Partida Rol por web

La Compañía Negra 2: La Puerta de Galdan.

Chon Delor: El Bastión del Dolor.

Cargando editor
27/02/2016, 08:59
Sabandija.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: ANTÍLOPE (MES DÉCIMO, PRIMERO DEL OTOÑO).

DÍA: PRIMERO DE MES.

ANTES DEL MEDIODÍA.

Cuando escuchó jurar a Plumilla un escalofrío le recorrió el cuerpo. Aunque le pareciera que habían pasado siglos no hacía mucho él había vivido lo mismo. Era una pena que Ojopocho no pudiera estar allí para ver como, ahora, era él quien ponía la capa negra sobre otros hombros. Desde atrás, como un cálido abrazo inesperado,  Sabandija colocó la capa negra de la mejor calidad sobre los esmirriados hombros de la curandera de los Campamenteros.

- Lo has hecho muy bien.- Le susurró al oído. Ya no había vuelta atrás. Plumilla era una hermana juramentada más, miembro de pleno derecho de la Compañía. A falta de Ojopocho buscó con la mirada a Rastrojo, orgulloso.

Cargando editor
27/02/2016, 10:14
[RIP] Belleza, Pelotón de Exploradores.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: ANTÍLOPE (MES DÉCIMO, PRIMERO DEL OTOÑO).

DÍA: PRIMERO DE MES.

ANTES DEL MEDIODÍA

Con actitud reverencial, coloqué la capa negra sobre los hombros de Niña de Oro. Su actitud era tranquila, como si de golpe hubiera comprendido lo que estaba ocurriendo. Ya no volvería a ser recluta, a no ser que hiciese algo verdaderamente mal, y eso jamás le dejaría hacerlo yo. Ahora pasaría a ser un soldado, un miembro de pleno derecho de la Compañía Negra. Me preguntaba si cuando pidió ser admitida soñaría siquiera con conseguirlo alguna vez.

Todos crecemos, todos nos equivocamos, pero por suerte solemos tener una segunda oportunidad. La cuestión es si sabemos o no aprovecharla.

Pocos entienden el verdadero sentido de la Compañía Negra, a veces me cuestiono que yo misma lo entienda, pero seguimos creciendo, a la vista está. Y mientras sigamos creciendo y conservando nuestras tradiciones, nadie podrá con nosotros jamás.

Cargando editor
27/02/2016, 13:27
[RIP] Compañía: Oficiales: Teniente Rompelomos.

El Teniente va ciñendo las capas con el emblema de la Compañía a los cinco nuevos Hermanos Juramentados.

Cargando editor
27/02/2016, 13:28
[RIP] Capitán.

El Capitán repite ceremoniosamente.

- "Bienvenidos a la Compañía. Os alzáis ahora como Hermanos Juramentados." -

Cargando editor
27/02/2016, 13:29
Cho'n Delor: Mercenarios Independientes: Sierra.

La emoción y los nervios del momento, por el hecho de que Plumilla sea ahora una Hermana Juramentada se ven eclipsados de nuevo.

Al levantar un momento la vista divisas de nuevo a la enorme mercenaria, cuya figura sobresale de entre todos los espectadores presentes.

La mujer continúa mirando fijamente a Sabandija, y para sorpresa del mismo, le guiña un ojo.

Cargando editor
27/02/2016, 13:30
[RIP] Capitán.

Una vez han jurado y regresado de nuevo a sus posiciones los cinco nuevos Hermanos. Y una vez sus Hermanos de Capa también han vuelto a sus puestos, el nuevo Capitán dirige su mirada a Matagatos.

- "Ahora, el Cabo Matagatos hará la presentación del recluta de los Hostigadores que aspira a Jurar. Y explicará los motivos por los que se ha ganado semejante derecho." - Dice sin que le tiemble la voz.

Cargando editor
27/02/2016, 13:45
Capitán Matagatos.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: ANTÍLOPE (MES DÉCIMO, PRIMERO DEL OTOÑO).

DÍA: PRIMERO DE MES.

ANTES DEL MEDIODÍA.

Matagatos se adelantó cuando le llegó el turno, y carraspeó ligeramente antes de empezar a hablar. 

-El que va a jurar es nuestro compañero Campaña. Cometió errores en el pasado, pero ha vertido sangre de sobra por la Compañía, propia y sobre todo ajena, como para enmendarlos. Combatió con honor en el Fuerte Chuda, y, junto al tristemente fallecido Peregrino, derrotó a la heroína del Triplete Segadora y a su grupo.

Cuando terminó de pronunciar estas palabras, miró a su primo y le sonrió levemente. Probablemente una de las pocas sonrisas que había aparecido en el rostro de Matagatos desde que se despertó. 

