Partida Rol por web

Tiempos Interesantes

Comedor de la Tropa y Sala Común del AURORA (Escena Paralela)

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18/06/2015, 19:19
Agente Bester

- Entonces deberíamos ir a dar una vuelta por la nave, y hablar largo y tendido. Será de lo más... interesante. - Comunicó mentalmente a Lucy, poniendose en pie y dispuesto a marcharse de allí para poder hablar más tranquilamente.

Notas de juego

Pues a algún lugar de la nave que este vacio. Mensaje para Lucy.
 

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27/06/2015, 14:53
Cronoregistro

Steve Rogers y Riddick, que últimamente parecen ir juntos a todas partes, aparecen por el comedor de la nave, adyacente al camarote común de la tropa y los camarotes de los oficiales, uno de los cuales ha sido reconvertido en celda de los dos prisioneros que actualmente retiene el AURORA. Aunque en el caso del famoso terrorista recogido en la penitenciaría orbital de Himalia, se le permita disfrutar de una suerte de "régimen abierto" a cambio de su colaboración con las autoridades. O algo remotamente parecido...

Ahora mismo la sala común alberga a cinco marines coloniales, el asistente sanitario Wallace y uno de los tipos de mantenimiento, el siempre quejumbroso Joe Brett. También está presente el sargento Pentecost, pero en lugar de sentarse con sus hombres aguarda en posición de descanso ante la entrada de la celda. Es evidente que está montando guardia. Y tiene la pistola aturdidora al cinto.

Notas de juego

Están presentes Pentecost, Agathon, Ford, Greer, Matthew y Ochoa, así como Eli Wallace y Joe Brett.

Entran Steve Rogers y Riddick

Y es presumible que en la celda esté Susumo Kodai... aunque han corrido una cortina tras los barrotes.

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28/06/2015, 00:24
Riddick "el Chacal"

Rogers me indica que sea yo quien comience la marcha, apenas he dado un par de pasos cuando parece que va a volver a la rutina de soldado y convicto, aun así espero antes de decir nada... sin duda ese comportamiento no facilitara las cosas. Mas es el quien comienza la conversación con una frase interesante. Parece ser que después de todo al bueno del soldadito le pica la curiosidad. Sonrió levemente sin mirarle. - Puedes preguntar todo lo que quieras. - Dejo que el silencio se adueñe de la conversación tras mi contestación, esperando ver la reacción en sus andares, en su respiración antes de seguir hablando. - Simplemente hablamos, el comandante parecía interesado en saber si estaba a gusto con mi nuevo régimen de puertas abiertas o si por el contrario tenia alguna queja al respecto.- La sonrisa sigue en mi rostro, ni se amplia, ni se reduce. Es igual de irónica que siempre, a la espera de ver como contesta el soldadito.

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28/06/2015, 18:01
Steve Rogers

Observo a Riddick con atención. Su silencio no oculta el hastío de ser tratado como un prisionero pero, por mucho que intente mostrarme amable con él, hay momentos en los que es inevitable mantener las formas y habría esperado que se diese cuenta de ello.

Asiento a su respuesta aunque, una vez llegados aquí, las circunstancias hacen que no pueda continuar la conversación tranquilamente. - Confío en que esté contento con el trato recibido - le digo a Riddick sin demasiada seriedad.

Saludo a los soldados mientras me dirijo hacia el suboficial. - Sargento Pentecost, ¿algo que informar? - pregunto antes de decir nada más sobre mis instrucciones.

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28/06/2015, 18:36
Sargento Pentecost

Pentecost, en pie ante el acceso a las celdas, contesta con una cansada sonrisa ante el Brigada Rogers:

- Todo en orden, aunque no es ningún regalo el tener que permanecer aquí de guardia mientras los hombres se divierten -señala con la vista a los marines, que están sentados a su mesa favorita tomándose algo- Sin embargo Adama ha sido muy específico con sus órdenes, sólo puedo dejar pasar a Riddick para que ocupe su suite personal -la sonrisa se acentúa al mirar de reojo al susodicho- Y sólo puedo ser relevado de mi puesto por usted...

