los pájaros que una lengua, y cuando la pequeña criatura se acercó a él, el bárbaro la miró curioso, aprovechando para mirar más de cerca a alguien tan peculiar. No se resistió al contacto, más por curiosidad que por otro motivo, y al notarse curado silbó admirado, para luego sonreir al hada (o lo que fuera) y asentir con la cabeza.

- Te debo una.

Al ver como el ser se marchaba, asintió a las palabras de Kelsier pero, viendo ocmo Vankor, solo, iba a empezar a escalar la muralla, se mueve hacia esa zona mientras vuelve a rezongar entre dientes.

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24/12/2017, 13:02
Vankor Dalmuvian.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Conforme subía, se volvió un instante hacia Kelsier para ver si lo seguía.

-Kelsier, coge la cuerda de Serveris. Nos vendrá bien -susurró.

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24/12/2017, 13:08
Kelsier Deznad.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Kelsier observó cómo Vankor lo miraba y no supo que pensar, excepto que él púgil iba a subir primero, sin contestación, y el muchacho asintió. Observó con cuidado cómo fue escalando, agarrándose a matojos saliente de los recovecos y metiendo pies y manos en diversas imperfecciones o agujeros en la muralla. El explorador fue asintiendo en silencio conforme el monje hacía uso de varios de esos recursos que anteriormente él había detectado cuando examinó la muralla. Vankor también los había visto.

Repentinamente el escalador giró la cabeza y miró al suelo, concretamente hacia él, susurrando algo. Sus orejas élficas se elevaron y captó el mensaje. Como toda respuesta el joven se palmeó el pecho, a la altura por donde se cruzaba su propia cuerda, de buena calidad y liviana, asintiendo con la cabeza de todos modos a la demanda del monje.

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24/12/2017, 19:34
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

- No hay de qué.- Respondió Koya al bárbaro pensando que sus agradecimientos iban a ella pro haber conseguido que la fata lo curase. Después Vankor comenzó la escalada no sin antes bendecirlo con las gracias de Desna. El joven tenía un cuerpo portentoso y lo utilizaba como pocos en la escalada. Se sentía orgullosa de él. Se acercó a Kelsier para susurrarle.

- Ahora tú, Kelsier. - El semielfo era extremadamente juicioso y eso era una buena mezcla junto al impetuoso Vankor.- Después Gigi...ejem...Giorgino.- Su nieto ya se estaba haciendo todo un hombre.-Comprobad que hay un mecanismo para abrir la puerta. Si es así hacednos una señal y los demás esperaremos aquí a que abráis las puertas. Si no, avisadnos y subirán los demás. Yo no creo que pueda hacerlo.- Era una vieja chocha y no era la única. La verdad es que pensaba que Hattori tampoco podría hacerlo pero tampoco le había creído capaz de sacar el corazón a alguien. Con ese pequeño arco parecía ridículo peor desde luego no era así su puntería.

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24/12/2017, 19:59
Viejo Hattori.

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DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Hattori miró con cierta aprensión la altura de la muralla. El viaje lo había fortalecido y sus articulaciones habían demostrado ser más flexibles y resistentes de lo que esperaba él mismo dada su edad. Quizá pudiera trepar la muralla. Realmente se sentía capaz después de haber ayudado a abatir a los garracifes, pero también estaba seguro de que sus viejos huesos no soportarían una caída en caso de que le fallase el pulso al trepar. Su esqueleto se quebraría como los añicos de vidrio que acababan de ver en la vieja fábrica. Y aún así lo intentaría por Ameiko Kaijitsu-sama. Lo intentaría todo por ella.

Miró a Koya Mvashti-sama y asintió silencioso. Si no había mecanismo de apertura, Hattori treparía.

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26/12/2017, 02:05
Kelsier Deznad.

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DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Cuando Koya le hizo saber que debía esperar a que Vankor le arrojara una cuerda para escalar con mayor facilidad, el muchacho la miró un instante incrédulo. Carraspeó suavemente para llamar su atención y se señaló al centro del pecho tocándose la cuerda que cruzaba por su torso y dando a entender que, ahora mismo, esa era la cuerda más cercana a Vankor.

- O se la arrojamos, esperando no pasarnos ni quedarnos cortos, algo que podría alertar a los pájaros, o la subo conmigo y una vez arriba la ato a una almena y la arrojo para el resto - susurró a los presentes.

- Yo... yo confío en que podré subir con ella - inició dubitativo el joven, logrando entereza en su afirmación final -. Si lo aprobáis, dadme vuestra bendición y subiré, Sra. Mvasthi - pidió con determinación a la anciana, antes de alzar de nuevo la mirada y observar si Vankor hacía señales para que subiera el siguiente o por el contrario que esperaran.

