Partida Rol por web

Tras escucharlo mientras terminaba de escribir el pergamino comenzó a contestar a las preguntas del soldado de otros tiempos con un tono de voz, como siempre, comedido, tomándose su tiempo como si meditara profundamente o se perdiera en recuerdos tan lejanos y profundos como sus ojos.

-¿Saberlo? No, no se si está aquí, en Titán, o en algun otro lugar Marko, pero se que aparecerá relativamente pronto, o al menos eso espero. Con respecto al contenedor, en las misiones tendrás acceso a él, y aquí, en la trastienda, también dispongo de algunos, así que no, no tienes que buscarlo en ningún sitio y sí, es bastante más avanzado que el que disponen por norma aquí -dice para dejar a un lado la pluma y alzar la vista hacia su interlocutor con gesto serio- "Eclipse Perpetuo"... si lo oyes dímelo de inmediato, y sí, prepárate... pero si deseas saber qué es realmente me deberás un pequeño favor, recuerdalo, todo tiene un precio y, aunque me caigas bien, considero que regalar algo es insultar. Solo te diré que aunque lo que significan esas dos palabras pueda no significar demasiado para ti, significan mucho para otros y, con el tiempo, quien sabe si tendrán importancia o no para ti... pero si "Eclipse Perpetuo" es mencionado en estas instalaciones... en algún lugar en el que estés... -dejando la frase inacabada, encogiéndose ligeramente de hombros mientras exhala el aire de sus pulmones con pesadez, como si intentara sugerir con ese gesto algo.

Tras esperar a si desea deber otro favor a cambio de información le tiende el pergamino para que lo firme mientras continua hablando. -Si estas muerto o incapacitado, entenderé que no puedas alcanzar a cumplirlo, pero mientras tengas un último aliento, un último esfuerzo, una ultima voluntad de realizarlo, me daré mas que satisfecho, y si no lo consigues solo habrá sido la mala suerte y no una falta de voluntad por tu parte, pero recuerda, si lo consigues en el último momento, tal vez signifique la diferencia entre la vida y la muerte para muchos, incluido para ti, he ahí su importancia - Cuando oyó condiciones solo pudo reir ligeramente- Entiendo tus condiciones, y las tengo en cuenta, pero esto no tiene nada que ver con secretos de Titán o de ti, sobre la condición de robar, si alguien lo tiene es casi seguro que lo ha robado, ya que es algo antiguo perdido en el tiempo, y, por último, sobre la muerte, si alguien mata es algo que será culpa del que lo haga, no de esa estatuilla, la cual no contiene, ni debería de contener, ningún virus letal y, por si acaso, para eso está el recipiente de contención. ¿Alguna cosa más que queráis comentarme o preguntar? -dice mientras extrae un cigarillo de un estuche de madera y se lo enciende con cierta parsimonia, sus ojos clavados en él.

Mi anfitrion hablo cuando yo termine, explicandome los detalles que habia preguntado, incidiendo en como habia preguntado y la forma para resolver mis dudas mas alla de lo que esperaba. La estatuilla con su moho milagroso esta perdida, Michael no sabia donde estaba pero esperaba que apareciera en breve. Por extraño que eso pudiera parecer, o que al menos a mi me pareciera era algo que debia aceptar. Esa estatuilla acabaria por mostrarse por si misma ya fuera en Titan o en otro sitio, fuera como fuera si tenia un halito de vida, de voluntad debia tomarla si deseaba que hubiera un posible futuro, o librar al mundo de uno peor. Las propiedades medicinales que le atrubuia alguien como Doe, hablaban del verdadero valor de la misma y de la necesidad de poseerla y estuidarla, por el bien de todos. Cuando menciono que él tenia contendores especiales, superiores a los que solian dar en la smisiones, asenti, aceptando o dando por hecho que me daria uno de ellos para conseguir su preciada estatuilla. - Entendido, con eso me basta. Si la veo, o se de ella, hare todo lo que este en mi mano por conseguirla y supongo que si tu te enteras antes, me informaras. En todo caso, si se algo de ella te informare, por si acaso yo fallo, sepas donde esta, o donde encontrarla. - Era simple, me tomaba las misiones en serio, y esta aunque fuera un pago, seguia siendo una mision por un motivo obvio, conseguir algo que me facilitaria el trabajo en el futuro.

