Partida Rol por web

Lunes por la mañana

El mundo es un lugar cruel donde todos tus sueños te pueden ser arrebatados en apenas unos instantes. Hace apenas una semana, Joseph Raven era una de las mayores promesas del fútbol. Gracias a su gran habilidad con el balón, su visión en el campo de juego y su capacidad para motivar a sus compañeros, había logrado llevar a su equipo a un nuevo nivel. Pasaron de ser un equipo del montón a ser una fuerza imparable que estaba a punto de llevarse el título.

Joseph se enfrentaba al partido más importante de su carrera, aquel que lo empujaría directamente hacia la fama y que lo consolidaría como uno de los mejores jugadores del mundo. Había logrado penetrar la férrea defensa del equipo rival y se encontraba solo ante el guardameta. Eran los últimos segundos del partido y si lograba meter un gol, su equipo sería coronado campeón. Su seguridad era un retorcido reflejo de la presión y el miedo que el portero sentía. Estaba a punto de chutar cuando una potente tormenta eléctrica se desató de improviso, provocando una intensa lluvia de rayos sobre el terreno de juego. Por suerte y pese al espectacularidad del fenómeno climático, apenas hubo heridos leves. Tan solo Jospeh fue alcanzado de pleno y su mundo se torno en oscuridad.

Las cámaras dejaron de funcionar, pero hay testigos que aseguran que Joseph fue alcanzado por dos o más rayos. Sea como sea, Jospeh pasó los siguientes dos días en coma debatiéndose entre la vida y la muerte. Al despertar descubrió que el partido había sido suspendido y el estadio evacuado. Aunque la peor noticia posible llegó con referencia a su estado de salud.

De alguna forma, su sistema nervioso se vio alterado por el impacto del rayo, provocando que sus músculos sufriesen constantes espasmos o se agarrotasen de forma improvisada. Los médicos no tardaron a someterlo a toda clase de pruebas, pero no lograban dar con nada que pudiese ayudarlo. La única opción que se les ocurrió fue la de acudir a rehabilitación para ver si así lograba recuperar las funciones motoras más básicas. Pero hasta ese momento (Si realmente llegaba algún día) debería de estar postrado en una silla de ruedas. 

Su estado no fue filtrado a la prensa, su equipo aún tenía fe en él. Pero todos sabían que si realmente no había solución, tarde o temprano le dejarían a un lado. Por suerte y desde el primer momento, todos los miembros de su familia se volcaron con él. Su ayuda y ánimos le ayudaban en los peores momentos, pero eso no evitaba que en ocasiones se sintiese hundido. Después de todo, no solo había perdido su carrera como deportista, si no su propio cuerpo. La idea de permanecer encadenado a una silla de ruedas de por vida, sin la capacidad de hacer la más mínima tarea por si mismo, lo hundían en un profundo pozo de desesperación. 

Durante los últimos cuatro días, Joseph ha sufrido en silencio el dolor y la desesperación de aquella situación. Por suerte, no ha pasado prácticamente ni un solo minuto solo. Pues cada miembro de su familia ha tratado de pasar el mayor tiempo posible con él. Incluso se habían organizado para que alguno de ellos siempre estuviese las 24 horas del día disponible para Joseph. 

Aquella fría mañana, sus padres trabajaban ,mientras que su hermano pequeño acudía al colegio. Su hermana había faltado al instituto para cuidarlo, aunque aquello tampoco suponía ningún drama. Ya que la joven poseía unas calificaciones realmente altas y sus faltas de asistencias hasta aquel día, habían sido nulas. 

Por desgracia, los dolores de Joseph eran cada vez peores, así que su hermana salió en busca de medicamentos que pudiesen aliviar su sufrimiento. Pese a que la farmacia no estaba demasiado lejos, le obligó a estar en constante contacto a través del teléfono. Había preferido no sacarlo a la calle para que evitase así sufrir el frío invernal que gobierna la calle. Pero también, para que la prensa no se lanzase sobre su hermano como hienas hambrientas.

