Partida Rol por web

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Se habían reunido todos las alas de mismo año en uno de los espacios más grande del área de Cuadrante de jinetes, un espacio en el que normalmente se utilizaba para entrar. Habían lonas repartidas por toda la sala junto con otros instrumentos para el entrenamiento de cada uno. Esa mañana se había reservado la sala completa para la primera clase de los de primer año.

Estaban todos formados por sus alas, la ala garra, la ala cola y la ala llama pero solo se encontraban los jefes de sección de las alas garra y cola. El del otro escuadrón aún no se había presentado y quitando a los cadetes que pertenecía a esa misma ala nadie había visto la cara.

De repente los jefes de sección se formaron mientras uno del tercer año entraba en la sala. A muchos le sonaba su cara por que era uno de los jinetes que tomaron nota en el portón antes de acceder al parapeto, su nombre era Aran Gongtin y no iba solo. Un hombre tanto mayor estaba a su lado, vestía el mismo uniforme de cuero negro que el resto pero llevaba una chaqueta larga que le llegaba hasta la rodilla y en su pecho habían varios blasones que solo se podían otorgar por el rey con grandes méritos como jinete.

Aran se paró en medio de los grupos y detrás de él, estaba con una sonrisa en el rostro mirando a todos los cadetes. Aran comenzó a hablar.- Hoy comienza la clase de lucha para los de primer año aunque esta es una clase que se enseña en base a la experiencia adquirida en los combates que se realizarán y por tanto como todos los años damos paso a que quien desee se enfrente al aspirante más fuerte del año.- señaló a uno de los aspirantes para que pasara adelante.- Este es Chung Myung, que ha demostrado ser el mejor de vuestro año a parte de que viene por recomendación de la misma familia real.- hice especial recalco en esto último por si alguno se atrevía a desafiarle.- ¿Y bien?¿Alguien se atreve a desafiarle?

Día 8. En clases de combate

Por fin llegaban a una clase donde podía irle mejor que con las de estudios. Kenneth avanzo con el resto del grupo, cada quien formado según su ala.

En silencio escucho la introducción de  Aran, lo recordaba por ser el que los había mandado a hacer algo productivo en lugar de andar viendo a los dragones en el campo de vuelo.

Presento a alguien de primer año como la persona a vender de nuestro año... Lo presento como el mejor del año, el mejor según quién. Kenneth estuvo a punto de recoger el reto para si y ver qué es lo que tenía el supuesto mejor del curso, pero recordó las palabras de Fiora. Una vez que te vean, tendrás una diana en la espalda.

Podría haber peleado, quizás podría haberlo vencido, pero eso sería un peligro. Mejor mantenerse en bajo perfil por ahora.

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Entré en clase con un top ajustado negro con cuello alto —había decidido deliberadamente cubrir mi nuca el día de hoy para no tener ningún disgusto—, sin saber bien qué esperar del día de hoy. Mantuve una expresión de fría indiferencia mientras miraba a mi alrededor. Comprobé con curiosidad que entre los líderes faltaba el del ala llama. ¿Dónde estaría? 

Que los jefes de sección se formasen hizo que pensase que Aran iba a entrar y efectivamente así fue. Me perdí por un momento en los blasones que colgaban del pecho del hombre que le acompañaba. ¿Qué tipo de hazañas implicarían? No tenía ni idea de quién debía ser aunque intuía que podía ser el profesor de lucha. 

La presentación del alumno prodigioso solo provocó que enarcase muy ligeramente una ceja. Observé de reojo a Kenneth entre el resto de los aspirantes que estábamos esperando. ¿Se ofrecería? Parecía tener las dudas pintadas en la cara pero finalmente llegó a una conclusión. No se había ofrecido. Curioso. 

Cerca de él percibí a Asterion y mis ojos se desplazaron por un brevísimo segundo a sus manos antes de devolver mi mirada a Aran. 

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Hielina sabía poco de este tema. No existían muchos libros que hablasen de como ejecutar movimientos de combate. Si muchos de honor, de batallas, de sentimientos y esas cosas que son más abstractas que el sube la mano, avanza, bájala de golpe... Y su experiencia en pelea era poco más que de niños, entre la chavalería, luchando por un trozo de vizcocho, tal vez un reyerta de crios por un moco mal lanzado en un momento inoportuno, o incluso un arrebato de ira por tirarle de las coletas a quién no debía en el momento más desagradable posible. Por lo demás... en esto andaba muy mal. Su padre le había enseñado una par de cosillas, por si en el monte intentaban abusar de ella y poco más, pero era, meter codos, rodillazo, chillar pidiendo ayuda y escapar.