Tras eso pasamos al tema de "Eclipse Perpetuo" y la necesidad de informarle en el acto. Eso me llevo a otra necesidad, una simple. ¿Informarle como? Si tenia que encontrarle y era algo tan vital, debia estar al tanto de donde encontrarle o tener otra forma de hacerlo. - Antes de que continues y perdona la interrupcion, visto el tipo de pago que deseas, necesitare pedirte tambien una forma de contactar contigo, un numero de telefono o algo similar, puesto que si tengo que buscarte por el recinto, sin duda perderiamos un tiempo valioso. - Escuche como me indicaba que si queria saber mas, deberia haber otro pago por esa informacion. Le mire, sonrei levemente mientras volvia a alzar mi copa, dandome cuenta de que estaba vacia y dejandola de nuevo en la mesa. Michael termino su frase con un gesto que dejaba claro que esa palabra traeria algo realmente malo... muy malo. Recorde a Mona, recorde sus palabras, como me pidio ciertas cosas y me hizo prometer otras y asenti, mas para mi que para él. - Me gusta saber donde me meto, habitualmente al menos, y por la forma que hablas tanto de la estatuilla como de esa frase, no estamos hablando de tonterias... o nimiedades. Si voy a la boca del lobo, quiero saber de cuantos lobos cuenta la manada. - Era simple, si queria saber de que hablaba y pagar, lo que tuviera que pagar. - Dime cual es el pago, por saber que se oculta tras esas dos palabras.

Tras eso pasamos a mis condiciones, o mas bien el caso de que mi estado fisico o mental, me imposibilitara el cumplimiento de las mismas. Doe fue realmente comprensivo en estas, añadiendo por supuesto que mientras tuviera un halito de vida o voluntad, deberia hacerlo porque de lo que me pedia, porque de esos actos, de mis actos, podia depender la vida de mucha gente, o quizas, incluso mas. Rumie todo mientras meditaba su ultima pregunta y negaba. - No por el momento,  al menos referente a lo que acabamos de tratar, aun asi es posible que uan vez me informes de que significa Eclipse Perpetuo, si las tenga. - Le mire, a la espera, de una respuesta, de un precio... para saber donde me estaba metiendo exactamente.

Sus ojos estaban clavados en la mano que se había posado sobre la suya. Era una sensación extraña. No le reconfortaba aquel gesto, pero si le hacía olvidar aquella mirada que había osado enfrentar dos veces en todo el tiempo que llevaba allí. En cuanto quedó libre, recogió ambas manos mientras se abrazaba así misma. Necesitaba controlar la rabia que sentía. Recordó la dura instrucción que tuvo que superar en el ejercito una vez comenzó a tomarse en serio aquello. Todo buen soldado debe reprimir sus impulsos primarios y liberarlos solo cuando fuera necesario. Solo cuando el enemigo estuviera delante.

No podía concentrarse en ningún objeto de los que allí había porque aquel desorden la molestaba sobremanera, así que tomó como punto de referencia el suelo que había bajo sus pies. Contó lenta y mentalmente hasta tres

- Tienes razón. La venganza sería inútil, pero eso tendré que averiguarlo por mi misma - su voz era ahora más calmada. Matar a aquellos que habían traicionado a su marido no era una prioridad, pero si un desahogo si se topaba con ellos - De todas formas, lo que me interesa de verdad es encontrar a mi marido. Él lo era todo para mi.  - un nudo comenzaba a gestarse en su garganta, así que carraspeó antes de continuar

- Respondiendo a tu pregunta... Si, te he comprendido -

Al principio parece que solo escuchas algo ininteligible, como una cacofonía de docenas de voces distintas, diciendo cosas casi ininteligibles, pero la desagradable sensación desaparece al poco según parece ajustarse algún tipo de codificador del aparato, escuchándose, finalmente, en un tono casi idéntico al de la grabación y apenas notándose la diferencia en el idioma de Ella. En cambio, cuando ella habla, la traducción es casi inmediata en esa extraña lengua, usando su mismo tono de voz, modulación y peculiaridades, no notándose, salvo que se avisara con antelación, de que la voz no procede de ella si no de una máquina.