Cargando editor
27/02/2016, 14:16
[RIP] Compañía: Oficiales: Teniente Rompelomos.

La enorme mole acorazada que es Campaña da varios pasos al frente hasta su lugar para jurar. 

Ponzoña, como representante de su Hermano de Capa, el convaleciente Cabo Barril, se sitúa a la espalda del gigantesco soldado.

El Teniente yergue mirando a Campaña:

- "¡Paso al frente y rodilla en tierra! Hoy te arrodillas por última vez como recluta.-

El Teniente se aproxima unos pasos hasta situarse junto a Campaña y le susurra algo en voz muy baja, lo justo para que casi sólo él, Ponzoña y los más cercanos puedan escucharle.

"Cuando el Capitán acabe de pronunciar el juramento, simplemente di: ¡Juro! Luego te pones de pie y te dejas guiar por Ponzoña." - Dice casi en un susurro pero mostrando una sonrisa tranquilizadora.

Cargando editor
27/02/2016, 21:00
Desastre.

Desastre veía desde su sitio en la formación como sus hermanos juraban la capa. Si de algo le había servido ver jurar a la primera tanda fue para darse cuenta de que no había que aplaudir así que se relajó un poco y se concentró en parecer insondable y mantener la formación todo a la vez. Aquello estaba empezando a alargarse demasiado y Desastre estaba empezando a perder el interés. Aquellas formalidades eran las que tantos problemas le habían dado cuando se unió a la compañía, toda aquella pompa que no servía para nada y que lo único que hacía era exasperar a los verdaderos soldados como él

No podía esperar para verse rodeado de nuevo de la naturaleza salvaje que había lejos de aquellos muros, correr libre como el viento por la sabana en lugar de estar allí de pie siendo parte de un espectáculo para que la gente de aquella ciudad pudiese comentar sobre cuan bonitos eran sus nuevos defensores.

Cargando editor
28/02/2016, 11:17
El Cráneo de Plata.

A Khadesa, de pie en silencio junto a los Hostigadores, se le escapa en ese momento una lágrima, que recorre presurosa su mejilla.

Cargando editor
28/02/2016, 11:19
"Todos sus días están contados". - Soldados de la Compañía.

KHADESA:

- Por un momento crees que tus lágrimas son de alegría, por la felicidad que te produce ver de nuevo al gigantón de Campaña recuperar la capa negra que por derecho le pertenece.

- Pero entonces ves fugazmente dos rostros. Dos almas que anoche volaron presurosas hacia la Llanura Brillante para nunca más regresar.

- A una apenas la habías tratado, aunque se crió en el seno de la Compañía, pues siendo un bebé su madre. de los Lanzas del Viento, la puso en brazos de Analista.

- Al otro le conocías mucho más, pues en ocasiones te ayudó con los enfermos o te trajo hierbas curativas. En su rostro destacaba sobretodo un ojo extraño, siempre hinchado y enrojecido.

Cargando editor
28/02/2016, 11:20
Sabandija.
Sólo para el director

Fijarse en aquella imponente mujer no era difícil. Lo que no comprendía era que ella no parara de mirarle...¡a él!Si era un mindundi al que nadie hacía caso. Cuando observó cómo le guiñaba un ojo, la boca se le abrió de par en par. Agitó la cabeza tomando de nuevo el control de sí mismo, haciendo que las elaboradas trenzas brincaran como gacelas en la sabana. Sentía toda la sangre concentrada en su rostro, ardiéndole. Se palpó las mejillas preocupado por si alguien pudiera darse cuenta de su turbación. Volvió a elevar la vista y sonrió con timidez para inmediatamente volver a fijar su atención en la ceremonia.

Me ha guiñado un ojo...- ¿Qué quería decir aquello? ¿Quizá veía algo en él que le gustaba? No entendía qué podría ser, aunque prefería aquello a que quisiera descuartizarlo por ser un pusilánime.

Cargando editor
28/02/2016, 11:28
Sabandija.

Cuando su turno por fin había finalizado, Sabandija recuperó su posición de firmes, aunque seguía estando inquieto. Un ligero rubor daba a sus pómulos el aspecto de fruta madura y su mirada no paraba de pasar del suelo a los protagonistas de la ceremonia de jura, de nuevo al suelo y luego a los espectadores. Su mirada se posaba de uno a otro como una abeja se posaba de flor en flor en busca del delicioso y dulce polen.

Cargando editor
28/02/2016, 11:45
Khadesa la Quinta.
Sólo para el director

¿Entiendo que es una visión de que dos de los que han quedado en el campamento custodiando al Capitán han fallecido?