- Claro, si salgo allí, me parten la cara por el otro lado. 

Se refería a la cicatriz que le cruzaba la cara, siguiendo el curso de un rio seco que no debió nacer jamás. También sabía que tenía que demostrar habilidad e iniciativa... pero no sería en este momento. 

- Que salga uno de esos presumidos y valientes tipos que se jactan de boberías. Es el momento que demuestren que son unos gallitos, y no unos gallinas.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

Entre en la Zona de Combate, este sitio empezaba a ser mas que conocido para mi. Casi pasaba mas tiempo en esa sala que en cualquier otra de todo el cuadrante.

El resto de los aspirantes esta reunido, todos estamos reunidos. Observo a todo el mundo, altos, bajos, musculosos, escualidos. Aqui todo el mundo es un potencial enemigo. No sabes quien pude llegar a clavarte un cuchillo en la espalda. 

Mi expresion es calmada mientras observo como todo el mundo va ocupando sus lugares, los grupos y alianzas se van definiendo. Cruzo los brazos sobre el pecho y observo en busca de informacion.

Aran hace su entrada, le sigue un tipo engalanado para la ocasion, porte militar, aura de autoridad, una serie de parches en la gabardina que no se que significan. Joder, me falta mucho por aprender. En muchos sentidos.

Comienza a hacer la presentación, escucho con poca atencion hasta que llega a Chung Myung, el mejor de nuestro año y recomendado por la familia real. El mejor de nuestro año. Preguntan si alguien quiere desafiarle. No es mi estilo exhibirme, ser el centro de atencion.

Y entonces recuerdo la promesa que me hice al tercer dia de pasar el parapeto.

Me levanto como un muelle, me quito la chaqueta de cuero y la dejo caer mientras le dedico una sonrisa Kenneth que esta a mi lado con cara de preocupación. Estoy viendo lo que le pasa por la cabeza, casi puedo leerlo. Y cuando el me devuelve la mirada no puedo sino poner una cara de circunstancias.

Me quedo unicamente con la camiseta sin mangas, los brazos al aire, permitiendo la movilidad, surcados de incontables cicatrices, cada una de ellas un recordatorio de como he llegado hasta aqui. Un tatuaje tribal recorre el brazo derecho ascendiendo desde la muñeca y perdiendose mas alla del hombro dentro de la camiseta. Me miro las manos, espero que los nudillos esten curados del todo, me ajusto mis nuevos guantes con refuerzos y entro a la estera.

- Yo le desafio - digo mientras pongo una media sonrisa en el lado derecho de mi cara.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

Antes de entrar a la estera, mientras estoy quitandome la chaqueta no puedo evitar mirar a Fiora, esta ahi, observando, analizando la situacion. Con el semblante serio y una expresion de absoluta concentracion. 

Sin duda es mucho mas inteligente que yo. Ha tomado el mejor camino, pero no he podido hacer lo mismo. Solo espero sobrevivir a lo que viene a continuacion para poder volver a hablar con ella.

Lleva un top negro con el cuello alto, ha tapado deliberadamente la marca de su espalda. ¿Que es esa marca? ¿Porque la esconde de todo el mundo? ¿Porque yo he podido llegar a verla?

La miro a los ojos con intensidad mientras ajusto ostensiblemente los guantes en mis manos. 

Ese dia solo estabamos tres personas en este mismo sitio.

Día 8. En clases de combate

Cuando Asterion se ofreció y dejó su chaqueta en el suelo, Kenneth lo vio con cara de que no entendía que hacía. Que demonios quería probar.

Observó a Fiora, quizás ella supiera por qué Asterion estaba haciendo aquello.

Tomo la chaqueta para que no estuviera en el suelo y se dispuso a observar. Asterion no era el mejor golpeando, pero podría flotar al rededor del tal chung y destruirlo poco a poco.

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Mi mirada volvió a Asterion en el momento en el que se ofreció a pelear, mi cara reflejó cierta sorpresa antes de enmascararla detrás de la indiferencia. 

