Partida Rol por web

El hombre se mantuvo en silencio, observando como los jóvenes empezaban a recoger las colillas. Miró fijamente a Leo, cuando éste mostró sus cualidades como humorista... El señor Güttam parecía estar estudiándoles.

- Quizás os creais muy graciosos... O posiblemente es que sois más tontos de lo que creía... - Empezó a decir el hombre una vez los jóvenes hubieron terminado y se quedaron a la espectativa... - Vosotros, ¿qué entendéis por calzado deportivo? ¿en qué idioma se os tiene que hablar para que entendáis una simple indicación? Tranquilos... No hay problema. Sacaros las botas. Y tú, chaval... - Dijo volviéndose hacia David Cowen. - Obedece de una puta vez. -

Miro a David y niego con la cabeza. -Éste es tonto...- Pienso, pues ser rebelde esta bien, yo lo soy; pero hay que saber cuando serlo, y ahora no es el momento...

-David, no seas tonto, que éstos pegan, no quieras complicarte la vida tán rapido....- Le susurro como consejo, pero sigo al lado de Erika, pendiente de ella y mi promesa...

Kelly pone los ojos en blanco. Ya se lo esperaba.

Cómo le gustaba a la gente dar la nota. ¿Es que aún estaban en fase de negación? Hiciesen lo que hiciesen iban a estar ahí mucho tiempo, y o obedecían y dejaban el tiempo pasar, como haría ella, o se ponían en plan rebelde y las pasarían canutas. Sobretodo, ahora que ya conocen el carácter del director.

K espera pacientemente a que obedezcan. Ella está lista.

¡Qué bonito panorama! pienso mientras observo al resto, ¿tienen miedo que los golpeen?. Niego con la cabeza. A mí me han golpeado toda la vida, y no me afecta.

Los adultos piden respeto, pero no respetan. Murmuro bajo pero tan claro que espero que el desgraciado lo oiga. Creen que tienen autoridad solo porque gritan y llevan un uniforme. Pienso mientras miro al sujeto negando la cabeza.

Me tratan a las patadas, y ¿creen que voy a responder?. NO.

Este Alex tiene pinta de problemático, pero es un cobarde,  le miro de reojo y sonrió. No me conoce.

Ya estoy metido en problemas, estoy acá. ¿qué piensan hacer?

-David, esa pose de tio duro ahora no te vale para nada; lo unico que vas a conseguir esque te puteén más de lo debido, y si es a ti solo me la suda, pero como nos salpique a los demas..... Y luego te quejarás de que cabrones que son. Creés que yo respeto a éste nazi... No te equivoques, y date cuenta que nos han pillado, estás encerrado; esto es un puto reformatorio. Solo espero que tú actitud no nos joda al resto, porque si no el que te va a obligar a vaciarte los bolsillos voy a ser yo, pero a ostias...- Le comento a David devolviendole la mirada de reojo. -A mi me da igual joderme solo, pero éstos cabrones usan el joder a todos por uno para crear éstas situaciones, parece mentira que David no lo vea, creé que va de rebelde, pero lo que va a conseguir es que nos puteén a todos...-

Sabes. Me levanto. Lo haré porque tú me lo has pedido tío de buena manera, pero en ningún caso porque “el señor” ese lo haya ordenado de la puta forma como suele hacerlo. Lo miro de reojo con asco. Les dije que estábamos en el infierno.

Procedo a sacarme las agujetas, y a poner las cosas cómo bien lo han dicho. Las colillas se las dejo a quienes fumaron.

Esta vez cedo, pero no esperen que lo haga siempre.

Xènia observó el espectáculo con una ceja alzada.

Norma 1: No acercarme a este payaso.

Miró de soslayo a Iván, y también a Kelly y a Xiana, estas dos últimos no sabía cómo se llamaban, pero al menos había cruzado con ellas un saludo... y algo era algo.

Miré a Alex con una sonrisa ante su gesto de agarrarme por la cintura, pues la verdad es que me gustó que lo hiciera, pero luego las palabras de aquel hombre me hicieron suspirar y tener que separarme de Alex para quitarme las botas y dejarlas sobre aquella tarima de nuevo, aunque para ello tuve que montar un circo, ya que esas botas me llegaban casi por las rodillas y no era fácil deshacerse de ellas si las llevabas debajo de un pantalón.

Dejando ahora el descubierto unos calcetines de rayas me quedé ahí de pie, sin dejar la guitarra en la tarima y pensando que después de lo que estaban liando, quizás pasaran por alto que la llevaba encima.

- Al final voy a tener que acabar quedándome en tanga..

-TSK...

Leo empieza a quitarse las botas enorme y las deja cual cosa encima de la mesa.

-Chicos cuidado, puede haber aqui una Contaminacion de la hostia, no os recomendaria estar cerca de esto.

Dice con una sonrisita señalando sus propias botas, y se queda de brazos cruazados, pero luego olvida su cinturon de pinchos y lo quita dejandolo tambien en la mesa.

-¿Requiere algo mas el señor?

Dice mirando ahora al director del centro.

Miré a David con sorpresa. El otro joven, el que se había estado besando con aquella chica, pareció haberle convencido para que obedeciera. No pude evitar dar un suspiro de alivio.

Me mantuve en silencio. Al cruzarse mi mirada con la de David, una sonrisa triste asomó a mis labios. Creo que como continúe con esta actitud va a tener muchos problemas. Me dije apartando la mirada. No le conocía, tan sólo habíamos intercambiado unas cuantas palabras, en el fondo no me importaba qué le ocurriría a la gente de aquí. Ellos estaban por algún motivo.

