Partida Rol por web

Asentí a lo que decían los demás. Uno de mis fuertes era la organización y mantener la cabeza fría en situaciones complicadas. No era una experta en tácticas de lucha, pero si lo reducía todo a consecución de objetivos y administración de recursos, no era tan diferente de cualquier otra gestión organizacional.

- Bien. La voz aquella dijo que los centinelas habían depuesto las armas para mostrar misericordia, así que esa puede ser nuestra principal baza para acabar con todos ellos antes que tengan tiempo a reaccionar de forma letal. Somos un equipo, debemos serlo si queremos salir con bien de esta. Como tal debemos actuar.

Miré a todos y cada uno de ellos. Suspiré, lo que iba a decir no me gustaba, pero la vida de seres humanos inocentes dependía de nuestro éxito. Cualquier respuesta letal del enemigo podría poner en peligro sus vidas, y eso era algo que no podía permitir.

- Según como lo veo yo, hay que acabar con ellos antes que puedan reaccionar. Con velocidad y contundencia. Si el cascarón vacío avanza hacia aquellos de allí. - Dije señalando a unos cuantos de los más pequeños que revoloteaban alrededor de uno de los acorazados, que se encontraba a un extremo de la sala. - Y ataca al acorazado, en ese mismo instante deberíamos lanzar desde aquí el ataque contra el mayor de ellos. - Refiriéndome al Campeón central. - La confusión del ataque del cascarón al acorazado debería distraer lo suficiente al más grande para que podamos pillarlo por sorpresa.

Hice una pausa, para ver si todos seguían la explicación.

- El ataque debe ser definitivo, pues no tiene que tener oportunidad de reaccionar contra nosotros. Yo creo que lo mejor sería lanzar todo lo que podamos sobre él, yo también me lanzaré a por él, pero intentaré refrenarme para llegar a él justo después de los proyectiles y acabar con él lo antes posible. ¿Qué más armas a distancia tenemos a parte del rifle?

Esperé la respuesta.

- Los demás deberían centrarse en los acorazados. Parece que los pequeños siguen sus órdenes. Quizá una vez abatidos ellos, los menores no representen un problema.

Observé nuevamente a los demás, esperando réplicas al plan que había esbozado en un momento.

La proximidad de un combate, llenaban de ansia a Djimbo. En sus años en la guerrila, las únicas estrategias eran atacar rápido, atacar contundente y no dejar a nadie vivo para futuras represalias. Toda esta palabrería no hacía mas que ponerle mas nervioso.

Decidirse de unag vez, ninguno ha darse cuenta de nuestra presvencia. Salvo el clícope, nos está escaldeando.

Yo poder lanzarme con chica, a máxime velocité flyeando, pero campog de force venir conmigo.

Esta gente parece saber lo que hace pero quedarme en la retaguardia mientras una mujer, se lanza al combate cuerpo a cuerpo me supera. Quién coño se ha creído que es? un hombre...

Si alguno sabían tener puntería buen, tomarse rifle.

Darkness elevó una 'ceja' de su oscuro rostro ante los planes que habían estado elaborando. Se encogió de hombros. Lo único que quería era salir de allí lo antes posible y, sin saber a dónde ir, parecía que era la mejor idea. Además, la imagen que aparecía en su mente ante la posibilidad de derramar más sangre alienígena le motivaba a colaborar y, eso, le ponía de buen humor. 

—Está bien, si este -señaló a Djimbo- le deja a mi cascarón acorazado el rifle y la granada puedo lanzarla. Aunque no sepa exactamente como funciona, los músculos del pajarraco funcionan bastante bien y actúan casi por instinto. Así que a la orden de... -buscó con la mirada- Tú pareces sensato -dijo refiriéndose a QR- a su orden, llamaré la atención con el cuerpo que controlo, dispararé y soltaré la granada a modo suicida.

"De hecho, creo que lo más inteligente sería que el rifle y la granada se usen para todos los demás. Es mejor que usemos nuestros dones con el mayor de ellos, y las armas más corrientes para los otros. Pero habremos de tener cuidado, si una bomba detona, podría ser que el resto se encadenaran. Tenemos que protegernos bien con uno de esos campos de fuerza"

—Yo colaboraré con un ataque telequinético al grande. No creo que pueda ofrecer mucho más, el uso excesivo de mis poderes me está comenzando a desgastar bastante...

-Pero... joder, si el tío este del campo de fuerza se lo lleva con él, no vamos a tener mucha protección. En última instancia puedo crear un muro delante nuestra, así que yo me reservaría para una defensa de emergencia, si os parece. Además, no tengo muy buena puntería...

"Entonces, resumiendo... Miss Vivian, Miss Dolbard y Mister Jimbo encabezarán el bloque principal del ataque al Centinela. Miss Devon nos protegerá con uno de sus muros. Por mi parte utilizaré mi magia para combatir también al Centinela. Ryoma-san, el japonés, supongo que atacará también. E intentaremos atraer la atención de loso demás para usar las armas del cuerpo controlado por Darkness para acabar con lo que se pueda de los demás, ¿no? Va a ser arriesgado, pero sería un movimiento que, rápido, nos daría la ventaja. Tendríamos que hacerlos todos al unísono para aumentar la posibilidad de éxito"

—Profeta detectado. Activando protocolo de apertura de puertas. Detectada figuras de intenciones desconocidas. Estableciendo contacto con Inteligencia Artifcial para aceptación de nuevas órdenes

- Perfecto, parece un plan. Yo también golpearé al Centinela. Como principal criterio recuerden, golpeen de los más grandes a los más pequeños, a menos que puedan golpear de a varios pequeños a la vez. Chica Magma, por favor encargate de defender a los demás prisioneros con esos muros. Aprovechen las columnas de los costados para obtener cobertura.

- Si estamos de acuerdo, vamos a la cuenta de 3...

Asentí. Parece que habíamos llegado a un consenso en el plan de ataque y lanzarme contra el centinela, sabiendo que con ello protegía vidas inocentes, no era para mí algo sobre lo que dudar.

Miré al centinela y me preparé para salir corriendo a toda velocidad contra él.

Un secundo!! Van abrir puertas, venir profeta, clicope esperardo intrusciones para atuar contra nos.

Golpear durog, golpear rápido y salir puertas por, ok? Chica, damos en piernas, intentarnos que caer el de cara, bien?

Aun seguía sorprendido por el hecho de que los prisioneros de la habitación contigua fueran humanos normales. Si supuestamente éramos prisioneros peligrosos, o bien habían pecado de soberbia o no les importaba lo que pudiera pasarles. Una tercera opción sería que quisieran expresamente que los liberáramos para entorpecernos de alguna forma, lo cual era preocupante.

La chica volcánica al principio parecía encendida. Necesitaba aprender meditación, pero careciendo de tiempo para ello, me limité a darle unos pequeños consejos de concentración antes de llegar a nuestro primer encuentro. Dejé que los demás se encargaran de la estrategia, pues era algo que solo se me daba bien en el uno contra uno.

Tras acordar que los ataques a distancia se centrarían en el más grande de los enemigos, uno muy similar al que me teletransportó hasta ahí, lo cual hacía lógico eliminarlo primero. Asentí a las palabras de los demás y encendí ambos brazos preparado para el ataque.

ok, gracias es lo que recordaba entonces. XD