Partida Rol por web

Al hacerle el comentario Aura, Nurdalgen al principio no capto con claridad qué quería decir pues la mente del mithra era un poco lenta, así que quedó callado y la miró como extrañado y sin llegar a comprender del todo que era un chiste respondió mirando de un lado a otro y en voz baja ¿crees que hay enemigos cerca? maldición! después se sentó y comió con avidez pero mirando de vez en cuando a su alrededor, después saludó sin mucho afán a todos y cuando Blarr dijo ¿infinito? Nurdalgen se quedó pensativo ¿será una clave? los mithra de su clan son los más sabios, lo mismo quería decirme algo así que mientras comía le pregunto a Blarr ¿infinito? No comprendía como la elfa a pesar de advertirle seguía hablando como si nada hubiera pasado. Cuando terminó de comer miró al infinito por si veía alguna señal de lo que había dicho Blarr y volvió a susurrar infinito

Enarcó una ceja ante la actitud de ambos mithra. Me levantó y digo:

-La biblioteca esta vedada y llevo mucho tiempo quieto así que voy a calentar un poco mis músculos además no quiero ser aguafiestas pero un estadio de blitzball no creo que este  abierto para que cuando quieran los alumnos jugar un poco debido a la alta complejidad del sistema para llenar y contener el agua. Por lo que yo me iré a dar una vuelta por el patio -estas palabras sonaron mas frías y distantes que todo lo que había hablado hasta ahora desde la presentación y el momento de desafió en el autobús- Si alguien quiere acompañarme esta en su derecho.

"Que difícil se me hace tratar con mas gente. Si no fuera por que mi padre insistió tanto en que me llevara bien con la gente de mi grupo ya que de ellos dependerá vida en varias ocasiones ni siquiera les habría dicho una palabra en ningún momento."

Y sin esperar respuesta me encamine hacía fuera.

Bueno yo estoy aquí para ser mejor en el oficio de Mago blanco y poder atender a todos dentro y fuera de los combates en mi tribu – Mientras te soltaba y se apartaba un poco algo ruborizada – me gusta ayudar a mi gente y mis ambiciones como Seed no son extensas – saca un cepillo para el cabello y comienza a acicalarse un poco.

Se inclina un poco la Viera de los brazaletes – me llamo Alisa Tereter yo aún no estoy muy centrada en cuáles son mis poderes o que posibilidades tengo solo no quiero que mi prima me supere y un seleccionador de la tribu dijo que sería una excelente mentalista – al instante da un chasquido con sus dedos y un chispazo purpura salió de estos.

Se acerca un poco la ultima chica – Marion y ese pequeño tras de ti Turo – Ves que tras de ti hay una criatura del tamaño de un pequeño perro que asemeja una lagartija azul con alas olfateándote – si lo se huele a realeza – dice la chica a la criaturita luego de que esta hace un especie de gruñido – soy protectora de la tribu y me encargaron continuar mi entrenamiento aquí mientras ellas estén aquí de echo soy mayor que ellas pero hay un acuerdo con la realeza – luego ves como ella cambia su actitud te giña un ojo – pero eso no es tranca me gusta los jóvenes asi que no te frenes por eso – y recibe un codazo leve en el brazo de la primera chica – disculpa no di mi nombre soy Lissa Anamicot un placer su majestad -  con una sonrisa algo coqueta.

Nadie más tiene algo de hambre porque no seguimos al comedor su majestad – invita la chica a la vez que la criaturita sube y se acuesta sobre sus hombros y te mira con ojos cariñosos 

-infinito...

Seguir todas las conversaciones era complicado. Muy, muy complicado. Seguí mirando al infinito mientras comia, ya no disfrutaba pues trataba de entender algo. Las palabras de Renall llegaron milagrosamente entre el torrente. 

¡Era su momento de salir de ahi! No es que fuera asocial, pero habia demasiada gente a la que prestar atencion. Podria hacer una broma, pero el viejo le dijo que le dejara eso a la gente con seso, asi que si limitó a preguntar. 

-¿Entrenar? - mientras sacudia los hombros y la espada se movia. Miro a Nurdalgen y le hago un gesto con la cabeza. Tomo mi bandeja, y la dejo en la zona designada antes de ponerme a buscar el patio. Un seed debe respetar las normas, incluso las de educación. 

No tenia idea de las demas instalaciones. Ni a donde se habian llevado su armadura ¿a que hora dijo la señora que debiamos hacer qué? Aun así, sintió que calentar un rato era lo que debia hacer. Siempre lo ayudaba a despejarse, el trasbordo, la academia, compañeros. Era mucha informacion para un dia. 

