Partida Rol por web

Evea asintió a la pregunta de Theonil.

-La verdad es que no demasiado, estaba más pendiente de si algún tercero intentaba alguna estupidez y ayudando a Karlack a terminar de prepararse que de oír lo que decían...- hizo memoria, intentando atar cabos- pero parece que aquí una familia cometió algún acto horrible y fue castigada con su exterminio por otra familia... o algo así. -bajó un poco la voz para que ningún oído interesado captara más de lo debido-Espero que Gaëlle pueda arrojar más luz a este enigma para saber cuál debería ser nuestro siguiente movimiento para resolver los asesinatos y las desapariciones-

La mirada que lanzó a Theonil fue de todo menos sutil, Evea estaba decidida a encontrar a su hija porque veía que el investigador lo estaba pasando francamente mal. Además, tenía el convencimiento que todos los eventos: desapariciones, asesinatos, antiguas casas caídas en desgracia... tenían relación 

Gaëlle abandonó la esperanza de alcanzar a Erestiel y tratar de tranquilizarlo. Confiaba en que llegara bien a casa y pudiese serenarse. Lamentaba haberle causado aquel ataque recordándole penurias pasadas, pero su charla la había ayudado a poner en orden sus ideas y resolver algunas de sus dudas.

Se reunió con sus compañeros y, una vez que estuvieron reunidos y apartados del ambiente de la taberna, se dispuso a contarles lo que sabía.

-Bueno… la conversación con Erestiel me ha confirmado lo que sospechaba, pero ahora que es algo real casi preferiría haberme equivocado – explicó – El símbolo que vimos marcaba el territorio de los Sangrador, una de las casas élficas, que fue aniquilada y olvidada. Era una casa de diabolistas y nigromantes. No sé que tipo de mal causaron aquí, no se cuantas muertes provocaron, pero debió ser algo terrible – su voz emanaba gravedad  - Causó que vinieran a por ellos aventureros de todas partes, incluso soldados del Rey... – se quedó un momento pensativa - No se como han sido capaces de ocultar aquí algo así… bueno, es igual. Debían haber sido exterminados por completo, pero nunca se encontró el cuerpo de uno de los miembros de la familia.

Se detuvo un momento observando las reacciones de sus compañeros.

-Se refirió a ellos usando la expresión Matyë Nimayan, Hundir en el Olvido, creo que es el castigo al que se les condenó, pero no estoy segura. También habéis oído la mención a los Coronal ¿puede ser que se les negase el nombre original tras los terribles sucesos ocurridos? ¿Cambiaron ellos voluntariamente tras pactar con criaturas ajenas a este plano? O quizá fuese algo completamente diferente.  Deberíamos investigarlo - se volvió entonces hacia Evea y Theonil - ¿No estabais investigando algo relacionado con magia negra ayer cuando nos encontramos? Algo creo recordar…

Meditó un par de segundos antes de volver a dirigirse a los demás.

-Creo que deberíamos investigar el territorio de los Sangrador, donde Selen y Auria encontraron las placas. Pero debemos ser muy precavidos, todo parece indicar que uno de ellos ha vuelto, o algún demonio o diablo atado a sus dominios. Aunque por las palabras del otro elfo, quizá la cosa no sea tan directa... Deberíamos intentar husmear en los archivos del templo para conocer la historia con más detalle... No me gustaría acabar cara a cara con alguna de estas criaturas sin saber bien lo que está ocurriendo… Y deberíamos advertir a Selen y Auria lo antes posible de a que nos enfrentamos. Además es probable que ellas tengan menos puertas cerradas que nosotros... en especial si este último incidente tiene alguna consecuencia... 

-¡Antes de que se me olvide! - volvió a intervenir sin haber dado tiempo a sus compañeros a hacerlo - Nan Bredal... el apellido de Erestiel es Nan Bredal, significa Sin Familia...* 

Se quedó un momento pensativa. 