Le miré a él, a su rival e inevitablemente a Kenneth. Hice un amago de dar un paso hacia este último pero antes de moverme me quedé en el sitio. Crucé la mirada un par de segundos con él y negué casi imperceptiblemente con la cabeza. Ambos sabíamos lo que había y que era casi del todo seguro que Asterion no tuviera forma de ganar ese combate pero no debíamos hacer absolutamente nada. Era su decisión si quería volver a actuar imprudentemente. 

Eché un vistazo hacia los líderes, queriendo comprobar sus reacciones. 

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Por supuesto que me había planteado enfrentarme al chaval prodigio y comprobar si era posible ganarle pero la lógica se impuso. Era un combate demasiado complicado y tanto ganar como perder te ponía en una situación jodida. Si ganabas, el tipo te odiaría y podría ser que te matase fuera de clase. Si perdías vergonzosamente, todos habrían visto tus debilidades y lo fácil que serías de derrotar. 

Kenneth había seguido mis consejos y no se había arriesgado, de la misma forma que yo. Me alegraba de que hubiera seguido mis consejos, me caía bien el musculitos y no quería que se suicidase así. 

Asterion llevaba los guantes, nadie sería consciente de que tenía los nudillos heridos y los tendría suficientemente protegidos para un combate contra otro aspirante, a no ser que le tocásemos Kenneth o yo, pero los dos sabíamos lo que había y no le íbamos a machacar. Debería estar relativamente seguro. 

Me iba a mantener en silencio, esperando a ver si algún inconsciente se presentaba voluntario pero escuchar la voz de Asterion ofreciéndose casi rompió mi fachada. ¿Qué es lo que se supone que estaba haciendo? Si Kenneth o yo lo teníamos complicado... Asterion lo tenía casi imposible. Si no había podido contra mí, ¿qué le hacía pensar que podría contra ese tipo? Había vuelto a dejarse llevar por la impulsividad igual que en el momento que había desafiado a Alec. 

Alec... le miré directamente, seguro que le reconocería y, encima, Asterion se había ajustado los guantes mirándome. Estaba claro que parecía saber que se los había dejado yo. Daba igual, nunca lo confirmaría, pero ¿y si Alec también llegaba a la conclusión? Cuidar a un miembro de otra ala era suficiente como para que se enfadara pero no me pude estar quieta, igual que cuando le curé el brazo a él. 

Dia 8. Primera clase de combate.

Estabamos todos más o menos formados. Faltaba uno de los Jefes, aunque el mío estaba ahí.

Al poco rato se desvelo la incógnita. El Comandante que faltaba aparecía acompañado de un hombre con tantas condecoraciones, que acertarle con una flecha hubiera exigido un excelente tiro. Ni idea de quién era, y porque tenía esa necesidad de aparecer tan pomposo delante de simples aspirantes... Beren pensó que quien tiene un Ego tan grande no era de fiar.

Por otro lado, el comandante en jefe, lanzó un desafío al aire, con el fin de saber si alguno de los allí presentes quería medirse con una especie de "campeón" de ese año. Para más inri, remarcó que era un recomendado de la casa real. Más parecía que estuviera intentando que no saliera nadie, no fuera que se diera una sorpresa y eso le repercutiera directamente con algún problema con la Realeza ... 

Aceptar el desafío era osado. Además de dar datos al resto de aspirantes. No sólo sobre uno mismo, si no sobre su contrincante... No, ser el primero no era inteligente, no era racional.

Y ahí estaba el joven que respondía al nombre de Asterion... Demostrando su coraje y su osadía. Parecía ágil y quizás pudiera zafarse de las embestidas del campeón pero hasta cuando? Igual es que le gustaba coleccionar cicatrices. Tenia unas cuantas.

El aspirante con quien había comido hacia 3 días se quedó con la chaqueta de Asterion y certa cara de sorpresa. 

La compañera de Ala de Beren, perdió la frialdad de su cara unos breves instantes, asaltada por la sorpresa.

Beren se centro en valorar al campeón. Un cazador usa su tiempo para observar a su víctima y averiguar algún punto flaco.