Su hermana estaba de camino hacia casa, contándole con su habitual gran sentido del humor, una divertida anécdota que vivió el día anterior en el instituto, cuando el infierno parece desatarse una vez más sobre la familia Raven. Del otro lado de la línea telefónica llega una voz grave y áspera que provoca un grito de terror por parte de la joven hermana de Joseph.

-Ven conmigo jodida puta...

Tras aquello se produce un forcejeo que termina con gritos ahogados por parte de su hermana y el teléfono cayendo al suelo. Aquel hombre, sea quién sea parece dispuesto a llevarse a su hermana y no precisamente para nada bueno. La imaginación de Joseph vuela rápidamente imaginándose toda clase de escenario, a cada cual peor.

En un vano intento por acudir en su ayuda trata de ponerse en pie, pero lo único que logra es que sus piernas responda con un latigazo de dolor, que lo hacen caer al suelo. Con su cuerpo retorcido por la agonía que le sacude desde que fue impactado por el rayo, tan solo es capaz de escuchar como el forcejeo termina y los pasos pesados de aquel hombre comienzan a alejarse. 

Con un grito desgarrado, toda la furia, toda la ira que guarda en su interior emerge guiada por la frustración que siente. Tal vez su cuerpo se niegue a responder, pero su inquebrantable voluntad se niega a rendirse y de nuevo trata de ponerse en pie. Lo que sucede a continuación es algo que Joseph jamás ha sentido, de pronto es como si cada célula de su cuerpo estallase liberando todo el dolor que hasta ese momento lo doblegaba. Con una fuerza y energías renovadas, Joseph corre al encuentro de su hermana.

Nada queda del dolor o la agonía que lo habían mantenido encadenado los últimos días de su vida. Más bien siente que una energía como nunca antes había sentido, recorre cada fibra de su ser. Tal es la velocidad que alcanza, que los cristales de los coches estalla a su paso y el mundo parece detenerse y moverse a cámara lenta. Una paloma que se encuentra en medio de su camino, parece flotar en medio del aire mientras agita sus alas a una velocidad absurdamente lenta. Más adelante, una mujer mantiene una mueca de sorpresa y miedo al ver como la bandeja con cafés que lleva se la está volcando y las bebidas se precipitan hacia el vacío. 

Pero nada de aquello le importa, de hecho no es tan siquiera consciente de ello. Lo único que sabe es que de alguna manera, ha logrado llegar hasta el apartado callejón donde el asaltante de su hermana, está tratando de arrastrarla hacia un lugar más oscuro y discreto. 

Su hermana yace en el suelo inconsciente con un golpe en la cabeza. No parece nada serio, pero ha sido lo suficientemente fuerte como para dejarla inconsciente. Su atacante por otro lado, se encuentra tirado en el suelo a diez metros de donde ahora se alza Joseph. De alguna forma, nada más llegar y ver como aquel despreciable ser trataba de arrastrar a su hermana, ha desatado toda la furia que albergaba en su corazón en forma de un golpe imposible, que no solo ha dejado KO al atacante, si no que además lo ha arrojado volando por los aires. 

No está seguro de qué es lo que ha pasado, pero sea como sea, se siente tremendamente bien. Al menos se sentiría tremendamente bien si sus zapatillas no estuviesen destrozadas y su camisa con pequeñas llamas. 

-¿Joseph? ¿Eres tú? ¿Qué ha pasado? 

La joven comienza a despertar, pero está claramente aturdida por el golpe. Además, la posición en la que se encuentra Joseph, provoca que el sol esté a su espalda y pese a que apenas brilla demasiado en Paradise City, es más que suficiente como para que la joven aturdida no pueda ver con claridad el rostro del hombre que la ha salvado y se mantiene allí en pie junto a ella. 

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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Joseph Raven » Sab, 19 Dic 2015, 00:15

Tendría que haber muerto. Estaba en silla de ruedas. Ahora sería una carga para mi familia. Ellos me querían tanto... y jamás me lo harían saber, pero ahora no podría ayudarlos. Los había decepcionado. El dinero por las publicidades que había podido traer a casa no eran nada comparado al contrato futbolístico que hubiera podido firmar si ganaba el campeonato con el Paradise United y me convertía en goleador.