-Se me está ocurriendo una teoría... - hizo señas a todos de que escucharan - Cuando habló del símbolo de la "C" dijo que ese símbolo ya no existía. Supongamos que ese es el símbolo de los Coronal, creo que es una suposición no demasiado descabellada... Después se escribió encima la "S", de los Sangrador. Eso nos dice que los Sangrador de algún modo se hicieron con el territorio de los Coronal... o que de algún modo se transformaron en los Sangrador al hacer pactos con demonios... bueno, no lo se... Volvamos entonces al apellido de Erestiel, Sin Familia, ¿Creéis que es muy descabellado suponer que ese apellido está ahí para sustituir a uno de los apellidos "prohibidos"? En una historia sería perfecto... Dijo que su familia había sido aniquilada, y que supuestamente quedaba vengada al ser los Sangrador aniquilados. ¿Es Erestiel un Coronal? ¿El último de los Coronal? 

Al acabar esperó expectante a la reacción de sus compañeros. 

-Puede... puede que esté yendo demasiado lejos con mi teoría, pero creo que si estamos tratando acerca de dos familias "olvidadas", que el único que haya querido hablar con nosotros sea alguien "sin familia", indica algo... Quizá las cosas no sean exactamente así, pero creo que deberíamos investigarlo. 

-Sea como sea, deberíamos investigar el antiguo territorio de los Sangrador. Según Erestiel casa estaba en las afueras, ahora creo que abandonada.

Cuando Theonil oyó a Gaëlle hablar de una casa abandonada, rápidamente su mente voló a una estructura que estaba fuera de los límites actuales de la ciudad, en el Centro, hacia el interior del bosque y a unos doscientos metros de lo que era la linde actual. 

El siempre había pensado que era algún antiguo asentamiento abandonado porque los árboles habían muerto. Ocupaba cuatro de los robles más grandes de la ciudad, ahora reducidos a esqueletos nudosos y retorcidos. Lo había tomado por un antiguo asentamiento de gente de bien, pero ahora que Gaëlle hablaba de esa casa y una familia muy importante... bien podrían ser los restos del palacio más grande e impresionante que nunca hubiera habido en Zoquejo, aunque de eso ya quedaba muy poco.

Estaba rodeado por un trozo de tierra yerma, como muerta. Tampoco era infrecuente que si un árbol tan grande sufría una tragedia todo alrededor quedase afectado, recordaba haber preguntado en los primeros días sobre las ruinas pero nadie parecía tener nada interesante que decir de ellas, lo que reforzó su idea de que era, simplemente un barrio abandonado.

Aguardé un rato, meditando lo dicho por Gaëlle.

-Es una suposición lógica. -Dije, mientras tomaba rumbo a las ruinas- Seguidme. -Al rato de andar unos pasos prosigo Según se observa, el elfo tan modosito  era más bien partidario de los Coronal, los cuales, según él, tuvieron que hacer un sacrificio ignominioso para librarse de los Sangrador y sus artes oscuras. Y, según lo que pude escuchar en la charla con las señorita Bellerose (perdone la intromisión), es también lógico deducir que Erestiel pertenecía a la estirpe de los Coronal, y hablaba del sacrificio que trajo la vergüenza a la casa. Sacrificio que no fue suficiente, pues algo o alguien de los Sangrador pudo sobrevivir. No muy lejos de aquí se debe hallar su palacio. Pensé que era un asentamiento abandonado, o algo así. Parecía el hogar de una casa noble venida a menos... El polvo y los árboles muertos le rodean, aunque no parece ser nada mágico. - ahora empezamos a encajar esto- ¡Cómo no se me ocurrió antes! Nadie sabe mucho sobre ese lugar; en realidad es por el destierro de la memoria, o como diablos se llame

-De repente, un resorte se activa dentro de mí, y miro a Evea consternado. Recito lentamente, recordando cada palabra que aprendí y memoricé. 

Cuando el carcelero cautivo quede libre la cautiva podrá ser liberada.

Jugaréis en la ruleta el destino de los cautivos y el de vuestras vidas.

Los actos de los que conocen la profecía marcan la libertad de la cautiva.

Los actos de los que le acompañan marcan la libertad del carcelero.”

Vosotros, compañeros, marcáis el destino del carcelero. De quien tiene a Lady Tianna... O a mi hija. -Mi voz temblaba, parecía que las cosas se conectaban demasiado rápido- Y... si no lo liberáis... Ella no podrá ser liberada.

