Partida Rol por web

[ELdG]Brumas en lo más profundo

Día 26 del Éxodo - La Larga Marcha

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25/05/2016, 02:41
Flame

Flame se quedó atónita al ver como el dragón rojo que estaba allí se iba consumiendo lentamente. No podía creerse que la gente, incluida ella, estuvieran dejando que un ser de tan excesiva belleza se estuviera muriendo. De pronto los gritos de Aire le sacaron de la terrible pena que sentía al observar semejante panorama. "Quedarselo, decía la niña Aire, que buena idea sería esa". Afortunadamente, la chica dragón se llevó las manos a la cara para que nadie la viera llorar de pena. No lo había hecho últimamente, y mucho menos delante de nadie. Pero en el fondo, ella se sentía muy identificada con el gran dragón, y más con la bruma tan cerca. Hacía tiempo que Flame se sentía cada vez más consumida. Más agotada. Más cansada. Y a punto estuvo de contestarle en su mismo idioma, para darle unas palabras de ánimo, pero no valdría la pena...

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25/05/2016, 08:24
Alice

El viaje será una espléndida historia que contar a mis nietos al calor de la chimenea. ¡¿Nietos?! Eso implicaba tener hijo, y los niños eran pequeños demonios criados en las más profundas capas del averno. Dentro de los planes de Alice para convertirse en la maga más poderosa y rica del mundo no había ninguna referencia a tener hijos. De modo que cambio su línea de pensamientos. Será un espléndido capítulo dentro del libro que me hará famosa y rica.

El dragón a punto de morir le recordó el encuentro con el ángel y con los viejos, parecía que todo el plano estaba lleno de sufrimiento y desgracia.  Pero lo que verdad le preocupaba eran las nieblas, esas nieblas que venían persiguiéndoles desde su primer encuentro en las tierras de Barobia. No me gustan nada esas nieblas, siempre atraen el mal y la destrucción, y parece que nosotros las atraemos.   

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25/05/2016, 11:28
Onfale

Durante el viaje el perfumista lanzaba suspicaces miradas a sus dos compañeras, Leiath y Alice.  No le gustaba nada que Becky, de la que siempre sospechaba, hubiera acabado, casualidad o no, con el grupo de Arpanhoe. Un grupo guiado, extrañamente, por el Mane, del que tampoco se fiaba un pelo.

- Mmmmmmm. - El mago se acariciaba la lampiña barbilla tratando de encontrar una respuesta a sus dudas. 

Los peligros y situaciones de riesgo que había sufrido desde que fuera empujado al abismo entre las brumas por la gitana vistani habían hecho que Onfale casi olvidara la niebla. Ahora que desde las alturas volvía a verlas le invadió un sentimiento extraño. Muchos recuerdos se agolpaban en su cabeza aturullando su mente.  El encuentro con Fosco y Nikeras, los lobos, el hambre...

- Parece que ni en este plano detienen su avance.- Acompañó así con su propia opinión los comentarios de los demás.- ¿Qué se sabe de esas brumas?- Preguntó a su guía aprovechando que no estaba el Mane.- No tienen buena pinta.- Se hizo el tonto como hacía Leiath.- ¿Es otro medio de defensa de Orkus?

Estaba cansado de ayudar a la gente. Sólo Leiath parecía incombustible al respecto, inspirada siempre por su fe ciega en Hala. Cada vez que trataban de ayudar a alguien se metían en problemas mayores. Esta vez no movería un dedo. Observó el espectáculo de la desintegración del bello ejemplar dracónico como una metáfora de lo que podría ser el fin del imperio de Orkus en el Thanathos.

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25/05/2016, 21:46
Muerte-disco

¿La niebla? Hohohoho... Estáis un pelín nerviosos, ¿no? Si bien no es frecuente que haya niebla en Thánatos, tampoco es imposible. Vale, sí... tanta cantidad es tope preocupante. Pero aunque no nos podamos guiar por la vista, los mastines sombríos podrán llegar a nuestro destino gracias al olfato.

El trineo conducido por Muerte-disco siguió su curso. Un par de horas después, por culpa de la bruma, el que guiaba el Mane se había perdido de vista.

¡MAAAANEEEEEE!