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28/06/2015, 19:21
Cronoregistro

La megafonía de la nave transmite de pronto un aviso, como siempre por voz del Teniente Gaeta:

- Sargento Pentecost, deberá equiparse para servicio y embarcar de inmediato, junto a los soldados Ochoa y Agathon, en la Tintorera-1. Los datos específicos de la misión le serán revelados una vez a bordo.

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28/06/2015, 19:37
Riddick "el Chacal"

Su contestación me hace mirarle, mi sonrisa sigue ahí pero no hay ironía ni sarcasmo en ella esta vez. Se que él lo ha dicho sin demasiada seriedad pero aun así, la verdad es que es el mejor perro guardián que he tenido hasta la fecha. Supongo que el tener una capacidad moral y ética es lo que le diferencia de los demás que he tenido el placer de conocer. - No tengo queja ninguna Rogers. - Mi tono no es serio y algo seco, pero sin duda no lleva ninguna doble intención.

Avanzamos hasta encontrar a Pentecost, que parece que tendrá que ser mi guardián durante el primer turno de guardia. La verdad es que este hombre también es diferente a la mayoría, le miro durante unos segundos antes de hablar. - Siento que tenga que perderse la diversión sargento, al fin y al cabo no tengo pensado ir a ninguna parte. - Hay algo de humor en mis palabras, pero mas en el sentido de compartír con él la broma que realmente de buscarle las cosquillas. En ese momento la megafonia reclama al sargento y no puedo mas que encogerme de hombros y mirar a Rogers. - Parece que las estrellas se han alineado para que no se aparte de mi lado.

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28/06/2015, 20:18
Sargento Pentecost

Al escuchar la llamada por megafonía, el sargento Stacker Pentecost infla los carrillos dejando ir un sonoro resoplido...

- Parece que no voy a tener mucho descanso próximamente -menea la cabeza con resignación- Rogers, la tarea de vigilar a ambos prisioneros queda a su cargo... y tenga en cuenta que Adama especificó que nadie salvo él mismo puede entrevistarse con Susumo Kodai.

Entonces alza la voz para dirigirse a sus hombres, mientras abandona el puesto de guardia y extrae la llave del panel de armamento en el que deberán aprovisionarse:

- Venga, ya lo habéis oído, Karl Agathon y David Telford Ochoa... os ha tocado el premio gordo, un maravilloso crucero con una lanzadera de lujo que os llevará a las estrellas -y entona una vez más la manida cantinela cuartelaria- Cada nuevo servicio en la marina colonial es como un fabuloso día en el campo, cada comida un banquete, cada cheque de pago una fortuna, cada formación un desfile...

Una sonrisa torcida se dibuja en su curtido rostro al ver la abatida reacción de los "afortunados".

Notas de juego

EDITADO: Ya sabéis, a escoger UN arma primaria... y si queréis una pistola como secundaria.

ARMAS DE FUEGO en el sistema de juego SIN DADOS

 

Corta Distancia

Distancia Media

Larga Distancia

 

Pistola

0

0

-1

Puede ocultarse

Escopeta

+1

-1

NO APLICABLE

 

Subfusil

+1

0

-1

 

Fusil de Asalto

0

0

0

 

Francotirador

NO APLICABLE

0

+1

(+1 si apunta)

 

Además, podéis equiparos con la Armadura de Combate presurizada que proporciona +1 a Rasgo FÍSICO únicamente de cara a recibir daños.

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29/06/2015, 09:26
Steve Rogers

Empiezo a contestarle un "a eso venía" al sargento cuando le llaman por megafonía haciendo inútiles mis palabras.

- Tenga cuidado, sargento - le digo a modo de despedida mientras resopla. - Aún le debo una ronda...

Cuando me pasa las instrucciones de Adama sobre Kodai me mantengo impertérrito. Asiento lentamente, dándome por enterado. Hay algo en todo esto que no me gusta nada, pero me temo que tendré que esperar a Adama para aclararlo.

