Partida Rol por web

Krugbarg ataca al zombie con su espada, atizandole en la cabeza

El Elfo sale tras el barbaro y se para a su espalda. Alli ve unas rocas caidas que los guarecen de cualqueir enemigo. Pero es no lo sabia al salir.

Ademas desde la espalda del barbaro podia vislumbra el proximo par de puertas.

Los mandobles del bárbaro terminan con la putrefacta carne del zombi desparramada por la húmeda piedra del corredor.

Aquellas catacumbas parecían desorientarlo más de lo que hubiera imaginado, pues seguía concentrado en percibir que poder podía mantener con una falsa vida a todas esas criaturas. Salió hacia el corredor y se aseguró que el próximo paso estuviese fuera de peligro.

Según avanzabáis por el húmedo corredor, Rincewind, ve a lo lejos algo que le llama la atención.

Alto.- susurra.

Allí hay algo extraño.- apunta con el dedo señalando al final del oscuro pasillo.

Creo que es una trampa. No sé muy bien de que tipo, pero sé que hay algo peligroso.

Krugbarg avanza unos metros y toca la puerta, ¿Alguein Haber? grita mientras golpea la puerta de una patada espada en mano

Krugbarg abre la puerta sin mucha discrección, lanzando una terrible patada que saca la misma de sus goznes.

Afortunadamente la sala está vacía.

El terrible olor a podrido sigue estando presente en la oscura cámara.

Solo se distingue un potro de tortura y un montón de huesos al fondo.

Algo preocupado por aquella trampa sugirió al grupoq ue avanzaran por donde habian vuelto eb ausencia del fragor de la batalla que hubiera neceistado el barbaro de encontrarse enemigos en aquella sala. Mejor será que volvamos por el otro lado.

Entro junto al bárbaro en la habitación, pero mientras él busca objetos de valor yo me dedico a lo mío, las trampas, espera un momento Krugbard, primero déjame asegurar la habitación.

El elfo entre en pos de sus compañeros, parece otra habitacion vacia, aquello le extraña, parece que los seres que habian aquella apestaosa mazmorra, estan unicamente en los pasillos, es como si los hubieran sacado de las habiataciones.

Voy a ver si localizo puertas secretas. Lo que no voy a hacer es abrir esta otra puerta. Si ya hay una abierta, esta debe de ser una trampa.

Tras cruzar la puerta, Krugbarg siente que el suelo se hunde bajo sus pies y cae en un profundo y hediento agujero.

Sus compañeros a punto están de caer tras él. Afortunadamente logran mantener el equilibrio y pasar con cuidado.

Ayudan al bárbaro a salir de la trampa y después inspeccionan con cuidado la habitación.

A parte del mal olor y los restos de huesos y crueldad, poco más hay en la habitación.

Mejor será entonces que regresemos, enunció en alto en el corredor mientras se dirigia hacia la puerta anterior.

El Elfo asintio en silencio, alli no quedaba nada para ellos. Y volvio sobre sus pasos en pos del mago.

Avanzo siguiendo a mis compañeros.

El Elfo se adelanta con la ballesta presta en la mano. Al salir de la habitacion tuerce hacia el lado derecho, recordando en abujero trampa que hay en el otro sentido.

Vamos no os quedeis atras.