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Seguíamos entrenando en el camino a ser jinetes de dragón. Hoy tocaba lucha sin armas, algo en lo que había sido instruido, pero no todo lo bien que me hubiera gustado. Si hubiera sabido que no nos entregarían armas quizás hubiera dedicado más tiempo a ese tipo de lucha.

Cuando el instructor pidió un voluntario para luchar contra el campeón del año, miré a mis compañeros a ver si alguien se ofrecía. Era obvio, pues el contrincante parecía una mala bestia y si era el campeón del año pasado seguramente fuera bastante recio. Al ver que nadie lo hacía me encogí de hombros y fui a levantarme para luchar contra él. ¿Estaba loco? ¿Quería ganarme una paliza? No, simplemente no quería que pensaran que eramos unos cobardes.

Pero cuando estaba a medio camino para levantarme Asterion se ofreció voluntario. Al verle levantado y escuchar su ofrecimiento, terminé de levantarme y le hablé.

Si quieres tomo tu lugar en la lucha, Asterion.

Eso le dije a mi compañero para darle una oportunidad de retirarse antes de recibir una paliza que seguramente me daría a mí si Asterion aceptaba mi ofrecimiento.

Día 8. En clases de combate

Cuando ya era un hecho que Asterion iba a pelear, Elrick se levanta y le pide tomar su lugar... Que rayos pasaba en su ala, estaban todos locos, ninguno tenía la más mínima prudencia. Era muy difícil entender que en aquel combate ninguno ganaría nada. Si el tal Chung era en verdad bueno peleando, le daría una paliza a quien lo enfrentase, pero si le ganaban era peor, el que ganara sería el nuevo rival a vencer y más de uno querria retarlo o asesinarlo por la espalda para quitarlo de en medio 

Kenneth solo tenso la mandibula y dejó que ellos arreglasen quien iba a pelear. De cualquier forma, el ala perdia

Percibí el movimiento de Elrik por el rabillo del ojo y le miré directamente. Puse los ojos en blanco al escuchar su ofrecimiento. Era increíble que el único miembro del ala que escuchase fuera precisamente Kenneth. Entre la impulsividad de uno y el honor del otro, musculitos tendría que tener mucha paciencia. Lo peor del asunto es que tenía entendido que no había especialmente buen rollo entre Asterion y Elrik y el primero no tenía ninguna pinta de que se fuera a dejar ayudar, y aún menos por él. Era perder el tiempo y destacar innecesariamente. 

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Tocaba clase de lucha, y pronto nos informaron quien sería nuestro rival, analizaba todo sin perder detalle, no era un cobarde pero debía ser prudente, si vencía a este rival, posiblemente algunos pensaran que fuese su competencia destruirme.

Asterion se levantó decidido a desafiarlo, mientras Kenneth se había contenido al parecer, y tras la reacción de Asterion, Elrik caballerosamente se ofreció a tomar su lugar, entonces una posibilidad se formó en mi mente ¿y si nos estaban poniendo a prueba enfrentándonos a aquel nuevo rival? asi podrían librarse de todos nosotros y nadie sería un asesino, entorné los ojos pensando aquello, sería de momento un observador, esperé a ver que sucedía a continuación, ya que no se me paso por alto la leve sorpresa de Fiora al ofrecerse Asterion a luchar, algo curioso sin duda.

O tal vez aquella era la prueba en verdad, enfrentar a aquel luchador, en tal caso veríamos que pasaba ahora.

Día 8, Zona de Entrenamiento

Clase de lucha

Skylar se presentó al entrenamiento de aquel día con un buen talante. Tocaba algo físico y eso le agradaba, pues en eso sí que se había entrenado... desde que era una niña.

Pero nada más empezar le pusieron una prueba que era una trampa. La pelirroja lo vio al instante. Una mueca sarcástica apareció en su boca dejando claro que no participaría en aquella paliza gratuita. Pero su sorpresa fue mayúscula cuando Asterion se propuso para aquella pelea. La joven miró a su compañero y negó con la cabeza.

En ese momento Elrik se ofreció y Skylar vio una oportunidad para que el noble recibiera en vez del pobre. Miró a Asterion y asintió para que le cediera su sitio. No era hora de recibir palizas... ya se las darían más adelante.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

Escucho claramente la conomoción que recorre a todos los presentes. Uno tras otro fueron mostrando distintas reacciones, La mayor parte de pura sorpresa, incredulidad y hasta condescendencia. Y entonces llega Elrik, el caballero dorado con su noble corcel y su brillante armadura. Salido de un cuento para salvar a la damisela en apuros.

