Partida Rol por web

Jack y Etsuko dejaron solos a Midori y Kat y no regresaron. Los dos se quedaron esperando a que la otra pareja regresara para esperar a que Edward regresase y ponerse en marcha, pero después de una media hora de esperar, el que entró por la puerta no fue otro mas que Edward cargando con unas bolsas de plástico en ambas manos y con un bastón de madera colgado del antebrazo. Cuando Edward entró en la habitación y vio solamente a Midoti y Kat su cara cambió a una de confusión total.

- Que mie- ¿Donde están los otros dos? -Preguntó confundido y un poco molesto mientras entraba a la habitación y ponía las bolsas llenas de ropa sobre una de las camas- Se que suponía que ellos iban a buscar información en la calle pero, ¿se olvidaron de los disfraces o que?

Después de dejar las bolsas sobre la cama, Edward se sentó sobre una de las camas al mismo tiempo que sacaba un cigarro y se ponía a fumar. Por su expresión se notaba que la jugada de Jack no le hacia la mas mínima gracia.

- Ese chico no es tan listo como aparenta ¿eh? Tuve que haber dejado a alguien en la puerta del hotel… -Dijo en referencia a Jack antes de exhalar una nube de humo y voltear a mirar a Kat y Midori- Que hacemos ahora, ¿los esperamos o nos vamos antes y les dejamos una nota junto con la ropa? Yo no soy muy fan de la primera opción pero díganme ustedes.

Edward parecía ser una persona un tanto racional, no mucho, considerando que le puso una pistola a Kat en la cabeza la primera vez que se conocieron en respuesta a una pequeña probación, pero tampoco era un descerebrado total. En vez de dar ordenes a diestra y siniestra como lo intentaba hacer Francis, el si preguntaba por su opinión.

En algún momento había devuelto la silla a su sitio y me eche en la cama a la espera de que el tiempo pasara, de vez en cuando mirando de reojo el ordenador para comprobar como iba el tema de las cámaras policiales, estaba aburrido y mucho además pero tampoco podía hacer otra cosa que esperar. Paso un rato hasta que la prueba se abrió, pero fue Edward quien la cruzo con la ropa preparada, ante eso solo saque mi móvil para enviarle un mensaje a Jack: "Edward esta aquí con la ropa, Midori y yo nos cambiamos y salimos... Como hayas escapado por tu cuenta con Etzu no pienso ayudarte cuando te pillen, quedas avisado."* Tras eso suspire sentándome bien en el borde de la cama.

- Si han decidido salir por su cuenta es problema suyo solamente... Paso de ir como una niñera detrás suya, son mayorcitos ambos ya como para tomar sus propias decisiones -deje claro cuando Edward pregunto sobre que hacer ahora, estire un poco el brazo para alcanzar la ropa y la fui mirando mientras hablaba- Vamos a salir ya, llevamos mucho tiempo aquí dentro metidos y aunque Francis no lo crea a mi tampoco me gusta un pelo pasarme todo el día encerrado -saque la ropa que me parecía de mi talla y le pase el resto a Midoria, entonces mire un momento a Edward, mire a la puerta y volví a mirarle a él- Ejem... ¿Nos podrías dejar solos para cambiarnos? La verdad es que no me hace mucha gracia quitarme la ropa delante de un desconocido... casi uno al menos -era una mentira gorda como pocas, me importaba muy poco quedarme en ropa interior delante de cualquiera pero lo decía por Midori, él no tenía ninguna razón para saber la verdad sobre mi amigo.

El tiempo pasó y ni Jack ni Etzuko regresaron. Midori gruñó, mas no dijo nada más al respecto. Se los había advertido, en que no los cubriría si se iban por su cuenta. Si eso era lo que querían, podían hacerlo. Él no pensaba dar su vida de esa manera.

Se la pasó sentado contra la pared de ojos cerrados, lo cual cualquiera podría interpretar como que se había dormido... y tal vez era el caso, aunque apenas se abrió la puerta, abrió los ojos para mirar a Edward llegar con la ropa. Su comentario solo hizo que Midori suspirara algo hastiado, pero no hizo comentario. Se puso de pie y se dispuso a seleccionar la ropa de chica que pareciera de su talla. Poco después miró a Kat algo sorprendido, mas luego sonrió de medio lado en forma de agradecimiento por su consideración y esperó a que el tal "Mr. Revólver" saliera para entrar al baño a cambiarse.

Verse como una chica era más que solo cambiarse de ropa, pues debía también quitarse las vendas de su torso y arreglar su cabello para dejar todo rastro de Midori atrás. Cuando se vio lista, salió viéndose como Chizuru y guardando celosamente su ropa de Midori.

