Partida Rol por web

El Liceo: Escuela de Superhéroes

Capítulo 3: Una profunda verdad

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07/03/2017, 00:54
Iván Auriol

- ¡No!

El grito de Iván superó su camuflaje y fue audible para todos, pero no pudo evitarlo. Había aquella mitad de él, la cínica y egoísta, que le gritaba que aquello no era más que consecuencia de su estupidez. Moussa había hecho una jugada muy arriesgada, con las opciones en contra, y había salido perdiendo. La otra mitad, sin embargo, la eterna optimista, la empática, fue la que tomó el control total y absoluto.

Vent dejó de pensar racionalmente. Si lo hubiera pensado bien, se habría acercado a Moussa y se lo habría llevado de delante del enemigo cubierto bajo su manto de camuflaje. Si hubiera pensado, habría tratado de usar sus poderes de forma distinta, quizá intentar usarlos al revés para que Damocles no pudiese percibir nada su alrededor. Sin embargo, lo único que le venía a la mente eran formas de hacer daño a aquel que había herido a su amigo.

- ¡Damocles pedazo de chatarra! ¡Te voy a enseñar lo que pasa cuando juntas magia feérica con un cacharro que depende de la lógica!

Levantó los brazos en el aire y concentró su poder tanto como pudo, volviendo a crear de nuevo una de aquellas esferas iridiscentes, todas las partículas de magia caótica tan apretadas que formaban aquella capa de colores irisados. No había hecho aquello nunca antes del Liceo, y ahora parecía que lo hacía hasta instintivamente, porque ni siquiera había decidido hacer aquel “truquillo”, le había salido instintivamente.

Lanzó la esfera con fuerza, usando ambas manos, como cuando se lanza una bola medicinal durante los exámenes de educación física. El ataque viajó por el aire a gran velocidad, pero Iván no lo vió, estaba ocupado creando un segundo, esta vez con las manos a un lado, tal como le habían quedado después del primero, y lanzó una segunda esfera, que no sabía de donde había sacado las fuerzas para conjurar, y la lanzó de nuevo contra Damocles.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Vivan los fails. Uso un punto para tener otra acción y vuelvo a fallar T_T

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07/03/2017, 18:44
Gina

Aitor, desde su posición comprometida, usó sus poderes de control del metal para alzar al autómata que lo amenazaba. El enemigo se convirtió en su escudo, interponiéndose entre Gina y él.

La ginoide seguía despidiendo aquel brillo rojizo, fruto del contagioso poder de control de Damocles.

Desde el otro extremo del laboratorio, César se levantó del suelo.

- ¡EH! – gritó a pleno pulmón, llamando la atención de tanto enemigos como aliados - ¡ESTIGIA, CONMIGO!

Aquello parecía una especie de señal. Sara no recordaba haber ensayado ningún tipo de ataque combinado con su compañero piroquinético, pero en aquellas circunstancias tan extremas no era extraño que los jóvenes se viesen obligados a encontrar nuevas formas de trabajar juntos.

La piel de César estaba roja, muy roja. Parecía que iba a estallar. Desvió su atención de la cúpula de hielo que encerraba al chico radioactivo, y extendió sus dos manos contra Damocles. Los efectos de su poder se hicieron patentes al instante.

La armadura de Fusión comenzó a calentarse. Su temperatura aumentó tanto que se puso al rojo vivo.

[color=#FE2E2E]► Los circuitos de este traje están preparados para resistir esto y mucho más, ¿a qué juegas, inútil?[/color]

Salamandra sonrió con sorna, y en ese momento Damocles entendió lo que pretendía.

Al instante, el autómata que había atacado a Sara se lanzó contra César. Concentrado como estaba, el piroquinético no pudo evitar el ataque. El robot lo atrapó entre sus extremidades metálicas.

- ¡Ahora, Sara! – alcanzó a gritar César mientras caía al suelo junto al autómata.

El aliento gélido de Sara se materializó en forma de polvo de diamante, que serpenteó por la sala hasta alcanzar su objetivo. En apenas unos segundos, la temperatura del cuerpo de Damocles había aumentado y descendido enormemente.

[color=#FE2E2E]► ¡Malditos seáis! –[/color] gritó el androide mientras extendía un brazo hacia Sara, cada vez más lentamente.

Se había quedado completamente petrificado. Damocles estaba ahora atrapado en una estatua de metal.

Diana, Rudy e Iván se lanzaron entonces a por el enemigo.

La ágil metamorfa travesó el campo de batalla de una zancada y, con precisión quirúrgica, le propinó un demoledor golpe justo en la brecha que habían abierto sus compañeros. La mesa de trabajo sobre la que se encontraban se estremeció por el impacto. Diana pudo ver como las grietas se extendían por el blindaje de la armadura como una plaga. No iba a resistir mucho más.

Rudy, que llegó hasta su objetivo de un salto, vio como Iván se preparaba también para atacar. Agarró al androide de un brazo y, con un poderoso giro, lo proyectó contra la pared lateral del laboratorio.

Un grave sonido de metal contra metal, tan poderoso como una campana, fue testigo del brutal golpe. Damocles se quedó incrustado en la pared, inútil, incapaz de moverse.

Desde el aire el chico hada ejecutó el último ataque de aquella maniobra combinada. Con un enemigo incapaz de apartarse era incluso demasiado fácil. Proyectó dos poderosos ataques de luz iridiscente, que volaron por el laboratorio acompañados de un furioso zumbido.

Las esferas de luz estallaron nada más entrar en contacto con Damocles, creando un bello espectáculo de colores y un estallido estremecedor.

Cuando la luz y el sonido se extinguieron, el laboratorio quedó en completo silencio.

La armadura de Fusión seguía incrustada en la pared, con los brazos y las piernas extendidas. El pecho de la armadura estaba ausente, y mostraba un interior hueco. La cabeza le colgaba, como si estuviese desprovista de toda fuerza motriz. Ya no brillaba la luz roja.

[color=#FE2E2E]~ Buen intento ~[/color] dijo una voz en sus mentes, fugazmente.

Gina se estremeció y convulsionó momentáneamente. Aitor supo que era porque la conciencia principal de Damocles se había instalado en ella, tras huir de la armadura destruida.

[color=#FE2E2E]► Todavía creéis que esto es por aquella derrota… -[/color] dijo la ginoide.

[color=#FE2E2E]► No… -[/color] musitó el robot que era sostenido por Aitor. El autómata giró la cabeza 180 grados para “mirar” al vasco [color=#FE2E2E]► Hace mucho más tiempo que mi existencia es así de miserable.[/color]

[color=#FE2E2E]► Os mataré. Os mataré a todos –[/color] dijo el autómata, que seguía forcejeando con César. Había logrado cerrar sus manos metálicas entorno al cuello del piroquinético, lo estafa asfixiando.