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26/12/2017, 02:29
Serveris.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Sigo caminando hacia el resto del grupo, cuando veo que la conversación con aquella extraña mujercita termina y vuela hacia el sureste. De pronto, veo como Vankor comienza a subir por la muralla y apuro el paso para llegar a hablar con los ahí presentes sin necesidad de subir la voz:

 - "¿No habíamos quedado en que esto era muy peligroso? ¿Qué los hizo cambiar de opinión?"

Miro a la mujercita volando y pregunto:

 - "¿Y ella no conocía otra manera de entrar menos riesgosa?"

La verdad es que como no sé hablar aquel extraño idioma en el que se comunicaron, no sé de qué hablaron ni qué pudo Koya obtener de ella, pero me imagino que una cosa así de pequeña y veloz ha podido explorar de forma sigilosa todo el lugar varias veces y ha de saber mucho más que nosotros del pueblo y del castillo.

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26/12/2017, 09:45
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya miró a Vankor allá arriba, luego miró a Kelsier, allí abajo, a su lado, repitió el movimiento un par de veces y cuando comprendió lo que el muchacho le decía se palmeó la frente con la palma de la mano. 

- Anda sube tú la cuerda.- Le hizo gracia como le pedía las bendiciones de Koya y con una sonrisa y una suave caricia en su lampiña mejilla se las dio.

Serveris preguntaba si la fata no le había dicho nada acerca de cómo entrar de una manera menos peligrosa pero Koya negó con la cabeza.

- Sólo me ha dicho que era sanadora de Desna, que nos había estado observando y que somos bienvenidos en el cementerio. De alguna manera parece ser una zona segura. - Ahora que Vankor ya estaba allí arriba y que lo había hecho tan bien, si no se contaba el pequeño olvido de la cuerda, ya no había vuelta a atrás.- Sois jóvenes e impetuosos.- Se justificó Koya ante el cambio de plan.- Parece que no podéis estaros quietos mucho rato seguido.- Hacía referencia al incidente que acababa de tener lugar en el que el bárbaro shoanti había vuelto herido vete tú a saber el porqué.- Ah y ruidosos.- Guiñó un ojo al estirado tien. Hasta en momentos así, tan tensos, bromeaba Koya.- Me preocupa que el tiempo juegue en nuestra contra, con respecto a Ameiko.- Esa era la verdadera razón para apresurarse y tomar más riesgos.

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27/12/2017, 17:33
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


No era Propiedad Transitiva el hombre más listo, y mucho menos, el más astuto. Era, en ambos casos, del montón. Pero varias cosas sí tenía claras: que era estúpido decirle a una bruja (o adivina o como las llamaran aquí) que no le daba las gracias a ella, y que si una mujer cambiaba rápido de opinión era para darle o quitarle la razón al hombre que le gustaba. Así que con una prudencia que hubiera hecho enrojecer a sus mayores asintió, con cierto aire ladino, y se quedó mirando como Vankor ascendía. 

Quizás, sólo quizás, se preocupó al ver que eran luego Kelsier y Giorgino quienes debían subir. Tenía el bárbaro la idea probablemente estúpida que todos eran unos críos, majos, y buenos combatiendo, pero que no debían ser dejados solos ante el peligro. Pero él no era el jefe. Así que a esperar tocaban.

No pudo sin embargo callarse ante las palabras de la adivina respecto a si no podían estar quietos, y ser ruidosos.

- Había dos enemigos a nuestra espalda. Dos especies de sabandijas parasitarias en el cuerpo del dragón marino. Y ahora no están. Hattori lo descubrió y pidió nuestra ayuda para eliminarlos- no había mucho más que decir, y no hubiera dicho nada más pero recordó a la que le había sanado- ¿Era algún tipo de hada?- preguntó a Koya mirando a por donde se había marchado- ¿Hay algún regalo que guste a la gente como esa?.

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28/12/2017, 03:12
Serveris.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Koya indica que la criatura es una clérigo de Desna y que nos recibiría en el cementerio para descansar en un lugar seguro. Ahora entiendo como fue capaz de sanar a Kromdal y el tema del agua bendita en el cementerio, así como lo bien cuidado que parecía estar. Me saco el sombrero de paja y me rasco la cabeza antes de preguntar:

 - "Supongo que no es amiga de los pájaros esos. Quizás podríamos ir a preguntarle si sabe algo más o si nos puede ayudar de alguna forma. Sus dones de sanación no estarían de más si las cosas se ponen feas."

Pero la verdad es que no conozco su idioma y no sé si puedo hacer que me entienda. Al parecer, es Koya la única que puede hablar con ella para ver si podemos conseguir algo. Miro en dirección al cementerio pues ni siquiera sé si esa criatura tiene nombre, aunque supongo que si es capaz de ser clérigo y hablar, de seguro debe tener identidad.