Cuando Kat le menciono a Edward lo de salir al pasillo para que ellos se pudiesen vestir con calma, Ed alzó una ceja. Para Ed, una persona que esta acostumbrada a registrar personas o desnudar gente antes de pegarles un tiro en la cabeza, el hecho de que Kat y Midori quisiesen cambiarse solos le pareció extraño, y por un momento pareció como si no estuviese dispuesto a salir de la habitación, pero al cabo de un par de segundos, en los que no dijo nada, pareció como si hubiese llegado a alguna conclusión interna o algo por el estilo.

- Son un par de niños, tal vez les da pena -Pensó para si mismo

Después de dejar salir un suspiro ronco y pesado acompañado de una nube de humo, se levantó de la cama en que estaba sentado.

- Vale, pero no se tarden tanto -Dijo apuntando a los dos chicos con la punta del cigarro que se estaba fumando.

Ed cerró la puerta detrás de el y Kat y Midori quedaron solos de nuevo.

La ropa que les habia traido Ed era bastante simple, A Kat le trajo una franela Azul de mangas cortas0 que tal vez era un par de tallas mas pequeñas de las de el chico, pero que aun le quedaba. La otra camisa que masculina que habia era la de Jack, y esa era demasiado grande como para que le quedase bien a Kat, pero por pantalones si tenia para elegir. En la bolsa habían e unos bombachos verdes de estilo militar, o unos jeans azul oscuro. Los Jeans de seguro eran los que Ed trajo para Jack, así que eran un poco largos, pero nada detenía a Kat de doblar un poco el ruedo del pantalón si quería que le quedaran bien. También podía elegir entre una chaqueta negra con blanco con diseño simple o una sudadera negra. Por ultimo, estaba la peluca, si se la ponía, tendría el mismo peinado de el doctor Frank.

Por su parte, Midori no tenia para elegir como Kat, el fin y al cabo, la ropa de Etsuko no le quedaba a el, Etsuko era la segunda mas alta del grupo y el, el mas bajito, así que no tenia mas opción que ponerse lo que le trajo Ed. Una camisa blanca, unos shorts negros y un chaleco negro sin mangas. Estaba claro que Ed no tenia un sentido de la moda muy desarrollado, o fue que simplemente no pensó en como se terminarían viendo los chicos cuando eligió la ropa. Por lo menos se ven como personas normales y no algunos raros inadaptados o algo por el estilo.

Para Midori fue una sensación extraña dejar su identidad atrás. ¿Cuando fue la ultima vez que habia vuelto a ser Chizuru? Sin duda era una sensación extraña, dejar atrás una persona para convertirse en otra. Tal vez hubo un poco de duda al momento del cambio, una preocupación inconsciente, ¿Funcionará? ¿Podrá hacer las cosas bien? Aun así, no habia opción. Sin prestarle atención a lo que los rincones oscuros de su mente le dijesen, Chizuru fue la que se salió del baño al que entró Midori. No era correcto decir que parecía ser una persona distinta, simplemente era otra persona.

Una vez listos, el dúo salió de la habitación y encontraron a Ed apoyado contra la pared junto a la puerta fumando. En el suelo habia una colilla de cigarro aun humeante. Ed volteo a verlos cuando salieron de la habitación y lo primero que hizo fue hacer un comentario sobre Chizuru.

- Wow, eso si es un cambio de imagen… -comentó mientras despegaba la espalda de la pared- ¿Ya estamos listos entonces?

Mientras Edward dudaba sobre si aceptara mi petición o no yo tan solo mantenía la mirada fija en él casi como si se lo implorara de manera sutil. El silencio entre ambos se mantuvo hasta que su expresión cambio y solté ese suspiro, el cual me indicaba su respuesta por lo que antes de que la soltara ya baje la mirada con una sonrisa en los labios. Para cuando la puerta se cerro mire a Midori de reojo y le guiñe un ojo. Deje que entrara al baño para cambiarme a gusto, aunque yo ya me estuviera quitando la ropa antes de que entrara... Sin duda la ropa que eligió Ed era... horrorosa si la combinábamos toda, seguramente en cualquier otra situación habría cogido los pantalones de Jack pero ahora mismo valoraba la movilidad que me brindaban los otros así que deje de lado mi sentido de la moda por un bien mayor. Al menos la sudadera hacía que los colores no combinaran tan mal en realidad.

Para cuando salió Midori del baño ya estaba ajustándome la peluca para que el peinado quedara perfecto y que mi propio pelo no se viera por ningún lado. Al notarla centré la mirada en ella y... comencé a reír- Joder, tío de verdad que pareces una chica así. Seguro que a mas de uno le darías una sorpresa de fiesta por la noche... -desde luego me burlaba y lo hacía en un tono tal que Edward fuera podía oírlo a la perfección pero lo que Midori o Chizuru veía era muy diferente, en mi expresión no estaba esa sonrisa que ponía siempre cuando les gastaba bromas si no que estaba serio y miraba hacia la puerta tras la cual estaba "Mr.Revolver" era obvio lo que pensaba, alejaba cualquier duda que pudiera tener el hombre sobre Chizuru cuando la viera sin su "disfraz", protegía a mi amigo.