Me vuelvo hacia Riddick mientras el sargento se retira y le agradezco sus palabras con un gesto de cabeza. Tal y como dijo el comandante y yo he insinuado alguna vez, mi trabajo no es sólo mantener segura a la tripulación con respecto al asesino, sino también protegerle a él, y ahora también al Kodai, del resto de los tripulantes de la nave. - Sí, pero ya sabíamos que íbamos a pasar mucho tiempo juntos... - le digo a Riddick. - De todas formas, ahora tendrás que pasar un rato en la habitación, - añado acercándome a la cortina que oculta las celdas - así que supongo que serás el único que pueda hablar con Kodai... Aunque me temo que su conversación no será completamente privada - añado señalando la silla junto a las celdas que ha dejado Pentecost y que yo mismo ocuparé en unos momentos.

Observo un momento la sala y las posiciones de la tripulación para asegurarme que el espacio está despejado antes de retirar el cortinaje.

- Comandante Kodai - saludo al hombre que sólo he visto de paso en el puesto de mando. - Por favor, retírese de la puerta para que pueda pasar su acompañante. - Sin perder de vista a Riddick espero a que el otro hombre se separe de los barrotes antes de abrir la puerta. La sujeto mientras le hago un gesto a Riddick para que pase. - Cualquier cosa que necesiten, estaré aquí mismo... - les digo a los dos hombres.

Notas de juego

EDITADO: Las dos celdas están separadas entre sí por una reja corredera que se ha desplegado al habilitarlo como un calabozo doble... y por cierto, eso las ha reducido a dos espacios mínimos, de apenas 1,5x2m, en los que cabe el catre y poco más.

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29/06/2015, 14:28
Soldado Agathon

Llegue a sonreir, ante el numerito de Pentecost- El sargento lleva razon, Ochoa... Somos unos privilegiados... - dije, siguiendo la broma, al tiempo que echaba un vistazo a aquel panel de Armamento, del que extraje una escopeta- Ya estoy listo, señor... ¿Cree usted que nos estaran esperando media docena de vírgenes bailarinas a nuestra llegada? - pregunte, en clave de humor con cierto deje de resignacion.

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29/06/2015, 20:03
Sargento Pentecost

Lo tendré Rogers, aunque nunca se sabe que nos deparará el destino -contesta enigmático el sargento Pentecost al brigada- puede que deba invitarme a más de una ronda en el futuro -concluye con una sonrisa en el rostro.

A continuación el sargento se dispone a salir mientras responde el comentario de uno de sus hombres -Dudo mucho que las corporaciones nos hagan ese favor Agathon. A no ser que esas vírgenes sean de alguna secta y quieran bañarse con nuestra sangre. Ya me decía mi madre que tendría que haberme metido a banquero...

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30/06/2015, 06:50
Riddick "el Chacal"

Asiento a las palabras de agradecimiento de Rogers, es interesante la "relación" que se ha formado, aun a sabiendas de que puede romperse en cualquier momento, sobre todo si decido pasar a utilizar métodos menos sutiles. Aun así puedo notar cierto grado de camaradería y no me molesta, lo cual ya es algo raro de por sí. El soldadito se adelanta y dirige unas palabras a Kodai antes de indicarme que me toca entrar en mi "suite personal". - Si, supongo que sí... - Al fin y al cabo tiene razón, será sin duda el individuo con el que pase más tiempo en esta nave. Una pena, hubiera preferido a la asistente de Bester, pero supongo que por ahora tendrá que servir el soldadito. Las palabras de Rogers aun así me resultan más interesantes, "tendrás que". Me pregunto cuál sería su reacción si supiera que es exactamente lo que estaba esperando, el poder hablar en privado con Kodai, al fin y al cabo, algo me dice que es una gran fuente de información con la que además comparto gustos.

Esperé a que la puerta se abriese antes de responder a las últimas palabras de Rogers. Con la mano en la puerta me giré para mirarle. - Vaya Rogers, no le tenía por un cotilla. - Mi sonrisa se acentúa, intentando mostrar algo de humor... acido, pero humor al fin y al cabo. Y entré en la celda contigua a la de Kodai.