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28/12/2017, 13:47
Koya Mvashti.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

- ¿Enemigos?- Dijo incrédula Koya ante lo descrito por el bárbaro. Se preguntó si de donde venía el shoanti todo lo que se movía era un enemigo. Pero bueno, no iba a ponerse a discutir allí y ahora. Serveris miraba inquieto hacia el cementerio así que trató de tranquilizarlo un poco.

- No me dijo mucho, ni siquiera su nombre. Pero parecía conforme con que lucháramos contra esos córvidos.- Era demasiado tarde para volver y preguntarle. Kelsier y Vankor ya estaban arriba echándoles un cabo. Ahora la que parecía inquieta era la anciana. Ni por todo el oro del mundo, y mira que le gustaba el oro, iba a trepar por esa cuerda hasta tan arriba. Pero, ¿y si no hubiera un mecanismo para abrir las puertas?

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28/12/2017, 14:19
Viejo Hattori.

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AVANZADA LA TARDE.

Con sus sencillas ropas pardas, la curtida piel pálida y su pelo blanco, con la paciencia de su avanzada edad, el pequeño tien se mimetizaba con el color ocre de la muralla. Su respiración era superficial y su quietud absoluta, esperando junto a la puerta con una flecha colocada en el arco listo para ser tensado.

No miraba a los jóvenes trepar por la muralla, sus ojos estaban fijos en la puerta y su atención centrada en su oído. En el extraño silencio del lugar, los únicos sonidos eran los que producían al trepar y la conversación de Serveris-san con Koya Mvashti-sama. Ambos sonidos casi imperceptibles.

Kelsier Deznad-sama y los demás que treparon por la muralla parecían moverse con holgura en las almenas. Quizá la mejor opción era que se infiltrasen en el castillo sin dar la alarma, en vez de tratar de abrir la puerta. Pero ya era tarde para hablarlo. Habían pasado al tiempo de la acción. Hattori salió un momento de su quietud para dirigir una mirada a Kelsier Deznad-sama y después a Koya Mvashti-sama por si le indicaban que hiciera algo.

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28/12/2017, 15:46
Kelsier Deznad.

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AVANZADA LA TARDE.

Se ruborizó levemente al sentir el contacto de la anciana en su mejilla, pero este le proporcionó una autoconfianza desmedida sobre su capacidad de trepar. Caminó hacia la muralla, quedando junto a ella, y elevó la mirada mirándola con detenimiento, estudiando sus formas y memorizando los posibles asideros. Cerró los ojos, exhaló profundamente, volvió a abrirlos, llenos de determinación y comenzó a trepar con inusitada agilidad.

Durante unos instantes recordó imágenes de su infancia, trepando los árboles bajo la atenta mirada de su tía Clara y en ocasiones de Shalelu. Siempre procurando no decepcionarles, al igual que ahora a sus compañeros, y antes de darse cuenta la mano de Vankor le ayudaba a pasar por las almenas, con total silencio.

El muchacho apenas perdió tiempo observando el interior de la fortaleza. Primaba el subir al resto cuanto antes. Si eran descubiertos y estaban separados, supondría un gran inconveniente.

El púgil le susurró sobre atarle a la cintura la cuerda que el explorador portaba consigo para tirar de la gente. Kelsier dudó, pero finalmente negó con la cabeza, atando la cuerda a una almena y luego arrojándola hacia abajo.

- No arriesgues, Vankor. No dudo de tu fuerza pero algo puede salir mal y tú verte arrastrado hacia abajo con algún compañero que trepa - le susurró al monje -. Esta almena parece muy sólida y debería aguantar cualquier cosa. Mientras tanto ambos podemos tirar - le propuso.

Poco después, ambos estaban preparados para alzar al resto del grupo.

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29/12/2017, 00:01
Vankor Dalmuvian.

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DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

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AVANZADA LA TARDE.

Había trepado con notable agilidad y aceptable sigilo. Situado entre las almenas había esperado a que este subiera y le habí ahablado, pero este parecía haber malinterpretado su mensaje.

-Ellos son los que deben atarse la cuerda a la cintura. Si por lo que fuera, perdieran pie, nosotros los sujetaríamos impidiendo que cayeran. No tiene sentido atarme yo la cuerda. El riesgo de caer ambos es elevado -susurró mirando seriamente al semielfo-. Y debemos tener especial cuidado con Koya. No debe correr riesgo alguno ni accidente que la deje en un estado que no pueda seguir.

Tras su breve alocución, vio que Giorgino se aprestaba a subir. Cuando empezó a trepar sus brazos se tensaron tironenando de la cuerda para que su ascenso fuera más sencillo. Hattori y Koya esperaban abajo. Pero antes de que Giorgino subiera, señaló a Hattori para que este fuera el siguiente.

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29/12/2017, 00:46
Kelsier Deznad.