En la inmensidad del páramo de hielo, la respuesta del Mane sonaba lejana. En la dificultad de la bruma, los dos trineos se habían separado. Muerte-disco tiró de las riendas y los mastines sombríos frenaron poco a poco hasta detenerse.

Escuchadme bien, voy a ir a buscar a mi colegui, ¿dabuti? Quiero que me esperéis aquí. Vuelvo enseguida.

Muerte-disco giró el quinqué que apagaba y encendía el escudo de fuego, y las llamas del perímetro se extinguieron. El guía se apeó, metiendo su mano bajo su abrigo rojo y urgando dentro. Un segundo después sacaba una ristra de tripas.

¿Qué? No, tranquis... Estos intestinos no son míos. Es una cuerda de tripas de troll. Se alarga hasta los quinientos pies. Como soy todo huesos, a veces guardo cosas útiles dentro de mis costillas.

Ató la cuerda a su cintura, y el otro extremo a uno de los soportes del trineo. Se dirigió una vez más a los pasajeros.

Los trolls son vulnerables al fuego. Si encendéis el escudo de fuego del trineo, la cuerda se romperá, troncos, y no podré volver a por vosotros. ¿Capichi?

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25/05/2016, 22:59
Aire

Pues no entiendo por qué nos lo dice, parece que quiere que pongamos fuego dijo una inocente Aire mientras alzaba a Aristóteles por todo lo alto, para ver si veía algo más. No se ve nada, nos vamos a perder si no vuelve. Echó la vista atrás y recordó al dragón. ¿Creéis que seguirá vivo? dijo con pena mientras acariciaba la caricia de su osito. Seguro que no se lo merecía, sólo quería volar

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26/05/2016, 01:34
Flame

El hecho de que Muerte-disco les dejara solos le hizo ponerse de nuevo en alerta. Se puso en pie y desenfundó a Ayash, la espera no le gustaba ni un pelo, y su estado máximo de paranoia le provocaba más y más agobio. Estaba nerviosa y mucho, pero no sabía qué hacer, ni tampoco quería retransmitirselo a los demás, aunque quizá, solo con observarla, ya sabrían que algo rondaba sus pensamientos.

Tened cuidado. Se atrevió a decirle. Todo esto no me da buena espina. Dijo diciendo algo más que evidente. La bruma no le gustaba, y el hecho de que su piloto no les hubiera dado ninguna información sobre ellas le gustaba aún menos. Lo mejor era estar alerta y precavidos, por si acaso.

- Tiradas (1)

Motivo: Avistar

Tirada: 1d20

Resultado: 9(+2)=11

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26/05/2016, 01:53
Tybalt Marr

Como al resto de los pasajeros del trineo, Tybalt también se quedó asombrado por la visión del gigantesco dragón y consternado por el implacable destino. No pudo evitar sentir cierta empatía por un ser que también estaba huyendo de una vida de esclavitud. Sin duda resultaba temible que alguien pudiese retener en contra de su voluntad a semejante criatura aunque también resultaba de alguna manera alentador si lograban usar esta información en su favor. -¿Como de razonables son los dragones?- Le preguntó en un susurro a Onfale. El eunuco siempre había mostrado un considerable conocimiento de las criaturas que se habían ido encontrando y quizás también supiese algo de esos gigantes alados.

En otro orden de acontecimientos, el extravagante esqueleto intentaba apaciguar el desasosiego que la Bruma parecía causar en algunos. Y, pese al esfuerzo, la espesa niebla resultó ser una molestia a tener en cuenta. Su piloto detuvo el transporte para encontrar al Mane y así desapareció entre la bruma sujeto por esa curiosa cuerda. Aire regresó a su versión más infantil siendo tentada de boicotear el sistema de seguridad del esqueleto para regresar al trineo. -No creo que ganemos nada dejándolo a su suerte. Piensa que si nos saca de esta niebla quizás veamos otro dragón, ¿Sí?- Le dijo a la bipolar maga esperando despertar otro interés que no fuese condenar a su chófer.

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26/05/2016, 06:09
Leiath

No, no te vayas!- la bruja saltó alarmada cuando su guia les dijo que les abandonaría en aquella niebla.

Bien sabía, al contrario que el inmundo esqueleto por lo que parecía, que aquella niebla no era normal y no se iría. Hasta podría salir un monstruo que se merendase al horrendo ser huesudo y simplemente les dejase sin conductor ahí tirados.