Ya no podría poner una tienda para mi madre, que ahora cosía por encargo en mi casa de forma salteada, ni podría hacer que mi padre tuviera su propio taller mecánico en lugar de ser explotado en esa línea de producción automotriz en donde lo trataban peor que a las máquinas. Pero siempre hubo un plato de comida para mi y mis hermanos, y ninguno tuvo que trabajar mientras estudiásemos... aunque en mi caso era estudiar para poder jugar al fútbol. Porque si no pasaba de año mi padre me hubiera sacado del equipo inmediatamente. 

Había sido un estudiante mediocre pero un posible gran futbolista. Ahora no era ni siquiera mediocre... ni siquiera sabía lo que era. Y mi hermana que tenía un futuro como la inteligente de la familia, estaba desaprovechando su tiempo conmigo...

Me niego a que salga a comprarme remedios. No quería que incurriera en gastos ni quería que supiera cuanto me dolía el cuerpo pero evidentemente mi cara me delataba... pero lo peor ni siquiera había empezado cuando escucho ese grito. Alguien le estaba robando a María, o peor aún, quería violarla! Grito con todas mis fuerzas al teléfono amenazando al hijo de puta. Quería correr hacia la farmacia para interceptar en el camino al tipo que tenía a María y darle una buena patada en el pecho que quiebre sus costillas, pero lo único que consigo es olvidar que estoy en silla de rueda y caer estupidamente al suelo. Nadie haría nada por ella. Eran tiempos en que la gente tenía miedo y prefería hacerse la desentendida. Solo yo podría ayudarla.

Pero de alguna manera me pongo en pie... y no solo eso. Corro. Corro. Corro. Más veloz que nunca. Seguramente por efecto de las drogas que me inyectaban para el dolor, veía todo borroso, lento... alucinaciones. Pero al llegar al lugar veo que mi hermana ya esta a salvo y el criminal la pagó. Fui yo? alguien actuo? no parece que fui yo... pero como? que me pasó? y me estoy prendiendo fuego?

Rápidamente muevo las manos para apagar las llamas de mi camisa. No, Mary no podía verme así. Nadie podía. Tenía que entender primero que había pasado. No podía asustarla. Sin mediar palabra me doy la vuelta y corro devuelta al sanatorio y me siento otra vez en la silla de ruedas. 
Que me había pasado? me vuelvo a parar. Puedo hacerlo. Tenía que cambiarme las ropas. Así que busco alguna camisa de las que proveen en la clínica y esas pantuflas. Tiro en la basura la ropa y zapatillas rotas.

Que le diría a Mary cuando vuelva?

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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Kildan » Mar, 22 Dic 2015, 23:55

Desde que el hospital le había despachado alegando que eran incapaces de hacer nada más por él, Joseph se había pasado los días en casa. Tan solo salía para acudir a la rehabilitación, donde le obligaban a mover su cuerpo roto provocándole gran dolor y sin obtener ningún tipo de avance. Había pasado por cuatro días de infierno, pero ahora se encontraba físicamente mejor que nunca. 

Aunque la verdad, es que tiene otros asuntos de los que preocuparse, antes de poder alegrarse por su milagrosa recuperación. Echando un último vistazo a su hermana, se asegura de que realmente no está herida. Una vez satisfecho con ello, se vuelve y corre en dirección a su casa. Su idea es sencilla, llegar, tomar la ropa de hospital que le han entregado, cambiarse y disimular que todo sigue igual que siempre. Pero tal y como suele pasar, los planes nunca tienden a salir como uno espera. Al echar a correr, al principio sus movimientos son lentos, pero poca a poco va ganando velocidad y el mundo comienza a pasar a su alrededor como un breve destello de formas. 

Agitando los brazos para recuperar el equilibrio, Joseph siente que a punto está de caer al suelo. Una de esas cómodas pero sencillas pantuflas que portaba, no ha logrado soporta la presión a la que su velocidad la ha sometido y al acabar destrozada, se ha tropezado y casi cae de bruces al suelo.

