Partida Rol por web

La profesora lleva a Urahara arrastrando hasta fuera de la clase... de hecho, se lo lleva al servicio de mujeres, echando de allí a las chicas que fuman amenazándolas con ponerles una incidencia, éstas, al ver que una profe las ha pillado fumando se van cagando leches tapándose la cara del lavabo, y ella cierra la puerta del lavabo de un portazo y con el pestillo puesto.

Se palpa los bolsillos de la cazadora con nerviosismo, hasta encontrar un paquete de tabaco... lo abre y se pone un cigarrillo a la boca al mismo tiempo que le pasa uno al chico.

¿¡Estás loco!? - le pregunta justo antes de encenderse el cigarro y pasarle el mechero - ¿¡Tú sabes lo que me ha costado que ésta profesora me dejara poneros por parejas!? ¿¡Crees que puedes ponerte así por qué un CAPULLO TRANSILVANO le guiñe el ojo a tu novio!? Más vale que me des una explicación más razonable, Hirose Urahara, o voy a tener que tomar medidas contigo.

Está cabreada... muy cabreada.

Urahara coge el cigarrillo entre los labios, observándolo bizco, con las pupilas como cabezas de alfiler. Alcohol. Tabaco. Alcohol. Tabaco. Meses sin ello. Ahí había una razón veraz y concreta.

- Tenía mono... -con la mano temblorosa, agarra entre el índice y el corazón el pitillo y se lo encendió ansioso. Lo cierto es que la vida del chico había cambiado drásticamente y no atinaba a digerirlo todo de golpe, igual que intentaba dejar los malos vicios, calmando el mono tirándose a la piscina y nadando hasta dolerle todo el cuerpo. De ahí que hubiese desarrollado tanta musculatura en tan poco tiempo. Absorbe hundiendo las mejillas y cerrando los ojos el filtro del cigarro, consumiéndolo bastante de una calada y adoptando una expresión de éxtasis, echando el cuello hacia atrás con la boca entreabierta, el humo ascendiendo lentamente de entre sus labios- Me he sentido raro al ver a uno de los alumnos... Me he sentido mal...

Ah. Claro. Ahora resulta que la gente va dando puñetazos a la gente cuando se sientan mal por encontrarse con otra persona o por tener mono.

Dice en tono de sarcasmo, mientras da también una calada al cigarro y saca el humo lentamente... parece que ella también necesitaba un cigarrillo, porque parece relajaras un poco... solo un poco... y se apoya a la pared del lavabo.

Cómo siempre... dispuesta a escucharte.

¿Qué alumno y por qué?

- En realidad le he zurrado también porque le ha guiñado el ojo a Ren, incluso viendo que yo le hacía mimos -rabió el australiano de forma pasiva, con la voz tranquila. Después de tres meses sin tabaco, un cigarro ejercía un efecto relajante similar al de un porro.

Escuchó la pregunta de Honda, dando otra calada con la mirada perdida, dubitativo.

- El chico de tez morena, rubio -confesó- ... No es lo que crees. No es que me haya gustado, aunque es guapo... Es que... -tragó el humo, lentamente- Es como echar un vistazo a un pasado que no queda muy lejos, ¿entiendes...? Me ha recordado a mí mismo cuando vivía en Australia y...

Y no tenía recuerdos asquerosos...

- He sentido ganas de olvidarme del resto de los amigos que he hecho en Japón y decirle: "Seguro que tú surfeas. Vamos a pasar de todo y a echar unas olas"... ¿Sabes lo que quiero decir? Es ruín...

Arquea una ceja al escucharte... sigue fumando tranquilamente, y entre el humo de las chicas de antes y el vuestro, está empezando a haber una leve niebla.

Pero esto no es raro, es normal que eches de menos Australia y que quieras surfear... además, por lo que sé es que sí, a Razva le van las olas y la nieve, y los deportes de riesgo... os podríais llevar bien. No creo que eso sea algo malo, ¿por qué lo ves algo malo?

Noa entra dentro del baño, enseguida se da cuenta de la leve niebla que hay en el aire... la profesora Honda y Urahara están hablando fumándose un cigarrillo tranquilamente.

La profesora Honda se gira y mira a Noa... sin prisas, apaga el cigarro y lo mete de nuevo dentro de la caja de tabaco, ya que aun no se lo había terminado... luego se dirige a las ventanas y las abre todas, para que el humo empiece a salir.

Al entrar vio que no estaba sola...pero eso no le iba a suponer un problema. Se la veía tensa, a punto de explotar.

Hola, si me disculpáis... Dijo con voz tranquila. Entró en uno de los baños y cerró la puerta.

(. . .)

¡¡¡AAAAAAAAAAAAAAARGHHH!! ¡¡LE VOY A ARRANCAR LAS UÑAS Y SE LAS CLAVARÉ EN SUS OJOS!! ¡¡LE CORTARÉ LA LENGUA PARA QUE SE LA TRAGUE Y SE AHOGUE EN SU SANGRE!! ¡¡PIENSO DISFRUTAR CON TUS GRITOS, PEDAZO DE ZORRA!! ¡¡Y ODIO ESE MALDITO INSENSIBLE DE MIERDA!! ¡¡ANTISOCIAL!! ¡¡¿¿QUE CLASE DE PERSONA ERES???!! ¡¡ERES ODIOSO!! ¡¡PIENSO ROMPERTE LAS PIERNAS!!

Gritaba casi desgarrando als cuerdas, descargando toda la tensión por la boca.Se escuchó la respiración agitada, como si tubiera que cojer aire o ella misma se iba a ahogar ahí dentro.