- Tu responsabilidad es llevarnos a ver a Orkus no ir salvando nenas por el camino! Llevanos primero a nuestro destino luego puedes ir a buscarlos.

Aunque intentó sonar autoritaria, seguramente no le haría ni caso.

- O al menos dinos como llegar si a tí te come un dragon de esos que deambulan cabreados por aqui!

Leaith había visto casi con satisfación como el enorme dragón era exterminado. La leyendas decían que eran unas de las criaturas más malvadas que hubieran existido nunca, asi que dragón rojo muerto, dragón bueno. Pero seguía aún por ahí y todavía podía hacer mucho mal. Y si no era él, cualquier otro monstruo salido de la mágica niebla acabaría con todos ellos. La cosa pintaba mal.

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26/05/2016, 18:59
Muerte-disco

La petición de Leiath era razonable. El olfato de los mastines sombríos asignados al Mane debería ser suficiente para que el otro transporte llegase también a la Puerta de Orcus.

Okey makey, vayamos primero a nuestro destino, y si llegamos antes pediremos que envíen dragones a buscarles. Venga, continuemos.

Muerte-disco guardó la cuerda de tripas de troll y volvió a levantar el escudo de fuego. Agitó las riendas, y los sabuesos volvieron a poner en movimiento el trineo. Veinte minutos después, un gran objeto a toda velocidad les sobrevolaba la cabeza, y aterrizaba detrás de ellos levantando la nieve en el impacto.

¡Maldita sea! ¡Odio esta niebla! Me obliga a volar bajo y me cuesta maniobrar.

El recién llegado era un dragón rojo, joven y más pequeño (poco más grande que un caballo) que aquel que vieron agonizante en la lejanía. De hecho, si no llega a ser por las palabras de Leiath, es posible que se hubiesen encontrado con el dragón joven cuando su guía estaba ausente. Muerde-disco frenó a los mastines.

Hohohoho... ¡Que la noche te sea buena, amigo dragón! Quiero decir... Hail Orcus-dijo a modo de contraseña-. Llevo a los campeones del Torneo de la Calavera a ver a Orcus. En la guantera del trineo tengo los papeles que...

El dragón alzó una de las patas delanteras, y movió una garra. Mágicamente, la guantera se abrió sola. Con otro movimiento de garra, un poco distinto, la credencial salió flotando por el aire, como con una mano del mago. El pergamino se desplegó ante su escamosa cara roja.

El otro trineo se separó con la niebla. Está aproximadamente en esa dirección. Puede que necesiten ayuda para llegar. Si haces el favor de ir a por ellos...

Fuuuh. ¿Es que crees que soy una niñera?

El pergamino regresó flotando hasta Muerte-Disco. A pesar de su indolencia inicial, el dragón giró sus pisadas en la nieve para encarar la dirección en la que estaría el trineo del Mane. Muerte-Disco no mencionó, por contra, la ubicación del dragón moribundo.

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26/05/2016, 19:45
Onfale

- Espe...ra.- La última sílaba se ahogó en la boca del mago. Al final Mundo-Disco se fue sin que el perfumista lo detuviera. Quizá Hala propiciaba aquella situación para que lograran romper la Rosa de Laón. Si activaban el escudo de fuego como habían visto hacer a su guía podrían romper la cuerda que les unía a él y ponerse a los mandos del trineo. Con miradas suspicaces susurró a sus compañeros.- Yo podría disfrazarme de Mundo Disco.- Su cabeza le daba vueltas a la idea. El sería el guía y hasta podrían deshacerse de la caja con el calamar monstruoso que quería devorarle el cerebro. Lo único que le hizo dudar fue no saber hacia dónde dirigirse y las brumas, las malditas brumas. 

¿Qué significaba todo aquello? ¿Acaso no conocían en el Thanathos de lo que eran capaces esas brumas? Eso le recordó que sus nuevos compañeros tampoco las conocerían. Cuando Tybalt le preguntó por los dragones decidió ilustrarles también sobre las brumas.