Al salir por la puerta iba el primero, asentí de inmediato casi a las palabras de Edward y sin pensarlo pise la colilla humeante hasta extinguirla- Si hubiera sabido que tu sentido de la moda era nulo te habría dicho que ropas traer Eddie.

El que Edward aceptara darles cierta privacidad para cambiarse le alivió. Le agradeció con una sutil sonrisa al pelirrojo para luego cambiarse en el baño. Quitarse las vendas del pecho que cambiaba regularmente le era normal, pero lo extraño era que en esa ocasión no se las volvería a poner de inmediato. Tuvo que arreglárselas con un sostén hecho con ellas, pero no presionándolas como acostumbraba. Así, recuperó parte de su feminidad natural. Le costó más de lo que le gustaría admitir el verse como una chica otra vez, sobre todo por los shorts que dejaban sus piernas al descubierto. Se sentía muy incómodo.

Salió con la camisa blanca, el chaleco negro encima que dejaba al descubierto la parte de adelante, los shorts, los zapatos deportivos y las mejillas sonrosadas de vergüenza. Trató de peinarse con los dedos para que su cabello cayera de manera natural, y se intentó mostrar como era cuando era Midori... pero su seriedad no le resultaba natural sin el atuendo.

Su voz cambiaba, como si se le dificultara volver a hablar como Midori viéndose así. Aún así, trató de responder a ambos, sabiendo lo que Kat hacía - E-es algo que hacía hace un tiempo y me volví bueno en ello - pero se calló para no seguir sonando así.

Trataba de bajar los shorts para que no se vieran sus piernas, tonificadas por la cantidad de trabajo físico que se esforzaba en hacer, mas también con diferentes cicatrices alargadas... tal vez de cortadas o algo así.

La broma que hizo Kat sobre el sentido de la moda de Edward le sacó una sonrisa un poco más amplia que las que mostraba siendo Midori y luego le dedicó un silencioso "gracias" a su amigo por lo que había hecho por ella.

Edward miró a Chizuru de forma extraña al escuchar la manera en la que hablaba. Por mas que ella intentara evitar que se notase el contraste entre su personalidad y la de Midori, no podía ocultarlo del todo, era obvio que Edward iba a notar aunque sea un poco el cambio, pero por suerte no le prestó mucha atención y simplemente pensó que todo era una simple actuación de Midori, ademas el comentario de Kat sobre su sentido de la moda se quedo con toda su atención.

- ¿Que esperabas que consiguiese en media hora? ¿Un Armani? -Dijo mientras comenzaba a caminar hacia las escaleras del piso en el que estaban- Eso fue lo mejor que pude sacar de la lavandería de la esquina. No te quejes tanto.

Hasta ahora ninguno de los dos se habia preguntado como fue que Edward habia conseguido esa ropa tan rápido, y parece que no pago por ella. Cada vez que hacia algo, Edward dejaba claro que era todo un criminal.

Sin esperar a que alguien dijese algo mas, Edward comenzó a bajar por las escaleras, Kat y Chizuru solo tuvieron la opción de seguirlo. Al bajar por las escaleras hasta la planta baja y entrar en el lobby, el grupo se encontró fugazmente con el chico que los recibió el primer día que llegaron al hotel llevando una canasta con cobijas y ropa de cama. El muchacho dio un traspié al ver a Edward que casi hizo que se cayera al suelo, y por su expresión, parecía como si hubiese visto al demonio en carne propia. En respuesta a la reacción de chico Edward solo bufo divertido sin prestarle mucha atención. Quien sabe que le habrá hecho Edward a ese pobre chico para que este le tenga tanto miedo, pero no era difícil notar que el chico simplemente se sentía atemorizado por “Mr Revolver”, tal vez eso explicaría la mirada extraña que le dedico a Kat y Chizuru, era una mirada llena de miedo y preocupación, parecía como si quisiese advertirles que se alejaran de el, que nada saldría bien si seguían con una persona como esa, pero no tenia el valor de decirlo en voz alta. Tal vez el chico tenia razón, pero en la situación que ellos estaban, simplemente tenían que estar con Edward les gustase o no.

Al salir del hotel Edward se detuvo un segundo y se volteo hacia Kat y Chizuru como si estuviese verificando si de verdad seguían allí, era como si hubiese esperado que ambos hubiesen intentado escapar tan solo salir del hotel. Una vez confirmo que los muchachos no escapado, sacó de su bolsillo un llavero lleno de varios tipos de llaves y comenzó a caminar hacia un pequeño auto que estaba estacionado no muy lejos de la puerta.