Lo que me faltaba...

- Apartate de en medio Brightblade - dije mientras le hacia a un lado sin miramiento - Si querias acpetar el reto haberlo hecho, has tenido tiempo. 

Dicho eso me volvi la vista hacia Aran y el tal Chung y comence a observarle y evaluar que es lo que se me venia encima.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

Mientras la conmocion iba descendiendo a lo largo del resto de aspirantes y yo observaba a Chung no pude evitar desviar mi vista sobre Alec. 

Ahi estaba con sus sonrisa de suficiencia y una expresion de asco en el rostro. ¿Habia algo mas en su expresion? ¿Triunfo? Quien sabe. Inconscientemente la vista se me va hacia Fiora, la miro con intensidad, y entonces recuerdo lo que vi hace dos dias. Noto como mi sangre se calienta y empieza a hervir al instante. Aprieto los nudillos hasta que duelen y amenazan con abrirse las heridas aun tiernas.

Bajo nuevamente la vista a mis nuevos guantes. Serenate me digo a mi mismo, vas a necesitar concentracion para lo que viene ahora. Mi media sonrisa se abre paso por el lado derecho de mi cara.

Vive hoy, lucha mañana y resuelve cuanto antes los jodidos lios que pueblan tu cabeza.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

Al lado de Alec se encontraba Cassandra Blaken, mi lider de seccion, un rompecabezas, un enigma, y a juzgar por la mirada que mes estaba dedicando la que me mataria si conseguioa salir vivo de esa estera.

Un momento, eso no tenia ningun sentido ¿porque iba a querer matarme? ¿Por preocupacion? ¿Por mi? Casi me caigo de culo y me bajo inmediatemente de esa estera. 

Y sin embargo... no puedo evitar mantener un contacto visual intenso con sus enormes ojos durante, quizá, mas tiempo del que debería.

Dia 8, Zona de Entrenamiento

Clase de Combate

No me extrañó en absoluto que Asterion rechazase la ayuda de Elrik, era un cabezón, orgulloso e impulsivo en su máscara de tipo duro. Mis ojos seguían cada uno de sus movimientos sin querer inmutarme, había demasiada gente aquí. A pesar de todo, su siguiente mirada hacia los líderes me sorprendió. ¿Buscaba la aprobación de su líder de Sección? Estaba barajando que eso fuera lo que había buscado entre ellos cuando volvió a mirarme a mí. ¿La primera mirada había sido hacia Cassandra o hacia Alec? No entendía su actitud en absoluto. 

Era todo un completo sinsentido, que estuviera ahí ofreciéndose como un cerdo en el matadero, que seguramente no tuviera del todo bien las manos aún, esas miradas... Con gusto habría salido de la habitación, dispuesta a huir de todo aquello que me confundía y no dejarle enredarme en aquel juego al que parecía estar jugando, pero no podía simplemente salir de ahí al igual que sabía, en el fondo, que no podría apartar la mirada de lo que sucediera en aquella estera.  

Día 8  -  Zona de entrrenamiento de Bashgiath

        - Sir Elrick  Brightblade y Asterion parece que el destino los ha unido hasta el moomento como el dúo del noble caballero y su escudero ... tal vez hasta podrían enfrentar al campeón juntos, pero yo primero les recomendaría que antes de proponerse se tomaraan l pequeña molestía de preguntar el tipo de pelea que van a enfrntar, ya se que sea con  sin armas y las principales reglas?  ¿Como si el reto solo lo puede tomar uno, los dos o aún más?   ¿No cree valiente lider del pelotón Aran Gongtin que sería inteligente consultr algo como eso antes de aventarse al reto para este par de valientes novatos?  -       Trata e convencer con argumentos Samara al par de jóvenes acerca de su decisión osada, temeraria e imprudente y al mismo tiempo darles con el argumento con el lider de l pelotón de darles la oportunidad d emeditarlo antes de que fuera demasiado tarde, pero que si no lo hacían siquier pudieran contar con la mayor informción posible para prepararse tras haber escuchado y visto atenta a todos los presentes cuando llego con el gruo cerca de Maluma, que al final le hizo una seña para que se moderarar prudentemente