- Cuidado. Esas brumas no son una niebla cualquiera como hayáis podido ver en vuestra vida. Son un ente demoníaco en sí mismo creado por un poderosísimo hechicero. Al menos eso imagino. En su interior se amparan ,entre sus densas brumas, los más terroríficos monstruos. Cuando vinimos del otro plano éramos perseguidos por esa misma niebla. Parece extenderse sin que nada pueda detenerlas.- Al final sus extensas explicaciones y sus momentos de dudas hicieron que Leiath lograra hacer que su guía se quedase. Ya no podría poner en práctica su plan. Librarse de Mane, Becky y Mundo- Disco de un sólo golpe era demasiado bueno para ser verdad.

- Tiradas (1)

Motivo: Saber dragones rojos

Tirada: 1d20

Resultado: 6

Notas de juego

ahi dejo la tirada de saber de los dragones para luego aplicar el bono correspondiente.

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26/05/2016, 22:08
Aire

El Mundo-Disco decidió no irse tras las palabras de Leiath, así que Aire se quedó sin probar lanzar fuego sobre esa cuerda de tripas de trol, a ver si era cierto lo que había dicho el esqueleto. Se volvió a sentar quietecita en el trineo, de brazos cruzados. No le gustaba nada esa niebla. Allí había dragones y ella no podía verlos. Era injusto, muy injusto.

Pero, como si sus deseos se hicieran realidad, uno aterrizó cerca. ¡Y les hablaba a ellos! Aire se incorporó en el asiento para verlo mejor. ¡Qué bonito! Quiso decirle algo, pero no sabía qué. ¿Qué se le dice a un dragón? ¿Qué bonitas tus escamas? ¿Cómo se nota que les has sacado brillo? ¿Qué tal la familia?

En ese mar de dudas, Aristóteles le aconsejaba que se mantuviera en silencio. No podía llamar la atención, ni hacer perder los nervios a un dragón.

Aristóteles, eres un rancio. ¡Ya se ha ido! Seguro que quería ser amigo nuestro. Y parecía taaaaan majo... Eres un poco envidioso, creo yo.

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26/05/2016, 22:20
Jadewo ap Janel

Jad permanecía en un discreto segundo plano, tenía un trabajo, una misión y no era el momento de desviarse a por dragones moribundos o alertar más de sus posibles intenciones al guía del vestido rojo, ya era molesto que lo supiera el tal Mane.

Más tarde, ante la aparición de la bruma, el guerrero se protegió, abrigándose, de forma instintiva con su capa... le inquietaba, parecía que de igual forma que a Onfale o Leiath. Sintió como se le ponían en tensión los hombros acorazados. Pero las palabras de la sacerdotisa pusieron el trineo en marcha de nuevo. Para encontrarse de nuevo con otro dragón... este sano y arrogante.

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27/05/2016, 02:13
Flame

Flame clavó la rodilla en cuanto vio al dragón rojo posarse junto a ellos. Estaba maravillada de que una criatura como aquella, a pesar de su escaso tamaño, les hubiera deleitado con su presencia. Los ánimos aumentaron considerablemente en la muchacha, y la vista de aquellos dos seres habían hecho que se reconciliase por dentro. Al menos había merecido la pena todo aquel sufrimiento.

Cuando vio que se alejaba, no pudo evitar tratar de pararle. ¡Espera! Le gritó antes de que se alejara demasiado. Hay un dragón rojo, algo más grande que usted por allí, le indicó la dirección por donde lo habían visto, está sufriendo, parece que necesita que alguien lo rescate. Le dijo sin saber si aquello era o no una buena idea, y si aquello le iba a parecer mal o bien a sus compañeros, pero dejar a aquella bestia a su merced era algo que iba contra todo principio de la chamán. 

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Saber naturaleza (dragones)

Tirada: 1d20

Resultado: 1(+6)=7

Notas de juego

No tengo muy claro si lo que tenemos delante es o no un dragón, hago prueba de saber, y si me sale que sí que lo es, digo lo que digo. Si no, me callo y no abro la boca.

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27/05/2016, 06:28
Leiath

La bruja suspiró aliviada cuando el esqueleto volvió a coger los mandos del trineo. Qué paradoja! Pero es que para Leiath estaba claro que no hubiera sido una buena idea ir sin guia. Ellos necesitaban colarse dentro del palacio de Orkus, y nada mejor que entrar como invitados.

