Partida Rol por web

Actualizado todo hasta iniciativa de acólito, Fulgur y Harold, tras ser destruidos todos los esqueletos del lado derecho del valle.

El acólito al verse flanqueado y llevado por la locura de la cercanía de la muerte, intenta a la desesperada golpear con su maza a Harold, pero este cual férreo héroe, aguanta el golpe sin inmutarse.

Asalto 15 - Esqueletos
Uno de los esqueletos da el golpe de gracia al ogro al cual esta atacando mientras que el otro esqueleto ataca a su siguiente objetivo fallando de muy mala manera.

Asalto 16
Nuevamente se les ordena a los esqueletos atacar al siguiente ogro por lo que empiezan a lanzar golpes con sus espadas en mal estado, mientras uno acierta con su ataque, el otro nuevamente vuelve a fallar pero esta ves es aun peor que la anterior. Por otro lado Huesitos se acerca al sacerdote 1 para atacar con toda la furia que posee pero su golpe lo único que hace es golpear el suelo para luego levantar una nube de polvo a su alrededor.

Viendo que no quedaban más esqueletos delante suyo, Doflar se adelanta para buscar una buena posición para empezar a atacar desde lejos a los Ogros que rodeaban la caravana...

Asalto 17
Gracias a los dioses, la suerte empieza a acompañarme ya que después de recuperar la movilidad,el acolito en un intento desesperado me ataca y el miedo le hace errar el golpe, así que es la mía, le sonrio agarro mi espada con firmeza y me preparo a realizar el golpe mortar, pero de pronto miro sorprendido mi mano y me pregunto -por todo lo sagrado donde esta mi mano?

al parecer todo estaba tranquilo y faltaban pocos enemigos, Gerald se encarga poco a poco de los ogros con el arco potenciado con mi magia, quizá pueda ayudar encargándose de algunos de los esqueletos que antes le habían asustado, no parecían especialmente diestros en combate, si eso hará.

rápidamente guarda su ballesta y moviéndose hacia ellos saca su escudo y su maza 

Ya no tenía sentido seguir oculto. Así que salí del templo y me acerqué lo mas que pude a los ogros.

El mediano dispara su ballesta de muñeca contra el Ogro pero el viento y el grupo de compañeros que acosa a la bestia impide un tiro claro, La monje apenas roza con su vara al Ogro.

El Ogro 13 sigue con su ataque contra Lasha, la ira le inunda y consigue golpear con fuerza a la mujer que no puede evitar el enorme arma, cerca el Ogro 11 se abalanza contra Atrus pero este consigue esquivar por un milímetro la madera de la pelgrosa clava. Uno de los Ogros ataca a Harold sin conseguir atravesar sus defensas, y el Ogro que se enfrenta a los esqueletos casi desmonta a uno de ellos con un porrazo.

Dark lanza su conjuro de telaraña en la zona de los esqueletos enemigos.

Parte de los enemigos han caído, parte huye y unos pocos aguantan, no se sabe bien cual es el motivo por el que los enemigos que se quedan no huyen, será por las represalias, por su fanática creencia en su dios, el caso es que parecen decididos a morir matando.

Asalto 17

Damrod 25

Atrus 24

Alfonso 23 (atontado)

Esqueletos 20

Doflar 19 

Andrómeda, Gerald y sacerdote 18

Cassius, Burl y Garl 17

Gardian y Durgil 15 

Harold, Fulgur y Acóltos 12

Lannet 10

Ashrac Y Lasha 8

Fonkin y Ogros 6

Bráedam 5

Dark 2

Voy posteando más o menos por orden de iniciativas

Ya solo quedan 5 esqueletos, dos de ellos comandados por Ashrac y los otros tres todavía en poder del enemigo, estos tres son lo que nos preocupan aunque el asalto anterior fue la zona en donde están convertida en un bosque de telarañas, el esqueleto 1 queda apresada por la tela de araña, aunque los otros dos consiguen romper los hilos que los retenían.

Sigo posteando por iniciativas a los enemigos

El sacerdote consigue dar un certero golpe con su maza al enorme esqueleto que le acosa, una sonrisa surca su rostro quemado.

Nuevamente el clérigo se concentro para indicarles a los esqueletos que vuelvan a atacar al ogro que quedaba en combate pero ambas fallan sus ataque y le da otra oportunidad para que este contrataque o se retire.
Luego Huesitos vuelve a atacar al sacerdote que tiene al frete para así intentar matarlo, aunque su golpe fue certero y fuerte, no fue lo suficientemente fuerte como poder destruirlo, lo que implica que va a tener que utilizar mayor tiempo en exterminarlo.
Entonces fue ahí que el clérigo se movio en dirección de huesitos así podía curar sus herdias un poco.

Asalto 17

Los esqueletos habían sido destruidos, sin embargo habían dejado con una herida sangrante a Alfonso, debía sanar su herida antes de continuar con el ataque, tomo mi varita y tocando si hombro cierro su herida y veo como empieza a recuperarse poco a poco.

Mi arma espiritual continua atacando al acólito 2 logrando asestar un golpe contra el que lo deja al borde de la muerte

El mago observando que dos de los tres esqueletos lograron soltarse de la telaraña se mueve un poco para estar a una menor distancia y ejecuta uno de sus últimos conjuros, entonces nuevamente en la punta de su dedo indice se forma una pequeña esfera de color rojo fuego para luego salir disparado en forma de rayo hacia su objetivo y producir un gran daño al mismo.

Asalto 17

Mi arma apenas logra causar daño pese a clavarse en lo que en otro tiempo fue el cuerpo de esos esqueletos, pero un vistazo alrededor me da ánimos, parece que la batalla se decanta a nuestro favor. Este despiste imperdonable dada la situación hace que mi guardia esté baja por un momento, uno de estos seres del caos lo aprovecha para herirme con cierta seriedad. Un dolor insoportable me inunda como pocas veces hasta ahora, mi cerebro se encuentra lleno de la sensación de dolor, tanto que no me permite hacer nada por un momento. Aunque continúo aferrado al escudo, puede que vuelvan a pasar mis defensas. Confiaba en que no fuese así.

Doflar se preparó para atacar al Ogro 6, que permanecía aún al lado de la caravana. No podía permitir que aquella bestia terminara con la vida de los niños y el resto de los esclavos. Su tarea sencillamente era la de cuidar aquellas personas. En su cabeza todo iba como lo planeado: había creado una ilusión que le dio tiempo al resto del grupo a actuar; creó otra ilusión del jefe Ogro, aunque no sabía si la huída había sido producto de verlo muerto un instante antes, o si fue por el sonido de Fonkin, o todas las cosas juntas. Eso ahora no importaba, era momento de atacar.

Preparó uno de los virotes en su pequeña ballesta y apuntó al Ogro. El disparo fue certero, pero el Ogro apenas acusó dolor. El mediano se sentía tan insignificante ante la batalla que estaba teniendo lugar que casi se sentía deprimido. "Apenas un ilusionista" pensaba con amargura el pequeño hechicero. 

Ya quedaban pocos ogros amenazando a los prisioneros. Me coloqué en posición y disparé al que estaba al frente.

no había estrenado su maza, pero acabar con un esqueleto feo sería un buen uso para ella, veamos que tal te comportas pequeña, dice mientras levanta la maza y se dirige contra el esqueleto con un grito de guerra, que más bien sonó como el graznido de  un ave, pero tal fue la emoción y el mal calculo que tenia del peso del arma que termino por golpear la tierra a casi un metro de distancia de su objetivo