-Podría pedir bastantes cosas Ella, pero prefiero que me diga que es lo que puede ofrecerme por ello. ¿Cual es el precio que considera justo por algo que le facilitará mucho su trabajo y el de su equipo cuando estén en lugares desconocidos de las otras dimensiones? Piense detenidamente cuanto valor puede tener algo que, por ejemplo, puede indicarles que cierto cartel os avisa de que entráis en la zona de contención biológica de un laboratorio, o que evita un altercado diplomático porque no entendáis lo que os digan. ¿Qué valor tiene para ti? -dice cogiendo otro cigarrillo y encendiéndolo con una profunda calada.

Mike sirve el cafe en sendas tazas, sentándose relajadamente tras ello y, mientras echa el azucarillo y mueve con una cuchara algo estropeada su propio cafe sigue la mirada de Mike a la foto.

-¿Todo bién? Es una vieja foto de mi antiguo escuadrón -dice volviendo su mirada hacia él- A veces parecemos fantasmas cuando la miro, pero no me iré por las ramas... Vino aquí por temas médicos, y así es, tengo un amplio surtido y acceso a cosas realmente revolucionarias, pero antes me gustaría saber que puede necesitar alguien como usted, que piensa que le haría falta o, mejor dicho, que hubiera dado por tener algo en algún momento en concreto que le resultó imposible. En TITAN, lo imposible, es solo improbable -dice sonriendo muy ligeramente, dando un sorbo al negro líquido cuyo fuerte olor inunda poco a poco la estancia.

-Por cierto, ¿qué hicieron para convencerle de venir hasta aquí y dejar su anterior trabajo? No es lo mismo ser medico en zonas de guerra que ser un médico de combate entrenado para actuar bajo fuego enemigo y responderlo si hace falta mientras opera a alguien de vida o muerte...

Michael casi un segundo antes de terminar Marko el gesto con la copa ya comienza a rellenarla generosamente sin soltar el cigarrillo de los labios, expulsando lentamente el humo en trazas intermitentes según comienza a hablar.

-¿Contactar conmigo? ¿Un numero de teléfono? -dice riéndose ligeramente- Es mejor que no lo intentes si no es aquí. TITAN vigila todo y a todos en todas partes, y quienes están detrás de él tienen acceso a ello. Si quieres hablar conmigo, contactar conmigo, ven aquí. Y si estás en peligro o crees que las cosas están feas para ti, considera este lugar como un pequeño Sancta Sanctorum. La Trastienda, amigo mio, es algo más de lo que aparenta... pero no me iré por las ramas, si no quieres riesgos de que lo que hables conmigo llegue a quien no debe, solo hablaras conmigo aquí. En caso de que no puedas llegar... bueno, en el piso de los templos hay uno, con un símbolo de tres llamas, como el de mi tarjeta... Allí puedes encontrarme en ocasiones, si no pregunta en voz alta por este hombre -pasando una tarjeta donde pone Almirante Kurok- Digamos que él puede ayudarte si es necesario.

-Eclipse Total... ¿Cuál es el pago? Sencillo... Te daré tanta información y de equivalente importancia a la que tu me proporciones ahora sobre ti. No voy a revelar un secreto como ese sin tener algo que me de cierto seguro de que tu compromiso en esta misión esta a la misma altura que el mio amigo mío -apartando la botella y sirviéndose él mismo una generosa cantidad, para luego dar un sorbo a este tras apartarse el sempiterno cigarrillo de los labios.

No te preocupes, no hay prisa ^^

-Si lo has comprendido solo hace falta ver que precio puedes pagar por encontrar a tu esposo. Recuerda que casi nada es imposible, pero dependiendo de tu convicción y de tu sacrificio yo podré ayudarte hasta cierto punto. Contra más seas capaz de ofrecer más me podré involucrar... Como bien sabes, aquí, en TITAN, hay recursos y tecnología que hacen posible lo que otros consideran fantasías de las películas de ciencia ficción. Así que decidme... ¿Cuál es el precio hasta el que estás dispuesta a pagar? ¿Qué puedes dar por recuperar a tu esposo? -y mientras espera la respuesta se levanta, girándose y dándole la espalda, otorgando cierto grado de intimidad para pensar su siguiente respuesta.