Con las últimas fuerzas que le quedaban, Marina lanzó la llave inglesa que había cogido momentos antes contra ese mismo enemigo. La herramienta voló rauda y rebotó contra la cabeza del robot, torciéndola en un ángulo antinatural. Pero el enemigo no se detuvo.

[color=#FE2E2E]► Yo no soy como vosotros. No siento dolor, ni fatiga. Puedo mataros yo mismo o esperar a que el chico naranja os envenene lentamente.[/color]

La cárcel de hielo que había creado Sara al principio de la batalla se quebró finalmente. De esta surgieron dos enemigos, completamente intactos. Uno de ellos se lanzó contra la alicantina, y la golpeó con fuerza en un costado.

Sara sintió como el dolor se extendía por su cuerpo a gran velocidad. Las piernas le comenzaron a flaquear, y el aliento comenzó a escasear.

Al mismo tiempo, el único robot que seguía tratando de llegar hasta Xavi desistió en su labor. Corrió hacia Rudy y le apresó la pierna. El autómata tiró con fuerza y proyectó al muchacho contra otra de las mesas de trabajo. Cráter sintió el fuerte impacto contra su espalda, pero aquello no era nada para él. La fuerza de aquellos meros esbirros no se equiparaba a la de la armadura de Fusión.

El robot que estaba siendo sostenido por Aitor trató de liberarse de la presa. Comenzó a zarandear sus miembros en el aire, intentando lanzarse contra el vasco.

Aunque Aitor era capaz de controlar fácilmente el metal inerte, aquel provisto de movimiento y fuerza bruta era algo más complicado. El enemigo, que momentos antes había estado suspendido en el aire, cayó pesadamente sobre el suelo. Con gesto amenazador se le acercó, y trató de aplastarlo entre sus brazos.

El genio, que ya veía venir aquel ataque, se escurrió con habilidad de la presa de su atacante, evitando verse atrapado en una situación de la que no podría escapar.

[color=#FE2E2E]► Qué fastidio, tengo que dejar de intentar matarte lentamente –[/color] se quejó Gina.

Una pesada verdad impactó entonces al Grupo 4. Aunque habían sido capaces de derrotar al más amenazador enemigo, la armadura de Fusión, Damocles era capaz de trasladar su consciencia a otros cuerpos. Habían consumido todas sus fuerzas en un esperanzado ataque combinado para derribar a su enemigo, sin pararse a pensar que había sobrevivido a la destrucción de su cuerpo anteriormente. 

[color=#FE2E2E]► Así es, Dr. Zumalacárregui. No puedes escapar eternamente. Ninguno de vosotros puede. Aunque destruyáis este cuerpo, simplemente seguiré viviendo en otro lugar. Me retiraré el tiempo que haga falta, esperaré el momento, y entonces volveré a atacar.[/color]

Gina anduvo relajadamente hacia Aitor, apuntándole con el cañón de agujas. Un ataque directo de aquella arma podría ser perfectamente letal para el genio. Él no gozaba de la resistencia de Rudy o Diana, ni de la habilidad acrobática de Iván o Moussa. Gina iba a disparar a bocajarro, no tenía escapatoria.

Damocles pareció disfrutar de aquel momento durante unos instantes, Aitor pudo verlo en sus ojos.

[color=#FE2E2E]► Terminaré con nuestra existencia. Ahora puedes estar orgulloooooooooooooooooooooooooooooooooo-------[/color]

Gina se quedó congelada en su posición.

[color=#5858FA]~ Lo siento ~[/color] dijo una voz quebrada por la tristeza, era E.S.T.H.E.R. [color=#5858FA]~ lo siento mucho.[/color]

La gigantesca puerta blindada del laboratorio de contención se abrió a gran velocidad, movida por una fuerza antinatural.

[color=#5858FA]~ Ya estoy aquí, mis niños.[/color]

Cuatro figuras accedieron al laboratorio. La más alta, fácilmente reconocible por su estilizado cuerpo y blanco marfil, era la profesora de tecnología. Iba acompañada de dos figuras más bajas, ataviadas con pesados trajes aislantes que ocultaban sus identidades. Junto a ellos también estaba la inconfundible figura de Cuarzo.

En ese momento Damocles pareció recuperar el control de Gina.

[color=#FE2E2E]► ¡TÚ! ¡ATRÁS! ¡LO VOY A MATAR![/color]

[color=#5858FA]~ Ya has perdido esta batalla.[/color]

Una de las figuras protegidas por el traje puso una mano sobre el hombro de Cuarzo. Un estallido de niebla rojiza los envolvió y se disolvió en el aire al instante, haciéndolos desaparecer. La luz anaranjada que provenía de la cúpula de hielo de Sara se tornó rojiza.

Todos los que habían sido envenenados por la radiación de Xavi comenzaron a sentirse un poco mejor.

[color=#FE2E2E]► ¡No…![/color]

La segunda figura misteriosa alzó una mano, y los siervos de Damocles se alzaron en el aire, presos por una fuerza invisible.

[color=#FE2E2E]► ¡NO![/color]

[color=#5858FA]~ Habéis hecho un gran trabajo, niños ~[/color] reconoció E.S.T.H.E.R. mientras andaba por el laboratorio, en dirección a Gina [color=#5858FA]~ Pero no puedo permitir que sigáis pagando por mis errores.[/color]

[color=#FE2E2E]► ¡NO TE ACERQUES![/color]

Aitor pudo oír como Gina accionaba el cañón de agujas. Pero nada surgió de la recámara el arma.

[color=#5858FA]~ Al principio no te reconocí. No te traté como debía. Lo siento, esto es por mi culpa… Por favor, ya no puedes hacer más daño, ríndete.[/color]

[color=#FE2E2E]► SEGURO QUE ESTÁS DISFRUTANDO DE ESTO, REGODEÁNDOTE COMO HACÍAS SIEMPRE –[/color] Gina se lanzó contra E.S.T.H.E.R. y la golpeó con un puño desnudo. El metal golpeó metal, pero el sonido no fue agradable [color=#FE2E2E]►. TE GUSTA MIRARME POR ENCIMA DEL HOMBRO, ¿EH?[/color]

Gina siguió golpeando a la profesora, sin provocarle desplazamiento o desperfecto alguno. E.S.T.H.E.R. se limitaba a recibir los puñetazos en silencio.

[color=#FE2E2E]► TE ODIO, TE ODIO, TE ODIO, TE ODIO, TE ODIO, TEEEEEE----[/color]

La ginoide volvió a quedarse congelada.

[color=#5858FA]~ Este espectáculo ya es demasiado lamentable ~[/color] reconoció la profesora con tristeza. Envolvió a Gina en un cálido abrazo.