Luego que Renal dijo estas palabras y dar la vuelta, sin mirar a tiempo choca con la bandeja de comida de un Ronso con cara de pocos amigos con uniforme y un estandarte Negro y rojo con una cabra blanca en el brazo derecho, que era seguido por 2 ronsos con los mismos uniformes – Que carajo crees que eres insignificante humano – y te mira furioso al ver como algo parecido a una sopa de tomates escurría de su uniforme – Acaso no tienes ojos pedazo de… - y hace un rugido como el de un león que dejo en silencio las múltiples conversaciones del gran comedor.

Arroja la bandeja a un lado furioso y te agarra con una de sus poderosas garras por el cuello de la camisa para levantarte sin darte oportunidad a nada y hacer con la otra un puño más grande que tu cabeza……

Esa situación aterraría a cualquier chaval de 14 años pero menos mal que yo no era un cualquiera. Mire la mano con la que me levantaba, luego la del puño y por último a el pero lo hice con una mirrada fría y vacía.

-Suéltame... de inmediato -en mi expresión no se mostraba ni un ápice de ningún sentimiento lo cual era inquietante dada la situación en la que estaba- Tengo mejores cosas que hacer y estoy seguro de que tu no queras desperdiciar tu vida en esto.

Por suerte había sido tan iluso de no impedirme el movimiento. Metí mi mano izquierda bajo mi capa, tras un ruido metálico y un destello de luz reflejada en un acero impoluto el ronso tenía mi espada al lado de su cuello.

-¿Me pregunto que sera mas rápido tu puñetazo o mi corte? La diferencia es que yo puedo sobrevivir a un puñetazo por fuerte que sea un ronso pero tu...

No dije nada mas simplemente sonreí con malicia.

Elisse volvía de dejar su bandeja cuando vio la escena con su compañero y el Ronso, aquello no le gustó nada y se acerca con una gran zancada mientras dice bastante fuerte para que todos se enteren:

¡Mirad como el gran Ronso intenta abusar de un recién llegado que solo se ha chocado con el!

Mientras se acercaba a él caminando quedándose cerca del Ronso y diciéndole con un tono de voz tranquilo y sin dejar de mirarle a los ojos:

¿Que… te sientes muy malote cogiendo a un novato así? Y yo que pensaba que erais una raza de nobles guerreros… que patético

Decía con una media sonrisa en la cara y sin dejar de mirar desafiantemente al Ronso. Había una cosa que odiaba a muerte y era las injusticias y en especial cuando alguien abusaba de otro y eso era justo lo que estaba pasando en esos momentos.

En eso sientes un leve estremecimiento, como una vibración que emana del sujeto y por un segundo ves como un resplandor transparente envuelve al sujeto y los 2 Ronsos detrás se cruzan los brazos y se ríen de ti. Hay es cuando notas que el tipo que crees desarmado tiene puestos unos guantes color rojizo con nudillos de metal – Inténtalo mocoso -  y aprieta su cuello contra tu daga que siquiera alcanza a tocarlo, con una mirada algo perturbadora – que espera te crees demasiado fuerte.

Otro de los ronsos se interpone entre Elisse y el suceso – calla mocosa aquí el que esta perdiendo más son ustedes – en eso se acerca un joven Albet con unos lentes de cristal verdoso intenso, el cabello bien peinado hacia la derecha y con un control en la mano, uniformado y con un estandarte con una torre – No te preocupes niña – Sonríe cortésmente mientras mira a Elisse – y tu Tover quieres que barra contigo el suelo una ves mas en el simulador, o temerás un nuevo reto – Sonríe maliciosamente mientras lo reta – baja al chico o tendré que retarte nuevamente – aprieta un botón y se escucha un sonido sorde como de un motor por las ventanales. Al tiempo que se escucha el escándalo de ánimo de toda la multitud de los estudiantes uniformados y los profesores se asoman al balcón a ver lo que sucede - ¡RETO! ¡RETO! ¡RETO! ¡RETO! ¡RETO! – grita la multitud en eso te suelta a un lado y se para frente al pequeño Albet.

¡Acaso tienes miedo! – grita el chiquitín – bueno hagamos una cosa, tu y tu triste equipo contra mi y mi hermano – mientras señala a los 3 Ronsos y mira a la multitud – O te da miedo – gira la mirada rápidamente y se quita los lentes dejando ver sus purpuras y peculiares ojos.