Para cuando logra detenerse y recuperar el equilibrio, se da cuenta de que está parado en medio de la carreta y que una furgoneta avanza directo hacia él. El conductor, un hombre de poblada barba y rostro redondo, estaba ajustando la cadena de radio cuando al alzar la vista, se encuentra de golpe con Joseph. Guiado por su primer impulso, gira el volante de golpe logrando esquivar a Joseph, pero termina invadiendo el carril contrario.

Para evitar el choque, el coche que venía por el ahora invadido carril, trata de hacerse a un lado, pero no logra controlar el coche a tiempo y acaba abalanzándose contra la acera. Los gritos de la gente se alzan al contemplar como el vehículo sin control está a punto de arrollar a una joven que va haciendo footing y escuchando música con los auriculares puestos. 

Liberándose de las pantuflas y guiado una vez más por sus instintos, trata de lograr lo imposible. Todo es demasiado rápido y demasiado confuso, pero para cuando quiere ser consciente de lo que pasa, se encuentra en su habitación, sustituyendo sus estropeadas vestimentas por unas nuevas. Pocos minutos después, la puerta de la casa se abre, pero no es Mary quién la cruza, si no su hermano pequeño.

-¡¡¡Hooooolaaaaa!!! ¡¡¡Ya estoy en casa!!! -El pequeño de la casa aparece bajo el umbral de la habitación de Joseph y deja caer a un lado la mochila que llevaba colgada del hombro. -¿Qué tal J.R? Hoy hemos acabado las clases pronto, una profe se ha puesto mala. ¿Estás bien? Tienes una cara rara, más que de costumbre quiero decir. Por cierto, no te vas a creer lo que acabo de ver. Cuando venía hacia aquí, un tío ha invadido el carril contrario y el coche que venía, se ha acojonado y ha perdido el control. Casi atropella a una chica, pero de pronto he sentido como una enorme ráfaga de aire pasaba a mi lado. Ha sido una pasada, todos los periódicos del puesto de la esquina han salido volando y de pronto. ¡Boom! La chica estaba en la otra acera, tratando de averiguar que había pasado. Decía que alguien la había cogido en brazos y la había llevado hasta allí. ¿Te lo puedes creer? ¡Ha sido una pasada! Estoy seguro que he visto algo moverse más rápido que el ojo humano. 

El hermano pequeño de Joseph no puede ocultar su entusiasmo ante la idea de que exista algo imposible de explicar ahí fuera. Aunque su rostro cambia de golpe cuando mira a su alrededor y se percata que su hermana no está. 

-¿Mary? ¿Donde está? ¿No tenía que estar ella hoy contigo?
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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Joseph Raven » Jue, 07 Ene 2016, 17:04

Cada vez entendía menos lo que me estaba pasando y si esto seguía así me quedaría sin ropas.
En medio de esa confusión casi provoco un accidente. Bueno, casi no. Lo provoqué, solo que de alguna manera logré evitar que haya victimas de alguna manera.

Por suerte el pequeño Tomy llega a casa y como una tromba de pura emoción me cuenta lo que vio... o mejor dicho lo que por suerte no vio. Ahora entendía un poco más lo que me estaba pasando... o entendía un poco menos. Lo que si sabía era que los doctores nada tenían que ver con esto.

No sabía ni cuanto tiempo había pasado, pero evidentemente no el suficiente para que Mary regrese.
Fuerzo una sonrisa para recibir a mi hermanito.

-Hola Tomy, un día movidito entonces. No te preocupes por Mary, fue a comprarme unos medicamentos pero extrañamente me siento mucho mejor.

Tenía que cambiar de tema para que no sospeche nada así que llevo la charla hacia sus asuntos en la escuela.

-No habrás sido tu pequeño truan el que intoxico a la maestra para que te larguen antes, no?

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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Kildan » Dom, 10 Ene 2016, 23:15

El que Mary no esté en casa hace que Tomy arrugue la nariz con cierto aire de enfado. No le agrada la idea de que su hermano mayor esté solo y mucho menos en aquel estado. Aunque todo parece cambiar al escuchar que Joseph se encuentra mejor. Además, la euforia aún perdura en el joven. Después de todo, el acontecimiento milagroso que acaba de contemplar le hace estar de muy buen humor.