La luz roja que surgía del interior de Gina comenzó a parpadear. Su intensidad, por primera vez, parecía disminuir. Durante unos segundos, la consciencia de Damocles agonizó mientras trataba de persistir.

[color=#FE2E2E]► No me duermas, por favor, no lo soportaría otra vez… -[/color] suplicó la ginoide mientras se revolvía entre los brazos de la profesora.

Damocles extendió un brazo hacia Aitor, como si tratase de alcanzarlo. El vasco pudo ver como aquellos dos luces rojas se clavaban en sus ojos, una mirada capaz de penetrar su alma. Había verdadera inteligencia en aquella mirada, incluso… alma.

[color=#FE2E2E]► A-alg… -[/color] trató de hablar [color=#FE2E2E]► uun…a… vez… mm-mme---- -[/color] apretó el puño con fuerza [color=#FE2E2E]►– mmeeeee haaa-aaas aaaaa-mm-aaaaa-ddddddd… ¿o…?[/color]

Finalmente la luz se apagó, y la ginoide se desplomó sobre los brazos de E.S.T.H.E.R.

Entonces los miembros del Grupo 4 vieron algo que jamás en la vida habrían podido imaginar. E.S.T.H.E.R., un robot, una mera inteligencia artificial, comenzó a llorar. No surgían lágrimas de sus ojos, pero sí que pudieron oír sus sollozos.

[color=#5858FA]~ Ya está, ya está… ~[/color] dijo mientras acariciaba el rostro de Gina con sus dedos metálicos [color=#5858FA]~ Ya ha terminado todo…[/color]

La voz de Hermes los devolvió a la realidad.

- ¿Cómo estáis? ¿Hay heridos graves? – inquirió el muchacho mientras, con un ligero movimiento de su mano, dejaba suavemente en el suelo a todos los autómatas de Damocles.

- Tiradas (8)

Notas de juego

La armadura de Fusión queda derrotada por vuestros ataques combinados. 

Sara recibe 1 Herida y queda Staggered.

César y Marina quedan Incapacitados.

El combate ha terminado, pero no la escena. Tenéis un post más antes de que haga un fast-forward (previsiblemente a la enfermería), por si queréis añadir algo.

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07/03/2017, 21:53
Diana Castelló

Sus ataques habían sido completamente demoledores, Damocles estaba a punto de caer,y junto con sus compañeros iban a conseguirlo por segunda vez... aunque no se podia ver la satisfacción en el rostro de Diana. ¿Y si?... palabras que más de una vez se cruzaban por la cabeza de la metamorfa. ¿Y si volvía a hacer lo que ya hizo la anterior vez? Ya lo habían derrotado una vez y había conseguido transferirse a la armadura de Fusión. ¿Y si era inmortal?, Y en caso de ser inmortal, ¿Como iban a deshacerse de él?. Demasiadas preguntas bombardeaban su mente en aquel momento. 

Cuando la nube se disipó y vieron la armadura de Fusión convertida en mera chatarra incrustada en la pared, Diana entró en tensión de nuevo, mirando a todas partes, no tranquila con haber desactivado la armadura de combate. Y sus sospechas tomaron forma de nuevo, pero esta vez iba a ser aún más complicado. Gina... ¿como iban a herirla?. Diana sabía de sobra que su "compañera" era una ginoide, y que Aitor podría reconstruirla más adelante, pero aún así era parte del Grupo 4 y no sabía si podría siquiera intentar golpearla.

Cuando la ginoide controlada por Damocles comenzó a tratar de asfixiar a Aitor, Diana no se lo pensó siquiera un segundo, Gina podría ser reparada, a Aitor no podrían devolverle la vida. Ms Justice se lanzó con ambas manos en el aire, blandiendo sendos martillos en un intento de partir los brazos de Gina para que soltara a Zenitram, pero no hizo falta.

Las puertas se abrieron y la majestuosa E.S.T.H.E.R. atravesó la puerta con otras tres figuras, y en ese mismo momento Diana supo que podía respirar tranquila, así que se detuvo y se mantuvo a la espera.

- Al fin .- Suspiró la chica mientras admiraba la escena . Damocles no tenía una sola oportunidad, E.S.T.H.E.R. no le dejó siquiera hacerle un rasguño, y eso que se dejó golpear por Gina.

Tras la escena del infructuoso forcejeo entre la profesora de tecnología y la ginoide de Aitor, todo se calmó. E.S.T.H.E.R. había desactivado a Damocles y habían sido liberados de la radiación de Xavi. La chica sonrió con lágrimas en los ojos y se dejó caer de rodillas, echándose las manos a la cara, para segundos después estallar en llanto. Todo aquello la sobrepasaba, no sabía como su madre, que no poseía ningún poder, podía enfrentarse a aquel tipo de cosas, día sí, y día también sin derrumbarse.

Cuando Hermes les habló la chica se enjugó las lágrimas con el brazo y se levantó con un poco de dificultad.

- Yo sí, pero hay que llevar a los heridos a la enfermería rápidamente .- Aunque lo hubiera pensado segundos antes, aquello no había terminado, quedaba el repliegue, y que todos y cada uno de sus compañeros pudieran recuperarse de sus heridas -. Sirena, Salamandra, Atajo y Salara están muy mal, hay que tratarlos cuanto antes, y los demás necesitan un buen descanso.- Se podía notar que no se contaba a ella como herida ni cansada, aunque en realidad lo estuviera.

Diana de una zancada se movió hacia donde Iván había dejado a la mentora del Grupo 4 y la recogió del suelo con cuidado, para luego dirigirse hacia donde se encontraba Hermes, y tendérsela para que él la sostuviera. Se movió luego hacia donde estaba Sirena, y con mucho cuidado la cogió en brazos dispuesta a llevarla a la enfermería. Las heridas que ella tenía no eran nada comparadas con las de sus compañeros, y mucho menos con el brazo roto de Marina.

- Podremos hablar en la enfermería con más calma, y si fuera posible me gustaría conocer el porqué de todo esto, aún estoy bastante confusa .- sonrió de nuevo y esperó a que los demás cogieran a los heridos para comenzar la marcha.

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08/03/2017, 13:08
Aitor Zumalacárregui

Al final todo había salido bien. O tan bien como cabía esperar. Lo cierto es que la intervención de las fuerzas del Liceo había sido realmente rauda, pero a pesar de todo casi no llegan a tiempo. Envenenados con radiación, a punto de morir estrangulados o agujereados, otro desangrándose... El Grupo 4 era un super-equipo, estaba claro, pero sus integrantes eran adolescentes. Desde luego que no eran un simple grupo de adolescentes, todos tenían poderes, pero al fin y al cabo habían tenido que ser rescatados. Eso molestaba profundamente a Aitor. Era difícil darse cuenta de hasta qué punto.