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30/06/2015, 08:32
Soldado Ochoa

Ochoa se dirige al panel de armamento para equiparse con un subfusil de fuego rápido y después procede a vestir la reglamentaria armadura de combate presurizada. Su gesto es serio, como siempre que se embarca en una misión, pero el ambiente de camaradería aún es capaz de arrancarle una respuesta a las bromas de sus compañeros:

- Sólo el Señor sabe lo que nos tiene deparado nuestro destino -empieza a sermonear, para luego sonreír añadiendo- Pero está claro que si no vamos a su encuentro nunca lo descubriremos... así que más nos vale movernos. Y deprisa.

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30/06/2015, 08:37
Cronoregistro

Los tres hombres, completamente pertrechados, abandonan la Sala Común para dirigirse a la exclusa de embarque de la última lanzadera Tintorera que os queda. Su partida marcará la incapacidad de la nave para desembarcar en estaciones orbitales a menos que sean lo bastante grandes para poder atracar directamente en ellas...

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30/06/2015, 19:34
Comandante Susumo Kodai

Cuando el anciano comandante retirado ve entrar a un nuevo preso en los calabozos de esta nave, frunce el ceño y le observa con suspicacia... pero no pronuncia palabra.

Por lo visto van a compartir una forzada intimidad, separados apenas por una reja que divide en dos esta celda a todas luces improvisada, mas eso no supone que vayan a conversar. Aunque la curiosidad es una característica consustancial al ser humano y no puede evitar observarlo detenidamente, como si estuviera valorándole.

Además, es evidente que a este hombre se le han concedido ciertos beneficios penitenciarios, como mínimo se le permite salir a estirar las piernas. Susumo duda mucho de que a él mismo se le vayan a dar tales privilegios...

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01/07/2015, 06:54
Riddick "el Chacal"

La puerta se abre permitiéndome entrar. El espacio es reducido pero no es imposible pasar sin molestar al viejo y eso es exactamente lo que hago, dejándole todo el espacio personal posible. La gente que no está acostumbrada a estar encerrada sigue teniendo un fuerte instinto de conservación de su espacio personal. Kodai, frunce el ceño y me mira con verdadera suspicacia mientras paso hasta mi "celda". Un cómodo alojamiento bastante reducido, puesto que apenas da para un catre. Genial, lo que me faltaba, un viejo paranoico que cree que estoy aquí para sacarle las cosas por las malas y los dos metidos en una lata. Estoy a punto de dejar que un suspiro de resignación y hastío salga de entre mis labios pero me controlo... todo por ver de qué pasta está hecho este hombre. Paso de largo, obviando por completo tanto su mirada como su existencia, hasta llegar a mi catre. Me quito las botas con tranquilidad, sentado sobre mi cama y cuando termino las dejo debajo de la misma antes de dejarme caer sobre ella, quedando tumbado a lo largo de la misma. Cruzo mis brazos por detrás de la cabeza mientras clavo mi mirada en el techo. Dejo que pase el tiempo, el suficiente como para provocar que cualquier novato por viejo que sea, se sienta extraño teniendo a alguien a su lado mientras los dos son prisioneros de un tercero. Dedico ese tiempo a estudiarle con tranquilidad, su respiración, si se mueve o no y como lo hace, si me mira o si sin embargo, deja su mirada perdida en el infinito... cualquier detalle que me permita hacerme una mayor idea de qué tipo de individuo es este Kodai. Al fin y al cabo dicen que ha trabajado con grupos extremistas... y eso es bueno para mí.

Una vez ha pasado un tiempo que considero prudencial hablo, con voz distraída y como si hablara para el vacío. - No sé porque estas aquí y la verdad es que aparte de tu nombre no sé nada de ti. Aun así, fue sin duda agradable escuchar las palabras que le dirigiste al oficial de esta nave. No hay demasiados por aquí con los suficientes huevos como para hacerlo... y eso lo respeto. - Sigo sin mirarle, solo dejo mi mirada clavada en el techo, esperando si tiene a bien contestar. Si no, simplemente dare por terminada la conversación, porque estoy seguro que mi "privilegiada" condición no le ha pasado inadvertida.

