Partida Rol por web

"Wynn, deja a Goro y a Erika" le sugiere

"Dejala que se entretenga. Que ocupe su mente en algo que no sea la sangre" le susurra

“Erika, esto creo que puedo hacerlo solo”, murmuró Aki, quien, pese a su ensimismamiento, había captado la indirecta de Dominique un poco lanzada a todos, y que no había necesitado, sabiendo bien que a la chica se tenía que distraer...

“Mira aquí este montón de cables sueltos… ahora hago un empalme entre cuatro de ellos - ¿lo ves? - para provocar un cortocircuito que sí podría abrir la puerta… corriente hay, de todas formas...”

Al par de sus comentarios, Aki hizo lo que comentó y … habrá que ver si se abre…, pensó, los labios fruncidos por la concentración. Fue una tarea simple, pero le gustaba hacer las cosas bien, lo sencillas que fueran.

Erika se encaminaba hacia el gimnasio con Hans cuando este le habla, ella le mira y responde:

17 recién cumplidos… los cumplí el otro día en el hospital… creo que soy la más pequeña aquí. Si, vamos al mismo instituto, pero a diferentes clases. ¿Y tú… que estudias en la universidad?

Decía mientras escuchaba las conversaciones que se iban dando, aparentemente habían podido abrir un poco más la puerta, antes de entrar se gira y dice:

No sé mucho de electrónica, lo siento… pero si queréis puedo pasar por lo que habéis podido abrir… creo que soy la más pequeña de tamaño de todos… a lo mejor desde dentro se puede abrir

Decía en espera que le dijeran algo, si decían que no, no discutiría y se marcharía al gimnasio con Hans

intenta nuevamente con la fuerza bruta abrir esa puerta, y realmente logra abrir parte de esa puerta, por lo menos lo suficiente como par que alguien delgado pudiera pasar, pero cuando escucha el click, intenta una vez más, lanzando un pequeño grito contenido usando su fuerza, pero sin conseguir nada nuevo. Ya molesta con la puerta, Dominique la llama Wynn, o eso es lo que escucha, pues al estar intentando abrir esa compuerta, su atención estaba ahí, así que volvió sus ojos hacia la gótica y le lanzó una mirada de aquellas, intensa, ¿quién le había dado permiso de llamarla así?, si hubieran estado en la escuela, le hubiera gruñido, pero recuerda donde estaban y en qué estaban, llevando sus manos a su cintura.

— no te vayas a quedar pegado, Goro —  le advierte a Goro que estaba metiendo sus manos en el panel y le explicaba al Erika lo que haría, pero Erika le dice que no sabía mucho, Wynn la mira de reojo, ya sin saber qué pensar del intento, bondadoso de todos, claro, de distraerla, pero no sabía si eso realmente le ayudaba o no, aunque claro, había perdido a sus padres y por lo menos estaba intentando buscar cosas que hacer, eso la hacía demasiado valiente, más que cualquiera de los que estaban ahí. La chica pasa su mano por su nariz y luego de comprobar que Aki no había podido con el panel en el primer intento*, asiente a lo que dijo Erika.

—  si quieres hacerlo, hazlo, Anders —  se acerca a la chica, y pone su mano en su hombro como voto de confianza y de que no la trataría con algodones, tampoco es que supiera hacerlo —  creo que pasarías por lo que logré abrir —  se mordió el labio inferior y le hizo un gesto al universitario, un leve movimiento de su cabeza, como muestra de agradecimiento de su buena voluntad, pero ¿cómo es que se llamaba?, no lo recordaba, ¿lo había dicho?... bueno, tendría que seguir llamándolo universitario, de todas formas, no sonaba tan mal.

—  intentaré ir tras de ti, no soy tan menuda como tú, pero no tengo tetas así que, ayuda —  se lleva las manos a los pechos y sonríe soltando sus pechos, luego llevando las manos a los hombros de Erika y conducirla a aquella apertura, susurrándole algo antes de dejarla entrar e ir tras de ella.  

— no te diré que no lo hagas, pero si hay peligro, te sacaré de ahí, así que no te expongas demasiado, eres valiente, pero no tienes porqué exagerar, para eso estoy yo, guapa  —  era en tono de broma, era su forma de decirle que confiaba en ella pero que aún así la protegería.

Erika asiente a las palabras de Wyn y con una sonrisa añade:

No te preocupes… no… no soy valiente, mas bien todo lo contrario

Decía mientras se acercaba a la puerta, era cierto, no era valiente, si lo hubiera sido no habría tomado la decisión que había tomado y se habría enfrentado a Amanda y las demás. Suspira y mira hacia delante, a la puerta mientras se acerca y dice:

Ahora os digo que hay dentro

Para introducirse por la apertura que había abierto Wyn momentos antes y mirar que era lo que había dentro de la sala.

Goro intento provocar un cortorcircuito con los cables, pero se equivocó de combinación y produjo un montón de chispas. Se llevó un buen susto. De mientras Wynnona intento movermas la puerta. Tan solo retrocedio un par de centimetros hasta estar atorada por el mecanismo. Erika al ser mas menuda pudo pasar con un poco de dificultad, al resto les costaría un poco más.