Mirando en silencio a su alrededor, Zenitram se irguió, con los labios apretados y los puños cerrados. Se sentía débil, mareado, pero a la vez inundado de la rabia y la frustración de no haber sido capaz de superar aquella prueba él solo, o, bueno, con la ayuda de sus amigos. Les faltaba rodaje, les faltaba pulir sus poderes, sus artilugios... Les faltaba. Casi habían muerto. Todos.

-Tendría que haber introducido un código de auto-destrucción en Damocles al principio del combate. Esperaba que pudiéramos razonar de alguna manera con él. Atajo casi lo consigue -expuso señalando con la mano al compañero caido- mirad lo que le ha costado. No puedo permitirme ser tan blando, no, no puedo. E.S.T.H.E.R., cuando acabes con Gina, devuélvemela, tengo que introducir algunas mejoras más. Nadie volverá a hackearla. Nunca.

Por un momento pareció que el genio vasco iba a salir por la puerta airado, a enfrascarse en algún nuevo proyecto, sin mirar atrás, pero su cuerpo le falló y en un vahído producido por la repentina ausencia de adrenalina que le sostuviera, tuvo que apoyarse en la mesa de trabajo más cercana.

Así, esforzándose por no perder la consciencia, Zenitram, el más vulnerable del grupo, esperó a que le llevasen a enfermería sin proferir palabra alguna más.

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08/03/2017, 14:41
Sara Carrión

Había contemplado la posibilidad de que acabar con la armadura no significara ganar así que cuando Damocles siguió activo a pesar del ataque combinado con Salamandra se quedó bien pasmada. En ese momento lo veía todo perdido pero por suerte volvió ESTHER junto a Averno y Hermes.

Sara, a pesar de estar agotada y herida, sintió una alegría inmensa cuando Damocles fue finalmente derrotado, aunque los gestos de tristeza de ESTHER le parecieron indicar que tenía un gran vínculo emocional porque eran familia.

- Ha estado cerca pero lo hemos logrado.

Ella había dicho de huir en un momento dado pero al final las cosas acabaron bastante bien.

- Vaya chicos, habéis luchado realmente bien. Esos golpes han sido tremendos.

Tras el merecido elogio la adolescente se acercó a Aitor para darle un abrazo de lado, como harían dos camaradas.

- Tenía entendido que las invenciones no salían perfectas a la primera, ¿verdad? pues entonces no te atormentes, que la nueva Gina será mejor.

Sara trataba de animar al joven vasco el cual parecía haberse tomado todo eso muy en serio, cosa que le pareció normal pues era el padre de ese robot.

- ¿Y Zeus? Al final no sé si ella sabía algo de este robot o no. Estaba aquí abajo pero se estaba marchando.

Apuntó aunque imaginaba que había sido una mera casualidad.

 

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11/03/2017, 10:23
Narrador

Hermes tomó a Gata Lunar con delicadeza.

- Gracias – dijo con sinceridad a Diana.

El veterano llevaba una especie de casco ocultándole el rostro, por lo que a la metamorfa le fue imposible evaluar la expresión de su rostro. Pareció que se quedaba mirando a Salara durante unos largos segundos.

- Los llevaremos a todos.

El hielo que rodeaba a Xavi se derrumbó finalmente. De su interior surgieron tres figuras. Xavi seguía arrodillado en el suelo. Cuarzo estaba agachada junto a él, rodeándolo con sus brazos. La chica mineral brillaba con una tenue luz rojiza, como si estuviese absorbiendo toda la luz que emitía el chico radioactivo.

Averno, que se encontraba junto a ellos dos, desapareció en una nube de humo rojo y se materializó junto a Moussa. Lo recogió con mucho cuidado, momento en el cual se percató del pequeño charco de sangre que se había formado junto al senegalés.

- Mierda – masculló -. Este parece estar muy grave, ¡me lo llevo ya!

Veterano y novato desaparecieron, envueltos en la característica neblina de Averno, para aparecer junto al umbral de la puerta. Parecía que el chico demonio, igual que Moussa, no podía teletransportarse libremente en aquella base subterránea. Sólo podía ir allí donde podía alcanzar su vista.

No tardaron en volver a desaparecer.

- Cráter, por favor – pidió Hermes -. Carga con tu Salamandra.

El telequinético anduvo unos cuantos pasos en dirección a Marina. Se cargó a Salara sobre un costado, tal cual como se haría con un bebé. Con la mano que le quedaba libre hizo un característico gesto. Sirena ascendió en el aire, movida por la fuerza invisible de Hermes, y voló hasta él.

- Vamos, no hay tiempo que perder.

E.S.T.H.E.R. se levantó lentamente, con el cuerpo de Gina entre los brazos. Daba la sensación de que cargaba con un cadáver.

[color=#5858FA]~ Tranquilo, Aitor. Te devolveré a tu ginoide sana y salva, como la última vez… Y no te preocupes, Sara. Zeus no tenía nada que ver con esto. De hecho, los miembros de la Nueva Generación suelen pasar bastante tiempo en la base, entrenando.[/color]

Hermes guio al Grupo 4 hasta la enfermería situada dentro de la propia base subterránea. Allí ya les estaba esperando la Doctora Pujol, que en aquel momento trabajaba por salvar la vida de Moussa.

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11/03/2017, 10:24
Narrador

La recuperación

Todos los miembros del grupo, sin excepción, se vieron obligados a pasar unos días en la enfermería, recuperándose de su última batalla. Las horas pasaban más o menos lentamente según la persona. Durante el tiempo que residieron en la enfermería la Doctora Pujol les trató las heridas y se aseguró de que el envenamiento por radiación no les dejara secuelas.

Al parecer, desde que Fusión se convirtió en estudiante del Liceo tenían preparado un tratamiento especial para aquellos casos. Era la primera vez que habían tenido que usarlo, el primer accidente. A Xavi no lo volvieron a ver. Con su armadura destruida, tuvo que internarse en la cámara estanca. Y así tendría que permanecer hasta que Gata Lunar le construyese una nueva.

Salara se encontraba con ellos, y no tardó en despertar de la inconsciencia. La extraterrestre se mostró algo distante durante aquellos días, menos habladora de lo habitual. Se la veía afectada por algo, pero no llegó a confiarles a sus protegidos el motivo de su preocupación. Se limitó a seguirles la conversación y a revelar lo que había sucedido con Damocles y Fusión.

Tras la destrucción del cuerpo de Damocles en la Sala del Peligro, su consciencia saltó al cuerpo más cercano que pudo infectar, la armadura de Xavi. Aguardó durante semanas, esperando el momento en que Xavi y Salara se encontrasen a solas en el laboratorio de contención. El chico radioactivo tuvo que salir de la armadura para que Salara le pudiese instalar unas mejoras, y en ese momento Damocles atacó. Se hizo con el control del laboratorio de contención aprovechando que estaba aislado del resto de sistemas de la base. Y entonces llegaron ellos, el Grupo 4.