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01/07/2015, 21:57
Comandante Susumo Kodai

El veterano oficial retirado de la Armada Estelar observa al recién llegado en silencio, manteniendo una posición algo envarada. Aunque se diría que es algo consustancial a su persona, puede que tantos años de servicio le hayan condicionado a estar siempre tieso, mientras su respiración es tranquila y sosegada. Y su mirada, vivaz, recorre los rasgos de su compañero de celda como si intentase discernir por qué le resulta vagamente familiar…

Hasta que Riddick rompe el silencio. Aún cuando ha empleado un tono bajo, buscando discreción, su voz es profunda y resonante, muy personal.

- De modo que me he ganado su respeto… ¿eh? -responde con un susurro ronco, apenas lo suficiente para que le oiga alguien que está a pocos metros- Desde que le he echado el ojo encima me ha dado la impresión de haberle visto antes, en alguna parte, pero no ha sido hasta ahora, que oigo su voz, que he logrado ubicarle. Nunca nos conocimos en persona, claro… pero le vi en los noticiarios. Hace bastantes años ya. Y recuerdo su famoso discurso, pese a los intentos oficiales de silenciarlo fue retransmitido a todo el Sistema Solar hasta la saciedad -y cita- "No habrá paz sin justicia". Bien escogido, una de esas expresiones afortunadas que calan rápido en las masas. Breve y conciso. Casi poético…

Una sonrisa torcida se dibuja en su avejentado rostro.

- Me sorprende que siga vivo, la verdad, siempre supuse que pese a que hubiese esquivado por muy poco la pena de muerte, gracias al trabajo de aquellos abogados liberales tan entusiastas, acabaría flotando en el vacío del espacio -comenta con una extraña tristeza- Yo tampoco sé por qué está usted aquí, pero le voy a decir algo… hace unos años, cuando aún estaba al mando del Yamato, le consideré un criminal, un terrorista fanático. Pero hoy día, con lo que ahora sé, puede que haya cambiado de perspectiva… hasta ese extremo hemos llegado. Así que podría decirse que usted también se ha ganado mi respeto, Chacal

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04/07/2015, 21:01
Riddick "el Chacal"

Su postura durante todo el rato grita a los cuatro vientos oficial, la mayoría de los soldados saben cuando relajarse, aun estando prisioneros. En cambio, este hombre parece que esta acostumbrado a esa postura, casi como si fuera natural en él. No hace nada en todo el tiempo que dedico para que se ponga nervioso por sí mismo... sin duda no es un hombre que se asuste fácilmente, ni que haya estado viviendo siempre entre algodones. Hablo y entonces si dedica su atención a mi, o mas bien, en lugar de mirarme se fija en mi voz... se nota por la manera en que su cuerpo se ladea ligeramente, permitiendole escucharme mejor. El hombre reacciona con algo de sarcasmo a mis palabras, o tal vez solo sea imaginación mía... el tono de su voz es neutro y bajo, lo suficiente como para que ni siquiera Rogers pueda darse cuenta de que hablamos. Sonrío levemente con cada palabra mientras el conjunto de las mismas me indica que sabe muy bien quien soy... no esperaba menos, pero sí es sorprendente que se deba a la voz. Un hombre de detalles. Sus breves elogios me obligan a tener ganas de sentarme y mirarle directamente, no por los elogios en si, si no por la manera de decirlo... me gusta aunque no sepa porque. Asiento lentamente, en reconocimiento a sus palabras.