Tomo entre mis manos maravillada el objeto. Me gustaría entender la ciencia que existe tras este objeto, sin duda alguna inteligencia artificial a través de algoritmos genéticos o redes neuronales... Ardía en deseos de estudiarlo a fondo pero en realidad no soy una ingeniera así que no creo que entendiera nada.

Lo tomé entre mis dedos durante un instante mirándolo hasta que la voz de Michael me devuelve al aquí y ahora. Asiento con sus palabras. Atiendo como toma un cigarro y lo enciende, aparto con la mano el humo. Me doy cuenta que por alguna razón me pidió que le tuteara pero ahora ya ha dejado de hacerlo así que opto por hacer lo mismo.

Sonrío, supongo que un consejo científico de que el humo puede matarle no le valdrá, ¿no?, sin darle tiempo a responder añado, ya sabe donde trabajo y qué puedo hacer y qué no. Supongo que en ningún momento estamos hablando de dinero..., tamborileo con los dedos en la mesa, supongo también que se referirá que puede ayudar a Titan, y no a mi en particular.

Me paso la mano por la cara, no se me dan bien estas cosas, soy científica no comerciante, yo le he pedido algo así que veo justo que usted me pida una compensación pero no le conozco lo suficiente para saber lo que pueda necesitar, sin percatarme de ello me llevo la uña del dedo a la boca para morderla, ¿Un favor a cambio?, niego con la cabeza, este objeto como usted dice nos puede salvar de un destino aciago, le otorgo un gran valor, como afirma puede valer varias vidas... Ese precio le otorgo y hasta ahí estoy dispuesta a hacer.

Aquello ya estaba mosqueandola. Parecía que en lugar de contratar un servicio estuvieran jugando al ratón y al gato. Es cierto que aquel tipo la intimidaba. Y mucho. Pero no era tonta.

- ¿Tengo cara de estúpida? ¿Pretendes que te diga algo que ni yo misma se? - abrió los brazos para enfatizar sus palabras las cuales intentaba que no sonaran muy bruscas, pero era difícil.

- ¿O lo que quieres es que te diga que sería capaz de hacer algo tan horrible para luego tú poder salir de rositas si algo saliera mal? O quizás es una encerrona desde el principio...- bajó los brazos a medida que iba perdiendo fuerza al hablar.

- Dime que es lo que quieres de una maldita vez a cambio de lo que te pido. Yo ya estoy arriesgando mi lugar aquí, y si puedo hacerlo, lo haré. Si no, mi boca estará sellada. De eso puedes estar seguro - con esfuerzo había vuelto a mirarlo a los ojos para que viera que hablaba en serio y que sus promesas no eran en valde

Justo cuando estaba a punto de terminar el gesto con mi copa, mi anfitrion demostro sus maneras una vez mas, rellenando mi copa generosamente, mientras el humo de su cigarro escapa de entre sus labios tal y como comienza a hablar.

El primer punto por supuesto trata sobre como ponerme en contacto con él y mientras una ligera risa se escapa de entre sus labios, me indica que es mejor no hacer eso, sino es directamente en la trastienda. Al igual que todos sabemos que el Gran Hermano esta sobre nosotros, y que Control domina cada aspecto de nuestras vidas y lo aceptamos, o simplemente preferimos no verlo, este hombre no esta de acuerdo y por el motivo que sea tiene el poder, o la influencia para conseguir que TITAN este ciego en este lugar... y de igual forma, le gusta que nuestros magnanimos observadores esten ciegos ante lo que hace. Algo que sin duda le vuelve mas peligroso para ellos, en cierta forma, porque hasta el momento todo lo que ha hecho es como una puzzle que no se ni por donde empezar a ubicar. Aun asi no es cosa mia, entender a que juega, sino usar lo que me da para seguir vivo y poder jugar a mi manera, en este juego que aun tras tanto tiempo, sigo sin entender del todo.