Cargando editor
28/02/2016, 13:09
La Compañía Negra.

KHADESA:

- Por un lado crees que sí.

- Por otro, este es un lugar en el que se han realizado incontables sacrificios, y está imbuido de energías negativas de muerte. Podría ser perfectamente una sensación engañosa.

Cargando editor
28/02/2016, 22:22
Guepardo.

AÑO: 201 DE KHATOVAR.

MES: ANTÍLOPE (MES DÉCIMO, PRIMERO DEL OTOÑO).

DÍA: PRIMERO DE MES.

ANTES DEL MEDIODÍA.

Guepardo formó junto al resto de compañeros de la compañía. A diferencia del resto él no se engalanó ni se puso sus mejores ropas. No sacó brillo a su armadura o a su calzado. Sencillamente por que no disponía de nada de eso. Se preguntó por que nunca antes había tratado de obtener algo de ropa, para los climas más fríos de Chon Delor, teniendo oportunidad para ello. Alguna armadura, para obtener algo de defensa en combate. Como otras muchas preguntas, desde que despertará de su coma, no tenía respuesta lógica para ello. Más ahora no importaba aquello. Su capa negra, su lanza y un viejo taparrabos era todo lo que el hostigador poseía y con ello desfiló.

A pesar de los griterios y vítores de los habitantes de Chon Delor, el desfile se le antojó onírico y extraño. Con grandes y fuertes contrastes. Sí, sobretodo contrastes.

Por un lado, los habitantes, ruidosos y activos. Vestían con diversos colores vivos y los pétalos de flores y pañuelos abigarrados que lanzaban o agitaban, dando la vida al evento. Por otro lado la compañía, envuelta en sombras en su gran mayoría, a los ojos de Guepardo. Las capas negras oscurecían, si cabe, aun más a sus miembros, haciéndole difícil discernir quien estaba a su lado. Como una procesión mortuoria de animas sombrías, donde las gentes asistentes mostraban su duelo y dolor mediante cánticos y gritos eufóricos. Esperpéntico.

Inamovible prosiguió la marcha no sin antes percatarse que, en el público, no había nadie "manchado" por la sombra. Solo buena parte de la compañía. Aquello lo inquietó.

Tras llegar al sitio indicado para la jura de los nuevos miembros que pasarían a ser hermanos de armas, desde su posición contempló el ritual del juramento. Uno a uno fueron presentándose los aspirantes, apadrinados por aquellos que les impondrían la capa. Lo que vio hizo que le recorriera un escalofrío por la columna: todos los aspirantes carecían de las corruptas sombras envolventes. 

La visión lo asustó: contempló como cada limpio aspirante era conducido, por su respectivo sombrío, a realizar el juramento, como inocentes corderos llevados a un matadero. Se arrodillaron para jurar, mientras sendas capas de sombras les eran impuestas sobre sus hombros. El jaguar apretó la mandíbula, temiéndose lo peor. Una sombra, sin duda la de Analista, entonó un distorsionado, desagradable y oscuro ritual, que heló la sangre del hostigador. Debajo de la forma sombría, las voces deformadas eran desagradables. El rito del juramento le resultó aterrador.

Uno a uno los aspirante fueron jurando. Uno a uno sus cuerpos comenzaron a teñirse de negrura, quedando envueltos en auras tenebrosas. Un especial dolor le causó el inocente, emocionado y sonriente rostro de Plumilla que se alzó como hermana juramentada. Esta se giró sonriente y su sonrisa fue lo último que vio antes de que quedara totalmente envuelta en penumbras.

Guepardo se llevó una mano a su rostro, tapándose los ojos por un instante. La apartó, pero todo seguía oscuro. Ahora más que antes.

"Es el juramento...", descubrió desolado, "... o mi locura en aumento".

Su vista, inevitablemente, se desvió hacia un único lucero blanco que destacaba entre el mar de negrura. Ella estaba intacta y ahora sabía el por qué.

Cargando editor
29/02/2016, 09:54
Campaña.

Campaña había permanecido imperturbable mientras sus compañeros cumplían el ritual del Juramento. Apenas se había movido, casi podrían haberlo con una estatua de oro y mármol blanco. Pero cuando los Campamenteros terminaron, le llegó el turno a su primo Matagatos.

En cuanto Matagatos terminó su breve discurso, Campaña avanzó con decisión hasta la posición indicada, colocándose frente al Teniente Rompelomos y esperando su orden. Ya sabía lo que venía después, ya lo había vivido anteriormente, por lo que no estaba en absoluto nervioso. Tenía la certeza de que lo iba a hacer bien.