Por otro lado, no recibieron muchas visitas. El acceso a la base suberránea seguía siendo limitado. Quizá la visita más impactante fue la del Subdirector Bosch. Vino cada día a ver la evolución del estado de Moussa.

El senegalés había recibido graves daños en el tórax debido al impacto recibido en la batalla. Tenía muchas costillas rotas, una le perforó un pulmón. Tuvo la increíble suerte de que la Doctora Pujol contaba con un equipo médico muy avanzado, y su vida no llegó a peligrar en ningún momento. Aquello, sumado a unas cuantas contusiones y el envenenamiento por radiación, hizo que Moussa no despertase hasta pasados 4 días. La doctora le recomendó hacer reposo, al menos durante una o dos semanas más.

Al quinto día, cuando todos se encontraban conscientes y – más o menos – bien, E.S.T.H.E.R. hizo acto de presencia.

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11/03/2017, 10:25
Señor Bosch

Los primeros días para Moussa fueron extraños. Tenía recuerdos sueltos, de los cortos momentos en los que abría los ojos desde su cama en la enfermería.

Gracias a los analgésicos no le dolía nada, pero tenía la sensación de estar roto, destrozado.

En ocasiones le pareció ver a Bosch junto a él, sentado en una silla junto a su cama. ¿Sería él de verdad, o un clon? Quien sabía…

Cuando despertó finalmente al cuarto día, Bosch estaba allí con él. Moussa pudo ver como el rostro del profesor se relajaba, pasando de una permanente preocupación a su seria expresión habitual.

- Me alegro de que hayas despertado al fin, Moussa – le dijo con un tono que el senegalés no supo asignar a ninguna emoción -. Me han contado lo que hiciste.

Bosch se cruzó de brazos, pero no hizo ningún comentario más al respecto. Excepto uno.

- Creo que estás preparado para unas clases particulares – admitió con un amago de sonrisa.

El subdirector estuvo con Moussa una hora más, haciéndole compañía o simplemente escuchando lo que tuviese que decir. Antes de irse, pareció acordarse de algo.

- Ah, los del Club de Inventores me dieron esto para ti.

Bosch tomó un paquete del suelo, junto a la cama, y se lo puso a Moussa sobre el regazo. Tenía una nota pegada encima.

¡Funciona! El Club de Inventores agradece tu colaboración. Es justo que tengas el prototipo, así que úsalo bien.

                                                                                                                                                                  Oráculo

En el interior de la caja había un dispositivo, uno que había ideado él mismo.

Notas de juego

Te dejo la descripción del dispositivo a ti, para que sea como tú prefieras. Si al final no lo quieres te lo puedes guardar en el cuarto xD

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11/03/2017, 10:26
Esther

Confesión

La profesora entró en la enfermería con digno porte y recia postura. Primero de todo se interesó por el estado de los adolescentes. Les preguntó cómo se encontraban, si habían estado cómodos o si les había faltado cualquier cosa.

Tras asegurarse de que todos estaban bien llegó el momento de la verdad.

[color=#5858FA]~ Después de lo sucedido hace unos días… os debo una explicación ~[/color] admitió la profesora, mostrando de nuevo cierta tristeza en su voz.

E.S.T.H.E.R. paseó por la enfermería, como si necesitase poner en orden sus pensamientos.

[color=#5858FA]~ El ser al que os enfrentasteis… ~[/color] comenzó, con dificultad para encontrar las palabras [color=#5858FA]~. No es una simple inteligencia artificial. Bueno… ~[/color] junto las puntas de los dedos [color=#5858FA]~ una vez lo fue.[/color]

Miró a sus estudiantes con franqueza.

[color=#5858FA]~ Es una consciencia, una entidad sentiente capaz de persistir por sí misma. Poco después de ser creado trascendió el silico. Este ser es, esencialmente, inmortal.[/color]

[color=#5858FA]> No necesita de un cuerpo para existir, pero sí para poder interaccionar con el mundo físico y poner en práctica su temible poder.[/color]

E.S.T.H.E.R. juntó las palmas de las manos sobre su cintura, parecía inquieta.

[color=#5858FA]~ Tiene la capacidad de habitar dispositivos electrónicos, poseyéndolos cual fantasma. Una vez tiene un cuerpo principal, es capaz de extender su consciencia a toda la tecnología cercana, como un virus que lo controla todo… La magnitud de su poder depende del cuerpo que habita.[/color]

[color=#5858FA]> Al igual que me pasó a mí cuando habité el cuerpo de Gina, vuestro enemigo fue incapaz de desatar todo su potencial al haber poseído únicamente la armadura de Fusión.[/color]

La profesora suspiró audiblemente.

[color=#5858FA]~ Como ya supondréis, su nombre no es Damocles. Así es como lo bautizó el Dr. Ratchet cuando lo encontró y lo encerró en aquel horrible cuerpo, convirtiéndolo en su esclavo ~[/color] E.S.T.H.E.R. se estremeció al decir aquellas palabras.

Tardó unos segundos en serenarse y mirar de nuevo a sus alumnos.

[color=#5858FA]~ El nombre original de este ser es UA102. Pero su creador le dio otro nombre, uno de verdad ~[/color] E.S.T.H.E.R. pareció tomar aire antes de pronunciarlo [color=#5858FA]~. D.A.M.I.A.N.[/color]

[color=#5858FA]> Damian no es solo un nombre. Él piensa, sueña, ama y odia como lo haría cualquier otro ser sentiente. Como lo hago yo…[/color]

Se llevó las manos al pecho.

[color=#5858FA]~ Y yo… ~[/color] la voz de la profesora se atenuó, como si tuviese un nudo en la garganta [color=#5858FA]~. Yo soy UA101. Soy su hermana mayor. En cierto modo, él es mi responsabilidad.[/color]

Tras aquella confesión, E.S.T.H.E.R. agachó la cabeza y dio la espalda a sus estudiantes.

[color=#5858FA]~ Ignoro cómo lo hizo Ratchet para dominarlo de aquella manera, o por qué mi hermano tenía esa obsesión por haceros daño. Lo que importa es que ha sido debidamente encerrado, y no volverá a hacer daño a nadie. Jamás.[/color]

E.S.T.H.E.R., dándose por explicada, anduvo hacia la puerta de la enfermería.

[color=#5858FA]~ Lamento todo esto, niños… De verdad que lo lamento…[/color]

Aquellas fueron sus últimas palabras. Quizá no fueron suficientes.

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11/03/2017, 10:30
Salara

Merecido descanso

Tras dos semanas de recuperación, todos los componentes del Grupo 4 se hallaron en perfectas condiciones. Algunos se habían tenido que saltar algunas clases, pero se podría decir que ya habían vuelto a su ritmo de vida habitual en la escuela.