- Iremos en auto, entrar en la zona roja a pie es suicidio. -Dijo al abrir la puerta del conductor del auto- Es difícil que me reconozcan por la calle, pero aun así no quiero tomarme el riesgo de que alguien lo haga y me vuele la cabeza por la espalda mientras voy caminando por la calle. Díganme donde queda el la casa de Brown.

Mientras Ed esperaba a que Kat y Chizuru se subiesen al auto fue encendiendo el motor y lanzando el cigarro que se estaba fumando por la ventana.

Rompí a carcajadas antes la respuesta de Edward, se notaba que era una persona no dada a tratar con alguien tan... "yo" por lo que las bromas y puyas constantes seguramente se las tomara un poco mas en serio de lo que era normal- Venga, tío que no era en serio. Seguro que ha sido un labor encomendable -le tranquilicé como si hablara con un amigo cercano, aunque claro eso era bajando por las escaleras detrás suya por la prisa que parecía tener, e ignoraba por completo el hecho de que la hubiera robado, como si lo hubiera asumido desde el principio o como si simplemente no me importara en absoluto.

Por el camino hasta el exterior tuvimos el pequeño encontronazo con el chico del servicio que se aterraba por la presencia de "Mr. Revolver" frente a él. Como si nada le salude sonriente mientras pasaba a su lado justo tras Edward, su reacción y pequeño mensaje oculto no pudieron pasar con menor impacto sobre mi persona ni queriendo. Aprovechando el pequeño lapso de tiempo en el que nuestro "guía" abandono el edificio el primero me gire hacia Chizuru mientras trataba de ocultar sus piernas, mire a estás, luego a mi amiga y le levanté un pulgar con una sonrisa sincera, no como las que solía poner mas irónicas o relacionadas con bromas, esta mostraba una cercanía mayor.

Una vez fuera lo primero que vi fue como Ed revisaba que no hubiéramos salido corriendo a la primera- Venga ya ni que fuéramos a... ¡Mira alguien armado! -señalaba justo detrás del hombre hacia la... nada mas absoluta, para cuando volviera la mirada de nuevo al darse cuenta de que era una broma me vería en una postura como si estuviera a punto de salir corriendo mirándole fijamente- Ves, no llegaría muy lejos antes de que me vieras y vinieras a por mi -respondí riendo levemente antes de ir al coche, apagando la nueva colilla, y tomando asiento en la parte trasera del coche.

Edward salió y tanto ella como Kat lo siguieron. Chizuru se sentía extraña caminando así, por lo cual cubría sus piernas casi que a cada paso. El gesto de Kat mirándolas solo hizo que el rubor subiera a sus caras y se viera nerviosa. Su actitud era de un polo a otro a como era cuando se vestía como Midori.

La mirada asustada del chico no le sorprendió, pues era como les habían tratado todos desde que llegaron al hotel y, aunque sabía que estaban con un rufián, ese rufián era su único puente a llegar a donde necesitaban llegar, buscar lo que tanto querían que encontraran y a Dante. Aunque claro, Jack y Etzuko ya estaban en ello. Imitó el gesto de Kat, solo que con mayor timidez y siguió su camino.

Al llegar al auto de ese hombre, la broma de Kat le hizo reír. Apenada, ocultó su rostro de su amigo nuevamente y suspiró mientras se subía al auto, junto a Kat. Suspiró tratando de relajarse un poco y miró a Kat suplicante para que fuera él quien le indicara dónde ir. Se acercó para hablarle al oído tan suavemente como pudo, además que ya no parecía capaz de hablar como Midori - Por favor, dile. No... puedo cambiar la voz ya - y aún se veía avergonzada, pero confiaba en él. Por eso, no le era incómoda la cercanía.

Edward le dio un golpe suave a Kat detrás de la cabeza con la mano abierta cuando el chico hizo la broma del hombre armado. Desde hace un par de días Ed no ha podido caminar por la calle sin estar mirando constantemente a sus espaldas cada dos minutos por miedo a que justamente un hombre armado aparezca de la nada y comience a disparar, así que la broma de Kat no le hizo mucha gracia que se diga, aun así, no parecía estar dispuesto a llevar su respuesta mas allá del golpe.

Una vez en el auto, Kat le indico a Edward como llegar al apartamento de Brown*, estaba a nada mas un par de cuadras del bar, en un viejo edificio de apartamentos que ha estado allí desde los principios de Silver Port, así que no fue muy difícil de encontrar. El único problema fue el tiempo de viaje. El edificio estaba prácticamente al otro lado de la ciudad, así que se tardaron unos veinte minutos en llegar. No estaba de mas decir que el viaje fue un tanto incomodo. Edward no era para nada del tipo hablador, y lo único que hizo durante el viaje fue conducir y llenar la cabina del auto de humo de cigarro. De vez en cuando podían ver como miraba por el retrovisor de la cabina para mirar a Chizuru, tal vez era por curiosidad, el no estaba enterado de la situación de Chizuru, así que le parecía sumamente extraña la forma en que el estoico chico de pelo verde actuaba de forma tímida, bueno, la verdad solo Kat no reacciona de esa forma porque el si entiende un poco la situación de Chizuru.

