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Expedición al castillo de Ravenloft

5 de diciembre del año 752 - Retorno al Castillo de Ravenloft

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03/09/2017, 12:18
Pitufín

Eeeeeeeek...

El lagarto corrió entre las piernas de los presentes, hasta que el muro exterior de la torre le impidió seguir corriendo. Acorralado, la punta de su cola emitió una descarga eléctrica que surcó el aire del laboratorio, enrarecido por el aroma de la pólvora, el moho y los componentes químicos. El arco voltaico chisporroteó contra una de las caras del cubo. Tras un instante de quietud, el cieno perdió su forma, y su consistencia, disgregándose en una ola verdosa que inundó el laboratorio arrastrando a los presentes a la otra punta de la habitación.

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03/09/2017, 12:25
Cristofor

¡A las mesas! ¡Subíos a las mesas!-exclamó, encaramándose a una, y quitándose su túnica por la cabeza, mientras los ácidos gástricos hacían humear la tela-Su ácido no afecta a la piedra ni al metal.

Todos los demás fueron subiéndose a las mesas. Incluso Pitufín dió un salto a lo alto de una de las banquetas. Mientras, lo que quedaba del cubo gelatinoso anegaba un palmo del laboratorio, y empezaba a drenarse lentamente por debajo de las dos puertas cerradas del laboratorio: la que daba al dormitorio de Trina y Afina y la que daba a la salita de los gatos.

Pero las mesas eran de madera, y sus patas empezaban a humear por la corrosión...

Los ácidos se neutralizan con bases. En aquella alacena-el brujo señaló la otra punta de la habitación-. ¡Rápido! Guardo suficientes bases como para neutralizar... Quizás si saltamos de mesa en mesa hacia...

La alacena se abrió sola. Una fuerza tiró de un saco abierto, y el polvo blanquecino que contenía se vertió en la inundación. Las patas de los muebles y las puertas dejaron de erosionarse, pero un nuevo olor empezó a generarse. Una peste nauseabunda.

Mientras, la figura de una mujer se volvió visible. Estaba de espaldas, en cunclillas, encaramada, con sus pies sobre la mesa bajo la alacena y una de sus manos agarrándose al estante más bajo del trinchero. Su cola oscilaba como un péndulo, solo un poco por encima del mar de ácido. Y sus cuernos... Oh, sus cuernos. Era toda una mujer... Espera. No. No lo era. Más bien era una súccubo.

Mi señora Khyristrix... lo lamento...

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03/09/2017, 12:43
Khyristrix

¿Viste al trilokh, Cristofor? Estaba aquí hace un momento. Terminemos pronto con esto, quizás aún estemos a tiempo de encontrarle.

Se dirigió entonces a los visitantes que habían causado todo aquel estropicio, aunque aún les daba la espalda.

Seré breve... Unos cuantos pisos más arriba está mi jardín privado, coronando esta torre. Cruzando por la pasarela llegaréis a la otra torre, en la que encontraréis el Corazón del Día. Es la reliquia que le di a Strahd para que no le afectase la luz del sol. Ni a él, ni a su prole. Yo no puedo destruirlo, pues si no hay ningún intruso en el castillo, Strahd sospecharía inmediatamente de mí. Y ahora que estáis aquí, con vuestra llegada al castillo, Strahd ha puesto vigilancia en la torre, y tampoco puedo destruirlo y echaros la culpa, por lo menos sin ser... "vista". Olida, más bien.

Mi propuesta. Os daré el relicario del Corazón del Día. En ese momento, mandaré un mensaje telepático diciéndole a Strahd que el relicario ha sido robado por vosotros, eludiendo toda responsabilidad. Vosotros subiréis hasta mi jardín. Allí romperéis el relicario, lo que debilitará la dura carcasa del Corazón del Día y liberará a un diablo barbado que os ayudará en la batalla durante un minuto. Cruzaréis la pasarela a la otra torre, os enfrentaréis a los guardias (un vampiro y cuatro engendros vampíricos), subiréis las escaleras y clavaréis vuestras armas en el Corazón del Día una y otra vez hasta destruirlo.