-Seguro que Mary a salido a verse con algún novio o algo así. Mejor sería que trajese a sus amigas ¿Eh? ¿Cómo se llamaba la pelirroja de ojos verdes? ¿Katia? Podría invitarla algún día a casa ¿Eh? Seguro que eso te alegra la vista. 

Presa de los tiempos modernos, Tomy manipula su teléfono móvil mientras conversa con Joseph. Seguramente esté ya investigando en las redes sociales cualquier posible dato sobre lo que acaba de ver. Lo único que le hace alzar la mirada, es la insinuación sobre el motivo de la ausencia de la maestra.

-¡Yo jamás haría algo así! No al menos sin un examen de por medio... Aunque seguro que tú si que has hecho algo parecido alguna vez. -Durante unos instantes Tomy se concentra en la pantalla de su móvil, hasta que finalmente, suelta un pequeño grito de alegría. -¡Yujuuu! ¿Sabes qué? Ya solo falta un año para el estro de la nueva película de Star Wars. Tiene que ser genial ver a Han Solo de nuevo en acción, seguro que él solito se carga a todo el nuevo imperio. ¿Crees que se podrán reservar ya entradas? 

Mientras el hermano pequeño, aficionado a la ciencia ficción se deleita con la idea de ver a su gran héroe en la gran pantalla, la puerta de casa se abre. Mary por fin hace su aparición aunque no lo hace sola. Junto a ella viene también Mark O´neill, el enorme y veterano entrenador de Joseph. Pese a que posee ya una edad bastante avanzada, el entrenador de piel azabache muestra aún una fuerte aura y una poderosa presencia. Es una de esas personas que por alguna extraña razón, se hacen respetar y escuchar. Algo que sin duda alguien de su posición necesita si desea imponerse ante las grandes estrellas del fútbol. 

Joseph y él se conocen desde hace años. De hecho todo cuanto Joseph sabe de fútbol es gracias a aquel hombre, quién desde el principio vio el potencial de Jospeh y le animó a explotarlo. Sin duda es el entrenador más duro que un jugador pueda tener, pero sin duda logró pulir todo el talento de la joven estrella que hoy yace en una silla de ruedas. En cierto modo es casi como un abuelo para Jospeh y sus hermanos, aunque todos siempre se han referido a él como entrenador O´neill. 

[Imagen]

-¡Entrenador! ¿Ha venido a ficharme? Si es así tendré que llamar a mi representante, ya sabe, para que la oferta que me haga se lo más justa posible para alguien de mi talento. 

O´Neill es un viejo amigo de la familia que ha pasado mucho tiempo en aquella casa. Así que no es de extrañar la familiaridad con la que todos le tratan. En especial Tomy quién de todos, si que lo ve como un viejo abuelo, algo gruñón, pero un abuelo. 

-El contrato está preparado, solo falta que apruebes las matemáticas...con buena nota. 

La sonrisa de Tomy se esfuma rápidamente de su cara, si en algo falla estrepitosamente es en las matemáticas. Los números sencillamente no son para él. Así que soltando un bufido, se aleja para dejarse caer sobre uno de los sillones de la sala y encender la tele. 

Mary por su parte se encuentra más seria de lo normal así como distraída. La experiencia por la que ha pasado sin duda la ha aterrado, pero no parece dispuesta a compartirla con nadie. Por ello rehuye la mirada de Joseph y se limita a sonreír mientras se despoja del abrigo y se dispone a preparar una bebida caliente para el entrenador y el resto de los presentes. Mary sabe que su familia está pasando por el peor momento de sus vidas, todos tratan de animar y ayudar a Joseph, quién parece maldecido a a estar encadenado de por vida a una silla de ruedas. Por ello, el hecho de compartir que ha sido asaltada, la parece algo insignificante que tan solo traería más preocupaciones a su familia. 

-He traído tus medicinas Joseph, lamento que se cortase la llamada. Voy a prepararos un té calentito para ayudaros a entrar en calor y ahora os lo llevo. Podéis ir a tu cuarto para hablar tranquilamente. 