Después de viajar por la autopista, el grupo llego a la zona roja de la ciudad, la zona mas peligrosa de la ciudad desde hace un par de días y la zona de donde salieron los chicos. Kat y Chizuru conocían esa parte de la ciudad mejor que la zona donde Francis los escondió, así que no se les hizo difícil percatarse de que habia menos gente por las calles de lo normal. Apenas eran las dos de la tarde y ya habían algunos negocios que estaban cerrando sus puertas y colgando los avisos de “Cerrado” en las ventanas. Habia una pesadumbre evidente en el ambiente, un miedo que compartían todos los que caminaban por la calle. Ese lugar era una zona de guerra, y ya estaba comenzando a pasar factura sobre los transeúntes y demas personas no involucradas con los asuntos de las mafias.

Edward detuvo el auto frente al edificio de apartamentos. No se veía ningún otro auto en frente al edificio, solo estaban ellos y ya. No parecía haber señales de ningún otro alma en la cercanía, tenían espacio suficiente para entrar al edificio sin preocuparse por ser vistos. Antes de salir del auto, Edward sacó su revolver de su chaqueta y verifico que estuviese cargado y preparado.

- Muy bien -Dijo para los chicos mientras verificaba su arma- así es como va a funcionar esto. Vamos a entrar al apartamento de Brown y vamos a buscar por máximo diez minutos, mas allá de eso puede ser arriesgado. Dudo que el maldito de Onosuke no halla pasado por aquí con su gente. Lo mas probable es que halla dejado este lugar bajo vigilancia o algo por el estilo. -Hizo una pausa y se volteó hacia Kat y Chizuru desde su asiento- ¿Están seguros de esto? la verdad dudo que nosotros tres encontremos algo que ese sabueso y su grupo no hallan podido conseguir.

Incluso mientras era golpeado me seguía riendo de mi propia broma además se notaba que esperaba una respuesta agresiva porque había puesto, con un mínimo esfuerzo, los brazos para cubrirme. Savia que podía ser una broma pesada pero así era yo y además si no podías relajarte de vez en cuando casi ni valía la pena estar vivo.

Una vez en el coche ya tenía intenciones de dar indicaciones sobre donde era, normal teniendo en cuenta que no me callaba ni debajo del agua, pero Chizuru también le pidió de una forma... diferente, era realmente diferente a como la conocía, la mascara de Midori no era solo eso si no que se trataba de otra personalidad completamente nueva y diferente. Incluso podía decir que verla actuar así después de tanto tiempo me descolocaba, básicamente porque se veía vulnerable y... bastante mona. Cuando me susurro al oído me rasque el cuello y mire hacia otro lado sin ninguna razón antes de inclinarme hacia delante e ir indicando el camino a Ed.

El camino iba a ser largo de cojones, estábamos todo lo lejos que podíamos de la casa del viejo y encima Edward lo hacía mas aburrido aún, lo cual era gracioso cuando yo estaba molestándole todo el rato, que si podía poner música, que si nos llegaba el humo todo el rato, que si tal vez a la vuelta podíamos parar a comprar unas pizzas, comentarios en general absurdos y molestos que solo buscaban precisamente sacarle de sus casillas... Por suerte para él eso solo fue la mitad del viaje ya que el resto del tiempo lo dedique a ver vídeos en el móvil, dejando que Chizuru los viera también si quería. Pero al fin tras un muy buen rato terminamos por llegar, el último tramo del viaje era deprimente, ver como la gente estaba en las últimas por los problemas entre mafias era triste desde luego, sobretodo cuando conocía a muchas de estas personas y frecuentaba los locales que ahora cerraban con prontitud.

- Sinceramente Edward -por esta estaba manteniendo la seriedad que la situación requería- No tenemos ninguna garantía, pero tampoco muchas mas opciones... Estamos sumamente jodidos, buscamos algo de lo que nunca oímos hablar mientras uno de los asesinos mas desquiciados de la ciudad nos busca por ese mismo objeto. Decir que estamos seguros de algo sería mentir -le respondí, podía sonar desalentador pero era la realidad con la que nos tocaba lidiar

Se extrañó cuando Kat se volteó al hablarle, pero no le dio importancia. Después de todo, hizo lo que le pidió y Chizuru pudo respirar un poco para calmarse. Y si bien notó las constantes miradas de Edward, no se quejó, mas sí bajó la mirada avergonzada. No le gustaba que la miraran mientras se veía así. Se sentía... insegura.

Las bromas del pelirrojo alivianaron un poco su incomodidad y se sintió bastante más tranquila, mientras sonreía discretamente por sus bromas, para luego unirse a los videos que este había puesto, claro que hablando lo mínimo para no darle más motivos a su escolta de sospechar o mirarla con tanto detenimiento.

