Partida Rol por web

Observo el combate, y grito a  Aslaw:

-¡Cuidado caballero, hay mas bandidos escondidos entre el follaje!-desenvaino mi espada, y la miro con una sonrisa torcida- Ayy, dio mio

Salgo corriendo hacia el campo de batalla.

Casi cuando estaba a punto de llegar al bandido, Aslaw trastabilló con una raíz de un árbol, lo que casi le provoca hacer una entrada sonora en la batalla. Afortunadamente sus pier ágiles y rápidos corrigieron el ángulo permitiendo que una caída de chiste se transformase en un mero resbalón...

Había perdido el factor sorpresa. Afortunadamente su rival más cercano no era hábil con la espada y su ataque quedó en una mera anécdota que Aslaw pudo desbiar sin problemas.

No había tiempo para florituras, sus amigos estaban en serio peligro e incluso parecía que Jack estaba herido. Se concentró en el rival y cuando vió un hueco en sus defensas tiró a fondo su espada hacia el estómago del bandido....

El hombre enfrente de Aslaw intenta atacarle de nuevo rápidamente tras su golpe débil inicial, pero el noble, ya repuesto de su entrada problemática, no tiene problemas en frenar su ímpetu magullándole con el borde de su empuñadura los dedos que sostienen su espada corta. Inmediatamente después le lanza un corte de prueba al abdomen, resultando sorprendentemente certero. Aún así el hombre continúa dispuesto a luchar...

Por otro lado uno de los que estaban con los demás compañeros de Aslaw se lanza para interceptar a Kilder.

Mientras realizo mis rezos a mi diosa, y con la costumbre de manejar un arma mucho mas pesada, lanzo un espadazo atroz contra mi enemigo.

Rezaré por ti...

Aslaw sabía que su enemigo no era buen espadachín, su primer ataque precipitado y débil le había roto sus defensas y eso sólo podía significar una cosa, su siguiente ataque debía (y sería letal).

Sin dar un segundo de respiro, Aslaw giró su muñeca y dirigió el filo de su espada al cuello de su rival...

El movimiento de muñeca de Aslaw para rajar el cuello del adversario no es muy hábil, pero el propio bandeo del rival, incapaz casi de seguir luchando, hace que resulte certero, rozándole el filo la garganta mientras corta parte del cuello. En un último esfuerzo éste se echa hacia delante golpeando con las pocas fuerzas que le quedan a Aslaw, que con la espada en el cuello, no tiene con qué defenderse; pero suelta su arma en el último momento y esquiva el golpe, cayendo su adversario al suelo. Cuando se agacha para recoger su espada, una flecha pasa por el lugar donde Aslaw debería haber estado.

El bandido que ataca a Kilder actúa primero a costa de lanzar un golpe fácil de esquivar y dejando su brazo al descubierto, momento que aprovecha el sacerdote para abrirle una brecha importante en el brazo. Con una herida abierta que sangra a borbotones y probables problemas de movilidad en su mano diestra, el hombre se debate entre seguir luchando o no.

Aslaw sin rival cercano a quien combatir levantó la cabeza. Bertoz y Jack estaban inmersos en problemas así que su espada se encargaría de ayudarlos...

Avanzó con paso firme a la posición de éstos, mientras trataba de localizar al arquero cuya flecha casi se clavó en su pecho...

Me retiro varios pasos de mi adversario, y le digo:

-Te doy la oportunidad de rendirte. Con el tajo que te he hecho, si no te hacen curas ahora mismo, vas a morir.

Me mantengo en guardia por si me quiere atacar, dándole la oportunidad de rendirse.

Mientras Aslaw corre para salvar a sus compañeros el arquero de los enemigos, algo más retirado que el resto, dispara una flecha excepcionalmente apuntada teniendo en cuenta lo difícil del terreno...

El adversario de Kilder no dice nada y se tapa la herida con su otro brazo. Parece debatirse internamente entre retirarse y seguir atacando, pero por algún motivo, no puede decidirse.

Mientras observo a mi contrincante, el cual no sería tan difícil curar como le he ofrecido, me retiro varios pasos mas, y comienzo una plegaria...siempre atento a sus movimientos

Mientras se acercaba a sus compañeros, Aslaw oyó un zumbido, aún no tiene muy claro donde se encuentra el arquero pero, lo que está claro es que el arquero sí le ha visto a él.

Con la pericia de un bailarín, Aslaw trata de hacerse a una lado y esquivar la flecha....

Vamos a intentar repetir la tirada entonces. Gasto ese punto. XD

Lo que antes te ha parecido cansancio ahora te resulta una ligera imposición de voluntad; seguramente estos bandidos lucharían contra vosotros de todas formas, pero cuando en casos como el rival que tienes enfrente lo normal sería desistir e intentar huir tienen que pugnar en su interior.
Aunque hay formas no mágicas de conseguir este tipo de limitado control, no te parece que el sujeto esté drogado ni se deba a una elección moral.

Tu rival, aún más amedentrado ahora que estás rezando, lanza un ataque bastante débil que no necesitas esquivar, pues se pierde en la distancia que os separa.