Sus labios se arquean mostrando una sonrisa ladeada, una que me encanta utilizar a mí mismo. Lo hace justo antes de hablar, sus palabras me traen algunos buenos recuerdos, sin duda no de los abogados, pero buenos al fin y al cabo. - Sé a lo que se refiere, yo también me sorprendí del veredicto, hasta que vi mi nuevo alojamiento. Una instalación de lo mas moderna con lo último en tecnología para inducir pesadillas que torturasen a sus inquilinos: Himalia. - Le miro mientras sonrío al decir el nombre de la prisión. El hecho de que decida contarme que antes ostentaba el mismo rango que Adama me sorprende, pero aun más por verle en el lado en el que está ahora. Así que el terrorista y criminal, ahora es respetado por el antaño también respetable comandante. Sin duda la vida da giros interesantes, pero en este último ha sacado a relucir toda su ironía. Hablo en el mismo tono que el, bajo pero sin llegar a susurrar.- El hecho de que haya sido capaz de dar ese paso, tras darse cuenta de lo que ocurre tras bambalinas... y no cerrar los ojos haciendo como que no ha visto nada, le da mucho mas valor de lo que cree, Kodai, al menos para algunas personas. - No lo digo, pero está claro que me encuentro entre ellas. Y permito que la misma sonrisa aflore en mi rostro. Intentando que entienda más de lo que dicen mis palabras o mis silencios. Al fin y al cabo, esta nave no es mas que un enorme tablero de ajedrez, y las fichas hay que moverlas con cuidado.

Me recuesto contra la pared, usándola como respaldo sin dejar de mirar a Kodai. Espero a que pase un poco de tiempo antes de hablar, mientras no puedo evitar saborear mi apodo. Aquí todos son demasiado corteses y educados, o tal vez simplemente no quieren recordarse, y recordarles a los demás, a quién tienen delante. Reflexiono sobre lo dicho hace un momento.- ¿Por que le cae tan mal Adama? - Otros tal vez serian mas sutiles, intentarían socializar, o ganarse a su compañero, yo no. Ambos sabemos lo que somos y ninguno es tan tonto como para dejarse manipular... el ser directo en este caso es mas una ventaja que un problema. - No es que tenga nada en contra, ni mucho menos. Solo que estoy seguro de que encontrara peores elementos en esta nave sobre los que descargarse.

Notas de juego

¿Llegarán estos susurros a ser inteligibles para alguien como Rogers?
 

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04/07/2015, 22:32
Comandante Susumo Kodai

Susumo Kodai alza las cejas ante la observación de su compañero de celda…

- Si quiere que le sea sincero, no sé muy bien qué opinar con respecto al comandante Adama, pero cabe la posibilidad de que mi primer juicio sobre él fuese precipitado -admite, midiendo cuidadosamente las palabras- Ahora mismo no estoy seguro de nada, ni siquiera de quienes pueden estar oyendo nuestra conversación…

Hace un fugaz gesto hacia el exterior, pero por algún motivo da la sensación de que no se refiere forzosamente al corpulento soldado que monta guardia junto a las rejas.

- Sin embargo, nunca he sido un hombre demasiado temeroso de decir lo que opina -sonríe con tristeza, meneando lentamente la cabeza- Y no me cabe duda de que a eso debo buena parte de mis desgracias… pero bueno, como suele decirse uno es como es, y resulta absurdo pretender cambiarlo -eleva la vista al techo y no se molesta en bajar el tono de su voz al hablar- Estoy convencido de que el gobierno del ONUG no es más que un títere sometido por completo a los intereses de las grandes corporaciones, seguramente eso no es un secreto para nadie con ojos en la cara, pero en los últimos tiempos se ha hecho más manifiesto que nunca, es como si ya ni siquiera guardasen las formas en público, como si las cosas se acelerasen hacia un momento culminante… pero cuando empecé a denunciar públicamente mis impresiones, cuando me convertí en una figura polémica y molesta, me apartaron del almirantazgo y me jubilaron con una generosa paga para que desapareciese en el olvido -rememora sus últimos años- Aunque yo no pertenezco a esa clase de personas que se compran con dinero, en su lugar soy de los pobres estúpidos que acaban exiliados… o entre rejas, junto a un abominable terrorista.

Hay un negro humor en sus palabras, pero es obvio que no pretenden ser ofensivas, más bien es como si se autofustigase con ellas... y da la impresión de que le duelen en lo más hondo.