O´neill posa una mano sobre el hombro de Mary agradecido por el gesto de la muchacha y tras saludar con la cabeza a Joseph, ambos van a un lugar donde poder hablar en privado. El entrenador es un hombre duro, al menos esa ha sido siempre la impresión de Joseph, pero ahora le resulta imposible no mostrar parte del dolor y la pena que siente por la condición actual de Joseph.

-¿Qué tal muchacho? Me han dicho que estás logrando progresos significativos con la recuperación. -Miente ¿Pero que otra cosa puede decir? -Los directivos del club esperan con ansia tu regreso, dicen que sin ti, el equipo no es nada y que más te vale mover tu culo y volver cuanto antes. -Seguramente aquello sea otra mentira. El fútbol no es más que otro negocio. Si él no es capaz de jugar y meter goles, su valor se reduce a cero. Por lo que lo más seguro es que no tarden en sustituirlo o echarlo del equipo. Seguramente tarden algunas semanas, puede que un par de meses, tal vez tres. Pero tan pronto como crean que su accidente ha sido olvidado por los medios, se desharán de él sin contemplaciones. Poco importará las objeciones que O´neill tenga o lo que haga, al final son los directivos quienes mandan. -Tienes buen color, espero que estés haciendo caso a los médicos. 

El entrenador se sienta sobre una silla, apoya los codos sobre las rodillas y entrelaza los dedos de las manos. Después contempla a Joseph durante unos instantes. El muchacho le conoce demasiado bien como para saber que el entrenador está tratando de medir el tiempo para soltar lo que ha venido a decir. Aunque esas cosas nunca se le han dado muy bien, por lo que tras soltar un pequeño bufido, decide ir directo al grano.

-Tengo algo que decirte, J.R. He movido unos cuantos hilos y me he cobrado unos cuantos favores. ¿Has oído hablar de Genoma Corp? Es una farmacéutica líder en su sector que está revolucionando el campo de la medicina. Ahora mismo tienen entre manos un proyecto que está en fase de experimentación. Es decir, que no es todo muy seguro. Les he hablado de tu caso y tal vez ellos puedan ayudarte. Han logrado reparar la médula espinal a varios pacientes, personas que no podía caminar y hoy pueden hacerlo con total naturalidad. No te voy a mentir, hay ciertos riesgos, pero bueno, tendrían que hacerte algunas pruebas pero es muy posible que puedan ayudarte. Osea, no quiero decir que lo que estés haciendo hasta ahora no funcione, pero esto podría hacer que el tiempo de recuperación fuese muchísimo menor. -Aquello le resulta tremendamente complicado. El entrenador sabe que la rehabilitación es tan inútil como cubrirse de una tempestar con un periódico. ¿Pero como puede arrebatarle esa esperanza? ¿Cómo puede decirle que su mejor opción es someterse a un proceso experimental? Por ello se quita la gorra y se rasca la cabeza pensativo. -Yo no sé mucho de medicina, pero podría concertarte un encuentro con los especialistas de Genoma Corp y ellos podrían explicarte todo mucho mejor. Esa gente está considerada como algunos de los mejores del mundo, así que algo sabrá, digo yo. ¿Qué te parece? 

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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Joseph Raven » Mar, 19 Ene 2016, 18:03

Sonrío ante las ocurrencias de Tomy. Como volaba su mente y con el despertar de la pubertad tenía las hormonas a pleno. No es que a mi no me gustara Katia... pero no era un tema que quisiera discutir con mi hermanito.

Mejor hablar de tema de películas que no me avergonzaría.

-Porque no me sorprendo que Han Solo sea tu favorito si eres un granuja como el. Mejor estudia mucho que los burros como yo terminamos como futbolistas... y como ves la carrera a veces es demasiado corta.

Mis propias palabras me entristecen. Un jugador de futbol no pasa de los 35 por lo general y luego se jubila muy temprano comparado con el resto de las profesiones, pero en mi caso lo tendría que hacer aún más temprano. Tenía que entender que es lo que me estaba pasando y curarme si algún día eso fuera posible.

Luego entra mi hermana y percibo su mirada extraña. No la iba a presionar por lo que yo también la esquivo. De hecho yo debo sentirme más extraño que ella.

-Mary, que bueno que llegaste! estaba preocupado por ti. Por suerte vienes acompañada de un gran caballero. Gracias por visitarme entrenador.