Al otro lado se podía ver un pasillo oscuro. A penas un par de luces de emergencia iluminaban levemente un pasillo. Había varios esqueletos militares por el suelo. A la derecha se abría una bifurcación al inicio del corredor, y al final habia otra puerta. Se podía apreciar a lo lejos que estaba entreabierta. Por el camino derecho Erika apreciaba mas puertas sin saber que de que podian ser, sin investigar. No habia letreros que indicaran algo.

"Un momento"

Dominique se cuela al otro lado como si fuese una serpiente

"Todos los años me presento al equipo de laa cheerleaders, pero Libby insiste en que no puedo estar por el color de mi piel" se explica. Dominique es bastante capaz con el tema de las piruetas, los saltoa y las volteretas.

"Vamos a abrirlo ahora. Wynnona. Tu tira por ahi fuera y yo por aca ¿Vale? Asi no nos estorbamos. A la una, a las dos y..."

"Girl Power!" dice haciendo u esfuerzo, pero haciendo ver que es Wynnona quien ha hecho la mayor parte del esfuerzo

Agotada porque la puerta no cede...
"parece que hasta aqui llega el Girl Power. No da para mas"

Echa un vistazo dentro. Y ai hay esqueletos los cubre con lonas o con lo que sea que haya. No sin antes mirar rapidamente los uniformes por si tienen algún distintivo, bandera, logo, armas o lo que sea.

Erika pasa con facilidad por la apertura gracias a que es bastante menuda. Lo que encuentra justo después es más o menos lo que esperaba, un pasillo con varias puertas y una de ellas parece entreabierta, en el suelo hay también algunos esqueletos. Mientras Dom pasaba y trataba de abrir un poco más la puerta sin lograrlo ella camina un poco hacia delante, hacia la puerta entre abierta procurando no hacer ruido, está asustada, pero por lo que han visto no hay nadie más allá, quien estuviera en esa base murió hace tiempo, además que sus compañeros tenían razón, no podría ser ese el objetivo de la banda de tipos verdes.

Luego de que pasara Erika sin problemas, por ser delgadita y pequeña, vino Wynnona, pasando por la apertura sin mayores problemas tampoco, era ágil y con control sobre su cuerpo, otro de los factores que la hacían adecuada para seguir aquel camino que parecía renegar ya tozudamente. Al otro lado, el escenario era parecido al de los otros pasillos, pero esta vez con los cadáveres. La puntada de que los terroristas están buscando ese lugar, el mismo a donde habían llegado, se hizo más patente, pero, tampoco era lógico, ese sitio lo habían atacado, ¿quién?. Wynn se mordió el labio inferior cuando escuchó a Dominique hablar sobre el poder femenino. 

Wynn se quedó de pie ante la puerta, con una mano en su cintura y observando a la chica cómo intentaba abrir de nuevo la puerta usando la fuerza bruta, pero ella había escuchado el click de antes y supo que esa puerta no se abriría más, por eso no lo había vuelto a intentar, pero dejó que la gótica usara su fuerza una vez más, lo que trabaría más la puerta, además del espectáculo de fuegos y chispitas que había hecho Aki.

Aclaró un poco su garganta y se volvió hacia el pasillo, los cuerpos y ese olor a muerte y humedad que habitaba en todas partes, pero no era olor a putrefacción, no, era un olor más permanente, más eterno, solemne e inmutable. El verdadero olor a la muerte que ocultaba los ecos de lo que había pasado ahí y sus muertos. La chica se fue alejando caminando detrás de Erika, pero se detuvo a revisar algunos de los cuerpos de los soldados, revisado y buscando las mismas marcas en el cuerpo de la militar que habían encontrado en la enfermería. 

— ¿pueden pasar? — les pregunta a los chicos, de ahí, se puso de pie y miró a su alrededor, muchas veces habían planos de las instalaciones, vías de escape o algo — debe haber algún plano, guías de emergencia, debe estar en las paredes — les dice a sus compañeras, y a los chicos que estaban al otro lado, pues podrían necesitar otra vía para pasar o simplemente para saber como salir de esa instalación en la que cada vez parecían adentrarse más o más. Los habían abandonado, todo ese recinto lo habían dejado simplemente. 

— debe haber un cuarto de vigilancia — piensa en voz alta, si encontraban ese cuarto, podrían averiguar qué había pasado en ese sitio, además de encontrar la forma de salir y llegar a un lugar seguro. 

Aki refunfuñó hastiado tras su intento fallecido de abrir la puerta, aunque de verdad había sido una tarea muy simple y se suponía que era un experto en manejar los aparatos electrónicos…

Fuera lo que fuera, sólo quedaba el camino físico, intentar pasar por la apertura que la menuda Erika, pero también los más fuertes Dominique y Wynonna ya habían franqueado.

“A ver si puedo pasar”, le contestó a Wynonna y intentó deslizarse por la rendija de la puerta entreabierta.

