Partida Rol por web

Cuando entras en el hangar ves a dos humanos vestidos con trajes de vuelo que te esperan, deben tener unos 20 años estandar y llevan bolsas y macutos a la espalda.

-Señor, oficiales de vuelo Gladriss y Madrian se presentan siguiendo órdenes, dice uno de ellos-

En ese momento una preciosa nave de unos sesenta metros de largo entra en el hangar, flotando suavemente hasta posarse delante de vosotros.

En mitad de un enorme hangar en una base perdida en los confines de la galaxia aterriza una nave esbelta y nueva, a sus mandos la joven Chiss Indala

En el hangar esperan varias figuras, una sombría pertenece al acólito Sith Kraver Diss, los otros son el resto de la tripulación de la nave, dos jóvenes humanos reclutados por las fuerzas de Darth Quarum, maestro de Indala y Kraver.

Dirijo una seria señal de aceptación a los 2 oficiales de vuelo, a continuación un leve vistazo a todo el hangar para acabar centrandome en el aterrizaje de la nave que será mi futuro transporte.

La nave desciende grácilmente hasta situarse enfrente de Kraver y los otros dos humanos.

Kraver nota que durante el descenso y ahora mismo los cañones láser de la torreta de estribor están apuntando en su dirección.

Hago descender la nave suavemente hasta tomar tierra, pero aún asi espero un poco antes de bajar la rampa para permitirles subir mientras mantengo apuntando con los lase a Diss.

- Sería tan fácil

Reconozco estar tentada de disparar y asarlo al estilo de los nativos de Jeldon, es decir, hasta acerlo carbonilla. Pero en su lugar giro el asiento y me quedo mirando al interior, esperando verlos aparecer en el interior y descubrir por fín cual es nuestro rumbo y misión.

 Mantengo impertérrito mi relajada posición y serio semblante mirando a la cabina de la cabina de la nave. 

- Que uno revise la nave mientras el otro introduce en ella el cargamento y equipaje. - les apremio a los humanos.- Informadme cuando hayáis acabado.

-A la orden señor- El oficial de vuelo Gladris sube por la nave y entra y se cuadra delante de Indala, -Señora, seré su copiloto-

-Señor- dice la oficial de vuelo con las dos bolsas de viaje a la espalda -¿llevo su equipaje?-

Agarro el rifle con cierto aburrimiento, no había tenido tiempo ni de dejar mis cosas en ningún lado así que simplemente las había tirado junto a mi asiento, pero el cogerlo y apuntar ligeramente al oficial había sido simple instinto.

- Entonces ocupa tu puesto - comento decepcionada - Y espero que sepas programar un salto.

Añado usando un tono bastante indiferente, más acorde con la sensación que me causa su presencia y observo su reacción mientras "el jefe" no se decide a aparecer.

 Asiento con la cabeza a la pregunta de la oficial. Tras unos segundos, dirijo el ultimo vistazo al hangar y dirijo mis pasos hacia la rampa elevadora y por ende al interior de la nave.

- Te pegaría un tiro.

Saludo a Diss en cuanto aparece en el interior, si a eso le sumamos que también le estaba apuntando con mi rifle sentada desde el asiento del capitán dejaba claro que había sido yo quien también le había apuntado con las armas de la nave.

- Pero alguien se enfadaría mucho conmigo por hacerlo tan pronto. - le aclaro mientras dejo de apuntarle y cruzo las piernas - ¿Cuál es nuestra misión "capitán"?

Es ovbio que me cuesta pronunciar la palabra, más por la rabia que por desconocer su pronunciación exacta.

Sin inquietarse lo más mínimo Kraver Diss responde:

-No creas que me das el mínimo miedo con tu juguete, mujer; pon esta nave en el aire con la mayor presteza posible, luego traza curso a estas cordenadas y estate alerta, vamos a una zona del espacio inexplorada y peligrosa-

Kraver tiende a Indala una tarjeta de datos y se sienta detrás suyo, en el puesto de la pantalla de comunicaciones y sensores, y a continuación cierra los ojos.

- Si señor...

Comento distraída mientras empiezo a meter las coordenadas mientras confirmo que es más idiota de lo que parece.
El rifle no es algo para intimidar a nadie, sino para ser usado o no y por desgracia éste aún no es el momento para apretar el gatillo y asar a alguien, como a cierto aprendiz sentado junto a los sensores.

- Veamos de que eres capaz pequeña.

Parece que los datos de nuestro destino son correctos, por lo que podremos volver a poner a esta preciosidad en movimiento sin riesgo a estrellarnos con algún pecio, estrella o cualquier otro tipo de mierda estelar.

- ¿Y que se supone que haremos allí señor?

Comento mientras voy maniobrando destino al espacio.

 - Continúe y concentrese en la ruta, piloto. Será informado cuando tomemos tierra.

Apenas notáis el pilotaje de Indala, que eleva la nave y la saca de órbita como si llevase practicando con esta nave años.

En unos minutos estáis en órbita, en vuestras pantallas sensoras podéis ver las defensas que orbitan en torno a la base, varios Cazas TIE que trazan órbitas predefinidas, aparte de satélites de defensa, por un instante os parece extraño que sean tan visibles, pero la lógica se abre camino en vuestras mentes... cualquiera que os busque aquí, tan lejos de cualquier sistema conocido, no vendrá con buenas intenciones y tener las defensas en el espacio permitirá interceptarlo y frenarlo antes de que pueda llegar la base.

Indala tira de la palanca apropiada y la nave salta al hiperespacio con una transición suave.

En el computador pone el tiempo hasta destino, 24 horas divididas en tres saltos de aproximadamente 8 horas.

Me levanto y recojo mis cosas en cuanto veo las estrellas convertirse en rectas infinitas que desaparecen y vuelven a aparecer antes mis ojos.

- Llamame si algo se descontrola - aviso a Gladris girando el cuello lo justo para verlo de reojo - Voy a organizar mis cosas.

Pero mientras camino directa a los camarotes no puedo evitar reprimir mi curiosidad y comprobar la templaza de Diss, así que en cuanto desaparezco de la cabina alzo la voz.

- Kraver tenemos tiempo ahora para que me aclare nuestra misión - me tomo unos segundos para abrir la puerta del camarote y lanzar mis cosas en la litera inferior - Si vamos a un sitio tan peligroso convendría saber donde nos metemos de antemano - cierro la puerta y me siento en la sala de espera - ¿O acaso tiene miedo de que le peguemos un tiro una vez nos lo cuente?

Dejo las palabras en el aire mientras espero sonriente si el capitán se decide a aparecer en la sala.

Me levanto de la silla dispuesto a revisar mi camarote no sin antes pasar por la sala de espera. La engreída aprendiz me esperaba sonriente.

 - Ya te lo dije, no te tengo ningún miedo ni a ti ni a tus insulsas amenazas. Ahórrate la valentía para cuando debas utilizarla. Y parece que tengo que volver a repetirte algo más, serás informada cuando tomemos tierra y sea oportuno. 

- Tu única preocupación ahora es estar a los mandos de la nave cuando salgamos de la hipervelocidad. No querría que tu estupidez causara un fallo de misión de una manera prematura.- Me doy la vuelta para salir de la sala de espera pero antes vuelvo a girarme en la puerta para decirle las ultimas cosas- No hables en plural, la unica que de momento no sabe respetar la escala de mandos en esta nave eres tu.  En referencia a las palabras de Indala "le pequemos un tiro".

Ya fuera de la sala me dirijo a los dos oficiales -Descansen, hagan turnos o como quieran pero los quiero despejados una vez lleguemos al planeta.

Mi camarote me espera.