El Teniente habló y Campaña respondió con una gran zancada, hincando después su rodilla derecha en el suelo de piedra. Escuchó después lo que le dijo en voz baja, un pequeño recordatorio de lo que ya estaba rondando su mente. Ya sólo quedaba esperar al Capitán.

Cargando editor
29/02/2016, 10:23
[RIP] Capitán.

El Capitán asiente cuando Campaña hinca la rodilla en tierra. Sonríe brevemente y repite el discurso.

- "Esta es la Última de las Doce Compañías Libres de Khatovar. Esta es una Compañía Libre de hermanos juramentados.

Como nuevo hermano de la Compañía, juro obediencia a mis superiores, pero también, y más importante, juro lealtad a la Compañía y lealtad al resto de mis hermanos juramentados.

Mi pasado antes de entrar en la Compañía ya no importa. Atrás quedan las rencillas, atrás queda la venganza. Mis hermanos me protegerán, y yo les protegeré a ellos, aunque no les ame.

Si alguna vez nos traicionan, recordad que la oscuridad siempre llega.

Os juro lealtad a vosotros, hermanos míos, hasta el día en que decidáis liberarme de mi juramento o muera al servicio de la Compañía.

Cargando editor
29/02/2016, 10:23
Compañía: Oficiales: Portaestandarte.

Portaestandarte se mantiene firme, ofreciendo el Estandarte de la Compañía a Campaña, para que éste pueda poner su mano sobre el mismo.

Cargando editor
29/02/2016, 11:17
Campaña.

Aunque era Analista quién lo pronuncia esta vez, en la mente de Campaña sonaba alta y clara la voz del Capitán. Cerró los ojos y su mente le transportó de nuevo a la Gran Sabana, allí donde se había ganado originalmente su derecho a pertenecer a la Compañía. El tiempo había pasado mucho más rápido de lo que hubiera podido parecer, y a su paso se había cobrado una cuantas vidas, como si fuera ese el precio que deben pagar los que siguen con vida para que el tiempo continúe su andadura. Y en ese tiempo muchas amistades se habían forjado, tan fuertes como los eslabones de una cadena. Cada Hermano era ahora una muesca en su armadura, una cicatriz en su cuerpo (algunos de ellos de una forma muy literal), y ese sería, y así debía ser, a partir de ese momento el único recuerdo que portaría de ellos. Como bien dictaba el sagrado Juramento, el pasado quedaría en el olvido, junto a todo aquello que le llevó a perder sus derechos. Campaña no era muy listo, pero hasta los animales más idiotas aprenden de sus errores. Cometería otros en el futuro, pero lo que era seguro es que no volvería a cometer los mismos que en el pasado.

Mientras permanecía con los ojos cerrados recitaba el Juramento en susurros a la vez que lo hacía Analista. Puede que no fuera capaz de explicar su significado, puede que no entendiera por completo la profundidad de aquellas palabras, pero estaban grabadas en su mente como si alguien se las hubiera tatuado. La Compañía lo era todo para él, y sus costumbres eran las suyas, y sus rituales eran los suyos y sus miembros eran su auténtica familia.

Hubo un instante de silencio cuando Analista terminó de recitar el Juramento. Campaña respiró hondo y abrió los ojos. Frente a él, asido con fuerza por el guerrero más temible de la Compañía, el amado Estandarte. Se sintió afortunado por poder tocarlo, pues ese era un verdadero honor reservado únicamente a unos pocos.

Tras ese breve instante acercó la mano para tocarlo. Cualquiera que conociera un poco a Campaña habría esperado una acción tosca, que agarrase el Estandarte como si estuviera empuñando un arma o algo parecido. Sin embargo, su gesto fue mucho más delicado. Con una inusual sutileza posó las yemas de los dedos en el mango y los movió lentamente, acariciándolo con suavidad. Volvió a cerrar los ojos, disfrutando de la intensidad del momento. Todos los héroes y grandes guerreros que había conocido habían hecho aquello antes que él, y de algún modo habían dejado allí su impronta, para otros como él, para que algo de ellos perdurase por siempre en los corazones de los Hermanos que vieran después.

Embriagado por aquella sensación de grandeza, y mientras acariciaba aún su amado Estandarte, se llevó la otra mano al pecho, provocando un sonido metálico que rompió toda la armonía reinante. Y en ese preciso instante, henchido de orgullo, pronunció la palabra que le liberaría por completo de su pasado:

- ¡¡JURO!! - gritó Campaña.

Su voz retumbó en las paredes del Bastión del Dolor, provocando un profundo eco que cesó unos instantes después.