A base de pasar uno y otro, la puerta fue cediendo y acabais de pasar todos. Dado que el pasillo de enfrente solo os ofrecía una puerta decidís ir por la derecha. La puerta del final del pasillo se va abriendo lentamente para aperecer 2 jimmers correteando. Con un movimiento rapido echais a correr pasillo a la derecha para meteros en la primera puerta que se os abre. Esta se cierra detrás vuestro. No os da tiempo a mirar de que era. El interior estaba totalemente oscuro, solo se podian ver leves lucecitas que pertenecían a ordenadores. Su luz no dejaba apreciar bien el interior, pero se discernía como un centro de control o algo similar. El espacio central es grande y os moveis a las tientas mirando de encontrar algun interruptor o activar un mecanismo para sacar la luz. Como minimo electricidad llegaba a la habitación.

A sabiendas de ver al enemigo en la base, decidís momentaneamente quedar en silencio para no alertar.

"¿Acabamos con estos dos Lechugas?"
 

Aki trata de inspeccionar al menos superficialmente este lugar que aparenta ser la sala de control, echando ojeadas a todas partes…

Al mismo tiempo responde a la pregunta o exhortación de Dominique: “Me parece buena idea, porque creo que ya nos han visto. Antes de que toquen la alarma, habrá que acabar con ellos.”

Tras un segundo de reflexión añade: “Es imposible que nos hayan seguido ya por el camino por que hemos entrado aquí. Desde luego, estas máquinas ya estaban aquí antes de que hayamos entrado nosotros. Esto también nos da una respuesta probable a la pregunta qué enemigo tomó esta base militar.”

Si Aki no percibe algo que le llame fuertemente la atención, volverá hacia la puerta, el brazo con el arma extendido y el dedo sobre el gatillo – al menos técnicamente, sabe como disparar.

Finalmente todos fueron pasando algunos con más facilidad que otros, pero pudieron pasar finalmente por esa estrecha apertura. El lugar era bastante sombrío, como el resto de la base, pero ahí sucedió algo que seguramente todos temían pero que ninguno querría ver, o al menos ella no quería verlo. Aparecieron dos de esas máquinas caminando, casi por instinto se metieron en una habitación lateral para esconderse. La habitación en la que se encontraban estaba a oscuras y apenas se veía nada más allá de algunas luces que aparentemente parecían ser de los equipos que habia alli. Erika se acerca a estos caminando con cuidado mientras escucha lo que dicen sus compañeros de atacar a esas dos maquinas, ella niega y dice:

No creo que sea prudente... Si no nos han visto mejor... Eran robots... ¿Y si al ser destruidos alertamos a los demás?

Realmente no le parecía prudente destruirlos y no quería tener que presenciar mas peleas, solo queria que pudieran salir de allí y llegar a donde estaba la policía para poder estar a salvo y descansar.

ya dentro de ese cuarto, y con esas luces, Wynn se dio cuenta de que estaba justo en el lugar que deseaba estar así que tras pasar la impresión de ver a esas cosas correteando por ahí, la chica avanzó rápidamente, lo que la oscuridad le permitía, pero su intensión fue buscar un computador que funcionara o un interruptor, lo que fuera suficiente para poder ver si en esos computadores estaba la información sobre lo que había pasado en ese lugar y en donde estaban esas máquinas. 

— no saldrán de aquí — les dijo, inclinada sobre uno de los ordenadores, pasando sus dedos y buscando un botón o algo — si nos vieron, ya saben que estamos aquí, robot o no, deben tener intercomunicadores y creo que no nos han seguido — hizo una pequeña pausa, agachándose para poder encontrar lo que fuera útil — sino, ya los escucharíamos en la pared, mejor... busquen algo que encienda todo esto, Goro, tú eres hábil con las máquinas, esto parece ser El Centro de operaciones y puede tener información de cómo salir de aquí, lo que pasó y sobre todo, pueden aún funcionar las cámaras y sabremos donde están esos robot — se puso de pie, le estaba doliendo la cabeza y llevó su mano a su frente, apoyando su otra mano sobre la mesa. Estaba cansada y angustiada. 

— si salimos sin más... no podremos contra todas esas cosas, debemos evitarlos lo más posibles, así que si quieren ir, vayan, pero yo me quedaré aquí y buscaré la forma de sacarnos sin que salgamos más heridos — miró de reojo a Erika, lo último que necesitaba esa chica era enfrentarse otra vez a la muerte, ninguno de los de ahí lo necesitaba.  

Aki se detuvo ya estando casi otra vez de camino hacia la puerta. Evidentemente las dos chicas tenían razón, y debería der haber llegado a la misma conclusión antes, pero en un arranque de valentía … o solamente de exceso de adrenalina … había querido echarse a la caza de los robots, por lo que, de todas formas, era mal habilitado.

Mejor hacer lo suyo, le recomendó Wynonna sensatamente. Así que, igual que ella, continuó su inspección de la sala y de los ordenadores en particular, en búsqueda de un mecanismo que pudiera darles el control desde aquí sobre la base.