La recompensa... Bueno, evitar que los vampiros puedan asolar Barovia durante el día ya es una recompensa en sí misma. Pero me habréis demostrado que no sois unos idiotas más que vienen aquí a morir. Me habréis demostrado que sois lo suficientemente poderosos como para derrotar a Strahd. Eso no hará que me lo juegue todo a vuestra carta: no lucharé contra Strahd abiertamente. Pero os daré una piedra ioun de color rosa turbio* que podría mejorar las defensas de quién lo llevase.

Menos mal que iba a ser breve. Khyristrix caminó por aquel laboratorio empantanado y abrió las ventanas para airear el olor químico del ácido y la base, mostrando las estrellas de la noche. El nivel de moco corrosivo bajó lo suficiente como para que Tasia recuperase sus maltrechos nunchakus y Parriwimple se hiciese con la segunda llave que necesitaban para llegar hasta el alma de su hijo muerto. Esta segunda llave tenía la inscripción "Portal". Montándola sobre la otra llave, formarían una única pieza con el mensaje "Llave del Portal", pero ya sería un puzzle de dos piezas de difícil resolución para el Burgomaestre.

Notas de juego

*Piedra Ioun rosa turbio: +1 a la CA.

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03/09/2017, 18:06
Ivalic Yannof

Para su sorpresa el disparo de Pitufín consiguió derretir el cubo de gelatina y que sus amigos atrapados quedaran al fin libres.

-¡Muy bien Pitufín! ¡Eres la mejor mascota del mundo!

Claro que el líquido era bastante corrosivo y todos debieron subirse a las mesas para que sus ropas no se estropearan. Ivalic subió con agilidad y se acercó a Pitufín para darle unas caricias felicitándole por su gran actuación. En mitad de todo el lío la súcubo Khyristrix se apareció en el laboratorio y les ofreció un trato, no parecía mal del todo, aunque era arriesgado y todavía estaba el tema de si sería conveniente ayudarla.

-¿Y si finalmente accedemos, todo sale bien y terminamos con Strahd... te marcharás de Barovia? Como comprenderás no vamos ayudarte para que seas tu la que coja el poder tras la muerte de Strahd...

Ojalá la súcubo accediera a marcharse y no volver por allí, así Barovia quedaría libre de monstruos y tiranos. Parriwimple podría gobernar junto a Ida y tendrían más hijos. Se acercó a su amigo mientras observaba la llave recién recuperada.

-¡Lo has conseguido Parriwimple! ¡Ya tienes las dos llaves! Mira lo que pone "Llave del Portal". ¿Que tenemos que hacer ahora?

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03/09/2017, 19:10
Herr Urik von Teudeldorf

Miro significativamente a mis amigos a los ojos, como pidiéndoles permiso para cargar contra la diablesa y acabar con ella aquí y ahora. Lo cierto es que, debilitado como estoy, no soy rival para una criatura tan poderosa. Por otra parte, pactar con un diablo, aunque sea para luchar contra un mal mayor, sigue estando mal y es abominable.

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04/09/2017, 10:23
Helene

Eran muchas las preguntas que se agolpaban en la mente de Helene. De un lado su intuición había sido fallida. La sombra encerrada en la gelatina era la de la famosa Khyristrix, una sombra escudada en su don para la invisibilidad y que los había estado observando y escuchando todo el tiempo sin revelar su existencia. De otro, la realidad de que, tal y como había dicho Cristofor, eran ellos los que habían mantenido el cubo en el caldero, caldero en el que casualmente estaban las llaves. Ahora contaban con lo necesario para montar con ambas piezas la llave necesaria para liberar al hijo de Parriwimple e Ida. Por otra parte, la mujer o lo que fuera les proponía un plan cuyas consecuencias no sabia medir. Sí, los vampiros dejarían de caminar de día pero, llegado el momento en el que quizá destruyeran a Stradh, ¿qué haría el súcubo? ¿Marchar o establecer un nuevo imperio de terror? Demasiadas preguntas sin respuesta.

Pero fue consciente del gesto y mirada de Urik y, precavida, negó con la cabeza. No solo deberían enfrentarse a la súcubo sino también a su acólito y más allá estaban aquellas otras dos mujeres. Demasiados enemigos cuyo poder ignoraban pero que no seria baladí. 

Mientras tanto, los gases acumulados empezaban a disiparse y parecía casi seguro bajar al suelo. Decidió esperar un poco más antes de hacerlo. 

-Es una oferta interesante. ¿Podéis darnos un par de minutos para discutirlo entre nosotros? -pidió Helene. Un plan se abría en su cabeza. 