Me pongo la mano en la frente y niego con la cabeza ante los comentarios de Tomy... con eso también aprovecho para taparme la sonrisa. Si veía que con sus bromas me divertía en lugar de que se comporte lo alentaría aún más.

-Dejalo tranquilo Tomy y mejor ayuda a tu hermana para traer algo de beber. Y como te dijo práctica tus matemáticas así puedes entender la ley del offside.

Ahora ya más tranquilos escucho con atención lo que mi entrenador me viene a proponer.

-Entrenador, los médicos me echaron del hospital. No pueden hacer nada más por mi. No hace falta que nos mintamos. No se si pueda alguna vez volver a jugar al fútbol. No quiero que eso pase entre nosotros...

Cuando me doy cuenta lo que he dicho siento que aún no estoy preparado para decirle que es lo que me pasa, con esos exabruptos de velocidad que me están sucediendo cuando aún no puedo caminar normalmente.

-Genoma Corp.? nunca oí hablar de ellos. No tengo mucho que perder entrenador, así que la respuesta es un rotundo si. Vayamos a verlos. Vamos juntos. Solo espero que no le haya causado un problema por esos favores que ahora tendrá que repagar. Hay algo que quisiera contarle a un doctor que me está sucediendo... pero mejor si lo escuchan los dos juntos...

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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Kildan » Jue, 21 Ene 2016, 16:49

Si por algo destaca Tomy es por su gran habilidad para desconectar de una conversación que no le conviene. Por ello se hace el sordo cuando le atacan con el tema de las matemáticas, de hecho hasta sube el volumen de la televisión para evitar escuchar las pullas que le lanzan. Después, simplemente hace un gesto con la mano que es difícil de interpretar. Bien puede ser que pasa absolutamente de ellos o que irá enseguida a ayudar a su hermana. Aunque conociéndole como le conoce, lo más probable es que sea la primera opción.

En la habitación y a solas, el entrenador no puede evitar torcer el gesto en una mueca de dolor ante las palabras de Joseph. Ser realistas es importante, pero aceptar sin más su actual situación, puede provocarle un acto de desesperación total. Por lo que mucho se teme el entrenador, que sin esperanza alguna, Joseph pueda llegar a cometer algún tipo de locura. Aún así no pueda evitar sentir una profunda alegría cuando acepta ir a conocer a los expertos de Genoma Corp. No es que existan muchas oportunidades de enmendar lo que le ha sucedido, pero eso es sin duda mejor que no hacer nada.

-Digamos que los Genoma Corp es en el mundo de la farmacéuticas, lo que microsoft en el mundo de la informática. Disponen de centrales y laboratorios por todo el mundo. Buscan a los más prometedores estudiantes y les ofrecen una beca completa, así como un puesto en la empresa si sus calificaciones finales están a la altura. La sede de Paradise City es una de las tres más grandes. Están revolucionando el mundo de la medicina y los fármacos. Han logrado grandes avances significativos en la lucha contra el cáncer por ejemplo. Logrando incluso salvar la vida a pacientes terminales. 

Al entrenador no le extraña en absoluto que no haya escuchado jamás hablar de Genoma Corp. pues no es una patrocinadora ligada a los deportes. 

-Me alegra que aceptes esta oportunidad, hablaré con ellos para ver si pueden recibirnos esta misma tarde. ¡Ah! No debes de preocuparte por nada, uno de los jefes de sección es muy aficionado al fútbol. Le conozco desde hace varios años, en alguna ocasión hemos estado comiendo junto a nuestras esposas. Él ha logrado que uno de sus mejores médicos te examine. Dicen que es alguien un tanto...odioso y que resulta difícil de tratar con él. Pero es uno de los mejores médicos que existen. Mi amigo ha logrado también que una de sus ingenieras médicas o algo así, también esté presente. No estoy muy seguro de cual es su puesto, pero es una niña cerebrito de esas que se graduó con honores en la universidad a una edad muy temprana. Estoy seguro de que ellos podrán ayudarte y entonces, será mejor que te prepares, vas a tener que recuperar todo este tiempo que ahora estás descansando. Te aseguro que la pretemporada será la más dura de tu vida. ¿Sabes qué? ¡Qué diablos! Voy a llamarles ahora mismo.