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06/07/2015, 14:32
Riddick "el Chacal"

Su opinión sobre Adama no me sorprende, los viejos tienen ese instinto que da la experiencia. Ese punto que a veces les da la sabiduría suficiente como para saber dónde colocarse, justo antes de que la mierda caiga en todas direcciones, y así mancharse menos que la mayoría. Mi rostro muestra una leve sonrisa ante lo que dice, de que tal vez su primera impresión fuera equivocada. No comento nada, ni hago ningún otro gesto aparte de sonreír como si fuera un cazador que bien sabe por dónde van los tiros. Sonrisa que se acentúa cuando da a entender que es posible que haya alguien más escuchando esta conversación, con una simple mirada al exterior. Eso es obvio. Aún más si tenemos en cuenta que hay al menos miembros de dos de las más grandes MegaCorps en esta nave... aunque claro, igual eso todavía no lo sabe.

Le miro detenidamente mientras mi sonrisa desaparece y mis ojos se vuelven más serios, tal y como usa sus palabras para definirse a sí mismo y darme una visión más clara de cómo es... al menos claro que sea todo teatro. Pero por algún motivo lo dudo. Me parece sincero. Aun así, no voy a dar un paso en falso, aún no.

De pronto eleva su rostro hacia el techo mientras me explica las conclusiones a las que ha llegado tras quién sabe cuántos años de servicio en la Armada Estelar… no hubiera necesitado ni una quinta parte si hubiera estado en las calles, como bien he intentado dejarles claro a Rogers y Adama. Aunque a diferencia de éstos, este hombre se ha dado cuenta de cómo debemos pelear si queremos ganar... y sin duda su experiencia debe ser más que sobrada en ambos ámbitos, tanto en la guerra como en el funcionamiento interno del sistema. Y eso le convierte en un posible aliado con información harto interesante… en especial para alguien como yo y mis amigos.

El hecho de que la ONUG sea un títere de las MegaCorps resulta obvio desde hace años, sólo aquellos que habéis trabajado enconadamente para ella no os habéis dado cuenta... o habéis preferido no hacerlo, por lo doloroso que os resultaría reconocer cómo habéis malgastado vuestra vida en pro de un supuesto ideal y un trato justo que nunca ha existido realmente. Tras decir esto, ser capaz de aceptar la verdad, tal cual es, y decidir dar un golpe de timón... os debe haber granjeado enemigos en las altas esferas, pero sin duda os habrá dado muchos amigos en las partes más oscuras de este mundo. – No hace falta explicar más, y por ahora es mejor dejarlo así. Únicamente escondo una de mis manos frente a cualquier posible cámara y hago el gesto de las MNM con los dedos… esperando saber si se ha puesto en contacto con ellos o al revés. Sea de la manera que sea, me dirá algo más sobre él.

Escucho su último comentario cargado de humor negro, más en ningún momento ofensivo, y no puedo más que encogerme de hombros. – Mírelo de esta manera. ¿Preferiría estar ahí fuera codeándose con los carroñeros de las MegaCorps, vestidos de punta en blanco, que no se arrepienten de matar a decenas e incluso miles de personas al día con tal de tener un balance positivo a final de mes… o con alguien como yo? -le regalo una sonrisa lupina- Soy muchas cosas, la gran mayoría negativas conforme a esta sociedad... pero sin duda, sé que las personas no son simplemente números con los que jugar a tu conveniencia. – Cargo con muchos pecados, pero no el de ser un hipócrita, mas puedo entrever que le duele profundamente el cambio que se ha dado en su vida, tal vez por el o tal vez por su familia… eso no lo sé, pero el dolor que parece sentir es intenso. Dejo que mis palabras salgan en el mismo tono que el suyo, sin intentar evitar que nos oiga nadie. – ¿Algo que lamentar aparte de lo obvio? – Miro a mi alrededor dando a entender la misma celda. A muchos la eliminación de su libertad más básica es lo que más les cuesta aceptar.