Acepte con una inclinacion de cabeza, su sugerencia de que podia usar la Trastienda como un lugar seguro en caso de necesidad, mientras me indicaba otros lugares a los que podia dirigirme. Cuando hablo del piso de los templos dude por un momento, pues ese lugar no traia los mejores recuerdos, aun asi estaba seguro de que no se trataba del primero que visite. Acerque la copa a mis labios, saboreando de nuevo la exquisitez que compartia conmigo. - ¿Cual es el color del camino que debo seguir para llegar a ese templo? - Si, recordaba claramente lo de los caminos, por mas que esperase no tener que volver a acercarme al rojo, seguia teniendole tirria a aquel zigurat, aunque no miedo, eso se lo reservaba a una puerta en especial. Tras mis palabras, añadio ademas que podia preguntar por un hombre en voz alta y que sin duda él podria ayudarme a encontrarle, o simplemente ayudarme si fuera necesario. Interesante, de alguna forma, estaba dando datos que no tenia claro que fueran, los que daba a la mayoria. Lo que en parte me ponia en una situacion delicada, si no lo estaba ya, desde hacia rato. Tome la tarjeta y asenti. - Con esto sera mas que suficiente, esperemos en todo caso, no tener que llegar a tener que usar tantos subterfugios.

Pasamos de nuevo a los negocios, en este caso, al tema relativo a Eclipse Total. El pago seria informacion sobre mi persona, lo que en si mismo resultaba extraño, sobretodo para mi, llevaba guardando mis secretos durante mas de una decada y si habia alguien de mis conocidos que sabia sin lugar a dudas sobre ellos. Era él. Aun recordaba el dia que entro en casa y le dio aquellas carpetas negras, a la persona que mas adelante se convertiria en mi mujer. Eso me hizo detener un nuevo sorbo de la copa, alzar mis ojos y fijarlos en él, mientras rellenaba tambien su copa de forma generosa. - De todas las personas que conozco en este lugar, sin ningun lugar a dudas eres la que mas secretos conoce, o al menos, es lo que siempre he creido, desde que cruzaste la puerta de aquella casa hace mas de nueve años, para entregarle dos carpetas negras a Mona. - Nombrarla, traia recuerdos, muchisimos, no todos buenos, pero ella seguia siendo el combustible de mi vida. - Si las leiste, ya tienes mas que suficiente informacion como para poder tener ese seguro del que hablas... ¿o acaso prefieres oirme decirlo a mi directamente? - Mi tono no habia cambiado, seguia consdierando sino un amigo, si alguien cercano, siempre habia estado ahi, de una u otra forma, pero no entendia ese ultimo giro, sin duda él sabia bien lo que era. Solo habia que ver los pequeños detalles con los que me obsequiaba... como el vino especiado.

El penetrante olor a café inundó la habitación alimentando mi necesidad de notar una vez más su fuerte sabor en mi garganta. Deleitándome en cada uno de mis movimientos, le puse dos cucharadas de azúcar, lo removí con extrema delicadeza e inhale por última vez su aroma antes de dar un pequeño trago.

Un bisturí eléctrico portátil.- Contesté al señor Doe sin necesidad de pensarlo mucho.- Que permita cortar y cauterizar como los bisturís eléctricos convencionales, pero con el reducido tamaño de un bisturí metálico convencional y evidentemente sin la necesidad de tener que estar conectado a la corriente eléctrica.- Estaba seguro que algo así me habría permitido salvar alguna vida más en Sierra Leona.

No le negaré que el salario es bastante superior al que cobraba en San Francisco, pero no fue por eso.- Confesé.- Pero, por lo que parece, lo que aquí en Titán se hace tiene una importancia vital para el bienestar de miles de millones de personas ahí fuera en la Tierra, y para que esas misiones tengan éxito necesitan que los que van vuelvan de una pieza. - Volví a coger la taza de café y di otro trago.- Cuando lo medité con tranquilidad, me di cuenta de que no hubiera tenido que curar niños heridos por la guerra si esa guerra no hubiese llegado a estallar. Si puedo contribuir alguna de las misiones que hacemos tenga éxito y eso sirve para salvar vidas en un futuro, daré por bueno arriesgar mi propia vida.

