McQueen iba el primero
-No debemos olvidar a los nuestros encerrados en el laboratorio, nos serán de ayuda si los liberamos, pero busquemos a los "otros", tal vez podamos acabar con ellos y luego liberar a nuestros congéneres.
Miró a la cosa Ford
-Tú podrías ir al laboratorio y liberarlos, luego te reunes con nosotros y que ellos te sigan a distancia para que intervengan llegado el momento.
Circulen, circulen!!! y que haya espacio entre los dos!!!
Brochard logró su objetivo. Localizó dos cables y al interrumpirlos, hizo que la conexión automática se terminara y que la puerta quedase completamente suelta. Después, con un poco de esfuerzo, empujó la puerta, abriéndola lentamente, e iluminó el interior.
Se trataba de una celda, no había duda, oscura y polvorienta... pero no vacía.
Había un perro de esos que suelen tirar de los trineos (Alaskan Malamute en concreto), y estaba sentado, muy serio, observando a Brochard, aunque en cuanto abrió la puerta, no tardó nada en echar a correr y saltar por su lado, saliendo al pasillo.
jajajajaja pobrecito. Ánimo en el trabajo.
Ay dios... que se por dónde va esto... xD
¿El perrete se queda quieto en el pasillo o sale corriendo alejándose de mi?
jajajajaja
El perro ha salido y está sentado mirándote fijamente.
Ñam ñam jajajaja
Yo creo que no es mejor que nos separemos. ¿Es que no habéis aprendido de la Historia? Napoleón dividió y se arruinó y como él... Algunos tantos. Así que el dicho de '' divide y vencerás '' anda mal. Aunque si queréis dividir, me pido con el sargento. Quitarme al ingeniero de encima, su mirada lasciva me perturba...
-comentó echando un paso hacia atrás entre risa, para colocarse al lado del sargento.
JAJAJAJAJAJA FAN DEL SARGENTO DE AQUÍ A LIMA. JAJAJAJAJA
FORD, puedes intentarlo, pero si no se lo toma a bien... XD
Pues me tenéis que decir a dónde vais cada uno, con o sin mirada lasciva jajajajaja
-Estoy con Victoria, la unión hace la fuerza si les atacamos los tres acabaremos con ellos, luego ya habrá tiempo de liberar a los nuestros-dije con voz neutral para luego mirar a la pelirroja-Como tú quieras, pero te perderás lo mejor de la fiesta-dijo manteniendo esa mirada lasciva.
-Pensaba que eras más dura si sólo mi mirada te perturba, me decepcionas seriamente- contesté recuperando un tono desafiante bastante divertido que no había utilizado aún. Y me gustaba.
Eah, ahí tienes pelirroja jajajaja
Yo digo en grupo, Victoria manda y votación dos a uno ejem...me gusta la democracia xD
La entidad miró a sus dos congéneres
-Está bien, juntos. Comencemos a buscarlos, esto se está alargando demasiado y tenemos otras prioridades
Dio un paso y se detuvo
-Y dejar vuestro comportamiento humano hasta que no nos encontremos con los otros especímenes, es denigrante para nuestra especie.
Por su tamaño los nombres en el mapa de la base no se ven muy bien, pone antena?, cerca de la enfermería, podríamos comenzar por ahí y si es necesario sabotearla para que no sea operativa, muhahahahahaha
Sí, es la antena de la base, pero en realidad no está operativa. El tiempo, el hielo... y sobre todo los explosivos que pusieron los nazis para evitar que escaparais, han acabado con ella, así que llegas tarde jajajajajajaja
La enfermería ya la encontramos, dudo que estén por ahí, vayamos a la armería a ver que tal. Que os parece?
Armería, me parece bien, a ver si ese fuego ha dejado a alguien más chungo, pero que los lanzallamas se hayan terminado xD
La cosa del sargento ordenando a la entidad de Vicky... Mal vamos (?)
Perfecto, como queráis.
Sargento aquí la que manda es la pelirroja, nosotros decimos que sí y punto sin rechistar xD
Pensaba que eras más dura si sólo mi mirada te perturba, me decepcionas seriamente.
Eh, eh, cuidadito, que yo no decepciono a nadie, son los demás quienes se hacen una idea de mí y, al darse cuenta de su error, se decepcionan. -bufó.
Además, hay que ver eso del que eres el alma de la fiesta ... Te imagino bailando a lo Grease...
No pudo evitar reírse burlona ante su propio comentario. Luego, le dio un toque en la frente y le guiñó el ojo, para después toser y volver a mantener la compostura.