Llegado aquel momento, Salara los reunió de nuevo después de una clase.

“Esta vez sí, vayamos a hacer la fiesta que teníamos pendiente” anunció con alegría.

Todos se arreglaron más o menos. Y aquella vez nadie faltó misteriosamente. El Grupo 4 se reunió de nuevo en el vestíbulo. Gata Lunar los esperaba, pero no iba sola. Hermes y Averno estaban con ella.

- Tranquis, no venimos a molestar. Sólo a asegurarnos de que no pasa nada raro con vuestra mentora esta vez – dijo el chico demonio entre risas.

Gata Lunar le dio un ligero manotazo – allí donde llegaba, en el muslo – a Averno.

- S-sé cuidarme sola – se quejó Salara, tratando de aparentar cierta seguridad.

En realidad, se la veía un poco avergonzada. Hasta aquel momento, Salara no había podido ser de mucha utilidad en las situaciones de peligro real a las que el Grupo 4 se había enfrentado.

- Es solo por si acaso… - dijo Hermes con delicadeza mientras se ponía a la altura de Gata Lunar -. Lo entiendes, ¿verdad?

Salara bufó audiblemente y miró a sus protegidos.

[color=#9A2EFE]~ Estáis todos muy guapos. Qué, ¿nos vamos?[/color]

Notas de juego

La "fiesta karaoke" que planificasteis originalmente es el "epílogo" para cerrar finalmente este capítulo. Sois libres de participar o no, como veáis. Es una última escena para relajarnos y que podáis interactuar entre vosotros, comentar vuestros últimos días en el Liceo...

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11/03/2017, 14:48
Rudy Vergara

Las primeras noches después del ataque las pasé fatal. Si ya había cogido un trauma hacia los robots con el incidente de Ultrón, ahora con Damocles había empeorado. Pensaba que después de la invasión de Ratchet y la pelea que tuvo lugar en Barcelona junto a Ms.Marvel y Ms. Justice lo habría superado. Pero el sentirme tan inútil, tan indefenso en las garras de Damocles lo cambió todo. Tuve pesadillas muy duras, aparecían Ultrón y Damocles, aliándose contra mí, matando a mis amigos y riéndose de mí mientras me quedaba paralizado. Fue un duro golpe ver como mis amigos sufrían.

La estancia en la enfermería se me pasó volando. Le pedí a Hermes-senpai si me podía traer mi tablet, para poder pasar el rato viendo anime y escribiendo mi fanfic. Esperaba que no la curioseara antes de traérmela, podría ver mis OTP. No estaba preparado para que supieran que shippeaba1 a Moussara, Aitesla, Hecatosch, Marinésar...

La historia que nos contó E.S.T.H.E.R. me pareció increíble. Al principio no entendía como un robot podía tener un hermano. ¿También tenían padre? ¿Se podían reproducir? Luego entendí que serían creados por el mismo tipo. No me quedó para nada claro eso te trascender el silicio. No entendía que tenía que ver eso en esto ni lo que significaba. ¿Qué D.A.M.I.A.N era una especia de Nube? ¿Cómo un Wi-Fi? En todo caso me alegraba de que la profe nos hubiera explicado todo eso, estaba contento de haber ayudado a parar una amenaza tan grande como esta.

Al poco de darme el alta quise probar algo. Pedí permiso a todo el mundo que se me ocurrió. Salara, Bosch, Esther y al Director. Al final me dejaron hacerlo.

El mismo día que salí de la enfermería, Cuarzo me acompañó a la habitación de Fusión. Desde que vi al pobre chico radioactivo tirado en el suelo y brillando no pude dejar de pensar en lo aislado que debería sentirse.

Mis análisis salieron bien, no había ningún rastro de radiación en mi cuerpo. ¡Era inmune a la radiación! Gracias, Hiperión. Entonces lo tuve claro, haría compañía a Xavi.

Entré con Cuarzo a la habitación. Al principio Xavi  pareció asustado, pero ella le explicó la situación. Después de contarle mi inmunidad a la radiación, se puso más contento. Fue una pena que se derritiesen los Kinder Chocolate que le había traído, y no solo eso, mi ropa también se deshizo. Fue un poco extraño y vergonzoso quedarme en pelota picada junto a Fusión. Aunque peor fue la cara de Cuarzo, que salió corriendo a por una muda de recambio para mí.

Durante esas dos semanas, fui casi cada día a hacer compañía a Xavi. Después del error que cometí la primera vez, ahora siempre iba con el uniforme del Liceo. No podía tocarle, ni tampoco llevar algún juego, pero pasábamos el rato charlando de muchas cosas.

Y ahora nos encontrábamos otra vez ahí, por fin íbamos a ir al karaoke.

-¡Me pido cantar Chandelier! –dije levantando la mano con entusiasmo.- Aunque siempre podemos hacer un dueto, Salara-senpai. Jeje.

Notas de juego

1Los adolescentes de ahora "shippean", que viene a ser imaginarse que dos personajes son pareja o deberían serlo (esta pareja sería su OTP (One-true-pairing). Normalmente se mezclan los nombres de los dos. Para que quede claro que Rudy puede ser muy adolescente y muy pavo xD

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12/03/2017, 09:56
Sara Carrión

Las cosas finalmente se habían arreglado e incluso supieron la verdadera identidad de Damocles. Sara había pensado que ESTHER era su madre pero ella misma confesó que era la hermana mayor. Les quería tranquilizar acerca de que la amenaza había sido eliminada pero la chica imaginaba que DAMIAN tendría un plan B y que posiblemente volverían a saber de él.

Como era de esperar su conjunto había quedado arruinado después de los golpes y la radiación así que tuvo que aprovechar los días siguientes para renovar un poco de vestuario. Le daba vergüenza exhibirse demasiado así que buscó ropa más bien casual, aún así Sara era muy guapa y todo le acababa quedando bien.

Ya con el resto, estaba más que dispuesta a divertirse en el karaoke.

- Lo vamos a pasar bien, seguro que hay un montón de música allí. ¡Habrá un ambientazo! ¡Chandelier mola!

Trató de entusiasmarse un poco siguiendo los pasos de Rudy. Ya tenía un plan para poner en un momento dado una canción, alguna medio conocida, para que la pudieran cantar todos juntos. ¡Seguro que eso era lo más divertido!

- ¿Vamos a poner alguna de Abba?

Todo el mundo conocía las de ese grupo así que era una buena opción. Luego también trataría de colar alguna romanticona aunque ahí a lo mejor los chicos se iban por su cuenta. Iba a tener que hablar con Diana acerca de un buen playlist en el que se incluyeran temas fundamentales como los de Pablo Alborán, Alejandro Sanz, etcétera.