Por fin llegaron y no pudo evitar los nervios. Habían salido vivos por muy poco y no quería que eso cambiara. Ya cuando llegaron y Edward les dijo que tenían pocas posibilidades, Chizuru asintió a las palabras del pelirrojo. No era como si no les hubieran dicho que no tenían idea de qué estaban hablando ellos, o de lo que escondía Brown, pero era la única pista que podían seguir en ese momento, así que debían correr el riesgo.

Trató de engrosar su voz, pero le salía terriblemente mal para decir - Es cierto. No tenemos opción - y después de ese otro intento fallido, decidió comunicarse por señas con Mr. Revólver. Es que casi parecía un adolescente cuando le estaba cambiando la voz.

Edward terminó de revisar su revolver y lo guardó dentro de su chaqueta de nuevo. Entonces, volvió a tirar el cigarro que se estaba fumando por la ventana del auto y abrió la puerta para salir.

- Muy bien, vamos.

Una vez fuera del auto, Edward esperó a que Kat y Chizuru salieran para pasarle seguro al auto con el control remoto de las llaves y luego comenzó a caminar hacia el edificio. En la entrada no había nadie, y parecía como si todas las ventanas de todos los pisos estuviesen cerradas. De seguro los residentes estaban tomando precauciones después de que Onosuke y su combo pasaron por el lugar.

De seguro vivir en ese lugar tenia que ser bastante barato por la falta de seguridad, el grupo no tuvo que pasar por ningún tipo de seguridad durante el camino, el edificio era uno de esos que no contaban con ninguna reja que separara la calle del terreno de los apartamentos, y la supuesta cabina del vigilante estaba vacía. Parecía como si nadie los hubiese visto entrar al edificio, pero en estos días, hasta las paredes tienen ojos, así que confiarse seria un error incluso con los disfraces.

Subieron en el ascensor del edificio hasta el piso dos, que era el piso donde se encontraba el apartamento de Brown. En el pasillo vieron a la primera persona del lugar, era un señor de edad avanzada y bastón que al parecer estaba llegando a su casa. Tenia las llaves en la mano y aun no había abierto la puerta de su apartamento. Tal vez pudieron haberle preguntado algo, pero en cuanto el señor los vio llegar por el pasillo, se apresuro en abrir su puerta y entrar a su apartamento. Lo mas probable es que hallá sido Edward el que asustó al señor.

Sin ningún otro encuentro con otro ser humano, el grupo llego hasta la puerta del apartamento de Brown. La placa de identificación de la puerta aun decía "A, Brown". O bien ese era el edificio con menos atención del mundo, o no la habían cambiado por cualquier otra razón, cosa que no seria muy sorprendente contando con el nexo de Brown con la situación actual.

El que abrió la puerta del apartamento fue Kat, el era el que sabia sobre el error de la cerradura. Aunque se tardo un par de intentos, solamente bastó con meter en la cerradura una de las llaves de Edward y girar para que la puerta se abriese. Kat no pudo evitar sentir un poco de nostalgia al recordar como el viejo se quejó de la cerradura cuando le mostró a Kat el error que tenia. La misma nostalgia también asalto a Chizuru cuando entraron al apartamento. De seguro si en ese momento ella fuese Midori se hubiese tomado mejor el momento, pero, al entrar, la imagen que le venia a la mente era la de Brown cayendo muerto desde la Furgoneta de Francis. Era verdad que Brown no era la primera persona que ella ha visto morir de una forma similar, pero eso no significaba que no le afectase.

Todo el apartamento era un desastre. Estaba claro que Onosuke y su equipo habían destrozado el lugar en busca de información justo así como dijo Edward.

- Esto es un desastre. -Observo Edward al entrar- Mierda, si encontramos algo será de milagro... Bueno, ¡Manos a la obra chiquillos! Tenemos solo diez minutos, recuerden eso.

Diciendo eso, Edward se quito la chaqueta, la colgó de la puerta y se puso a remover todo lo que veía en busca de algo, lo que fuese, papeles, cajas, lo que sea, al no saber que estaban buscando, cualquier cosa podría ser algo.

Una vez fuera del coche ya mi forma de comportarme sería mas cercana a seguir con el tema de ocultar mi identidad, lo cual incluía vigilar nuestro alrededor sin ser descara y comportarme como si Chizuru fuera mi pareja, por lo que al abandonar el vehículo le tendí la mano para ayudarla a salir cerrando la puerta detrás suya- Si en algún momento te sientes incomoda me lo dices, solo quiero dar la apariencia a cualquiera que nos vigile de que somos una pareja... -le susurré para despejar cualquier duda que tuviera.