-¿Eso que he visto es una cana, señor Ford? Una vez muestra que la edad... Pasa factura. No sólo es un poco torpe abriendo puerta, que como sea así para abrir la puerta de una nave... mal vamos, sino que ...Bueno, sus habilidades de ingeniero son nulas. Pero a lo que voy, hagamos caso a nuestro sargento.
Victoria caminó entre risas hacia su sitio y se cruzó de brazos.
¿Usted estará bien? Espero que sea ágil ahora que tiene un bichito por su cuerpo... ¿Qué tal se siente? Esperaba poderlo hacer yo, pero aquí, aprenden demasiado rápido.
VICTORIA 1 FORD 0
Cita:
Miré a Victoria elevando una ceja-Al menos yo soy más ágil saltando grietaat y no resbalo como una inexperta cosa que hiciste tú, mucha agente secreta, pero pero a parte de abrir una puerta con una orquilla poco más has hecho, ah sí, morir también-dije con un gesto jocoso agradable.
Cita:
-Las canas dan experiencia y sabiduría además de ser atractivas, no te equivoques Victoria- sonreí-y no te preocupes, estoy perfectamente, de hecho más que perfectamente, me siento...mejor-dije guiñándole un ojo.
-Movamonos ¿Dónde queréis ir?- pregunté.
No lo entiendo, primero dices de mejor ir juntos, yo te apoyo y ahora separarnos? Y sé que todo es para no ir con Ford porque estás colada por sus huesos, a mí no me engañas xD
Cita:
Por qué tú lo digas..no has conseguido herir si "hombría" xD
Con cruzar un par de cables, Brochard sintió cómo el cierre de la puerta cedía, lo que no hizo más que sorprenderle. ¿Era esa la seguridad que se gastaban los artífices de la invasión de Austria, Polonia y Francia? Un sentimiento de culpabilidad la abarcó, a la vez que recordaba cómo acusaba a Bright de conocer la combinación de aquellas puertas. Acababa de comprobar que abrirlas no era nada del otro mundo. Seguramente, aislados por miles de kilómetros de la civilación, la seguridad de sus instalaciones era la menor de sus preocupaciones.
De igual forma que abrió la armería, Brochard apoyó el hombro, haciendo que la puerta se deslizara. En su interior distinguió poco más que una sala polvorienta, desprovista de cualquier comodidad, que parecía haber estado abandonada durante décadas. Sin embargo, un inesperado huesped se alojaba en su interior. El súbito movimiento del perro hizo que Brochard diera una zancada hacia atrás, con el corazón encogido, dejando que el animal saliera de la estancia y se sentara a pocos metros de él. Le clavaba la mirada.
- Pero que coj...
Como un acto reflejo, Brochard sacó la P38 que guardaba en el abrigo, sin dejar de apuntar con la linterna al can. Parecia uno de esos huskies que usaban los musher para tirar de trineos. Sólo que este había aparecido de una sala completamente cerrada, sin comida, en una base que llevaba abandonada décadas. No, aquello era extraño. Demasiado extraño.
Jöel dio un par de pasos hacia atrás, poniendo algo de distancia entre él y el perro. Levantó su arma, apuntando directamente al animal, sintiendo como el corazón se le aceleraba. Hacía años que no mataba.
- Quieto ahí chico...
Permaneció en guardia, observando al animal. Cualquier movimiento brusco haría que apretase el gatillo. Tenía que decidir si disparar a aquel perro o no.
JAJAJAJAJA JAJAJAJA Hombre, Vicky es demasiado orgullosa como para asumir errores o admitir que Le gusta alguien, así que opta por los piques xD
Podéis picaros un poco entre vosotros que hay que hacer tiempo para los demás.
El perro observó a Brochard y se sentó tranquilamente, como si aquello no fuese con el. No parecía asustarse del arma ni comprender que corría peligro. Todo lo contrario, parecía completamente relajado.
Y digo yo. ¿Cómo de normal te parece la presencia de un perro en una base que ha estado bajo el hielo 70 años? jajajajja
Langley y Bright avanzaron con cuidado por el túnel. Langley iba con el arma en la mano mientras que Bright iluminaba el túnel e iba completando el mapa de vez en cuando.
Entonces, tras caminar durante un rato, se dieron de frente con algo que no esperaban. Dos figuras oscuras aparecieron al fondo y cuando tomaron forma y definición, dejaron sin palabras a las dos mujeres.
Brochard estaba al lado de una habitación abierta y apuntando con su arma a un perro que estaba tranquilamente sentado, sin quitarle ojo de encima.