Partida Rol por web

Aunque vengan los compañeros, Ballestero no abandona su lugar de guardia. Acecha por si alguien o algo les sigue.

- Ballestero: Se esconde, pero no muy bien.

- Dolor: Reúne el coraje suficiente para bajar el sótano y ver lo que Rastrojo describe: Una especie de cámara de los horrores o sala de torturas, que tiene un pozo que desciende hacia un pasadizo subterráneo natural.

- Cielo: Al no haber hecho su TS Voluntad ésta se entiende fallida automáticamente, por lo que queda paralizado por el miedo y no es capaz de bajar hasta el siniestro sótano.

- Rastrojo: Informa al Cabo Barril de lo que ha visto y vuelve a subir las escaleras.

- Lagrimita: Busca leña y encuentra una poca en la cocina. Si Frontera le ayuda, pueden entre los dos encender el horno de leña de la cocina.

- Cabo Barril y Analista: Hablan, tras la lectura del papel amarillento clavado en la puerta de la granja, y salen fuera.

Pide ayuda a Frontera para encender el fuego lo más rápido posible ante la proximidad del resto de la compañía.

Siguiendo las órdenes que Barril le dio a Rastrojo, subo nuevamente la escalera y le hablo.

Campaña arrambla con toda la madera que es capaz de cargar, arrancando de cuajo las vetustas vallas que rodean la granja, y la transporta hasta la casa. 

Lagrimita se centra exclusivamente en conseguir hacer fuego, tarde lo que tarde.

Dejo la tirada de TS de Voluntad para mi bajada al sótano. Aunque tarde, me gustaría recibir la misma información que el resto de los que han bajado. 

KEROPIS:

- Intentas bajar, pero algo te lo impide.

- Es una especie de sopor profundo. Cada vez que intentas caminar hacia la escalera, cierras los ojos, y al abrirlos descubres que ha pasado un minuto y que ni siquiera te has movido un paso, quedándote dormido de pie en el sitio.

- Algo en esa oscuridad te recuerda al sopor de tu tumba milenaria.

- El grupo principal de la Compañía Negra avanza hacia la Granja Maldita, uniéndose a la partida de exploración de Analista y el Cabo Barril.

Frontera, una vez ve venir a la Compañía y se les indica que se acerquen, entra a ayudar a Lagrimita que le ha pedido ayuda con el fuego.

Luego de haber echado un rápido vistazo al interior de la granja, URO la abandona para ocupar su puesto como vigía, atento a la llegada del resto de la Compañía y cualquier otra cosa que pudiera ocurrir en los alrededores.

En el camino, se detiene junto al enorme tonel de agua que sus camaradas trajeron del poblado y toma unos cuantos sorbos hasta quitarse la tremenda sed que lo aqueja.

Finalmente, luego de unos momentos de intrascendente vigilancia, ve aparecer al resto de sus compañeros por el camino. Y puesto que ya FRONTERA y LAGRIMITA se están ocupando del fuego y las antorchas, el inexpresivo k´hlata se dirige al encuentro de los recién llegados, apresurándose a ayudar con el traslado del equipo y demás enseres.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Ballestero, Caracabra y Dedos salieron a explorar el terreno alrededor del pueblo.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

El pequeño grupo de exploración comandado por Ballestero salió del campamento de la Compañía Negra.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Ballestero observó a los compañeros elegidos para esta primera aproximación. Conforme caminaban hacia el norte del campamento, en dirección al bosque, iba instruyéndoles:

──Avanzar uno, otro quieto. El primero para, otea, rastrea. ¿Sin peligro? Hace seña a su compañero y éste avanza. Le rebasa y hace lo mismo. Parejas o tríos. Si hay dos o tres grupos así avanzan en paralelo, viendo siempre a los que están en los lados, ¿comprendido? Pues bien. Vosotros dos sois un grupo de exploración. Dedos comienza avanzando y nosotros te esperamos aquí (lo normal es que ocultos). Avanza sigilosa pero siempre sin perdernos de vista. Cuando llegues ahí ──señaló un punto no excesivamente lejano ──te detienes y exploras. Cuando hayas visto todo nos haces una seña. Entonces avanza Caracabra. Se para un momento a tu lado, intercambiáis ideas. Ahora avanza Caracabra y hace lo mismo. ¿Entendido? Vamos a movernos así todo el rato. Seguiremos la linde del bosque, cuando lleguemos a ella, en esa dirección. Buscad huellas, cosas extrañas. Si hay peligro paráis y hacéis esta seña a los que vienen detrás. Si os están atacando, huid. Jamás os enfrentáis al enemigo, jamás. Vuestra misión es regresar para informar.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Seguí las instrucciones de Ballestero, y desde la posición marcada observé con la máxima atención posible. No me costó demasiado hacerme una idea de aquello que nos rodeaba, pero lo que más me llamó la atención fue lo que noté sobre el suelo.