Tras haber dejado sus cordones, cinto, y bártulos varios en su montañita particular de cosas, Kayla se había retirado hacia una pared, en la cual se había recostado, aguardando al que Sr. Amargado volviese a pegar un par de gritos más para indicarles lo que "harían a continuación".

Apenas sonríe de lado con el comentario de Leo. Se estaba volviendo a sentir con ganas de pillarlo todo, patearlo, destrozarlo y triturarlo si hacía falta...

Pero se estaba controlando... O eso era lo que intentaba... Por eso se aislaba... Pero...

Su mente amenazaba con traicionarla, entonando los primeros acordes de "The Fight Song", de Marilyn Manson... Y luego la canción entera...

"But I'm not a slave to a world... That doesn't give a shit... And when we were good, you just closed you eyes... So when we are bad, we'll scar your minds... Fight, fight, fight, fight!!!"

La chica apretó los ojos y puños con fuerzas.
No le iba a dar el gusto al Sr. Amargado de ser su primera "esclava".

No pensaba ceder y caer en el juego de "quién grita más".
Pensaba ganar, incluso sin entrar en el juego. Y luego, se lo restregaría por la cara.

Pero este tio de que va. Tras un rato murmurando Alex con David, miro aliviado a Xènia cuando este ultimo hace lo que nos conviene, al fin. Buff.. pense que ese chalao nos iba a meter en problemas.

Me doy cuenta de que Xénia me mira unos instantes y le guiño un ojo sin dejar de sonreir. Menos mal que no es una carcel. Le digo en voz baja.

- Muchacho, allí falta el zippo que tienes... - Empezó nuevamente a hablar el director dirigiéndose a Leo. Levantó la ceja, esperando que el muchacho dejara allí su encendedor.

- Dejareis todas vuestras cosas aquí, una vez se hayan registrado ya os las devolveremos. Ahora os llevaremos a la enfermería para haceros un control exhaustivo. Primero iréis las chicas. Acompañadles. - Dijo haciendo un gesto a los guardias de la derecha, que dieron unos pasos hacia adelante. Firmes e inexpresivos, esperaron a que las chicas dejaran las cosas donde se les había indicado, y les acompañaran al exterior.

Leo se caga en todos los muertos del director y en toda su casta, pero con desgana coge el zippo de su calcetin y lo suelta con furia en la mesa, cruzandose de brazos y ceño fruncido. No dice nada mas, solo ve como las chicas una a una se iban de la habitqacion, guiñandole un ojo a Kay para que no se preocupase y darle algo de apoyo.

No creo que ese examen medico sea para tanto...

Me acerco a Erika, tras observarla como se quita las botas con una sonrisa calida al ver sus calcetines. El director habla de nuevo, y veo a Erika preocupada por su guitarra.

-No te preocupes, yo te la cuido.- La susurro con una sonrisa sincera dandola un beso corto en los labios.

 El hombrecillo aguarda de pie. Parece no temer y se ve de como manera tranquila aguarda a las instrucciones. Realmente se lo nota sereno como si todo lo que sucediese no estuviese pasando en ningun lado. Solamente en sueños. Observa a las chicas irse. Pero no reprocha nada ni se molesta en dar ningun comentario.. No parecia oportuno hablar en situaciones donde el lobo te tiene acorralado.

Fantastico, lo que faltaba, nos van a revisar el culo....

Me siento asteado, sin decir palabra. Mientras miro a un punto fijo del suelo.

Qué asco da la gente,

qué vil ironía salta a relucir,

De putas e idiotas estoy rodeado,

La vida se encarga de mandarme tiranos,

Las plagas de este mundo sin sentido.

Escuché las palabras del director y luego las de Alex, pero me quedé un momento pensando y por mucho que me jodiera, aquel hombre tenía razón y tampoco me pareció tan descabellado que quisiera registrar nuestras cosas, al fin y al cabo, que yo estuviera allí injustamente no significaba que lo estuviéramos todos, seguroq ue había algún jodido sicópata..

- Se le dejaré ahí, creo que será menos polémico, pero como la pase algo la vamos a tener.. este dire y yo.. - Le susurré para luego girarme hacia la tarima.

- Esta guitarra es lo único que tengo así que por favor, no la rompáis.. - No acotumbrabaa pedir nada de buenas maneras, pero por la guitarra lo que hiciera falta así que la dejé allí encima y luego dejé el tabaco y el mechero, pensando que ya había abierto la boca demasiado " gilipollas " como para encima unirme a ese " selecto " club.

- Creo que no separamos un rato.. Luego nos vemos. - Miré a Alex con algo de pena y luego, descalza, me puse a seguir a las chicas a ver qué era lo que querían verme.

Xènia se giró hacia Iván y se despidió de él con una sonrisa y un movimiento de mano, siempre con algo de timidez, pero al menos ahora se movían y eso era bueno...

¿Vamos? - les preguntó a Kelly y a Xiana, sin dejar de sonreír de aquella manera.

Ella empezó a andar detrás de Erika, con la mirada gacha.

Asiento a Erika y sus palabras, con una sonrisa complice. -Ya sabes que puedes contar conmigo para lo que sea..- La devuelvo el susurro con una mirada sincera.

Luego tras pedirles a los guardias que no se sobren con la guitarra, me mira con pena y me dice que nos vemos luego.

-Claro que si, no te separarás tan facilmente de mi...- La susurro guiñandola el ojo. Luego observo como se marcha y yo me apoyo por ahí, con los brazos cruzados, esperando nuestro turno...