Los 2 amigos del Ronso miran nerviosos mientras el del entro casi pareciera que le saliera fuego por sus ojos

Kain acabando por fin su comida (no se sabe donde entró aquel masivo puzle) y excepto el tentáculo molbol todo le sentó de lujo), se acercó al Ronso con una servilleta y con voz tranquila comenzó a limpiar un poco el estropicio, mirando a los Ronso y a Renall. No es que impusieran tanto, pero eran enormes, con voz relajada comenzó a hablar - sería una lástima si la mancha no sale por no limpiarlo mientras puedes, puedo ayudarte si tu quieres, más las peleas fuera de la zona de entrenamiento están prohibidas, esa espada y esa nudillera sobran deberían ser cohibidas, también las malas maneras, son feas y lerdas, si gozáis de un reto pedirlo, pocos huiremos, puesto que superarnos es nuestro deseo y mejorar nuestro hilo, pero con educación si no queréis que de un buen grito advirtiendo a los seeds de los pisos superiores, más sin tener nosotros emblema, deberíamos imitar a nuestros predecesores, y eso me hace pensar - puso su pistola indicando a la sien del Ronso - que utilizar mi arma en lugar erroneo es correcto, podemos buscar ser correctos o acabar en el hospital como inútiles no cuerdos, pensad lo que deseáis pues para mi será algo nuevo, no me importaría hacerlo y mostrar que puedo jugar con o sin cerebro. Templada y serena, habló con cierta ternura, que era después de todo lo adecuado?

Con incredulidad de lo que estaba pasando miro todo el mundo a Kain, escucharon lo que dijo muchos rieron y otros ni entendían - ¡¡¡¡¡JAJAJAJAJAJAJAAJA!!!!! Qué lindo habla esta niña – exclamo el ronso a todo pulmón – ya veo que ni Estandarte de alguna casa tienen aún – mira hacia el último piso hace una reverencia a una figura entre la oscuridad – ya veo son nuevos ni siquiera vale la pena – acerca un poco la cara a la de Kain y susurra – Y tu pequeña me gustan así como tu muy inteligentes – se levanta y aprovechando la distracción generada – bueno aquí no pasó nada, son unos bebes mas nada ya saben pequeños tened más cuidado – dio un chasquido con los dedos y el resplandor que lo envolvía se fue, se da la vuelta y se retira caminando como si nada hubiera pasado junto con sus 2 compañeros.

El Albet aun en la pose que había quedado antes de la intervención de Kain con la otra mano se golpeó la cara – que carajo – se escuchó apenas si estabas algo cerca – como se zafo otra vez de esta – con cara algo incrédula y un poco sorprendido por lo que sucedió.

- Ante los sucesos tan rápidos no tuve el tiempo de hacer algo, pero después de que los Ronso se fueran, me acerco al Albet y le digo. - Muchas gracias por tu ayuda, esto hubiera terminado muy mal si no hubieras intervenido, Soy Aokishi Koshuto. - Extiendo mi mano en señal de saludo.

         - Que bueno que ya no fue necesario comenzar nuestro curso aquí con una pelea ... pero me parece que sucederá tarde o temprano con tipos como esos amigos, tal vez sería bueno no andar a solas por aquí de momento cuando aun ni comenzamos ... Renall, si te parece también te acompaño al jardín, alguien mas nos acompaña? -    Dijo la Aven extendiendo sus alas coloridas para volar a unos metros de sus nuevos amigos 

El intento de pelea me agarró cuando estaba dejando la bandeja en su lugar.

¿Estos bravucones piensan ser seeds? 

Me muevo lo más rápido que puedo. Ese "Ronso" estaba metiendose con uno de mis nuevos compañeros, debia ayudar. Aunque no fuí lo suficientemente rapido, el conflicto acabó un poco antes de que llegara. No sabia si alegrarme, al fin y al cabo queria calentar.

¿Que significarian los emblemas? 

Me enderezo y sigo a la Aven. Queria ir al jardín, queria despejarme. Giro la cabeza y busco a Nurdalgen con la vista a ver si me seguia. 

- Yo también los acompaño, al jardín, al final, si parece ser la mejor opción, además estoy de acuerdo con Isabeau, lo mejor será andar acompañados, no sabemos cuántos más de esos busca pleitos hay rondando por aquí, pero lo mejor será que evitemos cualquier conflicto físico, recuerden que no lo tenemos permitido. - digo mientras repaso las reglas en mi portátil. - No queremos terminar siendo expulsados antes de empezar siquiera. - después de dejar mi bandeja en su lugar me encaminó al jardin.