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AVANZADA LA TARDE.

Oh, claro. Eso tiene sentido, pensó el joven medioelfo dándose una silenciosa palmada en la frente y asintiendo al varisio. Escuchó lo que Vankor tenía que decir y volvió a asentir.

- Tal vez... podríamos subir a Koya con dos cuerdas - afirmó susurrante recordando la cuerda que aun tenía Serveris -. Una por la cintura y la otra por las axilas. Luego vamos tirando acompasadamente de ambas cuerdas, paralelas, evitando en mayor medida que la Sra. Mvasthi roce contra la muralla y se dañe - sugirió en voz baja.

Acto seguido siguió la atención del púgil hacia abajo: Giorgino se disponía a subir. Agarró la cuerda con fuerza y se dispuso a tirar junto al monje.

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30/12/2017, 09:31
Koya Mvashti.

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AVANZADA LA TARDE.

Koya vivía feliz en la ignorancia sobre lo que los dos escaladores, los que ya estaban en las almenas, pretendían para con ella. Por nada del mundo pensaba subir allí arriba, ya usaran una, dos, o cien cuerdas para elevar su liviano y frágil cuerpo por el aire. De los que quedaban con los pies en la tierra esperaba que Giorgino fuera el siguiente, siempre tan solícito e impetuoso. Sin embargo Hattori, el único que competía con Koya en edad, fue el que parecía más preparado y dispuesto. Koya asintió al viejo tien e hizo en el aire unos cuantos gestos con la mano para darle su bendición. Una bendición que no era más que un placebo, al contrario que la que había lanzado a los dos jóvenes. No podía abusar del poder de su Diosa sino que debía administrarlo con quien ella considerara oportuno.

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30/12/2017, 14:33
Viejo Hattori.

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AVANZADA LA TARDE.

No sintió nada especial cuando Koya Mvashti-sama le obsequió con la bendición de Desna. Tenía la idea preconcebida de que sentiría algo, pero no fué así. En cualquier caso se dirigió decidido a la cuerda y empezó a trepar confiando más en la bendición que en la fuerza de sus brazos. La primera mitad de la escalada le resultó algo cansada, pero no fue hasta llegar a la mitad que sintió una contractura en el hombro derecho y en el biceps izquierdo. Contuvo un gemido y cerró los ojos. No sabía que a su edad los músculos se pudiesen quedar cogidos con tanta fuerza. Hizo un gesto a Kelsier y Vankor para que se detuvieran un momento. Miró hacia abajo, comprobó que ya llevaba más de la mitad y no podía dejarse caer. Se apoyó con los pies en los huecos de la muralla para descansar hasta que los cuadriceps comenzaron a temblarle de la sobrecarga. Entre el martirio de la contractura en ambos brazos y el sobreesfuerzo de las piernas, se sentía incapaz de seguir adelante y también de descender. Desde lo alto de la muralla se hicieron cargo de la situación y comenzaron a izarlo como a un cordero.

Ya en las almenas se quedó sentado contra la piedra, con las rodillas flexionadas contra el pecho, tratando de recuperar el aliento y estirar los brazos para relajar las contracturas. Hizo un gesto de agradecimiento a Vankor-san y a Keliser Deznad-sama. Estaban sobre las almenas y no habían sido detectados. Eso era lo único importante.

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30/12/2017, 20:35
Kromdal.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.


Era verdad que Propiedad Transitiva, tras su última conversación al respecto con el jefe, ya se veía más como un asociado que como un contratado, por así decirlo. Pero seguía teniendo alma de mercenario. Oh, claro. Estaba encantado de pelear, y combatir, pero le parecía perfecto dejar a otros el peso de la responsabilidad.

Con lo que miró a Koya, miró al lugar por donde había subido el resto, y esperó por si la anciana quería que subiera él.

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02/01/2018, 23:59
Viejo Hattori.
Sólo para el director

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DíA DEL FUEGO, DÉCIMO QUINTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

AVANZADA LA TARDE.

Cuando recobró el aliento y sus músculos volvieron a responderle, echó un ojo a su alrededor. Por un lado quería localizar el mecanismo de apertura de las puertas, pero por otro quería hacerse una idea de la situación. No había olvidado sus años de entrenamiento y esta era el tipo de situación para el que estaba preparado. Podía infiltrarse en aquel castillo, encontrar la caja custodia y salir sin que nadie sospechase que estuvo dentro alguna vez. No sabían cuantas de esas criaturas había en el castillo y quizá no fuesen suficientes atacantes para derrotarlas. A Hattori le desagradaba que sus compañeros pudieran ser derrotados y perdieran la vida, pero sus vidas no eran nada comparadas con la de Ameiko Kaijitsu-sama. Pronto se tendría que separar de ellos y buscar la caja custodia, pero por ahora, les seguiría el juego.