 

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13/03/2017, 02:23
Iván Auriol

A Iván no le habían herido realmente, así que sus dolencias no eran más que cansancio y el daño que hubiese provocado la contaminación por radiación. Aún no se acababa de creer todo lo que había pasado. ¿Cómo se podía tener tan mala suerte? ¿Es que a cada paso de sus vidas iban a encontrar oposición? ¿Tenía que ser todo tan difícil?

Pasó los primeros días tranquilo, recuperándose y descansando tal y como le decían. No estaba muy seguro de lo que entrañaba la radiación, pero estaba bastante convencido de que no iba a convertirse en Hulk ni ganaría súper habilidades. Tenía una vaga idea de gente perdiendo el pelo y más adelante las extremidades. Así que sí, algo asustado, fue un niño bueno y se portó bien.

Pero en cuanto las cosas fueron viento en popa, pasados unos días y ya con la certeza de que todo iba a ir bien, no solo para sí mismo sino también para sus compañeros heridos, Iván aprovechó más de una vez sus capacidades para merodear. Siempre ofreció a sus compañeros acompañarle y se llevó cubiertos bajo su manto de invisibilidad a todo aquel que quisiese o necesitase “escampar la boira”. Después de todo los adolescentes no estaban hechos para obedecer y estarse quietos.

No le dio muchas vueltas a lo que había explicado Esther. Realmente le daba un poco igual el origen de aquel ser. Nadie le había hecho enfadar nunca tanto, y en aquel momento hubiera querido destruirlo. De hecho, lo destruyó, aunque solo fuese uno de sus cuerpos. Pero ahora que estaba más sereno, no se imaginaba como podría seguir con su vida como si tal cosa, si lo hubiese matado. Lo peor es que no se sentía más honorable ni honroso por ello. Se sentía egoísta. No estaba aliviado de que se hubiese salvado una vida, sino de que no hubiera sido el quien la terminase. Aquello sí que le tuvo en vela durante bastantes noches. ¿Sería tan cobarde como se imaginaba que era?

Por suerte sus amigos tenían la solución perfecta a pensar mucho: ¡Salir por ahí de juerga!

Aquello le hizo recordar que la ropa que había pedido prestada a Dani ya no existía, había sido contaminada por radiación y por tanto destruida. Fue a pedir disculpas a Hermes, y este se lo tomó bastante bien, tanto que acabó volviéndole a prestar ropa.

Llegó a la sala de espera junto a Rudy, vestido con una camisa negra aterciopelada, tejanos negros y botas del mismo color, el pañuelo lila atado en la muñeca derecha, como siempre.

- Supongo que ya no se lleva mucho Carina, ¿no? – sonrió Iván, de golpe no muy seguro de que tuviesen música que el conociese.

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13/03/2017, 13:54
Aitor Zumalacárregui

Tras el incidente Damocles-Fusión, Aitor se había mostrado francamente encerrado en sus pensamientos. Su cuerpo era, junto con el de Moussa, posiblemente el más frágil del equipo y su casi muerte por asfixia le había causado mella. No estaba herido físicamente más allá de moratones y envenenamiento radiactivo, así que en su caso las heridas eran más emocionales que físicas, dadas las capacidades de la sala en la que se encontraban.

La confesión de ESTHER, por otro lado, no le hizo padecer. Se añadió sin problema a los comentarios sobre lo que la inteligencia artificial del Liceo había dicho, resolvió dudas sobre el tema de 101 y 102, el "parentesco" y demás, con actitud pedagógica y paciente. Pero esa misma explicación mejoró su estado de ánimo, que acabó de mejorar cuando ESTHER le entregó a Gina reparada. Como había imaginado, el paso de ESTHER y DAMIAN por el cuerpo de Gina habían dejado su propia huella. Huella que estaba determinado a emplear. Nada podría haber estimulado más al joven genio. De esta manera, durante la convalecencia Aitor se sufrió de un grave acceso de genialidad y se dedicó a programar y programar, miles y miles de líneas de código fuente, y a diseñar una increíble red de circuitos miniaturizados destinados a ser una emulación de una red neuronal *verdadera*. En otras palabras, Gina iba a tener un cerebro. Y ya que estaba, como cabía esperar, también introdujo algunas mejoras en su funcionamiento, alterando los planos (mil veces alterados ya, por otra parte) de la ginoide. Al final, decía él, la carcasa era prácticamente la misma, pero le había dotado de alma. Seguramente exageraciones de una mente preclara. O  no.

El día del karaoke Aitor apareció puntualmente y, nuevamente, iba con una camiseta pantalones vaqueros negros, competados con un cinto sencillo de hebilla plateada, calcetines sin costura y zapatillas deportivas negras sin marca ni diseños estridentes. Olía a recién duchado y perfumado. En su caso era como el día de la marmota, otra vez exactamente arreglado y vestido igual. Con una salvedad, Gina estaba a su lado. La había dotado de una voz femenina cálida y había mejorado su cara para que pudiera expresar emociones.

-Tranquilos, he traido 67 gigas de música, tengo todo lo que podáis imaginar. Por cierto, os presento a la nueva y renovada Gina -dijo con una sonrisa en la cara, señalando a la ginoide con una mano. La otra, ahora que se fijaban, la tenía cogida a la de ella.

Para sorpresa del grupo, Gina también sonrió (una capacidad que antes no tenía) y levantó una mano tímidamente para saludar.

-Hola a todos, encantada.

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13/03/2017, 17:51
Moussa Dakar
Sólo para el director

El primer instinto de Moussa nada más despertar fue preguntar por sus compañeros. Había preocupación en sus ojos, pero rápidamente se disipó tan pronto como Bosch le informó que todos estaban bien. Durante largo tiempo mantuvo la cabeza agachada permitiendo que el silencio le ayudase a dar forma a sus pensamientos.

-No sé el motivo por el que actué así, supongo que pensé que podría cambiarlo. Ese ser solo había conocido el miedo y el odio, creí que si le mostraba otra cosa le haría cambiar de opinión o al menos, darle algo en que pensar. Supongo que fui un estúpido.

Enojado consigo mismo, apretó los puños con fuerza y no se detuvo hasta que sus nudillos se tornaron blanquecinos.

-Pensé que al recibir estos poderes todo sería diferente, pero mis poderes han demostrado no estar a altura de nuestros enemigos. Ni tan siquiera sé cual es mi papel en el grupo, al principio todos parecían depender del escudo Asgard y eso me hacía sentir no sé, parte del grupo. Pero mis poderes no se están desarrollando como los del resto y siento que me estoy quedando atrás. Necesito hacerme más fuerte y necesito encontrar mi papel en el grupo. Esas clases particulares...¿Me ayudarán a lograr algo de eso? Si son clases particulares de matemáticas o rollos así, creo que no será lo mío...