Tras haber terminado mi plato con mayor calma que los demás, me levanté y fui hacia el buffet, donde cogí una nuez kupó, por probarlas, y una fruta de aspecto extraño de una fuente. Era una de las frutas del bosque profundo, por eso antes no se solían ver tanto.

Cuando volvía para la mesa, vi como Renall tiraba la bandeja de otro aspirante a Seed de a saber qué curso, así que me apresuro hasta la mesa y dejo la bandeja en mi posición, sacando el espadón aún envainado de debajo de la silla con un tirón del pie y luego alzándolo con una mano. Renall sacó un arma y la colocó en el cuello del Seed, mostrando bastante poco criterio. Humano estúpido. Pienso al ver ese acto, pues sólo estaba agravando el lío. Probablemente sería expulsado si eso desembocaba en un combate, además de que tal movimiento no le serviría para nada si ese movimiento provocaba al otro: su hoja se deslizaría inofensivamente por el Escudo Espiritual, pues probablemente ese tío tenía más que el que teníamos bastantes de los recién llegados sumados, y luego la respuesta del Ronso sería devastadora.

Otro de los Ronso se coloca delante de la chica humana, me pregunté si de verdad consideraba así a los Ronso o sólo era una treta... aunque intuí que más bien era lo segundo por si a estos tipos les importaba algo el honor, que tampoco parecía el caso. Otro alumno avanzado, con aspecto no demasiado fuerte, comenzó a amenazar con un reto a los peludos. ¿Será un mago? Pensé, acercándome hacia la zona donde estaba el recién llegado con Elisse, aunque no tanto como para entorpecer su movimiento si uno de los Ronso se ponía agresivo... pero sí quizás para darle algo de tiempo. Ahí escucho la máquina y entiendo que es un piloto, por lo que conservo la posición. Si las cosas se desmadraban, que cada vez me parecía menos probable, al menos podría interponerme de un salto. No creía que les durase más de dos golpes a esas dos criaturas que ya habían comenzado a ser entrenadas como Seed, pero ya eran dos golpes que no le podrían lanzar al piloto sin su máquina. Eché una mirada hacia donde antes estaba Eduart para ver si estaba alerta, aunque a estas alturas creía que todo el comedor se habría enterado.

La intervención de Kain me produce tanta extrañeza como al resto, poniéndose a pseudo-recitar mientras el Al Bhed y los Ronso se miraban fijamente... ¿Hablaba siempre como si hubiese salido de un libro antiguo? Bueno, no era el momento de pensar en eso, aunque su extraña intervención relajó el ambiente. Chasqueé la lengua ante lo violento de la frase del Ronso hacia Kain, eso me molestaba casi más que el estúpido conflicto que habían montado.

- Y esta es la clase de cosas por las que decía que me apunto al jardín... Si tuviese la capacidad de madre podría haberlos mandado a volar si intentaban ir más allá.  -comento con aspecto molesto. Resoplo dejando escapar el aire por las fosas nasales antes de mirar al Al Bhed que se había inmiscuido en la pelea- Te agradezco tu intervención, aún siendo tantos creo que hubiese sido muy difícil que los confrontásemos... Sin contar cómo habría empeorado eso nuestra situación. -le digo al chico, recobrando después mi sonrisa natural- Por cierto, increíble robot, ¿lo has construido tú? -pregunté, con mi curiosidad nuevamente ganada por algo tan magnífico como la máquina que se había mostrado a través de los ventanales.

Todo había pasado muy rápido, un momento estaba terminando de comer y al momento siguiente un ronso estaba cogiendo a Renall del cuello, su reacción me pareció completamente fuera de lugar ¿Que pensaba conseguir enfrentándose a tres veteranos?. Mi experiencia en cuanto a peleas era escasa y se limitaba a disputas de bar y un par de casos de bandidaje, pero sabía de sobra que no se debe tomar una actitud amenazante si se estaba en clara inferioridad, y a la vista estaba que no tenía ninguna posibilidad contra esos ronso, aunque todos los que estábamos comiendo en la mesa nos uniéramos. Aún así lamentaba no tener mi arco a mano, pero aún no tenía el permiso para poder llevarlo; hasta ahora solo lo había usado para practicar con Trip, nunca había participado en una batalla real.