En el camino, otro apestoso reptil se presentó delante de ellos, casi no podía evitar el malestar que se le ponía en el cuerpo al verlo. Claro que después del duro entrenamiento que había tenido al estar día tras día con el Mane, la bruja se había hecho más fuerte ante la presencia de aquellos seres abominables.

La sorprendió, y no gratamente, ver a Flame arrodillarse ante aquella montaña de pura maldad.

Uno cosa era hacer el paripé delante de terribles demonios para poder seguir con vida y otra hacerlo por admiración. Debía tener unas palabras con la guerrera, para explicarle la verdadera naturaleza de esas bestias... pero en otro momento.

Esperaba que las palabras que habían salido de la boca de Flame no hiciesen cambiar el curso de la búsqueda del dragón, pues implicaría más peligros para Becky y aquellos que la acompañaban. Claro que el Mane estaba entre ellos; el corazón de Leiath estaba dividido entre el deseo de ver al dragón partir lejos a rescatar a su compañero moribundo, y asi dejar morir al Mane, o que fuese presto en ayuda de los que se encontraban dentro del otro trineo.

En esos pensamiento quedó la jóven cavilando mientras miraba sin ver a través de la espesa niebla.

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27/05/2016, 08:35
Alice

La maga miro al majestuoso ser y luego miro a Hollín, algún día de estos transformaría al cuervo en un hermoso y poderoso dragón rojo con el que sobrevolar su futuro reino. Ese día estaba cada vez más cerca. Pero ahora tenía el problemas de estar atrapada en un plano infernal y perseguida por esa maldita niebla. Si, esas nieblas no son normales.

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28/05/2016, 00:20
Tybalt Marr

Justo cuando se preguntaba la capacidad de razocinio de un dragón, otro más pequeño se cruzó en su camino ahora que Muerte-Disco hacía retomado la ruta hacia la morada de Orkus. Aunque de menos tamaño, Tybalt pudo ver que se trataba de seres con una naturaleza mágica. Además, también le tranquilizó ver que al menos daban un tiempo de cortesía a supuestos intrusos... aunque tampoco era demasiado alentador lo engreído que resultaba ser éste dragón en concreto. De cualquier manera, el tiflin tomaba nota mental de todo aquello. 

El aviso de Flame al dragón cogió a todos un poco por sorpresa, pero el espadachín no pudo evitar esbozar media sonrisa por ver en la guerrera algo diferente lo que hasta ahora era una permanente expresión taciturna. Y es que lo últimos acontecimientos no la habían favorecido especialmente. No obstante, quizás ese acto e complicidad pudiera servir en un futuro para encontrar un posible aliado de conveniencia... O no. 

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29/05/2016, 17:00
Muerte-disco

El dragón giró el cuello en dirección a la espadachina que le hablaba.

No hagas caso-dijo el guía al dragón, quitándole importancia al asunto-. El dragón que vimos está afectado por la energía chunga. No hay nada que puedas hacer por él, está sentenciado. Debió volver a la Puerta de Orcus cuando tuvo ocasión, como hace una buena patrulla.

El macho joven bufó un resoplido de fuego, y partió en dirección al segundo trineo. Si mantuvo rumbo, o en la bruma viró para ir en secreto a ver a su compañero, es algo que nunca podrían saber.

El trineo volvió a ponerse en marcha, y Onfale se explayó en explicaciones. Hay dos tipos de dragones: los cromáticos (dragón rojo, dragón negro, dragón blanco...), que son más malos que el hambre; y los metálicos (dragón de plata, dragón de oro, dragón de bronce...), que más allá de algún ataque de ira o la caza ocasional de reses de ganado para alimentarse, se les considera dragones buenos. En concreto, el dragón rojo escupe fuego, las llamas no le dañan y es vulnerable al frío (debe de tener algún conjuro de protección contra los elementos, o algo). Flame estaba alucinando, porque en tema de dragones era una completa analfabeta en comparación con Onfale. Es lo que tiene pasarse la vida cultivando el músculo en lugar de la mente.

Muerte-disco detuvo de nuevo el trineo y repartió unas obleas mágicas entre los pasajeros. Un mordisco acababa con el hambre, dos saciaban, tres mordiscos empachaban. O al menos eso dijo él. Lo cierto es que una de esas galletas equivalía a una comida, y no se sintieron empachados para nada. El azotamentes de la caja también recibió la suya, por el ventanuco de la caja, aunque era un sucedáneo con respecto a lo que normalmente acostumbraban a comer esas criaturas.