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04/09/2017, 10:35
Helene
Sólo para el director
- Tiradas (3)

Motivo: Saber religión súcubo

Tirada: 1d20

Resultado: 4(+8)=12

Motivo: Saber religión corazón del día

Tirada: 1d20

Resultado: 19(+8)=27

Motivo: Averiguar intenciones súcubo

Tirada: 1d20

Resultado: 11(+8)=19

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04/09/2017, 12:37
Director

Según diversas fuentes, el Corazón del Día es el corazón de la mismísima Khyristrix, que se lo sacó del pecho para Strahd. Destruir el Corazón del Día no la mataría, ya que fue la propia súccubo la que renunció a él hace mucho. Es probable que el corazón se alimente de sufrimiento, y si así es, los siglos de tormento pueden haber hecho crecer ese corazón y puede haber endurecido su exterior. Aún así, si en el momento en el que se selló el pacto con Strahd, se ligó el Corazón del Día a un relicario, puede ser cierto que rompiendo el relicario el Corazón del Día se debilite.

Además, Helene ha notado un cierto deje de odio cada vez que Khyristrix pronunciaba el nombre de Strahd. Sus intenciones están bastante claras: no necesita romper el Corazón del Día para volver a su hogar, solo que alguien mate a Strahd, pero la idea de perjudicar a ese odioso vampiro le deleita. Es probable que haya tenido esta conversación antes con otros: aventureros que venían a matar al Conde, y que ella azuzaba contra Strahd como carne de cañón. Sucesivas oleadas de héroes llegados a este castillo, muriendo mientras ella nadaba en la equidistancia; queriendo causar mal a su peor enemigo, y a la vez temiendo que se enterase.

- Tiradas (1)

Tirada oculta

Motivo: Engañar

Tirada: 1d20

Dificultad: 19+

Resultado: 6(+4)=10 (Fracaso)

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04/09/2017, 13:06
Parriwimple Indirovich

A punto, a punto, estaba Parriwimple de hablar. El burgomaestre había necesitado un lapso bastante largo de tiempo para poder entender (en parte) las palabras de la diablesa. Y lo cierto es que no le convencía. No era bueno engañar, ni traicionar, y sobre todo, no le terminaba de apetecer confiar en alguien que por lo que parecía era malo. ¿No era después de todo la diablesa la que había proporcionado al vampiro el poder de estar a la luz del día? ¿cómo podían confiar en alguien así?

Por supuesto en la mente de Parriwimple todas esas disquisiciones se traducían con mucha mayor simpleza: como no le había atacado no quería atacarle, y como era mala no confiaba en ella.

Cierto: el mal y el bien eran cosas muy complicadas para Parriwimple, lo que le solía colocar en un mal de dudas. Sin embargo...

Como hemos indicado, a punto, a punto, estaba Parriwimple de aclarar su mente lo suficiente para decir alguna tontería bien intencionada (y quizás hasta moralmente acertada), pero en ese momento habló Helene. Y Parriwimple asintió.

Aunque no siempre estaba de acuerdo con ella, y en ocasiones no le hacía caso, Helene era lista y no decía tonterías. Como también podía aplicarse, (bien es cierto que de una manera muy distinta), a Ser Urik.

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04/09/2017, 13:17
Khyristrix

Por supuesto, es algo razonable. Por favor, podéis discutirlo en el dormitorio de invitados.

Hizo un gesto a Cristofor, que se desplazó a una esquina del laboratorio para abrir una trampilla oculta. El ácido neutralizado se filtró más deprisa hasta el armario de la planta inferior. Una escalera de mano les permitió bajar de uno en uno, y pronto tuvieron que abrir la puerta de aquel vestidor para hacer sitio al resto del grupo, pasando al dormitorio propiamente dicho.

El centro de la habitación estaba ocupada por una cama doble con dosel. También había una buena mesa, con dos buenas sillas, pero casi todos los que fueron llegando se sentaron en el colchón.

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04/09/2017, 13:25
Doctor Rudolph Van Richten

Esa puerta de ahí debe llevar a la biblioteca en la que dejamos a Jeff.

Esperó a que todos estuviesen en el dormitorio antes de seguir hablando. Cristofor cerró la trampilla y Malik la puerta del armario.