¡¡Y EL OTRO COMO SI LLOVIERA!! ¡¡TIRATELA DE PASO, MALDITO SEAS!! ¡¡¡¡IDIOTA!!!!

Y de pronto, se hizo el silencio.

- Pues lo veo así porque... -Urahara gira la cabeza como un cuco que ve acercarse un águila a toda velocidad con las garras abiertas y cara de hambre: Con los ojos como platos. En éste caso no hay amenaza (de momento) pero lo que si hay es una serie de improperios dichos en su bendita lengua natal (aunque bastante más refinado el acento). Palabrotas, odio... Música para sus oídos. Se siente en casa. Y comprendido, por que aunque Noa no le ha pegado un puñetazo a un rumano/a, la acepción:

Cita:

...denota cierto odio. Urahara, sin soltar el cigarro que le ha caído entre los dedos después de tres meses de abstinencia y terrible mono, se acerca hasta la cabina en que está encerrada Noa, preguntándose "por qué"... Concretamente, por qué siempre intenta arreglarle la vida a otros, salvo a Bunzo, cuya perdición parecía ser positiva para el mismo.

Tocó un par de veces la puerta, mientras daba una calada a su cigarro sosteniéndolo con las puntas del índice y el pulgar.

- Noa? -preguntó, siguiendo en el idioma de la Commonwealth- Whadda hell happened? Ya' okay?*

La profesora simplemente se tapa la cara con la mano y suspira.

- Os esperaré a fuera.

Solo dice aquello... dice aquello, abre la puerta y la cierra detrás de ella.

Tras unos segundos de silencio se esuchó como un murmullo en voz baja.
S-sí... Tenía la voz un poco rota y también ahogada del esfuerzo que había hecho escasos segundos antes. Abrió la puerta topando contra el asutraliano. Levantó la cara, algo roja por los gritos. Los ojos asomaban cristalinos. Sólo necesitaba desahogarme un poco... Se intentó tirar la cabellera hacia atrás, fue hacia el lavabo y abrió el grifo. Por el espejo miró el reflejo de Ura y suspiró. Me puse muy nerviosa, y no quería perder los estribos delante de todos... Se agachó, refrescándose la cara. Sería mejor esperar unos minutos antes de volver a entrar.

A veces creo que los celos me pueden demasiado, y hacen que me raye mucho...y termino así Aún sin querer secarse el rostro para notar las gotas aliviando el sonrojo cerró el grifo y se giró hacia Ura.

¿Y tu, como estas? Antes te ví alterado...Le mira con preocupación.

- Que los nervios te traicionaran... Es decir, como a mí -sonrió, consciente de que su modus operandi había sido un tanto brusco. Pero no se arrepentía de haberle zurrado a aquel imbécil irrespetuoso. Urahara se acercó hacia un lado de Noa y metió la mano libre en el bolsillo, mientras la otra seguía laxa a un lado del cuerpo, sosteniendo el cigarro entre dos dedos- Yo prefiero explotar en el momento. ¿Sabes? Hay veces que uno siente que debió haber peleado más -un brillo extraño en sus ojos, aunque no borraba una sonrisa conciliadora de su rostro- ... así que para evitar que en un futuro te arrepientas de no haber dejado claro cuán fuerte eres, ya sea de físico o de carácter, intenta no tragarte tus sentimientos... O quien más débil se verá a si misma, serás tú.

El australiano no solía, comúnmente, sumergirse en temas profundos. Más bien se le veía hacer el cabra con los "amigotes".
Se sentó levemente sobre el filo de uno de los lavabos, su expresión volvió a cambiar a una más vacía y relajada, casi analítica.

- ...A mí también me molesta la falta total de reacción en Ren -comprendió, finalmente. Haakon era espitoso, pero sólo en los temas, digamos, "bélicos". Cuando una tía le echaba los tejos descaradamente, parecía no darse cuenta o darle igual... Lo que no quería decir que a su novia fuese a darle igual también- A veces da gusto ver que alguien pelea por tí... Pero no creo que ni Haakon ni Ren lo hagan adrede para jodernos. Sencillamente son así... ¿No crees?

A medida que Ura iba hablando, Noa habia ido agachando la cabeza inconscientemente. Ella sabía que la única razón por la que no había explotado en clase era porque aun no tenía el valor para expresar sus sentimientos ante la gente. Poco a poco lo había conseguido con Haak, pero a solas. Nunca delante de nadie más.

Cita :

... Noa vaciló ante la pregunta, guardándola en su interior. Pero... Levanto un poco la cabeza, con el flequillo justo por los ojos Es que...me consume tanto. El ser celosa, el estar mal y que no se dé cuenta. Si no se entera que una chica se le insinua bien, mejor para mí. Pero no ve cuando estoy mal por ello...Y él es el único con el que más me he abierto, y sigue sin verlo... Entrelazó sus manos, recordando como Hana y Haak se habían sonrojado, disimulando un nerviosismo y sonrojo que Noa conocía...

Sé que me quiere...pero a veces parece como si no le importase...nunca le he visto celoso, en cambio yo... Suspiró. ¿Por qué? Le había visto molesto por muchas cosas pero nunca por celos...¿Acaso podía llegar a ser prescindible? Como con su familia, ¿acaso a la larga resultaba ser una molestia a la que mantener lejos?

¿El problema soy yo?

Se quedó en silencio, de nuevo.
Sintió que le volvía a comer la ansiedad, haciendo de que finalmente fuera más potente que el hecho de estar delante de otra persona. Se quedó en silencio, con los ojos cerrados.
 

...It's my fault?

Suena el timbre de fin de clases, entra la profesora Honda y os dice que es hora de volver a clase... ya.