Camine detrás de Edward con Chizuru a mi lado aparentando que seguía al hombre sin tener claro donde iba cuando la situación era mas bien lo opuesto, en un tono bajo para que nadie fuera de nuestro grupo lo escuchara indicaba las direcciones constantemente guiándolo por el camino. En apariencia el lugar estaba desierto, probablemente todo el mundo estaba encerrado en sus casas para no verse involucrado en las revueltas de las mafias, solo nos encontramos a una persona cuando ya estábamos en el segundo piso, un pobre anciano que nada más vernos corrió para entrar en su casa. Ver a la gente tan aterrorizada me sentó bastante mal, no se lo merecían... Pero llegamos a la puerta, sin perder el tiempo me acerque a este abriéndola con el defecto que tenía la cerradura sin demasiado problema. Dejé que pasaran los dos y cerré de inmediato la puerta, asentí ante las palabras de Ed y mire la hora para asegurarme de no perder mas tiempo que ese límite puesto- Voy a revisar el cuarto... -dije mientras me encaminaba a paso rápido

Lo desierto del lugar le causaba un mal sabor de boca, pues sabía a qué se debía ello. La zona roja era siempre la zona más peligrosa y ellos eran los principales causantes de ello, aunque no fueran reconocidos tan fácilmente con esa apariencia que llevaban. Al ver que Kat le tendía la mano, la tomó con un rubor apareciendo en sus mejillas, mas tratando de actuar lo más natural posible. La explicación posterior se llevó un asentimiento de su parte y una sonrisa tímida surcando su rostro. Se aferró al brazo de Kat mientras miraba alrededor viéndose confundida para luego avanzar por el edificio.

Aquel hombre corrió al verlos, lo cual hizo que la chica mostrara una expresión seria y bastante confundida, aunque realmente conocía a la perfección el motivo de sus acciones. Entraron a la casa de Brown gracias al pelirrojo para verla completamente desordenada y, tras un suspiro, dijo - Sí - tratando de poner la voz más grave como cuando era Midori.

Kat se dirigió a la habitación, por lo cual Chizuru se quedó en la sala buscando en todos los recovecos posibles, cajones, e incluso buscando algún tipo de cajón secreto o algo que los matones del loco que quería matarlos hubieran pasado por alto. Aunque... la verdad es que no parecía que su búsqueda fuera a dar muchos frutos.

Los diez minutos pasaron relativamente lento. Chizuru, Kat y Edward buscaron por su lado, cada quien revolvió el lugar lo mejor que pudo en busca de alguna pista. Por suerte, el apartamento de Brown era pequeño, así que ellos tres solos pudieron revisar casí todo el lugar antes de que pasaran los diez minutos que Edward estableció de limite.

Chizuru no encontró nada. La zona por la que ella busco era la que estaba mas desordenada, así que de seguro esa fue la misma zona a la que el sabueso y su grupo le dedicaron mas tiempo, en esa parte no quedaba ni una sola mota de polvo sin revisar, incluso habían varias tablas que fueron arrancadas del suelo. Todas las cajas y embaces estaban abiertos e incluso la maceta que contenía a la única planta de toda la casa estaba rota en el suelo. En ese lugar definitivamente no habia nada que encontrar. Los hombres de Onosuke debieron haber pasado horas solamente revisando ese mismo lugar.

Por su lado, Kat tuvo por lo menos un resultado que podía bien ser una pista o no. La habitación de Brown no estaba mejor que el resto de la casa, el colchón de la cama habia sido destripado a cuchillo, no quedaba nada en el armario mas que ropa que también habia sido meticulosamente inspeccionada y, al igual que en la sala, habían varias tablas que fueron arrancadas. A primera vista, parecía como si la búsqueda de Kat fuese a ser tan inservible como la de Chizuru, pero hubo un pequeño detalle que encontró. En una esquina del cuarto habia un sillón que de seguro pertenecía a la sala pero que por alguna razón estaba allí. Era extraño, por alguna razón, no habia basura junto al sillón, era literalmente el único espacio relativamente ordenado de todo el apartamento. Encima del sillón habia una vieja caja de zapatos separada de la pila de cajas vaciás que habia en el armario. Dentro de la caja habían papeles, pero no papeles cualquiera, lo que habia allí dentro eran facturas y recibos de compra venta. A primera vista podría parecer como si no fuese nada importante, pero justo en esta situación, ¿quien sabe que puede revelar un montón de facturas?