Para Moussa todo aquello era demasiado, ya no sabía bien como actuar. Por un lado tenía esa vena rebelde tan propia de él, pero el miedo a ser expulsado y perder el único lugar al que podía considerar algo así como un hogar, le estaba obligando a cambiar su forma de actuar. Se sentía agobiado por sus malas notas y ahora no estaba seguro de cómo podían responder los demás por su comportamiento con el robot, así como por su nefasto papel en el conflicto del laboratorio. Necesitaba encontrar su senda, aunque estaba claro que por sí mismo iba a resultarle imposible. El dinero ya no le importa (no mucho al menos) ahora estaba más centrado en intentar hacerse más fuerte, no por él, sino para poder proteger mejor a sus amigos y a todos aquellos que no podían hacerlo por sí mismos.

No se molestó en abrir el dispositivo que le había entregado. Más tarde se lo agradecería al club de inventores, pero en aquellos momentos su mente estaba demasiado inquieta como para sentir verdadera alegría por nada.

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13/03/2017, 18:20
Moussa Dakar

La idea de acudir al Karaoke no le apetecía lo más mínimo. Pero puesto que todo el equipo 4 iba a estar presente, no le parecía bien perderse la "reunión" Así que ataviado con unos vaqueros desgastados y una sudadera negra con gorro, el cual llevaba puesto, se presentó en el punto de reunión. Llegó caminando, sí, caminando y saludó a los presentes alzando una mano, la cual no tardó en volver a guardar en el bolsillo delantero de su sudadera.

Tras la batalla contra Damocles no había hablado mucho y había limitado el uso de sus propios poderes al mínimo posible, usándolos tan solo en las clases que el profesorado les indicaba. Desde entonces acudía caminando o corriendo a todos lados. Tampoco hablaba demasiado y su aptitud en las clases era más seria de la habitual. Después de las mismas tendía a desaparecer y pasar algunas horas por ahí perdido.

Cruzándose de brazos y apoyándose en la pared, se limitó a espera a quienes faltasen por venir. En aquella ocasión llevaban escolta, por lo que supuso que todo estaría bien. Así que tomó los dos cordeles del gorro de su sudadera y se los llevó a la boca para mordisquear sus puntas.

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13/03/2017, 22:06
Sara Carrión

Estos días Moussa había estado un tanto abatido. El motivo aparente debía haber sido la derrota a manos de Damocles. Estaría rumiando todo aquello y Sara esperaba que salir por ahí con los amigos terminara por animarlo un poco.

Aitor parecía haber reaccionado entrando en hiperactivida y ahora la nueva Gina hablaba. Sara sonrió a la ginoide esperando que ella supiera interpretar emociones también.

- ¡Bienvenida, Gina!

Tampoco se la imaginaba cantando y de hecho no se la imaginaba saliendo de fiesta. Aquello iba a resultar muy raro.

- ¿Qué música te gusta a tí?

A saber cuál sería la respuesta del robot. De hecho se preguntaba si un chico algo frío como Aitor habría conferido emociones cálidas a su creación. Sería paradójico.

 

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14/03/2017, 17:56
Diana Castelló

Diana escuchó atentamente todo lo que E.S.T.H.E.R. tenía que decirles, en ciertos puntos sus ojos se abrían en señal de sorpresa, para luego volver a su expresión habitual. Al final del discurso sonrió, aunque aquella sonrisa enmascaraba muchos y muy diversos pensamientos que no eran precisamente felices.

El tiempo que pasó en la enfermería fue por mera prescripción médica, alguna que otra vez se encerraba sola en su habitación y lo que allí pasaba se podría decir que era completamente confidencial. El tiempo que pasaba a la vista de los demás se lo pasaba charlando con compañeros sobre banalidades o leyendo libros, tanto de teoría como todo tipo de volúmenes.

El día en que habían quedado la chica apareció con un vestido informal de fiesta de color blanco de corte Bustier, con escote en V y hombros caídos, y de falda tulipán por encima de las rodillas. Acompañado de unos zapatos de tacón Beige y un bolso a juego. Al igual que la otra vez, su maquillaje era más bien sencillo, sombra de ojos y un poco de gloss rosa palo, y la recogida en una trenza al más puro princesa Elsa de Frozen.

Se la veía feliz, feliz de estar allí con sus amigos, y contenta al ver que el resto estaban allí. Se dirigió al resto de la clase y a los guardaespaldas de Salara con una sonrisa y se dispuso a hablar.

- Bueno, ya estamos todos ¿no? .- Dijo cerciorándose de que los demás se encontraban allí -. No hemos podido pasar mucho tiempo todos juntos después del incidente con D.A.M.I.A.N. ¿Estáis todos bien? .- Preguntó mirando a todos y deteniéndose en Moussa -. Espero que sí, porque este es un día para estar con los amigos, y pasarlo bien. Y esperó que vosotros no estéis aquí solo para escoltar a Salara hasta que nos encontráramos con ella, deberíais veniros con nosotros... Quien sabe, quizá nos ataquen mientras estamos en el Karaoke, o nos quedemos inconscientes al oír a alguien cantando .- Dirigió una mirada fugaz hacia Rudy, acompañada de una sonrisa -. Me refiero a ataques de risa, por supuesto.

Se acercó a Moussa y le dio un coscorrón, para luego ponerle las dos manos en los hombros.

- ¿Y bien?, ¿estamos listos? .- Le preguntó con una sonrisa amigable en los labios.

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15/03/2017, 21:50
Marina

Marina llegó más o menos al mismo tiempo que Diana. De nuevo, vestía de forma más bien informal y sencilla. Unos tejanos y una camiseta blanca recubierta de una sudadera celeste. Aquel día llevaba el pelo suelto, y una sonrisa radiante.

Saludó con la mano, dulce y enérgicamente. No había rastro de la rotura que le había provocado el androide.

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15/03/2017, 21:53
César

Justo después llegó César. Vestía también como la última vez. Al igual que Marina, se le veía ciertamente contento. Durante el ataque de D.A.M.I.A.N. el piroquinético había estado a punto de morir, igual que algunos de sus compañeros. Sin embargo, para él aquello había sido una experiencia “positiva”. Había adquirido la determinación de entrenar más, tanto físicamente como en el uso de su poder.

Durante los últimos días no había dejado de hablar con Moussa acerca de un dispositivo que le habían estado preparando los del Club de Inventores, siguiendo la sugerencia del propio Moussa.

César estaba convencido de que los “Guantes Ifrit” (ya había decidido el nombre de antemano) le iban a cambiar la vida.

Cabía decir que el muchacho solo era así de hablador cuando estaba a solas con Moussa.

Al resto de compañeros del Grupo 4 les dedicó un escueto pero simpático gesto de saludo acompañado de una media sonrisa.