Tsk. No necesitamos hacerlo. Si matamos a Strahd, toda su prole morirá. No tenemos porqué destruir el Corazón del Día si tenemos éxito. Sin embargo... Si fracasamos, si Strahd nos mata a todos en la lucha final, haber roto el Corazón del Día e impedido que la prole pueda moverse a pleno sol, habrá sido una pequeña aportación para las futuras generaciones de aventureros que vengan a este lugar. Creo que lo que más temo es morir por nada. Morir sin haber intentado acabar con el Corazón del Día y sin lograr matar a Strahd.

Pero lo óptimo, la mejor situación posible, sería ignorar la misión, eludir el combate con ese vampiro centinela y su prole, y lograr matar a Strahd. Si lo conseguimos, no habrá nada por lo que lamentarse. Todos los vampiros que Strahd ha convertido y a los que ha ligado al Corazón del Día, morirán a la vez.

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04/09/2017, 17:32
Herr Urik von Teudeldorf

- "Lo primero que necesitamos hacer es descansar, reponernos y curarnos. Yo mismo apenas puedo dar un paso y he agotado por completo mis poderes. No llegaremos muy lejos si seguimos luchando en estas condiciones.

Una vez estemos repuestos podremos planear nuestro siguiente paso.

Personalmente, abogaría por en efecto destruir el Corazón del Día. Pero no podríamos dejar a estas criaturas infernales sueltas por aquí. Lo siguiente sería destruirlas a ellas también antes de enfrentarnos al Conde.

Sí, sé que parece mi cantinela habitual de matar a todo lo que sea maligno, pero a la larga ese suele ser el mejor plan." -

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04/09/2017, 21:48
Ivalic Yannof

Ivalic escuchó a sus compañeros, más en concreto a la Señora Helene pues Pariwimple no había sido capaz de reaccionar ante lo que sucedía y Herr Urik parecía pedir permiso con la mirada para arremeter contra la súcubo. Le parecía razonable el tener unos momentos de charla para discutir el asunto, sobre todo cuando Khyristrix no había contestado a su pregunta, lo que el chico no vio como una buena señal.
Una vez escaleras abajo y ya entre sus amigos decidió dar su opinión.

-Debemos ser prudentes, es posible que nos estén escuchando. La verdad es que no se que decir. La oferta es buena y como dice el Doctor, solo el hecho de destruir el corazón sería un gran logro, algo que será recordado y celebrado durante generaciones. Creo que deberíamos intentarlo, se que quizás nos retrase un tanto en nuestra misión principal, pero creo que merece la pena. Además de paso nos desharemos de varios aliados de Strahd, lo que siempre está bien. Después si Khyristrix nos ayuda nos será más fácil derrotar al Conde y si no lo hace… bueno seguirá siendo nuestra rival, eso no cambia. Yo le propondría que se marche a donde pertenece en cuanto triunfemos y si no lo hace pues será nuestro siguiente objetivo. Pero todo eso será después de liberar el alma del hijo de Parriwimple y descansar. ¿Qué os parece?

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04/09/2017, 21:59
Herr Urik von Teudeldorf

Asiento y sonrío a Ivalic.

- "Es un buen plan, buen Ivalic. ¿Seguro que no te gustaría convertirte en un Caballero del Cuervo? Tal vez un día podrías llegar a liderar nuestra sagrada orden." -

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04/09/2017, 22:15
Ivalic Yannof

Ivalic negó con la cabeza, aunque sonrió amablemente ante el ofrecimiento de Herr Urik.

-Creo que no representaría bien a la orden. Además, en cuanto acabemos con Strahd tengo que ayudar a Tasia a librarse de su padre, no tendré tiempo de prepararme para ser paladín, creo que se me da mejor contar sus hazañas que protagonizarlas.

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05/09/2017, 13:02
Helene

Cuando todos estuvieron en relativa intimidad y aun temiendo que pudieran ser escuchados, Helene atendió a lo que unos y otros dijeron, el rostro extrañamente sereno, quizá por las palabras del Dortor Rudolph acerca de la presencia próxima de su malogrado Jeff. La húmeda pátina que cubrió sus ojos fue la única señal de su contenida emoción. Carraspeó para aclararse la garganta. 