Edward, por su lado, se fue a buscar en la cocina. Sorprendentemente, la cocina no estaba tan desordenada como cualquiera hubiese pensado. Claro, seguía siendo un desastre, pero parece que Brown simplemente no tenia suficiente comida como para que la cocina fuese un desastre como el que se habia imaginado Ed. Como Edward estaba revisando la cocina de izquierda a derecha, lo ultimo que paso a revisar fue el refrigerador, fue allí cuando se topó con algo que le llamo la atención: El refrigerador tenia un par de botellas de Wiskey a medio beber. Eso fue lo primero que le llamó la atención, pues era imposible pensar que, un grupo de maleantes halla revisado el lugar de arriba a abajo y hallan dejado un par de botellas a medio beber intactas dentro del refrigerador, como mínimo se las hubiesen bebido o se las hubiesen llevado, pero nunca las hubiesen dejado en el lugar. Después de encontrarse con ese detalle, Edward ya habia terminado de revisar la cocina. Así que se fue a buscar otro lugar que revisar. El único lugar que faltaba por revisar, ya que Kat y Chizuru estaban revisando el cuarto y la sala, fue un pequeño almacén de apenas unos tres metros de alto y ancho que habia en una de las paredes junto a la puerta de la entrada. Mientras Edward abría la puerta, el ya se iba imaginando el desastre que se encontraría en el almacén, pero, para su sorpresa, el almacén estaba intacto, habían unas pocas cajas mas nada y todas estaban ordenadas y no habían sido tocadas desde hace un tiempo.

Cualquiera hubiese pensado primero en la suerte que tenia al encontrar algo como eso en un lugar así, pero para el veterano de Edward eso solo podía significar una cosa.

- ¡Oigan! -Llamo a los chicos desde la entrada de la casa- ¡Necesito un poco de ayuda por aquí!

Una gota de sudor bajo por la mejilla de Ed. Si a el hecho de que ese lugar estaba intacto lo de las botellas en el refrigerador, solo habia una conclusión posible. El grupo de Onosuke no había revisado el lugar por completo en un solo día, de seguro lo han estado revisando por partes, poco a poco durante los últimos días. Era imposible saber si iban a ir a buscar hoy o no, pero parece que el grupo había tenido la suerte de llegar al apartamento cuando no habia nadie allí.

- Miren esto, nadie lo a tocado aun -Dijo en relación al pequeño almacén cuando Chizuru y Kat llegaron junto a el- Tomen una caja cada uno, tal vez si podremos encontrar algo.

Ed no dijo nada sobre lo de que Onosuke y sus hombres aun no habían terminado de revisar el lugar y se apresuró a sacar una caja del almacén y se puso a revisar de una vez, tal vez para no perder tiempo con explicaciones. Aun quedaban alrededor de siete o seis minutos antes de que se cumpliese el tiempo limite. Si se apresuraban, tal vez pudiesen revisar todas las cajas, eran nada mas cinco al fin y al cabo.

Es piso era un completo desastre, es decir no esperaba otra cosa sabiendo quienes habían pasado por el lugar pero ver el colchón de su cama como si lo hubieran apuñalado con intenciones homicidas seguía siendo chocante. Además debía caminar con cuidado para no meter el pie en algún hueco del suelo sin darme cuenta... Toda la habitación había sido revisada hasta un punto incluso ridículo se podría decir pero eso no me impedía comprobar un poco lo que había, aunque no me costo fijarme en un sillón que no pintaba nada en la habitación con aquella caja de zapatos. El contenido de esta me intereso bastante y de hecho comencé a leer un poco lo que había escrito antes de que Ed nos llamara, no pude leer mucho pero si lo suficiente como para hacerme una idea de lo que era y desde luego que me interesaba por lo que deje la caja en el mismo sitio llevándome los papeles conmigo.

Al llegar y ver que el viejo había encontrado una parte de la casa sin revisar no pudo sino extrañarme mucho por algo así... Todo el resto de la casa había pasado por una inspección mas que meticulosa ¿porque dejarse una sala entera sin mirar entonces? Le dedique una mirada hacia Edward con una clara expresión de desconcierto. Aunque igualmente esto era una muy buena oportunidad así que agarré una de las cajas para apartarla y poder revisar su contenido lo más rápido posible.

Chizuru hizo todo lo que estuvo en su poder para buscar ese lugar, pero estaba demasiado destrozado y, si había algo allí, los hombres de Onosuke ya lo habían sacado. Suspiró con resignación y miró la única planta de Brown con algo de tristeza. La pobre no se había salvado de los salvajes amiguitos del sabueso, así que era ahora un casi perdido. Era una verdadera lástima.

Escuchó cuando Edward los llamó y fue hacia allí, aunque no pudo salir de la estupefacción del porqué tanto orden en un lugar así. Asintió y empezó a buscar tal y como se lo pidió Edward, tomando una de las cajas más grandes con cierta facilidad para buscar rápidamente en ella. Solo esperaba que esta vez pudieran encontrar algo. Si lo hacían, el haberse puesto en riesgo y el haber mostrado su verdadera apariencia no habrían sido en vano. Solo le alegraba que fuera Kat quien la viera porque el habérselo explicado a Etzuko, además del porqué no debía decir nada públicamente sería un verdadero dolor de cabeza.

Sacudió la cabeza para descartar esas divagaciones de su parte y se concentró en su tarea cuanto pudo.