Lo que decía Theonil tenía  bastante sentido, pero el recordatorio de la profecía cayó como una losa sobre la batidora que tragó saliva antes de hablar con voz trémula

-No te preocupes Theonil aún no es tarde, contamos con ayuda... y mucha más información- intentó hacer de tripas corazón para mover al grupo y no perder tiempo- así que deberíamos marchar cuanto antes a esa localización y realizar una búsqueda exhaustiva de toda pista para solucionar esto de una vez por todas.

Y esperemos que sin tragedias.

En opinión de Evea ya habían perdido mucho tiempo, ella encabezaría la marcha de saber a dónde se dirigían pero el ritmo lo imponía Theonil que, a pesar de lo que estaba en juego, no podía evitar estas pausas

Menos dramatismo y más efectividad... vámonos- las ideas la reconcomían por dentro mientras el grupo se dirigía hacia esos terrenos descritos por Theonil.

Parecía que por fin dejarían de hablar y empezaría la acción. El guerrero ya se había preparado para ese momento, elfos, magia negra y demonios nunca podían ser una buena combinación. 

Se dispuso a seguir a sus compañeros, con el gusanillo de la adrenalina comenzando a asomar en su cuerpo

Aquello de la profecía pilló por sorpresa a Gaëlle. ¿De que estaban hablando? En aquel momento le entró curiosidad por saber en que estaban metidos sus actuales compañeros antes de que comenzara todo aquello. Recordaba que habían mencionado algo acerca de magia oscura, pero nada más. 

-¿Profecía? Esta parte de la historia se me escapa... ¿Quien es Lady Tianna?* - detuvo entonces a sus compañeros - Estoy en esto hasta el final, encontraremos a tu hija y acabaremos con... lo que sea que haya allí - se dirigía entonces a Theonil - pero necesito que me lo cuentes todo. Quiero saber donde me estoy metiendo. 

A no ser que tu sabiduría roce lo divino. No conocerás nada sobre el tema-Dije mientras avanzaba con paso presto. -Detectamos signos... o indicios de una presencia maligna en los alrededores de zoguejo. Nada en claro, nada que pudiésemos constatar. Así que acudimos al hermano Merryl, el cual pudo hacer un ritual para poder preguntar a Ryffilane a cerca de ese mal. Ella, o su avatar, estableció esa profecía. - Tragué saliva, algo agotado por acelerar el paso- Era escéptico a  la naturaleza de las profecías, además, era algo que sólo nos involucraba a Evea y a mí. Aunque a estas alturas es justo que lo sepáis todos.  - Mi rostro se vuelve más triste, muy apesadumbrado- Tantas cosas han salido como no me esperaba... que empiezo a pensar que puede ser verdad. 

La profecía, la hija de Theonil, Lady Tianna aún prisionera... todo se mezclaba y pasaba rápidamente por la mente de Evea, haciendo flaco favor por su calma. Eran demasiadas cosas de golpe y, con la desaparición de la hija de Theonil, tal vez la profecía no se refiriera a Lady Tianna, o tal vez se refiriera a ambas. El lío que tenía en la cabeza podía evitar verse reflejado en su cara, por lo que tardó unos instantes en responder como buenamente pudo con la voz quebrada y la cabeza gacha.

-Lady Tianna era.. es una guerrera sagrada al servicio del Caballero Rojo. -hizo una pausa, calmándose ligeramente por los buenos recuerdos- me recogió de joven y tuve el honor de acompañarla en algunos de sus viajes en misión sagrada.- el peso de los no tan buenos recuerdos retornó- pero le fue encomendada una misión a la que partió en solitario, y desde entonces no se han tenido noticias suyas...-

Levantó la cabeza, mirando a sus compañeros, dejando claras sus prioridades

-Hasta que llegaron a mi algunos rumores que había sido apresada y que podría encontrar respuestas en el festival del unicornio. Pero hasta ahora sólo han sido más preguntas.-suspiró cansada- cuando nos fue revelada la profecía asumí que estaba referida enteramente a ella, pero ahora no estoy tan segura. Temo que todo esto esté relacionado, tu hija Theonil, Lady Tianna, los Sangrador... son demasiadas coincidencias para un solo festival- soltó una carcajada baja, hueca, carente de toda gracia- desde luego que los dioses tienen caminos inescrutables para nosotros, meros mortales.