-Creo importante deciros cuanto sé y cuanto pienso que tampoco son gran cosa -no era humildad sino una realidad-. Según diversas fuentes, el Corazón del Día es el corazón de la mismísima Khyristrix que se lo sacó del pecho para Strahd. Destruir el Corazón del Día no la mataría, ya que fue la propia súccubo la que renunció a él hace mucho. Es probable que el corazón se alimente de sufrimiento, y si así es, los siglos de tormento pueden haber hecho crecer ese corazón y puede haber endurecido su exterior. Aun así, si en el momento en el que se selló el pacto con Strahd, se ligó el Corazón del Día a un relicario, puede ser cierto que rompiendo el relicario, el Corazón del Día se debilite -relató-. De otra parte, es evidente que Khyristrix cada vez que pronuncia el nombre de Strahd, revela su odio por él. Sus intenciones son claras, damas y caballeros. Esa mujer o lo que sea, no necesita romper el Corazón del Día para volver a su hogar, solo que alguien mate a Strahd, pero la idea de perjudicar a ese odioso vampiro le deleita. Es probable que haya tenido esta conversación antes con otros aventureros que venían a matar al Conde, y que ella habrá azuzado contra Strahd como carne de cañón. Sucesivas oleadas de héroes llegados a este castillo, muriendo mientras ella nadaba en la equidistancia; queriendo causar mal a su peor enemigo, y a la vez temiendo que se entere.

Guardó un momento de silencio, para que digirieran lo dicho.

-Nos utiliza como ha utilizado a tantos otros. Su oferta puede ser tentadora pero conlleva un gran peligro. Para nosotros. Ella, tanto si triunfamos como si no, seguirá viva y maquinando contra Stradh y echando mano de los recursos que lleguen al castillo. Es una falsa aliada, cuyos objetivos futuros ignoramos. Quizá sea sustituir a Stradh en su imperio de terror. Pero en cualquier caso, todos nosotros hemos venido aquí con un objetivo. Liberar al hijo de Ida y Parriwimple y acabar con Stradh. Cualquier misión paralela nos desvía de ello y pone en riesgo nuestras vidas. Hemos perdido ya mucho como para, gratuitamente, perder más. Como bien propone Urik, deberíamos descansar. En un lugar seguro y qué más seguro que ese laboratorio, dominio de Cristofor y su señora. Podemos intentar engañarla. Aceptar el trabajo tras una jornada de descanso y cura. Tomar el relicario, momento en el que se dará la voz de alarma telepáticamente. Si es que lo permitimos -dejó en suspenso el resto sabiendo que lo entenderían. Miró a Urik. Sí, debían acabar con la súcubo. 

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05/09/2017, 15:50
Herr Urik von Teudeldorf

Asiento en silencio, sintiéndome complacido por las palabras de Frau Helene.

Recuperaremos fuerzas, y después acabaremos con estos malditos infernales.

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05/09/2017, 17:02
Parriwimple Indirovich

Parriwimple miró a Urik y luego a Helene, claramente pensativo. Era todo muy complicado. Helene había dicho que no debían separarse de su rumbo, pero luego, había aceptado la premisa de Urik: que la súcubo debía morir. ¿Pero era esa realmente una buena idea? ¿de verdad estaban tan sobrados de poder como para atacar a la súcubo y luego atacar a un nuevo grupo de vampiros? La muerte del hijo de Helene afectaba a Parriwimple, pero aún más la certeza que cada combate era una nueva posibilidad de ver morir a sus amigos.

- Yo...- iba a oponerse a la idea pero, entonces, recordó que hacía mucho había prometido que si Urik y Helene estaban de acuerdo, aceptaría lo que ellos eligieran. Eso le hizo cerrar la boca. Inquieto, y sin tener claro qué decisión tomar, miró a Ida- ¿tú qué piensas, Ida?

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05/09/2017, 22:56
Ivalic Yannof

Ivalic escuchó a la Señora Helene y asintió, la sucubo no había sido clara y probablemente les quería utilizar para sus propios fines y luego, en el caso de que triunfaran, aprovecharse.

-Creo que la señora Helene tiene razón. Ayudemos a Ida y Parriwimple, descansemos y luego nos ocuparemos de la misión de la súcubo.

No entró en más detalles pues tenía la sensación de que los estaban vigilando, en estos casos era mejor ser discretos.

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06/09/2017, 13:25
Ida

Yo...-Ida bajó los ojos, tratando de hallar una respuesta a Parriwimple.