El viaje terminó cuando el trineo ya no tuvo nieve por la que deslizarse. Los mastines sombríos se hundieron en las sombras del suelo, buscando protección. La bruma no les permitía ver mucho más, pero ese suelo se hacía rocoso y duro.

Es por el foso de lava de la Puerta de Orcus, arde con tanta molonidad que la nieve de su alrededor no puede asentarse en la roca. No cuaja. Ya estamos cerca. Continuaremos el camino a patita.

Muerte-disco descendió y fue a ver la parte trasera del trineo. Allí sacó de entre sus ropas rojas un amuleto. Lo sostuvo en alto, y su piedra proyectó una luz verdosa hasta que poco a poco se solidificó en un disco flotante. El guía volvió a continuación a la parte del conductor y pulsó alguna palanca. Los rieles laterales del trineo arrastraron la caja-prisión del azotamentes hacia atrás, dejándola sobre el disco flotante de Tenser. Mientras, también abrió la guantera y cogió el pergamino con las credenciales, manteniéndolo sujeto en la mano izquierda.

Por último, Muerte-disco giró el quinqué que controlaba la esfera protectora hasta desenrosacarla y hacerla portátil. Si querían traicionar a Muerte-disco y recorrer solos el último trayecto, era ahora o nunca.

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30/05/2016, 09:41
Jadewo ap Janel

Finalmente pareció que el grupo llegó ya cerca de su objetivo final, la Rosa de Laón. Pero Jad se sentía incómodo, no es que echara en falta a Mane, peró sí a Becky. Ella formaba parte del grupo y la consideraba un elemento importante, pues entre otros era con quien había estableció vínculos más sestrechos.

-No parece que aquí corramos peligro de extraviarnos, tal vez sea un buen lugar para esperar reunirnos todos los grupos antes de acudir en presencia de Orcus.

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30/05/2016, 17:13
Onfale

- ¿Hacer esperar a Orcus?- Preguntó Onfale demasiado alto, incapaz de controlar los sentimientos de desconfianza, celos y animadversión que despertaba en él la rubia maga. Lo de Jadewo era mucho. Su dependencia hacia las mujeres era tal que condicionaba todos sus actos. No todos podían hacer gala de la frialdad que dotaba no tener gónadas sexuales.- No sé si eso será conveniente. ¿Tú que dices Mundo- Disco?- El tono de voz del perfumista se tornó meloso y su mirada felina. Su mano acariciaba ya discretamente el filo de una daga oculta bajo sus ropas a la par que se colocaba, discretamente cortando el paso del guía, para tenerlo rodeado.- ¿Qué puedes contarnos de lo que nos espera ahora?- Volvió a preguntar al guía para entretenerlo mientras veía si los demás querían hacer algo. Por su parte acabaría con su guía en aquel momento para ir a buscar de una vez por todas la Rosa de Laón. Lo único que lo detenía era encontrar su localización exacta que, con la ausencia de Mane, les sería más difícil, aunque confiaba en que un rosetón de semejantes características debiera ser visible desde lejos. El prblema era la visibilidad con las brumas.

Quizá sería bueno esperar a Mane.- Se debatía en esa disyuntiva. No se fiaba ni de Becky ni de Mane ni de sus acompañantes.

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30/05/2016, 21:21
Aire

Aire se bajó del trineo, opinando lo que había gritado Flame. Le daba igual lo que había dicho Onfale sobre los dragones. Eran bonitos. Y, por tanto, buenos, adorables y cariñosos. Lo que pasa es qeu la gente no sabe cómo tratarlos. En realidad, son sólo unos incomprendidos. Seguro que si se les quería mucho, serían unos grandes y poderosos amigos...

Pero la muchacha no podía volver sola a por el dragón. No podía socorrerle ni montarse en su lomo para salir volando de allí. La energía negativa de ese plano acabaría con ella mucho antes de que pudiera llegar a ver el dragón de nuevo. Al menos eso le había dicho Aristóteles.

¿Orcus se enfadará si esperamos? A lo mejor no le gusta que llegemos tarde. O quizá todavía es pronto. Oh, con esta niebla no se ve. ¿Ha salido ya la luna, señor esqueleto?