Tras ponerse en pie, toma su teléfono móvil y comienza a enredar en él. Se lo acerca varias veces a la cara y frunce el ceño mientras trata de ver bien la pantalla del móvil. La tecnología no es precisamente el fuerte del entrenador, si a ello le sumamos la perdida de visión que sufre en las distancias cortas, nos encontramos con un pequeño espectáculo un tanto divertido. Finalmente, derrotado por el teléfono, toma las gafas para ver de cerca que porta en su chaqueta, se las pone sin demasiada ilusión (Pues aborrece llevar gafas) y llama por fin a un número de su agenda. Para tener un poco de intimidad sale de la habitación, momento en el que Tomy aprovecha para entrar y depositar ante Joseph una bandeja con bebidas y un plato con pastas. 

-¿Así que Genoma Corp, eh? Si Mary se entera se morirá de envidia, su sueño es ir a trabajar con ellos y curar todas las enfermedades del mundo. -Tomando una de las pastas, se deja caer sobre la cama de Joseph, tras lo cual se lleva a la boca la pasta. Tras apenas masticarla y con la boca aún llena, continúa hablando. -El entrenadorz pareze que ezta muy zeguro de ezto... -Incorporándose de golpe, comienza a toser con fuerza, pero no contento con ello, se golpea el pecho para finalmente, tomar la bebida de Joseph y darle un buen trago. -¡Aghh! Casi me atraganto, creo que Mary ha echado algo en las pastas. Será mejor que no las comas hermanito...-Extendiendo el brazo, toma el plato con las pastas para instantes después llevarse un par de ellas a la boca y lanzar una amplia sonrisa. 

Los modales de Tomy no son precisamente muy buenos, no solo les ha escuchado a través de la puerta, si no que se come y bebe los aperitivos preparados por Mary. Por suerte la conversación del entrenador es corta y no tarda en regresar.

-Buenas noticias, muchacho. Esta misma tarde podremos ir a las instalaciones de Genoma Corp para que te hagan un chequeo y examinen tu caso. ¿Te parece bien?
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Re: Primeros Pasos (Joseph)

[Nota] por Joseph Raven » Dom, 31 Ene 2016, 18:42

Yo también hubiera querido escuchar que es lo que el entrenador hablaba por tel tanto como Tomy había escuchado mi conversación con el. Se ve que en nuestros genes de hermanos estaba la curiosidad. El problema es que la molestia era una característica exclusiva del pequeño, por eso con sus malos modales, captó por la fuerza mi atención.

-No le digas nada a Mary por ahora. Tendremos solo una charla con estos doctores. Sino pueden hacer nada por mi, mejor sino la ilusionamos. Asegurate que aproveche el tiempo cuando estoy fuera y que se distraiga un poco. No tuvo un buen día. Te lo aseguro.

Justo cuando Tomy podría repreguntar porque decía eso último o que es lo que sabía sobre Mary, Mark O' Neill regresa de su conversación.

-Por supuesto que me parece bien. Aunque dejeme ver mi agenda... un momento..., no no tengo nada. Podemos ir ahora, mas tarde, o cuando sea necesario.

Le muestro la agenda desde mi celular al entrenador para reforzar la broma. Completamente en blanco. 

Esto me daba esperanzas de entender lo que pasaba así que sonrío un poco, por primera vez desde el accidente. 

Además había una chica. Nunca había tenido problemas con las chicas lindas, pero que esta sea del tipo nerd, me generaba alguna curiosidad especial. Y el Dr. ese odioso... por lo general los tipos buenos en lo suyo eran un poco soberbios. Espera que no demasiado... pero por volver a caminar y jugar al fútbol, podría soportar cualquier cosa.

Quizás pueda hacer un contrato publicitario con esta gente a cambio del tratamiento y presionaría para que le den empleo a mi hermana. Con eso mi familia podría progresar y en especial mi hermana que tanto lo merece. Si un futbolista volvía a caminar luego de que le cayera no uno sino dos rayos, sería un buen gancho comercial.