Hice la señal a Caracabra, aún agazapada, sin estar muy segura de que en aquel plano sirviera de algo, pero nada se perdía por probar. Cuando se acercó, le hice partícipe de mis observaciones.

- Estoy segura de que aquello no es la linde de un bosque. - Dije señalando hacia los árboles. - Solo es un poco de vegetación junta. Todo esto son pastos, y diría que sigue siendo terreno despejado durante mucha distancia. Esos pequeños montículos son bajos y suaves. No suponen mucho problema a la hora de desplazarse por ellos. Y mira, - dije con un tono que dejaba ver que ahora venía lo importante - observa el suelo. Hay huellas por todas partes. Parecen de cabra, al menos la mayoría, pero algunas... ¿no te parecen extrañas?

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Para Ballestero aquello era igual que magia: no lo comprendía pero sabía perfectamente que funcionaba, así que se limitó a esperar el dictamen de Caracabra sin echar más que una leve ojeada a ese trozo de suelo perfectamente común y vulgar que mostraba Dedos.

Echó una ojeada al campamento, al pueblo y a las zonas circundantes. Lo que les había parecido un tipo de vegetación no lo era, y tampoco el límite de las tierras transitadas alrededor del pueblo era tan claro.

──Si no llegamos a ningún tipo de límite bien marcado tendremos que iniciar el giro alrededor del pueblo en algún momento. Vosotros que os movéis bien, calculad que hoy deberíamos investigar al menos la mitad de un trozo de terreno alrededor de Carnonegro lo más grande posible, y mañana deberíamos acabar, para que los jefes tengan cuanto antes una idea de dónde estamos y ordenen inspecciones más detalladas, o que vayamos a por cañas, o lo que sea.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Caracabra se reunió con Dedos y Ballestero, eran el grupo que se iba a encargar de la exploración de los alrededores del campamento. La dirección que tomaron fue hacia el norte y el hostigador atendía a cada una de las palabras del Segundo del pelotón.

Siguiendo las instrucciones de Ballestero, Caracabra se dispuso a explorar junto a Dedos. El K’hlata sin tribu esperó las señales de la hostigadora y entonces se aproximó hacia ella y escuchó lo que le dijo.

- “Cierto es Dedos” – hablaba con un tono más bien bajo intercambiando esa información y agazapado – “No hay bosque en esta zona, el bosque más cercano debe de ser el que dejamos atrás hace un día.” – luego prestó atención a aquellas huellas de cabra y luego otras que parecían ser más extrañas – “Coincide con lo que informaron los vigías, es un dato para tener en cuenta. Bien hecho Dedos.” –

Fueron avanzando y Caracabra informó de la zona de las cañas, señalando el lugar – “Allí podríamos encontrar cañas, podríamos utilizarlo como materia prima y también como combustible.” –

Atendiendo la petición de Ballestero, Caracabra se puso a seguir avanzando junto a Dedos intercambiando las posiciones tal y como había indicado el líder del grupo, intentando limitar la zona o calculando el terreno explorado sin perder de vista Carnonegro.

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Durante el trayecto Caracabra estaba pensativo, a su mente venía las imágenes de las huellas que habían visto anteriormente pero no podía asegurar del todo el causante de dichas marcas en el terreno.  

- “No estoy muy seguro de las huellas, pero tengo ciertas sospechas para pensar que se tratan de cambiapeles o trotapieles.” –

Compartió esa información que le iba rondando por la cabeza con Ballestero y Dedos.

- “No es nada claro y puede que me equivoque, pero es una hipótesis que podríamos tener en cuenta.” –

TRIGÉSIMO DÍA DE LA RUPTURA DE LA ROCA.

AÑO: 4715 RA.

MES: FARASTO (INICIOS DE LA PRIMAVERA, MES TRES).

DÍA: 3, DÍA DEL TRABAJO.

HORA: PRIMERAS HORAS DE LA MAÑANA. - CLIMA: CIELO GRISÁCEO. TEMPERATURA FRÍA.

Asintió y tomó nota. Por el momento: no bosques, un posible material de construcción -cañas- y la presencia de esos cambiapieles.

──Id pensando en calcular un número aproximado. Y qué están haciendo por aquí. ¿Vienen a diario? ¿Estuvieron solo esta noche? Toda la información que podáis extraer.