A los abusones no les frenaron las palabras de Elisse ni Vlare, de hecho las de la aquarian causaron sorpresa y risas por todo el comedor, a mi me encantaba esa forma de hablar, parecía que recitase las líneas de una obra de teatro antigua. Afortunadamente apareció otro veterano para ayudarnos, un albhed que parecía muy seguro de si mismo, y por lo visto realmente consiguió intimidarles, ya que se marcharon con la excusa de que no merecíamos la pena. Un momento, ¿Había dicho simulador?¿Significaba eso que podríamos pelear entre nosotros sin hacernos daño o había escuchado mal?. En cualquier caso no era momento, ya nos explicarían todo en la reunión.

- Uf, menos mal que has aparecido, nada bueno podía salir de una pelea ahora. Muchas gracias.- A pesar de que el asunto no había llegado a más, se podía notar que tanto los ronso como el albhed eran muy fuertes, y eran solo estudiantes. Ese pensamiento reforzó mi determinación de entrar en la academia, podría proteger a todos mis amigos y ayudar a quien lo necesite.

Cuando el ronso se envuelve en ese aura y se me chulea sonrío quien sabe que estaba pasando por mi mente en ese momento. Pero entonces interviene un albhed y el ronso me suelta, se ríe de Kain y se va. Le sigo con la mirada hasta que se aleja bastante y entonces me giro hacía el albhed.

-Gracias pero necesito que me digas su nombre y su curso.

Aunque no lo mostrara estaba molesto y deseaba humillarle de la forma que mas le jodiera y esa era en combate. No solo por mi si no también por mis compañeros, en especial por Elisse y Kain, demostrar que estos bebes son mejores de lo que el sera jamás.

La Velar se rascaba la cabeza guardando su pistola en la cartuchera, no le molestaban las risas de hecho, le dio la sensación de que le halagaba casi declarándose, que tenía ese lugar para que un moguri y un ronso se le declararan? Los seeds parecían ser semillas diferentes a lo que en principio había imaginado, luego miró al grupo que quería dirigirse al patio y suspiró, ya tenía ganas de ver ese verde y hermoso patio.

Parecía que la situación termino enfriándose gracias a la participación de otro alumno veterano, un Albet en este caso, Elisse mira a este y dice:

Gracias por la ayuda

Realmente estaba segura que no podrían haber podido con aquellos tipos, pero no podía con las injusticias ni con los típicos matones y más que habían atacado o al menos intentado a uno de sus compañeros. Sin embargo, tampoco le gusto demasiado la escalada que tuvo aquello sacando tantas armas por allí, mientras observaba pensaba en que sin duda ellos eran los que tenían las de perder, a fin de cuentas, no podían sacar sus armas, ni siquiera portarlas por allí. Suspira profundamente y añade:

Supongo que tendremos que andarnos con los ojos abierto para con esa clase de personas, por llamarles de alguna forma

El chico de las gafas los mira a todos cuando se congregan alrededor de el y cambia su pose por un momento – murmura algo un poco inaudible para algunos mientras se acomoda los lentes nuevamente – los observa y al primero que se le acerca – Me llamo Arnold Vand Hautern y si tienes razón una de las principales normas de la academia es la disciplina y desde el momento que entran a la academia son puestos a prueba – se acomoda nuevamente las gafas y repone – nunca dejan de ser evaluados tomen eso siempre en cuenta – mientras estrecha la mano de Aokishi, mira a Aura mientras suelta lentamente la mano del otro – no es necesario su agradecimiento solo aproveche su mala suerte para ascender de rango antes el inicio de clases -  luego se cruza un instantes de brazos mientras piensa -  y si tienes razón no hubiesen tenido oportunidad alguna contra un Seed de 10º rango – se da la vuelta apuntando con el control al robot nuevamente a la vez que este hace nuevamente un sonido de motores encendiéndose y despegando – Si es mi orgullo y no muchos pueden contra el – luego se voltea hacia aura al ver la llegada de los demás.

Mira a Tempi y Renal que llegan casi al mismo tiempo – No es nada, fue un placer – Gira y señala al bravucón disimuladamente – Se llama Olivert Rontiel es de la casa Diablos y se supone que es un príncipe y sucesor al trono un Monje de chacra muy poderoso – mira a Elisse que se acerca dando las gracias  asiente con la cabeza en señal de cortesía – fue un placer, solo no caigan en provocaciones, no me permiten decir más nada por ahora – hace una reverencia de despedida pero antes de irse se regresa – la otra chica muy valiente por cierto luego me gustaría presentársela a mi hermano, denle las gracias a ella – y se retira caminando en dirección a la mesa de bufet