-Bien señorita Ella... Como bien sabe aquí el dinero tiene poco valor, pero tengo entendido que es una xenobióloga altamente capacitada... y eso sí tiene valor. Hay comentarios de que en zonas cercanas a brechas de salto se ha encontrado una especie de moho anaranjado en una pequeña estatuilla, de composición extraña. Como pago, su labor será tener un ojo echado en sus misiones, y, en caso de encontrarlo, llevar el objeto que tenga ese moho en un recipiente que será facilitado en la zona de equipos de salto. Se lo tratará como una muestra de alto valor, no se comentará a nadie excepto a mí y, a cambio, usted podrá estudiarlo, ya que según tenemos entendido esa sustancia tiene capacidades regeneradores fascinantes con amplios usos. ¿Le parece bien como trato señorita Ella? -todo ello lo dice con ese tono tranquilo que le caracteriza.

-Vaya... Veo que es cierto que tiene sangre en las venas pero debería de reservar su ira para los que traicionaron a su esposo. Lo que me pide es que le traiga a su marido, perfecto, pero hacerlo supondrá violar ciertas leyes, y no estoy dispuesto a hacerlo si usted no se compromete de alguna manera que me permita asegurarme que no me venderá al mejor postor. Cumplo siempre mis tratos y, teniendo en cuenta que, por ahora, yo al menos le he dado casi sin nada a cambio más que quienes fueron los supuestamente dolientes compañeros, indicándole que ocurrió y como ocurrió... piénselo, yo llevo tiempo aquí y me juego más que usted en cada uno de mis movimientos. ¿Quiere que le devuelva a su esposo? De acuerdo, pero dígame que puede hacer a cambio para saltarme por las buenas la regla de no involucrarme en asuntos ajenos a TITAN, ¿entiende ahora porque es usted quien tiene que dar el paso para que yo pueda dar el mio? -dice fijando la mirada en ella, sin volver la espalda, solo con el rostro ligeramente de lado y las manos a la espalda en una posición de semifirmes que puede recordar ligeramente a viejos oficiales, veteranos de guerra, postrados en sus despachos porque ya a nadie les interesa tenerlos en el campo de batalla.

-Bueno, pensé que me pediría algo más complejo, no algo relativamente sencillo... Dispongo de bisturís de aire, del tamaño de una pluma, con posibilidad de cortar y cauterizar a la vez, regulación del tamaño de la incisión en profundidad y anchura con precisión nanométrica y, lo mejor de todo, al ser básicamente aire no hay riesgo de infecciones, alergias ni necesidad de esterilizar -dando un segundo sorbo a su café para luego dejar la taza sobre la mesa.

-Y dígame... ¿no le inquieta que lo que descubran los saltadores se use para la guerra? Muchos científicos no se percataron de que sus descubrimientos serían posteriormente usados para algo muy diferente de lo que tenían pensado en un principio. ¿Qué opina de ello por lo que ha visto hasta ahora? -fijando sus ojos negros en él, los cuales parecen esperar con cierta curiosidad su respuesta.

-A veces, lo que importa no son las palabras, o la información, si no el como se dice. He oído miles de historias, y muchas de ellas repetidas hasta la saciedad, pero lo que las hace interesantes, o útiles, es como se dice esa historia, en que partes se habla con suavidad y en cuales la voz tiembla. Por dar un ejemplo recordando a los sacerdotes y los comerciantes de los templos antiguos, recuerdo que una vez un comerciante le preguntó, tras una gran donación, como los dioses elegían que oraciones escuchaban, otorgando en ocasiones los deseos más imposibles ante los peores y más mal sonantes ruegos. ¿Sabes que dijo el sacerdote? Que lo importante no era solo como pedías algo, ni siquiera lo que pides en sí mismo. Lo que importa es la voz del que lo pide, que para ellos es como una música, a veces refinada, otras mal sonante... pero única -y tras decir la anécdota se queda en silencio, esperando si al final le dices algo o permaneces en silencio, olvidando, tal vez, comentar cómo se llega al templo que te mencionó anteriormente.