Partida Rol por web

Mudir levantó una mano enn señal de espera. Con la otra sacó el sable y activó uno de las hojas. Esperó a que Lia estuviese en posición. Si cortara a la vez que explosionaba el ascensor, Lia tendría tiempo de llegar y ellos tendrían una cobertura sónica que impediría escuchar cómo caía la reja al suelo, por lo que el ataque comenzaría en el momento en que el primer hombre de Skarus moría, dándoles tiempo a cargarse a un par más antes de que pudieran reaccionar.

Krona enganchó un extremo de la cuerda a uno de los lados de la reja, por donde no cortaría Mudir, y la pasó por su cinturón. Así podría desceder controlando la velocidad. En la otra mano tenía su rifle blaster preparado.

Si todo salia bien la explisión eliminaría a alguno de los esbirros de Skarus, y entre el ruido restante podrían bajar sin preocuparse que les dispararan. Incluso podrían eliminar a alguna que otra loca de esas mientras bajaban.

Listo. Cuando querais.

Lia coloca el detonador termal y pulsa el botón de bajada, si el descender en un turboascensor cargado con un detonador termal afecta a la joven Twi'lek... no lo demuestra.

Solo son dos niveles y el Turboascensor no toma velocidad, Lia puede saltar de él y dirigirse hacia donde estáis el resto, sin ningún problema, desde la rejilla podéis contemplar como debajo, los emboscados se tensan y preparan para disparar...

Al vacío, porque el ascensor baja sin nadie en él... aún así se les escapan un par de disparos de los nervios.

Y no han respirado aliviadas cuando ambos cilindros son sustituidos por una bola de fuego que los transforma en chatarra, ensordeciendo y cegando a todo el mundo en la sala.

Mudir aprovecha ese momento de la explosión para cortar la rejilla en un amplio círculo y Krona baja en una cuerda, seguido del resto, antes de que el polvo se asiente.

Delante de ellos, los desprevenidos y cegados defensores... un par de las mujeres hasta han sido aplastadas por las estatuas que se han movido atrapando sus piernas, sus gritos añaden confusión a la escena.

Mientras Krona bajaba por la cuerda lanzó un par de disparos que impactaron en dos mujeres que estaban tratando de averiguar qué había ocurrido.

En cuanto llegó al suelo se soltó y buscó cobertura en una de las estatuas.

Demonos prisa. Hay que acabar con esta chusma para llegar a esas crisalidas de las que hablaban.

El plan estaba saliendo a la perfección. Eran pocos y por ello tenían que pensar bien cada movimiento. El hecho de que Indala no estuviese parecía haber unido al grupo como nunca habían estado. Y eso a Mudir le gustaba... A su modo claro.

Sin pensarlo dos veces Mudir salió corriendo. Era el que más daño hacía y tenían que quitarse de en medio a Dismaster antes de que se le pasara el aturdimiento. Sabiendo que Murbella también era única le señaló a su aprendiz. Lia y Krona podían encargarse de las mujeres y Selfeth seguro que iba ayudando a quién lo necesitase.

Encendió por el camino el otro sable del laser doble e hizo medio giro de cuerpo para salir volando haciendo tirabuzones en direccion a Dismater. El ataque fue directo y después apoyó ambos pies para lanzarse de nuevo hacia él intentando hacer un segundo antes de que reaccionara.

Lia aprieta el boton de bajada y sin mirar atrás sale corriendo ha donde sus compañeros esperaban. Por el camino, saca su blster de bolsillo, mientras escucha un gran estruendo: el detonador termal. Al instante llegó a la regilla por la que iban a bajar, Selfeth se acababa de deslizar por la misma. Sin pensárselo dos veces, la Twi´Lek se aferró a la cuerda y se dejó caer hacia el interior de la cámara.

Durante el descenso la mujer pudo ver la escena que había creado. Una gran humareda con llamaradas,salía del agujero que debieran haber sido los turboascensores. Varias columnas estaban caidas en el suelo y habían atrapado a alguna mujer, las demás estaban parecían desorientadas. Al contemplar todo aquello, Lia sonrió, por supuesto.

No podía desperdiciar un solo segundo, por lo que decidío soltarse antes de llegar al suelo, como a un metro, cayendo al suelo. Sin inmutarse, Lia evantó su pequeño blaster, disparó contra las mujeres y corrió a parapetarse en una de las columnas.

Mudir y Murbella descienden y avanzan entre el polvo y el caos, atacando a los desprevenidos y aturdidos sith antes de que puedan hacer nada para defenderse.

Por su parte tanto Lia como Krona disparan y disparan eliminando a las centinelas una tras otra. No sin antes buscar cobertura. Por supuesto.

Los disparos de Krona hieren de lejos a dos mujeres, Lia es más precisa y mata a otra de un tiro justo en el ojo... ¡El aturdimiento que sentía antes debe haberse esfumado!

La explosión le había propulsado hacia atrás, pero no había sido derribado, el acólito al que conocíais como Dismater trató de recuperar sus sentidos mientras desenfundaba su sable de luz y lo encendía, parpadeaba para quitarse el aturdimiento...

Y ahí estaba un hombre con un sable de luz rojo... que le golpea con habilidad en el pecho. Un golpe así sería letal para casi cualquier ser... pero el Lado Oscuro está con el ¿hombre? de rostro desfigurado y pintado y se retira mientras usa sus poderes para mantenerse consciente.

-¡MATAD A LOS INTRUSOS!-Grita mientras se retira agarrandose el pecho en el que tiene una quemadura brutal. Dos mujeres, al parecer fanáticas tratan de interponerse entre él y Mudir, tratando de dispararle.

Mientras Mudir empala al maestro... Murbella trata de hacer lo mismo con el discípulo. -¿Porqué siempre me dejas las putas sobras Mudir?-dice con buen humor... mientras con una habilidad más bien fruto de un buen entrenamiento en los caminos de la Fuerza y particularmente en el Lado Oscuro, que de muchas sesiones de entrenamiento con su sable de luz, procede a partir en dos al encapuchado aprendiz.

El esbirro de Mudir también desciende y sin dudar se lanza a por una de las mujeres, agarrandola por detras y clavando el cuchillo en su vientre...

La situación seguía siendo favorable a los atacantes, muchos de sus enemigos habían caído y los pocos que quedaban no conseguían contratacar a tiempo.

Desde sus parapetos, Lia y Krona podían disparar a placer y los que habían avanzado para luchar desde más cerca seguían con el ímpetu de la sorpresa.

Krona evaluó la situación desde donde se encontraba parapetado. Vio como Mudir trataba de encargarse de Dismaster, y le sorprendió verlo todavía en pie despues de semejante espadazo. También se fijo en que algunas de las zorras trataban de frenar a Mudir protegiendo a su ¿señor?.
No es que le fueran a hacer nada, pero le entretendrían, y el tiempo era algo que no les sobraba. Así que decidió allanarle el camino.

Las dos centinelas tratan de interponerse en el camino de Mudir, pero antes de que este tenga que enfrentarse a ellas son golpeadas por sendos disparos provenientes rifle blaster de Krona. Sus cuerpos salen disparados hacia atrás y chocan contra el parapeto, humeando con horribles quemaduras. ¿Cuantos enemigos habian muerto ya por los disparos del minion en los últimos días? Demasiados para llevar la cuenta.

Delante de Mudir, quedaba Dismater, tratando de mantenerse consciente y contratacar a los invasores que habian atacado de forma tan implacable.

Mudir avanzaba hacia Dismater cuando dos guardianas se cruzaron en su camino. Cuando iba a atacarlas, dos disparos laser pasaron a su lado derribandolas. Sin detenerse un segundo Mudir hizo un giro con el cuerpo para pasar entre ellas mientras caían al suelo y lanzarse de nuevo contra Dismater, quién intentaba controlar el daño que le había hecho en el anterior ataque.

Levantando el sable rojo, Mudir atacó de nuevo buscando el punto débil en su defensa. Y preparado para saltar atrás si conseguía acabar con él. Pues estaba seguro de que la explosión sería bastante superior a la de Indala.